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INTRODUCCIÓN

La diabetes es una enfermedad en la que los niveles de glucosa (azúcar) de la


sangre están muy altos. La glucosa proviene de los alimentos que consume. La insulina
es una hormona que ayuda a que la glucosa entre a las células para suministrarles
energía. En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina. En la diabetes tipo 2, la
más común, el cuerpo no produce o no usa la insulina de manera adecuada. Sin
suficiente insulina, la glucosa permanece en la sangre.

Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar problemas serios.


Puede dañar los ojos, los riñones y los nervios. La diabetes también puede causar
enfermedades
PREDIABETES

Prediabetes significa que tu nivel de azúcar en sangre es mayor que el normal,


pero no lo suficientemente alto como para ser diabetes tipo 2. Sin cambios en el estilo
de vida, las personas con prediabetes tienen muchas probabilidades de que su
enfermedad evolucione a diabetes tipo 2. Si tienes prediabetes, es posible que el daño a
largo plazo ocasionado por la diabetes, especialmente al corazón, los vasos sanguíneos y
los riñones, ya esté comenzando.

Sin embargo, hay buenas noticias. La evolución de la prediabetes a diabetes tipo


2 se puede evitar. Consumir alimentos saludables, incorporar actividad física en tu
rutina diaria y mantener un peso saludable pueden ayudarte a regularizar el nivel de
azúcar en sangre.

La prediabetes afecta a adultos y a niños. Los mismos cambios en el estilo de


vida que pueden ayudar a prevenir la evolución de esta enfermedad a diabetes en
adultos también pueden ayudar a normalizar los niveles de azúcar en sangre en niños
cardíacas, derrames cerebrales y la necesidad de amputar un miembro. Las mujeres
embarazadas también pueden desarrollar diabetes, llamada diabetes gestacional.

Un análisis de sangre puede mostrar si tiene diabetes. Un tipo de prueba, la A1c,


también puede comprobar cómo está manejando su diabetes. El ejercicio, el control de
peso y respetar el plan de comidas puede ayudar a controlar ladiabetes. También debe
controlar el nivel de glucosa en sangre y, si tiene receta médica, tomar medicamentos.

Síntomas

La prediabetes generalmente no suele presentar signos ni síntomas.

Un posible signo de que puedes estar en riesgo de tener diabetes tipo 2 es el


oscurecimiento de la piel en ciertas partes del cuerpo. Las áreas afectadas pueden incluir
el cuello, las axilas, los codos, las rodillas y los nudillos.
Los signos y síntomas clásicos que sugieren la evolución de la prediabetes a la diabetes
tipo 2 comprenden los siguientes:
 Aumento de la sed
 Necesidad de orinar a menudo
 Fatiga
 Visión borrosa

Complicaciones
La consecuencia más grave de la prediabetes es la evolución a diabetes tipo 2. Esto se
debe a que la diabetes tipo 2 puede provocar lo siguiente:
 Presión arterial alta
 Nivel de colesterol alto
 Enfermedad cardíaca
 Accidente cerebrovascular
 Enfermedad renal
 Ceguera
 Amputaciones
Las investigaciones indican que la prediabetes generalmente se asocia con ataques
cardíacos no reconocidos y puede dañar los riñones, incluso si la enfermedad no ha
evolucionado a la diabetes tipo 2.

Diagnóstico
La Asociación Americana de la Diabetes (American Diabetes Association, ADA)
recomienda que el análisis para la detección de glucosa en sangre en adultos se realice a
partir de los 45 años o antes si tienes sobrepeso u otros factores de riesgo para padecer
prediabetes o diabetes tipo 2.
Existen diversos análisis de sangre para la prediabetes.
 Prueba de hemoglobina glucosilada (A1C)
Este análisis muestra el nivel promedio de glucosa en sangre de los últimos dos o tres
meses. Específicamente, el análisis consiste en medir el porcentaje de azúcar en sangre
unido a la proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno (hemoglobina).
Cuanto más alto sea el nivel de glucosa en sangre, mayor será la cantidad de
hemoglobina con glucosa.
En general:
Un nivel de A1C por debajo del 5,7 por ciento se considera normal.
Un nivel de A1C de entre 5,7 y 6,4 por ciento se considera prediabetes.
Un nivel de A1C de 6,5 o más en dos análisis separados indican que tienes diabetes tipo
2.
Algunos trastornos hacen que la prueba de A1C sea imprecisa, por ejemplo, si estás
embarazada o si tienes una forma poco frecuente de hemoglobina (hemoglobina
variante).

