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2. Jesús sintió una profunda compasión por todas las personas, especialmente por aquellos
que fueron "hostigados e indefensos" (Mateo 9.35,36) y "a la deriva" en sus vidas. La
compasión hacia los demás es "sentir una gran compasión por 'aquellos en necesidad (Mateo
15.32, Marcos 1.40-42).
3. La compasión de Jesús se mezcló con la autoridad. Su preocupación por las personas lo llevó
a hablar clara y fuertemente sobre sus verdaderas necesidades. Él habló y enseñó con
autoridad (Mateo 7.28,29). Criticó y corrigió a las personas cuando esto era necesario, pero lo
hizo con compasión y nunca usó su autoridad como un "club" para golpear a la gente.
4. Jesús aceptó a las personas tal como eran. Para 'aceptar' a una persona es reconocer el valor
de esa persona como persona, ya sea que uno esté de acuerdo o no con sus ideas o apruebe su
comportamiento. Jesús no aprobó el comportamiento incorrecto, pero no permitió que su
condena del comportamiento incorrecto de las personas se interpusiera en el camino de su
relación amorosa con ellos, o impidió que los ayudara. Él ayudó a la mujer atrapada en el
pecado del adulterio, y al mismo tiempo le advirtió: "no peques más" (Juan 8.1-11). Él habló
honestamente a la gente acerca de sus caminos pecaminosos, y debido a que los amó y
aceptó, pudo ayudar y sanar a cualquiera que realmente quisiera su ayuda. Jesús era amigo de
personas de todas las clases, algunos marginados y pecadores (Lucas 15.1, 2), algunos ricos y
poderosos. Así que Él pudo aceptar, hacerse amigo y ayudar a muchas clases diferentes de
personas: la prostituta (Lucas 7.36-50), el recaudador de impuestos despreciado (Lucas 19.1-
10), el mendigo (Lucas 18.35-43), el líder religioso de la clase alta (Juan 3.1-10). Él vio valor en
cada persona. Para Él, ninguna persona carecía de valor, incluso cuando otros la consideraban
inútil (Mateo 10.29-33, Lucas 12.7). Para ayudar a las personas, rompió todas las barreras de
raza, sexo y clase social.
5. Jesús fue imparcial, es decir, no favoreció ningún particular persona o grupo. Él no era más
amigable con las clases altas ricas o con los líderes influyentes de lo que era con pobres y sin
importancia gente. Se sentía a gusto con todos, ricos y pobres, viejos y jóvenes, de los rangos
más altos a los más bajos de la sociedad (Mateo 8.10-14).
ayúdalos incluso cuando estaba muy cansado o ocupado (Marcos 1.32-34). Él aceptó
interrupciones a su programa con buena voluntad (Marcos 5.21-40). Sin embargo, también
equilibró este ser disponible con un uso disciplinado del tiempo, y con frecuencia se retiró de
las multitudes que lo sitiaban, para orar y meditar, y también para dar instrucción especial a
Sus discípulos (Marcos 1.35-39; 6.30-32). ; Lucas 11.1-4).
7. Jesús dio gran importancia a ayudar y aconsejar a las personas. En su primer ministerio, la
predicación de Jesús fue muy popular. Siguió por multitudes esperando escuchar su mensaje, y
su fama se extendió por todas partes para que "no pudiera entrar abiertamente en una ciudad,
sino que estuviera en el campo, y la gente acudía a él de todas partes" (véase Marcos 1.40).
45; 2.2, 13; 3.7-9, 19, 20). Sin embargo, incluso cuando Jesús habló a la multitud, aplicó su
mensaje a las necesidades individuales de las personas (Marcos 4.1-9), y parece haber
preferido ministrar a individuos o grupos pequeños. La mayoría de sus parábolas están
relacionadas con los problemas espirituales que experimentan las personas. Jesús mostró que
cada persona es tan importante para Dios que 'habrá más gozo en el Cielo por un pecador que
se arrepiente que por noventa y nueve justos. . . '(SeeLuke 15.3-7).
