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PARABOLAS PARA UNA PEDAGOGIA POPULAR S DE M.xTEO & (romana, at ai = Hula origina: da its Aine Vracluecin: Renda Guarre Urinvens edi: 1979, Kateoial Lai S.A. Barcelnia Kapa Pramess evn: 2004, Disestbuciones Voncanuany, 8. Reserwatas todas Jae derechos rontoriue wt be tes ISBN o6ee7ieueste » Editorial Lain, $. A, © Distribuciones Fontamara, S.A. A Hidalgo. 47-b, Calon cel anne Dates, Cososesin, ON00, Mesicn, 1 Tals $05yer 147 yoS 9670 ieee ea eae RUE Prdloga Las técnicas escolares Mreinet han conseguido abrir una firme brecha en el excesiva conformismo en que ia venido durmiendo la tradicién docente. A la escuela, tanto en Francia como en otras paises, se ta ha mante. nido en condiciones de renaz resistencia al cambio, aferrada a rutinas, aspiraciones y nociones culturales empantanadas y muchas veces iniitiles, Cambia la vida social, se modijica y varfa a precipitado ritmo en nues- tro tiempo: pugnan las nuevas generaciones por adap- farse a las transjormaciones de la vida en torno, » akt gquedan, esencialmente soraos e insensibles, los medios oficiales persistentes en su paso tradicional retardacario. Las Jdvenes protestan —Ia protesta de los pequenos es su aversidn a ta escueta—, los jévenes se rebelan cuando pueden, pero tus procedinientos pedagogicos no cam. bian esenciatmente, y persisten. ¢Quién se atreve a in tenter siquiera ef cambio de ese estado de cosas? Men- es prectaras han dejado hermosas teorias y verdades @ to largo del tiempo, y algunos educadores se han airevido a ensayar timidamente cambios en su trabajo. En definitiva, ha quedado de ello poco mds que el in tento; pero ta porfia sigue agui y alld y se manifiesta Freinet, humilde maestro rural, hombre de talento ¥ decision excepcionates, vio claro hace ya medio siglo, ¥ desde su destartaiada escuelita de pueblo se propuso arremeter, y arremetio, contra el descomunal gigante de Ia rutina pedagogica y fa incomprensién generales gPuede uno imaginario ‘en tan desigual batalla? Las vicisitudes de sus comienzos, su trabajo increible, ta singular energia de su dnimo, el recurso a la colabo- racisn con otros maestros como él, que se iban uniendo 4 su palabra y a la tremenda sugestion de su ejemplo, sus luchas en aguel hoyo de animadversién, sus pro grecos y conquistas, se cuentan con mano muestra en el Precioso Vhre de au esposa Nacimiento de una peda Sota popular Cuarenta aiios de labor en ta rea) cantera de Ta es profane de ax téentes pedagdgions El conan een Sina de ejercicios y tarces de lo’ prevtste ona ro lists de idiom para dejar bien bripréso a nese ent sicidn libre, de ta individualicada actividad on slates de trabajo gue el alumno propone y sctpta de Cais studio del medio, de atractina cjercttacin on fichore, ta bibliotena de fa escuela ya Tocumenioe coed habititados como humildes tlleren de dibigos tee briduaes en equipo, sue’ configura an eebee ‘scolar sorprendentemente distin: del hebiteel a, due ha Sido necesario crear para hacerla Poehler ton Fesuitados a gue ha legato el movimtonte Brees ohn colectivay ofrecen estos fe posibtidad ie sana covishong LL Else Frese, waissince une ps acs, 8 miles de escuelas, y con un nuevo espirits que vivifica la tabor, te da sentido y ta exalta, Toda esa gran conguista de! movimiento Frein insistimos-—~ ha surgido de la realidad, de las muchas veces adversa realidad de las escuelas privlicas. Los nuevos materiales y maneras, el nuevo estilo de las técnicas Freinet han nacido y han erecido en un proceso de tanteo, de modificacién, de rectificacién, de compr baciéa en un real trabajo innovadar de muchos. Surgida la teoria de ta practica colectiva, los progresos, las inno: vavivites han sido producto de auténtico proceso cien- tifico en el amplio lavoratorio de ta real vida escolar Ex edificante asistir en el libro de Elise a aguella primera etapa dei Freinet conductor del grupo de tra: bajo que tuvo primero el humilde boletin «l."Imprime AT’Bcole», transformado luego en al’Educateur proleta- rien». Fs sorprendente la sugestion dei firme dnima y gran ejemplo del maestro orientador del espiriiu peda- gégico det grupo, les audaces innovaciones, fos originales instramentos, los inteligentes cambios téenicos..., todo el trabajn wivificada ademas par lo comprensién profi da d2 fa relacion de la escuela con la trama social que ta mantiene, y, para dar un sentido fiumano a ta obra pedagégica, por el deber de la accién politica militante hacia objetivos de bien comin. Los articulos, © trozos de articulos de Freinet de esa etapa de construccion, que reproduce Elise en su libro, son ic. mosas y profun das muestras Gel original y sugestivo pensamiento del gran educador, No creo que haya maestro gue lea esos articulos, surgidos al compas de los dias de fe y entu siasmo del lider pedagdgico, que no se sienta sobreco- gido por aquella brava claridad de espiritu del hombre sinezro y bueno. Tras aguella etapa primera —cerca de veinte afos de incansable labor en que el pequeiie equipo primero se hakis convertido on un movimiento colectivo de mi- les de maestros, en que se cred la CEL,* drgano dei gru Po svoperador, que construia y disiribuia los nuevos materiales