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Anales del Musko Nacional de Buenos Au.

Tomo XX (Stír. 8". t. XIII), p. 131 6. 14f.

ARQUEOLOGÍA CHILENA,

DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA


HALLADOS EN TERRITORIO CHILENO

RICARDO E. LATCHAM,

BUENOS AIRES

Imprenta .Juan A. Albina», calle México. 142-2

1910.
ARQUEOLOGÍA CHILKXA

DIVERSOS TIPOS M INSIGNIA LÍTICA


HALLADOS EN TERRITORIO fHILRSO

RICARDO E. LATCHAM,
Mietol.i.) coi resporalieiiie . b.-l . lena! Autlirofiuli ij;icu I [n.-titutc of i Ovnt llrilain
and Irelnnd",

algunos tinos, el distinguido arqueólogo D. Juan B. Am


llaec
brosettipublicó un artículo sobre nn cetro ó insignia lítica de
mando, de tipo chileno, que fué hallado en el territorio argenti
no, en la vecindad de Mendoza, '.
En este artículo cita también otro análogo, descrito por el
Dr, Enrico C-igliuli, de Florencia, procedente del volcán de Chi
llan, y otros dos encontrados en Xcuquen,
El primero, á nuestro saber, que describid une. de- es tus curio-;.):;

objetos, fué el señor José Toruno Ale. lina, on «Los Aborígenes de


Chile , ii, .>i;il \- T¡ií. l"-l ikl . i'.i-. .M- mi. oía este autor que conoce

oti'ii-i dos ejemplares, cnonntrailus en la provincia de Colcbagua.


En nuestros estudios arqueológicos hemos tenido ocasión de
examinar varios nuevos ejemplares, los que |iasainos en seguida
á describir:
N." 1. —
Se encuentra en la colección del profesor Dr. Rodol
fo Lcnz. íué hallado en una yesera, cerua de Tierra Blanca,
Valle de la Ligua. Catri pilco, pequeña aldea del departamento de
la Ligua, provincia de Aconcagua.
Es de piedra tali-osa, de color amarillento, probablemente teni
do por los iiidratus (ie bierro durante sn
permanencia bajo la
tierra.
Xo tenemos antecedentes sobre hallazgo, y por su lo tanto no

fabri-
podemos expresar una
opinión respecto de la época de su

e ación.

por Juan I!. Ambrosktti ; en Anal.


1
lo-igitií! titira ¡Ir uiauífu ilr lipa i-l,i'i-nn,
Muí. Xar. de llocos Aires, t. xi (Ser. ii.", t. iv,!, up '25-32. Buenos Aires, síiü I'JDl.
132 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES.

Se divide esencialmente en dos partes, una cabeza circular, es

cotada y un mango casi cilindrico,


La escotadura y las dos puntas que la encierran presentan la
forma, típica cn estos objetos, de un
pico de loro abierto, siendo
la punta superior, un
poco más sobresaliente que la inferior.
Kn el centro del queda entre la escotadura y el bor
espacio que
de opuesto de la cabeza, hay un círculo saliente, en forma de dis-

Núm. 1. —
Cat&pilno.

co. Este se
repite á uno y otro lado, y parecen representar los
ojos del ave, haciendo más pronunciada la á cabeza de
semejanza
loro.
El extremo inferior del mango está
perforado, evidentemente
para recibir una correa ó trenza.
LATCHAM: DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA. 133

Todo el objeto está bien y simétricamente labrado y pulido; y


demuestra una ejecución artística bastante esmerada.
La parte circular ó cabeza, es más gruesa en el centro, adelga-

Niirn. 2 «.

Lampa.

zándose uniformemente hacia el borde, como se ve en la figura


que lo representa de perfil.
Xo lleva ninguna incisión ó las
grafito, pu_s todas sii|>erficios
son lisas é iguales por ambos lados.
134 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES.

X.° 2 y b.
a Este existe en la colección de D. Armando

Rivera. Fué hallado en la vecindad de Lampa, departamento


de Santiago, durante unos trabajos agrícolas. No tenemos más da
tos sobre sus antecedentes.

Su forma general es igual ñ la del N." 1, pero difiere de éste en

algunos importantes detalles.


El mango, en su extremidad inferior, tiene una ranura en toda
LATCHAM: DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LITIGA. 135

su
que le da un aspecto fálieo, como aquel nota
circunferencia, lo
do por el Sr. Ambrosetti en el ejemplar de Mendoza. La perfora
ción se encuentra en el centro de esta ranura,

El mango tampoco es cilindrico sino algo achatado. Tanto el

mango como la cabeza de este ejemplar están grabados con inci


siones ó grafitos, por ambos lados.
i;n; MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES.

