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1.- Mons. Miguel Angel García Arauz: Nacimiento de la Diócesis. Lema: “En el Señor está
mi Esperanza”. Punto Clave: El Concilio Vaticano II. Con él se abren espacios de
participación de los laicos.
- Logros Relevantes de su gestión como Obispo:
- Acercamiento a la gente y a las comunidades.
- Promoción de las vocaciones sacerdotales. Crea el Pre-seminario o Seminario Menor.
- Creación de nuevas parroquias.
- Empeño por la educación y formación de la niñez y juventud. Forma el grupo de Boys
Scouts, y funda el Instituto “Liceo Jalapa”.
- Participación de los laicos.
- Vida Consagrada. Nace la congregación Marta y María. Llegan diversas
congregaciones religiosas
- Laboró por 36 años, dejando una impronta que marcó positivamente la vida y la
identidad de esta Iglesia Particular.
Rasgo peculiar y distintivo que una persona deja en sus obras y que las distingue de otras.
"su estilo tiene la impronta de una gran personalidad literaria; es un solista que deja su
impronta en cada interpretación"
Rastro o influencia que queda de una cosa o de un suceso.
"la impronta del positivismo de Comte; la impronta árabe se conserva en algunos nombres,
como La Armuña, La Moraña o Tierra de Medina"
Marca de un sello o molde sobre una materia dúctil en hueco o en relieve. Sinónimo: Huella.
"la impronta en barro de la figura de un animal; son importantes para el estudio los relieves de
los cilindros-sellos que se aplicaban, como impronta, en las tabletas de barro"
2.- Mons. Jorge Mario Ávila del Águila: Opción por los Pobres. Lema: “El Espíritu del Señor
está sobre mí, y me ha enviado a evangelizar a los pobres”. Punto Clave: Conferencia
Episcopal de Puebla.
3.- Mons. Julio Edgar Cabrera Ovalle: Intensifica la Identidad Misionera. Lema: “¡Ay de mí
si no anuncio el Evangelio!” Punto Calve: La V Conferencia del Episcopado
Latinoamericano y del Caribe: Aparecida 2007.
- Logros Relevantes de su gestión como Obispo:
- Fomenta la Comunión Eclesial. Ver PPMD Página 24, inciso a)
- Aumento de Vocaciones. Involucramiento de las parroquias para mantener un
número significativo de estudiantes en el SEMIONARIO MAYOR.
- Se preocupa de la formación permanente de los presbíteros. Invita a oradores de
diferentes partes del mundo para impartir cursos de actualización y maestros de
espiritualidad para los retiros del clero.
- Favorece la presencia de nuevos carismas de la vida consagrada.
- Impulsa intensamente el Proyecto Pastoral Diocesano. Sueña con una “Diócesis
en Comunión para la Misión”.
- Refundación de la Pastoral Social. La Doctrina social de la Iglesia adquiere un
mayor protagonismo y PASTORAL SOCIAL-CARITAS recupera su genuina dimensión
eclesial.
- Centro Pastoral Juan Pablo II. Se concluyen las instalaciones de este centro
iniciado por Mons. Jorge Mario Ávila del Águila.
- Creación de nuevas parroquias. Ver PPMD, Página 26, inciso h)
- Presencia en el CELAM.
- Las Santas Misiones Populares. Puesto de acuerdo con el Presbiterio, y
asumiendo el Proyecto “SMP” promovido por el Padre Luis Mosconi, se vive un nuevo
3
Reflexión acerca de las SMP. 3 Retiros diocesanos, 3 retiros parroquiales, La Gran Semana
Misionera, Cuarto Retiro Parroquial y Diocesano. Luego: La Misión Continúa.
Introducción
Cuando el Papa quiere tomar una decisión que abarca a toda la cristiandad -proclamar un
dogma, modificar la organización de la Iglesia o condenar una herejía-, puede convocar un
Concilio.
Los obispos del mundo entero son llamados a Roma (o a la ciudad que el Pontífice haya
escogido). Su presencia es obligatoria, salvo en caso de fuerza mayor. Los superiores de
órdenes religiosas, los abades generales, los prelados nullius (es decir, que no tienen
jurisdicción en una diócesis propiamente dicha) y los cardenales son admitidos a participar en
el Concilio o Sínodo ecuménico. Tienen voz deliberativa.
Otras personalidades son admitidas a participar en los trabajos del Concilio, y tienen voz
consultiva. Son los representantes de obispos ausentes, los príncipes católicos o sus
embajadores y ciertos clérigos o laicos convocados a títulos diversos. A la apertura de los
debates, todos los asistentes prestan juramento. Juran que permanecerán fieles a la Iglesia y a
su Romano Pontífice. El texto del juramento fue redactado por el papa Gregorio VII en el año
1709.
El Santo Padre decide los temas que serán discutidos por el Concilio. Tiene el poder de
interrumpir la sesión o de trasladarla a una fecha ulterior. El trabajo está repartido en varias
comisiones - las Congregaciones - antes de ser presentado a la discusión general.
En el reglamento mismo del Concilio se encuentra el ambiente de las asambleas de la Iglesia
primitiva. Los votos son nominales y a la mayoría. Pero aunque el Papa reúna a su alrededor
sólo una minoría, es siempre su punto de vista el que prevalece.
En los primeros Concilios, cuya convocación quedaba al cuidado de los emperadores, cada
pregunta estaba sometida a la aprobación de los participantes, que respondían por "placet" (sí)
y "non placet" (no). Cuando han recibido la aprobación del Sumo Pontífice, las conclusiones del
Concilio son promulgadas por una Bula.