 Análisis de azúcar en sangre en ayunas


Se toma una muestra de sangre luego de que hayas ayunado durante, al menos, ocho
horas o durante toda la noche.
En general:
Un nivel de glucosa en sangre en ayunas menor que 100 miligramos por decilitro
(mg/dl), 5,6 milimoles por litro (mmol/l), se considera normal.
Un nivel de glucosa en sangre en ayunas de entre 100 y 125 mg/dl (5,6 a 7,0 mmol/l) se
considera prediabetes. Este resultado a veces se denomina glucemia en ayunas alterada.
Un nivel de glucosa en sangre en ayunas de 126 mg/dl (7,0 mmol/l) o mayor indica
diabetes tipo 2.
 Prueba de tolerancia a la glucosa oral
Esta prueba generalmente se utiliza para diagnosticar la diabetes durante el embarazo.
Se toma una muestra de sangre luego de que hayas ayunado durante, al menos, ocho
horas o durante toda la noche. Luego tomarás una solución azucarada y se medirá el
nivel de glucosa en sangre nuevamente después de dos horas.
En general:
Un nivel de glucosa en sangre menor que 140 mg/dl (7,8 mmol/l) se considera normal.
Un nivel de glucosa en sangre de entre 140 y 199 mg/dl (7,8 a 11,0 mmol/l) se
considera prediabetes. A veces, esto se denomina tolerancia a la glucosa alterada.
Un nivel de glucosa en sangre de 200 mg/dl (11,1 mmol/l) o mayor indica diabetes tipo
2.
Si tienes prediabetes, es posible que se deban realizar más pruebas. Una vez al año
como mínimo, es probable que tu médico controle lo siguiente:
Nivel de glucosa en sangre en ayunas
Hemoglobina A1C
Colesterol total, lipoproteínas de alta densidad, lipoproteínas de baja densidad y
triglicéridos
Las pruebas podrían realizarse con mayor frecuencia si tienes otros factores de riesgo
para padecer diabetes.
 Los niños y el análisis de prediabetes
La diabetes tipo 2 cada vez es más común en niños y adolescentes, probablemente
debido al aumento de la obesidad en la niñez. La Asociación Americana de la Diabetes
recomienda realizar análisis de prediabetes en niños que tienen sobrepeso u obesidad y
que presentan al menos otros dos factores de riesgo asociados con la diabetes tipo 2.

Tratamiento

Elegir un estilo de vida saludable puede ayudarte a normalizar tu nivel de azúcar en


sangre o, al menos, a evitar que esta suba hasta alcanzar los niveles observados en la
diabetes tipo 2.
Para evitar que la prediabetes evolucione a diabetes tipo 2, intenta lo siguiente:
 Consumir alimentos saludables. Elige alimentos con bajo contenido de grasa y
calorías y con alto contenido de fibra. Enfócate en las frutas, los vegetales y los
granos integrales. Esfuérzate por comer variado para lograr tus objetivos sin
comprometer el sabor ni la nutrición.
 Ser más activo. Intenta realizar de 30 a 60 minutos de actividad física moderada
la mayoría de los días de la semana.
 Deshacerte del exceso de peso. Si tienes sobrepeso, bajar simplemente entre un 5
y un 10 por ciento de tu peso corporal —solo 10 o 20 libras (4,5 a 9 kilogramos)
si pesas 200 libras (91 kilogramos)— puede reducir el riesgo de sufrir diabetes
tipo 2. Para mantener tu peso en un rango saludable, concéntrate en cambios
permanentes en tus hábitos de alimentación y de ejercicio. Motívate recordando
los beneficios de perder peso, como un corazón más saludable, más energía y
mayor autoestima.
 Dejar de fumar.
 Tomar medicamentos según sea necesario. Si tienes un alto riesgo de diabetes,
tu médico podría recomendarte metformina (Glucophage, otros). También
podrían recetarte medicamentos para controlar el colesterol y la presión arterial
alta.
 Los niños y el tratamiento para la prediabetes
 Los niños con prediabetes deben adoptar los cambios de vida recomendados
para los adultos con diabetes tipo 2, los cuales incluyen los siguientes:
 Perder peso
 Comer menos cantidad de carbohidratos y grasas refinadas y más fibra
 Hacer actividad física una hora por día como mínimo
 Por lo general, no se recomiendan los medicamentos en niños con prediabetes.
DIABETES GESTACIONAL

La diabetes gestacional es la presencia de glucemia alta durante el embarazo en


mujeres que antes de la gestación no tenían diabetes (en la mayoría de los casos
después del parto vuelve a sus límites normales). Esto es debido a que las
hormonas presentes durante el embarazo pueden dificultar el trabajo que realiza
la insulina apareciendo una alteración en el metabolismo de los HC y por ello la
glucosa se eleva (hiperglucemia).

La diabetes gestacional puede conllevar complicaciones como macrosomías


(niños excesivamente grandes) y complicaciones en el nacimiento, por lo que es
importante controlar los niveles de azúcar. Estas hipotéticas complicaciones se
pueden presentar con niveles de glucosa que fuera de la gestación serían
considerados normales.

Síntomas

En la mayoría de los casos, no se presentan síntomas. El diagnóstico se realiza


durante un estudio prenatal de rutina.
Se pueden presentar síntomas moderados, como demasiada sed o temblores.
Regularmente estos síntomas no ponen en riesgo la vida de la mujer
embarazada.

Otros síntomas podrían incluir:

 Visión borrosa
 Fatiga
 Infecciones frecuentes, entre ellas las de vejiga, vagina y piel
 Aumento de la sed
 Incremento de la micción.
Causas
Las hormonas del embarazo pueden bloquear el trabajo que hace la insulina. Cuando
esto sucede, los niveles de azúcar en sangre de una mujer embarazada pueden
incrementar.
Usted está en mayor riesgo de padecer diabetes gestacional si:
 Tiene más de 25 años al quedar embarazada
 Proviene de un grupo étnico con un mayor riesgo, como latino, afroamericano,
nativo americano, asiático o de las islas del Pacífico
 Tiene antecedentes familiares de diabetes
 Dio a luz a un bebé que pesó más de 9 libras (4 kg) o que tuvo una anomalía
congénita
 Tiene hipertensión arterial
 Tiene demasiado líquido amniótico
 Ha tenido un aborto espontáneo o mortinato de manera inexplicable
 Tenía sobrepeso antes del embarazo
 Aumentó excesivamente de peso durante su embarazo
 Presenta síndrome de ovario poliquístico

Tratamiento
Los objetivos del tratamiento son mantener los niveles de azúcar en la sangre (glucosa)
dentro de los límites normales durante el embarazo y asegurarse de que el feto esté
saludable.

