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Los hongos comedores de

plástico son la nueva arma


en la lucha contra la
basura
30 SEPTIEMBRE, 2018LEAVE A COMMENT

Mycelium. Imagen: Kichigin Shutterstock

Un nuevo estudio del Royal Botanic Gardens Kew de Londres afirma que las
setas son capaces de acelerar la descomposición de los residuos
plásticos.

El hongo aspergillus tubingensis se presentó en el informe State of the World’s


Fungi 2018, que también documentó que los hongos son recomendables para
producir materiales de construcción sostenibles y capaces de eliminar los
contaminantes del suelo y las aguas residuales. Mientras que el plástico
generalmente tarda años en degradarse, el hongo, que se descubrió por
primera vez creciendo en un vertedero pakistaní en 2017, podría hacer posible
descomponer los plásticos en semanas.

El informe de 2018 es el primer lanzamiento de este tipo, que marca su debut


con el descubrimiento monumental de que los hongos podrían proporcionar
una solución a la creciente crisis de los residuos plásticos. La
preocupación global ha estimulado la investigación y la innovación en la
industria y la tecnología, pero los botánicos del Reino Unido dicen que la
naturaleza ya podría haber dado con la solución al armarse con una defensa
biológica contra la plaga plástica con la que está abrumada.

Ya que sus propiedades ayudan a acelerar el deterioro de las moléculas de


plástico, el informe anuncia que el aspergillus tubingensis “tiene potencial para
convertirse en una de las herramientas que se necesitan desesperadamente
para abordar el creciente problema medioambiental de los residuos plásticos“.

Según los científicos, el hongo tiene la capacidad de crecer directamente en la


superficie de los plásticos, donde rompe los enlaces químicos entre las
moléculas plásticas. Armado con una enzima única, el aspergillus
tubingensis es uno de los hongos más interesantes presentados en el
trabajo de investigación del equipo.

Aspergillus. Imagen: Rattiya Thongdumhyun Shutterstock


El informe también confirmó que las variedades de hongos pleurotus ostreatus
y trametes versicolor tienen un efecto beneficioso para el suelo y las aguas
residuales, ya que eliminan por ejemplo pesticidas tóxicos. La especie
trichoderma ha sido identificada como un acelerador para la producción
de biocombustibles a través de convertir residuos agrícolas en etanol.

El micelio fúngico también se destaca, especialmente para diseñadores y


arquitectos interesados en encontrar sustitutos sostenibles para la espuma de
poliestireno, el cuero y varios materiales de construcción.

Tom Prescott, investigador principal de Kew Gardens, afirmó: “El informe sobre
el estado de los hongos en el mundo ha revelado lo poco que sabemos y el
enorme potencial de los hongos en áreas tan diversas como los
biocombustibles, los productos farmacéuticos y los nuevos materiales“.

El informe “El estado de los hongos en el mundo” documenta más de 2.000


nuevas especies encontradas en 2017, identificando características útiles tanto
para fines naturales como industriales y citando los obstáculos que encuentran
como resultado del cambio climático.

Más de 100 científicos de 18 países colaboraron en el estudio y catalogaron los


nuevos hongos para el “fungarium” de Kew Gardens, que alberga más de 1,25
millones de especímenes secos de hongos de todo el planeta.

Más información: State of the World’s Fungi 2018

Vía: Dezeen

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