Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
info
RESUMEN
*
PHD en Antropología (Universidade de Brasília), Post-doctora en Salud Colectiva (PPGSCol UFRN). Profesora
Adjunta del Departamento de Antropología de la Universidade Federal de Rio Grande do Norte. Natal, Brasil.
E-mail: gretigre@gmail.com.
orcid.org//0000-0003-0792-1307.
Google Scholar: https://scholar.google.com/citations?user=vsRPZqAAAAAJ&hl=pt-BR
**
Doctora en Antropología, Instituto de Investigaciones en Ciencias Sociales y Humanidades (ICSOH-CONICET).
Escuela de Antropología, Universidad Nacional de Salta, Argentina. E-mail: pankraleon@gmail.com,
orcid.org//0000-0003-3419-4731.
Google Scholar: https://scholar.google.com.ar/citations?hl=es&user=PwS-5u8AAAAJ
INTRODUCCIÓN
1
En lo que hace al género de nuestra escritura académica, optamos por el lenguaje inclusivo de los marcadores
de género en el texto, eligiendo el grafismo x en reemplazo de las desinencias masculinas o femeninas relativas a
artículos y sustantivos. Así, en vez de “humanos”, elegimos “humanxs”; en vez de “filósofos”, elegimos “filósofxs”
y así en adelante.
51
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
ayahuasca, dos plantas concebidas como sujetxs de poder en los Andes de Argentina
y en la Amazonía del Perú. Propondremos, entonces, una comparación entre la visión
eurocentrada y la de las ontologías latinoamericanas para, finalmente, enfatizar
las posibilidades teóricas y políticas de las miradas indígenas y mestizas sobre las
“plantas de poder” hacia una integración de los derechos de las plantas con aquellos
pertenecientes al resto del mundo vivo.
MATERIAL Y MÉTODOS
DISCUSIÓN
De esa manera, de ser vida que brota, se transforma y fluye, la naturaleza se transforma
en una entidad muerta, dependiente de manos especializadas, cuyo control garantiza
su misma posibilidad de existencia: “su capacidad de renovarse y crecer ha sido
negada. Se ha tornado dependiente de los seres humanos” (Shiva, 1996, p. 319).
Fue en ese proceso que se generó y alimentó el dualismo entre naturaleza y seres
humanos. De esta forma, lo que fue una tela de relaciones en profunda interacción
se convirtió en un recurso para la tecnología, la industria y, en las últimas décadas,
la genética.
53
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
científico. Dentro del campo antropológico es posible observar una fehaciente historia
de escisión de la cultura humana a respecto de esa compleja tela de sujetxs que fue
conceptualizada como naturaleza. Las líneas teóricas de la antropología y múltiples
estudios etnográficos parten de esta separación apriorística entre naturaleza y cultura,
fomentando la proliferación de campos de saber desintegrados, constituidos por
miradas parciales y acortadas.
3
Traducción nuestra.
El grupo de expertxs que redacta el documento asume que hay motivos que tornan
precisa la existencia de un marco reglamentador de la discusión ética para que lxs
sujetxs humanxs se aproximen a las plantas y las manipulen. Según el texto, aun
cuando haya acuerdo entre lxs redactorxs respecto a la necesidad de ese marco, bajo
ese aparente consenso existen posiciones muy diferentes. El grupo destaca que es
preciso realizar una “aproximación intuitiva” al asunto, para obtener los insights
correspondientes, sin comprender necesariamente todas las conexiones racionales.
Con ello, el documento suizo del ECNH deja abierta una puerta para una percepción
holística del medio ambiente, los recursos y la naturaleza, incluyendo a las plantas,
cuya potencia burla los cánones de la ciencia moderna y se presta a deconstruirla.
