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* Antropólogo y Especialista en Antropología Forense de la Universidad Nacional de Colombia. Magíster en Desarrollo Regional de la Universidad
de los Andes. Estudiante del Doctorado en Desarrollo Sustentable de la Universidad Bolivariana de Chile. Docente e investigador universitario.
Asesor de antropología y arqueología en proyectos de desarrollo. Correo electrónico: yuri.romero@uan.edu.co
** Terapeuta psicosocial de la Universidad Antonio Nariño. Docente e investigadora universitaria. Asesora de su especialidad en trabajos comunitarios
y proyectos sociales. Correo electrónico: liliana.arciniegas@uan.edu.co
*** Economista de la Universidad Javeriana. Master en Verificación medioambiental del I.I.E. de Málaga. Magíster en Desarrollo Regional de la
Universidad de los Andes. Docente e investigador de la facultad de trabajo social de la Universidad de la Salle. Correo electrónico: jajimenez@
lasalle.edu.co
Fecha de recepción: marzo 29 de 2006.
11
Fecha de aprobación: agosto 23 de 2006.
Revista Tendencia & Retos Nº 11 / Octubre 2006
El
barrio, ventana para cial superior del que se tiene cuando se es inquilino
comprender una realidad social (Brücher y Mertins, 1981: 35); también representa
ganancia y estabilidad; es un bien que permite ase-
El proceso de conformación del barrio Altos de la Flo- gurar algo en el presente, pensando en el futuro de
rida, ubicado en la comuna seis, al suroccidente de la familia.
Soacha, se inició a comienzos de la década de 1990
en terrenos destinados a la explotación de materiales Durante un decenio, el barrio creció como un peque-
de construcción y conformación de chircales. Hasta ño asentamiento que cumplía fines lucrativos para
ese entonces, el sitio se conocía como “el árbol del su urbanizador, quien ejercía un gran poder local.
amor”, por la presencia de un frondoso árbol que aún Entre 1998 y 2004, con el creciente arribo de per-
existe, visitado por parejas de enamorados. También sonas en situación de desplazamiento a Soacha, va-
era un sitio de “paseos de olla” para algunas familias rios de ellas y ellos empezaron a acudir a Altos de
de la vecindad. Desde allí se observa el paisaje de la Florida para adquirir un terreno donde pudieran
Soacha y Sibaté. construir una vivienda, no sin antes someterse a la
previa indagación y consentimiento del urbanizador,
Como casi todos los asentamientos que se han con- quien vió una buena posibilidad de hacer crecer su
formado al margen de la ley en la Sabana de Bogotá, negocio, manteniendo la seguridad interna e intere-
Altos de la Florida se inició como una urbanización ses propios.
pirata. Las urbanizaciones piratas consisten en frac-
cionamientos ilegales que no cumplen con los crite- Es importante recordar que Soacha ha sido un muni-
rios de planificación del gobierno, ni se rigen por el cipio receptor de personas en situación de desplaza-
trámite de una licencia de urbanismo. La ocupación miento desde el período de la Violencia en la década
tiene la apariencia de una transacción legal: un de 1950 (Guzmán, Fals y Umaña, 1962). Luego, en la
grupo de personas compra lotes en un terreno frac- década de 1990 este municipio empezó a recibir a la
cionado por un vendedor que puede ser el propieta- mayoría de las y los que llegaban a la Sabana de Bo-
rio, pero no tiene el permiso legal para fraccionarlo, gotá. De hecho, los sectores colindantes de Altos de
o bien no lo es, ni tiene autoridad para venderlo (Ro- la Estancia al Sudoeste del Distrito Capital y Altos de
mero, 2003: 38). Cazucá en la comuna cuatro de Soacha, constituyen
un gran asentamiento dividido en pequeños barrios
Según testimonios, un habitante de Soacha, oriundo receptores, con múltiples problemáticas sociales en
de Boyacá, se apropió de facto de las tierras de Altos su interior que complejizan aún más los impactos del
de la Florida para vender pequeños predios de me- fenómeno del desplazamiento forzado (OIM, 2002;
nos de 50 m a personas que quisieran autoconstruir
2 Bello, 2004; UNAL, 2002, entre otros).
sus viviendas, sin cumplir con las normas de pla-
neación del municipio. Los primeros residentes eran La historia de las personas en situación de despla-
personas de muy bajos recursos económicos que vi- zamiento en Altos de la Florida no ha sido diferente
vían como inquilinos en Soacha y Bogotá y desea- a la de varios de esos asentamientos. Quizás el ma-
ban tener vivienda propia. Otros eran inmigrantes yor detalle radica, en palabras de un entrevistado, en
del campo que llegaban recomendados por alguien que el urbanizador “decide quien entra y quien no.
