La guerra ha jugado un papel fundamental en la construcción del Estado colombiano durante el siglo XX. Las fuerzas armadas otorgaron poder al Estado a través de su autoridad sobre los ciudadanos, a veces con alcances mayores que los permitidos por el contrato social. La guerra en Colombia ha sido impulsada principalmente por conflictos políticos entre partidos, lo que ha mantenido la violencia en el país y causado innumerables víctimas. El siglo XX estuvo marcado por guerras civiles, internacionales y la aparición de grupos armados i
La guerra ha jugado un papel fundamental en la construcción del Estado colombiano durante el siglo XX. Las fuerzas armadas otorgaron poder al Estado a través de su autoridad sobre los ciudadanos, a veces con alcances mayores que los permitidos por el contrato social. La guerra en Colombia ha sido impulsada principalmente por conflictos políticos entre partidos, lo que ha mantenido la violencia en el país y causado innumerables víctimas. El siglo XX estuvo marcado por guerras civiles, internacionales y la aparición de grupos armados i
La guerra ha jugado un papel fundamental en la construcción del Estado colombiano durante el siglo XX. Las fuerzas armadas otorgaron poder al Estado a través de su autoridad sobre los ciudadanos, a veces con alcances mayores que los permitidos por el contrato social. La guerra en Colombia ha sido impulsada principalmente por conflictos políticos entre partidos, lo que ha mantenido la violencia en el país y causado innumerables víctimas. El siglo XX estuvo marcado por guerras civiles, internacionales y la aparición de grupos armados i
Cap. 4: Estado y guerra en Colombia en el siglo XX. CARLOS ALBERTO PATIÑO VILLA.
La sociedad colombiana ha estado impregnada desde su nacimiento con una condición
conflictiva y bélica, la cual se ha presentado sin falta en todos y cada uno de los años que hemos sido denominados como República de Colombia, conllevando casi a considera que este comportamiento constante de conflicto, como inherente a nuestra naturaleza, resignándonos gradualmente a la aceptación de los múltiples conflictos que nos rodean. “El corpus informativo que existe sobre el siglo XX colombiano, especialmente en la perspectiva de nuestro trabajo de demostrar la ‘hipótesis bélica’, puede llevar a confusiones valorativas del papel y la importancia estructural de las fuerzas armadas […] la confusión consiste en creer que porque la mayoría de los indicadores de tamaño, capacidad, y fuerza aumentan, el Estado es más fuerte, más centralizado y con mayor capacidad para liderar los cambios sociales necesarios y controlar los excesos de quienes lo desafían. Sin embargo, la realidad permite identificar varias tendencias que determinan el carácter, el papel y la relación de las fuerzas armadas con la construcción del Estado.” (Patiño, pág 145). Las fuerzas armadas jugaron un papel muy importante en la configuración y mantenimiento del estado en Colombia, otorgándole por medio de su autoridad sobre la ciudadanía, determinado poder que en ocasiones poseía alcances mucho más grandes que los concedidos en el contrato social. Otro factor determinante (plenamente relacionado con el anterior) es la guerra: La guerra en Colombia ha sido desencadenada por diversos tipos de conflictos, pero el más influyente de todos ha sido siempre el conflicto político. Desde sus inicios en la patria boba y su desarrollo a través de los años, hemos observado como la política y más específicamente las disputas entre los partidos, han mantenido viva la guerra en el país, y nos ha costado más allá de tierras, recursos y una buena imagen frente al mundo, una cantidad increíble de víctimas. Podemos ver como el siglo XX fue un periodo extremadamente guerrerista en el país, pues empezó con una guerra civil propiciada por liberales y conservadores, siguió con guerras con los países vecinos, guerras que se presentaron en más de una ocasión. Cerca de la mitad del siglo, la guerra partidista se hizo más despreciable al eliminar personajes políticos por temor a lo que podía llegar a ser (tal es el caso de Jorge Eliecer Gaitán) esto decantó en un manejo político tan deplorable que incluso un golpe de estado por un alto mando militar, llegó a considerarse al principio como una salvación para la sociedad. Posteriormente la guerra contra nosotros mismos se hizo más grave y ‘formal’ tras la creación de grupos alzados en armas y unos años más tarde, con la aparición de las mafias. ¿Las fuerzas armadas se constituyen en el contexto colombiano, como causa o consecuencia de la guerra? ¿Qué tanta culpa tiene el Estado en la guerra que Colombia ha mantenido contra si misma por casi dos siglos? “ Visto en conjunto, el Estado ha estado rezagado con respecto a los cambios y dinámicas que la sociedad colombiana ha emprendido, principalmente en asuntos relacionados con la violencia interna y muchas de las prácticas económicas encaminadas a fortalecer entornos ilegales. Este regazo se complementa con grandes acciones de corrupción por parte de los grupos gobernantes […] Además, ha tenido un papel clave en la incapacidad del Estado para tomar el liderazgo el hecho de que la burocracia carece de una profesionalidad activa y es superada permanentemente por los entornos profesionales del sector privado.” ([La cursiva es mía.] Patiño, pág. 203-204)