Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Facultad de Ingeniería
Escuela de Ingeniería Civil
Presenta:
Eduardo Rodríguez Calderón
Director:
Asesores:
Estudiante: ft/
Eduardo Rodríguez Calderón
ii
Fecha: 2012, setiembre, 14
iii
iv
Dedicatoria
A Dios por ser la fuerza que me ha motivado a salir adelante, por darme fortaleza, muchas
enseñanzas y por demostrarme que el éxito y la felicidad se encuentran en uno mismo.
Agradecimientos
En especial al director del proyecto, Ing. Marco Valverde Mora, por toda la ayuda y
consejos dados a lo largo del proceso. Mi más sincero agradecimiento por servirme
de guía y apoyo durante este tiempo, así como por la buena disposición ante mis
consultas y por compartir su conocimiento con mi persona.
A los ingenieros Marlon Jiménez y Sergio Sáenz por ser parte del comité asesor y
tener la mejor disposición siempre que se les necesitó.
v
vi
Índice de contenido
Capítulo 1. Introducción……………….……………………………………………………………1
1.1 Justificación…………………..…………………………………………………………………………..1
1.3 Importancia……………………………………………………………………………………………….2
1.4 Objetivos…………………………………………………………………………………………………….2
1.5 Metodología………………………………………………………………………………………………..3
1.6.1 Alcance……………………………………………………………………………………………………….5
1.6.2 Limitaciones………………………………………………………………………………………………..7
vii
2.2.1 Ensayo de corte directo en campo……………………………………………………………….22
viii
5.2.2 Macizo fracturado …………………………………………………………………………………….64
ix
Capítulo 6. Asentamientos Elásticos..……………………………………………………99
x
Capítulo 8. Guía para el Diseño de Cimentaciones en Roca…………………137
9.1 Conclusiones………………………….………………………………………………………175
9.2 Recomendaciones………………….……………………………………………………..179
Referencias bibliográficas……………….……………………………………………………..183
xi
APÉNDICE 4 RMR y RQD del macizo rocoso…..……………………………………………….A-17
xii
Índice de figuras
xiii
Figura 5-8. Capacidad portante supuesta para cimentaciones cuadradas sobre roca (para
asientos inferiores al 0.5% del ancho de la zapata)………………………………………………….85
Figura 5-9. Valores de capacidad de soporte a partir del valor del RQD…………………….87
Figura 5-10. Análisis de capacidad de soporte de un macizo rocoso………………………….88
Figura 5-11. . Capacidad de soporte para una cimentación sobre roca con planos de
estratificación inclinados y familias de discontinuidades ortogonales…………………………..90
Figura 6-1. Métodos para el cálculo de asentamientos para diversas condiciones del macizo
rocoso. ………………………………………………………………………………………………………………..100
Figura 6-2. Modelo de macizo rocoso fracturado………………………………………………………107
Figura 6-3. Esfuerzos en un medio elástico debidos a una carga puntual en la
superficie……………………………………………………………………………………………..……………..109
Figura 6-4. Dragrama del factor de influencia para esfuerzo normal vertical a varios
puntos dentro de un medio elástico bajo una carga uniforme circular………………………..110
Figura 6-5. Dragrama del factor de influencia para esfuerzo normal vertical sobre la
esquina de un área rectangular uniformemente cargada……………………………………………111
Figura 6-6. Contornos de esfuerzos bajo una carga lineal inclinada, mostrando zonas de
compresión y tensión…………………………………………………………………………………………….112
Figura 6-7. Contornos de esfuerzo para fundaciones localizadas en un medio isotrópico
elástico…………………………………………………………………………………………………………………113
Figura 6-8. Esfuerzo normal vertical bajo el centro de un área circular uniformemente
cargada en la superficie de un sistema de dos capas elásticas…………………………………..114
Figura 6-9. Estrechamiento y profundización del bulbo de presión debido a esfuerzos
cortantes limitados a lo largo de las discontinuidades……………………………………………….115
Figura 6-10. Factor de influencia para el asentamiento elástico en función de la relación de
empotramiento y la relación de módulos………………………………………………………………….118
Figura 7-1. Dimensiones preliminares de la toma de agua del PH Savegre………………….120
Figura 7-2. Ubicación de las perforaciones realizadas………………………………………………..121
Figura 7-3. Roca expuesta cerca de la perforación PHS-TA02…………………………………….127
Figura 7-4. Envolvente de Mohr ……………………………………………………………………….......129
xiv
Figura 8-1. Modos de falla por capacidad soportante asociados con diversas condiciones
del macizo rocoso………………………………………………………………………………………………….148
Figura 8-4. Valores para factores de capacidad de carga para cimentaciones localizadas
sobre talud…………………………………………………………………………………………………………..154
Figura 8-6. Valores de capacidad de soporte a partir del valor del RQD………………………165
xv
xvi
Índice de cuadros
Cuadro 5-6. Clasificación y posible capacidad portante para rocas de alta porosidad…….86
xvii
Cuadro 7-2. Propiedades mecánicas de la roca intacta………………………………………………124
Cuadro 7-3. Parámetro RQD…………………………………………………………………………………..125
Cuadro 7-4. Valor promedio del RMR………………………………………………………………………125
Cuadro 7-5. Propiedades del macizo a partir del RMR……………………………………………….126
Cuadro 7-6. Parámetros de entrada para el criterio de Hoek y Brown…………………………127
Cuadro 7-7. Propiedades del macizo rocoso a partir del criterio de Hoek y Brown………..131
Cuadro 7-8. Cálculo a partir de las ecuaciones de capacidad de carga dadas en USACE
(1994)………………………………………………………………………………………………………………….132
Cuadro 7-11. Factor de seguridad por capacidad de soporte para el macizo rocoso……..136
Cuadro 8-8. Estimación del GSI para macizos de roca sedimentarios heterogéneos tipo
Flysh…………………………………………………………………………………………………………………….143
xviii
Cuadro 8-10. Valores de la constante para roca intacta y tipo de
roca…………………….145
Cuadro 8-13. Valores propuestos para el cálculo de la resistencia por fricción de pilotes
sobre roca…………………………………………………………………………………………………………….161
xix
xx
Abreviaturas
B: ancho de la cimentación
c: cohesión
E: Módulo de Elasticidad
kg: kilogramos
L: Longitud de la cimentación
m: metros
N: Newtons
xxi
Pa: Pascales
s: Segundos
ton: Toneladas
USACE: United States Army Corps of Engineers (Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los
Estados Unidos)
: Peso unitario
1 23Esfuerzos principales
: Esfuerzo tangencial
Módulo de Poisson
xxii
RESUMEN
El principal objetivo del presente trabajo fue realizar una guía para el diseño de
cimentaciones en roca con el fin de que integrar las principales metodologías que existen
actualmente y sirva como referencia en vista de que no existe en el país un manual de
este tipo para rocas.
Para esto, se realizó una fase teórica del trabajo que consistió en una revisión bibliográfica
sobre el estado del arte de los métodos para el diseño de fundaciones sobre roca, así
como temas referentes a la mecánica de rocas que están involucrados en el proceso. De
esta forma se presentan los principales ensayos de campo y laboratorio para la obtención
de características físicas y mecánicas del macizo rocoso, los sistemas de clasificación
geomecánica más utilizados en la actualidad para predecir el comportamiento a la falla del
material y distintos métodos para el cálculo de la capacidad de soporte y de los
asentamientos elásticos del macizo rocoso ante la acción de las cargas de la cimentación;
así como observaciones sobre la utilización de cada uno de estos.
xxiii
Capítulo 1. Introducción
1.1 Justificación
La Mecánica de Rocas es una rama de la ingeniería civil que ha tenido su desarrollo hasta
hace unas décadas en el país, en especial por el desarrollo de proyectos hidroeléctricos, en
los cuales este campo es fundamental. En este trabajo se estudiaron las técnicas actuales
para el diseño de cimentaciones sobre roca con énfasis en estructuras de pequeño y mediano
tamaño como por ejemplo puentes, diversos componentes en proyectos hidroeléctricos y
edificios de altura importante, entre otros.
En la actualidad existen diversas técnicas que se utilizan para conocer las principales
propiedades geomecánicas de macizos rocosos y sus variaciones. Pueden mencionarse los
ensayos de campo y laboratorio, las correlaciones empíricas y los sistemas de clasificación
geomecánica. Estas técnicas son la base para obtener los valores de los parámetros
necesarios para el diseño de las cimentaciones sobre roca, según sea la etapa en la que se
encuentra el proyecto.
El diseño de cimentaciones sobre macizos rocosos requiere del uso de teorías específicas de
la mecánica de rocas, basadas en la teoría de la elasticidad y resistencia última, para poder
garantizar la seguridad desde el punto de vista de la capacidad de soporte y la
deformabilidad. En la actualidad existen varios métodos que sirven de base para el diseño de
cimentaciones en roca. Sin embargo, es necesario integrar las principales con el fin de
incentivar su uso en nuestro país. Esta integración de métodos no se ha hecho aún en
nuestro medio, de ahí que deba resolverse este faltante para lograr que se apliquen
eficazmente.
1
1.3 Importancia
Por otra parte, en los programas de pregrado en ingeniería civil a nivel nacional e
internacional no se recibe una formación específica en el campo de la mecánica de rocas, por
lo que el trabajo busca servir como guía para el ingeniero graduado a la hora de enfrentarse
a problemas de diseño de cimentaciones en roca sin estudios adicionales en el campo de la
geotecnia. Pretende ser una fuente de consulta útil sobre los distintos métodos existentes a
la fecha para el diseño de las fundaciones sobre roca, en vista de que no existe en el país un
manual de este tipo y aunque existe la información, esta se encuentra muy dispersa.
1.4 Objetivos
Realizar una guía para el diseño de cimentaciones en roca basado en las teorías más
recientes con el fin de establecer indicaciones para su uso en el país.
Definir las normas más recientes establecidas para el diseño de cimentaciones sobre roca.
Definir los principales ensayos de campo y laboratorio que se pueden realizar con el fin de
obtener parámetros de diseño.
Establecer cuáles son las principales teorías desarrolladas para el cálculo de la capacidad
de soporte de los macizos rocosos.
Determinar cuáles son los métodos más adecuados para predecir las deformaciones que
puede presentar un macizo rocoso ante las distintas cargas impuestas.
Aplicar las metodologías a casos particulares de cimentaciones sobre rocas, como las
localizadas cerca de taludes, bajo cargas inclinadas o excéntricas, entre otras.
Aplicar las teorías estudiadas para el análisis de la cimentación de un proyecto de
ingeniería.
2
1.5 Metodología
3
La primera fase del proyecto consistió en una recopilación de la teoría necesaria para el
adecuado diseño de una cimentación sobre roca. En esta etapa es imprescindible una
búsqueda de fuentes actuales con el fin de cubrir las metodologías actuales y así obtener
bases recientes sobre el tema en cuestión.
Dentro de esta etapa también se incluye una investigación sobre antecedentes en el tema de
cimentaciones en roca, con el fin de reconocer las primeras metodologías que surgieron y su
posterior desarrollo; así como su uso en la actualidad.
Como punto fundamental para poder aplicar las teorías de diseño se necesitan conocer las
propiedades mecánicas de los macizos rocosos. La manera más exacta de obtener estos
parámetros es mediante la realización de pruebas de campo y laboratorio. Por lo tanto se
presenta una breve descripción de los ensayos más representativos para la obtención de las
diferentes características de los macizos rocosos, esta incluye el equipo necesario para la
realización, el tipo de muestra necesaria para que sean representativas y los resultados
esperados en cada una de las pruebas.
Una vez explicado cómo obtener los parámetros, se procedió a investigar las distintas teorías
para los aspectos a considerar en el diseño de la cimentación. En el caso de la capacidad de
soporte se buscó información de los distintos métodos para calcular esta en el macizo, entre
ellos destacan los códigos de diseño, por ejemplo el Código de Cimentaciones de Costa Rica,
el Eurocódigo y publicaciones de la Sociedad Americana de Ingenieros Civiles. Además para
el cálculo de la capacidad de soporte se revisaron los métodos analíticos existentes, y las
teorías con ecuaciones determinadas empíricamente; entre ellas destaca la de capacidad de
soporte de Terzaghi.
4
En el caso de la deformabilidad, se definen los métodos para el cálculo de asentamientos,
basándose principalmente en la teoría elástica. Se plantea el estudio de los casos más
representativos que podrían encontrarse en la práctica profesional del ingeniero geotecnista
como por ejemplo en condiciones geológicas determinadas.
Con esto se logró realizar un análisis y se sugieren recomendaciones sobre las principales
metodologías que existen actualmente para el diseño de cimentaciones en roca. A partir de
esto se realizó el principal producto de este proyecto, una guía que resuma las principales
conclusiones obtenidas y a la vez sirva como una fuente de consulta útil para los estudiantes
de pregrado y egresados de licenciatura en Ingeniería Civil.
La última etapa consistió en la fase de diseño, en ella, con base en el estudio realizado, se
aplicó el análisis a partir de los métodos que se consideren adecuados para el análisis del
macizo de fundación de la toma de aguas del Proyecto Hidroeléctrico Savegre, el cual se
encuentra actualmente en etapa de factibilidad por parte del Instituto Costarricense de
Electricidad. Para esto se hizo uso de resultados de pruebas de laboratorio y campo
facilitadas por la institución.
1.6.1 Alcance
Los resultados se utilizarán para aplicarse a obras de pequeña y mediana envergadura, con el
fin de realizar un análisis para el diseño de la cimentación, dar recomendaciones sobre la
utilidad de las metodologías dependiendo del tipo de obra y del nivel de detalle que se busca.
Al respecto, la guía para el diseño de cimentaciones en roca pretende servir como fuente de
consulta en el caso de proyectos de magnitud similar a los que son válidos en el caso del
Código de Cimentaciones de Costa Rica. Adicionalmente Honjo y Kusakabe (2002) brindan
una ayuda para decidir sobre la categorización de estructuras a partir de la complejidad
geotécnica y la importancia:
5
Cuadro 1-1. Categorías geotécnicas según importancia y complejidad geotécnica.
Los valores dados en el cuadro 1.1 corresponden a categorías de diseño iguales a las dadas
en el Eurocódigo 7 y sirven como referencia para estimar el grado de complejidad de una
obra. En el caso de la guía desarrollada, se recomienda su uso para proyectos dentro de las
Categorías Geotécnicas 1 y 2 (señaladas en el cuadro 1-1); en lo que respecta a importancia
se pueden seguir las indicaciones del CCCR, a saber:
Magnitud de la obra:
La complejidad geotécnica debe ser definida por el profesional responsable que estará a
cargo del estudio correspondiente.
Por último mencionar que el trabajo no pretende la realización de ningún tipo de ensayo de
campo ni de laboratorio para la obtención de parámetros de diseño, solamente el estudio
teórico de las principales pruebas.
6
1.6.2 Limitaciones
El diseño de la cimentación se hará con base en los datos de propiedades del macizo
rocoso que se tengan disponibles por ensayos de laboratorio o de campo que se
hayan realizado. El alcance del proyecto no incluye la realización de pruebas de
laboratorio o de campo.
No se realizarán cálculos numéricos de deformabilidad por medio de técnicas como el
análisis con métodos numéricos.
En lo que respecta al tema de fundaciones sobre roca, es la primera vez que se abordarán en
el país, en un mismo documento, las distintas metodologías con el fin de abarcar de manera
integral todos los factores determinantes en el diseño. En la Escuela de Ingeniería Civil se
han realizado algunos proyectos de graduación relacionados con la mecánica de rocas, pero
la mayoría de ellos enfatizando en algún aspecto en específico.
Existe un estudio sobre la “Caracterización mecánica de algunas rocas de Costa Rica”, Sancho
(1985) donde se muestra los resultados luego de haber realizado ensayos de laboratorio en
muestras de rocas provenientes de la zona del Proyecto Hidroeléctrico Ventanas Garita y en
las cercanías del Proyecto Boruca. Este trabajo sirve como referencia de tipos de ensayos que
pueden realizarse para conocer determinadas propiedades de la roca intacta, específicamente
relacionadas con compresión simple con medición de deformación biaxial.
Por otra parte, el primer trabajo final de graduación que posee relación directa con el tema
que se plantea es sobre la “Capacidad de soporte del macizo rocoso de fundación de la presa
del Proyecto Hidroeléctrico Pirrís” Jiménez (1999). En este trabajo se utilizaron diversos
métodos que consideraban las condiciones geológicas presentes. Para el análisis se utilizaron
los datos de ensayos en roca intacta para determinar propiedades físicas (peso unitario,
gravedad específica seca bruta, absorción y relación de vacíos); así como pruebas para la
determinación de las propiedades mecánicas de compresión uniaxial y módulo de
7
deformación, también de respuesta anisotrópica de la roca intacta a la compresión uniaxial y
resistencia la tracción. Además se realizaron 3 ensayos triaxiales en discontinuidades,
mientras que para conocer la deformabilidad del macizo se hicieron 7 pruebas de placa rígida
dentro de una de las galerías del proyecto. Además se encuentra una clasificación del macizo
de cada uno de los márgenes y del cauce de acuerdo con el sistema RMR.
