Você está na página 1de 3

51.

La capacidad legal se refiera a la aptitud de una persona para ser titular de derechos y
obligaciones; de ejercer o exigir los primeros y contraer los segundos en forma personal y
comparecer a juicio. La capacidad legal permite crear, modificar o extinguir relaciones
jurídicas de forma voluntaria y autónoma

La capacidad legal engloba la capacidad civil y la capacidad política, supone la aptitud


para ejercitar todos los derechos civiles, sociales y políticos, como el derecho de reunión,
asociación, manifestación, derecho de voto, derecho a ser elegido, etcétera.

52. La capacidad de goce hace parte de la clasificación de la capacidad jurídica, es


aquella capacidad que se tiene por el hecho de ser humanos y adquirir los derechos que
de dicha condición se derivan.
Se adquiere incluso antes de ser concebido, es así como la legislación colombiana es
como ha protegido al conocido naciturus, o el no nacido, que tiene capacidad de goce y
garantía de derechos aun cuando no ha nacido.
Este tipo de capacidad no se encuentra limitada por ningún tipo de condición física o
mental.

53. La personalidad jurídica quizás es el concepto menos intuitivo de la Declaración.


Consiste en el reconocimiento formal de una persona como tal, por el mero hecho
de existir, con independencia de su voluntad, circunstancias, condición social, etc.,
correspondiéndole por ello automáticamente los derechos y deberes que la sociedad
define para todos sus miembros. Por ejemplo, en la antigüedad, en muchas sociedades,
los esclavos, las mujeres, los niños y los extranjeros no disfrutaban de personalidad
jurídica: eran "propiedades" (del amo, del pater familias), o simplemente vivían al margen
del sistema de derechos (en el caso de los extranjeros).

54. La representación es la declaración de voluntad destinada a producir efectos en un


ámbito jurídico distinto del sujeto que la realiza. Es una figura jurídica por la cual lo que
una persona ejecuta o celebra en nombre de otra, facultada por la propia persona
representada o designada por la ley para representarla, y que produce efectos jurídicos
de esa actuación en la esfera patrimonial y jurídica del representado.
La representación en sentido general, es un fenómeno jurídico que implica la actuación de
una persona a nombre de otra, es una de las instituciones más utilizadas y uno de los
mejores inventos jurídicos, ya que a partir de ella, una persona capaz adquiere el don de
la ubicuidad, es decir, puede romper con esa barrera física, la cual no le permitiría estar
en dos lugares apartados a la vez para celebrar actos jurídicos, permitiéndole celebrar el
mayor número de ellos y obtener los mayores provechos posibles al celebrarlos, haciendo
que no sufra ningún menoscabo, en esa libertad contractual que tutela el Derecho.
55. ARTÍCULO 1o. OBJETO DE LA PRESENTE LEY. La presente ley tiene por objeto la
protección e inclusión social de toda persona natural con discapacidad mental o que adopte
conductas que la inhabiliten para su normal desempeño en la sociedad.

La protección de la persona con discapacidad mental y de sus derechos fundamentales será la


directriz de interpretación y aplicación de estas normas. El ejercicio de las guardas y consejerías
y de los sistemas de administración patrimonial tendrán como objetivo principal la rehabilitación
y el bienestar del afectado.

56. La culpa es una una omisión de la conducta debida, destinada a prever y evitar un
daño. Se manifiesta por la imprudencia, negligencia, impericia o inobservancia de
reglamentos o deberes.

57.
 La culpa consciente. Es aquélla en que el resultado es previsto pero no deseado por el sujeto
activo
 La culpa inconsciente. Es aquella en que el resultado no ha sido previsto ni ha sido querido.
 Por la intensidad se distingue entre la culpa lata que es aquella en que el resultado dañoso
podría haberse previsto por cualquier persona, la culpa leve que es aquella en que el resultado
hubiera sido previsto por persona diligente y la culpa levísima donde solo una diligencia
extraordinaria hubiera podido prever el hecho.

58. Dolo es el engaño o fraude llevados a cabo con la intención de dañar a alguien.
La palabra dolo es de origen latín dolus que significa 'fraude' o 'engaño', se relaciona con
la intención de producir un daño mediante la acción u omisión.
En el área jurídica, el dolo es la voluntad libre y consciente de practicar una determinada
conducta, con el fin de lograr el objetivo, conducta y resultados prohibidos por la ley.

59.
Dolo directo o de primer grado, Suele identificarse con la intención o propósito. La
finalidad del sujeto que actúa con dolo directo coincide exactamente con la producción del
resultado (p. ej., un terrorista quiere matar a un coronel. Para ello pone una bomba lapa en
su automóvil).

Dolo indirecto o de segundo grado, La finalidad del sujeto no es producir el resultado,


pero éste se asume como consecuencia necesaria de lo querido (p. ej., el terrorista no
quiere matar al chófer del coronel, pero sabe que para conseguir su propósito –matar al
coronel con la bomba lapa‐ tiene que producir inevitablemente también la muerte de su
chófer).

Dolo eventual, Es la forma más débil de dolo, ya que en estos supuestos tanto el elemento
cognoscitivo como el volitivo aparecen menos intensamente. La finalidad del sujeto que
actúa con dolo eventual no es producir el resultado, pero reconoce la posibilidad de que
éste se produzca y no obstante sigue actuando (p. ej., el terrorista sabe que la bomba lapa
puede estallar en mitad de la calle matando a peatones –resultado que puede o no
producirse y que no desea‐, pero a pesar de ello coloca la bomba).

Você também pode gostar