 VIGILANCIA DEL BEBÉ


Su proveedor de atención médica debe tenerla a usted y a su bebé bajo control a lo largo
de todo el embarazo. Con el monitoreo fetal, se evalúa el tamaño y la salud del feto.
Una cardiotocografía en reposo es un examen indoloro y muy sencillo para usted y su
bebé.
 Se coloca una máquina que percibe y muestra los latidos cardíacos del bebé
(monitor fetal electrónico) sobre su abdomen.
 Su proveedor puede comparar el patrón de latidos del bebé con los movimientos
y averiguar si el bebé está bien.
 DIETA Y EJERCICIO
En muchos casos, comer alimentos saludables, mantenerse activo y controlar su peso es
todo lo que necesita para tratar la diabetes gestacional.

La mejor manera de mejorar su alimentación es consumir una variedad de alimentos


saludables. Usted debe aprender a leer las etiquetas de los alimentos y revisarlas al
tomar decisiones sobre estos. Hable con su proveedor si usted es vegetariana o sigue
alguna otra dieta especial.

En general, cuando usted tiene diabetes gestacional su dieta debe:


 Ser moderada en grasa y proteína.
 Suministrarle carbohidratos a través de alimentos que incluyan frutas, verduras y
carbohidratos complejos (tales como pan, cereal, pasta y arroz).
 Incluir poca cantidad de alimentos que contengan mucho azúcar, tales como
bebidas gaseosas, jugos de fruta y panes dulces.
Si la dieta y el ejercicio no controlan los niveles de azúcar en la sangre, se le pueden
recetar medicamentos o tratamiento con insulina para controlar la diabetes.

Diagnóstico
Existen tres criterios para establecer el diagnóstico de diabetes durante el embarazo:
elevación inequívoca de la glucosa plasmática de 200 mg/dL o mayor y síntomas
clásicos de diabetes; glucosa plasmática en ayunas mayor de 126 mg/ dL en dos o más
ocasiones y uso de la curva de tolerancia a la glucosa (prueba de 100 gramos).
Debe corroborarse el diagnóstico en pacientes con: síntomas clásicos (3 "P") poliuria,
polidipsia, polifagia, factores de riesgo existentes, glucemia sérica en ayuno >126
mg/dL (corroborada en 24 horas), glucemia >200 mg/dL casual y pacientes con
glucemias de 192 a 126 mg/dL.

DIABETES MELLITUS TIPO 1


En la diabetes tipo 1, el páncreas pierde su capacidad de fabricar la hormona insulina
porque el sistema inmunitario ataca y destruye las células del páncreas encargadas de
fabricar esta hormona. Nadie sabe exactamente por qué ocurre, pero los científicos
creen que su origen está relacionado con los genes. No obstante, el simple hecho de
heredar los genes de la diabetes no suele bastar para desarrollar esta enfermedad. Lo
más probable es que la persona deba exponerse a algo más, como un virus, para
desarrollar una diabetes tipo 1.

Causas
La diabetes tipo 1 puede ocurrir a cualquier edad. Se diagnostica con mayor frecuencia
en niños, adolescentes o adultos jóvenes.
La insulina es una hormona producida en el páncreas por células especiales, llamadas
células beta. El páncreas está localizado por debajo y por detrás del estómago. La
insulina se necesita para movilizar el azúcar de la sangre (glucosa) dentro de las células.
La glucosa se almacena dentro de las células y luego se utiliza para obtener energía.
Con la diabetes tipo 1, las células beta producen poca o ninguna insulina.
Sin la insulina suficiente, la glucosa se acumula en el torrente sanguíneo en lugar de
entrar en las células. Esta acumulación de glucosa en la sangre se denomina
hiperglucemia. El cuerpo es incapaz de usar esta glucosa para obtener energía. Esto
lleva a los síntomas de diabetes tipo 1.
La causa exacta de diabetes tipo 1 se desconoce. La más probable es un trastorno
autoinmune, Esta es una condición que ocurre cuando el sistema inmunitario ataca por
error y destruye el tejido corporal sano. Con la diabetes tipo 1, una infección o algún
otro desencadenante hace que el cuerpo ataque por error las células productoras de
insulina en el páncreas. La tendencia de desarrollar enfermedades autoinmunes,
incluyendo diabetes tipo 1, puede ser transmitida a través de las familias.