8
presenta conceptos importantes como la clasificación geomecánica RMR y presenta un
método para estimar la capacidad de soporte.
Por otra parte, el libro “Foundations on Rock” , Wyllie (1992) cubre extensamente las
distintas teorías y métodos desarrollados para el diseño y construcción de cimentaciones
sobre roca, en sus capítulos trata los aspectos más relevantes de las fundaciones, como sus
características, geología del macizo, resistencia y deformabilidad de las rocas, ensayos
recomendados, capacidad de soporte, deformabilidad y estabilidad. Así como temas
especiales tales como el diseño de cimentaciones para presas, pilotes sobre roca y métodos
constructivos.
En lo que respecta al criterio de falla desarrollado por Hoek y Brown (1980), se cuenta con la
última versión presentada por Hoek, Carranza y Corkum (2002) en donde se actualizan las
ecuaciones con el fin de presentar un método mejorado y ampliado para relacionar los
criterios de Hoek y Brown con el de Mohr-Coulomb. Además una publicación por Hoek y
Marinos (2007) presenta un resumen del desarrollo del criterio con las consideraciones
actuales para la aplicación del método.
A nivel internacional el tema de las fundaciones en roca está presente en muchos manuales y
códigos, por ejemplo en el Eurocódigo 7, referente a proyectos geotécnicos, que posee un
apartado especial de consideraciones en el caso de cimentaciones en roca e incluye un
ejemplo para el cálculo de la capacidad soportante de un macizo mediante el uso de gráficos
y tablas; además se mencionan procedimientos para la realización de ensayos en materiales
rocosos tanto a nivel de laboratorio como de campo.
A partir de esta revisión puede entonces concluirse que existe gran cantidad de información
relativa a la mecánica de rocas, y a la obtención de los valores de los distintos parámetros
necesarios para el diseño de cimentaciones sobre roca. Además queda en evidencia que a
nivel nacional existe un faltante en literatura que integre las principales metodologías para
9
conocer capacidad de soporte y deformación de fundaciones sobre macizos rocosos, por lo
que se recalca nuevamente la importancia que ofrece el presente trabajo, incluyendo la guía
de diseño de cimentaciones en roca para obras de pequeña a mediana envergadura y de
aplicación en el país.
10
Capítulo 2. Ensayos de campo y de laboratorio
Con el fin de conocer las principales características del sitio en donde se planea construir una
obra es necesario realizar pruebas a los materiales presentes. Para esto se pueden realizar
ensayos de laboratorio, en los que una muestra del macizo es obtenida con el fin de
estudiarla en un lugar especializado bajo condiciones controladas, o ensayos de campo
directamente sobre el terreno en donde se planea cimentar la estructura y en los cuales es
posible incluir una mayor cantidad de rasgos del macizo. Cabe destacar que unos no son
sustitutos de los otros, sino que pueden complementarse.
El muestreo y la preparación de los especímenes para este tipo de pruebas requieren muchos
cuidados en la extracción, transporte y preparación de la muestra conteniendo los planos de
falla, lo cual influye en el costo del ensayo. En el caso del muestreo de discontinuidades estos
cuidados se intensifican debido a que se requiere mantener intacta su condición natural hasta
el ensayo. En especial se debe tener cuidado de no modificar la condición de rugosidad de las
caras de la discontinuidad (Jiménez, 1998).
Por su parte, las investigaciones in situ son las más confiables en el estudio geotécnico
debido a que brindan datos sobre las condiciones reales en las que se encuentra el macizo
rocoso y toman en cuenta el factor de escala. Debido a su naturaleza, son hechas para
etapas de diseño final del proyecto y su realización por lo general es costosa, ya que puede
involucrar realización de sondeos, excavaciones, galerías, entre otros. Por esto generalmente
se realizan en obras de magnitud importante.
11
2.1. Ensayos de laboratorio
Las curvas esfuerzo-deformación obtenidas (ver ejemplo en figura 2-2) presentan una
rama ascendente, en su inicio con una tendencia lineal, donde se puede asumir que
cumple la ley de Hooke (E constante), hasta alcanzar la resistencia pico, luego de esta
la roca puede seguir manteniendo carga y perder resistencia gradualmente, esta parte
12
puede ser registrada en máquinas rígidas o servo-controladas. Este registro permite
conocer el comportamiento de la roca tras la rotura.
Figura 2-2. Curvas esfuerzo – deformación obtenidas del ensayo de compresión simple.
Fuente: González, 2002.
El valor de la fuerza máxima que soporta la probeta entre el área sobre la que se
aplica la fuerza es su resistencia a la compresión simple; depende del tamaño y forma
de la probeta, contenido de humedad, régimen y velocidad de la carga aplicada.
En el caso de las probetas, deben ser cilindros con relación L/D= 2,5- 3 con D>
54mm, en cuyo caso el tercio medio del testigo estará en un estado real de esfuerzo
uniaxial, y en esta región es donde se dará la falla. D será al menos 10 veces mayor
que el mayor tamaño de grano de la roca. La resistencia a compresión simple
disminuye al aumentar el volumen de la probeta. Las bases de la probeta deben ser
planas, paralelas y perpendiculares al eje del cilindro (ISRM 1979).
13
2.1.2. Ensayo de tracción directa:
Consiste en aplicar una fuerza de tracción uniaxial a una probeta cilíndrica del macizo.
Con este se pretende obtener el valor de la resistencia a la tensión. El diámetro de la
muestra debe ser mayor a 54mm.
14
( ) (2-1)
También conocido como Point Load Test, se puede aplicar sobre muestras cilíndricas o
sobre fragmentos irregulares de roca. El procedimiento consiste en hacer fallar la roca
en medio de dos puntas metálicas, a partir de la carga de rotura se puede obtener la
resistencia a la compresión simple mediante una correlación.
Franklin (1985) desarrolló el índice de carga puntual (Is), que toma en cuenta posibles
defectos en la geometría de la muestra y se calcula como:
(2-2)
15
2.1.5. Velocidad de ondas sísmicas:
Los módulos elásticos dinámicos del macizo (Ed y d) se obtienen a partir de las
fórmulas:
( )( )
( )
(2-3)
( ) (2-4)
( ⁄ )
(2-5)
[( ⁄ ) ]
En donde:
16
Con los resultados obtenidos se pueden construir las curvas del criterio de Mohr
Coulomb, y con la envolvente encontrar los valores de la cohesión y el ángulo de
fricción; con resultados representativos tanto para la roca intacta como para sus
discontinuidades.
Se realiza sobre muestras cilíndricas de roca similares a las del ensayo de compresión
uniaxial, rodeadas de una membrana impermeable que la separa del líquido que
provoca los esfuerzos confinantes. Al comenzar la prueba se aplica simultáneamente
la carga axial y la presión confinante, de tal forma que sean aproximadamente iguales
los rangos de ambos esfuerzos. Una vez alcanzado el nivel de presión confinante
deseado, se aplica carga axial hasta que se produzca la falla en la probeta. La presión
confinante debe mantenerse constante a lo largo de todo el ensayo.
Durante el ensayo se registran los datos de carga o esfuerzo axial 1, la deformación
axial, el ángulo del plano de la fractura y, en su caso, el ángulo que forman los planos
de anisotropía con respecto a la dirección de la carga axial. Las deformaciones se
miden idealmente con bandas extensiométricas fijadas directamente sobre la roca o
en equipos más recientes se registran datos continuos sobre la compresión que sufre
la muestra.
17
Figura 2-5. Curvas esfuerzo-deformación para diferentes valores de presión confinante.
Fuente: González, 2002
El equipo para el ensayo se ejemplifica en la figura 2-6, consiste en una celda triaxial,
en donde se coloca el núcleo del espécimen cubierto por la membrana permeable, un
mecanismo para la aplicación de la carga, el cual debe ser capaz de mantener un
esfuerzo constante hasta el punto en el que se produzca la falla, y un mecanismo
para generar la presión confinante, generalmente mediante la inyección de líquido
(agua) en una cámara alrededor del espécimen; es importante que existan
manómetros con el fin de medir las presiones de confinamiento aplicadas.
18
Figura 2-6. Esquema del ensayo de compresión triaxial.
Fuente: González, 2002.
Por esta razón y por motivos de escala, en muchas ocasiones se prefiere el ensayo in
situ particularmente para tipos de rocas frágiles y para juntas con rellenos o fallas con
roca triturada (Tapia, 1998).
La ISRM (1982) indica que los especímenes deben tener una relación altura –
diámetro (h/D) de 2 a 3, el diámetro no debe ser menor que 54mm aproximadamente
y la relación entre el diámetro de la muestra y el tamaño máximo de partícula debe
ser de 10:1.
Además existe la posibilidad de realizar el ensayo triaxial con una sola muestra
ensayada a la ruptura a distintas presiones laterales diferentes, esta prueba se conoce
como ensayo triaxial multietapas.
19
2.1.7. Ensayo de compresión triaxial verdadero:
20
2.1.8. Ensayo de corte directo en laboratorio:
Con esta prueba se pueden calcular los parámetros de cohesión (c) y ángulo de
fricción () para las discontinuidades del macizo, tanto para valores picos como
residuales, necesarios para aplicar el criterio de Mohr - Coulomb. Según ISRM los
resultados del ensayo pueden ser empleados en el análisis por equilibrio límite de
problemas de estabilidad de taludes y el análisis de estabilidad de fundaciones de
presas.
El equipo para llevar a cabo la prueba consiste en una caja de corte compuesta por
dos compartimientos en donde se introducen las partes de la probeta que contiene el
plano de discontinuidad. La superficie a ensayar debe estar colocada paralela a la
dirección de aplicación de la fuerza de cizalla, preferiblemente de forma cuadrada y
con un área mínima de 2500 mm2. Las partes superior e inferior de la caja deben
estar suficientemente separadas para permitir la contracción vertical de la
discontinuidad al ser cargada normalmente. La altura de cada una de las dos partes
de la muestra separadas por la discontinuidad debe ser mayor o igual que 0,2 veces
la longitud del lado de la muestra. (González, 2002)
21
normales que permiten dibujar las curvas -desplazamiento tangencial y -
desplazamiento normal correspondiente. De estas curvas se obtienen los valores de
pico y residual, que se representan en un diagrama n sobre el que se leen
directamente los valores de y c correspondientes a la resistencia de corte y
resistencia residual.
Debe realizarse por lo menos mediante cinco ensayos del mismo material, y con
diferente esfuerzo normal, pero constante en cada prueba (Jiménez, 1998).
22
El procedimiento del ensayo comprende dos fases. Primero se aplica una carga
normal a la discontinuidad, la cual se mantiene constante a lo largo de la prueba.
Luego se aplica carga tangencial hasta alcanzar la rotura del bloque. A lo largo del
tiempo se realizan lecturas del desplazamiento tangencial y normal de la roca. Si la
carga tangencial no puede ser aplicada en la misma dirección que el plano de falla de
la base, se debe procurar que la línea de acción de la fuerza pase por el centroide del
plano de corte; en este caso para el cálculo de los esfuerzos normales y tangenciales
esta carga debe ser descompuesta en sus componentes respectivos.
El equipo según se coloca para la realización del ensayo se muestra en la figura 2-8.
Al igual que en el caso del ensayo triaxial, es posible la realización de ensayo de
resistencial al corte multietapas, en el cual luego de llegar a la falla se incrementa la
carga normal y se vuelve a incrementar la carga tangencial, de manera que se
obtengan resultados para distintos valores de fuerza normal.
23
Figura 2-8. Esquema del ensayo in situ de resistencia al corte
Fuente: González, 2002.
Es similar al ensayo anterior de resistencia al corte directo, sin embargo, con el fin de
evitar el desgaste del bloque de muestra al determinar la resistencia residual, se
utiliza como alternativa la aplicación del esfuerzo cortante en forma rotacional y no
lineal. De esta manera la cantidad de desplazamiento no está restringida.
El ensayo resulta más caro y difícil que el de corte directo debido a que el equipo
requerido es más complejo. El horizonte de prueba usualmente es un plano de
24
debilidad en la roca como una junta natural, un plano de estratificación o de
esquistocidad o simplemente el contacto entre el concreto y la roca. El sitio para
realizar el ensayo debe ser una superficie lisa y firme, generalmente entre 0,5 y 3m
sobre el horizonte de prueba (Jiménez, 1998).
25
Figura 2-10. Curvas de calibración del Martillo Schmidt
Fuente: Aydin, 2009
26
Debido a la energía liberada durante el ensayo, existen martillos distintos para su
utilización en rocas blandas y duras; los cuales a su vez difieren de los utilizados para
pruebas sobre concreto.
Para esta prueba se coloca una placa de carga sobre la roca y se miden los
desplazamientos al aplicar cargas conocidas. La carga puede aplicarse de manera
horizontal o vertical mediante dispositivos hidráulicos. El equipo incluye una
estructura de reacción que debe ser capaz de resistir las cargas de reacción ejercidas
por el macizo. Una descripción del dispositivo para el caso de carga horizontal se
muestra en la figura 2-11.
27
Por lo general se usan varios ciclos de carga y descarga. Con este se puede obtener
de manera confiable el módulo de Young del macizo rocoso, a partir de las
ecuaciones:
( )
(2-6)
( )
(2-7)
Se realiza sobre la superficie interna del macizo rocoso, por lo general dentro de
galerías o trincheras. A partir de este se puede estimar el módulo de deformación del
macizo.
28
2.2.6. Ensayo presiométrico:
Es un ensayo de campo que se realiza tanto para suelos como para macizos rocosos,
se trata de un ensayo de carga – deformación, en el caso de su aplicación en rocas es
conocido como dilatómetro.
29
2.2.7. Métodos geofísicos:
Se realizan al hacer pasar una onda a través del macizo. Sirven para determinar la
deformabilidad dinámica y depende de la velocidad de las ondas elásticas
longitudinales y transversales a través de la roca. Esta velocidad varía dependiendo
del material presente, del grado de alteración, estado de esfuerzos y condiciones
hidrogeológicas.
Los módulos elásticos dinámicos del macizo se obtienen a partir de las mismas
fórmulas usadas en el ensayo de laboratorio de ondas sísmicas (ver sección 2.1.5).
Existe una serie de factores a tomar en cuenta a la hora de escoger los ensayos que
vayan a realizarse sobre la roca intacta o el macizo rocoso dentro de un proyecto de
ingeniería.
30
resultado obtenido a partir de la prueba de compresión simple descrita en el apartado
2.1.1 que los resultados a partir de pruebas de carga puntual o de esclerómetro,
debido a que en estos últimos es necesario el uso de correlaciones para la obtención
del parámetro buscado.
Por otra parte es de suma importancia garantizar que las pruebas a realizarse traten
de reflejar de la mejor manera las condiciones de esfuerzos presentes en el macizo
rocoso in situ, así como las que se van a presentar una vez que se impongan las
cargas debido a la presencia de la estructura a cimentar. Por ejemplo el ensayo de
compresión triaxial verdadero (2.1.7) sirve para representar mejor distintas
condiciones que el ensayo triaxial convencional, debido a que el primero sirve para
simular condiciones en donde los 3 esfuerzos principales tienen valores distintos.
31
32
Capítulo 3. Sistemas de Clasificación Geomecánica
Los sistemas de clasificación geomecánica sirven para caracterizar los macizos rocosos a
partir de rasgos del mismo tales como dimensiones y estado de las discontinuidades,
presencia de nivel freático, resistencia a la compresión simple, entre otros; que deben ser
evaluados con criterio de profesionales en el área.
Fue creado por Bienawski en 1973 y la actualización más reciente es del año 1989.
Inicialmente fue desarrollado para su aplicación en túneles, pero más recientemente ha
sido aplicado en fundaciones y taludes. Es usado para estimar el módulo de deformación
in situ y la resistencia de la masa rocosa.
Consiste en un índice de calidad que varía de 0 a 100 y se calcula con base en los
siguientes parámetros:
b) El Rock Quality Designation (RQD): fue desarrollado por Deere entre 1963 y 1967, es
un índice que permite estimar el grado de fracturación de un macizo a partir de
núcleos extraídos de pruebas de campo. Se define como la relación porcentual entre
la suma de las longitudes de trozos de roca mayores a 10cm y la longitud total del
tramo en estudio.
33
c) La separación entre discontinuidades: la cual define el comportamiento del macizo, si
es muy grande van a regir las propiedades de la matriz, mientras que si el
espaciamiento es pequeño indicará que el macizo es fracturado y los planos de
debilidad serán importantes en el comportamiento del conjunto. Se mide
directamente en afloramientos, galerías o perforaciones.
d) La condición de las discontinuidades: son características que definen el
comportamiento del macizo, incluye:
i. Longitud de la discontinuidad: también conocida como persistencia, es la extensión
de la discontinuidad, en excavaciones subterráneas se considera totalmente
continua si es mayor que la dimensión de la excavación.
ii. Abertura: distancia perpendicular de separación entre las caras de roca que forman
la discontinuidad.
iii. Rugosidad: es una medida del grado de aspereza de la cara de la discontinuidad,
tiene una importancia especial en el aporte a la resistencia al corte entre planos.
