24 INFORMACIÓN GENERAL
X X ENTRECUENTOS, EN ZONA DE DEFINICIONES
D urante tres días y cuatro no-
ches habrá mesas redondas,
talleres de formación, ma-
ratones gratuitas de narración pa-
ra niños y adultos, pero también
espectáculos de muy buen nivel a
cargo de narradores de la provin-
cia, junto a dos que se destacan: la
santafesina Marcela Sabio, y la bo-
naerense Ana Padovani.
Tan cálida para el trato cotidia-
no como cuando narra, Malena Sa-
rrot insiste en que “es un empren-
dimiento independiente, que em-
pezó con mucha modestia y se fue
haciendo gigante”, en que “la idea
es intercambiar ideas y debatir” y
en que “empezamos a pensar en
mesas redondas que pudieran re-
sultar interesantes, y de pronto, nos
encontramos con que gente suma-
mente autorizada quería ser parte
del asunto”.
De hecho, la ciudad cuenta con
una tradición en este sentido. Gru-
pos como Paranatecuento y el Club
de Narradores del Departamento de
la Mediana y Tercera Edad de la Fa-
cultad de Ciencias de la Educación
han ayudado a conservar este oficio,
a crear nuevos públicos y formar na-
rradores que, luego, se multiplicaron
en distintos emprendimientos dentro
de la provincia. La idea es reunirlos.
“En Paraná tuvo un pico de furor en
los años 90, luego decayó levemen-
te, y después comenzó a repuntar
de nuevo”, comentó, no sin agregar
que “estas actividades pueden ser-
vir para consolidar las actividades”.
–¿Cómo surge EntreCuentos?
-Desde hace un tiempo vengo
soñando con un encuentro de na-
rradores en la provincia de Entre
Ríos. Ese deseo de reunir a perso-
nas con la misma pasión y los mis-
mos sueños por narrar y transmi-
tir con e l cuerpo y a viva voz his-
torias, relatos, sucedidos. Encontré
rápidamente compañía para orga-
nizar en Víctor Villarraza y Liliana
Montórfano.
Hace más o menos tres meses
empezamos a esbozar lo que se-
ría esto que ya estamos palpando
y que se realizará el 11, 12, 13 y 14
de octubre en la ciudad de Paraná.
–¿Cómo fue creciendo la idea?
–Comenzamos convocando a
los grupos locales, y así se fue ex-
tendiendo y llegamos a hoy con la
presencia de narradores de Santa
Fe, Buenos Aires, Neuquén, Rosa-
rio y otros lugares de la República.
Nos ha parecido maravilloso y es-
X XDel contar y
sus espacios
“Narrar crea un ambiente de
intimidad”, plantea Sarrot. Y, en-
tonces, “por supuesto que el lugar
contribuye: he visto narrar en gran-
dísimos espacios y no es igual. A
mí me encanta mirar, tener a tiro al
espectador. Eso crea la complicidad.
Hay lugares en Paraná para eso y
podría haber más”.
Desenredar la lengua para
que las historias puedan fluir
Bajo la organización de “La fábrica de historias” y con el necesario acompañamiento del Ministerio de Turismo y
Cultura del Gobierno de la provincia, la Asociación “Mariano Moreno” y SanCor Seguros, tendrá lugar desde el jueves
11 al domingo 14 la primera edición del “EntreCuentos”, declarado de Interés cultural y educativo por la Cámara de
Diputados de Entre Ríos. Habrá actividades diversas en la Casa de la Cultura, La Hendija, la Escuela de Música y la
casona de Feliciano 271.
Montórfano, Sarrot y Villarraza, al frente de la organización de “EntreCuentos”.
tamos trabajando fuertemente en
este proyecto.
Los organizadores somos Víc-
tor Villarraza, Liliana Montórfano
y yo y como imaginarás, algo así,
emprendimiento independiente,
nos ha resultado trabajoso, pero
no imposible.
Estaremos trabajando en la Casa
de la Cultura, la Vieja Usina y Cen-
tro Cultural La Hendija, realizan-
do talleres de formación; marato-
nes de cuentos para niños y adul-
tos, gratuitos; mesas redondas pa-
ra ampliar la discusión sobre la na-
rración oral, sus orígenes, su pre-
sente y su futuro. También habla-
remos con dos autores, para ver si
a los autores les gusta que conte-
mos sus cuentos. Trataremos el te-
ma de violencia de género y mal-
trato infantil en algunos cuentos y
coronaremos cada día con espec-
táculos nocturnos con grupos icó-
nicos de Paraná como el Paranate-
cuento y el Club de Narradoras de la
mediana y tercera edad, la Fábrica
de Historias, la santafesina Marce-
la Sabio y el último día como bro-
che de oro, la narradora Ana Pado-
Para la entrevistada “justamente
me parece super interesante que
en este momento de conectividad
y todo al momento y que nadie se
mira con nadie porque están como
atados al teléfono o a la tablet, la
gente se tome un tiempo para es-
cuchar”. Lamentó Sarrot el hecho
de que “haya mucha gente que no
sepa ni pueda escuchar”, antes de
marcar que “todo es visual, rápi-
do, efímero”. Fue entonces cuan
do señaló que “por eso creo que la
vani de la ciudad de Buenos Aires.
También los hombres harán su ca-
mino en el espectáculo del último
día en la Vieja Usina con “La nue-
va masculinidad”.
MOTORES. –¿Qué lógica organi-
za el programa?