Síntomas
NIVEL ALTO DE AZÚCAR EN LA SANGRE
Los siguientes síntomas pueden ser los primeros signos de diabetes tipo 1. O pueden
ocurrir cuando el nivel de azúcar en la sangre está alto:
 Estar muy sediento
 Sentirse hambriento
 Sentirse cansado a toda hora
 Tener visión borrosa
 Sentir entumecimiento u hormigueo en los pies
 Perder peso sin proponérselo
 Orinar con mayor frecuencia (incluso el orinar de noche o mojar la cama, esto
sucede en niños que no lo hacían antes)
Para otras personas, estos síntomas serios de advertencia pueden ser los primeros signos
de diabetes tipo 1. O pueden presentarse cuando el nivel de azúcar en la sangre está muy
alto (cetoacidosis diabética):
 Respiración profunda y rápida
 Boca y piel seca
 Cara enrojecida
 Aliento con olor a fruta
 Náuseas o vómitos; incapacidad para retener líquidos
 Dolor de estómago
NIVEL BAJO DE AZÚCAR EN LA SANGRE

El nivel bajo de azúcar en la sangre (hipoglucemia) se puede presentar rápidamente en


personas con diabetes que estén tomando insulina. Los síntomas aparecen generalmente
cuando el nivel de azúcar en la sangre cae por debajo de 70 miligramos por decilitro
(mg/dL) o 3.9 mmol/L. Esté alerta por:
 Dolor de cabeza
 Hambre
 Nerviosismo, irritabilidad
 Latidos cardíacos rápidos (palpitaciones)
 Temblores
 Sudoración
 Debilidad
Después de muchos años, la diabetes puede llevar a problemas de salud graves, y como
resultado, muchos otros síntomas.

COMPLICACIONES
Cuando una persona tiene una diabetes mellitus tipo 1, puede tener dos tipos de
complicaciones: las agudas y las crónicas.
 Complicaciones agudas
Se producen en un determinado momento en el tiempo y son básicamente dos:
Hipoglucemia.
Presencia de hiperglucemia con cetonas (que puede derivar en una cetoacidosis aguda).
Ambas situaciones si no se manejan de la manera adecuada pueden comportar un
importante riesgo vital. Afortunadamente, respecto a las hipoglucemias, la mayoría de
las personas saben prevenir y remontar correctamente una bajada de azúcar. Por otro
lado, saben que la presencia de cetonas debe alertarlos y llevarlos a consultar con su
equipo sanitario.

 Complicaciones crónicas
Lo que preocupa más a las personas con diabetes y sus familias es la posibilidad de
complicaciones crónicas. El aumento persistente de azúcar en sangre hace que los vasos
sanguíneos se vayan taponando, de manera que cada vez es más difícil que la sangre
circule hacia un órgano determinado (los ojos, el riñón, etc.). Esto hace que esos
órganos dejen de funcionar bien. Está claro que aquellos vasos sanguíneos que son
estrechos y pequeños se obstruirán antes y por eso las complicaciones más precoces son
las microvasculares, con afectación de ojos o riñón, por ejemplo.
Se llaman complicaciones crónicas porque se deben a la presencia de la enfermedad
durante muchos años. Cuantificar al cabo de cuántos años surgen las complicaciones es
difícil, depende de cada persona y de su control metabólico. Muchos estudios han
demostrado que el riesgo de sufrir estos problemas aumenta con el mal control
glucémico, la larga duración de la enfermedad, una mayor edad y una historia familiar
de complicaciones de la diabetes. Es evidente la tensión arterial alta, el colesterol alto o
el tabaquismo empeoran todavía más el riesgo de sufrir estas complicaciones.
Por eso es muy importante intentar mantener un buen control glucémico y evitar otros
problemas añadidos que aumentarán la posibilidad de tener problemas en el futuro. La
suerte o la desgracia es que la persona con diabetes no tendrá síntomas hasta que no
haya desarrollado ya la complicación. Es decir, la persona no se encontrará mal por
tener glucemias altas, pero sus vasos sanguíneos estarán empezando a sufrir. Hay que
prevenir y evitar la complicación para no tener síntomas después.

 Complicaciones microvasculares
Las complicaciones microvasculares son más comunes en la diabetes tipo 1 que las
macrovasculares. Son:
 Retinopatía diabética: es la afectación ocular y puede conducir a una ceguera.
Las recomendaciones actuales incluyen evaluar el fondo de ojo anualmente en el
adolescente tras dos años de evolución y tras cinco años en los niños
prepuberales.
 Nefropatía diabética: es la afectación del riñón y puede acabar produciendo una
insuficiencia renal, es decir que los riñones dejen de funcionar. El primer signo
que encontramos es la presencia de microalbuminuria, dicho de otro modo,
pérdida de proteínas por la orina. Debe evaluarse siguiendo la misma frecuencia
que la retinopatía diabética y se realiza analizando una muestra de orina.
 Neuropatía diabética: es la afectación de los nervios y con el tiempo puede
provocar dolor en piernas, sensación de hormigueo, problemas musculares, etc.
Complicaciones macrovasculares
Las complicaciones macrovasculares afectan a los vasos sanguíneos más grandes como
la aorta, la carótida o los vasos sanguíneos de las extremidades. El daño originado en
estos vasos más grandes puede provocar:
 Mala irrigación de la sangre en las piernas principalmente.
 Infarto de corazón.
 Infarto cerebral.
La enfermedad cardiovascular es la mayor causa de mortalidad en el adulto con diabetes
mellitus tipo 1, sin embargo, es raro que aparezca en personas jóvenes.

Así que, aunque el autocontrol glucémico de pereza y seguir las pautas no parezca
importante en nuestro día a día, es muy importante mantenerse firme en la lucha diaria
para conseguir un buen control metabólico y evitar el riesgo de complicaciones
vasculares en el futuro.

