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Vamos con todos 1

Sermón para el Día Mundial de los Conquistadores 15/09/2018

Himno inicial: Voy caminando 354 o He decidido seguir a Cristo 281

Introducción
1. ¡Él no pudo salvar a todos los niños!
Nicholas quería salvar a todos los niños hijos de judíos que vivían en Praga, Checoslovaquia, en
1939, pero logró salvar a 669.
Él cargó trenes en Praga con los niños judíos para salvarlos llevándolos a Inglaterra. Estos 669
niños y adolescentes serían destinados a los campos de concentración y exterminio nazis, pero
rescatados por ese héroe, recibieron en el Reino Unido un hogar y una familia.
Nicholas Winton organizó el rescate para salvar a todos los niños judíos que estaban en Praga.
Ocho trenes viajaron por 4 países en ese rescate heroico. Pero el tren, el número 9, no llegó
al destino final previsto. Era septiembre de 1939 cuando el Reino Unido declaró la guerra a
Alemania. En realidad el último tren no llegó a salir de la estación de Praga. Él tenía 250 niños
que jamás fueron vistos de nuevo.
Winton salvó a muchos niños, pero no pudo salvar a todos.
2. En Éxodo 10:9 leemos de un gran héroe, que a los 80 años de edad también quería salvar a los
niños, los adolescentes, los adultos y los ancianos. Si usted pregunta a Moisés: “¿Quién llevará
a Canaán?, su respuesta sería: “Vamos con todos, vamos con los jóvenes, los niños, los adultos
y los ancianos”.
Moisés tenía el deseo, el sueño y la visión de llevar a todas las generaciones a Canaán.
Después de Jesús, él fue el mayor líder de toda la historia humana y sabía que tenía que salvar
a los niños y los jóvenes también. Para él las nuevas generaciones no eran una carga para
cargar, eran parte integral de la familia de Dios.
3. Nuestro sueño como líderes de iglesia es llevar a todos a la Canaán celestial.
Por eso el Día Mundial de los Conquistadores y el Bautismo de Primavera de este mes de sep-
tiembre tienen como lema: “Vamos con todos”.
Todas las generaciones son importantes para la Iglesia y para Jesús. Él tomó tiempo para
bendecir a niños y adolescentes y reprendió a los líderes que pensaban que sólo los
adultos son importantes para el Salvador. Marcos 10:13-16.
“Jesús amó siempre a los niños”, DTG 467. Aun en la misma página, Elena
de White escribe que no eran solo bebés que fueron entregados por sus
madres a Jesús: “Algunos de los niños ya habían pasado de la infancia a
la niñez y otros a la adolescencia”.

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4. La Iglesia Adventista del Séptimo Día es joven y tiene varios
departamentos que ayudan en el desarrollo cristiano de las nuevas
generaciones, ellos son los Clubes de Aventureros, Clubes de Conquis-
tadores, Jóvenes Adventistas, Ministerio del Niño y Adolescente, Educación
Adventista con las Escuelas y Colegios y las Clases de la Escuela Sabática
responsables de esas edades.
En este mes de septiembre todos estos departamentos están unidos para, al igual que
Moisés, llevar a todos más cerca de Jesús y del cielo.

I - “Todos” en la Biblia
Vamos a recordar algunos versos de la Biblia que hablan de “todos”.
Juan 3:16 dice: “De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que
todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna”.
Joel 2:32, Romanos 10:13 y Hechos 2:21 confirman que “todo aquel que invoque el nombre
del Señor, será salvo”.
Mat. 11:28 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”.
Mat. 24:39 “Y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también
la venida del Hijo del hombre”.
Mar. 10:44 “Y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos”.
Mar. 13:13 “Y seréis odiados por todos por causa de mi nombre; pero el que persevere hasta
el fin, este será salvo”.
Hechos 4:31 “Cuando terminaron de orar, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos
fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban con valentía la palabra de Dios”.
Hechos 17:30 “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora
manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan”. “Todos los mentirosos se
perderán”. Ap. 21: 8
Rom. 3:23 “Por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios”.
Hebreos 12:14 “Seguid la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor”.
Hebreos 11:13 “En la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de
lejos, creyéndolo y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra”.
Tito 2:11 “Porque la gracia de Dios se ha manifestado, trayendo salvación a todos los hombres”.
II Tim. 4: 7, 8 “He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.
Por l demás, me está reservada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez
justo, en aquel día; y no solo a mí, sino también a todos los que aman su venida”.
I Tim. 2:3,4 “Esto es bueno y agradable delante de Dios, nuestro Salvador,
el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conoci-
miento de la verdad”.

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Col 3:11 “Cristo es el todo y en todos”. Y I Cor 15:28 “que Dios sea
todo en todos”.
Efe. 6:16 “Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar
todos los dardos de fuego del maligno”.
Efe 4: 6 “Un solo Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos y por todos y en
todos”.
II Cor. 5:15 “Y él por todos murió, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para
aquel que murió y resucitó por ellos”.
II Cor. 5:10 “Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo”.
I Cor. 15:51 “Os digo un misterio: No todos moriremos; pero todos seremos transformados”.
I Cor. 12:26 “De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él, y si
un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan”.
I Tim. 2: 3,4 “Esto es bueno y agradable delante de Dios, nuestro Salvador, el cual quiere que
todos los hombres sean salvos”.
Ap. 3:19 “Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso y arrepiéntete”.

II - “Algunos” en la Biblia
Dios quiere que todos se arrepientan y sean salvos, pero un remanente será salvo. En el tiempo
del Diluvio la corrupción era total, entonces “Dios le dijo a Noé: Yo daré fin a todos los seres hu-
manos” Gén. 6:13. Y solo algunos fueron salvos: exactamente 8 personas.
II Pedro 3: 9 “El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que
es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al
arrepentimiento”.
Aunque hagamos de todo invitando a las personas a la salvación, no son todos los que van a aceptar.
Es lo que sucedió con el apóstol Pablo que dijo: “Me he hecho débil a los débiles, para ganar a los
débiles; a todos me he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos”. I Corintios 9:22

III - Falta una


99 Ovejas significa ¿“todos”?
“¿Qué hombre de vosotros, si tiene cien ovejas y se le pierde una de ellas, no deja
las noventa y nueve en el desierto y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?”.
Lucas 15: 4
“Y si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija más
por aquella que por las noventa y nueve que no se descarriaron”. Mateo
18:13

4
“Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se
arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arre-
pentimiento”. Lucas 15: 7
La alegría de un padre es estar con todos los hijos en el camino; la alegría de
un director es estar con todos los conquistadores en la caminata hacia el cielo. La
alegría de la familia de esta iglesia es ir con todos, sin dejar a nadie detrás.

Conclusión
1. Winton salvó a 669 niños, el líder Moisés rescató a cerca de un millón y medio de personas de
Egipto, Jesús quiere que todos lo acepten para ser salvos y caminen hacia la Canaán Celestial.
¿Vamos con todos?
2. Los 12 niños que tenían entre 11 y 17 años y el técnico de fútbol en Tailandia no podían imaginar
la gran movilización que había fuera de la cueva para salvarlos. Cientos de personas entre ellas
bomberos, buceadores, profesionales de varias áreas y hasta de otros países vinieron para inten-
tar salvar a todos.
Ciento veintiocho millones de litros de agua fueron drenados fuera de la cueva, pero parecía que no
era suficiente.
El mundo entero a través de los periódicos y la televisión acompañaba los esfuerzos para el res-
cate. La misión era considerada de alto riesgo.
Presos por 17 días en la oscuridad de la Cueva, finalmente todos fueron salvos el 10 de julio de 2018.
3. Nuestro objetivo como Club de Conquistadores es salvar del pecado y guiar en el servicio.
Queremos salvar a todos. Este rescate es difícil pero seguimos al que murió para salvar a todos
los que creen en él.
No queremos salvar a 12 niños, no queremos salvar solo algunos. Deseamos salir de este mundo
oscuro. Queremos ir en el camino hacia el cielo con todos.

Llamado
El día de la salvación es hoy. El día para aceptar a Jesús es hoy.
Si usted, así como el joven rico, no se entrega totalmente a Jesús, tal vez saldrá de este lugar
triste y sin esperanza.
1. La primera invitación es para nuestros niños y niñas, los adolescentes de la igle-
sia, los Conquistadores, para que se entreguen a Jesús. ¿Cuántos de ustedes
quieren ser salvos?
Permanezcan de pie en este momento.
Y ahora vosotros los conquistadores que están de pie, ¿cuántas perso-

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nas de su familia les gustaría llevar al cielo? (En ese momento ellos
levantan las placas o carteles escritos: “todos”).
2. El segundo llamado es para aquellos que han sido conquistadores y
están aquí hoy. Dios tiene un plan para cada uno de ustedes.
Quiero hablar al corazón de cada uno ahora. Tú eres muy importante para Jesús. Él te
ama mucho y quiere que vuelvas a caminar en la senda hacia el cielo.
Jesús preparó un plan de rescate de alto riesgo para salvarle. En este rescate Él murió por ti.
Hoy es el día de la oportunidad. ¿Usted acepta ser rescatado de este mundo oscuro? ¿Acepta que
Jesús tome su mano y te guíe en el camino hacia el cielo?
Quiero que usted venga adelante junto con los Conquistadores y otros que quieren ser rescatados
por Jesús.
Venga aquí ahora, no dejes que nada ni nadie te estorba en la caminata hacia el cielo. Venga aquí
para orar por usted.
Escuche la invitación de Jesús: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os
haré descansar”. Mateo 11:28
3. Por fin, mi invitación es para todos.
Queremos ir con todos a la Nueva Jerusalén.
¿Cuántos de ustedes desean renovar su voto de fidelidad a Jesús? ¿Cuántos desean seguir con
pasos firmes en este camino estrecho hacia el cielo?
Por favor, coloquen de pie para demostrar que quieren ir con todos.
Queremos ir con todo nuestro Club de Conquistadores; queremos ir con todos nuestros jóvenes;
queremos ir con todos nuestros alumnos de la Escuela Adventista; queremos ir con todos de
nuestra familia; queremos ir con toda la Iglesia al hogar celestial.
El último verso de la Biblia también tiene una bendición para todos los fieles en Apocalipsis 22:21
“Que la gracia del Señor Jesús sea con todos. Amén”.

Oración de consagración.
Bautismo de la primavera.
Himno final: Hay un mundo feliz más allá 316, o Cuando suene la trompeta 169.
Oración final.

