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(2) Permutación de dos columnas entre sí. Esta acción se corresponde, al
nivel del sistema de ecuaciones original, al intercambio en cada una de las
ecuaciones de las posiciones entre dos de sus términos, lo cual es obvio que
tampoco afecta a las soluciones.
(3) Sumar a una fila un múltiplo de otra. Debidamente ejecutada, esta acción
se traduce en la eliminación de una de las incógnitas en la ecuación sobre
la que se actúa. Por ejemplo: si uno estuviera interesado en resolver el
sistema {x + y = 0, x − y = 1}, podría sumar a la segunda ecuación
la primera y de ese modo eliminar la incógnita y, pues el resultado sería
2x = 1.
Establecidas así las reglas del juego, procedamos a jugar. Para ello es funda-
mental emprender la cadena de acciones sobre la matriz A de forma ordenada,
entendiendo como tal que el orden en que debemos convertir en ceros los ele-
mentos situados debajo de la diagonal principal es rigurosamente de arriba abajo
y de izquierda a derecha. En nuestra situación esto quiere decir que en primer
lugar hemos de transformar en cero el coeficiente −5 que ocupa la posición (2, 1)
en la matriz A (esto es, fila 2 y columna 1); luego transformaremos en cero el
coeficiente 4 que ocupa la posición (3, 1); para acabar convirtiendo en cero el
elemento −3 situado en la posición (3, 2).
PASO 1: Sumamos a la segunda fila (F2) de la matriz A el siguiente múltiplo
de la primera fila (F1): F2 7→ F2 + (-5) · F1, de modo que A se transforma en
−1 −1 9 −2
G1 = 0 −1 0 −2
4 −3 −α2 −α
y ya hemos conseguido nuestro primer cero.
PASO 2: Para conseguir a continuación un cero en la posición (3, 1), sumamos
a la tercera fila (F3) de la matriz G1 el siguiente múltiplo de F1:2 F3 7→ F3 +
4 · F1, de modo que G1 pasa a ser
−1 −1 9 −2
G2 = 0 −1 0 −2 .
0 −7 36 − α2 −α − 8
pues ningún múltiplo de (F2) sumado con (F3) nos conduce a este resultado
3 Necesariamente hemos de apoyarnos en (F2) para conseguir un cero en la posición (3, 2),
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Ya que todos los elementos situados debajo de la diagonal principal son nulos,
el método ha terminado.
La forma de dirigir los pasos para llegar al final del proceso no es única. Por
ejemplo, para el modelo que nos trae la última etapa podría haberse sustituido
por las dos siguientes:
PASO 3A: Intercambiando las columnas segunda y tercera en G2 se obtiene
−1 9 −1 −2
G3A = 0 0 −1 −2 .
0 36 − α2 −7 −α − 8
PASO 3B: Intercambiando ahora las filas segunda y tercera en G3A se obtiene
−1 9 −1 −2
G3B = 0 36 − α2 −7 −α − 8 ,
0 0 −1 −2
que es una matriz con todos sus coeficientes nulos bajo la diagonal principal.
Las matrices G3B y G3 son, a pesar de su bien distinta apariencia, equi-
valentes (en el sentido en que representan al mismo sistema de ecuaciones y,
por tanto, generan las mismas soluciones). La única precuación que hay que
tener al permutar columnas es que se está permutando también el orden de las
incógnitas. De este modo, la última fila de la matriz G3B (escrita en forma de
ecuación) se ha de leer (−1) · y = −2 y no (−1) · z = −2 (como correspondería
si se hubiera conservado el orden natural de las incógnitas).
Finalmente, para calcular las soluciones del sistema de ecuaciones original
basta con reinterpretar las filas de la matriz de coeficientes G3 (o G3B) en
términos de ecuaciones, de donde resulta
−x − y + 9z = −2
−y = −2 .
(36 − α2 )z = 6 − α
6−α 9(6−α)
Luego ha de ser y = 2, z = 36−α 2 y x = 36−α2 .
Claramente hemos de analizar por separado los casos en que α = ±6, pues
para ambos valores se anulan los denominadores de x y de z.
Si α = −6 la última fila de G3 se traduce en 0 = 12, lo que significa que
el sistema no puede admitir soluciones: es incompatible.
Si α = 6 la última fila de G3 se traduce en 0 = 0, lo que significa que el
sistema responde solamente a las ecuaciones −y = −2 y −x − y + 9z = −2.
En este caso existen infinitas soluciones que vienen descritas a través de
un parámetro λ ∈ R:
(9λ, 2, λ) : λ ∈ R .
Dicho de otro modo, para α = 6 el sistema es compatible indeterminado.
En este caso podemos afirmar que existen infinitos estados de coexistencia
siempre que elijamos λ > 0.
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Finalmente, si α 6= ±6 se tiene que el sistema es compatible determinado,
y la única solución del mismo viene dada por
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x= , y = 2, z= ,
6+α 6+α
donde hemos empleado que 36−α2 = (6+α)(6−α) según dicta una de las
conocidas fórmulas notables. En este caso existen estados de coexistencia
siempre que elijamos α > −6.
En este caso el método de Gauss acaba en un solo paso, sin más que sumar a
(F2) el siguiente múltiplo de (F1): (F2) 7→ (F2) + (-5) · (F1), lo que da lugar a
la matriz reducida
−1 −1 −1
G= .
0 5−α 1
De aquí se desprende que ha de ser
−x − y = −1
,
(5 − α)y = 1
luego
1 4−α
y= , x=1−y = .
5−α 5−α
Por consiguiente, el sistema carece de soluciones si α = 5 y, supuesto α 6= 5,
existen estados de coexistencia siempre que elijamos α < 4.