UN CARISMA VIVIDO ENTRE DOS COMUNIDADES

(M. Lupita Lara)

1. INTRODUCCIÓN
Los Institutos Hermanas Misioneras Servidoras de la Palabra y Misioneros Servidores de la Palabra
nacieron juntos, no como un proyecto humano sino por voluntad divina.

El carisma se potencia cuando estamos unidos hermanas y hermanos. Considero

clave la inspiración que tuvo nuestro Fundador, el P. Luigi Butera, desde los
inicios de la fundación, pues si las ramas están unidas al tronco darán fruto, de lo
contrario se secan y se caen (cfr. Jn 15,5-6). Para ello cito parte del texto de las
Disposiciones que nos escribió el 1 de agosto de 2016:
“Los Institutos Hermanas Misioneras Servidoras de la Palabra y Misioneros Servidores de
la Palabra nacieron juntos, no como un proyecto humano programado antes de su
nacimiento, sino por voluntad divina.
Fue la experiencia de la fuerza transformadora de la palabra de Dios que llamó a unos
jóvenes a formar una comunidad de laicos, llamados Misioneros Servidores de la Palabra.
Es justo recordar siempre que los dos Institutos nacieron de una comunidad de jóvenes
laicos, hombres y mujeres, que convivieron separados en una misma casa de
formación.
Yo acepté esa convivencia a pesar de haber crecido con una mentalidad pre-conciliar, en
la cual era inconcebible una comunidad formada de hombres y mujeres. Evidentemente ese
proyecto no respondía a mi gusto, sino a la inspiración divina. Yo acepté, actualizándome
a las exigencias de los tiempos; pensé: estos jóvenes vienen de un ambiente mixto y van a
ir a evangelizar en ambientes mixtos, apreciándose, respetándose y ayudándose. Por eso
los alimentaba con la palabra de Dios en una hora de meditación en la mañana, cuidaba un
ambiente de disciplina; daba mucha importancia al estudio y al trabajo; siempre viva la
devoción a la Eucaristía y a la Virgen. El método, bien llevado, siempre ha funcionado bien.
Además de la eficacia de la palabra de Dios, el testimonio de vida, encaminada hacia la
santidad, el trabajo y la austeridad han sido y son instrumentos indispensables para la
formación de los misioneros laicos.
Es por estos motivos que no se debe separar la formación de los hombres de la de las
mujeres laicas, encabezada por los religiosos y religiosas. Lo que se debe tener siempre
son los requisitos, antes indicados.
A diferencia de esta institución laical, los religiosos y las religiosas forman dos Institutos
jurídicamente distintos, por voluntad de la Santa Sede.
Los dos Institutos gozan del mismo carisma fundacional, con Constituciones y
Superiores distintos e independientes. Esta organización no impide que colaboren en el
apostolado, sino que es conveniente, usando siempre el debido respeto y la ayuda mutua.”

Esta reciente disposición que hemos recibido de nuestro fundador, coincide

perfectamente con la aprobación divina, confirmada por nuestra Iglesia, pues
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juntos recibimos la aprobación de derecho Diocesano (6 junio de 1997), así como
la aprobación de derecho Pontificio (22 febrero 2008). Delante de la Iglesia
siempre hemos caminado juntos como hijos de un mismo Padre Fundador. Así se
fortalece nuestro carisma.

2. RIQUEZA DE MANTENERNOS JUNTOS

HMSP y MSP, abrimos caminos juntos.

2.1. Misiones y casas de Formación

Es una realidad que cuando uno de los dos Institutos religiosos abre una misión,
sobre todo en el extranjero, e inicia una formación MMSP, enseguida hace notar
que falta el complemento para llevar bien la formación de hermanos y hermanas.
Se puede señalar el caso de las misiones de América. En Morelia, Mich., se inició el
Seminario de Filosofía y en seguida la casa de formación para varones y mujeres.
En Monterrey, N.L., al iniciar la misión de las HMSP, se vio la necesidad de tener
una casa de formación y que los MSP llegaran para la formación, construcción y
apostolado en dicha casa, etc. Así, en cada uno de los países del sur de America,
donde hoy nos encontramos, si llegan los MSP, solicitan a las HMSP y viceversa,
donde llegan primero las HMSP, solicitan MSP. Nuestro apostolado y casas de
formación se enriquecen trabajando juntos en nuestro carisma.
Así, en África, las dos casas de formación que hoy tenemos en Kenia y Tanzania,
han sido fruto de un trabajo mutuo, con dificultades, con diferencias de
pensamiento, de experiencias apostólicas, pero con caridad, paciencia y trabajo
generoso de ambas partes. Hoy podemos dar gracias a Dios que ya tenemos
SEPAS y esperamos en Dios que muy pronto existan también vocaciones a la vida
religiosa. Pero necesitamos trabajar aún más.
No se queda atrás Asia, región donde llegaron las HMSP a Vietnam y Filipinas y en
pocos años se hizo sentir la necesidad de los MSP para complementar el
apostolado y las formaciones respectivas. Hoy nuestro carisma es vivido por
laicos y consagrados de estos lugares. Actualmente contamos con siete profesas y
tres profesos de Vietnam, así como cuatro profesos de Filipinas; además de
novicias y novicios y de un buen grupo de SEPAS.
Y recientemente en Europa la misión de España, donde los Padres MSP tienen más
de un año y pronto llegarán las HMSP a re-evangelizar las tierras que han dado
muchos misioneros al mundo.