Pr. Udolcy Zukowski


Director del Ministerio de los Conquistadores
División Sudamericana

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Aceptar la responsabilidad por 2
mi fracaso el inicio de la victoria

Proverbios 28:13. “El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa y
se aparta alcanzará misericordia”.
INTRODUCCIÓN
¿Alguna vez en la vida cometiste un error que te costó asumir la responsabilidad?
1. Hay errores en la vida que afectan mucho, no solamente al que lo cometió, sino también a
otras personas, empezando por los seres más queridos.
2. Hay errores de las cuales podemos volver a recuperarnos, pero hay otros de los cuales jamás
nos recuperaremos.
3. En la historia de la humanidad tenemos sucesos y acontecimientos grandes que marcaron la
vida de muchos. Uno de ellos sucedió el 13 de noviembre del 2002, cuando un barco petrolero,
conocido como el Prestige, se accidentó mientras transportaba 77 mil toneladas de Fuelóleo,
un derivado del petróleo con gran cantidad de contaminantes. Muchos animales marítimos
murieron. Cuando las investigaciones comenzaron a buscar al responsable, concluyeron que
a causa de los años de uso y las inclemencias del clima, el barco ya había sido reparado
muchas veces, el metal estaba siendo corroído y daba evidencias claras de un peligro mortal.
La negligencia de los empresarios hizo que este barco chocara con uno grandes troncos de
madera en alta mar, y el impacto lesionó el casco, logrando un hundimiento total y causando
una contaminación irreparable en las aguas del mar.
4. El propósito del mensaje de hoy es aprender a mirar nuestro interior sabiendo que muchas
veces, a causa del pecado, podemos tener partes corroídas que si no los reparamos en su
totalidad puede llevarnos a la destrucción final.
I. TENDENCIA HUMANA: NO QUERER RECONOCER NUESTROS ERRORES
a. A lo largo de la historia humana, desde la entrada del pecado, Dios siempre ha estado
llamando a sus hijos. Sin embargo, el ser humano vive huyendo de Dios, temiendo
aceptar sus responsabilidades, buscando otros culpables por sus fracasos. Por ejemplo,
cuando Adán pecó (Gén. 2.9), Dios vino a buscarlo para preguntarle ¿Dónde estás tú?
Luego de esta pregunta, ante la presencia de Dios, comenzó a buscar un culpable: la
mujer que me diste (Gén. 2:12). Esa es nuestra tendencia humana, no queremos
reconocer nuestros errores.
b. Cuando el pueblo de Israel se estaba alejando de Dios, él siempre los
continuaba llamando, haciéndoles la invitación que reconozcan su
pecado y vuelvan hacia él. Podemos encontrar esta constante en
el libro de Malaquías, donde Dios hace muchas invitaciones pero
el pueblo siempre respondiendo con otra actitud, tratando de
evadir su responsabilidad y la invitación de Dios.

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i. Dios les decía al pueblo: habéis hecho cansar a Jehová con
vuestras palabras; y el pueblo contestaba: ¿en qué le hemos
cansado? Malaquías 2:17.
ii. Dios les decía: volveos a mí; y el pueblo contestaba: ¿en qué
hemos de volvernos? Malaquías 3:7.
iii. Dios decía: ustedes me han robado; y el pueblo contestaba: ¿en qué te hemos
robado? Malaquías 3:8.
iv. Dios les decía: vuestras palabras han sido violentas; y el pueblo respondía: ¿Qué
hemos hablado contra ti? Malaquías 3:13.
c. MIEDO. Ya te diste cuenta que esa es la actitud del ser humano: no quiere reconocer,
tiene miedo de aceptar las responsabilidades. ¿Quieres saber el por qué? Pues porque en
este mundo, aquel que comete errores y acepta sus responsabilidad automáticamente
es condenado. Puede ser enviado a una cárcel, puede ser prohibido de ingresar a algún
país o simplemente visto por la sociedad como alguien extraño. Tienen miedo que la
gente levante un dedo acusador, recordándole siempre el error que cometió. Es por
eso que hay muchas personas que van por el mundo no queriendo reconocer que se
equivocaron, porque les da miedo a lo que puede suceder en el futuro.
d. ORGULLO. El otro problema del ser humano es el orgullo. Pensar que estoy bien y que jamás
podría equivocarme, pensar que no necesito de nadie para salir adelante, pensar que tengo
la vida comprada y que viviré muchos años, pensar que habrá tiempo en otro momento para
reflexionar en la vida cristiana, pero por ahora no necesito de nadie, ni de los amigos, ni de la
iglesia. Muchas veces pensamos que no necesitamos ni siquiera de Dios.
II. RECONOCER NUESTRA CONDICIÓN: INICIO DE LA VICTORIA Y DEL RETORNO
a. En la Biblia encontramos historias de personas que reconocieron su condición para
volver a los pies de Jesús. Algunos de ellos necesitaban una ayuda externa. Otros
encontrándose en situaciones viles reflexionaron mirando la condición la cual vivían.
i. Adán dijo: Oí tu voz, tuve miedo, me vi desnudo (Gén.3:10). Se miró a sí mismo, se
dio cuenta de su condición, sabía que las cosas no marchaban bien. Ese es el primer
paso para empezar la recuperación: reconocer que hemos caído. La Biblia dice: “Por
cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios” (Rom. 3:23). Mientras
vivamos en este mundo nuestro vivir cada día será en medio del pecado. Mucha
veces nos mancharemos, así que esa es nuestra condición, es necesario reconocer
en dónde nos hallamos.
ii. David, un rey que un día cometió un error. Solo no pudo darse cuenta. Tuvo que
venir alguien para decirle la situación en la que se encontraba. La Biblia dice:
“Jehová envió a Natán a David” (2 Sam. 12:1). “Dijo Natán a David: Tú eres
aquel hombre” (vs. 7), “¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de Jehová,
haciendo lo malo ante sus ojos?” (vs. 9). “Entonces David dijo a Natán:
Pequé contra Jehová” (vs. 13). En esta historia vemos a un hombre que
por sí solo no podía ver su condición. Él pensaba que lo que estaba
haciendo estaba bien. Pensaba que como nadie conocía su
condición, nadie podría juzgarlo y todo andaba de maravilla.
Sin embargo, la misericordia de Dios es tan grande que
envía a un mensajero para mostrarle la condición en la cual
él vivía. Muchas veces los seres humanos no podemos ver

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nuestra condición por si solos, necesitamos que alguien nos abra
los ojos, necesitamos que alguien ayude y nos enseñe el camino que
debemos seguir.
iii. El mismo David en el Salmo 51 dice: “Porque yo reconozco
mis rebeliones” (vs. 3). “Contra ti solo he pecado y he hecho lo malo” (vs. 4).
“He aquí que en pecado he sido formado” (vs. 5). Todas estas actitudes son de
reconocimiento, que va acompañado de la humildad. Así como David, encontramos
también al hijo pródigo reconociendo su condición. “Volviendo en sí dijo: ¡cuántos
jornaleros en casa de mi padre!” (Luc.15:17). “No soy digno de ser llamado tu
hijo” (vs. 19). “Padre, he pecado contra el cielo y contra ti” (vs. 21). Reconocer es
el primero paso. Es por eso, la pregunta que deseo hacerte ahora es: ¿cuál es la
condición en la que te encuentras? ¿ya te diste cuenta de tu realidad? ¿haz tratado
de lograr tus sueños en la vida sin conseguir absolutamente nada? Cuando haces
un análisis de tu vida, puedes darte cuenta que el camino que estás viviendo no es
el correcto y que necesitas darle un rumbo diferente a tu vida.
iv. Esa es la invitación que Jesús le hace también a la primera iglesia del Apocalipsis.
A Éfeso le dice: “Recuerda por tanto dónde has caído y arrepiéntete” (Apoc. 2:5).
Ese es el punto de inicio para volver, recordar donde caíste, reconocer que un día te
fuiste, aceptar que un día caíste y necesita salir de allí donde estás. Necesitas ser
consiente de tu realidad para iniciar tu regreso a casa.

III. PUEDE SER DIFÍCIL PERO NO IMPOSIBLE: EMPIEZA HOY


a. No hay ser humano que nunca haya llegado a ese momento. Siempre hay un punto de
inicio, y este es reconocer y aceptar que necesitamos de alguien superior para seguir
avanzando. Puede parecer difícil al principio, tal vez por muchos preconceptos que van
rondando en nuestra mente, sin embargo, recuerda que es necesario escuchar la voz
de Dios. En Apocalipsis 3:20, él está llamando, somos nosotros los que tenemos que
reconocer su voz.
b. Para reconocer tu condición de pecado, no prestes atención a las voces de afuera.
Comienza por escuchar la voz de Dios en tu corazón. Recuerda a Zaqueo. Todo el mundo
le criticaba (Luc. 19:7). Pero él en su corazón sabía que su condición humana estaba
mal. A pesar que tenía muchas riquezas no tenía paz en su corazón. Sabía que el único
capaz de llenar ese vacío era Jesús. Más fuerte que el grito de la multitud y las críticas
de sus semejantes fue el grito de Jesús llamándolo.
c. Si todavía estás con vida es por la misericordia de Jehová. Dice el texto de Lamentaciones
3:23 “Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos”. Por lo tanto, recuerda
que el solo hecho de estar con vida, significa que la misericordia de Dios se ha extendido
en tu vida. Tienes que reconocer tu condición para empezar el camino de regreso.

IV. CONCLUSIÓN
1. Encubrir tu pecado a causa de los preconceptos de la vida no te conducirá a
nada bueno. Ya lo menciona la Biblia en el texto principal de este mensaje:
“El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que los confiesa
y se aparta alcanzará misericordia” (Prov. 28:13). La prosperidad,
la felicidad, huirán de ti como cuando huye el ciervo del león.
Necesitas reconocer tu condición. Sólo así marcará el inicio de
tu cambio en las manos de Jesús.

