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Aplicaciones

El Kevlar es utilizado en una gran gama de productos hoy en día. Entre ellos, el más conocido es para
la fabricación de los chalecos y cascos antibalas, también en el desarrollo de cables ópticos,
cordones para escalar, llantas, partes para aviones, canoas, raquetas de tenis, etc.

Sometido a presión hidrostática, el Kevlar es 20 veces más fuerte que el acero, estos cables de
Kevlar se usa por la marina de Estados Unidos para
investigar como disminuir el ruido que hacen los
submarinos y así poder evitar ser descubiertos por el
sónar de otros barcos enemigos.

Así mismo se utiliza en la fabricación de una vela de


windsurf. Este material proporciona una resistencia al
viento inimaginable con otros materiales de igual
ligereza.

Los policías necesitan ser equipados y entrenados para


ocuparse de situaciones violentas y peligrosas, y esto
significa tener la mejor ropa protectora personal posible. El chaleco se puede diseñar para balas,
puñaladas, protección de impactos, o cualquier combinación de éstos. El equipamiento debe
proporcionar también protección contra el
fuego, el calor y el ataque químico.

Las estadísticas del año 2004 han demostrado


que el chaleco protector ha salvado las vidas o
ha reducido lesiones a más de 2.500 agentes de
policía, sólo en EE.UU. Los equipos protectores
del fuego y del calor han prevenido también
muchas quemaduras.

Dondequiera que haya una necesidad del


aislamiento eléctrico, hay generalmente
productos de Kevlar para satisfacer dichas necesidades. En sus
variadas formas, sobre todo los papeles y los cartones
prensados, podemos usarlo para aislamiento en
transformadores, motores eléctricos, los generadores y todo tipo
de equipos eléctricos.

El papel y el cartón prensado de Kevlar se utilizan en equipos


electrónicos por sus características ignífugas excepcionales.
También ofrecen alta resistencia térmica y resistencia. Se utilizan
generalmente en interruptores y controles, en dieléctricos, etc.

A continuación se muestra una lista de productos que utilizan el


kevlar:
 Chaquetas, e impermeables.  Botas de alta montaña.
 Tenis  Tanques de combustible de los
 Petos y protecciones para caballos automóviles de Fórmula 1.
de picar toros.  Alas de aviones.
 Neumáticos que funcionan  Lámparas.
desinflados.  Altavoces de estudio profesional.
 Guantes contra cortes, raspones y  Coderas y rodilleras de alta
otras lesiones. resistencia.
 Kayaks resistentes a impactos, sin  Cascos de portero de hockey.
peso adicional.  Equipamiento de motorista.
 Esquíes, cascos y raquetas fuertes  Trajes espaciales.
y ligeros.  Recubrimientos en dispositivos de
 Chalecos antibalas. telefonía celular
 Silenciadores de tubos de escape.  Apoyos e inmovilizadores para
 Construcción de motores. resonancia magnética nuclear.
 Cascos de Fórmula 1.  Elementos de fricción en
 Veleros de regata de alta embragues en la industria
competición. automotriz.

Impacto ambiental

Uno de los problemas en los que más atención se le debe poner, es en la reducción de residuos
generados por el ser humano. Como se sabe, el Kevlar es un polietileno, y la mayoría de sus
aplicaciones son productos que con el uso van perdiendo resistencia, por lo que el Kevlar, con el
tiempo se vuelvo un residuo.

La reducción en la fuente se refiere directamente al diseño y a la etapa productiva de los


productos, principalmente envases, antes de ser consumidos. Es una manera de concebir los
productos con un nuevo criterio ambiental; generar menos residuos. Y esto es aplicable a todas las
materias primas: vidrio, papel, cartón, aluminio y
plásticos.

En el caso de estos últimos residuos, la reducción en la


fuente es responsabilidad de la industria petroquímica
(fabricante de los polietilenos), de la industria
transformadora (que toma esos plásticos para fabricar
los diferentes productos finales, como la industria del
Kevlar.

Las principales ventajas de la reducción en la fuente:


 La reducción en la fuente aminora la polución y el efecto invernadero. Requiere menos
energía transportar materiales más livianos. Menos energía significa menos combustible
quemado, lo que implica a su vez menor agresión al ambiente.
 Se ahorran recursos naturales –energía y materia prima- y recursos financieros
 Ayuda a que los rellenos sanitarios no se saturen rápidamente.
 Disminuye la cantidad de residuos; es mejor no producir residuos que resolver qué hacer
con ellos.

Impacto Científico

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