Capítulo Tres

Principios Sanos de Enseñanza

¿Cuáles son los principios de la enseñanza Cristiana?
¿Cuál es el valor de Objetivo en la enseñanza Cristiana?
¿Diga las características de un buen Objetivo?
¿Diga en donde nos basaríamos para buscar objetivos?
¿Diga que es una lección Pertinente?
¿Qué es Involucrarse?
¿Qué es Aprendizaje?
¿Que cosa básicas incluye el dirigir a un Discípulo?

La plataforma de la buena enseñanza son las reglas que nos guían para el
proceso de enseñanza en su entidad; el maestro entiende algo de lo que se trata buena
enseñanza y que es lo que pasa para que funcione; reconoce los elementos del proceso
y cómo es que él, como maestro debe tratar con éstos para engranar comunicación
efectiva.
De esto sigue la selección del medio de esta comunicación. El maestro debe
determinar la metodología necesaria para hacer que se entienda sus mensajes.
Finalmente, el maestro está preocupado con suplir su método a través del uso de
buenas ayudas para enseñar.
El orden de esta preparación de enseñanza es importante. Este capítulo
considera los principios de la enseñanza (futuros capítulos considerarán los temas de
métodos y ayudas de percepciones sensoriales.)

EL PRINCIPIO DE OBJETIVO
Se ha dicho que tenemos mucho mejor oportunidad de acertar una marca si la
podemos ver.
Una declaración de objetivo es una definición del maestro de qué es lo que
espera lograr en el proceso de enseñanza. Objetivos claros son esenciales a cualquier
esfuerzo de "enseñanza-aprendizaje". Una declaración de meta no puede asegurar el
resultado, pero es necesario un primer paso hacia esa dirección. Será notado que las
palabras "objetivo" y "meta" es intercambiable en este capítulo.

Características de buenos Objetivos

Hay ciertas marcas que caracterizan un buen objetivo. Findley Edge ha sugerido
que su declaración de objetivo debe ser suficiente breve para ser recordado, suficiente
claro para ser escrito, y suficiente específico para ser logrado. Frases tan generales
como: "Quiero ser de bendición a mi clase", o "Espero enseñar mi clase
adecuadamente", son demasiado ambiguas para ser evaluadas apropiadamente y
tampoco tienen valor como objetivos.
El buen objetivo también será suficiente flexible como para permitir cambios
en una situación de enseñanza. Por ejemplo, puedes anticipar que todos los que
vendrán a tu clase el Domingo serán creyentes, y así, planificas tu lección sin ningún

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énfasis sobre evangelismo. Pero cuando llegas a tu clase te das cuenta que uno de tus
alumnos trajo un amigo que no es creyente. Entonces, allí vas a querer permitir
suficiente flexibilidad dentro de los objetivos de tu lección el presentar claramente el
Evangelio en alguna parte de tu hora de clase.

Ejemplos de Objetivos
¿Cuáles son algunos objetivos generales merecedores para la enseñanza
cristiana? Ciertamente el evangelismo sería primordial. Enseñamos para que otros
puedan aprender la verdad del evangelio y así, puedan poner su fe en el Salvador. Otro
objetivo digno es Compromiso Cristiano. El Apóstol Pablo claramente llama al
cristiano a entregar su vida a Cristo (Romanos 12:1,2), y el maestro cristiano es el
vehículo de este mensaje divino a sus estudiantes.
Otros buenos objetivos en tu lección deberían ser en términos del
comportamiento del alumno. La verdadera medida del éxito en la enseñanza es lo que
sucede en la vida de los alumnos. No es cuan pulido sea el desempeño del maestro en
el salón de clases. Trata de pensar en términos de que es lo que pasa a tu clase cuando
tu enseñas, y mantén los objetivos centrales en tu enseñanza.
Más allá de estos objetivos generales hay también las metas más detalladas de
lecciones individuales o series de lecciones. Por ejemplo, un profesor de niños
Primarios puede seleccionar como su objetivo para un período dado la enseñanza de
obediencia genuina. Un maestro de Jóvenes puede querer que sus alumnos consideren
seriamente El Llamamiento Divino al servicio Cristiano Vocacional. Un maestro de
Párvulos puede apuntar a enseñar a sus niños Cómo Expresar una Oración en Público.