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2. El ladrón en la cruz encontró misericordia cuando dijo: “Nosotros
a la verdad justamente padecemos” (Luc. 23:41). Esta fue una actitud
de reconocimiento, estar consiente de mis debilidades, de mi errores
y saber que por sí solos no podemos hacer absolutamente nada para
remediar el problema.
3. La libertad inicia cuando reconocemos y aceptamos la responsabilidad por
nuestro fracaso.
V. LLAMADO
El matrimonio de Lucas y María estaba llegando al borde. Hacía ya dos semanas que ellos
no dormían juntos. Un día, mientras hacia sus actividades hogareñas, María encontró en
el bolsillo de su saco el celular de Lucas. Al revisar los mensajes, encontró que él había
estado enviando mensajes de doble sentido a una amiga suya. Uno de los mensajes decía:
“Espero que estés bien amorcito”. Cuando hablamos con Lucas lo negaba rotundamente
todo. Tratamos de ayudarle a salir de su problema familiar. María decía: “lo que más me duele
es que niega todo, no acepta su error, a pesar que tengo evidencias, él sigue negando lo que
estaba haciendo y lo peor de todo es que él cree que las cosas están bien, y dice que en las
parejas esta situación es normal”. Después de tanto luchar, un día Lucas reconoció que había
cometido un error. Estuvo dispuesto a mejorar y rescatar su hogar que estaba destruyéndose.
Este día marco la diferencia en este matrimonio. Aceptaron que podían cometer errores, pero
que también podían levantarse y empezar un proceso de recuperación.
Querido amigo y hermano, no importa cuan lejos hayas ido en tu caminar. Si un día caíste,
es momento de reconocer que eres frágil. Nuestra naturaleza humana tiende a traicionarnos,
golpearnos y hacernos caer, pero nunca te levantarás de donde estás, si no miras en primer lugar
tu condición, aceptas la responsabilidad de tu fracaso y vuelves a levantarte con valentía y coraje.
No tengas miedo de hacerlo. El triunfador acepta sus errores y está dispuesto a enmendarlos
y seguir adelante. El fracasado vive la vida echándole la culpa a otros por su condición, y dice
no fue su culpa. Nadie en esta vida decidirá por ti. Eres tú el que tiene que mirar en la historia
de tu vida, y reconociendo tu fragilidad humana, empezando a levantarse con el único que si
es capaz de curar cada herida por más grande y pequeña que esta sea.
Si en este momento deseas colocarte en las manos de Dios, reconociendo tu condición,
deseas empezar el camino de la victoria, levántate en el Nombre del Señor Jesús, dile:
“Reconozco que soy un pecador y que sin ti mi vida no tiene sentido, quiero empezar el
camino de regreso a mi hogar, quiero reconstruir con tu ayuda aquello que el enemigo quiso
destruir en mi vida, porque sé que solo con tu ayuda llegaré a la victoria final”
Aprovecha la oportunidad de volver a empezar. Vamos a orar y deja que el Espíritu Santo que
todo lo examina, te acompañe hasta cuando Cristo venga.
Oremos.

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¿Donde está la mano de Dios 3
y su oído para ser salvo?
Isaías 59:1-2 “He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se
ha agravado su oído para oír; pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros
y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír”.

INTRODUCCIÓN
¿Qué hace el pecado? El pecado trajo miedo y temor a la vida del hombre, cuando el hombre
sintió miedo por el resultado de sus acciones busco esconderse, pero en vez de esconderse de
Satanás causante de su desgracia se escondió de Aquél que lo creó. Ahora que el hombre pecó
estaba sucio y lleno de vergüenza, no podía mirar al Creador otra vez de frente. Por eso se buscó
un escondite.
¿Cuál es el lugar de resguardo donde nos ocultamos cuando algo amenaza nuestra seguridad
integridad física, emocional y espiritual o aún nuestra vida?

¿Nuestra habitación? ¿Nuestros amigos? ¿El licor? ¿El internet? ¿Las drogas? ¿Dios?

I. HE AQUÍ QUE NO SE HA ACORTADO LA MANO DE JEHOVÁ PARA SALVAR, NI SE HA


AGRAVADO SU OÍDO PARA OIR.

1. Hablar de la mano de Jehová y oído nos hace pensar en las bendiciones que estamos
recibiendo en nuestra vida. La oración, la única herramienta que el ser humano tiene
para que Dios los escuche, es el medio de comunicación con Dios.
2. Este versículo nos presenta una explicación del aparente descuido y no intervención de
Dios para liberar a su pueblo.
3. Esta aparente no intervención no refleja una incapacidad y debilidad de Dios para dar
ayuda a su pueblo. Lo que demuestra este versículo es la incapacidad y debilidad del
ser humano para aferrarse a Dios.
4. Al mencionar mano corta no está refiriendo que el problema está en Dios. Él no tiene
una mano corta que no tenga la capacidad de salvar. No es incapaz de extender su
mano (Isaias 31:3).
5. Al mencionar que el oído se endureció no quiere decir que Dios no tiene la
capacidad de escucharnos, Jesús mismo promete en su palabra escuchar a
todos. La promesa de Dios es que pidamos y nos dará todo en abundancia.
(Mateo 7:7-11)

APLICACIÓN. Debemos considerar que, si nuestras oraciones no son


contestadas y las bendiciones que esperamos no se dirigieron a
nosotros, no es porque Dios está cansado de oír la oración, sino
porque los seres humanos están cansados de
​​ orar, es porque los
seres humanos estamos cansados de hacer la voluntad de Dios y

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servir a Dios. ¿Qué estás haciendo para que Dios extienda sus manos
y pueda inclinar su oído a ti?

a. El problema no está en Dios, Dios no tiene manos cortas

b. El problema no está en Dios que no escucha.

c. El problema no está en la incapacidad de Dios para socorrer

d. ¿Dónde está el problema?

II. ¿QUÉ NOS SEPARA DE DIOS? ¿QUÉ HACE QUE LAS PERSONAS CREAN QUE LA MANO
Y OÍDO DE DIOS SE HAN ACORTADO?

Tenemos que tener en cuenta que:

1. El problema está en la voluntad caprichosa de alejarnos de Dios y transitar en senderos


de pecado. Está en ese poco interés de clamar por justicia. En que estamos con manos
manchados de sangre y dedos manchados de iniquidad.

2. Se debe considerar que Dios da a cada ser humano la capacidad de decidir, y si nos
referimos a decisiones, Satanás no decidió seguir a Dios.

3. El pecado es la separación entre Dios y el ser humano. El pecado produce división.


Produce separación en la familia.

4. Quizás piensas que estás demasiado lejos de Dios, quizás estás pensando que el pecado
te ha llevado lejos de Dios, quizás piensas que Dios no puede alcanzarte.

APLICACIÓN

1. El pecado tiene solución, la solución es Jesús. (Lucas 19:9-10)

2. El problema no está en las manos cortas de Dios para salvar. No está en la incapacidad
de Dios para socorrer.

3. El problema es que queremos vivir una vida distante de Dios. Tenemos poco interés
de buscar y depender de Dios. Nos olvidamos que separados de Dios nada se podrá
hacer. Juan 15:5

CONCLUSIÓN

Es impresionante ver aquí el pecado en colores verdaderos, una separación excesivamente


dolorosa; y ver el pecado en sus consecuencias extremadamente dolorosas, ver también
la separación de Dios, y por lo que nos separamos, no sólo de todo lo bueno, sino para
recibir todos los males.

Sin embargo, los números van creciendo a su propia destrucción, el sistema


de infieles y perversos va creciendo, cómo la araña teje su tela así está
creciendo la cantidad de personas que se separan de Dios, todo hombre
que es destituido del Espíritu de Cristo, corre veloz hacia el mal de algún

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tipo; pero los que independientemente huyen de la verdad divina y
la justicia, son extraños a la paz.

a. El error de todo ser humano es creer que el texto estudiado:


Isaías 59:1-2 - habla de la separación de Dios.

b. El hombre estaba en enemistad con Dios y el sacrificio de Cristo sirvió de


puente para la recolección. Romanos 5:6-1

LLAMADO

Nosotros amamos a nuestros hijos mucho antes de que ellos sepan que los amamos, así también
mucho antes que hubiésemos siquiera pensado en Dios, ya estábamos en su pensamiento.

Si eres padre o madre sabrás valorar cuánto se ama a un hijo, ¿estarías dispuesto a dar un hijo
tuyo, para que otros que no te conocen, ni te aman puedan tener vida?

Dios no escatimó nada, le dio todo, todo por amor a ti, eres de infinito valor para él, y su amor
hacia ti es infinito.

Ahora bien, ya Dios hizo todo lo que está de su parte para que puedas conocerlo y llegar a amarlo.
Él te ofrece vida eterna, una vida diferente, sólo debes creer en él.

Si nadie te ama, Dios te ama, si nadie cuida de ti, él cuida de ti. Si nadie te quiere, él te quiere.
Aquí está Jesús y te dice: Yo te amé tanto que di mi vida por ti, sígueme, confía en mí y tendrás
la bendición mía en esta vida, y la eternidad asegurada.

Ilustración: Cierto niño pobre y de pocos recursos hizo un banquito de madera para jugar.
Todos los días iba al río a jugar con su barquito, lo ponía en la parte alta del río donde había una
cascada y corría por toda la rivera para volverlo a tomar cuando pasaba la cascada. Un día su
barquito después que cruzó la cascada desapareció. Aquel niñito entristeció grandemente pues
aquel era su único juguete.

Pasó el tiempo y un día en una feria el niño se puso a mirar un puesto de venta de juguetes
usados y ¡Qué sorpresa para él al descubrir allí a su apreciado barquito! Rápidamente le dijo al
vendedor que aquel barco era suyo, que él lo había hecho y que se le había perdido, pero no logró
que el vendedor se lo diera, y tuvo que trabajar muy duro para obtener dinero y cuando lo obtuvo
fue y compró su barquito. ¡Qué feliz se sentía!, con alegría en su corazón y lágrimas en sus ojos
regreso a su casa diciendo: Barquito mío ya nadie nos podrá separar jamás, ahora eres mío dos
veces, eres mío porque te hice y eres mío porque te compré.

1. Así también le pertenecemos a Jesús dos veces, somos de él porque nos creó y le
pertenecemos porque nos compró con su vida. Te invito amigo que me escuchas
que desde allí donde estás sentado aceptes ese gran amor de Dios en tu vida,
y que mientras escuchas el himno final le digas a Dios: Señor Jesús, quiero
corresponder a tu amor, ayúdame a creer en ti. Amén.

2. ¿Quieres decirle a Jesús que te restaure?

3. ¿Puedes decirle a Jesús que le entregas tú vida?

4. ¿Quieres decirle a Jesús que no quieres estar separado de Él?


13
El dolor que produce gozo 4
2 Corintios 7:10. “Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento
para salvación, de que no hay que arrepentirse; pero la tristeza del mundo produce
muerte”.

INTRODUCCIÓN
Hay un hermoso canto cuya letra dice:
Gracias por mis dolores y también mis alegrías, gracias a Dios por mis tormentas. Me ayudaron a
fortalecerme y ahora en él confió y me siento fuerte en mi interior.
A través del dolor aprendí a confiar en Cristo y he de confiar en él.
¿Se puede agradecer por el dolor? ¿Se puede decir, gracias por mis tormentas? Toda tristeza
conlleva dolor, porque la tristeza es un sentimiento de dolor anímico. Hay tristezas que llevan a la
perdición y tristezas que llevan a la salvación. El texto leído dice; que la tristeza que es según Dios
es para salvación.
La tristeza sin Dios produce ruina y muerte, mas la tristeza con Dios produce salvación.
El Rey David fue uno de los hombres que experimentó la tristeza de muerte y la tristeza que
produce arrepentimiento para salvación. Veamos cómo fue esto.