La forma más usada para medirla es mediante perfiles estándar de rugosidad.
iv. Relleno: en casos en los que las discontinuidades contengan material distinto a la
roca del macizo. Principalmente interesa conocer su consistencia y espesor
(dependiendo de este podría evitar incluso el contacto entre las caras de la
discontinuidad), sin embargo su presencia podría llegar a gobernar el
comportamiento de la discontinuidad por lo que es importante una caracterización
completa de sus propiedades (resistencia, deformabilidad y permeabilidad).
v. Alteración: para esta se usa la clasificación de la ISRM según sea: inalterada,
ligeramente alterada, moderadamente alterada, altamente alterada o
completamente alterada.
e) La presencia de agua freática: es importante describir el estado de las
discontinuidades, ya sea seco, húmedo o incluso con presencia de flujo de agua; ésta
condiciona las propiedades del macizo ya que puede alterar la superficie de la roca y
generar presiones de poro dentro del material.
Para la determinación de los parámetros se utiliza como base el cuadro 3-1. Además el
método toma en consideración un sexto parámetro, la orientación de las grietas, con un
34
factor de corrección dependiendo si la dirección de estas es favorable o no. Existen
valores distintos en el caso de túneles, cimentaciones o taludes (Ver cuadro 3-2).
Según el valor del índice obtenido, se clasifican los macizos en cinco clases desde muy
buena hasta muy mala, según lo muestra el cuadro 3-3, y para cada una de ellas se
proponen valores para los parámetros de falla de Mohr-Coulomb, cohesión y ángulo de
fricción (cuadro 3-4).
Puntuación 15 12 7 4 2 1 0
RQD 90% - 100% 75% - 90% 50% - 75% 25% - 50% < 25%
2
Puntuación 20 17 13 6 3
Separación entre discontinuidades >2m 0,6 - 2 m 0,2 - 0,6 m 0,06 - 0,2 m < 0,06 m
3
Puntuación 20 15 10 8 5
Puntuación 6 5 3 1 0
Ligeramente
Rugosidad Muy rugosa Rugosa Ondulada Suave
rugosa
4
Puntuación 6 5 3 1 0
Relleno duro Relleno duro Relleno blando Relleno blando
Relleno Ninguno
< 5 mm > 5 mm < 5 mm > 5 mm
Puntuación 6 4 2 2 0
Ligeramente Moderadamente
Alteración Inalterada Muy alterada Descompuesta
alterada alterada
Puntuación 6 5 3 1 0
Caudal por 10 m de
túnel Nulo < 10 10 - 25 25 - 125 > 125
(Litros/minuto)
Ligeramente
Estado general Seco Húmedo Goteando Flujo de agua
húmedo
Puntuación 15 10 7 4 0
Fuente: González, 2004.
35
Cuadro 3-2. Corrección por la orientación de las discontinuidades.
(3-1)
(3-2)
(3-3)
36
Serafim y Pereira (1983) obtuvieron muchos resultados para el rango en que RMR es
menor a 50, obteniendo la siguiente relación:
( )
(3-4)
Bieniawski y Orr (1976) han propuesto los siguientes factores de ajuste con el fin de
tomar en cuenta el efecto de la orientación de las juntas en la estabilidad horizontal:
Tipo de presa MF F B D MD
de gravedad Muy Favorable Favorable Bueno Desfavorable Muy Desfavorable
10-30
Buzamiento (°) 0-10 30-60 10-30 US 60-90
DS
Valoración 0 -2 -7 -15 -25
DS: Buzamiento hacia aguas abajo / US: Buzamiento hacia aguas arriba
Fuente: Bieniawski & Orr, 1976.
A partir de estudios como los de Snell y Knight (1991), en donde se analizó el problema
de estabilidad de la presa tomando en cuenta todas las fuerzas y tensiones actuantes,
Romana (2003) obtuvo un conjunto de factores de acuerdo con la orientación media de
las discontinuidades:
37
Cuadro 3-6. Factores de ajuste RSTA para la estabilidad de presas a partir de la orientación de
las juntas.
Tipo de presa MF F B D MD
de gravedad Muy Favorable Favorable Bueno Desfavorable Muy Desfavorable
Materiales
Otros 10-30 DS 0-10 A - -
sueltos
30-60 DS 10-30
Gravedad 10-60 DS 0-10 A -
60-90 A US
30-60
10-30 DS 10-30 US 0-10 A
Arco 30-60 DS ADS 60-90 A
RSTA 0 -2 -7 -15 -25
DS: Buzamiento hacia aguas abajo / US: Buzamiento hacia aguas arriba / A: Cualquier buzamiento.
Gravedad incluye CVC (hormigón vibrado), RCC (hormigón compactado con rodillo) y relleno duro (Hardfill).
Fuente: Romana, 2004.
( | |) (3-5)
(3-6)
En donde RMRBD (RMR básico seco) está definido como la suma de los primeros cuatro
parámetros del RMR normal (resistencia a compresión simple, RQD, espaciamiento y
condición de las discontinuidades) más el correspondiente a una influencia de agua en
condición seca, es decir un valor de 15. El factor de corrección CF se obtiene de la
ecuación 3-5 y el RSTA a partir del cuadro 3-6.
38
DMRSTA > 60 Sin preocupación especial
60 > DMRSTA > 45 A comprobar con atención
45 > DMRSTA > 30 Preocupante
30 DMRSTA Preocupación importante
3.3. Clasificación Q
Desarrollada por Barton, Lien y Lunde en 1974, fue concebida para dar recomendaciones
sobre sostenimientos en túneles. El valor de Q depende del RQD, de características de
las discontinuidades (cantidad de familias, rugosidad, alteración), presencia de agua en
el macizo y condiciones tensionales presentes.
Es un índice desarrollado por Hoek (1994), y Hoek, Kaiser y Bawden (1995), como un
reemplazo para el RMR de Bienawski en su expresión para el criterio de ruptura del
macizo, principalmente porque este no era adecuado como medio para relacionar el
criterio de ruptura de Hoek y Brown (expuesto en la sección 4.2) con las observaciones
geológicas en campo, particularmente para macizos rocosos muy débiles (Hoek et al,
2002). Este sistema es esencialmente cualitativo.
Las características geológicas del macizo rocoso, junto con la evaluación visual del
mismo son usadas como parámetros de entrada para la selección de parámetros
relevantes para la predicción de la resistencia y deformabilidad de la masa rocosa; a
partir de la descripción de las condiciones de geología presentes y de la estructura propia
del macizo.
En el cuadro 3-7 se muestra el cuadro general para la clasificación del GSI, a diferencia
de los otros sistemas esta incluye masas de roca de calidad muy pobre. Asimismo está
extendido para ser aplicado en masas de roca heterogéneas y sedimentarias, tal y como
lo muestra el cuadro 3-8.
39
Cuadro 3-7. Estimación del GSI, basado en observaciones geológicas.
CONDICIONES DE GEOLOGÍA
realista que estimar un GSI = 35. Nótese que el
cuadro no aplica para fallas estructuralmente
MUY POBRES
MUY BUENA
a muy pobre, podría hacerse una variación hacia la
por hierro.
angulares
REGULAR
derecha para condiciones mojadas. La presión de
POBRES
BUENA
agua es tomada en cuenta con análisis de esfuerzos
efectivos.
FRACTURADO
ENTRELAZADO DECRECIENTE DE PIEZAS DE ROCA
LAMINADO / CORTADO
Ausencia de bloques debido al
espaciamiento cerrado de esquistocidad
pobre o planos de corte
40
Índice de Resistencia Geológica (GSI) para macizos rocosos heterogéneos (Hoek y
Marinos, 2000)
A partir de la descripción de la litología, estructura y condiciones de la superficie (particularmente de
los planos de falla), se selecciona una celda en el cuadro. Se localiza la posición en la celda que
corresponda a las condiciones de las discontinuidades y se estima el valor promedio del GSI de los
contornos. No se debe tratar de ser muy preciso. Mencionar un rango desde 33 a 37 es más realista
que estimar un GSI = 35. Nótese que el criterio de Hoek & Brown no aplica para fallas
estructuralmente controladas. En casos donde están presentes planos estructurales débiles en una
BUENA
POBRES
estratificación)
REGULAR
meteorizar
MUY BUENA
meteorizadas
MUY POBRES
del macizo rocoso. La resistencia de algunos macizos rocosos se ve reducida por la presencia de agua
suave o rellenos
subterránea y puede tomarse en cuenta haciendo una variación hacia la derecha en las columnas de
LAS DISCONTINUIDADES
meteorizadas y alteradas
condiciones regular, pobre y muy pobre. La presión de agua no cambia el valor del GSI y se contabiliza
(Predominantemente planos de
CONDICIONES DE SUPERFICIE DE
al usar un análisis de esfuerzos efectivos.
Superficies lisas, moderadamente
COMPOSICIÓN Y ESTRUCTURA
altamente meteorizadas con juntas de arcilla
41
E. Rocas
D. Rocas
sedimentarias
C. Areniscas y sedimentarias o
B. Areniscas con débiles o
sedimentarias en esquistos limo-
capas delgadas de esquistos
cantidades arcillosos con
rocas sedimentarias arcillosos con
similares capas de
capas de
arenisca
areniscas.
Si el macizo presenta discontinuidades con relleno se puede usar el cuadro del GSI
usando las descripciones de la columna de condiciones de discontinuidad pobre o muy
pobre. Si el material de relleno es sistemático y grueso (más de unos pocos centímetros),
o presenta material de tipo arcilloso, Hoek et al (2005) recomiendan usar el cuadro
correspondiente a masas de roca heterogéneas.
Para tomar en cuenta la influencia del agua, se recomienda en las rocas del tipo regular
a muy pobre que se haga un cambio en el valor del GSI hacia el lado derecho del
cuadro. En el caso de los macizos sometidos a la acción del clima, también se hace un
cambio en el valor hacia la derecha con respecto a la misma masa de roca inalterada.
Hoek et al (1993) indican que el GSI puede ser estimado además a partir del valor del
RMR, siempre que este tenga una puntuación mayor a 23, a partir de la fórmula:
(3-7)
: Rock Mass Rating calculado a partir de la versión de 1989.
Dentro de las limitaciones del sistema se menciona que asume que el macizo posee una
serie de discontinuidades en direcciones aleatorias suficientes como para que se
comporte como una masa isotrópica, es decir, el comportamiento será independiente de
la dirección en que se aplique las cargas. Por lo tanto no debería ser aplicado en macizos
con una orientación estructural claramente definida.
42
En lo que respecta a la precisión, el GSI es mejor al ser descrito como un rango de
valores. Para propósitos analíticos este rango debe ser definido por una distribución
normal con valores de promedio y desviación estándar.
Como se mostró, existen diversos sistemas para caracterizar el macizo rocoso a partir de
distintos datos y que brindan una idea de las propiedades del material presente.
En el caso del RMR posee la ventaja de ser el sistema más utilizado a lo largo de la
historia, por lo que existe una gran cantidad de estudios que respaldan su aplicación en
distintos medios geológicos. Es por esto que se tiene un nivel de confianza mayor a la
hora de aplicar las correlaciones como por ejemplo para encontrar los parámetros de
cohesión, ángulo de fricción y módulo de deformabilidad.
Por su parte el DMR corresponde a una modificación del sistema RMR. Sin embargo, el
método posee la desventaja de no tener amplia difusión en la actualidad, por lo tanto no
se puede llegar a conclusiones más vinculantes entre el resultado de su aplicación con
alguna propiedad del macizo rocoso, quedando como principal producto las indicaciones
dadas al final de la sección 3.2 referentes al nivel de seguridad de la presa ante
deslizamiento, de una manera general.
43
Para finalizar, se recomienda la aplicación del GSI sobre todo cuando se desee aplicar el
criterio de ruptura de Hoek y Brown que se verá en el siguiente capítulo. Esto debido a
que fue desarrollado exclusivamente para suplir las carencias del RMR a la hora de
aplicar las ecuaciones para estimar la resistencia del macizo rocoso. Además posee la
ventaja de ser un sistema cualitativo, que inclusive puede calcularse a partir de la
descripción geológica de los núcleos de perforación de pruebas de campo; y en la
actualidad, debido a su uso en distintos proyectos, se disponen de actualizaciones en sus
cuadros de estimación para varios tipos de roca, así como recomendaciones para
distintos tipos de condiciones geológicas.
44
Capítulo 4. Criterios de rotura de macizos rocosos
Los criterios de ruptura son expresiones matemáticas que representan modelos para estimar
la resistencia al corte de los materiales a partir de los esfuerzos a los que es sometido y a las
características propias, es decir bajo sus condiciones de trabajo. Son obtenidos
empíricamente y su uso más extendido en la mecánica de rocas es en los criterios que
consideran la resistencia de pico, mediante los cuales se intenta predecir cuando va a ocurrir
la falla ante una determinada combinación de cargas.
A pesar de que los criterios de ruptura fueron inicialmente desarrollados para materiales
homogéneos (roca intacta), algunos se pueden aplicar a macizos rocosos e inclusive toman
en cuenta las condiciones del medio, incluyendo las discontinuidades, y sirven para predecir
el comportamiento global del macizo, esto gracias a estudios hechos a distintos materiales,
mediante pruebas de campo y laboratorio que permitieron desarrollar correlaciones y calibrar
modelos para su aplicación.
Además, su uso es de gran utilidad para el diseño de cimentaciones, como se verá en los
capítulos 5 y 6, las propiedades del macizo rocoso necesarias para determinar capacidad de
soporte y asentamientos pueden ser obtenidas a partir de ensayos de campo y laboratorio y
mediante la aplicación de los criterios de ruptura se pueden conseguir los parámetros de falla
del material.
45
Figura 4-1. Representación gráfica del criterio de Mohr-Coulomb en términos de a) esfuerzos tangenciales y
normales. b) Y esfuerzos principales. Para un estado tensional situado por debajo de las rectas o envolventes no
se producirá la rotura.
Fuente: González, 2002
(4-1)
Los parámetros de este criterio pueden ser obtenidos a partir de los ensayos de campo o
laboratorio que se mencionan en el capítulo 2 del presente trabajo.
(4-2)
( )
46
Donde qu es la resistencia a la compresión inconfinada de la roca intacta obtenida de
pruebas de laboratorio, además:
( )
(4-3)
Es considerado como el más adecuado para trabajar macizos rocosos debido a que es un
criterio no lineal, a diferencia del de Mohr Coulomb, en este la representación gráfica de la
rotura es una curva de tipo cóncavo.
( ) (4-4)
( )
(4-5)
( )
(4-6)
( ) (4-7)
En donde D es un factor que depende del grado de alteración del macizo rocoso por
efecto de las voladuras o relajación de esfuerzos. Varía desde 0 para macizos rocosos
inalterados hasta 1 para macizos rocosos muy alterados. Hoek et al (2002) brinda una
47
serie de guías para la elección adecuada de este valor, el cual puede ser estimado a partir
del cuadro 4-1. Este está dado para el caso de túneles y taludes, sin embargo las técnicas
de excavación son similares, especialmente en el caso de los últimos; por lo que se
recomienda su uso tomando esto en cuenta.
(4-8)
(4-9)
Balmer (1952) propuso las siguientes ecuaciones para relacionar los esfuerzos normales y
al corte con los esfuerzos principales:
⁄
(4-10)
⁄
√ ⁄
( ) (4-11)
⁄
Donde
⁄ ( ⁄ ) (4-12)
48
Cuadro 4-1. Guía para estimar el factor de alteración D.
49
Cuadro 4-2. Valores de la constante para roca intacta y tipo de roca.
Tipo Textura
de Clase Grupo
Gruesa Media Fina Muy fina
Roca
Conglomerado Arenisca Limolita Lutita
-22 19 9 4
Clástica
← Grauwacas →
(18)
← Tiza →
Sedimentarias
7
Orgánicas
← Carbón →
(8-21)
No clásticas Brecha Caliza Caliza
Carbonatos (20) esparítica micrítica
(10) 8
Gypsum Anhidrita
Químicas
16 13
Mármol Hornfel Cuarcita
No foliadas
Metamórficas
9 (19) 24
Migmatita Anfibolita Milonita
Ligeramente foliadas
(30) 31 (6)
Gneiss Esquisto Filita Pizarra
Foliadas (*)
33 (10) (10) 9
Granito Riolita Obsidiana
33 (16) (19)
Claras Graniodorita Dacita
(30) (17)
Diorita Andesita
Ígneas
(28) 19
Gabbro Dolerita Basalto
Oscuras 27 (19) (17)
Norita
22
Aglomerado Brecha Toba
Extrusivas piroclásticas
(20) (18) (15)
Fuente: Hoek et al, 2002
( ) ( )√ (4-13)
50
( ) ( ) (4-14)
Por otra parte, también se dan las siguientes ecuaciones mediante las cuales se pueden
obtener los parámetros de ángulo de fricción y cohesión del criterio de ruptura de Mohr-
Coulomb
( )
[ ] (4-15)
( )( ) ( )
[( ) ( ) ]( )
(4-16)
( )
( )( )√ ( )( )
Siendo ⁄
Hoek y Brown (1997) propusieron que la resistencia a la compresión uniaxial de una masa
rocosa podía ser definida a partir de la relación de Mohr-Coulomb
(4-17)
[ ( )]( ⁄ )
(4-18)
( )( )
Actualmente los creadores de este criterio tienen a disposición del público un programa de
cómputo gratuito llamado Roclab, que puede ser descargado en la dirección
www.rocscience.com, y sirve para realizar análisis de resistencia del macizo rocoso a partir
del criterio de falla de Hoek y Brown.
