Las 6 fases de un emprendimiento, desde la idea hasta el negocio.

Iniciar un emprendimiento por primera vez puede ser algo muy intimidante. El emprendedor inicia
su emprendimiento con mucha motivación y ánimo pero a la vez con mucha incertidumbre, sin
saber qué le espera y cuáles serán los próximos pasos. En muchas ocasiones había pensado, que
de haber sabido al inicio todo el esfuerzo, tiempo y dinero que se tomaría levantar este
emprendimiento, quizás no hubiese iniciado, pero siempre recuerdo las palabras:

“No vayas por donde te lleva el camino, sino ve por donde no hay camino y deja un rastro”.

Sí, hay incertidumbre al emprender, pero en mi experiencia he notado que todo emprendimiento
pasa por un proceso específico, un patrón pudiera decir, que inicia en la idea y sigue hasta lograr
crear el negocio, su crecimiento y su futuro éxito. Debajo enumero las 6 fases que he podido
observar en todo emprendimiento exitoso.

1. La idea

El inicio de todo emprendimiento es la idea, ¿qué problema hemos identificado y qué queremos
resolver? Sí, todo emprendimiento debe iniciar con la identificación de un problema, no importa
qué tipo de negocio sea. ¿Por qué? porque esto es lo que le da la razón de existir, ¿quién quiere
comprar o utilizar algo que no necesita? La idea debe ser una solución a algún problema tangible,
a un problema que las personas estarían dispuestos a pagar para resolver.

No importa el negocio, puede ser que sea una innovadora idea para ayudar a identificar zonas de
mayor en taponamientos en el transito como WAZE o quizá puede ser que estés iniciando una idea
innovadora de un modelo de como servir mejor comida, más rápida y barata en tu restaurante,
como fue el caso de Taco Bell. El caso de Taco Bell es muy interesante porque en realidad la
innovación de ellos no está en vender Tacos, eso lo hace cualquiera, sino que ellos crearon un
sistema de máquinas y herramientas que le permite vender millones de tacos de una forma
rápida, con poco personal y consistente, o sea siempre recibes el producto de la misma forma.

Así que, no importa cual sea tu emprendimiento, antes de iniciar, evalúa tu idea y asegúrate de
que esta, realmente resuelva algún problema.

2. El plan

Luego que ya se ha identificado el problema y se ha generado una idea de como resolverlo de una
forma eficiente, sigue la fase de planificación. En esta fase se identifican los pasos a seguir para
implementar la idea. Surgen preguntas como, ¿Para quiénes estamos resolviendo el problema?
¿Cómo podemos llevar a cabo esta solución? ¿Qué fondos vamos a necesitar? ¿Qué cosas debo
tener pendiente? ¿Ya existe alguna solución parecida en el mercado o ya alguien a resuelto el
problema de una forma más eficiente?

Casi siempre en la etapa de planificación se hacen muchas suposiciones, yo creo o entiendo que
esto debe ser así, ya que hasta que no se ponga la idea en práctica en clientes reales no se sabe si
nuestras hipótesis son reales o no. Por eso yo aconsejo no perder mucho tiempo en hacer planes
extensos.

Evita a toda costa caer en la parálisis del análisis, que es la etapa donde se quedan el 50% de los
emprendedores primerizos, 5 años madurando una idea y nunca logran ejecutarla. Si estas en este
estado, sal y pronto; este estado es peligroso, ya que te da una falsa esperanza, tienes la
esperanza de que algún día vas a salir con tu proyecto y serás exitoso pero pasa el tiempo y nunca
lo haces.

Si estas actualmente en esta etapa, inicia a ejecutarla como esté, leí una vez:

”Una idea vale 1 dólar, bien planificada vale 10 dólares, bien ejecutada vale millones de dólares”.

3. El prototipo

Luego que tienes la idea y has planificado como ejecutar la solución, es hora de crear la
herramienta, sistema, proceso o solución. Este es el momento donde el emprendedor se ensucia
las manos, es donde hace una versión de esta solución que puede ser probada y validada a ver si
en realidad logra resolver el problema. Hay un termino que obtuve desde el libro: “The Lean
Startup” de Eric Ries, que él denomina Producto Mínimo Viable o MVP por sus siglas en ingles.
Este es el prototipo y a parte de que nos permite ver la idea funcionando en una escala menor,
también nos ayuda a validar la idea.