Estos grafitos son combinaciones de líneas y ángulos; un tipo


de ornamentación que encontramos también en la alfarería primi
tiva del país.

La línea ondulada que adorna el mango, lo circunda diagonal-

mente, principiando por un lado en el punto donde se une éste á


la cabeza, y terminando al lado contrario al llegar á. la ranura.
LATCHAM: DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA. 137

Otra particularidad de este ejemplar consiste en


que uno de los

ojos ó discos sobresale de la siiperficie general, y el otro está sim


dos círculos concéntricos.
plemente grabado, con

El disco saliente lleva cinco líneas radiales grabadas, y otra

Num. 4 —
Almahue.

corta que parece fué hecha por casualidad, resbalándose el buril


usado para grabar.
Este la misma clase de piedra talcosa como el ante
objeto es de
rior, pero de un color ligeramente plomizo.
138 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES.

N.^ 3 a y b.

Colección del Museo Nacional de Santiago.
Su está indicada, no hay duda que perte
procedencia no pero
nece al sólo encuentra al Norte del Maule.
tipo que se

pero el mango tiene la


parece á los
no
En forma se anteriores,

Xrim. 5. -San Juan de la Unión.

ranura que se nota en el K.° ■>, y en vez de estar cortado á escua

dra como en el primero, tiene la punta redondeada.


La escotadura y los discos salientes están situados un
poco más
LATCHAM: DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA. 13Í1

abajo que cn los otros dos, sin que por esto se cambie cl aspecto

general,
Ambas caras están mareadas eon grafitos semejantes á los del
X.° Ü, pero son más complicados y han recibido más atención á la
simetría, sin salir de las combinaciones de líneas y ángulos. Kl
mango es
completamente liso y sin grabado alguno,
El material usado para su fabricación es de piedra talcosa, lige
ramente amarillo, igual al del N"." 1.
X." 4. —■
Colección del Museo Nacional de Santiago. Fué
hallado en Almahne ó Larmahue, fundo y casorio del departa
mento de Caupolicán, á la margen sur del río Cachapual.
Xo sabemos donde se encuentra el original; existe en el Museo
solamente un modelo vaciado en
yeso.
Su forma es
algo distinta de la ele los
primeros tres descritos. La
escotadura, en vez de hallarse casi cerrada, es, por el contrario,
muy abierta, y mucho más saliente la parte superior (¡ue la iit-

3i es verdad que estas piezas representan cabezas y picos de


loro, esta variación do forma tal vez se puede explicar por la dife
rencia entre las especies ele esta ave.
'
En el norte del país la más común es el 'ytuiolys.'-iis Jlt/roni
(Child), de color verde olivo con manchas amarillas, ojos con bor
de blanco y el pico encorvado pero relativamente corto. Más al
sur
prsdomina el choroi,
Es ésts de color verde brillante, con
algunas plumas rojas y azu
les en las alas y en la cola, y con el pieo también encorvado, pero

cuya mitad superior sobresale á la inferior en más de 20 mm,

Xo sabsinos si esta
explicar-ion sea la verdadera, pero es una
¡
■■ -

sible hipótesis.
En el ejemplar que estudiamos, los discos están reemplazados
por dos circuios concéntricos grabados en la piedra, Xo presenta
otra incisión ó grafito.
El mango es cilindrico, un poco más d.lgado en su extremo in

ferior, el cual algo deteriorado está perforado, pero no


presenta

X." ó. —
Colección del Museo Nacional de Santiago. Encontra
do en rían Juan de la Unión, fundo de propiedad de D. Federico

Philippi, actual Director del Museo. Este fundo está situado ene

el departamento de la Unión, á unos pocos kilómetros al noroest


de la ciudad de este nombre.
Es semejante en forma al X7.0 4. con la misma escotadura abierta
140 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES.

pero se diferencia de este último


en que los
ojos son representa
dos por diseos salientes, y el mango llova una ranura en su extra
mo inferior, cl cual por otra parte no está perforado. El extremo

debajo de la ranura está redondeado.


Los discos salientes están grabad" >s eon ravas
convergentes, sie
te
por un lado y ocho por el otro; también hay una línea circular,
cerca del borde del disco. No lleva grabado en ninguna otra
parte.
Es hecha de una
piedra diorítica, y bien pulido.

