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Usted puede ser más propenso a experimentar Burnout si cumple varias de las siguientes
características (en forma de señales o síntomas):
● Se identifica tan fuertemente con el trabajo que le falta un equilibrio razonable entre
su vida laboral y su vida personal.
● Intenta ser todo para todos, asumir tareas y funciones que no corresponden a su
cargo.
● Trabaja en empleos relacionados con actividades laborales que vinculan al trabajador y
sus servicios directamente con clientes. Esto no significa que no pueda presentarse en
otro tipo de labores, pero en general doctores, enfermeras, consultores, trabajadores
sociales, maestros, vendedores puerta a puerta, encuestadores, oficiales de cobro y
otros muchos oficios y profesiones tienen mayor riesgo de desarrollar la condición.
● Siente que tiene poco o ningún control sobre su trabajo.
● Su trabajo es especialmente monótono y no tiene sobresaltos.
Hágase las siguientes preguntas para saber si usted está en peligro de padecer Burnout:
➢ Agotamiento emocional:
Un desgaste profesional que lleva a la persona a un agotamiento psíquico y fisiológico.
Aparece una pérdida de energía, fatiga a nivel físico y psíquico. El agotamiento emocional se
produce al tener que realizar unas funciones laborales diaria y permanentemente con
personas que hay que atender como objetos de trabajo.
➢ Despersonalización:
Se manifiesta en actitudes negativas en relación con los usuarios/clientes, se da un incremento
de la irritabilidad, y pérdida de motivación. Por el endurecimiento de las relaciones puede
llegar a la deshumanización en el trato.
Causas
El agotamiento del trabajo presente en el Síndrome Burnout puede ser el resultado de varios
factores y puede presentarse normalmente cuando se dan condiciones tanto a nivel de la
persona (referentes a su tolerancia al estrés y a la frustración, etc.) como organizacionales
(deficiencias en la definición del puesto, ambiente laboral, estilo de liderazgo de los superiores,
entre otros).
1. La falta de control
Una incapacidad de influir en las decisiones que afectan a su trabajo: como su horario,
misiones, o la carga de trabajo que podrían conducir a agotamiento del trabajo.
❖ Técnicas fisiológicas
Están orientadas a reducir la activación fisiológica y el malestar emocional y físico provocado
por las fuentes de estrés laboral. Entre otras, destacan las técnicas para la relajación física, el
control de la respiración y el biofeedback. Estas técnicas consisten en facilitar al individuo el
aprendizaje de una forma apropiada de respirar para que en situaciones de estrés pueda
controlar su respiración de formas automática lo que le permitirá una adecuada oxigenación
del organismo.
❖ Técnicas conductuales
El fin de estas técnicas es conseguir que la persona domine un conjunto de habilidades y
competencias que le faciliten el afrontamiento de los problemas laborales. Entre ellas se
encuentran el entretenimiento asertivo, el entrenamiento en habilidades sociales, las técnicas
de solución de problemas y las técnicas de autocontrol.
Peiró (1992) opina que una dieta equilibrada, no fumar ni beber en exceso y no consumir
excitantes ni fármacos psicoactivos son factores que mejoran el estado de salud y el sistema
inmunológico, al mismo tiempo que modulan la respuesta de estrés laboral. De la misma
manera, propone que el ejercicio físico aumenta las resistencias antes los efectos de dicho
estrés.
❖ Técnicas cognitivas
El abordaje cognitivo busca mejorar la percepción, la interpretación y la evaluación de los
problemas laborales y de los recursos personales que realiza el individuo. Entre las técnicas
cognitivas más empleadas destacan la desensibilización sistemática, la detención del
pensamiento, la inoculación de estrés, la reestructuración cognitiva, el control de
pensamientos irracionales, la eliminación de actitudes disfuncionales y la terapia racional
emotiva.
Si está preocupado por el Burnout en el trabajo, debe tomar medidas. Para comenzar:
● Administre los factores estresantes que contribuyen al agotamiento del trabajo. Una
vez que haya identificado lo que está alimentando sus síntomas de Burnout, puede
hacer un plan para resolver los problemas.
● Evalúe sus opciones. Discuta las preocupaciones específicas con su supervisor. Tal vez
puedan trabajar juntos para cambiar las expectativas o llegar a compromisos o
soluciones.
● Ajuste su actitud. Si se ha vuelto cínico en el trabajo, tenga en cuenta las formas de
mejorar su perspectiva. Vuelva a descubrir los aspectos agradables de su puesto.
Establezca relaciones positivas con los compañeros para lograr mejores resultados.
Tome descansos cortos durante todo el día. Pase tiempo fuera de la oficina y haga las
cosas que le gustan.
● Busque apoyo. Ya sea que llegue a los compañeros de trabajo, amigos, seres queridos
u otras personas, el apoyo y la colaboración pueden ayudar a lidiar con el estrés
laboral y la sensación de agotamiento. Si usted tiene acceso a un programa de
asistencia al empleado, aproveche los servicios disponibles.
● Evalúe sus intereses, habilidades y pasiones. Una evaluación honesta puede ayudarle a
decidir si debe considerar un trabajo alternativo, como por ejemplo uno que es menos
exigente o que mejor se ajusta a sus intereses o valores fundamentales.
