FASE 2 – EL TEXTO CURATORIAL

KAREN ASTRID SUAREZ COY

CC 1022337440

408048A_474 /

ULIANA VICTORIA MOLANO

Tutora ESCRITURA Y ORALIDAD (ARTES VISUALES)

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA

ESCUELA DE CIENCIAS SOCIALES, ARTES Y HUMANIDADES

PROGRAMA DE ARTES VISUALES

BARRANQUILLA

2018
 ¿Los lineamientos conceptuales y curatoriales dados en el Aún 44 SNA son pertinentes
para el fortalecimiento del campo de las artes visuales en Colombia?

Sin duda, el AUN 44 SNA, como un evento abierto a la muestra de arte y la creatividad
colombiana y de representantes internaciones, es un espacio para el fortalecimiento de las arte
en Colombia. Y es de notarse partiendo las frases que en la versión 2016 lo caracterizaron,
entre las que es posible destacar “Aún existe el Salón Nacional de Artista” dando lugar a
afirmar que a pesar de las situaciones que se han presentado en el desarrollo del arte
colombiano, este evento y espacio sigue vivo, sin ignorar las controversias y críticas que se
generan cada vez, y en esta versión se concluyen como un éxito.

Es válido y significativo reconocer que el Salón Nacional de Artista desde su creación y

apertura ha sido un espacio clave en el fomento del arte colombiano, brindando motivación
para exponer las obras de artistas con gran talento llevándolos a un contexto global, aunque
no se desconoce que siempre ha sido criticado por mantener el centralismo, elitismo, y demás
calificativos que acusan y dan crédito a la inconformidad de grupos de artistas del país. De
estos, en la versión 44 se incluyeron inconformidades y exigencias de mayores
participaciones de los salones regionales en las muestras, la búsqueda de la
internacionalización del salón, las dificultades con la Cámara de Comercio de Pereira y los
curadores con relación temas económicos y organizativos. Por otro lado, también se mostró
inconformidad por la escogencia de la obra seleccionada, pues se planteó que los parámetros
para la gestión de esta no estaban claramente delimitados, planteándose que se escogió por la
subjetividad de los curadores, basados en su propia percepción.

Lo anterior dejó clara la necesidad de esclarecer para próximas aperturas del Salón Nacional
de Artistas las reglas y criterios que permitan desarrollar objetivamente las diferentes
gestiones que se llevan a cabo durante este, para asi dar mayor confianza al público sobre los
resultados finales del evento.

Hechos como lo que ocurrió con el artista Luis Apolinar de Bogotá durante la apertura del
AUN 44, quien fue expulsado con acompañamiento de la policía al presentar su Cronograma
de Artistas Marginados, llamaron grandemente la atención por el trato dado a quienes
aparentemente presentan oposición con relación a los parámetros del evento,
independientemente de la inclusión o no del artista en este, dan pie para hacer una revisión de
los objetivos o intención del SNA, que se cree busaca convocar exhibiciones de componentes
nacionales del arte.

La idea de llamar AUN a la versión 2016 del Salón Nacional de Artistas se relacionaba a la
intención de mostrar la vigencia y vida del evento a la sociedad, a pesar de los inconvenientes
en su realización y los altos y bajos acecidos por las críticas y el manejo de los recursos para
este y que fueron muy notorias en el as versiones anteriores, lo que requería una realización y
gestión que no fomentara malos entendidos. Aunque esto no dejó de lado los malestares de
los artistas a nivel nacional, las que pasado tiempo después del evento siguen sin esclarecerse,
pues no se dieron justificaciones claras de la escogencia del nombre, los resultados del salón
y la integridad del mismo.

Aunque la intención de los documentos y reacciones generadas a partir del evento no buscan
poner en duda las capacidades académicas ni la actuación de buena fe de los curadores
participantes durante el evento, grupo que estuvo conformado por Rosa Ángel; Directora
Artística, Inti Guerrero, Víctor Albarracín y Guillermo Villegas, si se movio una atmosfera de
inquietud acerca de la sensación de improvisación del evento, aun teniendo en cuenta los dos
años previos para la preparación y planificación de este. De igual manera, la inquietud se
extendió a la percepción del protagonismo hecho por los curadores que fue catalogado por
algunos como un régimen, situación alimentada además por políticos de turno, funcionarios
estatales, grupos artísticos minoritarios y demás, que pensaron en aprovechar el AUN 44 para
mostrarse, o como ventana a la sociedad, con alocuciones que en muchos casos generaron
malestar y polémica entre algunos, como el suceso entre Rosa Ángel y el Gobernador de
Risaralda Sigifredo Salazar, este último quien habla del salón con un calificativo de
termómetro, siendo refutado por la Directora Artística con palabras como: “No es un
termómetro ,es un salón que invita a pensar, donde los artistas muestran sus versiones de la
realidad frente a la política, cultura…"