y ediciones, Ia guerra vino a silenciarto ¥ 2. CEL: Cooperative de ie Fnvetanna Laiea, Cannes eee 2 hgh aa Ti = = aniquilarlo todo. En el ano 1939, Preinet, mirado sien Pre con odio or ta reazcidn, es internado en de concentracicin Elise escribe: «En tas campos de concentracién de Vichy, a pesar de tantas limitaciones impuestas a hom, bres de espiritu tibre, Freinet halla tiempo y ecasion de repensar profundamente su obra pedagopica. En estas gondiciones Freinet escribio, uno tras otro, sus dos Te bros esenciales, que son ef fundamento de su filosofie, ta educacién dei trabajo y Ensayo de psicologia sen sible, ? que aclaran en ef fondo toda su pedagogia expe. rimetual Son dos obras raras, notables, eseritas en un rincén del campo de concentracién, sin libro ni documento de consulta alguno, con séto unos cuadernos escolares ¥ un boligrafo, El pensamiento se remansa, se adensa 2 8€ hunde en fondos de una cultura de experiencia vivida, de datos y kechos concretos y verdades claras, No de libros, sino de su trabaja y de su trato personal con la naturaieza y los hombres nace la teoria psico- Sociovedagdgica de Freinet. Leyendo estas obras nos @saitan sorpresas que nos incucen « revisar nuestros ideas corrientes. Uno se siente inclinado @ pensar que quied tos educadores, los profesionates de la educecion, kemos adguirido en nuestra formacién una actitud harto simplista 'y presust:osa. Nos han hecho creer, » hemos creido, que puseiamos algo ast como el secreto de ciertas leyes que presiden Ia vida y ef comporte. miento de tos indiviauos, y todo ello con el aval y adorn. no de imponentes términos técnicos —y bien que los Prodigamos, a veces a trache y moche— casi siempre encubridores de vacio 0 de vago contenido sin com prensién humana. Un resto de influencia y dominio es, coldsticos nos ha Hevado a admitir a ciegas —y a re. Petir— palabras ¢ ideas de apariencia cientifica con He entender a medias y por artificio tedrico aguetlo in campo gg Se FHENET. L'educasion du rnvil, Deluca et Nice, Neucha te, Be, Essel de prpeheogie sensible applgué a téducaton, Cannes, 1950 a primera pate’ e entero se ha editda por Delacneey wee Bie! 10 que se siente ex 10 mds intima de su ser, inserizo como dominio de experiencia » de sabiduria populares, Lucgo 08 quedanns como embobados ~si es que la sensibil dad no nos quedd también embotada— cuando vines 4 alguien ajeno al campo det que nos creemos celosos fuardianes, discurrir por él con ese buen sentido que 85 raflejo de honda cultura de Iradicion y de vital e» Prem presenta en Liéduvation de (eaval la figart sugestiva de Wateo, ef campesino de espirita sencitte, due vive ta vida simple » natural de su ferro, arinado deacon ows fc ep ate or tos siglo, El sugesiive Mateo opone su saber firme Yantiguo’ ia superficial cultura de cinder digera Sutgar s¥o me he aventurado més que él —escribe Freinet— en los dédaios de la cultura; he tenido que sufrir ios asclios de wna insinuante autoridad que a veces me enorgulecieron y me extraviaron: yo he participado det Progreso. Pero siempre he vuelto a sentir no sé qué nostalgia de ta sencitiez abandonaca, del buen sentido que 2 habia ido quedando imitil, de la claridad irra. diante det puro manantial. AL mismo tiempo no defe de sondear ta verdad de una cultura que fa escuela y el progreso echaron sobre mi narurateza amasada de noble terruio campesino, y medi la impotencia evidente de los iniciados que han sustiruido la vida compleja y po- derosa por una falsa filosajia de los signos, de las pale. bras y de los sistemas. : la escuela de los sabios de mi puebic, de oirlos hablar de impregnarme de su ritmo, de su sentido de la vide, de sus enseitanzas, para tratar de descubrir, 0 precisar, © prolongar, por encima del atoltadera en gue nos hi abandonod ia eultrs, tos fundamentos originales de une mejor comprensién filosoficn y pelagégica.» El esti, of fondo y ta forma de esta sobiduria de Mateo, ef hombre de campo y de trabajo, resuenan bien gn el dnimo de Freinet, que’ fue pastor, de nino, an si Prevenza de claridades penetradas de aire y sol tim: ios. L’éducation du travail y ef Essai de psychologic ul : an Grraigadas em ta vida y en la esperanea del destino del meditado bien y no sabemos, parque nos exiraviamos buscando ext laberintos de libros mediocres tantes datos Heeribes abn Ta forma mas huumalde de refiexiones fami la intuicion y ef pensamiento cientifico que se dan vB. Nosotros estamos seguras de que on la iectu reflexién de estos dichos de Mateo de’ se ‘urls pede, encontrar claras ideas que quizds adquirieror: hse. nee ¥ confusas. ome ees . oes HERuINi0 ALMENDROS Introduccién Ducante cinco afos he publicado en Ja revista «LE. ducatcur>, érgano pedagégico de nuestro Institute coo: perativo de la Escuela meverna, una pagina de fondo que he intitulado Dichos de Mateo, como recuerdo de Ia rica personalidad del cumpesino-poetftésofo, héroe de mi libro La educacién det trabajo La inspiracién de estos Dichos se halla resumida en el subtitulo ue le he dado al primer capitulo de este libro: «Una pedagogia moderna de sentido comuns. Mi larga experiencia de tos hombres sencillos, de los ios y de los animales me ha persundido de que las jeyes de