51
macizo rocoso. Esto a partir de información de entrada correspondiente a los parámetros
del criterio. Además brinda ayuda para la escogencia de estos valores.
Supone que la resistencia al esfuerzo cortante () en la junta está relacionada con la
rugosidad de la misma, descrita por el coeficiente de rugosidad JRC (Joint Roughness
Coefficient) a partir de unos perfiles de rugosidad tipo; con la resistencia a la compresión
simple en las paredes JCS (Joint wall Compression Strenght) estimada a partir del rebote
elástico del martillo Schmidt y con el ángulo de rozamiento residual (r).
[ ( ) ] (4-19)
normales altos ( ). Los valores más representativos suelen estar entre 3 y 100. La
52
resistencia friccional total viene dada por ( ) y por lo general no es mayor a 50°. A
mayor valor de menor valor de la resistencia friccional total (González, 2004).
Con esta relación se obtienen ángulos de rozamiento muy altos para tensiones de
compresión muy bajas sobre la discontinuidad. González (2004) no recomienda su uso
(4-20)
El ángulo de rozamiento será inferior al ángulo de la roca sana ( ) debido a que las
discontinuidades por lo general están alteradas, para su cálculo se puede utilizar la
fórmula:
( ) (4-21)
Donde R es el valor del rebote del martillo Schmidt sobre la superficie del material sano y
seco; r es el valor es el valor del rebote sobre la superficie de la pared de la
discontinuidad en estado natural, húmedo o seco, es el ángulo de resistencia básico
de la roca.
( ) (4-22)
53
en la figura 4-2. Además, a partir de los resultados del ensayo tilt test, se puede aplicar la
ecuación:
(4-23)
( )
Donde es el ángulo a partir del cual se inicia el movimiento de uno de los bloques de
roca durante el ensayo.
54
Como ayuda para la determinación del valor para el ángulo de rozamiento residual y el
coeficiente de rugosidad de las juntas JRC se puede realizar el ensayo de vuelco (también
conocido como Tilt test).
El ensayo se puede llevar a cabo tanto en campo, con fragmentos del macizo; como en
equipo especializado a partir de núcleos de sondeos. Una muestra del montaje de la
prueba se observa en la figura 4-3.
( ) (4-24)
Además el valor del coeficiente de rugosidad de las juntas del criterio de Barton Y
Choubey, el cuál será detallado en el capítulo 4 de criterios de ruptura, se puede
encontrar a partir de la relación:
(4-25)
( )
55
4.4. Otros criterios de rotura
Además de los tres criterios expuestos en secciones anteriores, se han desarrollado otros
criterios de rotura para tratar de predecir el modo de falla de macizos rocosos. Existen
autores que han desarrollado criterios no lineales, que pueden ser clasificados en tres
grupos principales: parabólicos, logarítmicos e hiperbólicos, siendo la parabólica la más
usada (Melentijevic, 2005)
Además se han desarrollado varios criterios empíricos de rotura, esto debido a que los
criterios teóricos muchas veces no pueden predecir con exactitud la resistencia al
cortante de la roca y muchas veces dependen de parámetros que son difíciles de medir.
Estos han sido desarrollados a partir de distintas pruebas realizadas a macizos rocosos y
por lo general dependen de constantes propias de las características del material, así
como de la resistencia a la compresión simple de la roca.
Como se mostró en las secciones anteriores, existen diversos criterios que sirven para
tratar de modelar la resistencia al corte de los macizos rocosos ante las distintas a las
que se va a ver expuesto.
56
Por su parte, el criterio de rotura de Hoek y Brown ha sido desarrollado para su
aplicación en macizos rocosos, por lo que se considera como el más adecuado debido a
que a lo largo de los años se ha ido mejorando a partir de la experiencia al aplicarlo en
diversos proyectos. Además representa la falla en condición no lineal y en términos de
constantes que consideran condiciones propias del macizo rocoso (principalmente tipo,
textura de la roca y el resultado de la aplicación del sistema de clasificación GSI) así
como también toma en cuenta un factor propio del desarrollo de la obra, en este caso el
grado de alteración que sufre el material al realizar la excavación para la colocación de
los cimientos.
Cuadro 4-3. Criterios de rotura de macizos rocosos y datos necesarios para su aplicación
Rotura a favor de
Características del
los planos de Rotura a través de la matriz rocosa
macizo rocoso
discontinuidad
Macizo rocoso masivo sin Hoek y Brown
No es posible
discontinuidades (mi para roca intacta, s=1)
Mohr-Coulomb
Macizo rocoso Hoek y Brown
(c y de las
estratificado (mi para roca intacta, s=1)
discontinuidades)
Macizo rocoso con dos Mohr-Coulomb
Hoek y Brown
familias de (c y de las
(mi para roca intacta, s=1)
discontinuidades discontinuidades)
Macizo rocoso con tres
Hoek y Brown Generalmente no es posible. Si lo fuera
familias de
(m, s, a del se aplican iguales criterios que para el
discontinuidades
macizo) caso de 2 familias
ortogonales
Macizo rocoso con cuatro
Hoek y Brown
o más familias de No es posible
(m, s, a del macizo)
discontinuidades
Fuente: Jiménez, 2002.
Por último, el criterio de Barton y Choubey sirve para estimar la resistencia al corte de
una discontinuidad, por lo que es útil emplearlo para casos de macizos rocosos con
pocas familias de discontinuidades y en donde se espere que la falla a presentarse sea a
lo largo de estas discontinuidades.
57
58
Capítulo 5. Capacidad de soporte
En muchas de las fundaciones sobre roca, el macizo posee una resistencia mayor que la del
material de fundación (concreto), por lo tanto el diseño final casi siempre estará controlado
por otras consideraciones, por ejemplo las deformaciones o asentamientos y estabilidad ante
deslizamiento. Por lo general los problemas en capacidad de soporte están relacionados con
la geología estructural.
Es importante tener claro dos conceptos, la capacidad de soporte última, que corresponde a
la carga promedio por unidad de área necesaria para producir la falla por ruptura del material
soportante (en este caso el macizo rocoso). Por su parte, la capacidad de soporte admisible
se define como la máxima presión que puede ser permitida sobre un macizo rocoso
soportante, tomando en cuenta todos los factores involucrados, con una adecuada seguridad
contra la falla de la masa rocosa y contra deformaciones en la cimentación de una magnitud
tal que puedan causar daños en la estructura.
59
5.1. Métodos analíticos
Es adecuado para analizar fundaciones con formas inusuales o con bajo condiciones de
carga muy variables, así como en casos donde el macizo soportante tiene propiedades
heterogéneas. Como desventaja se tiene que no brinda una solución directa para la
capacidad de soporte última, esta requiere un análisis de la distribución de esfuerzos
resultante con respecto a un criterio de falla adecuado. Como ventaja sí provee
soluciones para las deformaciones.
El método del equilibrio límite por su parte es aplicable cuando el modo de falla presenta
cuñas por cortante, sus principios son similares a cuando se aplica para análisis de
estabilidad por deslizamiento. La capacidad de soporte última corresponde a una
condición de carga en la fundación necesaria para provocar un inminente estado de falla.
60
Condiciones del macizo rocoso Ruptura Ecuación de
Discontinuidades capacidad de
Ilustración Mecanismo
Buzamiento Espaciamiento soporte
Roca frágil:
Falla de cortante local
Ecuación 5-6
producida por ruptura
frágil
Intacto o masivo
N/A S>>B
Roca dúctil:
Falla en general de
cortante a lo largo de Ecuación 5-1
superficies de ruptura bien
definidas
Discontinuidades abiertas:
Falla por compresión de
columnas individuales de
Ecuación 5-7
roca. Juego de
discontinuidades con poco
espaciamiento entre sí.
Discontinuidades con buzamiento alto
S<B
Discontinuidades cerradas:
Falla generalizada oir
cortante a lo largo de
70<<90 superficies de ruptura bien Ecuación 5-1
definidas.
Discontinuidades muy
verticales.
Discontinuidades abiertas
y/o cerradas:
Falla iniciada por
punzonamiento, tendiendo Ecuaciones 5-8
S>B
a la falla generalizada por a 5-10
cortante.
Juego de discontinuidades
muy verticales.
Figura 5-1. Modos de falla por capacidad soportante asociados con diversas condiciones del macizo rocoso.
Fuente: adaptado de USACE, 1994.
61
Condiciones del macizo rocoso Ruptura Ecuación de
Discontinuidades capacidad de
Ilustración Mecanismo
Buzamiento Espaciamiento soporte
de ruptura a lo largo de
puede
20<<70 las discontinuidades. Ecuación 5-12
desarrollarse a lo
Juegos de
largo de las
discontinuidades con
discontinuidades
buzamiento moderado.
H con respecto a
B son
0<<20
dependientes de
las propiedades
de la roca Capa superior rígida y
delgada:
La falla es iniciada por el
N/A
punzonamiento del
estrato rígido y delgado
superior.
Falla generalizada de
cortante por superficie
de ruptura irregular a
Fracturado
Figura 5-1 (Cont). Modos de falla por capacidad soportante asociados con diversas condiciones del macizo
rocoso.
Fuente: adaptado de USACE, 1994.
62
5.2.1. Roca intacta:
Para efectos de falla por capacidad de soporte se considera roca intacta a los macizos
en los que los espacios entre discontinuidades (S) sean de cuatro a cinco veces
mayores que el ancho de la placa de fundación (B). Las juntas están tan distanciadas
que su orientación y condición se consideran de poca relevancia, se pueden presentar
dos tipos de falla de acuerdo con el tipo de roca:
a) Roca dúctil: las fallas generales por cortante también se inician en el borde de la
placa, pero las superficies de deslizamiento se desarrollan en cuñas bien definidas,
las cuales se extienden hasta la superficie. Este tipo de falla está relacionada a
rocas dúctiles con resistencia post-pico, ver figura 5-1.b.
Para estimar la capacidad de soporte se puede emplear la ecuación de Buisman –
Terzaghi (1943), la cual es válida para cimentaciones largas y continuas, con una
relación largo-ancho de al menos 10. Sirve en el caso de presentarse falla general
por cortante y está definida por:
(5-1)
En donde:
Capacidad de soporte última [kPa]
Cohesión del macizo rocoso [kPa]
Peso unitario efectivo del macizo rocoso [kN/m3]
Ancho de la fundación [m]
Nivel de desplante de la cimentación [m]
Nc, N y N = Factores de capacidad de carga definidos por:
√ ( ) (5-2)
√ ( ) (5-3)
(5-4)
( ) (5-5)
Donde:
Ángulo de fricción del macizo rocoso [°]
63
b) Roca frágil: la falla local por cortante se inicia en el borde de la fundación y se
desarrolla en patrones de cuñas y superficies de deslizamiento, tal y como se
muestra en la figura 5-1.a, las grietas se desarrollan sin embargo no llegan a
propagarse hasta la superficie. Las fallas locales por cortante generalmente
están asociadas a rocas frágiles que muestran una pérdida de resistencia post-
pico significativa. La capacidad se puede calcular mediante la expresión:
(5-6)
El nivel de desplante tiene poca contribución a la estabilidad total de capacidad de
carga, por lo tanto no se toma en cuenta.
a) Discontinuidades con inclinación muy alta y con muy poca separación: los dos
tipos de falla posibles se muestran en las figuras 5-1.c y 5-1.d. Las
discontinuidades que son abiertas (como en el caso 5-1.c) ofrecen poca
contención lateral, por lo tanto la falla es iniciada por la falla a compresión de las
columnas individuales de roca. Las juntas que son estrechamente cerradas (figura
5-1.d) sí proveen retención lateral, por lo que en estos casos la falla es probable
que sea del tipo cortante.
Para el caso 5-1.c el modo de falla es similar a la falla por compresión inconfinada.
La capacidad se puede calcular como:
( ) (5-7)
64
Cimentaciones cuadradas:
(5-9)
Cimentaciones corridas con L/B ≤ 32:
(5-10)
( )
En donde:
Factor de corrección que depende del espesor de la roca de cimentación y del
ancho de la cimentación (ver figura 5-2)
Dimensión máxima del cimiento [m]
Factor de capacidad de carga dada por:
( )( )( ) ( ) √ (5-11)
En las figuras 5-2 y 5-3 se muestran soluciones gráficas para el factor de corrección J
y el factor de capacidad de carga, respectivamente.
65
Figura 5-3. Factor de capacidad de carga por espaciamiento de discontinuidades.
Fuente: adaptado de USACE, 1994.
Los modos de falla en los macizos estratificados, en los que cada capa posee
características diferentes, son complejos. Se ha identificado el modo de falla para dos
casos, ambos consisten en una capa de roca rígida sobre otra de roca suave
altamente deformable, con inclinaciones de al menos 20° con respecto al plano de
fundación. En el primer caso, tal y como lo muestra la figura 5-1.g, una capa gruesa y
66
rígida está sobre la capa blanda; mientras que en el segundo caso (figura 5-1.h) la
capa superior es rígida pero delgada. En ambos casos la grieta es iniciada por una
falla por tensión, sin embrago en el primer caso es generada por flexión en la capa
gruesa rígida, mientras que en el segundo caso es causada por aplastamiento a lo
largo de la capa delgada rígida.
Wyllie (1992) propone tres modos de falla en el caso de una capa delgada de roca
rígida que yace sobre un estrato grueso de roca mucho más débil, los cuales se
muestran en la figura 5-4.
Figura 5-4. Cimentaciones superficiales sobre formaciones de roca estratificada con capa superior rígida e
inferior débil.
Fuente: adaptado de Wyllie, 1992.
67
Los mecanismos de falla pueden ser por punzonamiento (figura 5-4.a), pandeo (figura
5-4.b) o por flexión (figura 5-4.c). Si la capacidad de soporte de la capa inferior es
muy baja, se producirán deformaciones considerables en ella, causando la falla de la
capa superior y, por ende, de la cimentación.
El modo de falla depende de las propiedades del macizo rocoso y de la relación entre
el grosor H de la capa superior y el ancho B de la fundación. Si la relación H/B es baja
y el estrato inferior es compresible, es probable que la falla sea por punzonamiento.
Por otra parte, si la capa por debajo es plástica e incompresible, entonces el macizo
rígido superior podría pandearse. Para valores altos de H/B y con una capa inferior
compresible, la falla sería por flexión del estrato superior.
Para los otros modos de falla, el esfuerzo de tensión teórico en la parte inferior de la
capa superficial puede ser calculado con los métodos de Roark (1970), asumiendo que
el bloque soportante es de forma circular, está simplemente apoyado sobre los bordes
y no tiene soporte alguno por parte del material compresible subyacente. El esfuerzo
de tensión t en el centro de la superficie inferior del bloque circular, bajo una carga
uniforme Q, actuando sobre un área de radio B/2 sería:
(5-13)
68
[( ) ( ) ] (5-14)
En donde r es el radio del bloque circular soportante, H el grosor del bloque (igual al
de la capa superior) y la relación de Poisson para la roca. ro es un parámetro que
depende de las dimensiones relativas del radio del área cargada y el grosor del
bloque:
Si B > H,
(5-15)
Si B < H,
[ ( ) ] (5-16)
Como se mencionó anteriormente, las expresiones son válidas para placas largas y continuas,
con relaciones largo/ancho mayores a diez. En caso de tener placas con una geometría
diferente, se deben utilizar factores de corrección según se indican a continuación:
69
Cuadro 5.1. Factores de corrección para los factores de capacidad de carga.
Para cimientos rectangulares con valores de L/B distintos a los mostrados en el cuadro 5.1 se
pueden estimar los factores de corrección mediante interpolación lineal. La capacidad de
soporte última se obtiene con la ecuación más apropiada según sea el caso, al multiplicar el
factor de corrección por el valor del factor de capacidad de carga correspondiente.
70
Figura 5-5. Caso típico de cimentacion sometida a carga excéntrica.
Fuente: USACE, 1994.
( ) ( ) (5-17)
( ) ( ) (5-18)
Donde
71
q(max) = esfuerzo máximo bajo la cimentación
B= ancho de la cimentación
L= largo de la cimentación
(5-19)
Existen casos específicos en los que es necesario cimentar una estructura sobre macizos
rocosos bajo condiciones especiales. En USACE (1989) se dan soluciones para algunas de
estas situaciones, como por ejemplo cimentaciones bajo cargas inclinadas, fundaciones
inclinadas y cimentaciones sobre taludes.
Para el cálculo de la capacidad de soporte bajo estas condiciones, la ecuación 5-1 puede
escribirse de la siguiente forma:
(5-20)
En donde los términos ξ corresponden a factores de corrección que deben ser calculados
según el caso respectivo.