Y no importa que tipo de emprendimiento sea, esto se aplica desde servicio, tecnología, comida o
hasta fabricación de algún producto. En tecnología pudiera ser una versión mínima de una
aplicación o software, en un restaurante o café pudiera ser la forma de preparar el alimento o una
receta y en la fabricación de algún producto pudiera ser la combinación de materiales para lograr
un mejor funcionamiento o un producto de mayor calidad.

Es importante que ya tengas una versión funcional de tu idea y evita el querer saltar el prototipo
para hacer algo completo y exhaustivo, ya que aun no sabes si realmente va a funcionar o si
realmente la gente lo va a usar. Podrías invertir mucho tiempo y dinero en producir algo muy
bonito pero que quizás la gente no quiera o necesite.

4. Las iteraciones

Una vez tengas un prototipo funcional de tu idea, prueba, prueba, prueba y con el resultado de tu
observación, mejora. Es casi imposible lograr hacer un prototipo y que resuelva el problema o se
ajuste realmente a la realidad en primera instancia. Si fuese así entonces el emprendimiento sería
más como una lotería y menos como un proceso.

En esta etapa es que realmente se va mejorando el prototipo, adaptándolo a las necesidades

reales del mercado o a tu negocio. Comparemos este proceso con el de un sastre o una modista,
aun a pesar de que eliges la moda o el estilo de como deseas el traje o el vestido (Idea), luego de
que te toman las medidas de cada área de tu cuerpo (Planificación), el sastre o la modista inicia a
fabricar la prenda (Prototipo), pero al final debe de entallártela y hacer los últimos ajustes antes
de concluirla y entregarla (Iteraciones).

En esta etapa es muy importante poder medir el resultado a medida que se van haciendo los
ajustes. La retroalimentación es crucial y no debe de tomarse como una crítica de parte de los
clientes, sino mas bien como una forma de validar qué cosas funcionan y qué no, para luego hacer
los ajuste de lugar. La idea es poder iterar la mayor cantidad de veces posibles antes que se agote
el dinero. Mejorando en cada vuelta la herramienta, producto o solución.

5. Expansión

Luego de pasar del prototipo y las iteraciones que hacen la herramienta, producto o solución final,
ya con la idea validada y siendo utilizada por un grupo de clientes a quienes les resuelve de forma
exitosa el problema, entonces y solo entonces entramos en la etapa de expansión. En esta etapa
se enfoca en como llevar la herramienta, producto o solución a la mayor cantidad de necesitados
posibles.

Uno de los problemas que cometen muchos emprendedores es salir con un producto, servicio o
solución aún deficiente, o sea sin haber primero agotado completamente el proceso de iteración,
e invertir un monto de dinero haciendo publicidad para venderlo. Esta es la forma mas fácil de
echar dinero de publicidad en la basura, por que aunque la publicidad atrae a muchas personas, es
muy posible que estas terminen abandonando el producto o servicio sin razón aparente y lo peor
es que terminan haciendo malos comentarios de la herramienta, no a ti, sino a otros potenciales.

Debes agotar el proceso de iteraciones de mejoras para que una vez tu herramienta, producto o
servicio haya resuelto satisfactoriamente el problema a tus primeros clientes, entonces inviertes
en llevar esta misma solución a otros potenciales que tengan el mismo problema que tus primeros
clientes. ¿Le encuentras sentido?

6. Innovación

Una vez una idea haya llegado a la etapa de expansión ya es un negocio funcional. Una vez llegue a
esta etapa debe de ahora enfocar su esfuerzo en cómo mejorar la herramienta, producto o
solución a través del tiempo. Aunque un negocio que este alcanzando éxito en la etapa de
expansión, sino no innova, pronto dejará de ser relevante o se encontrará con otros competidores
que han podido identificar el nicho y la solución y que están dispuestos a invertir más dinero en
tomar el mercado.

El no innovar fue lo que le paso a grandes productos como Hi5 y MySpace que aunque dominaban
el espacio de las redes sociales terminaron bajo los pies de Facebook, una empresa que surge del
dormitorio de una universidad, en la mente de un estudiante que no tenía ni el dinero ni los
contactos para competir con Hi5 ni MySpace. Finalmente fue la innovación lo que logro que
Facebook tomara el dominio de la industria.