I. LOS TRIUNFOS DE DAVID SON TRIUNFOS DE DIOS


1. A la pregunta: ¿Qué es lo que más recuerdas de la historia de David? La mayoría
responde: ¡Mató a Goliat! Sí, mató a Goliat, también mató a un oso y a un león.
2. David era valiente, fuerte, decidido, inteligente, sobre todo espiritual. Sin duda, todos
recordamos las grandes hazañas David desde cuando era muy joven.
3. Había puesto su confianza en Jehová su Dios. Dependía totalmente de Él. Y como
resultado, Dios libró sus batallas y lo hizo grande.
4. Aplicación: Mientras dependamos de Dios, Él librará nuestras batallas. Por más
obstáculos que se nos presente, nada será imposible. Mientras estemos en plena
comunión con Dios, seremos más fuertes. Cuanto más oremos, cantemos y leamos la
Palabra de Dios más seguros estaremos. ¿Cómo está tu vida espiritual? ¿Cómo está
tu relación con Dios? ¿Estás leyendo la Biblia?
Pero lamentablemente David no permaneció ligado de Dios.
II. LA CAÍDA DE DAVID: CULPA Y LAMENTOS (TRISTEZA DE MUERTE)
1. David perdió de vista su total dependencia de Dios, y comenzó
a confiar en su propia fortaleza. El orgullo, la soberbia y la
autosuficiencia prepararon el camino de su caída. En lugar
de ser influenciado por el Espíritu Santo, se dejó influenciar

14
por las costumbres de las naciones vecinas paganas. (Patriarcas y
Profetas, 775). En vez de confiar plenamente en el poder de Dios,
comenzó a confiar en su propia fuerza y su conocimiento. Eso lo alejó
de Dios y fue el comienzo de su caída y fracaso.
2. Cuando David se sentía cómodo y seguro de sí mismo cedió a la tentación
del enemigo: Vio a su vecina Betsabé, esposa de Urías, oficial valiente y fiel a David,
bañándose. La codició y aprovechándose de su cargo de ser rey, la hizo traer a su
palacio y se acostó con ella consumando así el pecado. Para el mal de David, Betsabé
resultó embarazada.
3. Lejos de arrepentirse, buscó solucionar su problema por sí mismo. No consultó a
Dios, no se humilló, no pidió consejo, al contrario, se enredó más. Al querer tapar su
culpabilidad añadió otro pecado a su vida: el asesinato. La Biblia dice que el Rey ordenó
a Joab que mataran a Urías, “Poned a Urías al frente, en lo más recio de la batalla, y
retiraos de él, para que sea herido y muera”. (2 Sam. 11:15). David se había alejado
totalmente de Dios. No era más aquel hombre que dependía de Dios.
4. El Rey David estaba experimentando la TRISTEZA QUE PRODUCE MUERTE. El Salmo
32:3-4 narra lo terrible que es estar alejado de Dios “Mientras callé, se envejecieron mis
huesos en mi gemir todo el día. Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano;
Se volvió mi verdor en sequedades de verano”.
5. Aplicación: Las consecuencias de alejarnos de Dios siempre serán caóticas, siempre
habrá lágrimas de lamento, sin Dios nada es seguro, aun nuestras mejores decisiones
serán para mal. No se puede vivir bien sin Dios. Cada vez que quieras salir adelante te
enredarás más, nada hay bueno que puedas hacer por ti mismo. No busques salvación
por ti mismo.

III. DIOS BUSCA A DAVID - TRISTEZA QUE PRODUCE ARREPENTIMIENTO


1. Al igual que en el huerto del Edén, Dios es quien toma la iniciativa de buscar al hombre
caído. Y le habló por medio del profeta Natán.
2. 2 Samuel 12:7,9-12. …Así ha dicho Jehová, Dios de Israel: Yo te ungí por rey sobre
Israel, y te libré de la mano de Saúl, ¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de
Jehová, haciendo lo malo delante de sus ojos?... Por lo cual ahora no se apartará jamás
de tu casa la espada, por cuanto me menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías heteo
para que fuese tu mujer. Así ha dicho Jehová: He aquí yo haré levantar el mal sobre ti de
tu misma casa, y tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las daré a tu prójimo, el cual
yacerá con tus mujeres a la vista del sol.
3. La exhortación del profeta conmovió el corazón de David; reconoció su error, y se
humilló con corazón quebrantado y dijo: Pequé contra Jehová (2 Sam 12:13).
4. David estaba confesando su pecado, su tristeza lo estaba exponiendo ante el
Señor, entonces su tristeza se convirtió en Arrepentimiento que produce
Gozo.
El Salmo 32:5 dice “Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad.
Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la
maldad de mi pecado”.

15
5. Cuando David reconoció su pecado y los confesó a Dios, El profeta
le respondió: “El Señor ha perdonado ya tu pecado, y no morirás” (2
Sam 12:13 NVI).
6. Cuán grato es escuchar: tus pecados son perdonados, esto
produce gozo y salvación.
7. Aplicación: Cuando el ser humano reconoce su pecado, lo confiesa y se
humilla ante Dios la gracia de Cristo se extiende y perdona nuestros pecados. Dios
nunca dejará solo al pecador arrepentido, Dios nunca será indiferente con el dolor
humano, porque nadie ha ido tan lejos que Dios no pueda alcanzarlo, nadie ha pecado
tanto que Dios no pueda amarlo. Resuene en todo lugar la voz de del amado Señor “…
al que a mí viene, no le echo fuera” (Juan 6:37, “No he venido a llamar a justos, sino a
pecadores…”. (Lucas 5:32), “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y
yo os haré descansar”. (Mateo 11:28). Gloria sea a Dios por su misericordia.

IV. DEJA DE LAMENTARTE - ARREPIÉNTETE Y LEVÁNTATE

1. Aunque Dios perdonó a David quedaron las consecuencias. Dijo Natán el profeta: “… el
hijo que te ha nacido ciertamente morirá” (2 Sam 12:14).
2. El niño enfermó, entonces David ayunó y suplicó por su hijo humillándose hasta el suelo.
Se despojó de toda su realeza y no quiso levantarse. Él sabía que su hijo sufría por culpa
de su pecado, daría todo por salvarlo, pero la consecuencia de su pecado lo alcanzó; su
hijo murió. ¡qué tragedia!
3. Sin embargo, Dios consoló a David. Le fortaleció, no le dejó solo, y éste aceptó su
voluntad y se sometió al decreto divino. Entonces tuvo fuerzas para levantarse.
4. El Arrepentimiento de David fue profundo y sincero, así esta registrado en el libro de
Salmos 51:1-14 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; Conforme a la
multitud de tus piedades borra mis rebeliones. Lávame más y más de mi maldad, Y
límpiame de mi pecado. Porque yo reconozco mis rebeliones, Y mi pecado está siempre
delante de mí. Contra ti, contra ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus
ojos; Para que seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio. He
aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre. He aquí, tú amas
la verdad en lo íntimo, Y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría. Purifícame
con hisopo, y seré limpio; Lávame, y seré más blanco que la nieve. Hazme oír gozo y
alegría, Y se recrearán los huesos que has abatido. Esconde tu rostro de mis pecados, Y
borra todas mis maldades. Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu
recto dentro de mí. No me eches de delante de ti, Y no quites de mí tu santo Espíritu.
Vuélveme el gozo de tu salvación, Y espíritu noble me sustente. Entonces enseñaré
a los transgresores tus caminos, Y los pecadores se convertirán a ti. Líbrame de
homicidios, oh Dios, Dios de mi salvación; Cantará mi lengua tu justicia.
5. Alguna vez escuché de un predicador: “Nadie se va a perder por haber
caído, si alguien un día se pierde no será por haber caído si no porque
no quiso levantarse”.
6. “Entonces David se levantó de la tierra, y se lavó y se ungió, y
cambió sus ropas, y entró a la casa de Jehová, y adoró...” (2
Samuel 12:20)

16
7. Aunque su hijo murió, tuvo el valor de levantarse porque Dios
le fortaleció. El levantarse es ponerse en pie, es esforzarse, es
dejar atrás el pecado. No hay por qué estar en lamentos. Dios quiere
levantarte; lo que pasó, pasó. Dios te ayudará.
8. David entró al templo y adoró. Esto señala que todo aquel que quiere estar
en pie tendrá que caer de rodillas ante Dios y adorarle. Busca a Dios, dale el primer
lugar.
9. Leamos el Salmo 40:1-3 Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi
clamor me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies
sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a
nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová.
10. ¿Notaste? Dios escucha nuestro clamor, el nos saca de la desesperación. Nos ubica en
roca firme. No hay problemas que Dios no pueda solucionarlos. Él pondrá gozo y paz en
nuestro ser. David recibió un hermoso regalo, Dios le dio otro hijo; SALOMÓN. Deja de
lamentarte, deja de llorar, acepta la voluntad de Dios.
CONCLUSIÓN
David, al alejarse de Dios convirtió su vida en lamentos y tristezas. Su caída produjo en él dolor y
tristeza de muerte. Mas cuando confesó sus pecados su tristeza se convirtió en arrepentimiento y
Dios perdonó sus pecados. Aunque estuvo en medio del dolor, tuvo fuerzas para levantarse, pues
Dios lo levantó y le puso en roca firme. David ahora se sentía gozoso, pues Dios secó sus lágrimas
otorgándole otro hijo.

LLAMADO
Ven a los brazos del amante Salvador, vuélvete al Señor y tendrás vida. No vivas lejos de Dios que
nada alcanzarás. Si has caído, no tengas temor. Dios te espera con los brazos abiertos.
Quien tenga un verdadero arrepentimiento jamás será rechazado ni ignorado. Quien busque al
Señor lo hallará. Quien abra su corazón a Jesús será consolado. Escucha la voz de Dios: “Deje el
impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él
misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar”.
Que tus tristezas sean para arrepentimiento, que tus lágrimas sean para salvación.
Oremos.

17
Cansarse de la forma en que 5
vivimos

Jeremías 29:12,13 “Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me


buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”.

INTRODUCCIÓN

¿Cuántas veces nos hemos encontrado lamentándonos porque las cosas no suceden como uno
espera? Te esfuerzas tanto por conseguir algo y al final no se da. Trabajas, pones de tu parte, tratas
de hacer lo mejor, pero luego terminas frustrado porque parece que todo va mal.

Tomaste una mala decisión, hiciste lo que nunca deberías haber hecho y fuiste al lugar donde no
debiste poner un pie. Todo este conjunto de desaciertos y sin sabores, te lleva a reflexionar en tu
vida ahora, y llegas a la conclusión que no te sientes bien contigo mismo, con tu vida, y sientes
que algo te hace falta.

Incluso puedes vivir rodeado de muchas personas, haber adquirido bienes, un buen trabajo, una
buena posición, pero quizá sientes que algo que te hace falta, no te sientes conforme.

¿Es posible que las cosas puedan cambiar en nuestra vida?, ¿pueden las cosas mejorar y tomar un
rumbo diferente? La respuesta es Sí. Pero tú necesitas recurrir al único que puede darle un cambio a
nuestra vida. Al único que puede guiarnos por el camino correcto. Al único que puede restaurar la vida.

En esta ocasión, veremos cómo Dios lo hizo en el pueblo de Israel, para así entender cómo Él lo
puede hacer en ti.