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 2.2. Juntos somos fuerza e impulso de los grupos apostólicos de la
Familia Misionera Servidora de la Palabra.
El impulso y el seguimiento espiritual de los diferente grupos apostólicos SEPA:
Chiquitines, ADOSEPAS, JUMIS, CERS, Matrimonios misioneros, SEPAS,
Fraternitas, Líderes, Profesionistas. Si estos grupos son bien acompañados y
enamorados de la Palabra de Dios son fermento de una nueva sociedad, sangre
nueva (2 Tim 2,2) que pueden muy bien suscitar nuevos evangelizadores y, por
qué no, en algunos de ellos bien puede cultivarse el deseo de hacer un año de
misión y de consagrar toda la vida al servicio de la Palabra.

2.3. Juntos desarrollamos con más eficacia las jornadas apostólicas.

La fuerza del apostolado no sería la misma si no nos apoyáramos en los diferentes
apostolados: Retiros masivos (como han sido los grandes eventos en el Estadio
Azteca con 100 mil Jóvenes) y otros de menor número en otros Estados, el CERS,
20 Mil Padres de Familia, Faith, Fiesta de Cristo Misionero, Retiros SEPA y
Vocacionales, retiros de evangelización en las casas y Misiones de 15 días. Un dato
curioso es que generalmente las mujeres llegan por la promoción de los varones
y viceversa, muchos de los varones llegan por el apostolado de las mujeres. En
realidad nos necesitamos y complementamos los unos con los otros.

2.4. Los materiales de evangelización, que contienen nuestro

carisma, son patrimonio de los dos Institutos.
El carisma es transmitido también por la buena prensa. Parte de la elaboración,
revisión, impresión y difusión es llevada por ambos Institutos, por ejemplo: la
Biblia Misionera, la Liturgia, la Revista Inquietud Nueva, Juventud Xtrema,
Chiquitín, Calendario y todos los libros de nuestro Padre Fundador, el P. Luigi, el
cual escribe para todos sus hijos (as), para que los aprovechemos personalmente
y los difundamos para un mayor bien al género humano. También están las
producciones musicales (los CD’s) que se componen, graban y difunden de igual
manera. La traducción de la Nueva Biblia misionera es también fruto del trabajo
de traducción, cuidado, revisión y acompañado por ambos Institutos, labor
titánica que debemos reconocer siempre ha sido impulsada y revisada por
nuestro Padre Fundador.
Habría que agregar que la elaboración del diseño y redacción de nuestros
materiales de evangelización ha sido dirigida por el P. Luigi, en conjunto con las
HMSP, mientras que la distribución a las librerías y paqueterías ha corrido a cargo
de los MSP. Juntos hemos logrado que nuestros materiales cumplan su cometido.
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 2.5. La Oración nos une porque compartimos un mismo carisma.
El Carisma es orado. ¡En cuántas ocasiones nos hemos unidos como hermanas y
hermanos para orar por un mismo ideal!, sea por nuestro Padre Fundador, viendo
como Dios nos escucha como una familia; o bien, sea en momentos fuertes de
enfermedad por un hermano(a). También cuando oramos por los ejercicios
espirituales anuales de los MSP y HMSP, por los retiros vocacionales, retiros
masivos, Faith, los jueves en la adoración sacerdotal, la eucaristía de los jueves
por la familia MSP, por situaciones difíciles que se viven en nuestras misiones
como la de Venezuela, etc.

2.6. Podemos sostener proyectos e iniciativas juntos para el

crecimiento de nuestros miembros religiosos y laicales.
El carisma se comparte cuando nos enriquecemos mutuamente en el intercambio
de maestros y maestras en el Seminario, en el Juniorado, en los ITL de las
diferentes casas; o también en cursos de formadores para laicos, en el taller sobre
el carisma, en la asistencia sacramental y dirección espiritual, así como en las
casas de formación entre los formadores y formadoras.

2.7. Juntos hemos experimentado la Providencia de Dios.

Cuando compartimos los mismos ideales de nuestro carisma en la Providencia y
la austeridad, Dios se ha manifestado más grande, pues hemos sido capaces de
llevar adelante la cuestión alimenticia, de vestido y medicinas que los miembros
de nuestros Institutos han requerido. También hemos llevado adelante las
construcciones de nuestras casas de formación, las impresiones de nuestros
libros y revistas llegando a difundir casi 500 000 ejemplares de la revista
Inquietud Nueva, la compra de diversos automóviles, camionetas y hasta del
Misionero, del Chente, del volteo y de otros vehículos. Todo ha sido fruto de la
insistencia y ejemplo de nuestro Fundador sobre la austeridad y el ahorro. ¡Dios
siempre es providente!

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 3. CONCLUSIÓN
HMSP y MSP: “Lo que Dios ha unido no lo separe el hombre” (P. Luigi Butera)

Sin duda ante los ojos del mundo y de la Iglesia somos grandes porque estamos
unidos, no obstante nuestras muchas carencias, debilidades, diferencias de
pensamientos y psicología por ser hombres o mujeres. Necesitamos madurar
nuestras actitudes para valorarnos mutuamente, fomentar el diálogo, aceptarnos
como Dios nos ha creado.
Debemos tener siempre como punto de referencia a nuestro Fundador, en quien
Dios nos ha mostrado el carisma de nuestros Institutos.
¡Es bello vernos como una sola familia y compartir las ocasiones especiales, como
son: el aniversario de Fundación, el aniversario natalicio y sacerdotal de nuestro
Padre Fundador, las ordenaciones MSP, las fiesta de votos MSP y HMSP y de
nuestro Santo Patrono CRISTO MISIONERO!
Terminaré citando las palabras del P. Luigi en el retiro de conclusión del Año de
la Vida Consagrada en febrero de 2016: “Lo que Dios ha unido no lo separe el
hombre”. Si estamos unidos construimos y damos vida; si estamos separados
destruimos y damos fracasos. Somos diferentes, pero iguales en dignidad para
vivir y transmitir la fuerza de la Palabra de Dios.