Tratamiento

Éstos son cuatro pasos importantes que los niños que padecen diabetes tipo 1 deben
seguir para mantenerse sanos:
 inyectarse insulina o usar una bomba de insulina
 tener una alimentación saludable y seguir un plan de comidas
 medir los niveles de azúcar en sangre
 mantenerse activos mediante el juego o la práctica de ejercicios
Diabetes tipo 2
La diabetes tipo 2 es el tipo más común de diabetes. Millones de estadounidenses han
recibido un diagnóstico de diabetes tipo 2, y muchos más desconocen que tienen un alto
riesgo de tenerla. Algunos grupos tienen mayor riesgo de tener diabetes tipo 2. Este tipo
es más común en afroamericanos, latinos/hispanos, indígenas americanos,
estadounidenses de origen asiático, nativos de Hawái y otros isleños del Pacífico, como
también entre las personas mayores.
Con la diabetes tipo 2 el cuerpo no produce suficiente insulina o las células no hacen
uso de la insulina. La insulina es necesaria para que el cuerpo pueda usar la glucosa
como fuente de energía. Cuando usted come, el cuerpo procesa todos los almidones y
azúcares, y los convierte en glucosa, que es el combustible básico para las células del
cuerpo. La insulina lleva la glucosa a las células. Cuando la glucosa se acumula en la
sangre en vez de ingresar a las células, puede producir complicaciones de diabetes.

Síntomas
A menudo, los signos y síntomas de la diabetes de tipo 2 se manifiestan de forma lenta.
De hecho, puedes tener diabetes de tipo 2 durante años y no saberlo. Presta atención a lo
siguiente:

 Aumento de la sed y micción frecuente. El exceso de azúcar que se acumula en


el torrente sanguíneo hace que se extraiga el líquido de los tejidos. Esto puede
provocarte sed. Como resultado, probablemente bebas, y orines, más de lo
habitual.
 Aumento del apetito. Sin la insulina suficiente para trasladar el azúcar a las
células, los músculos y los órganos se quedan sin energía. Esto desencadena
hambre intensa.
 Adelgazamiento. A pesar de comer más de lo habitual para aliviar el hambre, tal
vez adelgaces. Sin la capacidad de metabolizar la glucosa, el cuerpo usa
combustibles alternativos almacenados en los músculos y la grasa. Pierdes
calorías al liberar el exceso de glucosa en la orina.
 Fatiga. Si las células no reciben azúcar, puedes cansarte o sentirte irritable.
 Visión borrosa. Si el nivel de azúcar en sangre es demasiado alto, puede
extraerse el líquido del cristalino de los ojos. Esto puede afectar tu capacidad
para enfocar con los ojos.
 Llagas que tardan en sanar o infecciones frecuentes. La diabetes de tipo 2 afecta
tu capacidad de sanar y de resistir a las infecciones.
 Zonas de piel oscurecida. Algunas personas con diabetes de tipo 2 tienen
manchas oscuras y aterciopeladas en la piel de los pliegues y los surcos, que
suelen estar en las axilas y el cuello. Esta afección, llamada «acantosis
nigricans», puede ser un signo de resistencia a la insulina.

Complicaciones
Puede ser muy fácil ignorar la diabetes de tipo 2, especialmente en las etapas iniciales,
cuando te sientes bien. Pero la diabetes afecta muchos de los órganos principales, como
el corazón, los vasos sanguíneos, los nervios, los ojos y los riñones. Si controlas tus
niveles de azúcar en sangre, puedes ayudar a evitar estas complicaciones.
Si bien las complicaciones a largo plazo de la diabetes se pueden desarrollar de forma
gradual, en última instancia pueden conducir a la pérdida de capacidades o, incluso, a la
muerte. Las siguientes son algunas de las complicaciones potenciales de la diabetes:

 Enfermedad cardíaca y de los vasos sanguíneos. La diabetes aumenta


drásticamente el riesgo de sufrir diversos problemas cardiovasculares, como
arteriopatía coronaria con dolor de pecho (angina), ataque cardíaco, accidente
cerebrovascular, estrechamiento de las arterias (aterosclerosis) e hipertensión
arterial.
 Daño en los nervios (neuropatía). El exceso de azúcar puede dañar las paredes
de los vasos sanguíneos diminutos (capilares) que alimentan los nervios,
especialmente en las piernas. Esto puede provocar hormigueo, entumecimiento,
ardor o dolor, que generalmente comienza en las puntas de los dedos de los pies
y las manos y, gradualmente, se extienden hacia arriba. Un control deficiente del
azúcar en sangre podría causar, eventualmente, que pierdas toda la sensibilidad
de los miembros afectados. El daño en los nervios que controlan la digestión
puede causar problemas con náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento. En los
hombres, puede aparecer disfunción eréctil.
 Daño renal (nefropatía). Los riñones contienen millones de racimos de vasos
sanguíneos diminutos que filtran los residuos de la sangre. La diabetes puede
dañar este delicado sistema de filtrado. El daño grave puede conducir auna
insuficiencia renal o enfermedad renal terminal irreversible, lo que suele requerir
finalmente diálisis o un trasplante de riñón.
 Daño ocular. La diabetes puede dañar los vasos sanguíneos de la retina
(retinopatía diabética), que puede conducir a la ceguera. La diabetes también
aumenta el riesgo de otras afecciones graves de la visión, como cataratas y
glaucoma.
 Daños en los pies. Los daños en los nervios del pie o un flujo sanguíneo
insuficiente en los pies aumenta el riesgo de diversas complicaciones en los pies.
Si no se tratan, los cortes y las ampollas pueden dar lugar a graves infecciones,
que tal vez no cicatricen como corresponde. El daño grave podría requerir la
amputación del dedo del pie, del pie o de la pierna.
 Deterioro auditivo. Los problemas de la audición son comunes en las personas
diabéticas.
 Enfermedades de la piel. La diabetes puede volverte más susceptible a tener
problemas en la piel, como infecciones bacterianas y micóticas.
 Enfermedad de Alzheimer. La diabetes de tipo 2 puede aumentar el riesgo de
tener enfermedad de Alzheimer. Cuanto más deficiente es el control del nivel de
azúcar en sangre, mayor parece ser el riesgo. Aún no está clara cuál es la
conexión exacta entre estas dos enfermedades.
Diagnóstico
Para diagnosticar la diabetes de tipo 2, te pedirán lo siguiente:
 Prueba de glucohemoglobina (A1C). Este análisis de sangre indica el nivel
promedio de azúcar en sangre de los últimos 2 o 3 meses. Mide el porcentaje de
azúcar en sangre unido a la hemoglobina, la proteína que transporta el oxígeno
en los glóbulos rojos. Cuanto más alto sea el nivel de azúcar en sangre, mayor
será la cantidad de hemoglobina con azúcar. Un nivel de A1C del 6,5 por ciento
o más en dos análisis separados indica que tienes diabetes. Un resultado del 5,7
al 6,4 por ciento se considera prediabetes, lo que indica un riesgo elevado de
tener diabetes. Los niveles normales son inferiores al 5,7 por ciento.

 Si no puedes hacerte una prueba de A1C, o si tienes alguna afección—por


ejemplo, si estás embarazada o si tienes una forma poco frecuente de
hemoglobina (llamada «variante de hemoglobina»)— que puede hacer que la
prueba de A1C no sea precisa, tu médico puede solicitar las siguientes pruebas
para diagnosticar la diabetes:

 Examen aleatorio de azúcar en la sangre. Se tomará una muestra de sangre en un


horario al azar. El nivel de azúcar en sangre se expresa en miligramos por
decilitro (mg/dL) o en milimoles por litro (mmol/L). Sin importar cuándo hayas
comido por última vez, un nivel aleatorio de azúcar en sangre de 200 mg/dL
(11,1 mmol/L) o más indica que hay probabilidad de diabetes, especialmente
cuando está relacionado con cualquiera de los signos y síntomas de la diabetes,
como micción frecuente y sed extrema.
 Examen de glucemia en ayunas. Se tomará una muestra de sangre tras una noche
de ayuno. Un nivel de glucemia en ayunas menor que 100 mg/dL (5,6 mmol/L)
es normal. Un nivel de glucemia en ayunas entre 100 y 125 mg/dL (5,6 a 6,9
mmol/L) se considera prediabetes. Si el resultado es de 126 mg/dL (7 mmol/L) o
más en dos análisis distintos, tienes diabetes.
 Examen de tolerancia oral a la glucosa. Para esta prueba, debes ayunar durante
la noche, y se mide el nivel de glucemia en ayunas. Después, debes tomar un
líquido azucarado, y se mide el nivel de azúcar en sangre periódicamente
durante las siguientes dos horas.

 Un nivel de azúcar en sangre inferior a 140 mg/dL (7,8 mmol/L) es normal. Un


resultado de entre 140 y 199 mg/dL (7,8 y 11,0 mmol/L) indica prediabetes. Un
resultado de 200 mg/dL (11,1 mmol/L) o superior después de dos horas puede
indicar diabetes.

Tratamiento
El control de la diabetes de tipo 2 incluye:
 Alimentación saludable
 Actividad física regular
 Posiblemente, medicamentos para la diabetes o tratamiento con insulina
 Control de la glucosa en sangre
Estos pasos ayudarán a mantener tu nivel de azúcar en sangre más cercano al normal, y
esto puede retrasar o evitar complicaciones.

Alimentación saludable
En contra de la creencia popular, no existe una dieta específica para la diabetes. Sin
embargo, es importante que la base de tu dieta esté centrada en los siguientes alimentos
de alto contenido de fibra y bajo contenido de grasa:

 Frutas
 Verduras
 Granos integrales
Además, deberás comer menos productos de origen animal, hidratos de carbono
refinados y dulces.
También puede ser útil consumir alimentos de bajo índice glucémico. El índice
glucémico es una medida que indica con qué rapidez un alimento provoca aumento del
nivel de azúcar en sangre. Los alimentos con alto índice glucémico elevan rápidamente
el azúcar en sangre. Aquellos con bajo índice glucémico pueden ayudarte a mantener un
nivel de azúcar en sangre más estable. Los alimentos que tienen bajo índice glucémico
son, típicamente, los que tienen un alto contenido de fibra.

Un especialista en nutrición certificado puede ayudarte a elaborar un plan de comidas


que se adapte a tus metas de salud, tus preferencias alimenticias y tu estilo de vida. Este
especialista también puede enseñarte a supervisar el consumo de hidratos de carbono, y
a conocer qué cantidad de estos hidratos debes ingerir con las comidas y refrigerios a fin
de mantener estables los niveles de azúcar en sangre.