8. Jesús usó diferentes métodos para ayudar a diferentes tipos de personas. Él no se acercó a
las personas de una sola manera. Un método que solía utilizar para guiar y ayudar a las
personas era el diálogo o la conversación personal, utilizando preguntas hábilmente para
descubrir los problemas básicos en la vida de las personas. De esta manera, Él era como otros
filósofos; el pensador griego Sócrates, por ejemplo, utilizó un método similar de preguntas y
respuestas. Pero Jesús difería de aquellos pensadores de su tiempo que creían que la
comprensión intelectual de la verdad era el logro más importante de la humanidad. Tal
creencia a menudo limita su diálogo y su interrogatorio al "nivel de la cabeza" solamente; es
decir, se refería a las ideas de las personas más que a sus objetivos, sentimientos o
comportamiento. Jesús, por otro lado, dirigió sus preguntas y conversaciones a todo el ser de
la gente: sus emociones y relaciones personales, así como sus ideas. Mostró que si las
personas deben vivir de acuerdo con la voluntad de Dios, entonces la comprensión con la
mente debe ser igualada por la obediencia del corazón. El joven rico que vino a Él tenía una
comprensión intelectual de la ley y él mantuvo las reglas, pero esto no estaba vinculado con la
obediencia amorosa o el autosacrificio en su vida real (Marcos 10.17-22). Jesús fue capaz de
traer cambios y transformar a las personas, no solo mostrando errores en sus pensamientos,
sino llevándolos a arrepentirse y comprometerse con los mandamientos del Reino de Dios (ver
Una gran parte del método de diálogo de Jesús fue escuchar atentamente. A menudo
escuchaba cuando la gente esperaba que él hablara. Muchas de sus parábolas obtuvieron su
significado y fuerza porque terminó con una pregunta y luego escuchó mientras la gente
elaboraba su propia interpretación. Cuando un abogado le preguntó a Jesús cómo obtener la
vida eterna, en lugar de dar una respuesta, Jesús le devolvió la pregunta: "¿Qué está escrito en
la ley?". Luego escuchó mientras el hombre daba la respuesta por sí mismo (Lucas 10.25,26).
Jesús a menudo instó a aquellos a quienes Él enseñó a "oír y entender". Especialmente cuando
entrenaba a sus discípulos para su propio ministerio, enfatizaba que las personas oyen, pero
por lo general no escuchan con atención para comprender (Marcos 7.14-23; 8.14-18).
9. Jesús fue rápido en ofrecer aliento y alabanza, especialmente cuando descubrió cualidades
espirituales ocultas en las personas, como la confianza y obediencia incuestionable del
centurión, o la fe humilde de la mujer sirofenicia (Mateo 8.5-13; 15.21-28). Él no elogió a la
gente para ganar su favor, ni para ocultar sus fallas. Hizo una alabanza sincera a las personas
cuyas acciones merecían encomio, y críticas igualmente honestas a aquellos cuyas fallas les
impidieron conocer verdaderamente o hacer la voluntad de Dios. Era especialmente crítico con
la hipocresía espiritual como la de los escribas y fariseos, que guardaban todas las reglas
detalladas para la observancia religiosa, pero "descuidaban los asuntos más importantes de la
ley, la justicia, la misericordia y la fe" (Mateo 23.13-28).
10. Jesús vio una conexión muy estrecha entre la curación del cuerpo y la curación del alma. Él
no estaba preocupado solo con las necesidades espirituales de las personas, ni solo con sus
necesidades físicas de curación y comida. Sanó a las personas para que estuvieran completas
en cuerpo, mente y espíritu. Llamó a la fe en su capacidad para sanar tanto física como
espiritualmente: "¿Qué es más fácil, decir," sus pecados son perdonados "o decir" levantarse y
caminar "? Pero para que sepas que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para
perdonar pecados ', entonces le dijo al paralítico:' Levántate, toma tu cama y vete a casa
'(Mateo 9.5, 6). Jesús ejerció su poder divino en ambas áreas de necesidad. Hizo hincapié en la
importancia de la salud espiritual, como cuando le dijo a Nicodemo: 'Tienes que nacer de
nuevo' (ver Juan 3.1-10); y también la conexión entre el bienestar físico y el descanso espiritual
y la paz: 'Vengan a mí, todos los que trabajan y están cargados. . . y encontrarás descanso para
tus almas "(Mateo 11.28-30).
