Universidad Catélica del Norte Escuela de Derecho Antofagasta Materiales docentes La administracién el Estado (549-561) Profesor: José Antonio Gonzdlez P. Ajo 2008 £1 material que incluye lo presente recopilaci6n se entiende reproducido para uso exclusivamente didactico en la Escuela de Derecho de Ia Universidad Catélica del Norte, Prohibida su reproduccién y su uso para fines ajenos a los autorizados por el articulo 38 de la Ley ném. 17.336 sobre propiedad intelectual Escuela de Derecho ~ Universidad Catdlica del Norte ‘Av. Angamos 0510, Antofagasta, Chile569 29, LA ADMINISTRACION DEL ESTADO: ‘ADMINISTRACION CENTRAL 1. Caractores generales. El oficio pablico Bl principe, cabeza de la AdministraciGn en cada uno de los reinos, es + ausiliado en los niveles central, territorial y local por asambleas y funcio- harios_diversos. Desde la embrionaria organizacién altomedieval, el siste- ma.administrativo se toma ms preciso y complejo en los siglos siguientes, mediante un proceso en el que czbe apréciar dos earacterfsticas principales. En primer lugar, la superaci6n paulatina del régimen primitivo, acusadamen- py nao te doméstico, donde se mezclan funciones publicas y privadas, y su desplaza- Andi Inlcmo por una AdminisuaciGn propiamentedicha, estos, por un conjunto de si bnganismos y personas con ejercicio y empleo publica, diferencias de quie- resi” nes sirven al monarca en menesteresestrictamente privades, Adem la coe- | istencia conflctiva de esa Administracién regia y de aquella otra organizada {en sus dominios por ls titulares de seforfos, quienes al amparo de concesio- nes de inminidad suplancan la funcién publica, instauran un régimes seftorial Qe pretends evitarel control del monerca,y en éiima instancia independizan {a administracién de amplisimos tersitorios al disponcr de unos funcions- sos seforiales que de hecho sustituyen alos de los reyes. Los colaboradores y auxiliares del monarca son sus oficiales. Nombra- dos por él, ejercen en su respective émbito de acciéa un poder que en tlti- 1ma instancia procede del principe. En principio la retacién del rey con fos oficiales aparece como algo de carécter privado y personal, consecuencia a ‘menudo de los lazos de ficelidad con que determinadas gentes se vinculan al soberano. Razones de amistad, parentesco, retribucin de servicios pres- {alos o tecompensa de esos lzzos de fidelidad, evan al monarea a poner a iertos subditos al frente de los cargos de ia administreciGn central, territorial © local. Con el tiempo, el desempeno de los ofcios ir vertebrindose mediante ‘armas jridico-pablicas, que cHerenciarSn ademas las eompetencias de cada ‘uno de ellos, si bien durante la Bded Media, segin reeverda Gareia-Goallo, ‘cuanto constituye la actividad del rey y sus oficiales queda englobado en el ‘concepto amplio de justicia. El regimiento 0 gobernacion se centra en Wle-550 senna eee, vara cabo la justia. “Lo que no es realizacign de ta Justicia no ineumbe 1 Bstado”, sentencia ese autor. A) ACCESO AL OFICIO En tanto en cuanto cl poder reside en el principe y el otorgamiento de ‘cargos es prerrogativa suya, el monarca designa libremente a los titulares de 10s oficios, No obstante, esa discrecionalidad result6 atenuada en la prictica por las pugnas poliicas, por las exigencias de las asambleas del fino y hasta por el hecho mismo de que, tra la constitucién del Consejo Real, et rey nombra.a os oficiales con su asistencia y asesoramiento, ‘Adem, debido a los principios privadias que informan la concesin de 108 oficios, quienes los poseen propenden 2 considerarlos come una mer ‘ced particular, que forma parte de su propio patrimonio y que, en corse- ‘caencia, pueden enajenar. Tal pasrimoniclizacion det oficio abte el camino ppara que se pueda acceder a él por una via distinta a Ta designacién regia, aprovechando sencillamente las diversas formas de enajenacion que prac” tican quienes hasta ese momento son sus tiulares, ‘Algunos oficios fueron asf objeto de voata, principalmente por parte de los particulares, pero también incluso en la Castilla del siglo