SoyPapáAdolescente

PARA
El equilibrio entreELPaternidad
TRABAJO DE NUEVAS
y Adolescencia.
Guía para Adolescentes padres

César Cordero-Fernández 1
Esta guía es un fascículo de la serie “Soy Hombre
Adolescente” del Proyecto Wëm Juvenil, basado en
el trabajo con adolescentes en proceso de paternidad
en coordinación con la Clínica de Adolescentes del
Hospital Calderón Guardia, 2014-2015 y financiado
por la Embajada de Suiza en Costa Rica.

# 6. SOY PAPÁ ADOLESCENTE.

El equilibrio entre paternidad y juventud.

2015© Instituto Wëm. San José, Costa Rica.

Se permite el uso educativo del material, pero no su
reproducción comercial.
Redacción y Diseño: César Cordero Fernández.
Revisión: Elena Alvarado.
Ilustración: Olman Bolaños.
Todos los derechos reservados. © 2015.

La serie “Soy Hombre Adolescente” consiste en varias guías acerca de temas que nos interesan a
los adolescentes varones. Cada fascículo puede ayudarte a pensar mejor, a entenderte a ti mismo
y tomar decisiones adecuadas en diferentes momentos de tu vida.
Este material es parte de la campaña de paternidad afectiva del Instituto Wëm.
Si eres hombre adolescente y vas a ser (o eres) papá, este fascículo te ayudará a entender e intentar
un equilibrio adecuado entre ser papá y seguir siendo joven.
Aprenderás qué hacer para contar la noticia del embarazo, prepararte para el momento del
nacimiento de tu bebé, cómo buscar ayuda, reconocer tus temores, tus preocupaciones y a ser
consciente sobre tus responsabilidades con tu bebé y con la madre.
Podrás informarte sobre tus derechos como adolescente y como padre, para que puedas participar
plenamente en el crecimiento de tu hijo o hija.
SoyPapáAdolescente
El equilibrio entre paternidad y juventud.

GUÍA PARA ADOLESCENTES PADRES

Indice
Ser adolescente hombre................................................................................................................2
Voy a ser papá..................................................................................................................................3
Ser joven y ser padre......................................................................................................................3
Contar la noticia del embarazo ...................................................................................................4
Necesitas apoyo...............................................................................................................................5
Involucrarse durante el embarazo...............................................................................................7
Participación en el parto................................................................................................................7
La relación con la mamá del/la bebé............................................................................................9
Preparación para el crecimiento del/a bebé.............................................................................10
Participación en la salud del niño/a...........................................................................................11

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 Ser adolescente hombre
Es este periodo en que empiezo a pensar mejor en lo que quiero, los riesgos que tengo, algunas
responsabilidades, mis derechos, lo que quiero defender de mí mismo, etc. A esta edad, aún estoy
conformando mi identidad, conociéndome a mí mismo y explorando cosas que me gustan o que
tengo curiosidad. Por eso a veces cambio constantemente
lo que me agrada, la música, la forma de vestir, la forma
de ser, o las personas con las que me rodeo.
Los amigos son algo importante para sentirme bien,
porque me entienden y así puedo sentirme apoyado.
Aunque a veces necesito sentirme aceptado y para eso
muchas veces intento demostrar lo que soy con acciones
ante otras personas, a
veces corriendo riesgos,
y así creo que voy a ser
mejor ante los demás.
Algunos jóvenes quieren estu-
diar y ser responsables, pero a veces algu-
nos amigos lo presionan a uno para hacer cosas que
uno no quiere, o para demostrar que puedo ser más
hombre que ellos. Muchas veces eso me lleva a tomar
riesgos, a no medir las consecuencias de lo que hago
o a tomar decisiones sin pensar bien. En ocasiones lo
hago para demostrar que no soy niño, o para demos-
trar que me estoy convirtiendo en un hombre.
Muchas de estas prácticas tienen que ver con mi
sexualidad, la forma en que la vivo, y porque quizás a
veces me apresuro a tomar decisiones o evito pensar
en las consecuencias.