Donde basarnos para buscar Objetivos:

1. Relacionado Conocimiento y Comportamiento.
Algunas “Metas” tienen que ver con el Conocimiento y
Comportamiento Ambos tienen lugar en la enseñanza cristiana, porque
es importante conocer la Biblia y aplicarlo a la vida cristiana. El
maestro debe estar atento a la diferencia y mantener las metas de su
lección claramente definidas.

2. Relacionando Individuo con la Iglesia y Hogar.

Un trato adecuado de los objetivos tocará una variedad de
relaciones. Así, los alumnos tendrán que ver la verdad relacionado a
ellos como individuos en el asunto de salvación o en reconocer el
llamamiento de Dios en sus vidas. En una perspectiva más amplia
tendrán que ver cómo el individuo relaciona con la Iglesia en sus
ministerios localmente y alrededor del mundo. También debería haber
un énfasis sobre la relación del individuo con su hogar. Si estás
enseñando a niñitos, los asuntos de obediencia y amor en el hogar son
primordial. Si estás enseñando a padres, las metas de sujeción, amor y
cuidado de familia llegan a ser vitales.

3. Relacionando a lecciones bíblicas adquiridas.

Es muy común que nuestras Iglesias obtén por hacer lecciones
bíblicas en forma ordenada desde el libro de Génesis al Apocalipsis.
Pero casi siempre se ven buscando o comprando estos materiales que

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 son de mucha ayuda. Pero el gran problema es que utilizan el mismo
objetivo que a veces no tienen nada que ver con la realidad de nuestros
alumnos.

.
Como planificar Objetivos.
El maestro Cristiano buscara establecer al comienzo del año algunas de
las cosas que espera ver logrado en las vidas de sus estudiantes a través de todo el año.
Y de allí, cuando recibe el material que va a enseñar en cada nuevo periodo, puede
desarrollar objetivos más específicos relacionado con el contenido de las lecciones en
su trimestre. Finalmente, en la preparación de cada semana, el maestro debe ser muy
especifico acerca de lo que debe ser logrado a través de su ministerio de enseñanza en
un Domingo dado. El principio general aquí es cuan más inmediato sea la situación de
enseñanza, mas detallado serán los objetivos.
Ejemplo:

Clase: Principiantes Objetivo Anual: Comportamiento del alumno

Maestro: Jaime Velásquez Objetivo Trimestral: Comportamiento en el Hogar
*
Fechas Titulo de Método Ayudas
Lección Meta sensoriales
04-06-00 La creación Cuidar las ( ) () ()
cosas Contar historias Franelografo
11-06-00 La Caída El pecado ( ) Actuación ( ) Utilería ()
Trae castigo
18-06-00 Caín y Abel Debemos de ( ) Contar historias Títeres ( )
Amarnos Y Evaluación ( )

( ) = Escriba los resultados alcanzados: No = N Mas ó menos = M Sí = S

* Solo se presento una parte como ejemplo.

EL PRINCIPIO DE INVOLUCRARSE
La importancia de Involucrarse
Los educadores de hoy están de acuerdo sobre la importancia de llevar al
estudiante a su propio proceso de aprendizaje. El asunto de involucrarse es importante
en el proceso de enseñar a los niños, esencial en enseñar a los jóvenes, e imperativo en
enseñar a los adultos. Involucrarse reconoce el hecho que en el proceso de enseñanza
tiene que haber una ida y vuelta en la comunicación entre el maestro y el alumno. Un
número de maneras que esto se puede lograr se discutirá en la sección de métodos.
Cuando un maestro aplica el principio de involucrarse, selecciona métodos de
enseñanza que desarrollan este principio.

La Motivación de Involucrarse
Cualquier discusión sobre involucrarse conduce inmediatamente al asunto de
motivación. Uno de los problemas más grandes que es confrontado por toda la

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educación cristiana y secular, es este problema de hacer que el estudiante deseé
activamente la enseñanza que tanto necesita. El maestro cristiano tiene más dificultad
con esto que el maestro en la educación secular porque éste último mencionado tiene la
ventaja de motivación externa en la forma de notas, graduación y asistencia requerida.
Aunque tal vez la creación de motivación puede parecer difícil, es esencial al proceso
de aprendizaje.