( ) ( ) (5-21)
72
Cuando =0°
(5-22)
Cuando >10°
( ) ( ) (5-23)
( ) (5-24)
( ) (5-25)
En los casos en los que la base de la fundación de la estructura deba construirse con
una inclinación, distinta al plano horizontal, se deben aplicar los siguientes factores de
corrección:
( ) (5-26)
Cuando =0°
( ) (5-27)
Cuando >0°
(5-28)
73
es el ángulo que forma la base del cimiento con la línea horizontal, en radianes.
Para efectos del cálculo, el ángulo debe seguir una convención de signos, según la
cuál una rotación en sentido anti-horario es positiva, caso contrario será negativa.
( ) (5-29)
Cuando =0°
( ) (5-30)
(5-31)
Cuando >0°
(5-32)
(| |) (5-33)
74
(5-34)
En donde los factores y toman los valores según la figura 5-6. Para su
obtención se introduce una nueva variable, denominada número de estabilidad No,
definida como:
(5-35)
Figura 5-6. Valores para factores de capacidad de carga para cimentaciones localizadas sobre talud.
Fuente: Wyllie, 1992.
75
5.4.5. Combinación de factores:
Todos los factores expresados anteriormente asumen un nivel freático presente a una
profundidad por lo menos igual al ancho de la fundación por debajo de la base de la
cimentación. Cuando exista presencia de agua se recomienda realizar análisis de
estabilidad con el fin de incluir el efecto de la presión de agua en la fundación.
Según el Código de Cimentaciones de Costa Rica, una cimentación profunda está definida
como un elemento que transmite la carga de la estructura hacia estratos profundos. Son
utilizadas cuando la capacidad de carga de los estratos superiores no es suficiente para
brindar soporte a los esfuerzos provocados por la estructura a cimentar, así como cuando
las deformaciones esperadas no son admisibles para el buen funcionamiento de la obra.
Dependiendo del tipo de mecanismo mediante el cual se transfiere la carga a los estratos
de suelo o roca las cimentaciones profundas pueden trabajar por fricción, si los esfuerzos
son disipados por el contacto entre el material del pilote y el material alrededor de él; o
por punta si la carga es soportada principalmente por el extremo de la cimentación en
contacto con un estrato competente.
Las principales cimentaciones profundas son los pilotes hincados, los cuales por lo general
soportan la carga en grupo, mientras que los pilotes perforados son contruidos para
transmitir la fuerza a estratos de roca profundos de manera independiente y por lo
general permiten pocos asentamientos en su funcionamiento.
( ) (5-36)
76
es el área transversal del pilote en la punta, es el factor de capacidad de carga,
tal y como fue definido en la ecuación 5-5 y es la resistencia a la compresión
inconfinada del macizo rocoso.
( ) (5-37)
( ) (5-38)
Si se presenta el caso de contacto de la punta del pilote con una capa de roca de
espesor delgado, se supone un mecanismo de falla por punzonamiento y la resistencia
se calcula como:
(5-39)
(5-40)
77
(5-41)
[ ]
Donde
La aplicación de estas ecuaciones está condicionada a macizos en los que el valor del
RQD sea mayor a 50, asimismo debe ser mayor a 12 pulgadas, menor a 0.25
pulgadas para discontinuidades sin relleno o menor a 1 pulgada en el caso que exista
78
relleno en las juntas, y el diámetro de empotramiento (B) debe ser superior a las 12
pulgadas.
Este caso es poco común, debido a que las capas de roca por lo general son lo
suficientemente resistentes para resistir las cargas que transmite la cimentación, por
lo que su mayor aplicación es como soporte de pilotes por punta.
Dentro del primer grupo, la mayoría de autores proponen que la resistencia puede ser
calculada a partir de la expresión:
(5-43)
Dando esta un valor mínimo y pudiendo llegar incluso a un valor máximo usando un
factor de .
(5-44)
En donde toma distintos valores propuestos por diversos autores, algunos de ellos
se muestran en el cuadro 5-3.
En los pilotes sobre roca, no debe contemplarse la resistencia por fricción en suelos
cuya deformabilidad sea claramente mayor que la correspondiente a la zona de la
punta (Muelas, 2005).
79
Cuadro 5-3. Valores propuestos para el cálculo de la resistencia por fricción de pilotes sobre
roca.
Fleming et al (1992) 0.4 c < 0.50 MPa Aplicable solo a rocas blandas
80
estimado; si es mayor a 10mm se asume que la carga es soportada únicamente por
punta, caso contrario será transmitida por fricción. Estas suposiciones son
conservadoras ya que no hay manera de calcular la resistencia del caso combinado
entre resistencia por punta y fricción.
(5-45)
√ (5-46)
Donde
La capacidad por punta puede ser estimada, al igual que para el caso de pilotes, a
partir de las ecuaciones 5-40 y 5-41. Además, existe un método para calcular la
resistencia a partir del ensayo de presiómetro expuesto en la sección 2.2.8, la
Sociedad Canadiense de Geotecnia (1985) propone la relación:
( ) (5-47)
Donde
81
presiómetro liberado, presión horizontal medida en la elevación base [kN/m2]
Demp/Bemp Kb
0 0,8
1 2,8
2 3,6
3 4,2
5 4,9
7 5,2
Fuente: Sociedad Canadiense de Geotecnia (1985)
El valor de la capacidad de soporte admisible debe ser tal que garantice un margen de
seguridad suficiente con respecto a las fallas por capacidad de soporte y por
deformaciones o asentamientos. Sin embargo, un diseño adecuado implica un análisis de
deformaciones en la fundación aún después de haber garantizado un valor aceptable de
capacidad de soporte.
Para la determinación de este valor se utilizan por lo general tres maneras. Mediante la
aplicación de un factor de seguridad al valor de capacidad de soporte última calculado, a
partir de valores predeterminados en códigos de construcción o mediante correlaciones
empíricas.
(5-48)
El esfuerzo promedio que actúa sobre el material de fundación debe ser igual o menor
que la capacidad de soporte admisible:
(5-49)
82
El factor de seguridad considera la variabilidad de las cargas estructurales aplicadas
sobre el macizo rocoso, la confiabilidad con la que se determinaron las condiciones de
la fundación y la incertidumbre del modo de falla potencial. USACE (1989) indica que
para la mayoría de cimentaciones el factor de seguridad mínimo aceptable es de 3,
tomando en cuenta la suma de cargas vivas y muertas de la estructura.
83
para tipos de roca, y a partir de esta brinda valores admisibles de capacidad
soportante, las cuales se muestran a continuación:
84
Figura 5-8. Capacidad portante supuesta para cimentaciones cuadradas sobre roca (para asientos inferiores al
0.5% del ancho de la zapata).
Fuente: AENOR, 1999.
85
Cuadro 5-6. Clasificación y posible capacidad portante para rocas de alta porosidad.
Capacidad
Grado Breve descripción portante supuesta
(KPa)
Roca remoldeada, sin estructura, conteniendo trozos de
V roca intacta. 125 - 250
Roca seca por encima del nivel freático
Macizo en bloques de pequeño tamaño, meteorizada
parcialmenta, con estratificación y fisuración. Juntas
IV 250 - 500
separadas de 10mm a 60mm, abiertas hasta 20mm y
rellenas con creta remoldeada blanda y con fragmentos
Roca en bloque, sin meteorizar. Juntas separadas de 60mm
III a 200mm, abiertas hasta 3mm y algunas veces rellenas con 500 - 750
fragmentos
Roca en bloques de dureza media (débil). Juntas separadas
II 750 - 1000
más de 200mm y cerradas
Igual que grado II, pero dura (moderadamente débil) y
I 1000 - 1500
frágil
Fuente: AENOR (1999)
86
Figura 5-9. Valores de capacidad de soporte a partir del valor del RQD
Fuente: ASCE, 1996.
Se supone una cimentación superficial que falla por cortante, donde la superficie de falla
está determinada por la estructura geológica, ver figura 5-10. Se asume que las cuñas
pueden ser modeladas como líneas rectas, de manera que se forma una zona activa A y
87
una zona pasiva B, tal como se muestra en la figura 5-10.a, suponiendo una fundación de
longitud infinita sobre un macizo de roca horizontal, el material por debajo estaría en
compresión similar a una prueba triaxial. El esfuerzo principal mayor en la zona A es igual
a la presión dada por la cimentación q. Por su parte, la zona pasiva B se comporta similar
a un espécimen en prueba de compresión triaxial con el esfuerzo principal mayor
actuando en dirección horizontal; el esfuerzo principal menor sería cero para el caso de
fundación superficial propuesto, de no ser así sería igual al esfuerzo vertical promedio
producido por el peso de la roca, o esfuerzo de sobrecarga qs.
Figura 5-10. Análisis de capacidad de soporte de un macizo rocoso; (a) Zonas activa y pasiva en la fundación;
(b) Curva de resistencia del macizo.
Fuente: Wyllie, 1992.
En el momento de la falla ambas zonas tienen una ruptura por cortante y el esfuerzo
principal menor de la zona activa 3A se iguala con el esfuerzo principal mayor de la zona
B 1B. Este esfuerzo principal menor de la zona A es producido por la resistencia de la
zona B a ser comprimida, es decir, corresponde a la resistencia a la compresión del
macizo rocoso.
88
A partir del criterio de ruptura de Hoek & Brown se puede definir la resistencia del macizo
a la compresión en estado triaxial, tal y como se definió en la sección 4.2, la ecuación 4-3
permite obtener el esfuerzo principal mayor de un macizo rocoso, aplicándolo a la zona A
en cuestión tomaría la forma:
( ) (5-50)
Por otra parte, como se mencionó anteriormente el esfuerzo principal menor en la zona A
es igual a la resistencia de la roca en la zona B, o sea igual a la resistencia a compresión
uniaxial del macizo rocoso, tal y como se definió en la ecuación 4-8 sería:
(5-51)
( )
[ ( ) ] (5-52)
[ ( ) ]
(5-53)
En donde es el factor de corrección por forma del cimiento, cuyos valores están dados
previamente en la tabla 5-1.
( ( ) )
(5-54)
89
Donde:
( ) (5-55)
Figura 5-11. Capacidad de soporte para una cimentación sobre roca con planos de estratificación inclinados y
familias de discontinuidades ortogonales.
Fuente: Wyllie, 1992.
El esfuerzo principal menor 3A se puede calcular a partir de la expresión dada por:
90
( ) ( )( ) (5-56)
[ ( )( )]
(5-57)
( ) (5-58)
( ) (5-59)
( ) ( )( ) (5-60)
91
Figura 5-12. Definición geométrica empleada en la determinación de las presiones admisibles en roca por
métodos analíticos simplificados.
Fuente: Jiménez, 2002.
En donde:
( ) (5-61)
Donde
(5-62)
(5-63)
92
Con m, s y mi los parámetros del criterio de Hoek y Brown y el valor de la resistencia
a la compresión simple de la matriz rocosa.
(5-64)
Figura 5-13. Valores del coeficiente de carga de hundimiento en función de la carga exterior normalizada y
93
En este caso, la carga admisible puede encontrarse al dividir la carga de hundimiento por
un coeficiente de seguridad global F, de la forma:
(5-65)
Figura 5-14. Coeficiente de seguridad parcial Fp para una probabilidad de rotura menor a 10-4
Fuente: Serrano y Olalla, 1996.
94
5.9. Cimentaciones en medios kársticos
Cada caso en específico debe ser objeto de análisis individualizado, sin embargo algunas
de las medidas que pueden tomarse para cimentar estructuras sobre formaciones rocosas
de este tipo se comentan a continuación.
En ocasiones los hoyos son de tamaño pequeño y se encuentran rodeados por material
rocoso competente. Autores como Katzenbach y Romberg (1987) proponen la
construcción de fundaciones apoyadas en estas capas competentes, formando una
especie de puente en las áreas de cavidades y utilizando factores de seguridad mayores
para la capacidad de soporte.
Otra medida corresponde al relleno de los huecos con material competente, por lo
general mezclas de concreto, creando así un ambiente geológico más competente en el
cuál se pueda cimentar la estructura.
95
En casos donde la profundidad de las cavidades no es muy grande incluso se puede llegar
a implementar compactación dinámica con el fin de colapsar y consolidar la capa
superior.
Como solución también se puede emplear la construcción de pilotes excavados, como los
explicados en la sección 5.5.4, de manera que estos atraviesen las zonas huecas y logren
transmitir las cargas hasta estratos de material competente más profundos.
La selección del método para el cálculo de la capacidad de soporte queda a criterio del
profesional responsable que esté a cargo del diseño. La calidad de los resultados que se
obtengan dependerá del nivel de exploración y certeza que se tenga sobre las
características del material donde se va a desarrollar el proyecto; para esto es necesario
llevar a cabo una cantidad de ensayos como los expuestos en el capítulo 2, con el fin de
aplicar algún sistema de clasificación geomecánica (capítulo 3) y posteriormente tratar de
predecir la falla a partir de alguno de los criterios de rotura vistos en el capítulo 4.
En el caso de las ecuaciones dadas por USACE (sección 5.2) están dadas en términos de
las dimensiones del cimiento y de los parámetros de cohesión y ángulo de fricción por lo
que aplican las consideraciones expuestas en la sección 4.5 sobre escogencia de criterios
de rotura, ya que estos son los que van a brindar los valores de entrada para las
ecuaciones expuestas.
Ha de tomarse en cuenta que los datos son más confiables en tanto hayan sido obtenidos
de manera directa. Resultados a partir de correlaciones o de forma indirecta introducen
una incertidumbre mayor en el resultados.
96
En el caso de la capacidad de soporte dada por ecuaciones en términos de esfuerzos
principales del criterio de Hoek y Brown (sección 5.7) se recomienda su aplicación en
caso de cimentaciones bajo condiciones similares a las dadas en la teoría para el
desarrollo de las expresiones. Esta brinda la ventaja de estar en términos de las
constantes del criterio, por lo que se obtienen resultados directamente a partir de valores
utilizados para encontrar la envolvente de falla no lineal.
Las expresiones matemáticas por su parte constituyen la forma más confiable para
estimar la capacidad de soporte; siempre y cuando sean empleadas adecuadamente, para
las condiciones de falla que son recomendadas y a partir de datos confiables sobre las
propiedades del macizo rocoso donde se va a cimentar la estructura. En donde sea
posible incluso se pueden emplear distintas metodologías con el fin de obtener distintos
valores de capacidad de soporte y así comparar resultados.
97
98
Capítulo 6. Asentamientos elásticos
La figura 6-1 muestra diversas formas de calcular las deformaciones para distintas
condiciones geológicas.
99
Ilustración Condición geológica Cálculo de asentamiento
(a)
(b)
(c)
Determinar relaciones H/B , E1/E2
Determinar factor de correlación a (cuadro
Capa rígida sobre 6-3)
formación Determinar factor de forma Cd (cuadro 6-1)
compresible Calcular asentamiento aproximado
E1 > E2 (ecuación 6-1) usando parámetros elásticos
E2, 2, para toda la fundación
(d) Calcular asentamiento real (ecuación 6-3)
(e)
Roca
transversalmente Utilizar ecuaciones de 6-4 a 6-11
isotrópica
(f)
Figura 6-1. Métodos para el cálculo de asentamientos para diversas condiciones del macizo rocoso.
Fuente: adaptado de Wyllie, 1992.
100
6.1. Rocas elásticas
( )
(6-1)
El cuadro 6.1 muestra los valores del parámetro Cd para distintas formas de cimientos
y para calcular el asentamiento en puntos específicos del área cargada.
101
6.1.2. Formaciones estratificadas:
Si las condiciones del sitio no son similares a las expuestas anteriormente, o los
módulos no son conocidos con certeza, se recomienda hacer un análisis de
sensibilidad para revisar la influencia de los módulos y del espesor de las capas en la
magnitud de los asentamientos.
6.1.2.1. Capa compresible sobre una base rígida:
Este caso se muestra en a figura 6-1.b., por ejemplo una capa superficial de roca
meteorizada sobre un macizo de roca fresca. Para el cálculo primero se deben
calcular las relaciones entre el espesor de la capa superficial (H) y el ancho del
cimiento (B) H/B, así como la relación entre el largo y el ancho de la fundación
L/B.
Con estos valores se debe determinar un factor de forma modificado C’d, el cual se
encuentra tabulado en el cuadro 6.2, y está dados para aplicar en el centro de la
cimentación. Para encontrar el valor de este factor se supone que en la interface
entre la capa superior compresible y la base rígida no habrá esfuerzos cortantes
horizontales actuando y que no habrá desplazamiento horizontal.
102
Cuadro 6.2. Valores para el factor de forma modificado C’d.
