¿Qué son los minerales y las rocas?

En principio vamos a hacer la distinción entre ambos conceptos, un mineral es un elemento o

compuesto químico que se presenta en estado sólido, homogéneo, de manera natural y que posee
una estructura atómica ordenada y una composición química definida o que varía dentro de ciertos
límites, lo cual le confiere una serie de propiedades físicas. De una manera más simple podemos
decir que los minerales son los compuestos químicos con los cuales están hechas las rocas y que
tanto las rocas como los minerales están compuestos por uno o por varios de los elementos
químicos conocidos en estado natural. Por ejemplo, el ópalo y la calcedonia son minerales (son
minerales en estado sólido o el petróleo que lo es, pero en estado líquido.
El diamante es uno de los minerales más preciados del mundo por sus características físicas y
ópticas. Se descubrió que existen toneladas de diamantes en el interior de la tierra de extracción
imposible a una profundidad de 150 km. La mayoría de diamantes naturales se forman en
condiciones de presión y temperaturas extremas
existentes o profundidades de más de 140 km en el
manto terrestre y son llevadas cerca de la superficie
de la tierra a través de erupciones volcánicas
profundas por un magma que se enfría en rocas
ígneas conocidas como kimberlitas y lamproitas. Lo
fundamental con respecto a este mineral es que hay
millones de toneladas sepultadas en el interior de la
tierra, y que los investigadores descubrieron que las
ondas de sonido atravesaban los cratones al doble de
velocidad de lo esperado (porque el sonido cambia de velocidad en función al tipo de roca que
atraviesa) concluyendo que las secciones más profundas de los cratones contengan unos porcentajes
de diamante de entre el 1% y el 2% lo que hace que el sonido los atraviese a mayor velocidad que a
través de la roca estándar del cratón. De esta forma es que los investigadores descubrieron su
existencia en cantidades en el interior de la tierra.
Por otro lado podemos definir como roca a un agregado o asociación de uno o más minerales que
conservan individualmente sus propiedades.
El magma es una mezcla de materiales fundidos de composición predominante silicatada, con
cantidades variables de gases disueltos y pequeñas cantidades de materiales en estado sólido
(cristales y fragmentos de roca). Así el concepto de magma implica la coexistencia de fracciones
sólidas, liquidas y gaseosas que pueden separarse en determinadas condiciones de presión y
temperatura. El magma se origina en zonas profundas en el interior de la tierra y se constituye
generalmente de oxígeno, silicio, aluminio, calcio, hierro, magnesio, sodio y potasio. Durante el
ascenso y hasta que alcanza la superficie terrestre, el magma experimenta un proceso de
enfriamiento que da lugar a la solidificación o cristalización de los distintos minerales, es decir a la
formación de rocas ígneas o magmáticas. Con respecto a estas últimas se ha descubierto sobre todo
en los países más desarrollados como China y Estados Unidos que emiten más dióxido de carbono (
son países más industrializados) que al inyectar este gas, el mismo reacciona en basaltos (rocas
ígneas) convirtiéndolos en roca calizas.
En conclusión los científicos afirman que este
proceso natural llamado mineralización de
carbono, pudiera controlarse, acelerarse y aplicarse
de modo económico y a gran escala ayudaría a
combatir el cambio climático. Las rocas podrían
eliminar parte de los miles de millones de
toneladas de dióxido de carbono que atrapan el
calor y que los humanos han estado expulsando a
la atmosfera desde el comienzo de la era industrial.
Con el paso del tiempo capturar y almacenar
dióxido de carbono despierta cada vez más interés.
El grupo intergubernamental sobre el cambio climático dice que implementar este tipo de
tecnología es esencial para frenar el calentamiento global. Sin embargo, la idea apenas se ha
diseminado. Hay menos de 20 proyectos a gran escala que operan en todo el mundo en los cuales se
captura el dióxido de carbono proveniente de la quema de combustibles fósiles en centrales
eléctricas o en otros procesos industriales y se almacena como gas bajo la tierra.