Los Resultados de Involucrarse

Cuando el estudiante llega al lugar donde reconoce la importancia de lo que esta
aprendiendo, y lo desea poner por práctica en su vida cotidiana, el trabajo del maestro
ha sido inmensamente ayudado. Tal involucrarse conducirá a una practica de verdad
que es la última preocupación del maestro cristiano. También hace que el estudiante
estudie y se prepare fuera de la clase, aumentando drásticamente el valor del tiempo
usado en la clase.

EL PRINCIPIO DE PERTINENCIA
Pertinencia simplemente significa que las ideas que son dadas a la gente deben
ser relacionado a la situación en que se encuentran en el tiempo que escuchan esas
ideas. A esto llamamos "Objetivo-Pertinente". El maestro solo puede estar seguro de
sus logros o su éxito en comunicar la verdad cuando puede ver la verdad operándose en
la vida de sus estudiantes. El maestro que esta contento con repetición memorizada de
hechos inaplicables ha perdido su propósito y proceso de enseñanza verdadera.

Objetivo-Pertinente es la clave al interés.

Cualquier alumno puede aprender mucho mejor si está interesado en lo que esta
estudiando. Sabemos, por recientes entrevistas con jóvenes que han dejado la Iglesia,
que una de las razones precipitantes, era su fracaso en ver alguna relación entre lo que
su Iglesia enseñaba y sus vidas cotidianas. Así que, perdieron interés en lo que la
Iglesia estaba enseñando como en la Iglesia misma.

Objetivo-pertinente es la Clave del Involucrarse

Un buen maestro desarrolla en sus estudiantes un espíritu de indagación
pertinente que les conducirá a estudio auto dirigido. Tal maestro nunca está satisfecho
con una mera transmisión de conocimiento, pero continua estimulando al estudiante
hasta que se levanta de una chispa un pequeño fuego de comprensión e involucrarse
que puede quemarse hasta el aprendizaje verdadero.

Objetivo-pertinente es la clave de Aplicación.

Considera las palabras de nuestro Señor en Mateo 7:20-24 donde claramente
enfatiza la importancia de aplicaciones de la vida en la enseñanza cristiana:
"Así que, por sus frutos los conoceréis. No todo el que me dice Señor,
Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad
de mi Padre que está en los cielos. Muchos me dirán en aquel día:
Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre
echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?
Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores

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 de maldad. Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le
compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca."

El maestro nunca debe dar por seguro que su alumno entiende y sabe como
aplicar los principios de la Biblia a su vida. Para enseñar tal comprensión y aplicación
es la responsabilidad del maestro y presume, por supuesto, que el maestro primero
aprendió a permitir que las Escrituras se muestren en su propia vida.

Objetivo-Pertinente es la clave de crecimiento cristiano.

Un cambio en la vida espiritual, que sea regeneración o santificación, es el
trabajo del Espíritu de Dios y no del hombre, sea quien sea que fuese. Sin embargo, la
responsabilidad del maestro es de relacionar la verdad de Dios tan cautelosamente a la
vida del alumno que el Espíritu de Dios puede entonces hacer de la verdad una
experiencia diaria en su vida.

EL PRINCIPIO DE APRENDIZAJE
Una de las faltas en las Iglesias de hoy es que muchos de los obreros de Dios no
saben como utilizar la Palabra de Dios por sí mismos. Muchos maestros no enseñaron
a sus alumnos a depender del Espíritu Santo y de alimentarse espiritualmente de las
Escrituras.
Aprendizaje es comprensión, convicción y aplicación.
El aspecto más importante del proceso de aprendizaje es tal vez en el asunto de
compresión, convicción y aplicación. El maestro Cristiano siempre esta preucupado
que los niños, los jóvenes, o los adultos a quienes están enseñando de veras entiende el
significado de la verdad de Dios. La memorización de las escrituras y su recitación de
los hechos puede ser de mucha ayuda en el proceso de aprendizaje, pero a la final, la
enseñanza cristiana esta preocupado con la aplicación meditada de los versículos y
hechos
.
Aprendizaje es Solucionar Problemas
Enseñe al Alumno a buscar por sí mismo
El trabajo de un maestro esta involucrado con hacer al alumno un investigador
independiente de algún tema. El propósito no es de solucionar el problema para el
alumno, sino de enseñarlo como tratar sus propios problemas con la Palabra de Dios.
El hecho que estamos tratando con la verdad de Dios no significa que estamos
obligados a métodos transmisibles de comunicar esa verdad. La verdad significará
mucho más al estudiante cuando se le conduce a descubrirlo por sí mismo, en vez de
simplemente haber sido informado por un maestro.