Forma rectangular
Diámetro del L/B
H/B
círculo = B
1 1,5 2 3 5 10 ∞ franja infinita
0,1 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09
0,3 0,24 0,24 0,23 0,23 0,23 0,23 0,23 0,23
0,5 0,48 0,48 0,47 0,47 0,47 0,47 0,47 0,47
1 0,7 0,75 0,81 0,83 0,83 0,83 0,83 0,83
1,5 0,8 0,86 0,97 1,03 1,07 1,08 1,08 1,08
2,5 0,88 0,97 1,12 1,22 1,33 1,39 1,4 1,4
3,5 0,91 1,01 1,19 1,31 1,45 1,56 1,59 1,6
5 0,94 1,05 1,24 1,38 1,55 1,72 1,82 1,83
∞ 1 1,12 1,36 1,52 1,78 2,1 2,53 ∞
Fuente: Winkerton y Fang (1975)
(6-2)
103
6.1.2.3. Capa rígida sobre una formación compresible:
Tal y como se observa en la figura 6-1.d., en este caso la deformación en la
superficie de una cimentación circular de diámetro B bajo cargas uniformes se
calcula como:
(6-3)
E1/E2
H/B 1 2 5 10 100
0 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0
0,1 1,0 0,972 0,943 0,923 0,76
0,25 1,0 0,885 0,779 0,699 0,431
0,5 1,0 0,747 0,566 0,463 0,228
1,0 1,0 0,627 0,399 0,287 0,121
2,5 1,0 0,55 0,274 0,175 0,058
5,0 1,0 0,525 0,238 0,136 0,036
∞ 1,0 0,5 0,2 0,1 0,01
Fuente: Winkerton y Fang (1975)
104
6.1.2.4. Capas inclinadas de espesor variable:
Las propiedades del macizo están dadas por el módulo de deformación vertical (Ez) y
horizontal (Eh), el módulo de cortante (Ghz) entre los planos horizontal y vertical y los
siguientes valores del módulo de Poisson:
Si 2 es positivo:
( ) ( )
(6-4)
[ ( ) ][ ( ) ]
Si 2 es negativo:
105
( )
(6-5)
( )
Si 2 es cero:
( )
(6-6)
( )
( )
(6-7)
( )
(6-8)
( )( )
(6-9)
( )
(6-10)
( )
( )
(6-11)
(6-12)
(6-13)
106
(6-14)
i= x, y, z;
j= y, z, x;
k= z, x, y.
Las propiedades elásticas de la roca intacta y de las fracturas están definidas por el
módulo de deformación de la roca intacta Er, la relación de Poisson de la roca intacta ,
el módulo de cortante de la roca intacta Gr, definido por:
(6-15)
( )
Sx,y,z es el espaciamiento entre cada una de las familias de fracturas, kni es la rigidez
normal de la discontinuidad por cada una de las familias y ksi es la rigidez al cortante de
la familia de fracturas i, los cuales deben ser obtenidos a partir de pruebas de resistencia
al corte directo, mediante la medición de las deformaciones sufridas al aplicar una carga
tangencial y normal a una muestra que contenga discontinuidades.
107
El módulo de deformación horizontal Eh y el módulo de cortante Ghz, se obtienen a partir
de las ecuaciones:
(6-16)
(6-17)
Para la ecuación 6-14 los valores para el coeficiente de Poisson usado en el cálculo del
asentamiento son:
; (6-18)
(6-19)
108
6.4.1. Rocas isotrópicas:
(6-20)
[ ( ) ]
[ ] (6-21)
( )
( ) [ ( )
] (6-22)
(6-23)
(6-24)
Figura 6-3. Esfuerzos en un medio elástico debidos a una carga puntual en la superficie.
Fuente: Wyllie, 1992.
109
Los esfuerzos obtenidos deberán ser sobrepuestos sobre los preexistentes provocados
por el peso propio del material.
g) Cargas distribuidas
(6-25)
Figura 6-4. Dragrama del factor de influencia para esfuerzo normal vertical a varios puntos dentro de un medio
elástico bajo una carga uniforme circular.
Fuente: Winterkorn y Fang, 1975.
110
Figura 6-5. Dragrama del factor de influencia para esfuerzo normal vertical sobre la esquina de un área
rectangular uniformemente cargada.
Fuente: Winterkorn y Fang, 1975.
h) Cargas lineales:
(6-26)
111
Donde Q es la carga lineal (MN/m), es el ángulo desde la vertical y r es la
distancia radial desde el punto de aplicación de la carga. Los esfuerzos tangencial
y cortante iguales a cero ( ).
Esta ecuación también puede ser utilizada en el caso de una línea de carga
inclinada cierto ángulo sobre la superficie (ver figura 6-6), bajo estas condiciones
se desarrollan dos conjuntos de contornos circulares de esfuerzos, uno para
compresión y otro para tensión. En el caso de macizos rocosos esta tensión puede
provocar un movimiento de las cuñas formadas por las discontinuidades y, por
ende, una falla en la cimentación.
Figura 6-6. Contornos de esfuerzos bajo una carga lineal inclinada, mostrando zonas de compresión y tensión.
Fuente: modificado de Willye, 1992.
La figura 6-7 muestra una comparación entre los contornos de esfuerzo desarrollados
bajo cargas distribuidas (figura 6-7.a.) y lineales (figura 6-7.b.). En este último caso la
distribución de esfuerzos consiste en una serie de círculos tangenciales al punto de
112
Figura 6-7. Contornos de esfuerzo para fundaciones localizadas en un medio isotrópico elástico. (a) esfuerzos
normales verticales bajo un área circular uniformemente cargada de radio b. (b) esfuerzos radiales bajo una carga
lineal.
Fuente: modificado de Willye, 1992.
La figura 6-8 muestra la distribución de esfuerzos para una condición de dos capas
estratificadas. Los valores dependen de la relación entre los módulos de los macizos.
113
Figura 6-8. Esfuerzo normal vertical bajo el centro de un área circular uniformemente cargada en la superficie de
un sistema de dos capas elásticas.
Fuente: modificado de Willye, 1992.
El valor del ángulo formado entre la normal a las fracturas y a los esfuerzos radial y
normal no puede ser mayor a j. Por lo tanto el bulbo de presiones no se puede
extender más allá de las líneas trazadas a un ángulo j con la normal a las capas,
siendo más estrecho que en el caso de roca isotrópica, y a su vez más profundo, tal y
como se muestra en la figura 6-9.
114
Figura 6-9. Estrechamiento y profundización del bulbo de presión debido a esfuerzos cortantes limitados a lo largo
de las discontinuidades.
Fuente: modificado de Goodman, 1980
[( )
] (6-27)
115
, (6-28)
[ ] (6-29)
( )
( )
{( )[ ] [ ]} (6-30)
( )
Estas ecuaciones pueden ser utilizadas para calcular el contorno de esfuerzos radiales
iguales bajo la fundación.
Para una fundación de placa corrida de espesor B con una carga vertical Q y un
momento de vuelco M; la fuerza resultante va a estar ubicada a una distancia e del
eje de la cimentación, definida como la excentricidad de la carga, igual a M/Q.
( ) (6-31)
( ) (6-32)
116
( ) (6-33)
( ) (6-34)
(6-35)
( )
(6-36)
( )
(∑ )
(6-37)
Donde:
117
∑ = carga de trabajo en la parte superior del empotramiento [N].
(∑ )
(6-38)
Donde:
Figura 6-10. Factor de influencia para el asentamiento elástico en función de la relación de empotramiento y la
relación de módulos.
Fuente: AASHTO
118
Capítulo 7. Análisis de la cimentación de la toma de aguas del
Proyecto Hidroeléctrico Savegre
119
definitivo de las dimensiones de la estructura por lo que los análisis realizados son con
base en un tamaño estimado de la toma de agua, con algunas simplificaciones
geométricas para el cálculo de cargas y momentos. La estructura se muestra en la figura
7.1.
120
7.2. Ensayos realizados al macizo rocoso
a) Propiedades físicas:
Gravedad específica
Relación de vacíos
Porcentaje de absorción
Peso unitario
121
Figura 7-2. Ubicación de las perforaciones realizadas.
Fuente: ICE, 2012.
122
Cuadro 7-1. Propiedades físicas de la roca intacta
Se muestra que en general los resultados son similares para ambas perforaciones,
la relación de vacíos presenta un valor muy bajo (cercano al 1%), lo cual indica
que esta propiedad no tendrá gran efecto sobre las características mecánicas de
la roca.
Los valores bajos de estos parámetros concuerdan con el dato del peso unitario,
el cuál en promedio ronda los 2537 kg/m3, valor que indica alta densidad en el
material. Se concluye que el grado de compactación de la roca presente en el
área es un indicador de buena calidad para la cimentación de la estructura.
b) Propiedades mecánicas:
123
Cuadro 7-2. Propiedades mecánicas de la roca intacta
Coeficiente de
Desviación
Propiedad mecánica Ubicación Promedio variación
estándar
(%)
Resistencia a la compresión PHS-TA01 385,10 365,17 94,8
uniaxial PHS-TA02 331,33 184,60 55,7
(kg/cm2) Promedio total 368,12 314,68 85,5
PHS-TA01 48820,28 34124,18 69,9
Módulo de deformación
PHS-TA02 - - -
(kg/cm2)
Promedio total 48820,28 34124,18 69,9
PHS-TA01 4272,10 435,66 10,2
Velocidad de ondas
PHS-TA02 4123,80 1001,57 24,3
(m/s)
Promedio total 4230,91 612,11 14,5
124
7.2.2. Clasificación Geomecánica del macizo rocoso
En el caso del sitio propuesto para la toma de aguas del Proyecto Hidroeléctrico
Savegre se obtuvieron datos correspondientes a la aplicación del Rock Mass Rating
(RMR) básico para la perforación PHS-TA01. Estos valores se encuentran en el
Apéndice 4.
Coeficiente de variación
Ubicación RMR promedio Desviación estándar
(%)
PHS-TA01 59,36 6,90 11,63
125
En este caso el coeficiente de variación es menor, con un valor de 12%. El RMR
básico promedio es de 59,36 por lo que el macizo es de clase III y la calidad es
media, cercano al límite de calidad buena. Además, del histograma mostrado en el
Apéndice 4 se aprecia que de las 14 muestras a las que se calculó el índice RMR la
mayoría (8 muestras) se encuentra dentro de la clase IV (calidad buena) y las
restantes 6 muestras están en clase III (media).
Para el caso en estudio, se utilizó el criterio de ruptura de Hoek y Brown, tal y como se
explicó en la sección 4.2. Para su aplicación se utilizó el programa de cómputo Roclab,
de distribución libre por parte de los creadores del método.
126
Cuadro 7-6. Parámetros de entrada para el criterio de Hoek y Brown
Valor
Parámetro
asignado
GSI 45
Resistencia a la compresión
simple -c 30
(Mpa)
Factor de alteración - D 0
127
La constante del material fue obtenida a partir del cuadro 4-2, para el caso del sitio de
toma de aguas del Proyecto Hidroeléctrico Savegre el tipo de roca predominante es
arenisca. En la superficie predomina rocas de este tipo con textura fina, sin embargo a la
profundidad donde se espera colocar la cimentación de la estructura se encuentra
material de grano medio y grueso, por lo que se decidió utilizar el valor dado en el
cuadro para arenisca de textura media.
Por último, el factor de alteración D se estimó con base en el cuadro 4-1. Para la obra en
cuestión se espera que la excavación a realizar para la construcción de los cimientos de
la toma de aguas se realice de forma mecánica o manual con poca alteración en el
medio; esto debido a que el macizo presente es fracturado y no se considera necesario
la utilización de voladuras. Para la condición supuesta el valor sugerido es de cero.
128
Figura 7-5. Envolvente en términos de esfuerzos principales
A partir de los datos se encontraron los siguientes valores para los parámetros del
criterio:
=2.18
0.0025
0.508
Basado en estos, el criterio de ruptura de Hoek y Brown para el macizo rocoso del sitio
de toma de aguas del Proyecto Hidroeléctrico Savegre toma la forma:
( ) (7-1)
( ) (7-2)
Las propiedades del macizo obtenidas a partir del criterio de Hoek y Brown (2002) se
muestran a continuación:
129
Cuadro 7-7. Propiedades del macizo rocoso a partir del criterio de Hoek y Brown
Parámetro Valor
Cohesión – c
1.592
(MPa)
Ángulo de fricción –
32.8
(°)
Resistencia a la compresión uniaxial -
1.427
(MPa)
Módulo de deformación – E
1212.58
(MPa)
Para el cálculo de la capacidad de soporte del macizo rocoso de la toma de aguas del
Proyecto Hidroeléctrico Savegre se utilizaron las expresiones estudiadas en el capítulo 5.
130
Cuadro 7-8. Cálculo a partir de las ecuaciones de capacidad de carga dadas en USACE
(1994).
Datos de entrada
Propiedades del macizo
Geometría de la cimentación
rocoso
B (m) 46 γ (kN/m3) 24,9
L (m) 59 φ (°) 32,8
D (m) 4,8
Factores de corrección
Forma del cimiento Cc Cγ
Rectangular L/B =1,28 1,21 0,864
qu 12069,79 kPa
qucorregido 10715,51 kPa
131
Figura 7-6. Topografía cercana a la toma de agua.
Fuente: ICE, 2012
0,56
0,56
132
Cuadro 7-9. Cálculo de la capacidad de soporte a partir del criterio de Hoek y Brown.
Datos de entrada
Propiedades de la roca
Parámetros del criterio H&B
intacta
mb 2,18 σci (Mpa) 30
s 0,0025
a 0,508
Factores de corrección
Forma del cimiento Cc
Rectangular L/B =1,28 1,21
qu 13,36 MPa
Como dato adicional, a partir del valor del RQD del macizo se puede estimar la capacidad
admisible, según la correlación mostrada en la figura 5-8. Para el valor promedio de RQD
de 60% la capacidad aproximada sería de 800 ton/m2, equivalente a cerca de 8MPa.
Cuadro 7-10. Capacidad de soporte para el macizo en estudio según distintos métodos
Como es de esperarse, el método mediante correlación con el RQD brinda el valor más
conservador de capacidad de soporte si se compara con los otros métodos (sin tomar en
cuenta la corrección por talud); este debe ser utilizado solamente como una estimación
133
preliminar, ya que solamente toma en cuenta un parámetro, lo cual no es suficiente para
describir con detalle las características de resistencia del material.
Cuadro 7-11. Factor de seguridad por capacidad de soporte para el macizo rocoso.
Método FS
5,2
Ecuaciones de capacidad de carga
3,0
Hoek & Brown 6,5
Correlación RQD 3,9
*Tomando en cuenta la corrección por talud.
Se puede apreciar que para los métodos de cálculo de capacidad de soporte que se
consideran más confiables el factor de seguridad obtenido es satisfactorio, para el
análisis hecho tomando en cuenta únicamente cargas estáticas el valor encontrado fue
mayor que 2.5, estipulado como mínimo según el Código de Cimentaciones de Costa Rica
para cargas excéntricas con relación menor que 0.25. Por lo tanto se concluye que, bajo
los supuestos hechos, el macizo rocoso donde se planea cimentar la toma de agua del
Proyecto Hidroeléctrico Savegre posee una capacidad de carga adecuada y no representa
un peligro para la estabilidad de la estructura.
134
acerca de la deformabilidad del macizo rocoso, como por ejemplo ensayos de placa de
carga como el descrito en la sección 2.2.5. Para el caso en estudio no se tienen aún datos
específicos para el material presente, por lo que se utilizaron parámetros dados en
literatura.
Debido a las características propias del macizo rocoso como la presencia de gran cantidad
de fracturas, se considera que el mismo puede catalogarse como homogéneo e
isotrópico. Por lo tanto, para el estudio de la deformabilidad se procede a utilizar la
expresión 6-1.
Look, B (2007) propone valores del coeficiente de Poisson para distintos tipos de roca. En
el caso de las areniscas los valores podrían oscilar entre 0.15 y 0.3. Para efectos de
cálculo se utilizó un valor de 0.3 debido a la presencia de fracturas y rocas de tipo lutitas,
las cuales poseen un valor de coeficiente de Poisson de entre 0.25 y 0.35.
( )
Por lo tanto se espera que la estructura sufra un asentamiento estimado no mayor a los
65mm. Este valor se encuentra dentro de los límites establecidos para asentamiento total
admisible dado en el Código de Cimentaciones de Costa Rica, por lo tanto se considera
adecuado.
135
136
Capítulo 8. Guía para el diseño de cimentaciones en roca
La guía para el diseño de cimentaciones en roca pretende servir como fuente de consulta en
el caso de proyectos de magnitud similar a los que son válidos en el caso del Código de
Cimentaciones de Costa Rica. Adicionalmente Honjo y Kusakabe (2002) brindan una ayuda
para decidir sobre la categorización de estructuras a partir de la complejidad geotécnica y la
importancia:
Los valores dados en el cuadro 1.1 corresponden a categorías de diseño iguales a las dadas
en el Eurocódigo 7 y sirven como referencia para estimar el grado de complejidad de una
obra. En el caso de la guía desarrollada, se recomienda su uso para proyectos dentro de las
Categorías Geotécnicas 1 y 2 (señaladas en el cuadro 1-1); en lo que respecta a importancia
se pueden seguir las indicaciones del CCCR, a saber:
Magnitud de la obra:
La complejidad geotécnica debe ser definida por el profesional responsable que estará a
cargo del estudio correspondiente.
137
8.1 Ensayos de campo y de laboratorio
El cuadro 8-2 muestra algunos de los principales ensayos para obtención de parámetros
de resistencia y deformabilidad de la roca.