de su confianza. Es conocido que entre los sectores Así se cuida de los infiltrados, que pueden repre-
populares, la vivienda propia representa una forma sentar peligro para su seguridad”. Una vez pagada
de ascenso social y permite adquirir un estatus so- la cuota inicial del predio, cuyo precio ha ido au-
mentando debido a la demanda (en el 2001 se pagaba piso arcilloso es permanentemente lavado por la llu-
en promedio setecientos mil pesos, en el 2004 hasta via. Las cárcavas afloran en temporada de verano y
tres millones) y obtenido el permiso del urbaniza- los deslizamientos de tierra son un factor de riesgo
dor para mudarse, la persona construye su vivienda para algunos hogares; además es un asentamiento
con materiales reciclados o adquiridos a bajo precio: sin lógica de planificación, con casas dispersas por
tablas, cartón, tela asfáltica, láminas de zinc, etc. doquier, la mayoría muy humildes, otras remodela-
Luego, según su disponibilidad económica (la cual das con ladrillos y tejas de eternit.
se basa en el rebusque diario), paga por el derecho a
“colgarse de las derivaciones piratas de la luz”. Gráfica 1: Panorámica del barrio
Altos de la Florida.
En el caso del agua, la principal opción es recolectar
agua lluvia en canecas; eventualmente sube un ca-
rrotanque del municipio que distribuye este servicio,
pero no alcanza para todos. Algunos entrevistados
comentan que casi no hay colaboración entre veci-
nos para recibir el agua; cuando el carro sube son
frecuentes las discusiones entre vecinos porque algu-
nos llenan más canecas, porque el agua no alcanzó
para los de más arriba, etc. Un hecho significativo
sobre esta problemática sucedió en Semana Santa
del 2005, cuando el alcalde encargado de Soacha
(quien reemplazaba al alcalde electo, destituido por
corrupción administrativa), también fue destituido
al comprobarse y difundirse la noticia en los medios En el barrio no hay un parque, iglesia, escuela, ni
de comunicación, que ofrecía soluciones al proble- salón comunal, construido con aporte e interés de
ma del agua en barrios necesitados, entre ellos Altos todos sus habitantes. No hay algo que sea motivo de
de la Florida, a cambio de votos para un copartidario orgullo comunitario como en otros barrios formados
suyo en las siguientes elecciones de alcalde. en condiciones similares. Se han hecho proyectos de
mejoramiento de vías bajo la figura de “trabajo por
Con las aguas negras y los desechos domésticos, la alimentos”, con apoyo de Organizaciones No Guber-
situación no es menos dramática; cada familia busca namentales (ONG).
solucionar como sea, su necesidad. Enterradas por
el barrio se encuentran mangueras que salen de las Algunas y algunos entrevistados afirman que es muy
casas hacia zonas abiertas. El problema es que se si- bajo el sentimiento de pertenencia al barrio y el inte-
guen vendiendo predios, algunos de ellos localizados rés por las actividades comunitarias. Quienes recien-
en los desagües de las mangueras. Los más afectados temente han llegado en situación de desplazamiento,
son las y los habitantes de la zona baja, al pasar por sienten desconfianza hacia sus vecinos: “Por seguri-
sus vecindades las corrientes de agua lluvia que ba- dad, lo mejor es mantenerse encerrado en casa”, afir-
jan mezcladas con lodo y desechos. maba uno de ellos. El sentimiento es mutuo: la perso-
na en situación de desplazamiento arrastra el estigma
Hoy día, una de las características más notorias del de la violencia, “no se sabe con quién tiene cuentas por
paisaje del barrio es la fuerte erosión del suelo. El saldar, quién lo desplazó” (entrevistas, julio de 2004).