I. ¿EN QUÉ CONDICIÓN TE ENCUENTRAS?

1. El texto bíblico que leímos al inicio, fue escrito en momentos en que el pueblo de Israel
atravesaba una situación muy trágica. La ciudad había sido asolada por Babilonia.

2. Por muchos años, a través de los profetas, Dios había llamado a su pueblo al
arrepentimiento, a dejar a los dioses paganos y volver a Él, el Dios verdadero. Sin
embargo, nada de esto sucedió. Al contrario, fueron más obstinado en su idolatría,
apartándose de Dios, e incluso matando a los profetas que Dios enviaba.

3. Como consecuencia de ello, Dios les advirtió, a través del profeta Jeremías,
que del norte vendría una nación que sería “fuego del norte” y que
destruiría sus ciudades, si ellos no se arrepentían y buscaban a Dios
corrigiendo sus caminos (Jeremías 1:14).
4. Lamentablemente, ellos no hicieron caso. Y del norte vino
Babilonia con su ejército, y en tres ocasiones entraron a la
ciudad de Jerusalén y la destruyeron por completo.

18
 Las murallas y las casas derribadas, el templo construido por
Salomón, saqueado y quemado.

 Los principales sabios, príncipes de Judá, y muchas familias,


fueron llevados cautivos a Babilonia. El resto de sobrevivientes, en su mayoría
ancianos y enfermos, quedaron a vivir en las ruinas de la ciudad.

5. Es precisamente en estas circunstancias tan adversas, que Dios, a través del


profeta Jeremías, da un mensaje a “todos los de la cautividad, que hice transportar de
Jerusalén a Babilonia” (Jeremías 29:4).

6. Qué maravilloso es saber que Dios nunca se olvida de sus hijos. Aunque hayan sido
rebeldes a su voz, aunque se hayan apartado por caminos perversos. Dios siempre nos
busca. Más adelante el mismo profeta Jeremías escribiría: “Jehová se manifestó a mí
hace ya mucho tiempo, diciendo: con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué
mi misericordia” (Jeremías 31:3).

7. En medio de estas circunstancias difíciles, Dios le dice a su pueblo: “Porque yo sé los


pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de
mal, para daros el fin que esperáis” (Jeremías 29:11).

8. ¿En qué circunstancias te encuentras ahora? ¿cuál es tu condición? ¿Estás viviendo


por situaciones adversas? Recuerda que los pensamientos de Dios para tu vida siempre
serán mejores de lo que esperas. Que las cosas en la vida siempre pueden mejorar, que
nunca es tarde para tomar la decisión de buscar a Dios, de volver a Él.

II. BUSCANDO A DIOS DE TODO CORAZÓN

1. El profeta Jeremías, había decidido no ir a Babilonia, se quedó viviendo entre las ruinas
de Jerusalén. Y sentado sobre las ruinas de la ciudad desolada, observaba a la gente
y la ciudad destruida. Es allí cuando escribe el libro de Lamentaciones, los cuales son
lamentos que se refieren expresamente a la condición de Jerusalén y al cautiverio que
el pueblo judío sufrió como consecuencias de sus infidelidades a Dios.

 El libro de Salmos también registra el sentir de aquellos que habían sido llevados
cautivos a Babilonia: “Junto a los ríos de Babilonia, allí nos sentábamos, y aun
llorábamos, acordándonos de Sion” (Salmos 137:1)

2. Sin embargo, en medio de esta tragedia, surge una promesa maravillosa de parte de
Dios a su pueblo. En Jeremías 29:12 dice: “Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis
a mí, y yo os oiré”. Qué maravillosa promesa para un pueblo que quizá merecía lo que
estaba viviendo. Había una esperanza.

3. Hemos leído que los pensamientos de Dios siempre son mejores. Que no importa
qué circunstancia estemos atravesando, la promesa divina es que Él tiene
planes mejores para nosotros. Sin embargo, aunque Dios conoce los planes
que Él tiene para nosotros, Él está esperando pacientemente para que
nos acerquemos a Él.

4. La única forma de salir del estado en que nos encontramos, es


buscando a Dios, invocando su nombre. Este es el camino para
que las cosas en la vida mejoren y tomen un mejor rumbo.

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5. Pero hay algo más que necesitamos comprender. El versículo 13
menciona: “y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de
todo vuestro corazón”. Este verso describe en palabras diferentes, lo
mismo del verso 12, pero añade: “porque me buscareis de todo vuestro
corazón”.

Precisamente, aquí está la clave para realmente tomar un rumbo diferente y



mejor para nuestra vida.

 Hay muchas personas que buscan a Dios, pero tarde o temprano terminan
apartándose nuevamente de Él. Son como los terrenos en la parábola del buen
sembrador. Los problemas y las tentaciones terminan alejándolas de Dios.

6. Sin embargo, aquí el profeta Jeremías dice que realmente encontraremos a Dios y Él
nos oirá, si los buscamos “de todo vuestro corazón”. ¿Pero qué significa esto?

 Para entender esto, necesitamos recordar las circunstancias adversas por las que
el pueblo de Israel estaba pasando.

 Sin ciudad, sin casas, lejos de su nación y viviendo en una ciudad extraña.
Habiendo visto los horrores, la tragedia y la muerte cuando fueron conquistados
por los babilonios.

 Ellos ahora entendían que la dureza de su corazón, sus desaciertos y su idolatría,


los habían llevado a ese fin. Y se daban cuenta de la necesidad de volver a Dios.

7. Y precisamente, los problemas y las circunstancias adversas que muchas veces nos
toca vivir, son invitaciones de Dios para volver a él. Si las cosas hasta ahora no han
salido como esperabas, es porque necesitamos “buscar a Dios de todo corazón”.

8. El libro de Job registra la historia de este mismo personaje, quien después de haber
perdido a su familia, sus bienes, e incluso él mismo estar al borde de la muerte, fue
restituido por Dios, quién le dio aún mucho más de lo que tenía. En ese momento Job
entendió por qué Dios permitió que la tragedia llegara a su vida: “De oídas te había oído;
mas ahora mis ojos te ven” (Job 42:5).

9. Esto nos enseña que las adversidades cuando las colocamos en las manos de Dios, Él
las transforma para cumplir sus propósitos en nuestra vida.

10. ¿En qué condición te encuentras ahora? ¿sientes que tus malas decisiones te alejaron
de Dios y ahora estás sufriendo las consecuencias? Recuerda, hay una promesa, que, si
lo buscamos, lo hallaremos. Y si oramos, Él nos oirá.

III. DIOS ES EL ÚNICO QUE CAMBIA LAS COSAS

1. “Y seré hallado por vosotros, dice Jehová, y haré volver vuestra cautividad,
y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os
arrojé, dice Jehová; y os haré volver al lugar de donde os hice llevar”
(Jeremías 29:14).

2. Una promesa maravillosa fue registrada para el pueblo de Dios


disperso en una nación extraña. Dios prometía que un día
volverían a su hogar, a su ciudad.

20
3. A través del profeta Jeremías, Dios le reveló a su pueblo una de
las profecías bíblicas que fue cumplida con exactitud. Dios claramente
mencionó que después de setenta años, de estar en Babilonia, Él los
retornaría a Jerusalén:

 “Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años,
yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver
a este lugar” (Jeremías 29:10).

4. Ciertamente esta profecía se cumplió con exactitud. El pueblo de Israel volvió a


Jerusalén, y restauraron sus casas, las murallas, la ciudad, el templo, y aunque el
camino no fue fácil, Dios bendijo a su pueblo y lo guio en todo ese camino.

5. Debes recordar que el único que puede cambiar tu vida es Dios. Él es el único que puede
restaurar las cosas en la vida. Si las cosas no van bien en el hogar, en tu matrimonio, con
tus hijos, en tu vida, entonces necesitas buscar a Aquel que es capaz de restaurar todo.
Necesitamos buscar a Dios, necesitas volver a él de corazón.

CONCLUSIÓN

1. Que lección tan importante obtenemos de la historia en Jeremías 29. Un pueblo atravesando
el cautiverio, la destrucción y la tragedia como resultado de haberse apartado de Dios, pero
que no es olvidado por Él.

2. Vemos a un Dios misericordioso y paciente, dispuesto a perdonar y restaurar. Un Dios que


nos dice que sus planes son mejores para nosotros si tan sólo lo buscamos y volvemos a Él
de corazón.

3. Dios restauró al pueblo de Israel, los hizo volver de la cautividad, les dio una nueva oportunidad.
Dios cambió las cosas en la vida de su pueblo. De esclavitud a libertad, de llanto a gozo, de
culpa a perdón.

LLAMADO

1. Querido amigo, recuerda que Dios es el único que puede cambiar las cosas en tu vida.
Recuerda que sus planes son siempre mejores de lo que tú esperas.

2. Pero hay algo que necesitas hacer, hay una decisión que necesitas tomar para que Dios
cumpla sus propósitos en ti: volver a Él.

3. Vuelve a Dios, pero de todo corazón, y ten la seguridad que las cosas irán mejorando.

4. ¿Aceptas la invitación que Él te hace?

21
Olvidar el pasado y pensar en el 6
futuro

INTRODUCCIÓN

Se acercaba una semana de evangelismo y la hermandad estaba muy emocionada con todos
los preparativos. Esta semana sería diferente a las demás, pues el predicador sería alguien muy
especial. Su llegada causaba mucha expectativa a la gente del pueblo y aún de los pueblos
vecinos, todos comentaban sobre él.

La semana inició, y noche a noche, el patio de la escuela estaba abarrotado de personas


deseosas de ver al predicador. Tenía muchas ganas de conocerlo y preguntar si todas las cosas
que se decían de él eran verdad, pues su fama se había regado por los diferentes pueblos de
aquella provincia.

El sábado después del bautismo comenzamos a conversar y la primera pregunta fue:

- “Hermano, ¿por qué le dicen ‘el tripa’?”

Tras una sonrisa él respondió que ese era el alias por él cual era conocido. Sí, así es. El predicador
era un ex delincuente y no cualquier delincuente. A decir de la gente de aquellos pueblos, el más
grande delincuente que habido por aquellos lugares.

Pero, ¿qué hacía un delincuente realizando una semana de evangelismo? Esa fue mi segunda
pregunta. Y la respuesta fue contundente: “Fui transformado por Jesús, esas cosas quedaron en
el pasado y ahora dedico mi vida para hablar del amor de Dios y para traer más personas a los
pies de Jesús, preparándome y preparando a otros para su segunda venida”.

El propósito del mensaje es que usted pueda entender que si viene a los pies de Jesús, Él puede
cambiar su vida y transformarlo en una nueva persona, tal como lo menciona el apóstol Pablo
en Filipenses 3:13, 14:


Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando
ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al
premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús”

I. ¿QUIÉN ES USTED?
Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado
Las Escrituras presentan a Pablo como un apóstol elegido por Dios y dotado
de privilegios que pocos han tenido. Fue hebreo, según la carne, y fariseo
en cuanto a la ley (Hechos 23:6, 26:5). Estudió a los pies de Gamaliel
(Hechos 22:3). Defensor de las tradiciones, miembro destacado del
sanedrín (Hechos 22:20; 26:10), inteligente, talentoso, y de un hogar
pudiente.