Compresión uniaxial
Compresión triaxial
Obtener valores de parámetros de
Resistencia Tracción directa
resistencia ante cargas impuestas
Corte directo
Esclerómetro
Placa de carga Obtener parámetros de
Deformación Gato plano deformabilidad útiles para el cálculo
Ensayo piesométrico de asentamientos
Ante la ausencia de datos de pruebas para algún parámetro en específico, se pueden
utilizar correlaciones para estimar el valor a partir de propiedades de la roca, sin
embargo estas deben utilizarse con criterio por parte del profesional responsable y el
nivel de confianza de los resultados generados a partir de estos es inferior al obtenido
mediante uso de datos generados por pruebas.
Los sistemas de clasificación geomecánica sirven para caracterizar los macizos rocosos a
partir de características propias tales como dimensiones y estado de las discontinuidades,
presencia de nivel freático, resistencia a la compresión, entre otros; que deben ser
evaluados con criterio de profesionales en geotecnia.
138
Según el valor del RMR obtenido, se clasifican los macizos en cinco clases que van desde
muy buena hasta muy mala, según lo muestra el cuadro 8-5, y para cada una de ellas se
proponen valores para los parámetros de falla de Mohr-Coulomb, cohesión y ángulo de
fricción (cuadro 8-6).
Puntuación 15 12 7 4 2 1 0
RQD 90% - 100% 75% - 90% 50% - 75% 25% - 50% < 25%
2
Puntuación 20 17 13 6 3
Separación entre discontinuidades >2m 0,6 - 2 m 0,2 - 0,6 m 0,06 - 0,2 m < 0,06 m
3
Puntuación 20 15 10 8 5
Puntuación 6 5 3 1 0
Ligeramente
Rugosidad Muy rugosa Rugosa Ondulada Suave
rugosa
4
Puntuación 6 5 3 1 0
Relleno duro Relleno duro Relleno blando Relleno blando
Relleno Ninguno
< 5 mm > 5 mm < 5 mm > 5 mm
Puntuación 6 4 2 2 0
Ligeramente Moderadamente
Alteración Inalterada Muy alterada Descompuesta
alterada alterada
Puntuación 6 5 3 1 0
Caudal por 10 m de
túnel Nulo < 10 10 - 25 25 - 125 > 125
(Litros/minuto)
Ligeramente
Estado general Seco Húmedo Goteando Flujo de agua
húmedo
Puntuación 15 10 7 4 0
Fuente: González, 2004.
139
Cuadro 8-5. Clasificación RMR a partir de la puntuación obtenida.
Puntuación 100 - 81 80 - 61 60 - 41 40-21 < 20
Clase I II III IV V
Muy
Calidad Buena Media Mala Muy mala
buena
Fuente: González, 2004.
(8-1)
(8-2)
(8-3)
Serafim y Pereira (1983) obtuvieron muchos resultados para el rango en que RMR es
menor a 50, obteniendo la siguiente relación:
( )
(8-4)
140
8.2.2 Índice de Resistencia Geológica (GSI)
En el cuadro 8-7 se muestra el cuadro general para la clasificación del GSI. Asimismo
está extendido para ser aplicado en masas de roca sedimentarias heterogéneas tipo
Flysh, tal y como lo muestra el cuadro 8-8.
Si el macizo presenta discontinuidades con relleno se puede usar el cuadro del GSI
usando las descripciones de la columna de condiciones de discontinuidad pobre o muy
pobre. Si el material de relleno es sistemático y grueso (más de unos pocos centímetros),
o presenta material de tipo arcilloso, Hoek et al (2005) recomiendan usar el cuadro
correspondiente a masas de roca heterogéneas.
Para tomar en cuenta la influencia del agua, se recomienda en las rocas del tipo regular
a muy pobre que se haga un cambio en el valor del GSI hacia el lado derecho del
cuadro. En el caso de los macizos sometidos a la acción del clima, también se hace un
cambio en el valor hacia la derecha con respecto a la misma masa de roca inalterada.
Hoek et al (1993) indican que el GSI puede ser estimado además a partir del valor del
RMR, siempre que este tenga una puntuación mayor a 23, a partir de la fórmula:
(8-5)
141
Cuadro 8-7. Estimación del GSI, basado en observaciones geológicas.
CONDICIONES DE GEOLOGÍA
realista que estimar un GSI = 35. Nótese que el
cuadro no aplica para fallas estructuralmente
MUY POBRES
MUY BUENA
a muy pobre, podría hacerse una variación hacia la
por hierro.
angulares
REGULAR
derecha para condiciones mojadas. La presión de
POBRES
BUENA
agua es tomada en cuenta con análisis de esfuerzos
efectivos.
FRACTURADO
ENTRELAZADO DECRECIENTE DE PIEZAS DE ROCA
LAMINADO / CORTADO
Ausencia de bloques debido al
espaciamiento cerrado de esquistocidad
pobre o planos de corte
142
Índice de Resistencia Geológica (GSI) para macizos rocosos heterogéneos (Hoek y
Marinos, 2000)
A partir de la descripción de la litología, estructura y condiciones de la superficie (particularmente de
los planos de falla), se selecciona una celda en el cuadro. Se localiza la posición en la celda que
corresponda a las condiciones de las discontinuidades y se estima el valor promedio del GSI de los
contornos. No se debe tratar de ser muy preciso. Mencionar un rango desde 33 a 37 es más realista
que estimar un GSI = 35. Nótese que el criterio de Hoek & Brown no aplica para fallas
estructuralmente controladas. En casos donde están presentes planos estructurales débiles en una
BUENA
POBRES
estratificación)
REGULAR
meteorizar
MUY BUENA
meteorizadas
MUY POBRES
del macizo rocoso. La resistencia de algunos macizos rocosos se ve reducida por la presencia de agua
suave o rellenos
subterránea y puede tomarse en cuenta haciendo una variación hacia la derecha en las columnas de
LAS DISCONTINUIDADES
meteorizadas y alteradas
condiciones regular, pobre y muy pobre. La presión de agua no cambia el valor del GSI y se contabiliza
(Predominantemente planos de
CONDICIONES DE SUPERFICIE DE
al usar un análisis de esfuerzos efectivos.
Superficies lisas, moderadamente
COMPOSICIÓN Y ESTRUCTURA
altamente meteorizadas con juntas de arcilla
143
E. Rocas
D. Rocas
sedimentarias
C. Areniscas y sedimentarias o
B. Areniscas con débiles o
sedimentarias en esquistos limo-
capas delgadas de esquistos
cantidades arcillosos con
rocas sedimentarias arcillosos con
similares capas de
capas de
arenisca
areniscas.
( ) (8-6)
( )
(8-7)
( )
(8-8)
( ) (8-9)
En donde D es un factor que depende del grado de alteración del macizo rocoso por
efecto de las voladuras o relajación de esfuerzos. Varía desde 0 para macizos rocosos
inalterados hasta 1 para macizos rocosos muy alterados. Hoek et al (2002) brinda una
serie de guías para la elección adecuada de este valor, el cual puede ser estimado a partir
del cuadro 8-9. Este está dado para el caso de túneles y taludes, sin embargo las técnicas
de excavación son similares en el caso de los últimos; por lo que se recomienda su uso
tomando esto en cuenta.
144
Cuadro 8-9. Guía para estimar el factor de alteración D.
145
Cuadro 8-10. Valores de la constante para roca intacta y tipo de roca.
Tipo Textura
de Clase Grupo
Gruesa Media Fina Muy fina
Roca
Conglomerado Arenisca Limolita Lutita
-22 19 9 4
Clástica
← Grauwacas →
(18)
← Tiza →
Sedimentarias
7
Orgánicas
← Carbón →
(8-21)
No clásticas Brecha Caliza Caliza
Carbonatos (20) esparítica micrítica
(10) 8
Gypsum Anhidrita
Químicas
16 13
Mármol Hornfel Cuarcita
No foliadas
Metamórficas
9 (19) 24
Migmatita Anfibolita Milonita
Ligeramente foliadas
(30) 31 (6)
Gneiss Esquisto Filita Pizarra
Foliadas (*)
33 (10) (10) 9
Granito Riolita Obsidiana
33 (16) (19)
Claras Graniodorita Dacita
(30) (17)
Diorita Andesita
Ígneas
(28) 19
Gabbro Dolerita Basalto
Oscuras 27 (19) (17)
Norita
22
Aglomerado Brecha Toba
Extrusivas piroclásticas
(20) (18) (15)
Fuente: Hoek et al, 2002
( ) ( )√ (8-10)
146
( ) ( ) (8-11)
Por otra parte, también se dan las siguientes ecuaciones mediante las cuales se pueden
obtener los parámetros de ángulo de fricción y cohesión del criterio de ruptura de Mohr-
Coulomb
( )
[ ] (8-12)
( )( ) ( )
[( ) ( ) ]( )
(8-13)
( )
( )( )√ ( )( )
Siendo ⁄
Actualmente los creadores de este criterio tienen a disposición del público un programa de
cómputo gratuito llamado Roclab, que puede ser descargado en la dirección
www.rocscience.com, y sirve para realizar análisis de resistencia del macizo rocoso a partir
del criterio de falla de Hoek y Brown.
Para determinar la capacidad de soporte es importante conocer el tipo de falla que pueda
darse dependiendo de las condiciones propias del sitio. La figura 8-1 ilustra modos de
falla típicos por capacidad de soporte de acuerdo con las condiciones del macizo rocoso.
147
Condiciones del macizo rocoso Ruptura Ecuación de
Discontinuidades capacidad de
Ilustración Mecanismo
Buzamiento Espaciamiento soporte
Roca frágil:
Falla de cortante local
Ecuación 8-19
producida por ruptura
frágil
Intacto o masivo
N/A S>>B
Roca dúctil:
Falla en general de
cortante a lo largo de Ecuación 8-14
superficies de ruptura bien
definidas
Discontinuidades abiertas:
Falla por compresión de
columnas individuales de
Ecuación 8-20
roca. Juego de
discontinuidades con poco
espaciamiento entre sí.
Discontinuidades con buzamiento alto
S<B
Discontinuidades cerradas:
Falla generalizada oir
cortante a lo largo de
70<<90 superficies de ruptura bien Ecuación 8-14
definidas.
Discontinuidades muy
verticales.
Discontinuidades abiertas
y/o cerradas:
Falla iniciada por
punzonamiento, tendiendo Ecuaciones 8-
S>B
a la falla generalizada por 21 a 8-23
cortante.
Juego de discontinuidades
muy verticales.
Figura 8-1. Modos de falla por capacidad soportante asociados con diversas condiciones del macizo rocoso.
Fuente: adaptado de USACE, 1994.
148
Condiciones del macizo rocoso Ruptura Ecuación de
Discontinuidades capacidad de
Ilustración Mecanismo
Buzamiento Espaciamiento soporte
de ruptura a lo largo de
puede
20<<70 las discontinuidades. Ecuación 8-25
desarrollarse a lo
Juegos de
largo de las
discontinuidades con
discontinuidades
buzamiento moderado.
H con respecto a
B son
0<<20
dependientes de
las propiedades
de la roca Capa superior rígida y
delgada:
La falla es iniciada por el
N/A
punzonamiento del
estrato rígido y delgado
superior.
Falla generalizada de
cortante por superficie
de ruptura irregular a
Fracturado
Figura 8-1 (Cont). Modos de falla por capacidad soportante asociados con diversas condiciones del macizo
rocoso.
Fuente: adaptado de USACE, 1994.
149
8.4.1.1 Roca intacta:
Se considera roca intacta a los macizos en los que los espacios entre discontinuidades
(S) sean de cuatro a cinco veces mayores que el ancho de la placa de fundación (B).
Se pueden presentar dos tipos de falla de acuerdo con el tipo de roca:
En donde:
Capacidad de soporte última [kPa]
Cohesión del macizo rocoso [kPa]
Peso unitario efectivo del macizo rocoso [kN/m3]
Ancho de la fundación [m]
Nivel de desplante de la cimentación [m]
Nc, N y N = Factores de capacidad de carga definidos por:
√ ( ) (8-15)
√ ( ) (8-16)
(8-17)
( ) (8-18)
Donde:
Ángulo de fricción del macizo rocoso [°]
( ) (8-20)
150
e) Discontinuidades con inclinación muy alta y con separación grande: (ver figura 8-
1.e.)
Cimentaciones circulares:
(8-21)
Cimentaciones cuadradas:
(8-22)
Cimentaciones corridas con L/B ≤ 32:
(8-23)
( )
En donde:
Factor de corrección que depende del espesor de la roca de cimentación y del
ancho de la cimentación (ver figura 8-2)
Dimensión máxima del cimiento [m]
Factor de capacidad de carga dada por:
( )( )( ) ( ) √ (8-24)
En las figuras 8-2 y 8-3 se muestran soluciones gráficas para el factor de corrección J
y el factor de capacidad de carga, respectivamente.
151
Figura 8-3. Factor de capacidad de carga por espaciamiento de discontinuidades.
Fuente: adaptado de USACE, 1994.
f) Discontinuidades inclinadas: cuando las juntas tienen una inclinación entre 20° y
70° con respecto al plano de la fundación (figura 8-1.f) es común una falla por
cortante sin cohesión
(8-25)
Se ha identificado el modo de falla para dos casos, ambos consisten en una capa de
roca rígida sobre otra de roca suave altamente deformable, con inclinaciones de al
menos 20° con respecto al plano de fundación. En el primer caso una capa gruesa y
rígida está sobre la capa blanda (Figura 8-1.g); mientras que en el segundo caso la
capa superior es rígida pero delgada (figura 8-1.h).
Los mecanismos de falla pueden ser por punzonamiento, pandeo o por flexión.
Usualmente el diseño preliminar bajo estas condiciones se hace asumiendo que la
capa superior va a soportar toda la carga, debido a que tiene un módulo de
152
deformación significativamente mayor que la capa inferior, siendo esta una
consideración que brinda resultados conservadores.
Para los otros modos de falla, el esfuerzo de tensión teórico en la parte inferior de la
capa superficial puede ser calculado asumiendo que el bloque soportante es de forma
circular, está simplemente apoyado sobre los bordes y no tiene soporte alguno por
parte del material compresible subyacente. El esfuerzo de tensión t en el centro de la
superficie inferior del bloque circular, bajo una carga uniforme Q, actuando sobre un
área de radio B/2 sería:
(8-26)
[( ) ( ) ] (8-27)
En donde r es el radio del bloque circular soportante, H el grosor del bloque (igual al
de la capa superior) y la relación de Poisson para la roca. ro es un parámetro que
depende de las dimensiones relativas del radio del área cargada y el grosor del
bloque:
Si B > H, (8-28)
153
Si B < H, [ ( ) ] (8-29)
Las expresiones son válidas para placas largas y continuas, con relaciones largo/ancho
mayores a diez. En caso de tener placas con una geometría diferente, se deben utilizar
factores de corrección según se indican a continuación:
( ) ( ) (8-30)
( ) ( ) (8-31)
Donde
154
B= ancho de la cimentación
L= largo de la cimentación
(8-32)
(8-33)
En donde los términos ξ corresponden a factores de corrección que deben ser calculados
según el caso respectivo.
( ) ( ) (8-34)
Cuando =0°
(8-35)
Cuando >10°
( ) ( ) (8-36)
( ) (8-37)
155
( ) (8-38)
( ) (8-39)
Cuando =0°
( ) (8-40)
Cuando >0°
(8-41)
es el ángulo que forma la base del cimiento con la línea horizontal, en radianes. Para
efectos del cálculo, el ángulo debe seguir una convención de signos, según la cuál una
rotación en sentido anti-horario es positiva, caso contrario será negativa.
( ) (8-42)
Cuando =0°
( ) (8-43)
(8-44)
Cuando >0°
(8-45)
156
El término D en la ecuación 8-33 sirve para tomar en consideración el esfuerzo vertical
ejercido debido al material por encima de la fundación. Para el caso específico de
cimentaciones colocadas sobre un talud el producto debe ser sustituido por la expresión:
(| |) (8-46)
Para taludes con ángulos de inclinación mayores a /2 es común que el factor de control
sea la estabilidad del talud.
(8-47)
En donde los factores y toman los valores según la figura 8-4. El número de
estabilidad No, se define como:
(8-48)
157
Figura 8-4. Valores para factores de capacidad de carga para cimentaciones localizadas sobre talud.
Fuente: Wyllie, 1992.
( ) (8-49)
158
Además puede ser calculada a partir de la resistencia a la compresión simple del
estrato al que llega la punta, como:
( ) (8-50)
( ) (8-51)
Si se presenta el caso de contacto de la punta del pilote con una capa de roca de
espesor delgado, se supone un mecanismo de falla por punzonamiento y la resistencia
se calcula como:
(8-52)
(8-53)
(8-54)
[ ]
Donde
159
⁄
La aplicación de estas ecuaciones está condicionada a macizos en los que el valor del
RQD sea mayor a 50, asimismo debe ser mayor a 12 pulgadas, menor a 0.25
pulgadas para discontinuidades sin relleno o menor a 1 pulgada en el caso que exista
relleno en las juntas, y el diámetro de empotramiento (B) debe ser superior a las 12
pulgadas.
(8-55)
160
Dando esta un valor mínimo y pudiendo llegar incluso a un valor máximo usando un
factor de .
(8-56)
En donde toma distintos valores propuestos por diversos autores, algunos de ellos
se muestran en el cuadro 8-13:
Cuadro 8-13. Valores propuestos para el cálculo de la resistencia por fricción de pilotes sobre
roca.