XV por perte det rey mismo, quien los oftecis coma Enrique IV al mejor postor Los oft. {ios tteron también arrendados e incluso subarrendados, con lo que Sit san sucesivos beneficiarios de una administrecién piiblica que para los Sbditos resultarfa ms gravesa. Algunas personas accedian ademés al ofi- cio por renuncia de su titular. En consecuencia, asf como en ef arrenda- ‘iento se transmitfa slo el uso del oficio, a renuncia levaba consigo la twansferencia del oficio mismo, bien en beneficio de una instiucién 0 de luna persona concreta y siempre al parecer con cardeter gratuito. ecto reflejo de la patrimonializacidn de los oficios fue la tendencia a ‘considerartos hereditarios, Asf algunos altos cargos, como el condestable, 4quedaron vinculados a oligarqufas nobiliasias, transmitiéndose en el send ‘de esas familias. En un nivel inferior, el local, el cargo de regidor fue olor igado pronto como vitalicio, lo que facilité su transformacign en here fio. Con independencia de que algin monarca realizara nombramienios uplices, al padre y al hijo, con Io que a la muerte de aque, éite seguta ‘0mo titular tnico, Tomas y Valiente explica que los regidores castellanos acostumbraron a ulilizarcierta doble via para dejar el cargo a sus hijos. De tuna parte hicieron uso del procedimicato de renunciar en favor de ellos, De -charon mani del sistema de las lamadas cartas expectativas, pOr las ‘que fos teyes concedan formalmente una expectativa de derecho i! cargo, mediante provision anticipadn que surtia efecto a la muerte det tittlsr. _ADMESETRACION CENTRAL st 1B) EL CONTROL DE LA GESTION 1. La inspecei6n ocasional durante el desempeto del ofito: pesquisas La gain do as otis pics pode se iseaizad drat le vg io del cargo a través de visitas y pexquiras. La pesquisa fue en prin~ Fer aad prc para acarar en el cur de un proceso la verdad Egutos hechos, 0 iniciar el procedimiento mismo, Al aplicarse esta insti *"gida procesal al mundo politico-administrativo, sargen unos eer fos © peaquldores, ve conolan meant i pesguin ings. selon) si ler oficiales hacen dejacion de sus funciones ose exceden SRE esienenaxf por orden del monarea "quando le dan algunos F pombres querells de su oficial, que no usa bien de su oficio, que les face Ge chos agravamients en tales cosas” (Leyes del Estilo, 55). ee Visitas y pesquises fueron cada vez més frecuentes durante el si- {glo XIV, proteptuando las Cortes de Toro de 1371 que algunos “hombres Ee Beene” desigeados por el rey vsitaran fs dstitos para controlar Is ges- 2 tin de adelantados, merinos y alcaldes. Un siglo después, lax Cortes de | Mlelo de 1480 refcren el envio de pesquisdores para juzgar las quejss s0- fire “agravios ¢ fuerzas” de los alcaldes de los adelantamientos, ‘asf como. aon aie inastuacin de ns crregidores, Segin parece, 1s pes Pquisidores de apetecibles corregimuentos Hlegaron & denuucias abusos inc~ “ Tistentes, afin de desplazar l corregidr y quedars ellos en su lugar. Una Fly ees Cons de Teo eran a gues “por taver cus de &}/sauedar por corregidores en los lugares donde fazen |a pesquisa, fazen inft- ES Pee i cahayendequomngun prt pues Ser nombrado en ¢l plazo de un afo titular de} corregimiento que habia ins- pecclonado, 2. La inspeccidn regularmente estatuida; “juicio de residencia” y “purga de taula” rete tng ein Sentie Pabhet Beata vescenca yen la Coron de Aragon pure is SaPO SA dose Hagan ehreto a feto, afin de responder po" + Tea tiacoy Eamne meinenssa sata mia, detalle por los Reyes Catslicos, adguitirénotoriedad, al igual que la visita, al ser exportado luego al mundo amerieano, ne rofesra Lorie Soria. 