Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Carlos Javier Hualpa Vacas siente dolor por su acto actualmente. Para los peritos que
lo evaluaron por el acto criminal cometido contra la estudiante Eyvi Liset Ágreda
Marchena, a quien causó quemaduras en el 60% del cuerpo, Hualpa posee
“características narcisistas”, “su afectividad es egocéntrica”, tiene “conductas
impulsivas” y “las críticas lo hieren con facilidad”.
Como si su mirada penetrara las profundidades de la tierra, hunde la cabeza y admite
que tiene pocos amigos y que es antisocial.
“Soy una persona exageradamente tolerante, pero si me hacen una, la devuelvo de la
misma manera”, dijo al ser entrevistado por los psicólogos forenses.
Rencoroso, hostil
Historia de fracasos
Conductas impulsivas
El psicólogo Enrique García considera que Hualpa tiene “una personalidad de tipo
narcisista que ejerce un inadecuado manejo y control de la expresión de sus
pensamientos, afectos e impulsos”.
Sostiene que su “rigidez y falta de espontaneidad facilitan que ante el fracaso emerjan
conductas impulsivas”.
Los expertos concluyen que en Carlos Javier Hualpa Vacas “pueden emerger
conductas impulsivas si siente que sus demandas no son satisfechas”. Es un peligro.
Al día siguiente de que la jueza Lorena Alessi dictara nueve meses de prisión
preventiva, el Instituto Nacional Penitenciario clasificó y ordenó el traslado de Carlos
Hualpa Vacas al penal de máxima seguridad Ancón I.
Hualpa fue capturado el miércoles último, 15 horas después de haber rociado gasolina y
prender fuego en un ómnibus de servicio público a Eyvi Ágreda (22).
Los agentes de la Depincri Miraflores, a cargo del comandante Antonio La Madrid,
tuvieron una lucha contra el tiempo.
Solo tenían el nombre del agresor: “Javier”. Cuando fueron a la empresa donde él
y Eyvi trabajaban lo identificaron plenamente. Al llegar a su casa, el oficial se hizo
pasar como asistente social y Hualpa cayó en manos de la Policía.