Una vez que este informe se dio a conocer en la población, la idea de instituir de
“derechos a las plantas” apareció en algunos artículos y manifestaciones virtuales
como una broma ridícula, cuando no peligrosa (Smith, 2008). En ese contexto,
aparecía como un hecho risible concebir a las plantas como sujetos morales, al
mismo tiempo en que se sustentaba que era peligrosa una consideración filosófica de
las plantas como sujetos de derechos: este movimiento expansivo podría implicar en
una ampliación indefinida de las esferas de derechos, cosa virtualmente imposible
para el pensamiento occidental:
55
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
ello es analizado aquí como una estrategia discursiva reaccionaria que podría
contribuir a la debilitación de la legitimidad de las luchas a favor de los derechos
de los otros seres vivos, incluyendo los animales y la propia humanidad. En este
sentido, consideramos que la esfera de los derechos es un espacio a ser mantenido,
conquistado y problematizado en forma constante.
humana también debiese ser justificada” (ECNH, 2008, p. 5)5. Por otro lado, se
proclama cierta preocupación sobre la manera en que se extienden los derechos a los
países “en vías de desarrollo” –del Tercer Mundo–: si allí no han sido garantizados
aún los derechos humanos fundamentales, ¿cómo es posible extender la esfera de
derechos para otros seres? (Pérez Tolentino, 2012). Según este prisma, sería preciso
dar atención a lo humano primero, para sólo abordar lxs otrxs potenciales sujetxs de
derechos después.
5
Traducción nuestra.
57
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
La propuesta de las ontologías plurales coloca a las plantas de poder como seres
específicos dentro del contexto más amplio de todo lo que respira y se transforma,
incluyendo el propio planeta tierra. De esta manera, no existe una concepción
previa de lo que son los “derechos de las plantas” en sí, sino que ellas mismas son
consideradas como parte de un todo mayor, íntimamente entrelazado. La concepción
de derechos de las plantas no se entiende como algo posterior a los derechos de los
seres humanos, ni siquiera decorrente de los mismos derechos de la naturaleza: en
esta aproximación, es posible resaltar la simultaneidad y entretejido que se realiza
entre las diversas esferas de derechos.
CONCLUSIONES
Sin lugar a dudas, plantas de poder como la coca y la ayahuasca han sido colocadas
históricamente en un lugar de marginalidad, exclusión e invisibilización. Desde
las diversas apropiaciones coloniales, pasando por las extirpaciones de idolatría
y llegando a las burocracias antidrogas del siglo XXI, estas plantas han sido
perseguidas como la personificación de aquello que es visto como lo negativo en la
humanidad. Sin embargo, no ha sido esta la percepción de los pueblos indígenas y
mestizos latinoamericanos, para los cuales el lugar de las plantas de poder ha sido
radicalmente diferente. Consideramos que estudios etnográficos de las prácticas
59
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
Con la misma fuerza con la que impulsamos esta propuesta, queremos enfatizar
aquí nuestra postura crítica respecto al documento suizo como representante de
la particular mirada europea contemporánea sobre los derechos de las plantas. En
el texto en cuestión se destaca que la dignidad de los seres vivos “no es un valor
absoluto. El mismo se alcanza equilibrando intereses moralmente relevantes: el
bien, o los ‘intereses’ de las plantas en sí mismas deberían ser ponderados contra los
intereses de otros organismos” (ENCH, 2008, p. 5)6. Es esa dignidad como sujetxs
“en sí mismxs” y esa oposición a priori de “intereses entre organismos” que resultan,
a nuestro parecer, problemáticas.
Es posible constatar que allí no consta ninguna relación visible entre la comunidad
vegetal y las otras comunidades de seres posibles, a no ser la humana. En esta
“metafísica del ejercicio de la singularidad humana” (Fecher, 2016) es posible
observar que en la propia reflexión ética sobre las plantas presente en el mismo hay
un ejercicio de corte de realidades sustentado por trescientos años de modernidad
occidental: las plantas poseen existencia “en sí mismas”, son compartimientos de
vida estancos en las categorías que la ciencia moderna designó para ellas, basada en
el reconocimiento de taxonomías de familias, géneros y especies biológica, genética
y molecularmente diferenciables – como veremos más adelante, una relación
vertical. Cuando la perspectiva biocéntrica continúa apareciendo como una opción
frente a una perspectiva antropocéntrica, ¿será que así continuamos inmersos en la
falsa ‘elección’ entre lo humano y la naturaleza, sin alcanzar a ver sus intrínsecas
relaciones? Como observa Vandana Shiva en su análisis del concepto de ‘recursos’,
este razonamiento bipolar que escinde lo propiamente humano del resto del mundo
vivo es etnocéntrico, antropocéntrico y reproduce el mismo sistema de explotación
que se intenta diagnosticar o modificar.