Actividad física
Todos necesitan hacer ejercicio aeróbico con regularidad, y los diabéticos con diabetes
de tipo 2 no son la excepción. Obtén la aprobación de tu médico antes de comenzar un
programa de ejercicios. Luego elige actividades que disfrutes, como caminar, nadar y
andar en bicicleta. Lo más importante es que incorpores la actividad física en tu rutina
diaria.

Plantéate el objetivo de realizar al menos 30 minutos de actividad aeróbica cinco días


por semana. Los ejercicios de estiramiento y de fortalecimiento también son
importantes. Si no has estado en actividad durante un tiempo, comienza despacio y
aumenta gradualmente.

Una combinación de ejercicios (ejercicios aeróbicos, como caminar o bailar, la mayoría


de los días, combinados con entrenamiento de resistencia, como levantamiento de pesas
o yoga, dos veces por semana) suele ayudar a controlar el nivel de azúcar en sangre de
manera más efectiva que cualquier otro tipo de ejercicio solo.

Recuerda que la actividad física reduce el nivel de azúcar en sangre. Controla tu nivel
de azúcar en sangre antes de cualquier actividad. Es posible que necesites comer un
refrigerio antes de ejercitar, para prevenir un nivel bajo de azúcar en sangre, si tomas
medicamentos a fin de reducir este nivel.
Control del nivel de azúcar en sangre
Según tu plan de tratamiento, quizá debas controlar y anotar tu nivel de azúcar cada
tanto, o bien, si estás usando insulina, varias veces al día. Pregunta a tu médico con qué
frecuencia desea que controles tu azúcar en sangre. Un control catento es la única
manera de asegurarte de que tu nivel de azúcar en sangre se mantenga dentro de tu
rango objetivo.

En ocasiones, los niveles de azúcar en sangre pueden ser imprevisibles. Con la ayuda de
tu equipo de tratamiento de la diabetes, aprenderás cómo cambia tu nivel de azúcar en
sangre en respuesta a los alimentos, el ejercicio, el alcohol, las enfermedades y los
medicamentos.

Medicamentos para la diabetes y tratamiento con insulina


Algunas personas que tienen diabetes de tipo 2 pueden alcanzar sus niveles objetivo de
azúcar en sangre únicamente con dieta y ejercicios; no obstante, muchos necesitan
también medicamentos para la diabetes o tratamiento con insulina. Decidir cuál es el
medicamento más adecuado depende de numerosos factores, como tu nivel de azúcar en
sangre y otros problemas de salud que tengas. Incluso, el médico puede combinar
medicamentos de distintas clases para ayudarte a controlar tu nivel de azúcar en sangre
de varias maneras.

Entre los tratamientos posibles para la diabetes de tipo 2 se cuentan los siguientes:

 Metformina (Glucophage, Glumetza, otros). Generalmente, la metformina es el


primer medicamento que se receta para la diabetes de tipo 2. Este fármaco actúa
aumentando la sensibilidad de los tejidos de tu cuerpo a la insulina, de modo que
este pueda aprovecharla con más eficacia.

 La metformina también reduce la producción de glucosa en el hígado. Es posible


que la metformina sola no baje el nivel de azúcar en sangre lo suficiente. El
médico te recomendará, además, cambios en tu estilo de vida, como perder peso
y aumentar la actividad física.
 Algunos posibles efectos secundarios de la metformina son náuseas y diarrea.
Estos efectos secundarios suelen desaparecer a medida que tu cuerpo se
acostumbra a la medicina. Si la metformina y los cambios en tu estilo de vida no
son suficientes para controlar tu nivel de azúcar en sangre, es posible agregar
otros medicamentos que se inyectan o se toman por vía oral.

 Sulfonilureas. Estos medicamentos ayudan a tu cuerpo a secretar más insulina.


Los medicamentos de esta clase son, entre otros, la gliburida (DiaBeta,
Glynase), la glipizida (Glucotrol) y la glimepirida (Amaryl). Entre los posibles
efectos secundarios se incluyen un bajo nivel de azúcar en sangre y aumento de
peso.
 Meglitinidas. Este tipo de medicamentos actúa igual que las sulfonilureas,
mediante la estimulación del páncreas para que secrete más insulina, pero su
acción es más rápida y la duración del efecto en el cuerpo, más breve. También
presenta riesgo de provocar niveles bajos de azúcar en sangre; sin embargo, es
menos riesgoso que las sulfonilureas.

 El aumento de peso también es una posibilidad con esta clase de medicamentos.


Algunos ejemplos son la repaglinida (Prandin) y la nateglinida (Starlix).

 Tiazolidinadionas. Al igual que la metformina, estos medicamentos aumentan la


sensibilidad de los tejidos del cuerpo a la insulina. Esta clase de medicamentos
se ha vinculado al aumento de peso y a otros efectos secundarios más graves,
como un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca y fracturas. Debido a estos
riesgos, estos medicamentos no son por lo general la primera opción de
tratamiento.

La rosiglitazona (Avandia) y la pioglitazona (Actos) son ejemplos de tiazolidinadionas.

