Dos muestrarios de mármoles (cont.

)
Las primeras noticias de muestrarios de mármoles y piedras duras se remontan al siglo XVIII.
Los tallares italianos de piedras duras disponían de una gran variedad de mármoles obtenidos
en las canteras locales. Desde el Renacimiento, la fascinación por el uso de estos materiales
llevó a la proliferación de diversos centros de producción en la península italiana como los
de Roma, Florencia o Verona, dedicados a la creación de obras maestras para tableros de
mesa, arquetas, escritorios y otro mobiliario.

El interés de estas piezas para el Museo radica en que se trata de una herramienta de traba-
jo de los marmolistas y como muestra de los sistemas de producción artesanal de los talleres
preindustriales.