6
Traducción nuestra.
La historia de estas dos plantas de poder muestra cómo ha sido realizada la reducción
de las mismas a sus principios activos, como los alcaloides en el caso de la coca
(cocaína, papaína, etc.) y el DMT, Dimetiltriptamina, en el caso de la ayahuasca.
La planta de la coca ha sido reducida a un producto químico derivado de uno de sus
alcaloides (clorhidrato de cocaína), mientras que la ayahuasca ha sido reducida a
una molécula espiritual. Y aun cuando existan importantes diferencias en los settings
que llevan al consumo de una u otra planta bajo esta forma, nosotras focalizamos en
la apropiación de las mismas, lo cual continúa siendo realizado bajo esquemas del
más salvaje capitalismo. Proponemos una mirada que no las reduzca a moléculas ni
a principios activos, y que no las considere como recursos. Anclamos el devenir de
este análisis comparativo en las pluralidades e intersubjetividades entre, con y para
con las plantas.
Situadas en el contexto del Sur político, vemos cómo la coca y la ayahuasca han
sido escindidas del espacio que configurado históricamente con sus memorias:
se las mira desde campos de saber parcializados; las interpretaciones sobre ellas
mismas se separan de las interpretaciones sobre las comunidades que las albergan y
honran. Su vínculo con lo que es humano se establece sin llevar en consideración la
complejidad y la multiplicidad de formas de relacionarse con ellas, que han tenido
históricamente estos grupos concretos de personas. La apropiación eurocentrada
minimiza las plantas como sujetos, las torna objetos de intervención. Al hacerlo,
permite que puedan concebirse políticas como la propia criminalización de los
cultivos de plantas y el reforzamiento de la penalización por el cultivo en países
61
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
productores. Este movimiento acota los derechos tanto de las comunidades como de
las plantas, los cuales se han visto simultáneamente violentados. Todas las etapas de
este inmenso movimiento de apropiación, desde la tentativa de patentamientos, el
turismo chamánico o las guerras contra el narcotráfico, objetifican a las plantas y las
colocan en relación de exclusividad diádica con el mundo humano.
Una propuesta para enfrentar las visiones reduccionistas, aun las del propio pensamiento
eurocentrado, es pensar comparativamente la existencia de las comunidades entre
plantas, concibiendo esa relación como parte de un contexto mayor: epistemológico,
político, cósmico. Al poner en cuestión las miradas eurocentradas con las que nos
hemos acostumbrado a mirar, la propuesta de estas ontologías plurales con, para
y entre las plantas muestra múltiples dimensiones donde se activa la relación del
mundo humano con el de las plantas. Aquí se despliegan diversas formas y modos
de hacer que las involucran y develan el carácter transversal de las conexiones entre
lo que es humano y las otras formas de existencia.
63
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
Ya sea como especies, como “seres con traje verde” o como vehículos portadores
de una deidad, hemos observado que para las comunidades estudiadas las plantas
ostentan una vida social innegable. De ahí que sea necesario concebirlas como
sujetxs múltiples, enraizadxs en complejas dimensiones históricas y políticas.
Es desde esta perspectiva que un modelo jurídico relativo a las plantas debe ser
elaborado: ellas precisan ser no sólo defendidas sino también escuchadas; no sólo
protegidas sino también promovidas. Se debe respetar el derecho a su existencia
como parte de la diversidad que las rodea y en la que las comunidades humanas con
las que interactuaron históricamente están sumergidas.
plantas en una única esfera de derechos junto con lxs sujetxs humanxs y otras formas
de existencia. Con ello, pretendemos dar nuevo aliento a la contribución teórica,
metodológica y política de una antropología enraizada y encarnada en las ontologías
plurales en nuestra Latinoamérica.
Referencias bibliográficas
Albuquerque, M.B. (2009). Uma heresia epistemológica: as plantas como sujeitos de saber.
Revista Centro de Estudios Sociais, 328, 1-34.