22
Elena de White dice de él: “Pablo, el más grande maestro humano…
Poseía la más elevada de todas las sabidurías…” (La Educación,
Pag. 66). A la vista del ser humano, quién mejor que Pablo para ser
considerado como un ejemplo a seguir y una persona digna de heredar
la vida eterna.
Sin embargo, el texto nos muestra que el mismo Pablo, aquel hombre con grandes
virtudes considerado como el más grande predicador humano y lleno de sabiduría, no
creía haber alcanzado la madurez en Cristo.
Posiblemente usted se encuentre en este lugar y piense: Si Pablo creía no haber alcanzado
la madurez en Cristo, ¿cómo yo lo puedo lograr, pues no poseo las virtudes o cualidades
suficientes para estar o formar parte del pueblo de Dios?
Quizá usted miré a los líderes de la Iglesia y piense que difícilmente usted llegará al nivel
de ellos y mucho menos al de Pablo. Quizá usted un día formó parte de este pueblo y por
cosas de la vida se apartó y cree que ya no puede regresar. Pues si ese es su pensamiento,
acompáñeme, para que juntos podamos descubrir quién es usted hoy y quien puede llegar a
ser mañana, le invito a seguir estudiando el texto en mención.

II. DEFINA SUS PRIORIDADES

…pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a
lo que está delante, prosigo a la meta.

Ciertamente Pablo procedía de una buena familia, había formado parte del Sanedrín y estudió
bajo los pies de los más grandes maestros de la época y fue considerado como el más grande
predicador humano. Sin embargo, Pablo fue uno de los más grandes perseguidores de los
cristianos y consentía con la muerte de ellos (Hechos 9:1, 2).

Después haber vivido naufragios, ser traicionado, abandonado, apedreado, menospreciado


por judíos y discípulos y puesto en una cárcel, muchos podríamos pensar que la reacción
normal de Pablo hubiese sido lamentarse de su situación y creer que por causa de sus
pecados pasados estaba pasando todas estas cosas. Sin embargo, desde la prisión escribe
la carta a la Iglesia de Filipos y en ella los insta a no abandonar los caminos del Señor, ni su
servicio a Dios y lo expresa diciendo:

• “Olvidando ciertamente lo que queda atrás”. Pablo había dejado su pasado judío,
de perseguidor y posiblemente no tomaba en cuenta su encarcelamiento actual;
estaba decidido a no mirar atrás. Todo lo contrario a lo que pueblo de Israel había
hecho, mientras transitaba por el desierto, quienes siempre estaban recordando su
pasado: “Nos acordamos del pescado que comíamos de balde en Egipto, de los
pepinos, y de los melones, y de las verduras, y de las cebollas, y de los ajos”
(Números 11:5).

Pablo estaba dispuesto a poner en práctica las enseñanza de Jesús:


“Ninguno que poniendo su mano en el arado y mira hacia atrás, es apto
para el reino de Dios” (Lucas 9:62)  y este mensaje quería dejar en las
mente de los hermanos de la Iglesia de Filipos y en nuestra mente hoy.

23
• “Y extendiéndome a lo que está delante”. Pablo usa la figura
de un atleta y se compara con él. Sin embargo, tenía una cosa bien
clara: mientras corría, su mirada estaba puesta al frente. Pablo no
estaba corriendo sin una meta, él estaba usando toda su energía para
seguir hacia adelante y lograr la meta del supremo llamamiento.

Algo que usted y yo debemos tener presente es que los logros de ayer y los pecados
de ayer eran importantes entonces y que aún hoy continúan resonando en nuestras
vidas.  Sin embargo, si dedicamos demasiado tiempo recordando triunfos pasados,
seguramente no tendremos tiempo para cosechar nuevos triunfos en el futuro. Si concentras
tus fuerzas en recordad y abandonar la culpa del ayer, seguramente no tendrá la energía para
confrontar los retos de hoy o para reconocer las oportunidades de mañana. Debemos tener
cuidado de no dejar que nuestro pasado, supere el presente. Pablo está consciente de ese
peligro y no está dispuesto a caer en esa trampa y eso desea trasmitir a sus lectores.

Hoy más que nunca necesitamos olvidar el pasado, dejar de mirar hacia atrás y poner la
mano en el arado, mirando siempre adelante a la meta del supremo llamamiento, asidos de
la mano de Jesús.

III. COSECHANDO RESULTADOS

…al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.

Pablo usa esta misma imagen en su primera carta a la iglesia de Corinto: “¿No sabéis que
los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, más uno lleva el premio? Corred de tal
manera que lo obtengáis” (1 Corintios 9:24).

En esa carta habla de corredores que ejercen auto disciplina para recibir una corona
corruptible; mas nosotros, corremos para recibir una corona incorruptible (1 Corintios 9:25). 
En la carta a los filipenses, el llamado es para dirigir su atención a las cosas celestiales.
Este llamado no sólo lo recibió en el momento de su conversión, sino que constantemente
resonaba en sus oídos. Dios nunca cesa de llamar a los cristianos a buscar el cielo. Ese
llamado Dios lo hace en la vida y en la persona de su Hijo.

Por ello es preciso que usted entienda que si se encuentra en este lugar es porque Dios lo
llamo y tiene un premio para usted, siempre y cuando deje de mirar al pasado e inicie a mirar
las cosas celestiales.

CONCLUSIÓN

En la experiencia de Pablo, podemos visualizar que a Dios no le importa nuestro pasado y las cosas
que en el hayamos hecho. Dios está interesado en nuestro futuro y en lo que podemos llegar
a ser; siempre y cuando dejemos de mirar atrás y puestos los ojos en Jesús retomemos
nuestro lugar en la carrera y cual atleta comencemos a correr con la mira puesta en la
meta de una corona que Dios mismo nos dará a todos los que estemos dispuesto a ser
fieles hasta la muerte (Apocalipsis 2:10), tal como lo fue Pablo.

LLAMADO

Dentro del grupo de personas que se bautizaron en la campaña realizada


por el hermano ex delincuente, se encontraban los miembros de “Las

24
rondas campesinas” (Organismo de autodefensa popular existente
en la zona rural del Perú), quienes al enterarse de su llegada al
pueblo asistían cada noche a la semana de evangelismo con el fin de
tomarlo prisionero. Pero cuando el llamado se hizo, estos salieron para
ser bautizados y tras la pregunta de por qué tomaban esta decisión, ellos
respondieron, que si Dios pudo perdonar y cambiar a ese hombre que tanto mal
había hecho, también podía perdonarlos y cambiarlos a ellos.

¿Aún sigues creyendo que Dios no puede cambiar tu vida?

¿Aún sigues creyendo que son tan graves tus pecados, que Dios no pueda perdonarlos?

Amigo, Dios perdonó al ladrón en la cruz, perdonó a Pablo el perseguidor y lo convirtió en el más
grande y sabio predicador humano. Dios perdonó a “el tripa” y lo convirtió en Regulo Palacios, líder
de iglesia y evangelista público que predica del amor de Dios. Te imaginas que puede hacer contigo.

Hoy el Señor te dice: “al que viene a mí, de ningún modo lo echaré fuera” (Juan 6:37), toma hoy
la decisión de olvidar tu pasado, y comienza a correr tomado de la mano de Jesús, hacia la meta
que es la corona de la vida, teniendo siempre presente, que si Dios es con nosotros, ¿quién contra
nosotros? Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece.

25
Privilegios para los hijos que 7
obedecen a Dios

Romanos 8:28-38. Hoy vivimos en un mundo donde la situación cada vez es mas adversa.
Aumentan los problemas sociales, familiares y aún nosotros como cristianos no estamos exentos
de todos estos estragos, producto de una generación que cada día se aleja más de su Creador.
Frente a todo esto somos golpeados por las adversidades de la vida y surge una gran interrogante
en nuestras vidas. ¿Será que los cristianos también sufrimos?

ILUSTRACIÓN

Una historia habla de un anciano labrador que tenía un viejo caballo para cultivar sus campos.
Un día, el caballo escapó a las montañas y el anciano no pudo arar más. Cuando los vecinos se
acercaban al anciano labrador para lamentar su desgracia, éste les replicaba – ¿Si es para bien?...
¿o es para mal? Solo Dios lo sabe. 

Una semana después, el caballo bajó de las montañas trayendo consigo una manada de caballos
salvajes. Entonces los vecinos felicitaron al labrador, pero éste les respondió – ¿Si es para bien?...
¿o es para mal? Solo Dios lo sabe.

Cuando el hijo del labrador intentó domar uno de esos caballos salvajes, cayó y se rompió una
pierna. Todo el mundo consideró el hecho como una desgracia, pero no así el labrador, quien se
limitó a decir: – ¿Si es para bien?... ¿o es para mal? Solo Dios lo sabe. 

Unas semanas más tarde, el ejército entró en el poblado y fueron reclutados todos los jóvenes que
se encontraban en buenas condiciones. Cuando vieron al hijo del labrador con la pierna rota, lo
dejaron tranquilo. – ¿Si es para bien?... ¿o es para mal? Solo Dios lo sabe.

Cuando alguien te diga o haga algo que te perturbe o te hiera en el corazón, piensa que lo puede
estar haciendo por tu bien. Todo lo que a primera vista parece un contratiempo, Dios lo usará para
bien. Por lo general, cuando las cosas se reciben y aceptan como llegan, se comprobará que todo
lo que sucede Dios lo permite para nuestro bien

En el mensaje de hoy descubriremos cuál es el propósito por el cual Dios nos llama y permite las
adversidades en nuestras vidas.

I. DIOS TE AMA Y ESPERA QUE TÚ LE AMES

El texto dice en Romanos 8:28  “Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las
cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a su propósito”
(LBLA).

Dios te ama de manera infinita. Fue tanto su amor, que dio todo lo que tenía.
En Juan 3:16 dice que Dios entregó a su hijo para salvarnos porque nos
amó. En el texto de hoy, Dios espera que lo amemos y los que aman a
Dios tienen una recompensa.

Debido a que El amor a Dios Es la tarjeta de presentación del creyente,


es la base de todo verdadero hijo de Dios. El amor hacia Dios no es una
26
mera palabra, debe de manifestarse cuando las adversidades llegan
a tu vida. Es allí cuando Dios los transforma en una bendición.

El amor de Dios es la fuente de la salvación. Sin amor no hay salvación.


Todo lo que sucede, sea bueno o malo, Dios lo usará para nuestra salvación
a los que realmente tienen fe y confían en la conducción de Dios. Su amor por
Dios es una respuesta al amor de Dios para ellos, y porque él obra en todas las
cosas para su salvación. El amor de Dios debe llegar primero al hombre y entrar en su
corazón antes de que pueda amar a Dios (1 Juan 4: 19).