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 Voy a ser papá
¿Me tomó por sorpresa la noticia de que voy a ser papá? ¿Tuve relacio-
nes sexuales y no pensé que el resultado sería ser papá? Sea cual sea
la razón por la que me voy a convertir en papá, es necesario salir
adelante, buscar apoyo, ser responsable y asumir nuevos retos
porque empiezo a ser padre.
Ser papá no es algo sencillo o fácil. Puedo pensar que es solo
de copiar el ejemplo de cómo me criaron a mí o de lo que he
visto en algunos papás.
Pero la verdad es que cada papá es diferente y ocupo saber
bien como llegar a ser un papá bueno, sin cometer algunos
errores.
Ser papá es algo que me puede hacer muy feliz y es una razón
más para motivarme en la vida. Es la ilusión de poder cuidar a
alguien que pronto aprenderá a decirme papá.
Es bueno que sepamos que un hijo o hija no es un error, ni un
castigo por mis actos. Más bien es el resultado de la vivencia de mi
sexualidad, un ser que me produce demasiadas ilusiones y que me
va a ayudar a conocerme a mí mismo. Un bebé es quien me va a
despertar mi ternura y mi cariño y me ayudará a ser un
mejor hombre.
Pero tengo que acordarme que también soy joven,
y tengo que seguir con mis metas: estudiar, tener un
buen trabajo, hacer deporte, cuidar mi salud, tener
amigos. También con las cosas que me gustan, como
jugar play, pasear, ir a alguna fiesta o reunión de ami-
gos, etc.

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 Ser joven y ser padre
Tu juventud no finaliza cuando te conviertes en padre. Ser papá no tiene que ser un bloqueo de
tus planes de vida ni de tu adolescencia. La paternidad será algo adicional a tu identidad que te
va a hacer mejor hombre.
Deben realizarse cambios, pero sigues siendo un adolescente con metas, planes y necesidades.
Mereces ser apoyado para continuar los estudios, que te diviertas, que compartas con amigos,
que tengas espacios para la relajación y tengas espacios saludables para que puedas ser un buen
papá.
No queremos que seas un papá frustrado o un papá que no sea feliz. Por eso te corresponde bus-
car un equilibrio entre lo que te gusta como adolescente y la responsabilidad que tienes como
papá. Ofrécele a tu bebé, un buen papá y un buen joven que tiene proyectos de vida y que se
esfuerza por lo que quiere

Contar la noticia del embarazo

Existe el temor de muchos a contar que pronto serán papá.
Al principio se puede sentir vergüenza, miedo, culpa y otras emociones, porque pensamos que es
algo que no van a aceptar los adultos.
Si se te hace difícil, puedes seguir las si-
guientes recomendaciones:
Busca a alguien que te ayu-
de a decírselo a tus padres o
encargados (Tío o tía, primo/a,
hermano/a, etc). Es necesario
que sea alguna persona de tu
confianza que creas que puede
decirlo con tranquilidad, y que
además te apoye).

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 Convéncete de que el embarazo no es algo negativo y que tu bebé no es un error. Más bien
es una oportunidad que tienes para ser mejor.
Acepta tu situación y no intentes culpar a otras personas por lo que te sucede. Si lo planifi-
caste o no, justificar la situación no va a regresar el tiempo. Mejor intenta aceptar el presente y
seguir adelante sin buscar excusas o formas de culpabilizar a otras personas por tu paternidad.
Intenta estar seguro de ti mismo. No les demuestres a otras personas que te sientes culpa-
ble por tu hijo o arrepentido de la situación. Mejor muéstrate motivado y vas a ser responsable
en todo momento por tu hijo o hija.
Conoce tus derechos. Tienes derecho a mantener tus estudios, tener un espacio digno para
vivir, que te apoyen en tu alimentación y necesidades básicas de salud, que te traten bien y que
seas respetado en tu situación.
Contarlo puede resultar difícil, pero recuerda que necesitas involucrar a tu familia y personas
cercanas para poder recibir apoyo.

Necesitas apoyo
Los jóvenes que empezamos a ser padres tuvimos alguna de estas situaciones:
1. Quise ser papá, lo planifiqué y me siento preparado.
2. Pensé en ser papá, pero no me siento preparado ni pensé en lo que significaba.
3. No pensaba ser papá a esta edad, pero asumo la responsabilidad.
4. No me lo esperaba y no me siento preparado.

