Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
2
Mientras, en un bol ponemos la harina de maíz, el azúcar y las yemas de huevo y removemos hasta que
quede una masa homogénea y sin grumos (especialmente de la harina de maíz). Puede parecer que es
imposible pero os aseguro que antes de que os deis cuenta lo tendréis integrado todo.
Truco: Si creéis que os puede costar, reserváis unos 100 ml de la leche y en lugar de ponerla en la cazuela,
la ponéis junto con el azúcar y los huevos y será más fácil mezclar los ingredientes.
3
Cuando el chocolate esté derretido y la leche esté a punto de romper a hervir retiramos la cazuela del fuego
y vamos añadiendo la mezcla de huevos, azúcar y harina poco a poco, en un hilo continuo, a la vez que
vamos removiendo.
4
Cuando lo hayamos vertido todo, ponemos de nuevo la cazuela en el fuego y le ponemos un fuego medio
tirando a bajo ¡y constante! Es fundamental no someter las natillas caseras a cambios de temperatura para
cuajarlas porque acabarán cortadas.
Truco: Yo le pongo también el 5 en mi placa de inducción que llega al 9 y nunca he tenido ningún problema.
5
Una vez en el fuego vamos removiendo las natillas para Halloween continuamente (así evitamos que puedan
romper a hervir porque se acabarían cortando y también que se puedan quemar) hasta que veamos que las
natillas de chocolate comienzan a espesar. El tiempo dependerá de cada placa y de cada cazuela (porque
distribuyen de diferente manera el calor), pero oscilará entre 5 y 15 minutos como mucho.
6
Vertemos la natilla de chocolate para Halloween en los vasitos o boles en los que vayamos a presentarlas,
dejamos que se templen, tapamos y las guardamos en la nevera.
Cuando las vayamos a servir picamos las galletas Oreo (crema incluida) hasta reducirlas a polvo (con la
picadora o con un rodillo) y espolvoreamos la superficie de manera irregular para que parezca tierra recién
removida. ¡Y parecerán tumbas de chocolate para Halloween! Adornamos con gusanos de gominola ¡y
listo!