“UNIVERSIDAD CATOLICA DE SANTA MARIA”

ASIGNATURA: Derecho Civil Vi: Derecho De Familia

PROFESOR: Ana María Amado Mendoza
INTEGRANTES: Gamero Calle, Valeria
Gallegos Coaguila, Jesús

SECCION: “C

“UN COMPROMISO “…HACIA EL ALTAR

1.-INTRODUCION

Los esponsales es una figura jurídica en la cual se establece las promesas de matrimonio
que se hacen los futuros esposos, no se exige una determinada edad para
celebrar esponsales tan solo que sean conscientes del acto en el cual están participando.

Dicha institución tiene antecedentes en el Derecho Romano, Ulpiano en su obra

“Digesto” los definía como “una promesa que ambas partes se dan recíprocamente de
futuro matrimonio”.

En nuestro país se señala esta institución desde el Código Civil de 1852, 1936 y el vigente
de 1984; establecidos en los artículos 239 y 240.

Sin embargo en la jurisprudencia de nuestro Código Civil se encuentran muy pocas

sentencias sobre esponsales, ya que a pesar de existir una promesa firme de realizar el
matrimonio no puede existir una obligación de cumplir ese acto, pues estaría atentando
contra la libertad de toda persona de poder elegir si desea compartir su vida en común
con alguien con la cual antes de cumplirse esa promesa anticipada de matrimonio.

2.- DESARROLLO

Al referirnos al termino “esponsales” y sus antecedentes en el Derecho Romano,

Ulpiano en su obra en Los germanos con Knecht no solo lo conocieron si no que lo
impusieron como indispensable, luego en la edad media la figura asume caracteres
más concretos, los esponsales se celebraban entre el novio y los tutores de la
potestad de la novia con el consentimiento de esta, evolucionaron hasta convertirse
en convenio entre el varón y la mujer con el consentimiento de sus tutores.

Luego en el Luteranismo, los esponsales, incondicionados constituyen siempre

conclusión del matrimonio, mientras que los condicionales son solo promesas del
mismo; en el Derecho Canónico admite como figura voluntaria y para su validez
debe constar por escrito, firmado por las partes y párroco, no es un sacramento si
no un contrato que puede ser fortalecido mediante la constitución de Arras.
Puede disolverse por convenio entre las partes, resolución unilateral, vencimiento
del plazo o cumplimiento de la resolución resolutoria, imposibilidad de contraer el
matrimonio prometido o dispencia pontificia.

En opinión de Maz Arias Schreiber Pezet “Los esponsales no son un contrato ni un

ante contrato, ni un acto preliminar contractual, puesto que no son vinculatorios y
por lo tanto, no están destinados a la celebración de un matrimonio forzoso,
inadmisible en la medida de que la libertad de contrato es de su propia naturaleza y
esencia” (Arias Shcreiber Pezet, 1990)

Centrándonos en nuestra naturaleza jurídica los esponsales es la promesa

recíproca del matrimonio que no genera la obligación legal de contraerlo ni de
ajustarse a lo establecido en caso de incumplimiento, está regulado en el código
civil en el artículo 239.

Si la promesa se formaliza entre personas legalmente aptas para contraer

matrimonio y se deja de cumplir por culpa exclusiva de uno de los promitentes,
ocasionando daños y perjuicios al otro o a terceros entonces está obligado a
indemnizarlos, el plazo para poder accionar es de un año a partir de la ruptura de la
promesa, así mismo se tiene un año para revocar las donaciones que se ha hecho a
la otra persona y en caso que no sea posible de la restitución se tendrá que reponer
el valor de los bienes.

3.- CONCLUSION

Nosotros creemos que los Esponsales es una figura jurídica antigua y que debería de ser
modificada o en todo caso no debería existir en nuestro Código Civil, ya que si bien es
cierto se realiza entre personas que son conscientes del acto el cual están realizando, las
emociones de las personas pueden cambiar hasta el momento de cumplir la promesa
realizada y este acto atentaría contra la libertad de toda persona de poder contraer
nupcias con la persona que realmente quieren para compartir. Por otro lado nos parece
subjetivo la ruptura de los espósales, al no haber un sustento lógico de como se establece
el dolo o culpa por uno de los contrayentes y así la otra parte poder aprovechar y exigir la
reparación por daños y perjuicios ya sean de orden moral o patrimonial e incluso pueda
demandar la restitución de las donaciones hechas por terceros.

4.- BIBLIOGRAFIA