la vida son generales, naturales y vélidas para todos Ios seres. La escolistica ha complicado peligrosa- mente estas leyes, hacigndonos creer que el comporta miento de los individuos no obedece mas que a datos misteriosos cuya paternidad se atribuye una clencia pretenciosa, una especie de vedado donde las gentes. del pueblo. incluidos los maestros, no Yeren en sbso- huto acce Po1a voafirmar esta experiencia tenemos el ejemplo exaltante de los sabios de todos los tiempos y de todas tas razas que var: siempre mas lejos en Ia comprension dindtniea de los hombres que los autores mas eruditos de sistemas y de manuales contemporaneos. Se les ve marckar con seguridad y certeza por alli donde la falsa ciencia no nos presenta mds que dédalos y atajos. Di- riase que una luz ideal les gufa e ilumina profunda- mente ios aspectos de la vida susceptibles de mov miento. Descubren y movilizan Fucrzas que el ingenio del hombre deberia explotar; y es por eso nor 1 que su bisqueda, 2 través de Tos siglos, es siemze, para los gue buscan ia verdad, un enriquecimiento gue sosiega Fe tratado de detectar algunas de esas vias y de esas fuerzas, algunas de esas claridades cxenciates. En Ja complejidad de los wemperamentos, en el embrollo de Un medio en el que se eruzan y encabaltan Tos 7 83 mas caprichosas, he tratado de hallar algunas de las reglas simples y eternas de la vida Haciendo esto, sin perjuicio de la aportaciér posible y deseabl: de una verdadera ciencia de la educacién, he intentado menos explicar que orientar y orientarme. He puesto a tientas las luces rojas y las luces verdes He experimentado su uso para estar seguro de su buen funcionamiento. He probado sus virtudes metiéndome prudente y experimentalmente por pistas recientemente sedializadas, Muchos de nuesizos aforismos va son familiares a los educadores: no se hace beber al cabailo que no tie. ne sed; es en la fragua donde sc forja «I hecrero; hacer brillar ef sol; ponerse en cabeza del pelotén; dar tiro! no hacer trabajo de soldado; no soltéis las manes an- tes de tocar con los pies; y otros tantos que hallareis como titulos @ lo largo de las paginas de esta modes. 1a compilacion, Las palabras demasiado doctas de una ciencia que nos deja atris 0 que dejamos atrés, las f6rmulas que no eran para nosotros muis que obsesivas encabezamicn. tos de capitulos que habia que aprender de memoria, las sustituimos por Ia simplicidad elemental de tune ac. tuacién que, puesto que es la vida, tiende siempre a aventajarse, hacia un infinito del cual la conciencis que Rosotros tenemos es a la vez nuestro drama y musstra standeza. Devoluemos a la pedagogia esta figura familiar, mezcla de titubeos y de audacias, de temores y de elim. pagos, de arco iris, de risas, y también de ligrimas tn el mismo seno del devenir del hombre. Por otta parte, nuestro mérito esté menos en haber epetido, después de tantos otros, estas verdades de siempre, que en haber impregnado y vivificado con ellas la prictica de nuestras clases. Descamos que con esta lecture nazca en vosotros Ia duda, que titubedis. como osotros en tas encrucijadas + que, en compatiia de mi llares de padres y de educadores que ya han tranqueado Jas luces verdes, os adentréis valiontemente hacia una Feconsideracién progresiva de os fundamentos mismos de educacién, C. Peet 4 I. Una pedagogia de sentido comin Pedagogia del sentido connin ay qestis seguros do gue la mavoria de estas caer ' a. El perro debe cazar, ciertamente, para formarse, Scena: Poy cuando a liebre estA presa, ao es suficiente me EEE ce No peguéis nunca a os animales jovenes. Dejadlos a hacedins golpear por ottos si vs nccesari, pere con ¢1 temor mo conseguiréis jams vuestrs fines, YY los apicultores og dirkn: nada de gestos bruscos que provocan las reaceiones de defensa de los animaies de los que of ocupiis; confianza, bondad, ayule decision Yo of digo que si {uérnmos asi a buscar en le tra dicion popular ls pricticas milenatias del comporta miento de Tos hombres en la educacion de ios animales, Cstariamnos en condiciones de escribic el mis simple 9 el mis seguro de los tratados de pedayogia. Los caminos de verdad ios deliciosos finales de marzo de nuestra infancia, cuando los amentos se aterciopelan en las ramas :ojas de los mimbres, y cuando primaveras y violetas nacian gn Ia sierra hrimeda que Ta nieve acababa de aban iY qué ruido haciamos, nosotros, nuvstras ovelas y nuestros perros, cuando levabamos a brincar a tiavés de los prados nuevos a nuestros animales, cbrios de sol y de libertad! Un buen pastor, creiamos, se mide por el estallido de sus gritos, por los ladridos de sus perros y por la decisién con la que impone un orden y una disciplina de los que es el gran ordenador. Experimentabamas, es cierto, un placer malsano en hacer sentir esta autot dad; una especie de celos inconscientes nos llevaban a contrariar el apetito natural de las ovejas... ;Ah!, te gustaria comer tallos iernos... toma, un bastonazo, jesto te ensefara a emanciparte! Hacia una excepcion, sin embargo, con mi querida Mourette y sus dos cabritillos con pendientes, a los que yo amaba y que me correspondian. Con eilos no tenia hecesidad de mandar; me seguian o bailaban su alegria ae vivir