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Atendiendo a estas connotaciones la alienación es su sentido más simple ocasiona una pérdida
parcial de razón o los sentidos, suprimiendo la personalidad del ser o su identificación con lo que
él es, perdiendo toda propiedad o autoridad sobre sí mismo, asumiendo un comportamiento
contrario a su propio ser. En este sentido podemos afirmar que un individuo que sufre alienación
posee un desorden mental que no solo es causante de lo anteriormente dicho, si no que también
atendiendo a sus características y su clasificación dentro de sí mismo ocasiona una supresión
endógena (auto provocada), en su forma u origen endógeno ocasiona una restricción y reiteración
en su comportamiento auto estimulado provocando apego a ciertos objetos y en su sentido más
extremo a personas asumiendo su gravedad relativa dependiente de la valoración de cada
observador, cabe destacar las rutinas repetitivas y la anulación de personalidad que esta causa.
Un ejemplo claro y evidente de la supresión de identidad que la alienación causa en una persona
es la vida de Doree, en la que este fenómeno llega a tal grado que la inconciencia de Doree es tan
grande que llega a adaptarse y aceptar los maltratos y abusos provocados por su marido. Munro,
A, (2006), Dimensiones, Canadá, The New Yorker.
Puede asimilarse a una hipnosis de la cual es muy difícil liberarse de manera consiente, pero
esto no quiere decir que no pueda liberarse de ella, esa liberación puede ser provocada por el
medio externo, generalmente un acontecimiento impactante o doloroso que despierte en usted la
conciencia que estaba suprimida, pero también puede darse por medio propio un despertar
interno, donde el individuo hace una auto revisión de sí mismo analizando todos sus
Es evidente que la identificación con las cosas o con un patrón ya condicionado de lo que es su
propio ser es el principal problema, dándole esto a el individuo un sentido de ser falto y equivoco
que termina condicionando su pensamiento visión y accionar frente a las situaciones, entonces
aceptando que no somos el contenido de nuestra mente y que somos la conciencia que lo observa
podemos analizar nuestros pensamientos inconscientes y así tomar control de esos pensamientos
y poder así de esa manera no ser el contenido de la mente si no la conciencia de fondo.
No es tan fácil como parece o como suena, pero en la medida en que en el individuo se hace más
frecuente la identificación de un pensamiento propio a un pensamiento del falso yo va
floreciendo ese despertar, que no solo es el despertar de la alienación si no de cualquier
problema. Tolle, E, (2005), una nueva tierra, buenos aires, argentina, editorial normal.