Trabajo presentado en la materia de “Construyendo su Teología”

Reporte de Lectura V

Presentado por: Williams Jason Coloma Astoria

Presentado a: Alejandro Castiblanco

Seminario Reformado Latinoamericano

05 de Julio de 2017, Medellín, Colombia

 INFORME DE LECTURA I

I. Datos bibliográficos

Título: El conocimiento del Dios Santo

Capitulo: 1 - 6
Páginas: 19 al 94
Autor: J. I. Packer
Editorial: Vida
ISBN: 978-0 8297-4510-8
Ciudad: Miami, Florida
Año de publicación: 2006

II. Bosquejo del contenido

1. EL ESTUDIO DE DIOS

2. EL PUEBLO QUE CONOCE A DIOS

3. PARA CONOCER Y SER CONOCIDOS

4. EL ÚNICO DIOS VERDADERO

5. DIOS ENCARNADO

6. EL DARÁ TESTIMONIO
III. Resumen

EL ESTUDIO DE DIOS
Estudiar la divinidad es beneficioso para la mente, es profundo, nuestro orgullo se hunde
en lo infinito. Este tema humilla nuestra mente limitada en comparación a los
pensamientos de Dios, pero reconocer que con el tiempo se expande y nos brinda un
efecto consolador. Contemplar a Cristo crucificado nos genera un bálsamo para cualquier
herida, meditar sobre el Padre nos da descanso y el espíritu santo nos brinda un cura para
todo mal. Muchos piensan que este tema es irrelevante para la vida, descuidan su
importancia y van por la vida dando tropiezos y errando por el camino como si tuviera
los ojos vendados, en pocas palabras malgastan su vida y pierden su alma. Así que el
conocimiento de Dios trino vale realmente la pena, el padre proyecta la salvación, el Hijo
ejecutándola, y el Espíritu Santo aplicándola.

EL PUEBLO QUE CONOCE A DIOS

No son muchos los que pueden afirmar que han conocido a Dios, y si alguien preguntara
cual es el secreto, tendríamos que decirle que es por mediación de Jesucristo, sus
promesas, el poder del Espíritu Santo y por medio de la Fe, que se manifiesta en alegría
genuina, bondad y espíritu libre. Y dentro de los que tienen interés en la Teología, son
capaces de explicar, pensar y hablar sobre temas cristianos, esto no significa que
verdaderamente lo conocen. Hay una gran diferencia entre conocer a Dios y tener
conocimiento acerca de Él. Un ejemplo claro y notable de haber conocido a Dios nos da
el libro de Daniel afirmando estas 4 proposiciones: 1. Quienes conocen a Dios despliegan
gran energía para Dios, 2. Piensan grandes cosas de Dios, 3. Evidencias gran denuedo por
Dios, y 4. Manifiestan gran contentamiento en Dios.

PARA CONOCER Y SER CONOCIDOS

Estamos hechos para conocer a Dios en todo aspecto, esto nos ofrece gozo, delicia y
contentamiento, que en las pruebas más difíciles Dios nos da de su gracia. En cambio, la
persona que solo tiene una religión permanecerá impasible, rígida, sin entusiasmo alguno.
Es claro que el conocer a Dios es una tarea más compleja que conocer a otro hombre.
Pero Dios se ha hecho conocer y la vida ya no parece inútil ni tediosa, esa gran
personalidad nos ha contado entre sus colaboradores, Dios nos dice que nos gloriemos de
entenderlo y conocerlo, porque dicha relación deleita el corazón del hombre
EL ÚNICO DIOS VERDADERO

El segundo mandamiento consiste en que no debemos utilizar representaciones visuales

del Dios Trino para fines de adoración. Nos preguntamos porque existe esta prohibición
dentro de los diez principios básica de la religión bíblica. Pues Dios proclama su celo que
viene acompañada de una terrible sanción para los transgresores, esto nos hace suponer
que es de suma importancia, ya que se ve involucrada la gloria de Dios y el bienestar
espiritual del hombre, con ello se muestra dos líneas de pensamiento que se relacionan
entre sí, no con la utilidad de las imágenes, sino con la fidelidad de las mismas: 1. Las
imágenes deshonran a Dios, porque empaña su gloria, 2. Las imágenes engañan a los
hombres. Al comprender esto hace que también pensemos en las imágenes mentales que
nos hacemos acerca de Dios, dejando de lado alguno de sus atributos y resaltando otro,
hacer esto es distorsionar y crear una falsa imagen de Dios haciéndolo ver como un
superhombre. Todo esto hace un llamado a que reconozcamos que Dios es trascendente
y misterioso, que está más allá de toda imaginación humana y de toda especulación
filosófica. Un llamado a humillarnos, escuchar su voz y aprender de Él, tal cual es Él.

DIOS ENCARNADO
A las personas que escuchan el evangelio de Jesucristo, les cuesta creer porque sobrepasa
el entendimiento humano. Y la dificultad radica en la encarnación de Dios hecho hombre,
segunda persona de la deidad, segunda cabeza representativa de la raza que decidió el
destino de la humanidad. Esto se vuelve piedra de tropiezo del cristianismo, donde han
naufragado judíos, musulmanes y otras religiones. A todo esto, debemos considerar dos
afirmaciones: El niño que nació en Belén era Dios, y El niño que nació en Belén era Dios
hecho hombre. No se puede explicar, pero si formularlo tal como está en el Credo de
Atanasio: “Nuestro Señor Jesucristo, el Hijo de Dios, es Dios y hombre; perfecto Dios, y
perfecto hombre: ...sin embargo, no es dos, sino un Cristo; uno, no por la conversión de
la Deidad en carne: sino al tomar de la humanidad e incorporarla en Dios.”

EL DARÁ TESTIMONIO

El cristiano descansa sobre la doctrina de la trinidad, pero no debemos de olvidarnos del

Espíritu Santo, la tercera persona de la deidad, Jesús prometió que enviaría a un
consolador en Juan 14:16, este es el espíritu de verdad, el Espíritu de Dios es su aliento
todopoderoso. Cristo relaciono la misión del Espíritu con la voluntad y propósito del
Padre y del Hijo. El Espíritu está sujeto al Hijo tanto como al Padre, por ello el ministerio
 del Espíritu Santo como consolador que nos enseñara todas las cosas todas las cosas, y
nos recordara todo lo que Jesús nos dijo, no puede ser menos importante ya que sin él, no
habría un solo cristiano en todo el mundo.

IV. Evaluación

El autor me sorprende de gran manera en como narra las cosas, es muy explícito y fácil
de entender, nos muestra al Dios trino en su esplendor, nos da a conocer los contrastes de
una mala imagen de Dios, y nos muestra como Él es realmente. Ya no se trata de un
conocimiento acerca de Dios, sino un auténtico conocimiento del Dios único y verdadero.

V. Aplicación

Ver a Dios en su esplendor nos anima a la santidad y querer conocerlo más, responder
a la revelación de Dios con confianza y obediencia, fe y adoración, oración y alabanza;
sujeción y servicio. Nos invita a ver y vivir a la luz de la Palabra de Dios. Esto, es lo único
que debe importar a un verdadero cristiano.