–El programa fue pensado con la
intención de abarcar desde lo teó-
rico, lo filosófico hasta lo práctico
de la narración. El ideal de poder
debatir con narradores y personas
autorizadas en las distintas mesas
redondas, temas que nos preocu-
pan, que nos unen, que se plantean
hacia el futuro.
El objetivo es en realidad el de
juntarnos, conocernos, divulgar
nuestra tarea, ampliar el espectro,
formar nuevos narradores o inten-
tar hacerlo.
–¿Tiene destinatarios espe-
cíficos?
–La convocatoria está pensa-
da para narradores o para aque-
llos que usen la palabra para tra-
bajar, como docentes, psicopeda-
gogos, bibliotecarios o tantas otras
especialidades que uno a veces ig-
persona que vive una vez una buena
experiencia escuchando cuentos,
no la deja nunca más” porque “se
crean momentos mágicos donde
cada uno se arma su cuento en su
cabeza; ese personaje, esa casa, ese
amor, es distinto para cada uno de
los que escucha”. Asegura que así
“se estimulan la imaginación, las
sensaciones, las vivencias”. Luego
concluyó. “En resumen, contar y es-
cuchar cuentos es decididamente
maravilloso”.
Paraná, martes 2 de octubre de 2018
nora, o simplemente para los que
se quieren dar el gusto de aprender
“el buen decir” o contar sus histo-
rias como siempre soñaron, en su
grupo, al mundo.
–Señalaste que todo se hizo en
base a esfuerzo, ¿qué disposición
encontraron en los demás?
–La disposición en el público
superó ampliamente nuestras ex-
pectativas. Ha sido maravilloso re-
cibir llamados de lugares insospe-
chados. Es como que la gente está
sedienta de estos encuentros, de
escuchar voces autorizadas, de te-
ner el placer de escuchar a narra-
dores con experiencia y sabiduría
como Ana Padovani y Marcela Sa-
bio, más los narradores locales que
sin ser tan conocidos tienen un ca-
mino recorrido y una experiencia
de muchos años.
–Es un campo que tiene su pro-
pia tradición…
–Afortunadamente, en Argen-
tina hubo alguien que rescató a la
narración oral del olvido. Se trata
de Dora Pastoriza de Etchebarne.
–¿Quién fue?
–Una sencilla maestra de prima-
ria que a mediados del siglo XX in-
corporó la lectura de cuentos en el
aula. Dora fue la primera formado-
ra de grandes narradores de hoy en
día como Ana María Bovo, Ana Pa-
dovani, Juan Moreno, entre muchos
otros, que siguen contando, dando
clases y enseñando.
MOMENTOS. –¿Y cómo surgió en
X XGRAGEAS
TRADICIÓN. “El movimiento
de narradores en la ciudad fue im-
presionante en los noventa, cuando
narradores de Buenos Aires traje-
ron sus ideas y sus espectáculos
a Paraná y allí muchas personas
adhirieron a este arte. Luego tuvo
su momento de esplendor y sus
momentos de baja. Es como on-
dulante. Se formaron los dos grupos
grandes de narradores de la ciudad:
Paranatecuento y el Club de Na-
rradoras de la Mediana y Tercera
Edad”.
TERRITORIO. “La Facultad en
ese momento con Cachita Pacher
como coordinadora de las narrado-
ras de Paraná fue la pionera en abrir
distintos centros en ciudades del
interior que subsistieron muchos
tu caso el interés por la narración?
–Desde chica me gustó contar y
escuchar historias y cuando vi a na-
rradores orales en escenarios loca-
les y nacionales pensé: -esto es lo
mío. Como dice Ana Padovani, me
gusta dejar el mundo por un rato y
vivir los cuentos.
Ayudó que siempre fui muy lec-
tora, que no me cuesta la empatía
con el otro, que puedo establecer
contacto visual con quien me es-
cucha, y que me gusta aprender
todo el tiempo.
–¿Un narrador nace o se hace?
–Los narradores como yo y co-
mo muchos nos hacemos estudian-
do, buscando cuentos, narrando
desde un cuento chiquitito y fácil
hasta que nos animamos con uno
un poco más complicado. Sólo ha-
ce falta que cuando lo leas te gus-
te, te atraviese, sientas que lo po-
dés hacer tuyo por un rato y trans-
mitirlo a los demás.
Encontrar “ese cuento” es un
momento de emoción, de triunfo,
de placer. Como dicen los jóvenes,
es ¡guau...lo más!
Y también están los narradores
espontáneos que de un sucedido
mínimo te cuentan “la gran historia”.
Es un oficio apasionante, sobre
todo cuando te das cuenta (al final
del proceso de preparación) que el
que escucha está con vos, que lo-
graste tenerlo en un puño porque se
siente tratado amorosamente, me-
terlo en tu burbuja y hacerlo com-
partir tu historia en unos minutos.
años y en algunos lugares hoy ya
no funcionan”.
JÓVENES. “Lo cierto es que
no hay tantos jóvenes entre los
narradores. No sé si es un prejui-
cio de que esta actividad es sólo
para gente mayor, pero conocí por
ejemplo en un Encuentro grande en
Santa Fe muchos narradores jóve-
nes españoles que me maravillaron.
Yo creo que los jóvenes debieran
animarse porque tienen cosas que
contar”.
VARONES. “En general son
muchas más las mujeres las que
transitan por la narración oral, como
en muchas actividades. Adonde va-
yas, a un concierto, a un taller de
pintura o a una muestra de arte, las
mujeres son mayoría. A qué se debe
no lo sé. Habría que preguntarle a
los hombres”.