Sea cual sea tu situación, eres un adolescente que aún está creciendo y por eso, tienes derechos
a ser apoyado. En tu adolescencia tienes que incluir la paternidad y no dejas de ser joven. Por eso
necesitas apoyo de lo siguiente:

Tu proyecto de vida: aún tienes muchos planes por delante que debes seguir sin abandonar
a tu hijo o hija. Busca una persona que te ayude a organizar tus metas, prioridades, paternidad, y
actividades recreativas con el tiempo que tienes.
Apoyo económico: incluye las necesidades básicas de alimentación, habitación, educación,

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vestimenta, salud, entre otros (Unicef, Artículo 11). Es responsabilidad de tu familia apoyarte con
al cuido del embarazo y lo necesario para el cuidado del/la bebé. Si tu familia no puede apoyarte
económicamente al 100%, puedes intentar conseguir un empleo de acuerdo a las normas para
personas menores de edad. Trabajar una jornada completa no es lo más conveniente para vos,
pues necesitas seguir tus estudios.
Continuar tus estudios: puedes seguir estudiando
para alcanzar tus metas, pero recordando que vas a ser
o ya eres padre.
Un lugar donde vivir: mereces un hogar donde pue-
das vivir feliz y ser apoyado como adolescente y como
padre. No te deben expulsar de casa por ser padre.
La Ley de los derechos de los adolescentes dice que tie-
nes derecho a vivir en familia y no ser separado de los
familiares con los que convives (Artículo 23) y tener
un buen desarrollo de tu personalidad en el hogar
(Artículo 11).
Apoyo y guía para orientar tus emocio-
nes: ocupas un espacio para poder hablar de
lo que sientes, lo que te pasa y cómo afron-
tarlo de la mejor manera. Busca a una per-
sona que te escuche y te entienda. Que sea de
confianza para vos y que te apoye sin regañarte o
juzgarte por lo que haces.
Tus actividades recreativas: ser papá
no significa ser adulto. Sigues siendo
adolescente y necesitas mantener tu vida de
joven. Necesitas que te apoyen también en tu entre-
tenimiento y recreación. Tus actividades deportivas, tiempo

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de relajación, disfrutar con tus amigos, participar de actividades, fiestas, juegos, y todo lo que te
permita sentirte feliz. Es tu derecho como adolescente tener una vida digna, donde también se
incluye la recreación (Unicef, Artículo 11). Esto no te debe alejar ni de tu hijo/a, y por eso hay que
hacerlo con responsabilidad.
Mereces que te acompañen con respeto, apoyo, la responsabilidad y que te ayuden a que seas
feliz de tu rol de padre. Asume las responsabilidades que te corresponden, pero recuerda tus de-
rechos.

Involucrarse durante el embarazo

Ser padre empieza desde el momento en que te das cuenta de la noticia del embarazo.
Si alguien quiere hacerte sentir culpable, debes salir adelante con tu ilusión de ser padre, de ser
mejor y sobretodo de asumir la responsabilidad, no la
culpa.
No mereces que te juzguen por tu bebé o que te
acusen por lo que hiciste. Más bien aprovecha
la situación y muestra lo responsable y
lo decidido que puedes ser con apoyar el
embarazo y de cuidar a tu bebé.
Es tu deber contribuir en el embarazo,
participar en la salud de la mamá de tu hijo
o hija (sea o no sea tu pareja) citas médicas,
cursos de preparación al nacimiento, ser
parte de la selección del nombre de tu bebé y otros aspectos necesarios del embarazo donde
tienes derechos de participar.

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 Participación en el parto
Estar en el momento preciso que nace tu hijo/a es un derecho que tienes como papá. Pero ese día
quizás te preocupe un poco, pues es una experiencia nueva.
Algunos muchachos como tú han dicho que les preocupa:
• Que el día del parto los tome por sorpresa o emergencia.
• La reacción en el momento del nacimiento.
• No saber cómo ayudar a la mamá del bebé.
• Asombro al ver el instante donde sale la cabeza de el/la bebé.
• Tener a su hijo/a en brazos.
Pero ¿Qué puedes hacer para afrontar tus miedos? Cuando sentimos temor o miedo es porque no
nos sentimos bien preparados para afrontar algo.
Para el momento del nacimiento necesitas saber cómo reaccionar antes y durante, y para eso hay
que prepararse bien. Te recomendamos lo siguiente:

Antes del parto:

• Estar preparado por si el parto te toma por sorpresa. Ten tus documentos a mano, dinero
extra, teléfonos de personas que te ayuden, disposición y cercanía al hospital que corresponde.
• Puedes buscar videos, simulacros, fotografías, que te ayuden a visualizarte en la escena
del parto y que tengas idea a lo que vas.
• Busca algún curso para preparación al parto o pide a algún profesional del centro de salud
que te de una breve explicación de lo que ocupas saber.
• Debes saber cómo alzar a un recién nacido. Serás de las primeras personas que carguen
al bebé y para saber hacerlo, pide a alguna mamá o enfermera que te enseñe como cargar un
bebé y puedes practicar con una almohada primero, para que sepas la técnica adecuada.
Durante el parto:
• No te corresponde ser un enfermero, pero quizá necesites apoyar a la mamá de tu hijo/a.