5 cxgenci de esorsbldad en bes vein ‘ex La pine, descr a os qe hn semper cargos erpeon Bio ii. La spanner as eres yrecomaciones 9 fn equ seas epee log aboehabids. La teces, ipa emsr por condpete, Ves: steele QUE ventajas e incon: a residencia respecto a los antes horadoresprivados, ls secretarios reales, para i redacidn de las eartas y “documentos. Lacstrochsy personal elacidn de reyes y sectetarios confer * Guta éstos, més all desu funci6n administrative, un ereciente grado de po- 1, La Cancilleriacastellana JLa Cancillerfa aparece de forma precaria en los primeros afios del si slo XIL, bajo el reinado de dofia UIrraca, se organiza en la etapa jomedia- {a de Alfonso Vil y 2s reordenada en Ia centuria siguiente por Alfonso X, mocarea con el que tienen lugar, segdn Pérez-Bustamante, las “mayores hovedades institucionales”. A partir de una estructura muy simple, Jerar ‘uizada en el canciller, notarios y escribanos, y en base a unas facultedes precisas de redactar os documentos, autenticarlos y eustodiar el sello real, Ta cancillera vive un proceso de ereciente complajidad. Al separarse tos reinos de Leon Castilla & la muerte de Alfonso VIL, surgieron dos canci- Teriag, adserita la primera a los arzobispos de Santiago y la segunda a Tos de'Toledo, quienes tienda el cargo como meramnente honorifico designan ‘mode de cancillers efectivos a unos delegados suyos. Tal dualismo de-360 Sta seoevat Sapareci6 irs la reunificaci6n de ambos reinos en el sigto XIII, pero la or- ganizacién de ts cancilleia castellana se tomé ms intrineada, maiplican ‘do su burocracia y funciones, Al frente de esta oficina palatina figura el canciller 0 canciller mayon Junto a€l actia el Namado caacitler dela pordad, aquien compete legal, Zar con cl sello de la poridad 0 secreto las carias de la misma natursices, Es harto probabie, como Torres Sanz eres, que la presencia de est canciler ‘special y de e305 documentos también especiales o reservados, no repre, Senten otra cosa que el creciente intervencicnismo regio, o como él micro dice, ta actividad discrecional y soberana de la Corone, ‘Tras el capellin, (as Partides califican al eanciller de segundo offcial ‘deta casa dol rey. Aquél es “medianero entre Dios el rey" y ete entre“ ¢ los omes". Textos més secutatizados de Ia misma época le econoven una ‘preeminencia absoluta que, sin embargo, habrd de eederen los titimos si, Blos ante el empuje de atros oficios, Dependientes dal canciller se encuentran los rotarios mayores, con atribuciones de carécter burocritico aplicadas a supervisar los documentos {utenticarlos mediante ef setlo que ellos custodian, y registrars luego La base de laestructura cancilleresca la forman ls ercribanos, a quienes, pro. piamente correspond la edaccién materia! de los textos, 2 Las Cancillerias aragonesa y navarra ‘ta Cancillerta aragonesa es regida por el canciler, personaje ée singu. lar importancia dado que presidfa tambien el Consejo Real. De cite forman parte 2lvicecanciler, el protonotario o eustodia del sell, elregente yuna ‘eric de escribanos y personal subaiterno. Con la proyeccién mediterrince, 'a cancillerfa serd tambien un érgano principal en cada uno de los terite, trios, Segdn sucedi6 cn Sicilia, Cerdema y especialmente en Népotes, donde ‘1 “gran cancitler” alcanza un notable fuste politico, En Navarra Ia figura del cancller real fue mas bien de carScter honort- fico y recayé en altos dignatarios de la nobleza o clero. Al ser designado, 1 cancilerjura no sellarningsin documento que lieve consigo la enajena: cis del patrimonio regio. Del trabajo efecivo se hizo cargo el personal ‘uxiliar, donde aparecen algunos elérigos, mientras el canciller percibe fon derechos del sello. 3. Los secretarias del rey Los secretaios reales, como personas que desempefian funciones poll: tico-administrtivas y no a modo ée simples colaboradores, surgen en exsernacencanoreat a opel a eee een eee Came soit Berman an dees on gy eno oe Shei su corespondenca propie ots aso pewonale Ms al tis curtaes dota ees sete eiben nombre i as sramer ae cum areman a © froma, fos seretarios desempofan a menudo otros ofiies, Jo que sin © duda facilita la inspeccién y control indirecto del principe. 5 f ghicatnosn cen teat igi = Castilla, los secretarios son a menudo consejeros, es decir, Liters oat eee * aleance: el control de estos cuerpos politicos por el monarca ea site teoctamea ene derma, Exsen simi on la Navas hjoedievelsecretarios de Ta Be ES En cuanto a Catalufa, Tomés de Montagut ha advertido Ia presencia,