Otras y otros entrevistados sostienen que es muy poco años treinta en el siglo XX. A diferencia de éste, no
lo que se puede hacer comunitariamente, porque el se trata de un régimen político sino de un régimen
urbanizador obstaculiza cualquier iniciativa que social o de civilización. No tiene lugar en el Estado
no represente beneficio económico para él. Existen ni es producido oficialmente por él. Se origina en las
pocas vías vehiculares porque, mediante acuerdos relaciones sociales con participación más o menos
clientelistas con políticos amigos, él ha conseguido activa del Estado y siempre con su tolerancia. Se tra-
prestada la maquinaria del municipio para ampliar ta de un fascismo pluralista que también tiene como
vías y facilitar la venta de predios. una de sus manifestaciones el fascismo de la inse-
guridad:
La vida entre semana es rutinaria; pocas personas se
ven en las calles. Cada quien está encerrado en su casa La crisis de la justicia y, en términos generales,
o rebuscando el sustento diario: los hombres se em- de la capacidad punitiva del Estado, determina
plean descargando productos en la plaza mayorista de el deterioro de la representación mental que los
Corabastos, como obreros de construcción o emplea- individuos tienen del Estado y del derecho. Qui-
dos de las galleras y chircales de Soacha; las mujeres zás la generalización de este comportamiento es
laboran en el servicio doméstico, venden productos el resultado del aprendizaje forzoso que los in-
en las calles o reciclan. Una ruta de tres camionetas dividuos han hecho del mismo comportamiento
“destarladas” es el único medio de transporte en Altos estatal y, por supuesto, de los grupos armados
de la Florida. Si no se quiere caminar, a veces hay que que operan en el país y que durante las dos últi-
esperar más de una hora para subir, mientras se llena mas décadas han adquirido una enorme impor-
el cupo en el vehículo de turno; estos pagan al urbani- tancia. Cada vez es más frecuente que los indivi-
zador una cuota mensual por rodamiento. duos justifiquen su comportamiento a partir de
una posición extra-contractual: ¿por qué habría
Los domingos son los días de más actividad en el yo de comportarme de esta manera cuando to-
barrio. Se ve gente y vehículos particulares en las dos hacen lo contrario? ¿no es acaso una viola-
calles; hay negocios de fritanga; venta de cerveza y ción del principio de igualdad el hecho de que
juegos de tejo. Se escucha música a todo volumen. Es se me imponga un comportamiento –legal– que
el día preferido por los vendedores de predios para me pone en desventaja –por ejemplo, en térmi-
atender a las personas. El interesado sube con quien nos comerciales– con los demás ciudadanos?
lo recomienda, para negociar un lote; si tiene los me- (Ibíd 53).
dios llega a algún acuerdo. Este movimiento disimu-
la que el urbanizador maneja las riendas del negocio: En este sentido las relaciones que ha manejado el
decide qué se vende, dónde y quién puede comprar; urbanizador en Altos de la Florida trascienden una
mediante relaciones de poder somete al grueso de la manifestación de autoritarismo con claros fines lu-
población a la lógica de lo que Boaventura de Sousa crativos; también están inscritas en una cadena de
Santos define como “fascismo social”. legalidades e ilegalidades de las que participan po-
líticos locales, funcionarios públicos y agentes del
Juegos de relaciones de poder Estado y que es aceptada parcialmente por los habi-
en el barrio tantes del barrio. Su posicionamiento en el ejercicio
del poder ha dependido de su habilidad para com-
En palabras de Santos (2001), la emergencia del fas- prender y manejar la lógica de los procedimientos
cismo social no refiere al regreso del fascismo de los burocráticos y evadir la norma oficial.
Resulta paradójico que la persona que más fomenta miembros participan ampliamente en las decisiones
las tensiones (el urbanizador), sea a quien se acu- que gobiernan sus vidas, 2) la sociedad en conjunto
de para resolver querellas internas. Las quejas sobre se responsabiliza de sus miembros, y 3) esta respon-
los conflictos entre vecinos e incluso de problemas sabilidad incluye el respeto por la diversa individua-
intrafamiliares, le son dados a conocer sin que real- lidad de estos miembros.
