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Temas de filosofía contemporánea – Hegel

Son tres los temas que nos importa rescatar de la lectura de la Filosofía del Derecho.
Tengamos en cuenta que Hegel es un autor que muchos filósofos posteriores toman como
referente.

1. La Idea hegeliana

 “Idea” es una noción central dentro de la filosofía hegeliana. En Hegel, este término
hace referencia a la coincidencia entre el concepto y su realización, no a un contenido
mental como suele entenderse hoy en día. Veamos, con ejemplos, a qué nos referimos
con el concepto y su realización.
 En primer lugar, vayamos a lo que es un “concepto”. Un concepto siempre refiere a la
definición de algo, es decir, la pregunta por el qué es X. Aquellos que hayan llevado
filosofía antigua podrán relacionarla con la pregunta que Sócrates trabaja en el
Menón.
o Aquí, es importante preguntarnos cómo llegamos a la respuesta a la pregunta
sobre qué es X. Digamos, por ejemplo, ¿qué es la libertad?
o ¿Acaso podemos responder señalando hacia algún objeto que sea “la
libertad”? ¿Podemos acceder a alguna definición establecida por algún tipo de
intuición intelectual? La respuesta es NO.
o ¿Cómo podemos, entonces, llegar a una definición del concepto de “libertad”?
La única manera de definirlo es analizando la manera en la que este se
encuentra presente de manera objetiva, es decir, en su REALIZACIÓN. Es, pues,
esta manifestación en la realidad lo que le da el contenido, el verdadero
significado a un concepto. Siempre entendemos los conceptos a partir de la
manera en la que los vemos realizados en la realidad
o Así, puede decirse que el concepto está social e históricamente constituido.
Debido a que la realidad es siempre cambiante, veremos que no siempre se ha
entendido la libertad de la misma manera. Mientras que en algún momento de
la historia podría haberse entendido “libertad” solo como el hecho de no ser
esclavo, hoy en día se suele entender de una manera distinta, a saber, el
contar con todos los medios necesarios para poder actuar efectivamente de
acuerdo con lo que uno desea.
 Es, pues, en el sentido anterior, que podemos decir que el concepto siempre EXIGE un
ámbito REAL.
o ¿A qué se refiere este ámbito real? Pues, a lo que Hegel llama el “espíritu
objetivo”: Las instituciones, las prácticas sociales, el derecho, etc. Es el ámbito
de lo fácticamente existente.
o Volviendo a un punto ya tratado, es necesario tener en cuenta que el concepto
siempre busca realizarse en el mundo y solo podemos comprenderla en tanto
que se encarna en este. La historia, pues, tiene que ver con esta búsqueda
constante de plasmar los conceptos en la realidad y de alcanzar la coincidencia
entre concepto-realidad. SIN EMBARGO, siempre habrá intentos de
modificarla o realizarla, ya que se entiende como algo incompleto.
 ¿Por qué es importante entender que se trata de una constante búsqueda de
adecuación?
o Es importante entender que hay un movimiento contante en el intento de
adecuar la realidad, siempre imperfecta, a nuestros conceptos. Del mismo
modo, debido a la cambiante naturaleza de la realidad, los conceptos también
deben ir modificándose para que haya una posibilidad de adecuarse a la
realidad.
 Una vez que sabemos esto, es más fácil entender por qué es importante NO confundir
la Idea con el concepto.
o Recordemos que, para Hegel, la Idea, la coincidencia entre concepto y
realidad, es la verdad.
o Surge, entonces, un problema al confundir la Idea con el concepto: Esto
llevaría a pensar que el concepto ya se encuentra realizado de manera plena
(es decir, hay una perfecta coincidencia entre concepto y contenido). Así, se
incurre en una actitud dogmática o conservadora que no está dispuesta a
admitir que se necesitan cambios (Recordemos que el movimiento dialéctico
se debe a la constante búsqueda de la adecuación entre concepto y realidad).
Así, pues, estas personas sostendrían que ya no es necesario hacer más
cambios para lograr una realización adecuada del concepto.
o Pongamos ejemplos: Una cuestión que sirve para ilustrar esta actitud
conservadora es el del matrimonio como institución social. Aquellas personas
que reclaman la aceptación de la unión civil parten de la creencia de que el
concepto de “matrimonio” ya no se adecúa a la realidad en la que vivimos, por
lo tanto, buscan una resignificación de un concepto que, por mucho tiempo,
estuvo vinculado solo con las relaciones heterosexuales y la reproducción.
Aquellos que se oponen a la unión civil, por el contrario, parten de la idea de
que el concepto de “matrimonio” YA se encuentra realizado de manera
ADECUADA en las prácticas que tienen lugar actualmente. Así, pues, se puede
entender que consideran que no debería haber cambios que modifiquen la
supuesta “realización ideal” de aquel concepto.
o Es, en ese sentido, que Hegel señala en el parágrafo 3 (p76) que la
inconsecuencia le permite a los jueces desembarazarse de instituciones
injustas.