en una deliciosa faréndula, Y si el perro ios hubiera tocado, jcon que emocién tas hubiera defendi- do! jCon qué atencién bajaba para ellos los {rigiles ta- 6 los que roian, y cogla entre los matorrales los brotes idvenes que venian a comer en mi mano! Me centia orgulloso cuando estaban saciados y me va. nagloriaha de no haber tenido que levantar jamés Ia voz, atentes como estaban a mix yestos ya mis preocupa- clones. Dos aciitudes! jDos pedagogias! jPero la Escuela se rie de la humilde experiencia de los pastores! Tiene sus imponentes caminos seculares que escritores, sabios, sdministradores eminentes han dicho sex las caminos de verdad: jNo a la debilidad afectival jMantened la ley! Acostumbrad a vuestros falumnos a obedeces, incluso y sobre todo si la orden dada contraria sus tendencias y sus deseos. Es asi como se forman —si es necesario con bastones y perros— las perscnalidades {uertes y las almas bien templadas. e¥ si fuecan caminos de ilusién y de error? jSi al gin viejo pastor nos probara, por su experiencia decisi- va, que nos agotamos ep vano en una lucha desigual contra la naturaleza y contra Ia vida; si nos persuadi¢- rams un dia de la orgulloce vanielad de esta autoridad formal —material, intelectual y moral-- que da la ma niobra habil y despiadada del létigo! ;Si aprendiéramos de nuevo a acariciar, amar y servir a los nifios de dora- dos bucles, Hevarlos un momento de la mano en los pasos diffciles, bajar para ellos las ramitas que no pue- Gen alcanzar; regocijarnos al verlos saciados por la no- che con una comida libremente cogida en las fuentes generosas que nosotros habremos hecho brotar; si su- piéramos responder a las Ilamadas inquietas de los slum- nos en dificultades y sosegarnos nosotros mismos con los brincos satisfechos de seres que suben hacia jas ci- mas de la cultura por vias que no son obligatoriamen- te calvarios sino que son siempre caminos de vida! {Si stipiéramos ayudar a nuestros nifios a hacerse hombres: El peligro de tos hacedores de nados —¢Me preguntais, dice el viejo pastor, si ¢s un oficio dificil conducir el rebafo desde San Juan a San Miguel, n sin pérdidas ni dafios y asegurando a los animales bue- na grasa y hermoso peiaje? : No més dificil que mane hierba fina o cargar ete Piitandta sacos de espliego en la altarca det asno plicido. Séto que los vie} n , ge los viejos pastores gua: para si los verdaderes secretos d 7 ian por a ian le su éxito y nos des. caminos aceesorios, nos conveacen de que hay a er oraciones y magia alli donde si sentido co- ‘iia les ha sido suficiente, Los cargadores de asnos ava den maliciosamente nudos superfluos a las cuerdas de la albarda para hacernos creer que hay una ciencia de Jos nudes y qe ellos son sus grandes maestros. En todo oficio hay una tecnica : na técnica que dominar, cierta mente. Se la domina no a base de trucos 0 de’ sottile. gios, sino segdn unas le yes simples y sentido. com pues no hay nunc snentre “ia 1 Puss no hay nunca onradiccion entre censiay tecnica or un lado, sentido cord sentido comin ysimplicidad por otra, El loveatigador de talento.es aquél que siempre vm hac ia simplicidad y la vida. ° ¥ estas leyes todo ef mundo les comprenderia si se consiguieta, a pesar de lor thazadores de pistas flee de os hacédores ‘de ruldos, redescubrisise sculpt, como insignias luminosas en las encrucijadas de los grandes caminos del canocimiento. ines Lo que nos estorba y nov retrasa en esta investi cign cientfica de la verdad, no es Ia difeuitad de he problemas a abordar, sino Ia obstinacion eiabolica con 18 y siempre es a Fealizamos nosotros miento y de la Humanidad. Lo que yo s¢ es que existen y que ios que las poseen tienen siempre ese mismo aire de subiduria y de seguridad, de sosiego y de simpli- cidad, lannbién de generosidad, que podkis leer en la fren- te de Ins viejos pastores, en las manos iatuitivas de los randeras, en los ojos profundos del sabio, en Jas deci- siones y acciones de los militantes abncpados, en las pa. labras de las sabios... y en Ja confianea asombrosa de los nifios en cl findero de la vida. ‘ Ej inten jardinero 0 ef ciclo de ta edneacion Enisten jerdineros, que se stan moderaos y cen fcos, empetados en obtener ‘una buene cosecha, sean cueles fuoren las condiciones del suelo, de elma, de sol ode sbono, Pero que gencrosidad de azifre y de Ar3e- Matos, ee insectieidas! St esto no e8 suflciente, escoM devan le wva en un saco protector y coperan la pera founusa verde para. ponerla a resgeardo en una eape de gusta donde madurara a #4 gos’. Evrae se ha salvado y es de buona calidad para el mercado, Pero eta impregnate hasta Tal puro. de t6- Moos que se converte en un veneno para quien To con Sime el drbol cue io n- traido, apotado ¥ datado de masiedo pronto, se saca antes de hater elevado al cielo Sus audabes bra. Enel grano o en 1a planta naciente es donde el jar dines) ‘sabea empleca yaa cutder 9 prepatar el fue ue ha de venir, Si este fruto esté enfermo, senal de que Slgrool que to ha traldo estabe su vor enformo 9 de generado. No es frato lo que hay que tratar, sino la figs gue lo ha producigo, El feute ser To que el suelo, lara el aire ¥ la hoje le habrin hecho. Es a ellos & Gulones se'deba