mente actúe para resolverlos. Por lo general juega
una posición ambigua con las partes implicadas para De acuerdo con los entrevistados, hay poca solidari-
que se calmen los ánimos; no apoya alguna clase de dad entre los vecinos del barrio. Por ejemplo, en un
organización social para resolver los conflictos inter- proyecto de “ración de alimentos por capacitación y
nos. Esto ha provocado que la inseguridad por de- trabajo” que una ONG gestionó ante el Plan Mundial
lincuencia común, sea alta: robos en las casas, viola- de Alimentos (PMA), se presentó el caso de personas
ciones de niños y niñas, consumo de droga y alcohol que estando en situación más o menos buena y que
con los subsiguientes conflictos entre vecinos y algu- recibían raciones, prefirieron almacenarlas y que se
nas muertes que han quedado en la impunidad, son les rompieran algunas cosas, a donarlas a familias
problemas que preocupan a la población. más necesitadas (entrevistas, mayo de 2005).
Estos últimos casos, más bien aislados, no son con- El camino a recorrer para los que quieren prosperar
siderados por los entrevistados como una forma de y hacer algo por el barrio, es arduo. Una de las metas
“limpieza social”: a diferencia de lo que se conoce inmediatas es solucionar el problema de las escri-
en Cazuca; por ejemplo, no se habla de batidas noc- turas de los predios. En el 2005 se ofrecía realizar los
turnas o asesinatos selectivos; estarían lejos de con- trámites por más de trescientos mil pesos, pero ¿qué
siderarse como una forma de “justicia comunitaria”. clase de trámites si el terreno no está “desenglobado”
Gómez (2001) señala que la pluralidad de poderes y ante planeación y además el urbanizador no tiene tí-
la fragmentación de la sociedad colombiana, mues- tulos de propiedad? Además han aparecido supues-
tran la existencia de otros sistemas de justicia dife- tos verdaderos dueños de los terrenos que han ofre-
rentes a la estatal, que se manifiestan por ejemplo, cido a cambio de dinero, escriturar los predios. Se
en experiencias comunitarias urbanas en materia de sospecha que es gente que busca obtener dividendos
resolución de conflictos. Así se establecen diferen- a costa de las y los necesitados.
cias entre la lógica estatal y las lógicas sociales no
formales de regulación estatal. Algunos entrevistados manifestaron no saber qué
hacer, porque para adquirir los predios donde au-
Todas estas situaciones han incidido en que con tres toconstruyeron sus viviendas invirtieron todos sus
lustros de existencia del barrio, la calidad de vida ahorros, incluyendo el auxilio que les dio el gobierno
de las personas sea muy baja. No se puede hablar por su condición de desplazamiento. Este problema,
de “comunidad”, ya que en términos antropológicos: de interés para los habitantes del barrio, tampoco
Una comunidad es un grupo de personas que inte- ha sido un motivo de unión y lucha conjunta, aún
ractúan buscando el bien común. La definición con- sabiendo que la posesión de derecho de las vivien-
nota vínculos de identidad (en la diversidad y dife- das les permitiría acceder a beneficios como créditos
rencia) y comunión entre las personas. Para ilustrar para su mejoramiento. Con la legalización adminis-
este punto, de acuerdo con Daly y Cobb (1997): una trativa del barrio podrían obtener partidas oficiales
sociedad sólo podrá llamarse comunidad si: 1) sus para invertir en él.
El barrio es un espacio de vida colectivo; un lugar humanas para el desarrollo, el cual debe referirse
de toma de decisiones, de oposición y confrontación ante todo a las personas y no a los objetos. Este es-
entre personas que comparten lugares comunes y fuerzo no se sustenta en una disciplina particular,
realizan actividades que se entrecruzan permanente- porque la realidad del mundo contemporáneo y los
mente (Maldonado, Romero y Vargas, 2002; Romero, nuevos desafíos obligan ineludiblemente al trabajo
2003). interdisciplinario. En este marco el enfoque de de-
sarrollo a escala humana privilegia a las personas y
Un enfoque para comprender no los bienes que pudieran tener, enfatiza en la sa-
las necesidades en el barrio tisfacción o realización de las necesidades humanas
fundamentales.