El registro del Nuevo Testamento de la vida y el ministerio de Jesús se nos muestran a él. Como
escribió el teólogo Gerhard Kittel: "No era escriba ni rabino; no maestro o maestro de la
sabiduría; Lo que los hombres descubrieron en Él fue exactamente esto: el sanador de las
almas. Las actitudes de Jesús que hemos descrito en este capítulo no dan una explicación
completa de todas las cualidades pastorales que mostró en su ministerio. Pero son ejemplos
del patrón de cuidado que encontramos en todo lo que dijo e hizo. Desde el ministerio de
Jesús podemos descubrir las actitudes básicas que se necesitan para un cuidado pastoral y un
asesoramiento eficaces en la actualidad. Como pastor servidor, Jesús es el modelo que todos
los cristianos que participan en el trabajo de cuidar a los demás deben tratar de seguir. Como
dijo Pablo, 'tengan esto en cuenta entre ustedes, que es suyo en Cristo Jesús. . . tomando la
forma de un sirviente '(Filipenses 2.5.7). El patrón que Cristo establece no es solo un vago
ideal. A través del trabajo del Espíritu Santo, puede convertirse en una realidad en la vida de
sus seguidores que se comprometen con su servicio y el de los demás en el mundo de hoy. que
su poder era suficiente para sanar las vidas turbulentas de las personas. Hoy en día todavía es
cierto que la gracia y la energía divinas disponibles para nosotros mediante la fe en Jesús son
suficientes para renovar y recrear nuestras vidas si confiamos.
ESTUDIO BÍBLICO
10. (a) De acuerdo con los siguientes pasajes, ¿de qué maneras principales
(b) ¿De qué maneras principales fue Jesús diferente de las personas de Su
¿hora?
11. ¿Con qué tipo de personas se unió Jesús, de acuerdo con cada uno de los siguientes
pasajes, y ¿cuáles fueron sus actitudes hacia
¿ellos?
12. Según 1 Pedro 5.2-5, ¿qué tres actitudes son principalmente necesario para el buen
pastoreo del pueblo de Dios en el ¿Iglesia? ¿Cuán lejos crees que esas mismas actitudes son
necesarias? para el trabajo de cuidado pastoral hoy?
13. a) ¿Cuáles son las principales "responsabilidades" emprendidas por los pastores en
tu propia iglesia hoy? (b) ¿Cuáles son los principales 'privilegios' que los pastores disfrutan
en su Iglesia hoy?
14. ¿Qué respuesta le darías a alguien que dijera 'Jesús vivió tan hace mucho tiempo que no
puedo ver cómo su ejemplo puede ser de ayuda para las personas viviendo hoy. Las cosas
son completamente diferentes ahora, y nos enfrentamos problemas completamente
diferentes '?
15. La Iglesia ha sido descrita como "una comunidad modelada según el Rey servidor".
¿Crees que esta es una buena descripción de la congregación a la que perteneces? Justifica
tu respuesta.
16. "Jesús fue imparcial en sus actitudes hacia las personas. Él no favoreció a ninguna
persona o grupo en particular '(p.14). Después de leer este párrafo, un alumno dijo: 'Pero
Jesús sí eligió un grupo especial de discípulos. Pasó más tiempo con ellos que con cualquier
otra persona y les dio un entrenamiento especial. Y Juan parece haber pensado que Jesús lo
amaba más que a los demás ". Otro estudiante dijo:" Jesús le dijo a la mujer cananea que su
misión era solo al pueblo de Israel, y acusó a sus discípulos de no ir a los gentiles ". Ambos
estudiantes pensaron que esos ejemplos muestran que Jesús no era imparcial, e incluso
tenía favoritos. ¿Cuál es tu opinión?
17. Imagina que como pastor se te pide que visites los siguientes tres personas que necesitan
asesoramiento:
(a) el director de una escuela secundaria, cuyas calificaciones educativas son mucho más
altos que los tuyos;
(b) un conductor de camión que trabaja para el consejo de gobierno local y quien a menudo
se emborracha; (c) una madre de tres hijos que proviene de un área (y quizás un grupo
tribal) diferente al tuyo.
18. ¿Hay algún grupo de personas, o individuos, que lo encuentren difícil de "aceptar"? Si es
así, ¿por qué los encuentras difíciles? De nuevo discuta su respuesta con un compañero o, si
puede, un pasto