mejorar si se quiere enriqucer ¥ ase. rar Ia oosecha x ‘Si un dia los hombres supieran razonar acerca de la formacion de ous hijos como cl buen jardinero averes de Ta ignevs de su verge, dejarian de seguir a los e8 19 El maestro y of destajisia Durante todo el verano el rebaiio ae ovejas aabia permanccido en’ la. montatia, confiado al eidado del Pastor que no parecia estar desbordada en absolute por le responsabiligad de sus mil animales Por San Miguel ios conducia de nucvo al pueblo. Ca da uno de nosotros escogia su pequetio tebane y tieinta pastures jovenes partian seguidamente, a través de las Fastrojeras todavia ricas en hierba reverdeciente, para hacer el aprencizaje de conductores de ovejas jos habian ensefiado las Ieyes y reglamentos que aplicdbamos al pie de la letra como el poliela que tls carrevers saaponte un castigo —iNo dejeis que fos corderos se aparten del rebaio Pues correis ci riesgo de pendertos! —iTened cuidado de Ios zarzales que esconden ser pientes y de la alfalfa que hinchat —iNo los tengéis del lado de las rocas donde den «embarrancars! Otras tantes preocupaciones obsesionantes que no nos dejaban en paz, ¥ que tampoco la concedion & nies tros animales: Labri, por aqui. Lari, por alt! A poco que hubieramon patito, habriamos,encerado vsjas y corderos para no perderlos de vista, prefirients Maries ls hlerba yf ramayo. «tin hubieage sepes Trabajo de destajista que no comprende nada av del cardcter y del comportamiento de sus animales pue- 20 El pastor partia sosegadamente detras de su reba fio. Una palabra, un grito proferido en el momenso opor tuno y los animales tomaban una direccién cuya meta era cunocida de entemano por el pastor. ;Pasaran por alld abajo...! (Las hallaremos después de nuevo sobre las erestas. Al auuchecer descenderan por las cafiadas...? EI pastor dormia, el perro dormia; les raimales co- mia hasta saciarse en la maxima Libertad, Trabajo de macsira que conduce su rebafio con una ciencia y una f losofia de las que nos haria falta hallar las lineas ef jentes para dar a nuestra pedagogia el sosiego y Ia hu maniilad gue son la marca de lay obras sensatas, Las dguilas no suben por la escalera EI pedagogo habia preparado sus métodos: minucio: samente; habia establecide cientificamente, Alecia, [a es: calera que debia permitir el acceso ¢ as diversos es- tadios del conocimiento; habia medido experimentalmen- te la altura de los peldafios para adaptarla a las post bilidades normsles de Ins piernas infentiles; hala hole. cado aqui y alld un descansillo comodo para tomar alien- to, y la barandilla benevola sostenia a los pequefios. El pedagogo se irritaba no contra la escalera, que ha- bia sido concebide y construida cientificamente, sino contra los nifios que parecian insensibles a su solicitud. Se irritaba porque todo sucedia normalmente cuando él estaba presente vigilando cl ascenso metédico de la escalera, peldario a peldano, respirando en los descan- sillos y agarrados a la barandilla, Pero si se ausentaba un momento, jqué desastre y qué desorden! Solamente seguian subiendo metédicamente, peldaio a peldafio, agarrndose a la barandilla y respirando en Jos descan. sillos los individuos a los que la escuelu: habia marcado: Suficientemente con s% autoridad, come aquellos perros de pastor a las que la vida ha educado para seguir pa- sivamente a su duefio y que sc han resignady a no obe- decer ya mas a su naturaleza de perros {ranqueando sen: deros y malezas. La pandilla de nifios se entregaba a sus instintos y halliba de nuevo sus necesidades; unc subia la escalera a ++] 8 gatas: otto tomaba imputso y wepaba por tos peda Bos de ‘dos en dos, salténcose los descansillos, inehicy hain quienes inentabna sur de capalden a adquislan en ello ciena maestria: Pore sobee ign crebie paradoje, estaban qcliog —“y Crane nto i fara lor ue la ecalern estaba derpasiads ao de eas tvos yaventuras, 7 que, saicand 1a cea Ma ote 2 ls Eanelones,trangueande las bolesstnde hee szrita en un tempo second, mucho mee y eee Bio que por Ia excalera llamada menos 3, as 2rriba, bajaban por ta batalla come gor akan Bara volver a empenar esa ascension seatnon 3 pedgogapersge alos nists geo ob les. cSe ha preguntado si, por szar. su clencia de Men, calefa no sera tna Talia sincta,y ai no Saeed otee ms rapldne y ms saldables ue proceion erie Y por tances; sno iors, sein angen a Snes Hugo, una pedagogia de las 4 Heo, una pedagogta de las dguilas que no suben por la n Il. Hacer brillar el sol Los aventureros de la Kon Tiki El tiempo transcuree; Ia vida os trae sus ensefian- zas ¥ 08 quedais aqui, inméviles y rigidos como si vues tra suerte estuviera fuera de Ios destinos ane pretendéis, preparer. ‘05 parecéis hoy al campesino que sc esfussara en le- vaniar de nuevo el muro de sus cliveres, abandonados baje el pretexto de que en otra época 1a rectitud de las piecras era signo de opulencia. Oa aquel que continus- ra cargando su asno todas las mafianas para ir a la le. Jana granja que, desde mucho tiempo atrés, habia de jado de ser productiva. Como aquelias almas en pena ‘que merodean desamparadas alrededor de los dominios familiares, cargados con la nostalgia de un pasado que no volverd jams. Continudis con vuestras