Es importante reconocer cómo las sociedades pro-
ducen, articulan y construyen conocimiento en Según este enfoque las necesidades humanas son
relación con sus problemas, la formulación de sus finitas, identificables y comunes para casi todas
necesidades y la búsqueda de soluciones posibles las culturas. Lo que cambia son los satisfactores
en el ámbito local, lo cual es tema de interés des- de esas necesidades los cuales son determinados
de algunos enfoques que critican los propósitos del culturalmente. No existe correspondencia biuní-
desarrollo visto exclusivamente como crecimiento voca entre necesidad y satisfactor: un satisfactor
económico. Entre esos cabe destacar el desarrollo puede ayudar a la satisfacción de diversas nece-
a escala humana (Max-Neef, Elizalde y Hopenha- sidades o a la inversa, una necesidad requiere de
yn, 1986), la economía para el bien común (Daly y varios satisfactores. Las necesidades de acuerdo
Cobb, 1997), la economía de la solidaridad (Razeto, con Max-Neef, se clasifican en existenciales (ser,
1993), la economía para la vida (Hinkelammert y tener, hacer y estar) y axiológicas (subsistencia,
Mora, 2005), la economía ecológica (Elizalde, 1997) protección, afecto, entendimiento, participación,
y el postdesarrollo (Escobar, 1996). ocio, creación, identidad y libertad). En el cruce de
estas dos clases de necesidades, cada comunidad
A partir del análisis crítico de los significados del explicita sus satisfactores.
desarrollo, del conocimiento que produce su imple-
mentación y el modo como se decide el futuro de los Para comprender la realidad de las y los habitan-
países y sus comunidades, tales enfoques rescatan tes de Altos de la Florida, se utilizó la matriz de ne-
el papel que deben jugar las comunidades locales cesidades. Mediante talleres con señoras, algunas
para la construcción de proyectos de vida propios reconocidas como en situación de desplazamiento
e integrales en el contexto de un mundo globalizado y otras habitantes en el barrio hace varios años, se
(Romero y Jiménez, 2004: 98). indagó sobre sus potencialidades y los satisfactores
de sus necesidades. Los resultados se presentan en la
De acuerdo con Max-Neef (1993) es importante hacer siguiente matriz positiva.
entendible y operativa una teoría de las necesidades
Satisfactores de
Ser Tener Hacer Estar
necesidades humanas
Colaboración (entre
Protección Trabajo Cooperar, cuidar Vivienda (propia)
todas)
Luego se indagó sobre lo que inhibe la satisfacción del barrio. Los resultados se presentan en la siguien-
de sus necesidades, teniendo presente la realidad te matriz negativa.
Satisfactores de
Ser Tener Hacer Estar
necesidades humanas
Desempleo, mala
Subsistencia Apatía, egoísmo Aislamiento, imprevisión Sitios inseguros
salud
Violencia, intolerancia,
Protección Agresividad, celos, egoísmo Desempleo Sitios inseguros
celos
Inseguridad,
Falta de interés, Falta de unión, indiferencia,
Participación baja autoestima, miedo, Falta de sitios comunales
apatía desconfianza
intimidación
Falta de derechos,
libertad Miedo, intimidación Falta de unión Injusticia en el barrio
privaciones
El tercer grupo lo conforman ONG que ofrecen capa- manera pasiva lo que se les quiere ofrecer. Incluso la
citaciones para generar iniciativas productivas. Dos mayoría accede a capacitarse o a realizar labores co-
ejemplos sirven para ver los alcances y resultados munitarias porque puede obtener ciertos beneficios
diferentes: materiales inmediatos; el individualismo, la envidia,
el egoísmo y el manejo del rumor mal intencionado
La Fundación Manos Unidas y la Fundación Semi- han sido obstáculos de muchas buenas intenciones
lla y Fruto prestaban un servicio de capacitación en el barrio (entrevistas, julio de 2004).
a mujeres del barrio y sus alrededores, median-
te cursos de modistería, peluquería, panadería, Estas observaciones sirven de base para reflexionar
etc., las incentivaban a montar algún negocio, sobre los alcances reales de la ayuda que por lo ge-
ayudándoles además a conseguir cupos escolares neral se ofrece, en relación con la construcción de
para sus hijos. No se logró concretar algún pro- un individuo social que logre verse a sí mismo y ver
yecto particular que funcione y genere empleo en a los demás como parte una comunidad con pre-
el barrio. tensiones de “construcción de mundo” y que logre
diseñar de manera consciente espacios que resulten
La Corporación Distma estuvo trabajando en el ba- emancipatorios a su realidad actual (Lleras, 2003;
rrio desde el 2002, primero en cooperación con la Romero, Jiménez y Bustamante, 2006).