Enseñe al Alumno a solucionar sus propios problemas.

En un sentido, el maestro cristiano es tanto un comunicador de técnicas como lo
es de contenido. Si todo lo que el alumno sabe cuando se va de tu clase es cierta
cantidad de conocimiento que el maestro ha podido transmitir de su mente, el tiempo
que se invirtió juntos no fue usado a su máximo beneficio. Cuando al alumno se le
acaba el conocimiento transmitido, o se encuentra con un problema que de un modo no
encaja al cuadro de esa información, su único recurso será de volver al maestro o a

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otro, para encontrar las respuestas. El maestro no sólo debe estar preocupado de
enseñar al alumno lo que sabe, sino también como lo aprendió.

Enseñe al Alumno a enseñar a otros

El proceso de enseñar a "solucionar problemas" debe iniciar en el alumno los
principio de liderazgo y de madurez cristiana que le capacitará no sólo para ayudarse a
sí mismo, sino que también para ayudar a otros en su crecimiento espiritual. Esto esta
bien presentado en las palabras del Apóstol Pablo al joven Timoteo: "Lo que has oído
de mí ante muchos testigos, esto encarga a hombres fieles que sean idóneos para
enseñar también a otros. (II Tim. 2:2.

Pasos para hacer discípulos.

La escuela dominical neotestamentaria comienza con los perdidos y hace de
ellos buenos cristianos. Nuestro Señor Jesucristo describió el proceso con las siguientes
palabras: “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones... enseñándoles que
guarden todas las cosas que os he mandado” (mateo 28:19, 20. Esto es discipulado.

Hacer discípulos incluye enseñanza.

Puesto que la forma en que se alcanza a los alumnos determina la forma en que
habra de crecer hasta la madurez, el hacer discípulos tiene que ver con todo el proceso
de enseñanza –aprendizaje. Ser discípulo define técnicamente como uno que acepta
y (coadyuva = contribuye) en difundir las doctrinas de otros. Hacer discípulos,
entonces significa hacer que quienes han aceptado a Cristo, progresen y crezcan hacia
la madurez en su fe, de modo que pueda alcanzar a otros y llevarlos a Cristo. Sin duda,
esta es la tarea de la escuela dominical.

Hacer discípulos incluye realizar trabajo de seguimientos.

Hacer discípulos por medio del seguimiento. El maestro de escuela dominical
comienza con el evangelismo, el propósito de enseñar es que todo alumno inconverso
sea llevado a los pies de Cristo, pero la responsabilidad del maestro por su vida no
termino con su salvación, nuestro Señor no se detuvo allí, nos ordeno que
enseñásemos “... que guarde todas las cosas que os he mandado...” Tenían que difundir
sus doctrinas. Si bien esto incluye en las clases la palabra de Dios, gran parte se logra
por medio de contacto personal fuera de del salón de clase.
El programa total de seguimiento tiene que ser tan bien planificado como el
programa total de enseñanza. No puede ser dejado al azar. No traeríamos un bebe al
mundo y un día le daríamos una hamburguesa, otro día leche y luego le dejaríamos sin
alimento durante una semana. Tampoco le exigiríamos que se alimentara por sí
mismo. ¿Podemos imaginarnos, acaso, a un bebe sentado en el piso de la cocina con
latas, un abridor y un paquete de comida congelada? Primero tiene que ser
alimentado y luego tiene que ser enseñado a alimentarse por sí mismo
Ejemplos de seguimiento.
1. Algunas escuelas dominicales cuentan con una clase para enseñar discipulado.
Se le podría decir la clase de lo “nuevos miembros”, pero su contenido
didáctico va principalmente dirigido a impartir a los nuevos cristianos los