lecciones, ensefidis vuestras mecénieas, contemporéneas del arado y In carretilla, cuando cs de la motocicleta, del aparato de radio, del telégrafo y del teléfono de lo que tendran que servirse yuestros nifios, porque saben muy bien, por experiencia, dud: tes Hama la vida. Vuestros hijos estudian la tabla de multiplicar en un mundo que mafiana seré el de la maquina de calcular. Pierden la paciencia con la caligrafia y mafiana la mé- quina de escribir dara al mAs torpe un éxito ejemplar. Vosotros les decis sensatamente: «Aprended las lec~ hraréis hombres.» Perd ellos tienen el ejemplo obsesivo del boxeador que gana cinco millones en una noche triunfal, de la ve deste contratada por 15 millones semanales y del cantan- te de moda cuyas retribuciones ascienden a 500,000 fran- cos. No es la escuela quien les ha formado, coma tampo- co ha preparado el éxito del comerciante que no apren- id las tecciones —~de lo exal se vanagloria— pero que ha tFunfado por otras virtuses que la escuela ne habia sa 2B bido ti detectar ni cultivar. Es torpe, tal vez, al esctbir y redactar, pero puede pagar a un secretario; no conoce en absolute fos secretos de la contabilidad, pero tiene a su servicio maquinas y contables. iEntonzes! No os contentéis con excusar a Ia escuela argamen: tando gue estos hechos, reales, no son mas que un as. pecto de un desequilibrio social que no es particular de nuestra época. Sin embargo, no habéis sabido recono. cer ni explotar tas aptitudes y el talento de los hombres de negocios. del boxeador, del ciclista y del cantante. Itv cluso habéis estadu a punto d# -descarriarlose, 1o cual es grave. Y esto, sin duda, gracias a que, preocupados por la tradicién con dciwasiada fidelidad, os retrasils, también vosotros, al Ievantar muros ya indtiles, os obs. tindis en seguir caminos que no Hevan a ninguna parte ¥ no sabéis cxaltar las fuerzas nuevas que, mas alla de las méquinas y las mecénicas, dan una medida suprema al hombre. Tal vez ei naber sabido revalorizar los elc- mentos sensibles y los dones que una falsa ciencia que. tla hacernos creer que se habian superado sea una de Tas conquistas mas alentaduras ae nuestra époea: e! pro: fundo sentido del trabajo, Ia audacia, a veces temeraria, florecen de nuevo y se imponen. Los aventureros del Kon Tiki que, en Ia era de las Pesadas embareaciones mecénicas, han aparejade su caravela con sus manos de obrero y que se han !wairido, solos, al Pacifico misterioso para rehacer uss exper cia, verificar una hipétesis y Probar ai mundo — hombre no ha degenerado, son come un simbolo viraje. La Escuela tiene Tiki. también sus aventuresos del Kon La vida se eleva siempre La jornada empezaba, las ovejas habian abani el campo en cl que hablan pasado Is mache, 7 7 ton jag alforjas al hombro, me iba detris del pastor’ plicid y sereno. Tha por senderos cuyo secre 4 19 él canocia. N: - Me sentia inquicto a! no ver a mis ae caer ater ben por a maiia- mi indante ni mas facil, pero es un instinto del ser sl aR ov ae Sterne bars se a a he apes aremos todas de nue- tienen algo ia de las vallas y del cs teh cy nee e animales no bajaran hasta et ea are pag, Ses oe aden. win mas arrib: ; aioe Gav aesttosmifios, os dirie past, son como ove: siempre quieren subir, slo tendreis paz y certidumbe sabe tes, precederles a veces hacia las cimas, Gemasiade pronto, han perdi el sentido de seem como ancianos fatigados, prefieren al ai Seed aneburas y al azul cc" slo cl collar de Te escle iw 5 <1 sebo de ta rem a oe ‘Todos los caminos son buenos cuando las alturas 28 1a historia del cabal que no tiene sea joven ciudadano queria seri se albergaba “Antes de llevar el caballo a tos campos —se dijo— voy adarle de beber. Sera ganat tiempo. Estaremos tren los durante todo ta, ero, ja ver! ¢Es el caballo quien manda, ahora? gcmo} (S'la «ir por el leo st shrvadea So tne ofos i Gereoe mas que para el carapo de elk fa cereanol Desde cuando mancon los eniteles? ‘Vendras a beber, te digo! Yel campesino novato tita de la brida, después va por detrés y golpea & bras past. jAl hat EL anime Seanva.. std nto al abrevadero. "ral vee tiene miedo... 2Y si le acariciara?... Ves, el agus ex Gare, Mejate a nase, (Come! No bobs? YY el hombre hunde oruscamente la nariz del en cl agua del abrevadero. aaa SlWas a Beber esta ve Ei animal resoplay respira pero no bebe. El campesino legs, irenico “Ah eCrees ques ast como se tata atin caballo? Xs mones tonto que un hombre, estbes? No tne ved Lo matarias pero-no le hari beber, Tal ve lo simul; pero el agua que haya tragado te la vomitara. "lrabajo perdido, viejo! —éQué hacer, entonces? bien se ve que no eres campesino, No has compren- dido que el caballo no tiene sed a estas horas de la me fan ‘sino que nosesita alfelia tresea en abundancia Deja'que se sacie de alfalfa, Despigs tended sed 9 To ve. rs gelopar hacia el abrevadero, No esperar a que Te des permit, e acon, incno, que mo fe pong de masiad por medio. cuando haa bebide podras tear del ronal, : ee «Uno se equivoca siempre cuando pretende cambiar e orden da las cosas y baver beber a quien no tiene sed Educadores, estiis en una encrutijada, No 0s obs: granja donde % néis en una apedagogia del caballo que no tene sed