● Haga algo de ejercicio. La actividad física regular como caminar o andar en bicicleta,
puede ayudarle a lidiar mejor con el estrés. También puede ayudarle a desconectar
fuera del trabajo y dedicarse a otra cosa.
El rol del profesor en la sociedad actual es retador, pero a la vez estresante. Esto es una
verdadera "ambivalencia" que se siente y que se manifiesta de modos muy diversos. Del
profesor se espera que eduque, que forme, que oriente, pero a la vez que ejerza, en muchas
de las ocasiones, la función de los padres.
Esta responsabilidad junto con las elevadas exigencias cada vez más complejas tanto por parte
de los alumnos, familiares como de los cambios y reformas de los planes de estudio y de la
reestructuración del sistema educativo, están convirtiendo la docencia en una profesión de
alto riesgo.
El estrés ocupacional se produce cuando hay demandas del trabajo que exceden los recursos
de que dispone el trabajador. Cuando existen muchas demandas y pocos recursos para
afrontarlas, suele producirse un estado psicológico negativo en el trabajador que se puede
manifestar de modos diversos como por ejemplo la insatisfacción laboral o el burnout
(síndrome de quemarse por el trabajo).
Los obstáculos son aquellas características del ambiente laboral que impiden la realización
adecuada de las tareas y que reducen el desempeño laboral. Nuestros resultados ponen de
manifiesto que los profesores perciben dos tipos de obstáculos: obstáculos de tipo social y de
tipo técnico.
Los profesores consideran que la autonomía y el apoyo social que reciben de sus compañeros
resultan los recursos más importantes para afrontar las demandas y los obstáculos de su
puesto de trabajo. El hecho de que los profesores perciban que tienen el suficiente grado de
control para decidir qué tareas, cuándo y cómo realizarlas, así como el apoyo que reciben de
sus compañeros a la hora de llevar a cabo sus tareas, son unos amortiguadores importantes
del estrés.
De forma más específica, las fuentes de estrés que los profesores consideran más importantes
son, por orden de importancia:
1. La cantidad de trabajo que les "sobrepasa" ya sea por falta de tiempo o de exceso de
tareas
2. La sobrecarga de tipo emocional (se les exige que se impliquen a nivel personal con los
alumnos, padres, sociedad... en relaciones que son conflictivas),
3. Ambigüedad de rol o grado en el que el profesor no tiene claro cuál es su rol como
docente, qué se espera de él/ella por parte del Centro, los alumnos, los padres y la
sociedad en general,
4. Conflicto de rol o grado en el que el profesor percibe instrucciones contradictorias
respecto a cuáles son sus cometidos laborales,
5. Falta de apoyo social por parte de compañeros, centro, etc.
6. Falta de coordinación entre los compañeros en realizar trabajo en equipo,
7. Desmotivación, apatía e indisciplina por parte de los alumnos,
8. Obstáculos técnicos como problemas en el material didáctico y fallos y/o averías en la
infraestructura y/o instalaciones.
¿Pero con qué recursos personales cuenta el profesor?
El recurso personal por excelencia en la investigación es la autoeficacia. Bandura la define
como la "creencia en la propia capacidad para organizar y ejecutar los cursos de acción
requeridos para manejar situaciones futuras". La autoeficacia afecta a la agencia humana en la
forma de actuar, pensar y sentir de las personas.
Afecta a cómo pensamos y nos sentimos, un sentido de autoeficacia negativo está asociado
con burnout, depresión, ansiedad y desamparo. La autoeficacia positiva se asocia con la
persistencia, la dedicación y la satisfacción en las acciones que realizamos, así como la
autoeficacia negativa se asocia con el malestar, el burnout y la insatisfacción
Consideraciones finales
Los distintos trabajos que hemos revisado ponen de manifiesto que, para explicar la
complejidad del síndrome de burnout, este se ha de enfocar desde una perspectiva amplia, lo
que a su vez nos lleva a plantear que la forma más eficaz de abordar la prevención y el
tratamiento sea integral, con intervención en todas sus dimensiones. El modelo cognitivo-
conductual permite desarrollar un tratamiento fundamentado en la interacción persona y
medio, centrado en conductas específicas actuales y en las variables que las controlan en el
momento presente.
Cuestionario
Señale la respuesta que crea oportuna sobre la frecuencia con que siente los enunciados:
0= NUNCA.
Bibliografía
García-Allen, J. (2015). Burnout (Síndrome del Quemado): cómo detectarlo y tomar medidas.
Revista Psicología y Mente. Barcelona, España. Recuperado de:
https://psicologiaymente.com/organizaciones/burnout-sindrome-del-quemado
Guerrero Barona, E., Carlos Rubio Jiménez, J. (2005). Estrategias de prevención e intervención
del “burnout” en el ámbito educativo. Salud Mental, Vol. 28, No. 5. Recuperado de:
http://www.scielo.org.mx/pdf/sm/v28n5/0185-3325-sm-28-05-27.pdf
Salanova, M., Llorens, S., & García-Renedo, M. (2003). ¿Por qué se están quemando los
profesores? . Prevención, trabajo y salud, 28, 16-20.