DIMENSIONES

Dimensión 1 ■2 ¡3 4 5

Tnr-n 2e. 195 ti. a

del mar "i 11(1 72 75

Diámt :ro vertical de eabeza 1-14 171! 160 123 l-.il i

¡d transversal de id.. 150 sup. 138 ;np. 135


1S7
inf. SI inf. 04
. 4S
id Jet mango 5ñ x 37 38

¡ti délos discos 31 35 40 2il Htí

Espes r máx, de cabeza . 42 41 80 31 84

id .ntr. lo, aireo, . 4fi 48 l:¡ 34 Sfi

i.l de los bordes 4 7 11 !) i)

Con estos nuevos


ejemplares, sube á siete el número de estos
objetos que conocemos, que se han encontrado en territorio chile
sin contar los dos mencionados
no,
por Medina pero no descritos
por él.
Xada sabe de sobre el
s:1
fijo empleo de estos objetos, pero es
probable que representan algún emblema ó insignia de mando, ó
tal vez tle carácter religioso.
Lo que llama la atención en todos los ejemplares, es que siempre
se
repite el mismo motivo, una cabeza de loro, aun cuando algu
nas de las localidades en
que se han encontrado distan más de mil
kilómetros una de otra,
Esto presupone una solidaridad ó comunidad de ideas mucho
más avanzada que la hallada entre los
araucanos, al menos si
atribuímos á estos objetos un valor cívico ó marcial.
EATCHAM: DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA. 141

Sabido que al tiempo de la llegada de los españoles, los arau


es

canos y otras tribus de Chile vivían en parcialidades, alejadas una

de otra; y que solamente se unían algunas de éstas cuando eran


amenazadas por algún peligro común,
Por otra parte, los toquis ó hachas de piedra usadas por ellos
como insignia de mando, eran
muy distintas de los objetos que
consideramos,
Es posible relegarlos á una época prearaucana, y considerar
como reliquias de un pueblo más culto, de
los cuya existencia se
hallan tantas huellas.
Xo sabemos si en vista de la escasez de antecedentes, se debe

aplicar á estos instrumentos las observaciones respecto de Pillan


y el Thunder-BIrd, hechas por el Sr. Ambrosetti.
Sí, como imaginamos, pertenecen á una época anterior á la
araucana, todavía nos resta saber (pie Pillan formaba parte de su
teogonia: y si el loro era ó no considerado como el ave de la tor
menta,

Igual cosa se nos ocurre respecto al valor fálico del mango, aun
cuando dos de nuestros ejemplares parecen indicar este simbo-

En cuanto á los grafitos, ó incisiones en las superficies no


po
demos decidir si tenían ó no un significado simbólico, pero nos

inclinamos á creer
que son
simples adornos.
Vemos los mismos motivos en la ornamentación primitiva de
casi todos los pueblos, tanto en el mundo antiguo como en el nue

vo, no sólo en los litografitos sino también en los grabados sobre


madera, y sobre todo en la alfarería.

Existe en el centro y sur de Chile otra clase de insignia lítiea,


cuya introducción se debe posiblemente á los araucanos,

Nos referimos á una clase de hacha depiedra, perforada en un


extremo, y usada por los jefes como símbolo de autoridad, ó insig
nia de mando.
Son llamadas toquis.
Difieren unas de otras cn cuanto al material empleado, y en sus

dimensiones, pero todas guardan cierta semejanza de tipo.


Por la mayor parte pertenecen á la época neolítica, y son bien
l-i'2 MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES.

pulidas, pero algunas son de fabricación más tosca, y parecen ser


de un puríodo anterior.
Las supersticiones vulgares respecto de estos objetos nos hacen
creer que fueron considerados antiguamente como símbolos de

Núm. f>. —
Ilunuiajaya. Núm. 7. -
Hallado i ere» de la mina Sama

Ana, entre ConLt>¡.ción y Penco.

poderes ocultos relacionados con las fuerzas de la naturaleza, es

con el rayo.
pecialmente
vara, escribiendo sobre
i '-■■■■ este tema, dice:
LVTCH4M; DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA. 143

«Es curioso que la superstición se


apodere de estas r.liquias y
las conserve por largos años.
«Xos la cedió una anciana de la casa quien, al desprenderse de
ella, hizo esta relación:
"Una noche de tempestad cayó un rayo sobre un roble muy
corpulento y antiguo; la mitad del árbol quedó reducida á cenizas.
Al otro día la gente hizo excavaciones al pie del roble para bus
car la piedra del rayo. Después de mucho trabajar se halló debajo

de una capa superficial de tierra.

