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Golpear, insultar o amenazar a un compañero de clases no es cosa de juego. Los escolares que realizan
bullying en sus instituciones educativas pueden acabar con una denuncia penal y ser sentenciados a seis
años de internamiento en un centro de reclusión para menores.
Actualmente en el Poder Judicial se resuelven dos procesos de violencia escolar. Para preservar la
integridad de los menores involucrados usaremos nombres ficticios. El primer caso se trata de "Marcos"
(16), quien de manera sistemática amenazaba a "Luis" (14) en el colegio estatal donde estudiaban.
Todos los días en las salidas del dictado de clases, Marcos esperaba a su víctima para pedirle dinero. Si
Luis se negaba, su agresor lo insultaba, lo amenazaba y lo hostigaba.
La violencia llegó a tal punto que para el menor de catorce años, salir de su plantel era una tortura pues
sabía que su verdugo lo estaba esperando. Luis no contó nada al inicio, porque creía que el acoso pasaría;
sin embargo, sucedió todo lo contrario: las agresiones eran cada vez peores.
No pasó mucho tiempo hasta que Luis comenzó a bajar su rendimiento escolar. En su desesperación informó
a sus padres del caso y juntos decidieron denunciar el caso ante la Fiscalía de Familia.
En ese despacho del Ministerio Público determinaron que no se trataba de un simple caso de Bullying, sino
que se había cometido un acto ilícito. El fiscal de Familia tipificó la infracción como coacción, es decir el
uso de la violencia o intimidación para obligar a otra persona a hacer algo que no quiere hacer.
VIOLENCIA EXTREMA
El segundo caso retrata los altos niveles de agresividad a los que llegan los alumnos belicosos. Esta vez, un
menor de 16 años de un colegio privado fue golpeado brutalmente por su compañero, quien le fracturó la
nariz y le dejó lesiones graves que le demandaron más de 25 días de recuperación.
Los padres de la víctima denunciaron al agresor en la comisaría y de allí derivaron el caso a la Fiscalía de
Familia.
Si bien las agresiones se produjeron en una sola oportunidad (no hubo continuidad como en el primer caso),
el acto ilícito se consumó. Causar lesiones a otra persona está considerado como un delito en el Código
Penal. Para la Fiscal de Familia, Nelly Montenegro, las agresiones de este caso fueron muy graves, por lo
que esta incidencia se resuelve en los fueros del Poder Judicial.
PROCEDIMIENTOS
No todas las denuncias se elevan del despacho fiscal de Familia a la Corte de Justicia. Esto depende del
grado de afectación de la víctima. En lo que va del año la Fiscalía ha recibido tres denuncias de casos de
violencia escolar. Una de ellas fue resuelta en esta instancia y se ordenó terapia psicológica para el escolar
implicado.
“No existe el delito de bullying, ese término se usa a nivel educativo. Cuando vienen las denuncias, nosotros
identificamos la infracción penal. Si un muchacho agrede a menudo a otro para que cada fin de semana le
lleve 50 soles, ese es un delito de coacción, por ejemplo”, sostuvo la fiscal.
Para prevenir estos casos en su lugar de origen, la Gerencia Regional de Educación cuenta con 15
especialistas en tutoría que orientan a los maestros sobre formas de abordar el bullying. Cada colegio, de
manera obligatoria, debe llevar un registro de incidencias de violencia escolar. Además debe reportar los
casos al Sistema Especializado en reporte de casos sobre Violencia Escolar (Siseve).
“Una vez registrada la incidencia en el sistema, iniciamos las investigaciones, identificamos al agresor y al
agredido y se les brinda tratamiento”, sostuvo Tahis Cristóbal, del Siseve.
Su colega, Irma Pacheco, agrega que casi todos los escolares implicados tienen problemas familiares. “Por
eso es importante que los progenitores vayan a la escuela para padres”.
Puno lidera la tabla con 46 incidencias. Le sigue Arequipa, luego Moquegua con 15 casos, Cusco con 8,
Apurímac con 7 y Tacna con 5. Si bien estos sucesos son tratados con reserva, casi en todos ellos están
involucrados estudiantes del nivel secundario.
Según Irma Pacheco, del Siseve, existe un subregistro que no se reporta. “Muchos casos se mantienen
ocultos, pues los niños no los denuncian por temor a empeorar las agresiones”, refirió.
A su turno, la fiscal Nelly Montenegro explicó que los espectadores de un caso de bullying también sufren
consecuencias psicológicas. “Por ello los maestros deben prevenir estos casos”, exhortó.
1. ¿Cuántas instituciones educativas al sur del Perú, registraron hechos de bullying en el Siseve?
2. ¿Por qué motivo los maestros deben prevenir los casos de bullying?
5. ¿Con qué intención el autor agrega, al final, una sección sobre La violencia escolar en cifras?
a) Para conocer en qué departamentos del sur del Perú se han registrado casos de violencia escolar.
b) Para tener en cuenta en qué departamento del Perú se registró menos violencia escolar.
c) Para complementar más datos sobre agresiones en la escuela.
d) Para informar con cifras exactas sobre los casos de bullying y alertar a la población
8. De los países evaluados los alumnos clasificaron: ¿en qué niveles y que países ocuparon
los tres primeros lugares?
a) En los niveles de 9.73% y los países de Singapur, Chile, Medellín.
b) En los niveles de 5 y 6 y los países de Singapur, Corea, Japón.
c) En las competencias de 5 y 6 y los países de Singapur, Corea, Japón.
d) En las competencias de 1 y 5 y los países de Singapur, Medellín, Japón.
Según el especialista Luis Del Carpio, director de Centrum Future, más allá de los conflictos
sociales existentes en la costa sur, el Gobierno y las empresas se han puesto de acuerdo en
temas relacionados con las obras por impuestos de una manera eficiente y productiva. «La
educación técnica y escolar de Tacna, Moquegua y Arequipa es destacable. En contraste, en el
norte, Cajamarca es una de las regiones menos competitivas y enfrenta tres retos: un potencial
minero paralizado, un exigente sector privado y las fallas del Estado al manejar conflictos
sociales», explica Víctor Fuentes, analista de Estudios Económicos en el Instituto Peruano de
Economía. Para él, la no ejecución del proyecto Conga ha significado para Cajamarca un menor
flujo de producción minera, que afecta no solamente la producción metálica, sino también la
generación de empleo directo e inditecto: «Por cada trabajo en minería, se crean nueve en otros
sectores», resalta. Agrega Fuentes que el sector agropecuario cajamarquino es el tercero
menos productivo del país lo que explica sus altos niveles de pobreza, su nivel de ejecución de
inversión pública está por debajo del promedio anual y su infraestructura es escasa , pues ade-
más de lo que le falta, las obras existentes están muy deterioradas.
Adaptado de http://www.ipe.org.pe/documentos/panorama-desolador
Oraciones incompletas:
Series verbales.
Mascara, careta, antifaz.
a) Guantes
b) Medias
c) Capa
d) Sombrero
e) Ante ojos
Analogías:
CETRO : PODER::
a) Mariposa : color
b) Calavera : peligro
c) Estatua : libertad
d) Mujer : infidelidad
e) Perro : bravura