Ariza, F. e Martins, L. (2010). Scala Naturae de Aristóteles no Tratado De Generatione
Animalium. Filosofia e História da Biologia, 5 (1), 21-34.
Belaúnde, L.E. (2001). Viviendo bien: género y fertilidad entre los Airo-Pai de la Amazonia
peruana. Lima: CAAAP.
Cabral De Oliveira, J. (2012). Entre plantas e palavras. Modos de constituição de saberes
entre os Wajãpi (Tese Doutorado em Antropologia). Universidade de São Paulo, São
Paulo, Brasil.
de la Cadena, M. (2008). Política indígena: un análisis más allá de “la política”. Red de
Antropologías del Mundo. Wan E-Journal, 4, 139-171.
Echazú Böschemeier, A.G. (2015). Corpo de planta. Terapias y magias dxs curiosxs da
baixa Amazonia do Peru, sob uma perspectiva situada de gênero e saúde popular (Tesis
Doctorado en Antropología). Universidade de Brasília, Brasília, Brasil.
Fecher, M. (2016). Etnobotânica ou Fitoantropologia da Ayahuasca? Uma relação em dupla
torção entre o humano e as plantas. Póster presentado en la Sesión 1 - GT 05 de la
30°Reunión Brasilera de Antropología “Políticas da antropologia. Ética, diversidade e
conflitos”. João Pessoa, Brasil.
Federal Ethical Comitee of Non-Human Biotechnology. (2008). The dignity of living beings
with regard to plants. Berne: Swiss Confederation. Recuperado de <http://www.ekah.
admin.ch/fileadmin/ekah-dateien/dokumentation/publikationen/e-Broschure-Wurde-
Pflanze-2008.pdf>
Flores, E. y Echazú Böschemeier, A.G. (2016). Ontologías en desigualdad: coca, ayahuasca
y la agencia histórica. Revista Avá, 29, 155-174.
Flores, M.E. (2017). La coca y los modos de hacer: una aproximación etnográfica a la agencia
de la planta en terapias y rituales populares de Salta (Tesis Doctorado en Antropología).
Universidad de Buenos Aires, Argentina.
Flores, E. (2016). Las artes de hacer con coca. Revista ProA de Artes e Antropologia, 1 (6),
141-161.
Lima, T.S. (1996). O dois e seu múltiplo: reflexões sobre o perspectivismo em uma cosmologia
Tupi. Revista Mana, 2 (2), 21-47.
65
Ana Gretel Echazú-Böschemeier, Maria Eugenia Flores
____________________________________________________________________________www.neip.info
Pérez Tolentino, J.A. (2012). Comentario al post de Shabbir, Shahab: Can enviromental
rigths be considered human rigths in the concrete sense? Recuperado de <https://www.
researchgate.net/post/Can_environmental_rights_be_considered_human_rights_in_the_
concrete_senses>.
Rival, L. (2012). Animism and the meaning of life: Towards an understanding of manioc
domestication. En O. Ulturgasheva, M. Brightman y V.E. Grotti (Org.). Animism in
Rainforest and Tundra: Personhood, Animals, Plants and Things in Contemporary
Amazonia and Siberia (pp. 69-81). Oxford: Berghahn.
Rivera Cusicanqui, S. (2015). Sociología de la Imagen. Miradas Ch`ixi desde la Historia
Andina. Buenos Aires: Editorial Tinta Limón.
Shiva, V. (1996). Recursos. En W. Sachs (Org.). Diccionario del desarrollo: Una guía del
conocimiento como poder (pp. 318-337). Perú: PRATEC.
Smith, W. (2008). The Silent Scream of the Asparagus. Get ready for “plant rights”. Weekly
Standard, 2008. Recuperado de <http://www.weeklystandard.com/article/16159>
Stone, C. (1972). Should trees have standing? Towards legal rights for natural objects.
Southern California Law Review, 45, 450-501.
Viveiros de Castro, E. (1996). Os pronomes cosmológicos e o perspectivismo ameríndio.
Mana, 2 (2), 115-144.
Zaffaroni, E.R. (2012). La pachamama y el humano. Buenos Aires: Colihué.