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 No es solo tranquilizarla, si no apoyarla y que ella sepa que no está sola, si no que estas al
igual que ella, deseando poder tener al bebé en brazos. Frases como “vamos, estoy contigo”,
“ya casi vemos a nuestro/a hijo/a”, etc, ayudarían a que ella se sienta apoyada en ese momen-
to tan importante para ambos.
• Intenta manejar tu ansiedad. Muchos muchachos se han alterado o pierden la calma. Tie-
nes el privilegio de poder estar ahí viendo el nacimiento de tu bebé y aunque puedas ponerte
nervioso o confundido, conviene que aprendas a tranquilizarte. Sobre todo, piensa en lo bue-
no de ver a tu hijo o hija pronto en tus brazos.
• Participar del parto no es solo estar presente en la sala. Es también sentir el parto como ese
primer momento en que te acercarás a tu hijo/a.
Intenta apoyar a la mamá, con una mirada activa y no ignores lo que pasa. Tienes el derecho
de estar en el nacimiento de tu bebé y por eso vive el momento que es único. En ocasiones es
bueno evitar grabar el parto o pensar en tomar fotografías.
Busca ayuda y verás que eso puede contribuir a reducir la ansiedad y temores al momento del
parto y así esperarás el momento con más tranquilidad y sobretodo, estando seguro de ti mismo.

La relación con la
mamá del/la bebé
En este momento necesitas saber cuáles son
tus deseos, tus planes a futuro y las decisiones
que vas a tomar con respecto a ti mismo y a la
relación con la madre de tu hijo/a.
Ser padre no implica necesariamente casarse o
vivir con la mamá del/la bebé. El hecho de que
sean papá y mamá no te obliga a ti ni a ella a man-
tener una relación de noviazgo, y mucho menos
contraer matrimonio o formar una vida de pareja

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viviendo juntos.
Lo más conveniente es que continúes en tus estudios y vivas en un ambiente familiar sano.
Sin embargo, recuerda que el embarazo es de dos personas: ella y tú. Por eso debes ser co-respon-
sable con el embarazo e involucrarte de la manera más adecuada para ella y para ti. Sea cual sea
el tipo de relación que desees mantener con ella (noviazgo, amistad, compañerismo, etc.) debes
mostrar respeto e interés por el embarazo que también es tuyo.

Preparación para el crecimiento del/a bebé

Tienes derecho y responsabilidad de ver a tu hijo/a y de velar por el cuidado que necesite, dedi-
cándole tiempo, dándole cariño, compartiéndole actividades, vigilando que se encuentre bien,
alimentándole, verle crecer, etc.
Pero como padre y como joven tienes que ir avanzando. Ser un papá es un proceso de creatividad,
donde puedes innovar cosas que hacer con tu hijo/a. No siempre hagas lo mismo con tu hijo/a,
porque posiblemente los dos se aburrirán. Explórate y comienza a conocerte a vos mismo como
papá y anímate a hacer cosas diferentes y sanas.

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Busca cursos o talleres sobre paternidad, apoyo emocional, infórmate sobre los cambios del de-
sarrollo de tu bebé y sobretodo, tomate un tiempo para ser un mejor hombre, y eso te ayudará a
ser mejor padre.

Participación en la salud del niño/a

Es responsabilidad del papá y de la mamá velar por la salud del/la bebé.
Participar en la salud no es solo dar dinero para cuidarle. También es involucrarse y estar atento
a la sana alimentación, abrigo y también de los cuidados de higiene del/la bebé, cambiarle su
ropa cada cierto tiempo, limpiarlo/a adecuadamente, cambiarle los pañales, acompañarle a que
se duerma, cuidarlo por la noche, etc.