En esta misma línea fue llamativo la presencia política en el evento como las
condecoraciones recibidas por la Ministra de Cultura; la Orden Cruz de los Fundadores en el
Grado de Caballero y la Gran Cruz en la Orden Orquídea, que seguro merecía, pero que
fueron dadas en medio de un evento no relacionado para tal, el AÚN 44 Salón Nacional de
Artistas, que buscaba ser un espacio de expresión y muestra para los verdaderos
protagonistas, los artistas. Además, se debió entender que este evento no busca el impulso de
una ciudad (en la que se desarrolló), como afirmó un funcionario de la ciudad, sino la
expresión de los artistas y su participación en espacios dedicados a ellos. Tal concepción,
estaba fuera del orden del mismo.

Se debe entender que la historia tiene como fin prever el futuro. Así, en toda la gestión del
Salón Nacional de Artistas, AUN 44 se debieron considerar las falencias, desatinos y
deficiencias de los eventos anteriores para no incurrir nuevamente en ellos, y evadir otros del
mismo tipo.

No se puede dejar de reconocer que durante este evento hubo mejoras significativas y
valoraciones a favor de los representantes del arte y la creación. Ejemplo de ello es que se
desarrolló geográficamente en una ciudad intermedia, con cierta lejanía del centralismo,
Pereira. Se notó el aumento en el número de artistas invitados a nivel internacional, como la
asignación de una curaduría específica para esta línea de publicaciones.

Por su parte, para próximos eventos es necesario tener en cuenta que en este las líneas d e
investigación curatorial y las metodologías dentro del marco de no dejaron de ser ambiguas y
confusas, sin postulados claros que permitieran la legitimidad y la practica crítica asertiva del
público.
Por todo lo anterior, aunque el Salón Nacional de Artista es un espacio de gran valor en el
desarrollo del arte colombiano, y ahora internacional, y sin desconocer que es uno de los
muchos esfuerzos desarrollados entre los pocos que hay en Colombia con relación al impulso
de la cultura y el arte, necesita de procesos reales de trasformación, si se tiene como meta e
intención fortalecer las artes visuales en nuestro país. Las líneas conceptuales y de curaduría
necesitan evidenciar cambios radicales en su estructura, definiendo además objetivos claros
que vayan direccionados a la producción artística como tal. Los artistas deben sentirse
protagonistas de la apuesta y esfuerzos culturales realizados. De ahí que se hace necesaria la
intervención, creación y desarrollo de políticas culturales con claves de participación con
definición clara. En urgente presentar un encuentro basado en la muestra del arte y para los
creadores y artistas, donde los temas centrales vayan en concilio con hechos artísticos y las
muestras de las obras.

Pedimos más Salones Nacionales de Artistas que fomenten el desarrollo de la expresión y la

cultura de las riquezas de nuestro país, y porque creemos que son pertinentes para el
fortalecimiento del campo de las artes visuales en Colombia.
MAPA CONCEPTUAL
Bibliografía

Arteria, P. (2017). Lo que viene con el ‘Aún’ del 44 SNA. Obtenido de Periódico Arteria:
http://www.periodicoarteria.com/lo-que-viene-con-el-an-del-44-sna-5334

Cultura, M. d. (2016). Aún 44 Salón Nacional de Artistas. Pereira: Ministerio de Cultura.

Herrera Buitrago, M. M. (2011). XX Salón de Artistas Nacionales Vs. Salón Nacional 1969:
Botín de guerra entre Sociedad Colombiana de Artes Plásticas y Museo de Arte
Moderno. Bogotá-Colombia: Universidad Distrital Francisco José de Caldas.

Publica, E. (2016). Discusiones, críticas y escaramuzas en torno al Salón Nacional de

Artistas. Obtenido de Esfera Pública: http://esferapublica.org/nfblog/algunas-criticas-
al-salon-nacionalde-artistas/

Rodríguez, S. (2016). Arcadia. Obtenido de Inquietudes (sin preguntas ni respuestas) sobre el

44 SNA: http://www.revistaarcadia.com/arte/articulo/aun-44-salon-nacional-de-
artistaspereira-cronica-arte-contemporaneo/54102