Querido amigo la fe cristiana se basa en el amor y en la admiración por Dios y por todo lo que
él es. Dios siempre está empeñado en el bien de los que experimentan tal amor

a. Amar a Dios trae recompensa

El texto dice: en Romanos 8:28 Que todas las cosas cooperan para bien de los que
aman a Dios (28) Y eso quiere decir literalmente, “todas las cosas”. Tanto las cosas
buenas como las malas; las cosas claras como las oscuras; las alegres y las tristes; la
prosperidad y la pobreza; la salud y la enfermedad; la calma y la tormenta; la comodidad
y el sufrimiento; la vida y la muerte. Dios encamina todas las cosas a mi favor. Frente a
los momentos más adversos de la vida nace la esperanza más linda de la vida.

Jesús debe ser aquella esperanza que transforma tu situación adversa y difícil en una
gran oportunidad de vivir y ser diferente. Hay muchas personas que sufren dificultades
de salud, dinero, y tratan de solucionar sus problemas solos. Lo único que consiguen es
desesperarse, ven un túnel sin salida. Pero allí está la esperanza para los que aprenden
a amar a Dios. Pueden sufrir de salud y economía, pero vive con la esperanza de que
un día todo cambiará, todo terminará. Esa esperanza es la marca de una persona que
aprende a amar a Dios.

Todo lo que se permite ayuda para bien a los que aman a Dios. Si Dios permite que nos
sobrevengan sufrimientos y perplejidades, no es para destruirnos sino para refinarnos
y santificarnos (ver com. Rom. 8: 17). Las dificultades y los desengaños de esta vida
hacen que perdamos el apego a este mundo y nos impulsan a mirar al cielo como
nuestro hogar. Nos enseñan la verdad en cuanto a nuestra condición frágil y perecedera,
y hacen que dependamos de Dios para recibir apoyo y salvación.

Las pruebas también desarrollan en nosotros un espíritu más humilde y sumiso, una
disposición más paciente y tierna. Esto lo han experimentado los hijos de Dios a través
de la historia, y al final de sus vidas han podido decir que fueron afligidos para su bien
(Sal. 119: 67, 71; cf. Heb. 12: 11). Antes de morir José dijo a sus hermanos: “Vosotros
pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien” (Gén. 50: 20).

b. Amar a Dios te da seguridad (no tienes temor de nada)

Romanos 8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién
contra nosotros? (RV) En este texto, Dios nos muestra la seguridad de
su compañía cuando aprendes a amar a Dios, reconoces que Dios
está de su lado, y con él no hay nada ni nadie, ni la muerte ni la
vida, ni ángeles ni demonios, ni lo presente, ni lo por venir, que
nos pueda separar de su amor. Al soportar pacientemente el
sufrimiento, tu carácter se va haciendo más y más semejante
al del Salvador. Todo aquello nos da seguridad de que nada ni
nadie nos podrá hacer daño ni separar del amor de Dios.
27
II. DIOS TE CONOCE Y ESPERA MOLDEARTE A LA IMAGEN DE
JESÚS (Vv.29)

Romanos 8:29  “Porque a los que antes conoció, también los predestinó
para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea
el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó, a éstos también
llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos
también glorificó.”

Para poder ser moldeados a la imagen de Dios debemos seguir los siguientes pasos:

1. Acepta que Dios te conoce. Dios te conoce de antemano porque es omnisciente, es


decir, conoce todas las cosas. Dios conoce el pasado, el presente y el futuro. Como él
conoce el futuro, nunca es tomado por sorpresa. La apostasía de Satanás y la caída del
hombre fueron previstas por él, y tomó las medidas necesarias para hacer frente a la
emergencia (1 Ped. 1: 20; Apoc. 13: 8; DTG 13).

La profecía es la evidencia suprema del conocimiento anticipado divino. La profecía


predice lo que la presencia de Dios ha visto que sucederá. Dios predestinó a los que
previamente conoció. Usando un lenguaje humano, como Dios veía anticipadamente,
y por lo tanto conocía de antemano a cada generación de hombres que actuarían en
el escenario de los acontecimientos de este mundo, él unía inmediatamente con su
conocimiento anticipado la decisión de predestinarlos a todos para que fueran salvos.
Dios nunca tuvo otro propósito sino la salvación de los miembros de la familia humana.
Dios “quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad”
(1 Tim. 2: 4).

Dios no quiere “que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento” (2
Ped. 3: 9). Querido amigo, querido joven de Dios, no te puedes esconder. En su plan está
salvarte, pero es la decisión que debes de tomar, de caer en los brazos de aquel que
conoce tu vida. Nadie mejor que Dios que te conoce te ofrece salvarte.

2. Acepta el llamado de Dios. El llamamiento divino es el primer gran paso en la salvación


personal, y la respuesta a él constituye la experiencia de la conversión. El llamado es de
origen divino y manifiesta el poder soberano mediante el cual somos invitados. Dios te
llama a cambiar de vida y ese cambio se efectúa mediante la unión de lo humano con
lo divino. Por eso mi querido amigo Dios te llama hoy a unir tu vida a la de Cristo. Te
llama a tener fe y esperanza en que en medio de las pruebas Él está a tu lado, y cuando
venga la tormenta corre a los brazos de Él. Une tu vida al príncipe de la vida que es
Jesús. Entrega tu vida hoy.

3. Acepta la justicia de Cristo. Cuando aceptas que Dios te conoce y aceptas su llamado
entonces la justicia de Dios se manifestará en tu vida. La justificación es el resultado
natural de una vida colocada en las manos de Dios. Él te hace justo aun siendo
pecador. Por eso, cada día debemos de reconocer nuestra condición pecaminosa
y escuchar el llamado de ir a los brazos de Dios como nuestro Salvador. Cada
día tenemos que derrotar a nuestra naturaleza pecaminosa, al yo, al orgullo,
al pecado que nos asedia. No es fácil. Solo Dios te puede hacer más que
vencedor. Derriba tu vida a los pies de Cristo y Él te levantará.

4. Acepta la santificación. Santo es separado para Dios. Cuando


cada día te separas para Dios entonces se cumple lo que dice:

28
Romanos 8:38 “Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la
vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por
venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá
separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”.

Nadie te podrá separar de Dios cuando permaneces en su presencia. Hay


personas que no pueden borrar su pasado. Dios tiene la salida, únete a Él. Hay
personas que viven una vida de fracaso, Dios te ofrece una solución, personas que
solo piensan en el futuro no saben que sucederá, tienen problemas económicos, de
trabajo, de familia. Cae hoy a los pies de Cristo y no te separes jamás, y tendrás una
vida de felicidad.

III. DIOS TE SALVA Y TE OFRECE LA VIDA ETERNA

Romanos 8:32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros,
¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?

La salvación es el mayor regalo que Dios nos entrega. A través del sacrificio demostrado por
nuestro Señor Jesucristo en la cruz dio todo por ti. ¿Qué estás haciendo por Él?

El anhelo de un hijo de Dios es concretizar esa salvación y solo se dará en la mañana


gloriosa. La Glorificación es la recompensa a todos aquellos que escucharon el llamado de
Dios. Aceptaron que necesitan de Dios porque Él los conoce, moldearon su vida en Jesús y
estarán listos para concretizar el más grande sueño de vivir por toda la eternidad cuando
Dios regrese por segunda vez. Es para todos los que siguieron fieles y perseveraron hasta el
fin se salvarán.

LLAMADO

Querido amigo Dios te invita hoy a depositar tu vida en sus manos. Él te conoce, no te puedes
esconder de Dios. Él conoce tu pasado, mira tú presente y te quiere dar un futuro glorioso. Te
podrás esconder de tu familia, de tus problemas, pero no de Dios. Reconócele como tu Dios,
responde a su llamado, vive una vida semejante a la de Cristo y obtendrás la seguridad de la
salvación, donde nada ni nadie te podrán separar del amor de Dios.

Hoy Dios te invita a unir tu vida a la de Cristo a través del bautismo. No importa dónde has caído,
vuelve a los brazos de tu salvador. Hoy debes de tomar la mejor decisión de tu vida. Estás luchando,
las cosas están saliendo mal, ven a Jesús. Él lo encaminará para bien. ¿Aceptas el llamado de Dios
para ti? ¿Quieres unir tu vida a Cristo hoy a través del bautismo?. Ven adelante, el cambio se
efectúa mediante la unión de lo humano con lo divino. Cuando cada día morimos a nuestro yo, y
colocamos a Jesús en primer lugar.

En Cristo eres más que vencedor el reino de los cielos es de vencedores y tú puedes ser uno de
ellos. Ven a Jesús.

29
Ahora veo 8
Una Oportunidad Para Recomenzar

Apreciado Secretario y Anciano responsable por el proyecto Reencuentro de 2018:


este es un sermón sugerente. Usted puede adicionar y/o alterar el contenido, y usarlo
como un bosquejo para la predicación de la Palabra de Dios. Cuando vaya a predicar,
hable al corazón de aquellos que están regresando a la iglesia. Dios lo usará poderosamente
en la predicación y, por la gracia de Dios, muchos regresarán.
TEXTO: Jueces 16:28
“Entonces clamó Sansón al Señor, y dijo: Señor Dios, acuérdate ahora de mí, y esfuérzame ahora
solamente esta vez, oh Dios.”
INTRODUCCIÓN
A todos nos gusta oír historias de personas que de la nada, con sufrimiento y lucha, se convirtieron
en vencedores. Pero, ¿qué de los fracasos en la vida?
¿Qué diremos de las personas que de a poco fueron perdiendo visión, visión espiritual, y abando-
nando los caminos de Dios?
¿Es posible escribir una nueva historia en estos tiempos que vivimos?
¿Es posible encontrar una oportunidad para recomenzar?
Hoy es el día del Reencuentro, día de decisiones que pueden cambiar tu vida.
La gran pregunta es: ¿cómo regresar a Dios? ¿Cómo vencer el pecado? ¿Cómo vencer en la batalla
espiritual en la cual estamos involucrados?
En realidad, estamos envueltos en un “gran conflicto cósmico”, y sólo podremos elegir un lado: a
Jesús o al enemigo.
“En los evangelios encontramos la confirmación de que la guerra en la cual estamos involucrados
es más profunda y mortal de lo que nos gustaría admitir. Así como el soldado paracaidista se lanza
y cae sobre las líneas enemigas, Jesús se lanzó a nuestro planeta para revelar más claramente las
estrategias del adversario y su real poder de fuego” (Experimente un Recomienzo, p. 9).
Juan 3:16 (leer con la iglesia) – Nuestra victoria costó la vida de Cristo.
I . LLAMADO POR DIOS
1. La Biblia relata la historia impresionante de un hombre llamado por Dios (Jueces 13 al 16) que
en una verdadera batalla espiritual clamó a Dios para tener una oportunidad más para cumplir
el propósito que Dios le había dado en la vida.
2. Sansón fue llamado para liberar a su pueblo de la opresión de los filisteos. Cuando
Dios llama, él capacita. Pero Sansón fue perdiendo la visión espiritual de su llama-
do. Se volvió orgulloso, y exhibía su fuerza como algo propio. Le dio lugar a la
sensualidad. Pensaba que él era el centro de todo y no Dios.
3. Hoy el ser humano se coloca en el centro de todo, creando su propia
verdad y dejando a Dios de lado. Algunos llaman a esto la posverdad,