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 fundamentos de discipulado y él desafió de serlo. Otros ampliaron este sistema
llevando a la casa de los nuevos convertidos las enseñanzas.
2. Otros grupos tienen una combinación de enseñar e involucrar en el servicio
activo. Un ejemplo; En la clase el joven cristiano estudia como salir y ser un
testigo para Cristo, aprende que pasajes de las sagradas escrituras puede utilizar
para persuadir, como presentar el sencillo plan de salvación, y con invitar al
inconverso a decidirse a aceptar a Cristo (sabemos que al final de todo, el
proceso de aceptar a Cristo es del mismo Señor) Luego sale a visitar los
hogares de los que no concurren a la iglesia, acompañando a un experimentado
ganador de almas.
En esta experiencia de aprendizaje se comunica mucho mas que la
habilidad de ganar almas, se comunica actitudes, tales como el amor a las
personas, la compulsión de predicar el evangelio y la necesidad de usar tacto y
compresión. Deseo y actitud son otros valores que se comunican mejor en el
servicio activo, que muchas veces son difíciles de obtener en la situación
formal de un aula.

Hacer discípulos incluye desarrollar los dones espirituales.

La edición The Ryrie Study Bible define los dones espirituales como “
capacidades que Dios da a los creyentes para que puedan servirlos ” (1 Corintios 1:7,
nota. Estas capacidades actuales pueden acrecentar los talentos naturales con que nació
el creyente, o puede ser suplementaria. A la muy repetida queja de que no tengo dones,
Pablo responde; Cada uno tiene su propio don de Dios (1 Corintios 7:7), Pero todas
estas cosas la hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como
él quiere, una escuela dominical exitosa se preocupa en ayudar al alumno a descubrir
que dones Dios le ha dado, y a desarrollar el uso de ellos. Parte del desarrollo de los
dones será la provisión del maestro para la aplicación de las lecciones y las respuestas a
las mismas, ya que por ejemplo; El dar es uno de esos dones que han de ser ejercidos
por todos los creyentes como arte de la adoración, el maestro procurara desarrollar es
don en sus alumnos, estimulándolos a dar sacrificadamente en respuesta al de una
historia tal como el de la viuda que dio todo lo que tenia. Otro don que en mayor o
menor grado poseen todos los cristianos, es el don de ayudar, sea niño o adulto, la
palabra de estimulo del maestro respecto al uso de dones, puede iniciar al alumno en la
senda de un pleno dedicado servicio cristiano en el área de su capacidad. Pidiendo
sabiduría para saber cuales son los dones que les a sido dados, y luego para mejorar
cuando le sean posible dichos dones, a fin de rendir el máximo para Dios.

Hacer discípulos incluye reclutar para el servicio.

¿Por que nuestros jóvenes no dedican su vida, a la obra misionera? Es lo que se
preguntan a veces, revelando su preocupación, los dirigentes de la iglesia. En
semejante situación, parecen incapaces de ver que los jóvenes no se interesan por lo
cual conocen relativamente poco, el reclutamiento para presentar servicios de las
fuerzas armadas comienzan con un despliegue publicitario. Él ejercito del Señor esta
formados por voluntarios, y con frecuencia el Espíritu Santo utilizan la información
para estimular al creyente a inscribirse voluntariamente. Debemos recalcar nuevamente
que los misioneros, pastores y maestros de Escuela Dominical no son las únicas
propuestas del servicio cristiano. El maestro debe estar siempre vigilante para cuantas
oportunidades presente, de mostrar a sus alumnos las diversas formas en que puede

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servir. RESUMEN. Hacer discípulos, tal como lo leemos en la Gran comisión, es
ayudar a los creyentes en Cristo a crecer hasta alcanzar la madurez, y esta es una de
las grandes metas de la Escuela dominical para cada alumno.

El desarrollo de principios sanos de enseñanza esta en el comienzo del

proceso "enseñanza-aprendizaje". Si fracasamos aquí, estamos gravemente
debilitados en nuestra selección de métodos, recopilación de materiales y en la
ejecución del proceso de enseñanza. En la otra mano, el reconocimiento y práctica de
estos principios nos provee una buena base para comunicación efectiva.

Proyecto de Estudio

1. Usando una clase que actualmente estás enseñando o una situación claramente
definida de enseñanza, escriba objetivos para medio año de enseñanza.

2. Nombra algunas maneras específicas en que los alumnos pueden ser

involucrados en el proceso de enseñanza.

3 Escriba cuales son los principios de la enseñaza y sus valores.

4. Estudie las siguientes historias bíblicas para exponerlos: Isaac, Jacob, y José.

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