2. Voluntad, libertad y derecho

 La filosofía del derecho, en contraste con la fenomenología del espíritu, no se ocupa de


la conciencia que CONOCE el mundo, sino de aquella ACTÚA en el mundo: a saber, la
conciencia moral o la voluntad.
o Esto no debe llevarnos a una separación entre pensamiento y voluntad, ya que
como señala Hegel en el Agregado del apartado 4, se necesitan mutuamente.
No corresponden a dos distintas conciencias, sino a una sola.
 La libertad se relaciona con la voluntad en tanto que esta es una determinación
fundamental de la voluntad.
o Hay que tener en cuenta, como vimos hace un rato, que la voluntad es aquella
conciencia que ACTÚA sobre el mundo.
o En ese sentido, la libertad es solo realizable EN el mundo, no fuera de él como
señala Kant. La libertad, entonces, está pensada solo en términos de la
ACCIÓN.
o La libertad es, así, voluntad RACIONAL AUTÓNOMA. Aquí puede notarse que
Hegel, siendo un filósofo moderno, no rechaza la autonomía de la razón
alcanzada en aquella época, sino que critica la unilateralidad de las
concepciones anteriores, a saber, su falta de historicidad y la negación del
mundo real.
o Así, para Hegel la libertad del sujeto implica haber participado en la
producción de normas, instituciones y prácticas sociales en las que luego se
podrá reconocer. Esta exteriorización de la voluntad no es una limitación, sino
una realización de la realidad.
 El derecho, al partir de la voluntad, es “el reino de la libertad realizada”. Pasemos,
pues, a ver cómo esta se realiza de distintas maneras que apuntan, finalmente, a llegar
a la eticidad como momento más acabado.

3. Derecho abstracto, moralidad y eticidad

Dentro de las maneras en las que la voluntad se puede determinar en tanto sistemas
normativos que guían la conducta del ser humano, se encuentran:

 El derecho abstracto: Se refiere a las normas morales o derechos de las personas


en tanto individuos. Parte de un punto de vista meramente externo, es decir, no
busca fundamentarse en la subjetividad. Por eso, su normatividad está basada en
leyes fácticas, que regulan cuestiones como la propiedad, el castigo, etc. Pensemos
en Hobbes, que postula una moral fundamentada en el establecimiento de un
Estado que produce las normas que permiten la convivencia en función de una
limitación de la libertad absoluta para permitir una libertad real.
 La moralidad: Como han visto extensamente en clase, este término apunta a la
fundamentación de la moral en la pura subjetividad. Ya no parte de
determinaciones externas, ni de la persona en tanto individuo, sino de un sujeto
moral capaz de autolegislarse según lo que le dicta la Razón (en ese sentido, la
determinación es interna).
o Para Kant, el sujeto libre es aquel que tiene la capacidad de decidir de una
manera racional que no implique obstáculos. Sin embargo, ¿qué pasa con
el sujeto cuando, luego de decidir, debe actuar? ¿Qué pasa con el sujeto
que, sirviéndose de la Razón trascendental para fundamentar toda acción
moral, debe volver al mundo?
o La crítica de Hegel a esta, como ya se vio en clase, es la pretensión de
universalidad que, al descansar en criterios puramente subjetivos, puede
desembocar en una actitud fanática o fuertemente dogmática.
o Otro problema con la moralidad es que postula una voluntad que, si bien
puede conocer las máximas que la llevan a obrar, termina recluyéndose en
el ámbito subjetivo. Esto trae problemas al pensar la libertad en términos
hegelianos, ya que nos presenta una voluntad que, cuando quiere actuar
en el mundo, se encuentra con una realidad que no se adecúa o que debe
forzar a los principios formales que postula.
o Mientras la voluntad no se vea obligada a actuar puede creer en la validez
universal de sus razones, pero cuando la presencia de la realidad exige
tomar un curso de acción determinado y discriminar entre diversos
contenidos preexistentes, se pone de manifiesto la arbitrariedad de este
punto de vista que se designa a sí mismo como única medida de toda
elección.
o En pocas palabras, la crítica de Hegel está dirigida a la definición de Razón
en oposición a la experiencia. Esto, a pesar de que parece que garantiza la
autonomía de la razón, resulta, también, un impedimento para la
posibilidad de su realización y, además, le quita la posibilidad de encontrar
racionalidad fuera de la mente humana, es decir, en instituciones y
prácticas, como sí lo hará Hegel. Si es que volvemos a la definición de
“Idea” hegeliana, es notable por qué es que resulta problemático
contemplar una razón divorciada del mundo.
 Eticidad: La eticidad es, finalmente, aquella esfera que logra superar la unilateralidad
que presentan los momentos anteriores. Esta es la única esfera en la cuál el ser
humano puede encontrar la libertad, dado que es entendida como el conjunto de
instituciones y prácticas sociales. Y, si recordamos bien, la libertad, para Hegel, solo
puede alcanzarse en la realización práctica de las instituciones. Estas instituciones,
pues, en tanto que son formas concretas de la acción y son reconocidas por las
personas que participan en ellas, sí son racionales (en contraste con Kant). Esta, a su
vez, se divide en tres esferas que no se excluyen entre ellas, sino que ocurren en
simultáneo:
o La familia: Es una esfera en la que las relaciones entre individuos están
caracterizadas por el afecto y la preocupación de unos por los otros. Sin
embargo, hay cuestiones que escapan de las posibilidades de la familia, por
ejemplo, algunas necesidades que solo pueden ser satisfechas a través de una
actividad económica de mayor alcance. Así, ocurre el desgarramiento del
núcleo familiar.
o La sociedad civil: Tras el desgarramiento del núcleo familiar, Hegel presenta a
la sociedad civil como una segunda esfera que se caracteriza por el atomismo.
Aquí, al igual que en el Estado de Naturaleza Hobbiseano, cada quién vela por
sus propios intereses, por lo que se entiende a la sociedad civil como una
esfera de satisfacción de necesidades. Las relaciones entre individuos están
marcadas, así por la negociación y la conveniencia. Esto, sin embargo, puede
generar conflictos que deben solucionarse en otras instancias.
o El Estado: El Estado pretende ser, para Hegel, la esfera en la que se recupera la
unidad perdida por la Sociedad Civil (no deben confundirse). En vez de velar
por intereses propios, el Estado ve más por lo universal, es decir, tiende hacia
el bien común y no está mediada por relaciones instrumentales, sino en el
reconocimiento en el otro. Así, no debe entenderse solo como un gobierno,
sino como un modo de articulación institucional de una sociedad, en la medida
en que es reconocido como propio por sus miembros (Cf. Alas y raíces). En ese
sentido, es la esfera en la que se realiza propiamente la libertad (tener en
cuenta que el hombre realiza su libertad en sociedad)

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