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2.1.

Marco referencial:
2.1.1 Definición de Trastorno Bipolar:
El Trastorno Bipolar (TB) es una enfermedad que se caracteriza por las
fluctuaciones reiteradas (al menos dos) entre períodos de estado de ánimo intensivo e
hiperactividad (subidas o episodios maníacos), períodos de depresión y disminución
de la vitalidad (bajadas o episodios depresivos) y períodos de depresión y al mismo
tiempo de inquietud y exceso de actividad (mixto), por lo que también se la
denominaba enfermedad maníaco-depresiva. (Consejo Editorial de Educación Pública
del Royal College of Psychiatrists, 2015)

Los episodios pueden sucederse unos a otros o alternar con períodos de eutimia
(estado de ánimo normal) los cuales son denominados como períodos de remisión de
la enfermedad, es decir, en estos los síntomas desaparecen casi por completo, sin
embargo, persistiendo la vulnerabilidad a presentar un nuevo episodio. (Instituto
Nacional de la Salud Mental , 2016)

Es una enfermedad que, sin tratamiento alguno, puede llegar a ser peligrosa y
limitante para la persona que la padece, ya que los “altibajos” considerados dentro de
esta no son iguales a las fluctuaciones del estado de ánimo en las personas normales.
Estos cambios de estado de ánimo son más extremos y normalmente vienen
acompañados de cambios en el nivel de energía, en el patrón del sueño y en la función
del pensamiento; estos cambios pueden ser tan fuertes que perjudicarían las relaciones
y dificultarían el asistir a escuelas o universidades e incluso mantener un trabajo
estable, e incluso, algunas personas con este trastorno intentan suicidarse o hacerse
daño. (Instituto Nacional de la Salud Mental , 2016)

2.1.2 Tipos de Trastorno Bipolar:


 Bipolar I: se denomina así cuando ha existido al menos una “subida” o
período maníaco el cual ha durado más de una semana y que a veces requieren
internación. Algunos individuos con este tipo de TB tendrán mayormente períodos
maníacos, aunque también se pueden presentar períodos de depresión. Con frecuencia
aparecen delirios y alucinaciones, y cuando se da la recuperación del individuo no
recuerda lo que pasó durante ese período. (Poulisis, 2015)
 Bipolar II: cuando se presenta más de un episodio depresivo pero períodos
maníacos moderados acompañados de disminución de la necesidad de dormir.
(Poulisis, 2015)
 Bipolar III: cuando se presenta un primer período hipomaníaco o maníaco
inducido por medicamentos u otras sustancias (corticoides, antidepresivos) sin haber
presentado anteriormente estos episodios. Muchos de estos individuos consultan por
cuadros de ansiedad. (Vieta, 2016)
 Ciclación Rápida: cuando se presentan más de cuatro períodos en un lapso
de 12 meses.
 Ciclotimia: cuando se alternan episodios hipomaníacos y períodos
depresivos de poca intensidad; los estados de ánimo no son tan intensos como en el
TB completo pero pueden durar más, esta puede desencadenar en un trastorno bipolar
completo. (Poulisis, 2015)

Muchas veces estas clasificaciones no abarcan por completo las variedades de


TB, por lo que en algunos textos podemos encontrar una clasificación en hasta 8 tipos
diferentes de TB. (Vieta, 2016)

2.1.3 Causas del Trastorno Bipolar:


No se ha descubierto la causa exacta del desarrollo del trastorno bipolar, pero
existen algunos factores relacionados con la aparición de esta que deben ser tomados
en cuenta al momento de diagnosticar esta enfermedad:

- Genética: se ha descubierto que la enfermedad puede llegar a ser


hereditaria, ya que la genética es la encargada de regular el estado de ánimo de una
persona, aunque si alguna de las personas en la familia ha presentado TB no es seguro
que aparezca en siguientes generaciones. (Instituto Nacional de la Salud Mental , 2016)
- Factores ambientales: pueden actuar como desencadenantes de las crisis,
pero es necesaria cierta predisposición genética a la enfermedad. (Poulisis, 2015)
- Anormalidad en la función y estructura cerebral: los mecanismos de
regulación del estado de ánimo se encuentran en el llamado “cerebro emocional”, el
sistema límbico, el cual nos permite afrontar los problemas personales y no desfallecer
ante las dificultades, cuando estos problemas sobrepasan la capacidad de adaptación
de un individuo, estos mecanismos no consiguen restablecer el equilibrio anímico y
pueden dar lugar a un episodio depresivo, y luego a depresión crónica. En ocasiones
estas alteraciones del estado de ánimo en las que los mecanismos reguladores no
funcionan de forma adecuada haciendo que aparezca un episodio depresivo sin causa
aparente. (Vieta, 2016)
- Factores biológicos: alteraciones en los neurotransmisores y las
hormonas, así como en los neuromoduladores e iones, ya que cuando el estado anímico
de una persona disminuye por alguna causa, se produce una variedad de sustancias que
impiden que estas sustancias alcancen un nivel demasiado bajo que podría ser
peligroso para el individuo, así mismo, cuando el estado anímico se eleva, se producen
otras sustancias que evitan una euforia excesiva, la cual también podría ser peligrosa,
por esta razón la sensación de alegría tras algún acontecimiento positivo es de corta
duración. Si este sistema regulador pierde precisión, cualquier suceso estresante, por
más pequeño que sea, puede provocar un cambio brusco en el estado de ánimo. (Vieta,
2016)

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