Corporación Compaz y apoyo de la agencia alema-
na GTZ, para desarrollar acciones de ayuda social ¿Esposible contribuir en
y formación de líderes entre mujeres desplazadas, la reconstrucción de tejido
con el objeto de impulsar iniciativas productivas social?
comunitarias. Como resultado, 20 mujeres se orga-
nizaron en empresa (conocida como Hormipaz) y Por lo general el tejido social se entiende como una
montaron una tienda de ropas en un local que es- red de relaciones sociales, de modo que reconstruir-
taba abandonado y que ellas terminaron de cons- lo es simplemente reconstruir esa red. Cualquier
truir. Luego, durante seis meses, en el 2004, esta persona, así haya tenido que migrar a la fuerza, está
ONG reinició labores con apoyo del Plan Mundial inserta en una red de relaciones sociales en el lugar
de Alimentos, para distribuir raciones entre algu- de reasentamiento; entonces ¿qué es lo que se quiere
nas personas escogidas, a cambio de trabajo en el reconstruir?
barrio. En mayo del 2005 convocó a un nuevo gru-
po para algo similar. Si bien los alcances han sido El tejido social se puede comprender como “un
más amplios que los de las otras ONG, la lectura conjunto de relaciones efectivas que determinan las
de los resultados de Hormipaz muestra, como lo formas particulares de ser, producir, interactuar y
manifestaron algunas de sus integrantes, que el proyectarse en los ámbitos familiar, comunitario,
proyecto productivo inicial no logró ser sostenible laboral y ciudadano” (Romero, 2006: 225); puede
hasta el punto de que cada una vive de otras dife- visualizarse como círculos concéntricos que repre-
rentes actividades. sentan los diferentes entornos en los que se desen-
vuelve la vida de un individuo en interacción con
A partir de este breve recuento podemos decir que la otros. En el círculo más interno se entretejen las
concepción de ayuda percibida en Altos de la Flo- relaciones familiares. Uno de los problemas más
rida ha estado orientada desde una forma de asis- sensibles que allí se presentan, es la violencia in-
tencialismo en que los individuos esperan casi de trafamiliar.
En el círculo o entorno inmediato se entretejen las vital, asumido e impulsado con claros fines de cambio
relaciones vecinales y comunitarias. Algunos de los social. De ahí la importancia de construir pilares como
problemas que allí presentan son el chisme, la envi- la atención integral al ser humano, las redes de apoyo
dia, la falta de respeto por la propiedad ajena, etc. Es comunitario, el fortalecimiento de la acción colectiva y
necesario fomentar valores comunitarios como la so- el apoyo a la autogestión (Romero, Arciniegas y Jimé-
lidaridad, reciprocidad, el liderazgo y respeto por el nez, 2005; Jiménez, Romero y Bustamante, 2006).
otro; en general, pautas de buena convivencia (Ibíd.).
Posibilidades para Trabajo
Luego sigue un círculo o entorno mayor donde se en- Social en el barrio
tretejen las relaciones laborales. En situaciones de
pobreza, este entorno es afectado por el desempleo, En la investigación se siguieron las alternativas de
la mendicidad, el asistencialismo y en casos extre- la antropología contemporánea, que reconocen la
mos la delincuencia. Las pocas opciones de conse- acción humana como centro de atención y se dota de
guir recursos por la vía legal, inciden en el rebusque. la ambición de estudiar a la sociedad en la totalidad
De ahí la importancia de fomentar la autogestión, de su historicidad (Le Roy, 1999); se hizo uso de la
autoorganización, revalorización de los recursos del construcción de historias de vida, asumidas como
entorno y participación en redes de apoyo social, in- una manera de trabajar sobre la organización tempo-
tentando identificar las vocaciones vitales (Ibíd.). ral de las existencias (Godard y Cabanes, 1996: 12) y
se realizó una labor de atención psicosocial entendi-
En el círculo o entorno más externo se entretejen las da como un proceso de acompañamiento personal,
relaciones ciudadanas. Los principales problemas familiar y comunitario, que busca restablecer la inte-
que allí se presentan son el clientelismo, la margina- gridad emocional de las personas que se han despla-
lidad, la exclusión y la ausencia de un pacto social zado, de sus familias, así como de sus redes sociales,
que comprometa a la sociedad en general. La lucha para que se conviertan en agentes y promotores de la
que se libra es, por ejemplo, por el derecho a la ciu- reconstrucción de sí mismos, de su comunidad y de
dad, basado en la legitimidad que tienen los indivi- sus derechos vulnerados (OPS, 2001).