a intrépida ¥ prudentemente hacia la «pedagogia del Caballo gue gaiopa hacia ia alfaifa y ei abrevaderoe. Et caballo no tiene sed: jPues cumbiad ef agua def estangue! Hemos vividado un capitulo en fe historia del cabax No que no tiene sed. Tac] mismo momento en que et joven granjero hws dia en | agua del estanque e} hocico det caballo-que-no- {ienesed ¥ que, ibrrr}, el resoplido obstinado del _ani- ‘nal salpicaba el agua como tna cascada alrededor de la ice un hombre que declara sentenciosa- fuente, apare: mente w Pues cambiad el contenido del estanque! To cual se hace inmediatamente, pues era necesario orden de Ins autoridades— hacer beber 2 aquel cabar To-que-no-tiene-sed ‘Prabajo perdido, Et caballo no tiene sed ni de agua turbia ni de gue clara. ;No... tenia... sed! ¥ lo demostré sirpncango el ronzal de les manos del joven granjero ¥ Saliendo al trote hacia el campo de alfalfa ‘De lo cual se deduce que el problema esencial de nuestra educacién sigue siendo, no como querfan ha Temes erect hoy, el acorttenido> de la ensefianza, sino is preocupacion esencial que debernos sentir, esto 5, provocar la sed en el nifio. "tLa calidad del contenido es enconces indiferent Solo es indiferente para los alumnas que han sido educados en la antigua escuela para beber sin sed cual Guier brebaje. Hemos acostumbrado a los nuestros @ con aerar sospechosa, a! principio, toda bebida, a probarla a comprobaria, a construir par ellos mismos'stt propio Leterio y a exigir por todas partes una verdad que no Ssta en las palabras, sino en la conciencia de las justas Telaciones entre jos hechos, los individuos y les aconte- eiraientos No prepacamos @ los hombres que aceptaran pasiva mente un contenido —-ortodore 0 o— sino a los ciuda Manos que, el dia de mafiana, sabréin abordar iu vida com a cficiencia y heroismo ef no y ave podrin exigir que corra en estangue «l agua clara y pura de In sere oe Provocar In sed en el nifio er en ella ja racién & illa, 2 papal do oO le produce una indigestién ae nar solamente los materiales suficientes val ae agua que Je ofrecéis y preficra buscar ii tambien ona pérciga de empo dona rena es 28 ida, cusn- tar en vuesiros alumnos una especie de asco fisiolés!- 9 hacia el alimento intelectual y tal vez taponéis para siemprc ios caminos reales que conducen a las profundi- dades fecundas de! ser Provocad la sed por cualquier vauce. Restableced ios ireuites. Suscitad una llamada desde el interior hacia el alimento deseado. Entonces, los ojos se animaréin, las bocas se abrivan, los musculos se agitarén. Hay aspirs, én y 20 atonia o repulsién. Las adquisiciones se hacen en adelante sin intervencién ariormal por vuestra parte, aun ritmo que no tiene una medida comén con las nor __ mas clisicas de Ia Escuela. * Toco méicde que pretenda hacer beber al caballo que no tiene sed es lamentable, Todo métode que abra el apetito de saber y aguce Ja poderosa necesidad de tra: bajo es bueno, Primero hay que hacer brovar la fuente Los pedagogos son como aquellos nifios que se di- vierten en construir un estanque en el lugar que les pa- rece inas fécil, porque alli no hay ni rocas ni rafces en- marafiadas y tenaces, y pueden, incluso con herramien- tas primitivas, surcar y remover la tierra cémplice, Después, cuando el estanque esta ya construido, se preocupan de conducir el agua hasta él. Tal vez hallarén tan poca, lleg..4 tan difictimente por una pendiente tan débil y correré en hilillos tan languidecientes que la mdi pequéha brizna de hierba la podra desviar de su incier: to cauce Durante este tiempo, ef estanque, lento en ilenarse, se secara, se agrietard, perder cl agua tan parcamente conducida. Por mas gue tapéis y calafateéis, nunca Ilena- réis el estanque mas que con una agua encetiagada y su: cla que no podréis usar jamés, Entonces tendréis que destapar el desagiie y aclarar los depdsitos, a menos que, a fuerza de traer cubos de agua dei manantial cercano, Hencis artificialmente el estanque —lo que hard ilusion durziite un momento, ya que ¢] agua permanecer limpia y slara mientras sigdis carreteando cubos de agua. % Los campesinos de nuestras montaiias saben empezar desde et principio. Proyectan Ja fuente, No solamente el hilo de agua que chorrea en el fondo det valle. sino el otigen mismo donde el agua sale a borbotones desde las Profundidades, fresca y clara, entre las piedras, Cuando el manantial ha sido hallado, cuando el agua surge intrépida y potente, es Fécil acompatiaria haste a estangue nstico que se desbordaré evacuando las aupte eras que la marea habra agitado y expulsado. Terminemos, pues, de dejarnos hipnotizar por esos estanques caprichosos de la observacion, de la mesnosis de las teorias formales fundadas en los paramos desole dios de la vieja escoldstiea. No nos cansemos més tape fanda los agujeros sospechosos, carreteando citos ‘de agus, agitando esta masa informe, mucrta, corrompida Prospectcemos ruestras fuente; busquemos en las pro fandidades Ia oicada que borbotea entre las piedvay acompariemos la corriente y dejémosla correr seneroen. mente por los estanques nisticas. Construiremos entonces nuestros cstanques metédi- cos para corregir y domesticar las riquezas con las que la vida nos haya regado generosamente. Demos tiro Mateo me es, wil, apagado, —~iVa a arrancar en seguidal Coge un trozo de periédico, lo enciende con su me hero, fo acerca al mintisculo agujero —Debe ser dificil encender este trasto. 