X11111. S. —
Chiloe. Nú ras. 0 y 1-). —
Caldera.

Alguno; Toquis del Mando. —


C.il. Museo Xauional de Santiago de Chile.

sDesde entonces la piedra había servido de preservativo contra


los rayos, tan frecuentes en las altas montañas,
«Llama la atención la coincidencia de las supersticiones popu
lares de los pueblos de Europa con el nuestro, acerca de que algu
nas de estas piedras provienen del rayo, y preservan de él.
han
«Importadas por los españoles á las clases bajas de. Chile,
pasado á los mismos araucanos ( ? ). Así pues los huilliches lleva
ban estas hachas á sus
ng'datnn (rogativos) como signo d;l rayo

que manejaban sus divinidades.


144 MUSEO NACIONAL DE UUENOS AIRES.

"Otras reducciones solían emplearlas para conocer la suerte de


un malón por la dirección que tomaban algunas gotas de agua
colocarlas sobre ellas i I ,.

Medina, en susAborígenes, reproduce algunos de estos toqui.1,.


Presentamos aquí algunos nuevos tipos.

Núm. 11. —
Lebu.

X.° 7. Es de tamaño fenomenal; tiene480mm.de largo. 190 mm.

de ancho y 17 mm. de grueso en el centro.


Es hecha de una esquista
pizarrosa, y muy bien pulida. La per-

(1) Historia de la Civilización de Araucania, por Tomás Guevara


(Rector del
Liceo de Temueo). 3 tomos. Santiago, 1898. Tomo 100.
i, p.
F

LATCHAM: DIVERSOS TIPOS DE INSIGNIA LÍTICA. 140

foración bicónica se encuentra en el extremo más ancho, al revez

de lo que generalmente sucede,


Se encuentra en la colección del Museo Nacional, y ¡leva una

leyenda que dice:


"Hallada cerca de la mina Santa Ana, entre Penco y Concep
ción, debajo del cadáver de un indio. Obsequio del Sr. Julio Ditt-
born. 1891».
N." 8. Es procedente de Chiloé. Tiene 250 mm. de largo, 120
mm. de ancho en la parte máxima, y 22 muí. ele grueso. Preseni a

una
perforación bicónica en la parte superior, ó más angosta. Es
de diorita y bien pulida.
N.° 11. Es del mismo tipo. y, como el X." 7, de dimensiones poco
comunes. Tiene un
largo de 4< Y) mm., un ancho de lfíO mm.
y un

grueso de "2(1 mm. Es de granito, y como las demás, perforada y


bien pulida.
X.,0í 9 y 10. Son de Caldera. Esta clase de objeto se ha hallado

muy poco en esa


región, y estos son tipos nuevos.
El primero no tiene perforación, pero en cambio su parte supe
rior se estrecha formando una cintura, circundada
poruña ranura:
termina en una punta casi redonda. Es relativamente gruesa, y
no tan bien pulida como las de la serie anterior.
El largo esde 204 mm., el ancho de 88 mm. y el espesor medio
de 26 mm. La piedra de que se ha fabricado es de granito sie-
uítico.
El X'." 10
tampoco es de hechura muy acabada, y es algo asimé
trica. Tiene lina
perforación bicórnea. Las superficies, en vez de
ser ligeramente cóncavas, como es general, presentan caras planas.
sin que los bordes sean más delgados; solamente en la parte infe
rior se ha gastado la piedra para producir una especie de filo

Es de una roca
porfírica negruzca.
Sus dimensiones son: largo ¿<i0 mm., ancho 99 mm., grueso
15 mm.

Réstanos ahora describir otro tipo de maza, insignia, ó cetro


de piedra, que figura con e! N"." fi.
Rudamente tallada de una roca sienítica, angulosa, y sin nin
gún pulimento, constituye una terrible arma de ofensa.
El mango ocupa los dos tercios de su largo total, abultándose
para formar la maza ó cabeza, que es toscamente cuadrángula!.
La |iarte inferior del mango es ligeramente alisada, al parecer
por el uso.
14G MUSEO NACIONAL DE BUENOS AIRES,

Su largo total
es de 460 mm., el diámetro medio del
mango de
40 mm., y el diámetro máximo de la cabeza de 102 mm.
Esta curiosa pieza existe en elMuseo Nacional, y se halló en la

pampa de Huantajaya, cerca de Iquique.


Xo sabemos si debe incluir entre las insignias de ó
se
mando,
ceremoniales, pero de todo3 modos la presentamos como una no

vedad.

Santiago de Chile, Julio 215 de 1901).

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