duos como ciudadanos para exigir sobre la ciudad y
manifestar su legítima pretensión de habitarla (cfr. La labor psicosocial mostró en aquellas personas que
Romero, 2003). padecieron el desplazamiento forzado: trastornos de
desorganización del pensamiento y de la conducta,
Volviendo a la pregunta ¿qué se quiere reconstruir?, con incapacidad para abordar y enfrentar situaciones
una posible respuesta es actuar en el entramado de cotidianas y dar solución a sus problemas. Además de
relaciones que se presenta en cada entorno, tener miedos, conformismo y duelos sin resolver y viven-
presente cuáles son las representaciones de la reali- cias del pasado a través de recuerdos y culpas. En la
dad que hacen las y los individuos. En este sistema mayoría de ellas y ellos fue evidente la baja autoesti-
de relaciones es importante considerar la interde- ma y el desempoderamiento para resolver problemas
pendencia entre los distintos entornos para estable- y circunstancias complejas con recursos propios, sin
cer una relación dialógica entre los procesos internos ejercer mayor control de sus vidas y organizarse con
y externos que se dan en el sistema. los vecinos para actuar como comunidad en labores
conducentes a mejorar su calidad de vida. Esta situa-
En este contexto, la reconstrucción de tejido social ción, sumada a la falta de recursos económicos, gene-
puede ser entendida como un proceso pedagógico y ra tensión y da cabida a la violencia intrafamiliar.
de reconstrucción de tejido social, hay que reconocer partir el significado que se le otorgue a la ayuda hu-
y entender la complejidad de las relaciones que se manitaria.
dan entre las personas y potenciar su contribución
mediante la cohesión social y territorial. La cohesión Hoy día, con motivo de la Ley de Justicia y Paz (2006),
social es posible sólo si los distintos actores vincu- se empieza a hablar de justicia restaurativa y garan-
lados a un territorio determinado, establecen rela- tías para las víctimas de la violencia. El interés se
ciones de convivencia que en conjunto apuntalan orienta a dignificar a las víctimas, a reconocer sus
el sentido de identidad y pertenencia. La cohesión derechos vulnerados y lograr acciones afirmativas,
territorial, a su vez, implica la articulación de es- a construir confianza en el orden social y las ins-
pacios, recursos e instituciones, en los mismos tér- tituciones del Estado y, a pesar de las críticas que
minos. ha recibido el texto de la Ley, a luchar contra la im-
punidad. Es paradójico que entre julio y agosto de
Desafíos 2006, personas desplazadas debieron pasar más de
cuarenta días ocupando el parque de Bosa, en Bo-
En el centro de la reflexión sobre reconstrucción del gotá, esperando ayuda por parte del gobierno. Esto
tejido social está el ser humano, el individuo, el su- suscita preocupaciones sobre la problemática: ¿cuál
jeto. A él se debe la investigación social y el trabajo es el cuidado que se tiene hacia ellas y ellos? ¿será
social, para lo cual se requiere establecer una rela- que la problemática va a terminar invisibilizándose
ción cuidadosa, propia o autentica con el otro, que se en el devenir del país, tal como sucedió con aque-
expresa en dejar que se muestre en su verdadero ser, llos desplazados por la violencia bipartidista de hace
tal como lo expresaba Heidegger (1993) en su obra más de cincuenta años que llegaron en ese enton-
“El ser y el tiempo”. A través del cuidado estamos ces buscando refugio, precisamente, a lugares como
permanentemente relacionados con el mundo, con Bosa y Soacha? En alguna ocasión, alguien dijo: un
los demás y con nosotros mismos; estamos compro- pueblo que olvide su historia es un pueblo condenado
metidos con la vida. De la relación de cuidado debe a repetirla.
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