30
que significa que los hechos objetivos y las verdades tienen menos
influencia que las emociones, gustos y creencias personales.
4. En el libro de Jueces, capítulos 13 al 16 encontramos la historia
de Sansón: su nacimiento, su casamiento, la guerra contra los filisteos, su
pecado con una prostituta en Gaza, la traición de Dalila, su humillación y cauti-
verio y finalmente, cuando aprovechó una oportunidad dada por Dios para cumplir
su propósito de vida.
II . NAZAREO
Josué 13:1 (leer con la iglesia)
“Y los hijos de Israel volvieron a hacer lo malo en los ojos del Señor; y el Señor los entregó en mano
de los filisteos, por cuarenta años.”
1. El ángel del Señor aparece a la esposa de Manoa, la cual era estéril, y dice: Jueces 13:5 (leer)
“Porque tú te concebirás, y darás a luz un hijo; y no subirá navaja sobre su cabeza, porque
aquel niño nazareo será de Dios desde el vientre, y él comenzará a salvar a Israel de mano de
los filisteos.”
2. Nazareo significa “separado”, “dedicado” (Números 6)
El voto de nazareo “significaba una consagración de la vida a Dios.” La manifestación externa
del voto implicaba:
a. Abstención de todos los derivados de la vid, incluyendo el vino o la uva fresca o seca (Nú-
meros 6:3-4);
b. Dejarse crecer los cabellos, y no ser cortados por navaja u otro instrumento cortante (Nú-
meros 6:5);
c. No tocar un cadáver bajo ninguna circunstancia para no contaminarse (Números 6:6).
4. Aunque para algunos el voto de nazareo podía ser temporario, en el caso de Sansón, era el plan
de Dios que fuera para toda la vida.
5. “El plan de Dios para Sansón era que, a través de su liderazgo, librase a Israel de la opresión
de los filisteos. El voto y la instrucción fiel de los padres, fueron de influencia para cumplir este
plan” (CBASD, v. 2, p. 396).
APLICACIÓN: La primera visión es saber que tú fuiste escogido por Dios. Tú estás aquí hoy
porque Jesús te escogió. Dios tiene un propósito para tu vida. No vale la pena quedar lejos de
los caminos de Jesús. Juan 15:16 está escrito: “Yo os elegí”.
6. Al finalizar tu vida, ¿qué legado dejarás? ¿Has vivido para cumplir el llamado que Dios te ha
hecho? La experiencia de Sansón ilustra cómo alguien puede frustrar los elevados propósitos
establecidos por el Señor.
III. PERDIENDO LA VISIÓN
1. Siendo Sansón adulto, comenzó a involucrarse con personas idólatras. La ciudad
de Zora estaba cerca del territorio de los filisteos, a unos 7 km., y Sansón
comenzó a relacionarse con ellos.
2. “Al alcanzar la edad adulta, Sansón se rehusó a conducir su vida en
armonía con el plan de Dios. Se volvió obstinado y moralmente des-

31
cuidado. La debilidad de carácter de Sansón lo incapacitó para lograr
librarse de los filisteos” (CBASD, v. 2, p. 397).
3. Su flaqueza lo incapacitó para ver las cosas desde la perspectiva
de Dios. Comenzó a desarrollar una ceguera espiritual.
APLICACIÓN: Etapa de disminución espiritual. Todos nosotros, en algún momen-
to de nuestra vida, pasamos por altibajos en la vida espiritual.
4. Jueces 14:1, 2 (leer con la iglesia) “Yo he visto en Timnat una mujer”.
5. El gran problema de Sansón: su visión.
Simplemente dijo: “ésta agradó a mis ojos” Jueces 14:3.
Él no consideró la voluntad de Dios, ni de sus padres o lo que la religión le dictaba.
6. Jueces 14:10-12 (leer o comentar)
En vez que la novia fuese el centro de atención, Sansón necesitaba él ser el centro, con su
fuerza y sus enigmas.
7. “Del devorador salió comida, y del fuerte salió dulzura” (Jueces 14:14), por este enigma su mujer
lo tentó para que le revelara el significado, llorando e insistiendo durante siete días (Jueces 14:17).
8. Cuando el enigma fue revelado, Sansón se volvió violento y mató a 30 filisteos para poder pagar
la apuesta. Luego regresó a su casa, olvidándose de su esposa. Su orgullo herido fue más fuerte
que el amor por su esposa. Cuando inalmente decidió volver con ella, ya se había casado con
otro hombre.
IV. LOS FILISTEOS Y DALILA
1. Sansón comenzó a guerrear contra los filisteos.
Jueces 15:4, 5 “Y quemó las mieses amontonadas y en pie, viñas y olivares”.
2. Esa agresión por parte de Sansón, incitó a los filisteos a atacar al pueblo de Israel. Los israelitas
convencieron a Sansón a que se entregara, y fue llevado atado a los filisteos. Pero Sansón
rompió las cuerdas, y tomando una quijada de asno, hirió a mil hombres.
3. Sansón comenzó su alejamiento de Dios al unirse a una mujer pagana, y luego buscando una
prostituta en Gaza (Jueces 16:1, 2: leer).
4. Luego Sansón conoció a otra mujer, llamada Dalila, Jueces 16:4, 5 - Sansón se enamoró de
Dalila.
Los príncipes de los filisteos convencieron a Dalila para seducir a Sansón para descubrir el
secreto de su gran fuerza, y así poder subyugarlo.
5. Jueces 16:16, 17 (leer) “Importunándolo ella todos los días”
CONCLUSIÓN
1. En su ceguera espiritual, finalmente Sansón fue vencido por sus enemigos, les fueron
quitados sus ojos y quedó también ciego de manera física. Fue arrojado a la cárcel
y condenado a trabajos forzados, bajo circunstancias desfavorables y difíciles.
2. Luego é fue llevado como títere en una fiesta de los filisteos a su dios
Dagón, el dios pez, para conmemorar la victoria de los filisteos sobre
el Dios de Israel.

32
3. En esta condición difícil y humillante para el siervo del Señor, San-
són volvió en sí y se arrepintió.
Cita:
“¡Cuán grande era el cambio para el que había sido juez y campeón de Israel,
al verse ahora débil, ciego, encarcelado, rebajado a los menesteres más viles!...
En el sufrimiento y la humillación, mientras era juguete de los filisteos, Sansón
aprendió más que nunca antes acerca de sus debilidades; y sus aflicciones lo llevaron
al arrepentimiento” (Patriarcas y Profetas, p. 549).
APLICACIÓN: Cuando nos apartamos de Dios, perdemos la visión celestial. Y en el caso de Sansón,
también perdió la visión física.
4. Sansón fue protagonista del gran conflicto cósmico que mencionamos al inicio del mensaje de
hoy. La pregunta que debemos hacernos: ¿quién finalmente va a vencer en tu vida?
5. El Dios de Israel no podía ser burlado a causa de la vida de Sansón. “Ahora veo” – con su visión
espiritual restaurada, Sansón le pidió a Dios una nueva oportunidad.
6. En aquel momento, cuando comenzó a mirar dentro de sí y ver lo que había hecho, se acordó
de su llamado, su propósito en la vida. Allí hizo una oración. Antes ya había orado por su vida
(Jueces 15:18), y ahora oraba por su muerte en la gran batalla espiritual contra los paganos
(Jueces 16:28).
7. Sansón cambió la dirección de su vida ejecutando un acto heroico al final de la misma. “No se
trataba de un suicidio, sino de un sacrificio en la batalla. En el pasado, él había orado por un
milagro para vivir (15:8). En esta ocasión, oró para morir” (Comentario Biblia Andrews, p. 331).
Salmo 138:7 “Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás.”
Es como si él dijese después de su oración de entrega: ¡AHORA VEO! Era una visión del propó-
sito de su vida. Una visión de Dios.
8. Sansón se colocó entre las dos columnas centrales y las derrumbó con la fuerza dada por Dios.
Dios oyó a su siervo pecador cuando él regresó para cumplir el propósito de su vida.

LLAMADO
Querido hermano en Cristo, no importa cuánto tiempo has estado lejos de los caminos de Dios, hoy
puedes decir: “¡AHORA VEO!” Esta es en verdad una oportunidad para recomenzar.
Sansón aprovechó la oportunidad para cumplir el propósito dado por Dios a su vida.
En este momento puede pasar un video de testimonio de Reencuentro, o puede entrevistar a una
persona que se haya apartado de los caminos de Dios y que ya haya decidido regresar, y está
lista para bautizarse en este momento. Y luego hable al corazón de las personas que vinieron
al Reencuentro.
Jueces16:28
“Entonces clamó Sansón al Señor, y dijo: Señor Dios, acuérdate ahora de mí, y
esfuérzame ahora solamente esta vez, oh Dios.”
Mientras se oye una música suave de llamado, diga esta reflexión sobre
Sansón:

33
• Sansón nunca se sujetó a la autodisciplina, y por esto tuvo que ser
disciplinado por las consecuencias de sus actos.
• Acabó rindiéndose en las manos de sus enemigos, porque nunca
se rindió a sí mismo.
• Dominó al león en su camino a Timnat, pero nunca dominó su propio “yo”.
• Gustaba de proponer enigmas, pero sólo tarde y al final de su vida resolvió
su propio enigma.
• Fijó los ojos en el brillo atrapante de una falsa Dalila, y acabó atrapado por el pecado.
• Buscó una falsa libertad y terminó siendo un esclavo.
• No quiso recorrer el camino de la justicia, y terminó dando vueltas y más vueltas en el molino
de la cárcel.
• Incendió, con la ayuda de las zorras, los cultivos de sus enemigos, pero permitió que las peque-
ñas zorras de sus vicios lo destruyesen.
• Jugaba a que lo ataran, y finalmente quedó atado.
• Gustaba de la diversión, y su penúltimo acto fue de servir de diversión delante de sus enemigos.
Más él buscó la oportunidad de recomenzar en el último momento de su vida, y la gracia de Dios
lo alcanzó. Él pudo decir: “¡Ahora veo!”
¿Deseas hoy pedirle a Dios: acuérdate de mí? ¿Quieres ser abrazado por Jesús y regresar al redil
del Señor?
No desaproveches esta oportunidad. Voy a orar por ti ahora. Ven al altar del Señor. No importa si
en algún momento de tu vida has dejado de ver las cosas de Dios. Hoy es una nueva oportunidad
para recomenzar. ¡Ven!

34

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