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Debes estar pendiente de las citas médicas, las fechas de vacunas, que tome sus medicinas (si
necesitara). Además, para la salud adecuada el/la bebé necesita mucho afecto de tu parte y que
puedas brindarle un espacio armonioso para vivir y libre de violencia.
Cuidar la salud es una responsabilidad, pero también es una forma de amar, de querer y de de-
mostrar la importancia que tiene tu hijo o hija para ti.

Recomendaciones
Busca alguien que te escuche y que te entienda: siempre es bueno hablar de cómo te sientes
para que no acumules frustraciones, enojos, estrés, resentimientos, etc.
Busca gente que te apoye: algún amigo o familiar que te apoye y te ayude con ciertas cosas
que vas a necesitar al ser padre. Todos necesitamos ayuda y necesitamos dejarnos ayudar.
Ponle atención a tu salud: no puedes cuidar si no te cuidas primero. Revisa tu estado de salud
y realiza actividades de recreación, ejercicio y hábitos saludables. Puedes tener más información
sobre esto hablando con una persona funcionaria del centro de salud.
Sigue con tus metas y con tu vida de joven: no olvides tu paternidad, pero inclúyela adecuada-
mente a tu vida. Busca un balance entre tu responsabilidad y vida de adolescente.
No te consideres un adulto: tu juventud no acaba al convertirte en padre. También es necesa-
rio que tengas tu diversión, recreación, amistades, entre otras cosas que te ayuden a ser un buen
padre.
Sigue tus estudios: Un hijo/a no es un bloqueo en tu vida. Es una parte importante que te dará
más motivación para continuar tus estudios, para esforzarte en tus metas y para ser mejor. Como
adolescente tienes derecho a seguir tus estudios y a recibir el apoyo por parte de tu familia. Pero
no olvides a tu hijo/a y las responsabilidades como padre.
Involúcrate con alegría, afecto y responsabilidad en el cuido de tu bebé, desde el momento en
que te das cuenta del embarazo.
Infórmate sobre tus derechos. La Unicef estableció los derechos innegables para las personas

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menores de edad. Algunos que se relacionan a tu condición de padre adolescente son:
- Derecho a la no discriminación, sin importar tus intereses, gustos, características o por tu
condición de padre.
- Derecho a vivir en condiciones que permitan su crecimiento sano y armonioso en familia.
Siendo padre adolescente tienes el derecho a permanecer en familia.
- Derecho al apoyo económico que incluye la mantención de necesidades básicas de ali-
mentación, habitación, vestimenta, salud, entre otros.
- Derecho a recibir la educación que en tus circunstancias especiales requirieras. Si eres
padre adolescente no te deben prohibir la educación que necesitas.
- Derecho a una adecuada salud, que incluye tener espacios y tiempo para la recreación

Busca grupos de apoyo: únete a grupos que te apoyen. Pueden ser de psicología, trabajo so-
cial, enfermería, orientación, u otros.
El Instituto Wëm, con la colaboración de la Clínica de Adolescentes del Hospital Calderón Guardia
(San José, Costa Rica) ofrece grupos de apoyo para padres adolescentes, donde podrás aprender
sobre tus derechos, tus emociones, sexualidad, masculinidad, pareja, entre otros temas que nece-
sites conversar.
Para tener información de estos grupos puedes llamar al Instituto Wëm al (506) 2234-2730 o a
la Clínica de Adolescentes al (506) 2233-6238.

Proyecto Wëm Juvenil en coordinación con la Asociación Pro Clínica de Adolescentes del
Hospital Calderón Guardia y con el patrocinio de la Embajada de Suiza en Costa Rica.
2015© Instituto Wëm. San José, Costa Rica.

Lic. César Cordero. Coordinador Wëm Juvenil.

Tel.: (506)2225-7511. Correo Electrónico: cesar.cordero@institutowemcr.org

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 Wëm Juvenil te ofrece un espacio para que puedas hablar acerca de:
Conflictos con tu papá, mamá, con tu pareja o tus compañeros/as.
Manejo adecuado de la frustración, el enojo, los celos.
Manejo de la tristeza, el aburrimiento o si estás desmotivado.
Dudas sobre sexualidad o si eres padre adolescente.
Asumir nuevos retos y metas.

Llama a la línea de apoyo para adolescentes varones del Instituto Wëm.

Tel.: (506) 2234-2730 o al 9-1-1

Instituto Wëm Costa Rica: (506) 2225-7511

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San José, Costa Rica