Inhibidores de la DPP-4. Estos medicamentos ayudan a reducir los niveles de azúcar en


sangre, pero suelen tener un efecto más leve. No causan aumento de peso. Algunos
ejemplos de estos medicamentos son la sitagliptina (Januvia), la saxagliptina (Onglyza)
y la linagliptina (Tradjenta).
Agonistas del receptor de la GLP-1. Estos medicamentos desaceleran la digestión y
ayudan a bajar los niveles de azúcar en sangre, aunque no tanto como las sulfonilureas.
El uso de estos fármacos suele estar asociado a una cierta pérdida de peso. Esta clase de
medicamentos no se recomienda para su uso aislado.

La exenatida (Byetta) y la liraglutida (Victoza) son ejemplos de agonistas del receptor


de la GLP-1. Entre los posibles efectos secundarios se incluyen náuseas y un mayor
riesgo de pancreatitis.

Inhibidores de la SGLT2. Estos son los medicamentos para la diabetes más nuevos del
mercado. Actúan evitando que los riñones reabsorban azúcar en la sangre. En lugar de
esto, el azúcar se excreta en la orina.

Algunos ejemplos son la canagliflozina (Invokana) y la dapagliflozina (Farxiga). Entre


los efectos secundarios se cuentan infecciones por levaduras, aumento de la orina e
hipotensión.

Tratamiento con insulina. Algunas personas con diabetes de tipo 2 necesitan, además,
recibir tratamiento con insulina. Anteriormente, el tratamiento con insulina se utilizaba
como último recurso; pero, gracias a sus ventajas, actualmente se receta mucho antes.

Debido a que la digestión normal interfiere con la insulina administrada por boca, la
insulina se debe inyectar. Según tus necesidades, tu médico puede recetarte una
combinación de tipos de insulina para que uses durante el día y la noche. Con
frecuencia, las personas con diabetes de tipo 2 comienzan a utilizar insulina con una
inyección de acción prolongada por la noche.

Para las inyecciones de insulina se usa una jeringa y una aguja fina o una pluma
inyectora de insulina; un dispositivo que parece una pluma de tinta, salvo que el
cartucho está relleno con insulina.
Existen muchos tipos de insulina, y cada uno actúa de manera diferente. Algunas
opciones son:

 Insulina glulisina (Apidra)


 Insulina lispro (Humalog)
 Insulina asparta (Novolog)
 Insulina glargina (Lantus)
 Insulina detemir (Levemir)
 Insulina isófana (Humulin N, Novolin N)
CONCLUSIÓN
Llegamos a la conclusión de que la diabetes es una enfermedad que tiene múltiples
causas, como lo es, fundamentalmente, la mala alimentación y la predisposición
genética a dicha enfermedad.
También, puede tener graves consecuencias, como el coma diabético, complicaciones
cardiovasculares, renales, oculares, cerebrales y de los miembros inferiores.
Es importante prevenirla a través de una dieta adecuada que incluya seis comidas
diarias, evitando los ayunos prolongados, realizando actividad física, en los obesos es
fundamental que bajen de peso.
En cuanto a su tratamiento, quienes la padecen deben consultar a un médico
diabetólogo, quien les recetará los fármacos adecuados y un plan alimentario para
combatirla. Además, en ciertos casos, es fundamental que el diabético se inyecte
insulina, para controlar los niveles de glucosa en la sangre.
Para finalizar, creemos que es importante tomar conciencia sobre esta enfermedad, ya
que está muy difundida y todos corremos riesgos de contraerla, aunque no tengamos
predisposición genética a ella, ya que actualmente, existen alimentos modificados
genéticamente, y otros alimentos que, si son consumidos en exceso, pueden acercarnos
a dicha enfermedad.
BIBLIOGRAFÍA
 https://medlineplus.gov/spanish/diabetestype2.html
 https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/type-2-
diabetes/symptoms-causes/syc-20351193
 http://www.diabetes.org/es/informacion-basica-de-la-diabetes/diabetes-tipo-2/
 https://kidshealth.org/es/kids/treating-type1-esp.html
 http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0186-
48662017000100091
 http://www.fundaciondiabetes.org/general/441/diabetes-gestacional
 https://www.webconsultas.com/salud-al-dia/prediabetes/diagnostico-de-la-
prediabetes
Tabla de contenido
INTRODUCCIÓN ............................................................................................................ 1
PREDIABETES ............................................................................................................... 2
Síntomas........................................................................................................................ 2
Complicaciones ............................................................................................................. 3
Diagnóstico ................................................................................................................... 3
Tratamiento ................................................................................................................... 5
DIABETES GESTACIONAL .......................................................................................... 7
Síntomas........................................................................................................................ 7
Causas ........................................................................................................................... 8
Tratamiento ................................................................................................................... 8
Diagnóstico ................................................................................................................... 9
DIABETES MELLITUS TIPO 1 ..................................................................................... 9
Causas ............................................................................................................................. 10
Síntomas...................................................................................................................... 10
COMPLICACIONES ................................................................................................. 11
Tratamiento ................................................................................................................. 13
Diabetes tipo 2 ................................................................................................................ 15
Síntomas...................................................................................................................... 15
Complicaciones ........................................................................................................... 16
Diagnóstico ................................................................................................................. 18
Tratamiento ................................................................................................................. 19
CONCLUSIÓN .............................................................................................................. 25
BIBLIOGRAFÍA ............................................................................................................ 26

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