5 Bs suestidn de tiro. Si es potente, la minima llama €s suficiente. Y ef material importa poco. Como en una chimenca. El mejor papel, incluso Ja madera grasa se ahogan si el tiro no les trae la corien, te vivificadora Preguntad a una vieja ama de casa. Os dité: >-S! vucstro horno no tira, es instil insistir. Os tlona- tis de humo, os ahorargis v no conseguiréis hacer her. Xx [8 olla... Desholtinad la chimenea, separad la rejilla, abrid los respiraderos y ya veréis 30 peraba en Ia estacién, Su gaségeno esta: Lo mismo respecte a vuestros_nifios. Poco importa la eminencia de los maceriaies que co locais en el umbral de su entendimiento, vuestra sabia ingenissidec en disponer ramitas y carbones, vuestra obstinacion en sacudir fa apatia de wna alma inerte, wes: tro ahegy al intentar hacer progresar esta llama que se abstina en apagarse Dudley fret Descubrid y utilizad la Hamada sobera a de Jas necesiades ital, invites y sociales Entonces os bastaré acerear una pecuefia llama que la vida ampliara y alimentaré hasta abrasar al individuo entero, Ese lama devorard todos fos materiales que se presenten, sea cual sea su contextura o el orden de aparicién, iDemos tiro! Klevar buena marcha Los pedagogos inanejan la nacién y la palabra «es fuerzoe como el conductor de asnos mane}a el latigo pa ra empujar a los animales hacia donde no quieren ir y para poner barreras en la entrada de Tos canines que Novan’ a ta alfalfa promctedora, Hay, clertamente, en cualquier vida normal y activa, el jusgo agile tos misculos que es como un motor que leva Buena marcha a concentracion de expety gue ce como el chorve siti de gasolina gue pasa través de los chicés,y sobre todo, el impulso vital que es como la chispn sin in cual ta gosolina mds sica y'el piston mas Sagi estarian para siempre sin vido sh apagis ia chispa, cori la Corriente, no 08 ue gard ns recurso qe clocr vcsio shila vm do tn ona pendiente por donde bajard por su proplo pes Tow Hovde gararo? oben mpsiario pone mento por ia parte liana de Io carretera, y pronto es Tis jadeando a causa de este esfuerzo antinacural y ade- inl expan iHlaced un esfuerzo! eet on tous venta hc al enargen del wd, m0 os parectis mis que al aprendi2 que sube a'su coche, mir Ep raeta a alcanzar—In eumbze de la pendiente-~ y que nu peer be isa el aceerador encaraménciose al volante, como para rir mejor la cuesta, Pero no Ss povocupa le escuchar ef motor que tstépetdieont imo, jadea eomo el covredor Fatigado gue seseata pa fais Um moments para toss alent Er ter ac toreere. sO!ro esfucrz0 mds, maguies nat PAN? & —iDesgruciade! grita el meeanicu. No ira jos asi. Cambia de man fguelal mater dusiiaes Jet at Comba de mates, deja que of motor vulea Ue Bue marche, aprevecha este corto ato pars fas kimas lille aneicataeenaie se eee ati on un buen MOOT, que funcione bien y Jnlciosamente, deberias, sto etuer9o alguns, © heey visiraments 0. ie hasta el ei utes pobres nites, cudntosadolesentes hon sido {Zstentadose’ por une (alsa pedagogin del esfucrss auc a fa sho perder su tine, que fes a secalenads y descompucso los mecanismes, agarotado los pistones toreido las leis y que estan als neapaces esse poy Sf mismos la cuesta, puesio que ya no brota In chiges Las averias de corriente, dic pre las mas delicadas de arvgpian, AM $0" Sem Una nada gue to es todo En el reimiento, et ca i 1, el cargo ebligstorio de petar tas ¢s el prototipo y el simbol: el de soldado. el simbolo del trabajo. de sol Son una docena, sentados al H aoe bere sobre las baldosas dela conan, come een ne tes Gesenzafiados velando al ‘enemigo vencido. bin a pagcipieza al dat Ia sefial, evando todo el mundo esta a punto, ¥ segin la técnica del trabafo de sohdaas cos ‘a patata en ta mano, se vigia al sangentor Cuan idamente una tira de rnondadura: eed canard hasta In proxima ojeadas ” D’SPUES se des de SE buble de tentimenta en el trabajo, Agut se tata ae specie de antirrendimiento, E] que Produce de- leprisa compromete la suerte del grupo que 2 se veré condenado a otra tanda. Es la ley dei medio, de un medio que no esta hecho para el trabajo. Pero el joven militar que, durante toda Ja mafiana, ha - estado pelando patatas al ritmo de soldado, hallaré por la noche a su mujer que le dir amablemente: “Es que hay que preparar lo sopa. —eja... Las patatas me las conozco. No espera la seal. Veriais entonces como las patatas bailan y gitan cn las manos diligentes, y la punta det euchillo que extrae delicadamente los puntos negros, i a qué Fimo! Yalno es trabajo de soidad'a Es wabajo simplemente, tuna actividad que s> emprende con entisiasmo porque es la condicién de nucsira vida, a Ia cual, como cual- quier obra viva, uno se entrega totalmente. Ha sido necesario rauy poco para cambiar en trabajo cficiente la estéril carga cel soldado: tina sonrisa amable, uuna palabra prometedora, un poco de calor en el cora- Zn, una perspectiva sumana, Ja libertad, o mas bien el derecho que posce

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