(8-57)
√ (8-58)
Donde
La capacidad por punta puede ser estimada, al igual que para el caso de pilotes, a
partir de las ecuaciones 8-50 y 8-51. Además, existe un método para calcular la
resistencia a partir del ensayo de presiómetro:
( ) (8-59)
Donde
162
Cuadro 8-14. Coeficiente adimensional del presiómetro.
Demp/Bemp Kb
0 0,8
1 2,8
2 3,6
3 4,2
5 4,9
7 5,2
Fuente: Sociedad Canadiense de Geotecnia (1985)
Las expresiones mostradas en esta sección se basan en los parámetros del criterio de
rotura de Hoek y Brown en su versión del 2002. La capacidad de soporte estaría dada
por:
[ ( ) ] (8-60)
[ ( ) ]
(8-61)
En donde es el factor de corrección por forma del cimiento, cuyos valores están dados
previamente en la tabla 8-10.
( ( ) )
(8-62)
Donde:
163
( ) (8-63)
Si los ángulos de inclinación de las familias de juntas son y, las cuales forman
las superficies de base de la cuña activa A y de la pasiva B, respectivamente. El
esfuerzo principal menor 3A se puede calcular a partir de la expresión dada por:
( ) ( )( ) (8-64)
[ ( )( )]
(8-65)
( ) (8-66)
( ) (8-67)
( ) ( )( ) (8-68)
164
Se trata de valores recomendados de capacidad de soporte admisible basados en la
experiencia de trabajos realizados previamente. Peck, Hanson y Thornburn (1974)
generaron una correlación entre la capacidad de soporte admisible y el RQD, para
macizos rocosos con discontinuidades cerradas o que no poseen una abertura mayor a
una fracción de pulgada.
El uso de este tipo de correlaciones brinda estimaciones muy gruesas y con un grado de
incertidumbre alto, por lo que su utilización solamente debería ser para consulta y en
etapas previas del proyecto. No sustituye el cálculo de la capacidad de soporte a partir
de expresiones matemáticas.
Figura 8-6. Valores de capacidad de soporte a partir del valor del RQD
Fuente: USACE, 1994.
165
Ilustración Condición geológica Cálculo de asentamiento
(a)
(b)
(c)
Determinar relaciones H/B , E1/E2
Determinar factor de correlación a (cuadro
8-17)
Capa rígida sobre
Determinar factor de forma Cd (cuadro 8-
formación
16)
compresible
Calcular asentamiento aproximado
E1 > E2
(ecuación 8-69) usando parámetros
(d) elásticos E2, 2, para toda la fundación
Calcular asentamiento real (ecuación 8-71)
(e)
Roca
transversalmente Utilizar ecuaciones de 8-72 a 8-79
isotrópica
(f)
Figura 8-7. Condiciones del macizo rocoso y recomendaciones para el cálculo de asentamientos.
Fuente: adaptado de Wyllie, 1992.
166
8.5.1.1 Rocas homogéneas e isotrópicas:
( )
(8-69)
167
8.5.1.2 Formaciones estratificadas:
Forma rectangular
Diámetro del L/B
H/B
círculo = B
1 1,5 2 3 5 10 ∞ franja infinita
0,1 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09 0,09
0,3 0,24 0,24 0,23 0,23 0,23 0,23 0,23 0,23
0,5 0,48 0,48 0,47 0,47 0,47 0,47 0,47 0,47
1 0,7 0,75 0,81 0,83 0,83 0,83 0,83 0,83
1,5 0,8 0,86 0,97 1,03 1,07 1,08 1,08 1,08
2,5 0,88 0,97 1,12 1,22 1,33 1,39 1,4 1,4
3,5 0,91 1,01 1,19 1,31 1,45 1,56 1,59 1,6
5 0,94 1,05 1,24 1,38 1,55 1,72 1,82 1,83
∞ 1 1,12 1,36 1,52 1,78 2,1 2,53 ∞
Fuente: Winkerton y Fang (1975)
(8-70)
168
c) Capa rígida sobre una formación compresible:
Tal y como se observa en la figura 8-7.d., en este caso la deformación en la
superficie de una cimentación circular de diámetro B bajo cargas uniformes se calcula
como:
(8-71)
E1/E2
H/B 1 2 5 10 100
0 1,0 1,0 1,0 1,0 1,0
0,1 1,0 0,972 0,943 0,923 0,76
0,25 1,0 0,885 0,779 0,699 0,431
0,5 1,0 0,747 0,566 0,463 0,228
1,0 1,0 0,627 0,399 0,287 0,121
2,5 1,0 0,55 0,274 0,175 0,058
5,0 1,0 0,525 0,238 0,136 0,036
∞ 1,0 0,5 0,2 0,1 0,01
Fuente: Winkerton y Fang (1975)
169
8.5.2 Roca transversalmente isotrópica
Se tienen ecuaciones que dan el valor del asentamiento vertical de una sección rígida
circular sobre una masa rocosa transversalmente isotrópica en donde el eje de carga es
coincidente con el eje vertical (z).
Las propiedades del macizo están dadas por el módulo de deformación vertical (Ez) y
horizontal (Eh), el módulo de cortante (Ghz) entre los planos horizontal y vertical y los
siguientes valores del módulo de Poisson:
( ) ( )
Si 2 es positivo: (8-72)
[ ( ) ][ ( ) ]
( )
Si 2 es negativo: (8-73)
( )
( )
Si 2 es cero: (8-74)
( )
( )
(8-75)
( )
(8-76)
( )( )
(8-77)
( )
(8-78)
( )
170
( )
(8-79)
(8-80)
(8-81)
(8-82)
Las propiedades elásticas de la roca intacta y de las fracturas están definidas por el
módulo de deformación de la roca intacta Er, la relación de Poisson de la roca intacta ,
el módulo de cortante de la roca intacta Gr, definido por:
171
(8-83)
( )
Sx,y,z es el espaciamiento entre cada una de las familias de fracturas, kni es la rigidez
normal de la discontinuidad por cada una de las familias y ksi es la rigidez al cortante de
la familia de fracturas i.
(8-84)
(8-85)
Para la ecuación 8-82 los valores para el coeficiente de Poisson usado en el cálculo del
asentamiento son:
; (8-86)
(8-87)
En lo que respecta a la parte del pilote que está empotrado en la roca se deben calcular
dos componentes; el acortamiento elástico del pilote perforado:
(∑ )
(8-88)
Donde:
172
Y el asentamiento de la base del pilote perforado, dado por:
(∑ )
(8-89)
Donde:
Figura 8-9. Factor de influencia para el asentamiento elástico en función de la relación de empotramiento y la
relación de módulos.
Fuente: AASHTO (1998)
173
174
Capítulo 9. Conclusiones y Recomendaciones
9.1 Conclusiones
Con base en el estudio del estado del arte de las metodologías para el diseño de
cimentaciones en roca, y de la aplicación de algunas de estas en un caso de estudio
se tienen las siguientes conclusiones:
1. Los métodos que abarca el presente trabajo son útiles para análisis de cimentaciones
sobre rocas fracturadas y no fracturadas de estructuras de pequeño y mediano
tamaño.
2. La capacidad de soporte de un macizo rocoso depende del tipo de falla que pueda
presentarse en la fundación, para un adecuado uso de las ecuaciones expuestas es
necesario que el profesional responsable tenga conocimiento en mecánica de rocas, y
por ende un criterio razonable sobre el modo de falla, como base se puede utilizar la
figura 5.1.
6. El Rock Mass Rating (RMR) representa el sistema de clasificación más utilizado, lo que
lo hace más confiable gracias a que posee mayor cantidad de correlaciones entre sus
resultados y otras propiedades del macizo rocoso respaldadas en diversos estudios.
175
7. Existe una serie de sistemas de clasificación que pueden ser utilizados para casos
específicos. Entre estos se puede mencionar el Dam Mass Rating (DMR) que es de
utilidad cuando se analiza la cimentación sobre macizo rocoso de Presas, el sistema
de clasificación Q para sostenimientos en túneles, el índice del macizo rocoso (RMi)
que puede ser útil en la etapa inicial de un proyecto debido a que se puede aplicar
con información base fácil de obtener.
176
12. Para casos especiales de cimentaciones, como fundaciones empotradas, inclinadas,
sobre talud o bajo la acción de cargas inclinadas se deben utilizar los factores de
corrección descritos en la sección 5.4 con el fin de tomar en cuenta la reducción en la
capacidad de soporte que pueden sufrir debido a estas condiciones. La combinación
de los factores de corrección únicamente debe hacerse cuando los factores tiendan a
producir la falla en la misma dirección.
13. Las cimentaciones profundas son una solución útil en los casos en donde los estratos
superiores no poseen una capacidad de soporte aceptable, por lo que es necesario
transmitir las cargas generadas a capas de roca competentes a profundidades
mayores. Es poco común que los pilotes en roca necesiten desarrollar resistencia por
fricción debido a que en la mayoría de casos la capacidad por punta es suficiente para
resistir las cargas impuestas. En caso de ser necesario se puede calcular un valor de
resistencia mínimo a partir de la expresión 5-45, mientras que la ecuación 5-46 brinda
distintas opciones de cálculo a partir de la variación del parámetro dado en el cuadro
5-3, el cual debe ser escogido con criterio a partir de las observaciones y limitaciones
dadas en el mismo. En el caso de pilotes en grupo se puede llegar a separaciones
pequeñas de hasta 1.5 veces el diámetro del pilote sin reducción de las cargas de
hundimiento.
177
17. Se analizó el macizo donde se planea cimentar la toma de agua del Proyecto
Hidroeléctrico Savegre. Para esto se utilizaron datos de ensayos de campo y
laboratorio facilitados por el Instituto Costarricense de Electricidad. Se tuvo acceso a
información de dos perforaciones realizadas y a pruebas correspondientes a:
compresión uniaxial, gravedad específica, relación de vacíos, absorción, peso unitario,
módulo de deformación, RMR, RQD.
18. Con base en los datos suministrados se encontraron las siguientes propiedades del
macizo:
19. Se encontró que los parámetros del criterio de ruptura de Mohr-Coulomb difieren
dependiendo del método de cálculo usado. La cohesión varía mucho mientras que el
ángulo de fricción posee un valor más constante.
20. Se utilizaron los datos generados a partir del criterio de ruptura de Hoek y Brown ya
que se considera que este toma en cuenta mayor cantidad de propiedades del macizo
rocoso y por lo tanto sus parámetros son más representativos de las condiciones
presentes en la zona.
21. Se calculó la capacidad de soporte última con tres métodos distintos: a partir de las
ecuaciones de capacidad de carga, mediante el criterio de Hoek y Brown y a través de
correlación con el valor de RQD. Además se realizó la corrección por estar colocado
sobre un talud, a partir de la topografía se determinó que el ángulo de este es de
15°. El valor estimado de capacidad de soporte a partir de la ecuación de capacidad
de carga dada en USACE (1994) fue de 12.1 MPa, al aplicarse la corrección se redujo
a 6 MPa, siendo el valor más bajo de capacidad de soporte entre los tres métodos. A
178
partir del criterio de Hoek y Brown el valor encontrado fue de 13.4 MPa y con la
correlación del RQD la capacidad de soporte se estimó en 8 MPa.
22. Asimismo se calculó el factor de seguridad para cada uno de los valores de capacidad
de soporte calculados. Se despreció la capacidad estimada a partir del RQD por tomar
en cuenta solamente este factor.
9.2 Recomendaciones
179
4. Se recomienda la aplicación de ensayos de campo y laboratorio que brinden los
valores de los parámetros buscados de manera directa, ya que los resultados son más
confiables que los obtenidos, por ejemplo, a partir de correlaciones.
5. Para la realización de los ensayos tanto de campo como laboratorio se deben seguir
las recomendaciones dadas por la ISRM en lo que respecta a procedimiento y tipos de
muestras.
6. Los Sistemas de Clasificación Geomecánica deben emplearse en las etapas previas del
proyecto a partir del criterio de un profesional responsable con conocimientos en el
área de la geotecnia.
10. En caso de que el análisis de capacidad de soporte con las metodologías expuestas en
el presente estudio dieran como resultado factores de seguridad bajos o muy
180
cercanos al límite se recomienda efectuar un análisis más profundo tanto de las
propiedades del macizo rocoso como de la capacidad de soporte.
15. Las correlaciones entre características del macizo y su capacidad de soporte se basan
en resultados empíricos por lo que se recomienda su utilización como fuente de
consulta y para etapas previas de investigación. Para el diseño se debe realizar un
análisis más completo a partir de ecuaciones y características del material presente.
181
182
Referencias bibliográficas
Aydin, A. (2009). ISRM: Suggested method for determination of the Schmidt hammer
rebound hardness: revised version [versión electrónica]. International Journal of Rock
Mechanics & Mining Sciences, 46, 627-634
Barton, N. Choubey, V. (1977). The shear strength of rock joints in theory and practice . Rock
mechanics, vol 10.
Benson, C. (1986). Literature review of rock properties for analysis of navigation structures
founded on rock. Proyecto de graduación para optar por el grado de Máster en ingeniería
civil, Universidad Estatal e Instituto Politécnico de Virginia, Estados Unidos.
Bieniawski, Z. (1974). Estimating the strength of rock materials. J. S. Afr. Inst. Min. Metall,
vol 74.
Bieniawski, Z. Orr, C. (1976). Rapid site appraisal for dam foundation by geomechanics
classification. 12 ICOLD. México.
Bishnoi, B. (1968). Bearing capacity of jointed rock. Tesis para optar por el grado Ph. D.
Instituto de Tecnología de Georgia, Estados Unidos.
183
Calavera, J. (1982). Cálculo de estructuras de cimentación (4ta edición). España: Instituto
Técnico de Materiales y Construcciones.
Castillo, E. Cimentaciones sobre pilotes en roca. Pruebas de hinca. Universidad Central de las
Villas, Villa Clara, Cuba.
Failmezger, R. Zdinak, A. Darden, J. Fahs, R. (2005). Use of rock pressuremeter for deep
foundation design [versión electrónica]. 50 ans de pressiométres, 1.
Hoek, E. & Londe, P. (1974, setiembre). The design of rock slopes and foundations. En:
Tercer Congreso de la Sociedad Internacional de Mecánica de Rocas. Denver, Estados
Unidos.
Hoek, E. & Marinos, P. (2007). A brief history of the development of the Hoek-Brown failure
criterion. Soils and Rocks, (2).
184
Hudson, J. Harrison, J. (1997). Engineering rock mechanics, an introduction to the principles.
Londres: Pergamon.
ISRM. (1982). Rock characterization, testing and monitoring. ISRM suggested methods.
Pergamon press.
Jiménez, M. (1998). Capacidad de soporte del macizo rocoso de fundación de la presa del
proyecto hidroeléctrico Pirrís. Proyecto de graduación para optar por el grado de Licenciatura
en Ingeniería Civil, Escuela de Ingeniería Civil, Universidad de Costa Rica, San José, Costa
Rica.
Kulhawy, F. H. (1978) Geomechanical model for rock foundation settlement. ASCE, 104
(GT2), 211-27.
Look, B. (2007). Handbook of Geotechnical Investigation and Design Tables. Holanda: Taylor
& Francis / Balkerma.
Marinos, V. Marinos, P. Hoek, E. (2005). The Geological Strenght Index: applications and
limitations [versión electrónica] . Bull Eng Geol Environ, 64, 55-65.
Naval Facilities Engineering Command (NAVFAC). (1986). Soil Mechanics Design Manual.
Estados Unidos: NAVFAC.
185
Naval Facilities Engineering Command (NAVFAC). (1986). Foundations & Earth Structures.
Estados Unidos: NAVFAC.
Palmstrom, A. (1995). RMi a rock mass characterization system for rock engineering
purposes. Tesis para obtener el grado Ph. D. Universidad de Oslo, Noruega.
Ramamurthy, T. Rao, G. Rao, K. (1985). A strength criterion for rocks. En: Proc. Indian
Geotech. Conf. Roorkee.
Roark, R. Young, W. (1970). Formulas for stress and strain. Nueva York: McGraw Hill.
Romana, M. (2004). La clasificación geomecánica DMR: una herramienta para las revisiones
de seguridad de la cimentación de presas. España: Comité Nacional Español de Grandes
Presas.
Romana, M. (2004). DMR (una adaptación del RMR), una nueva clasificación geomecánica
para la cimentación de presas. En: Noveno Congreso Luso de Geotecnia. Aveiro, Portugal.
US Army Corps of Engineers. (1994). Rock Foundations, technical engineering and design
guides as adapted from the U. S. Army Corps of Engineers; no 16. Estados Unidos: American
Society of Civil Engineers.
US Army Corps of Engineers. (1989). Retaining and flood walls. Estados Unidos: American
Society of Civil Engineers.
US Army Corps of Engineers. (1998). Design of deep foundations. Estados Unidos: American
Society of Civil Engineers.
Vallejo, L., Ferrer, M., Ortuño, L. & Oteo, C. (2002). Ingeniería geológica. Madrid: Pearson
Educación.
186
Valverde, M. (1988). Determinación de la resistencia al corte en juntas de roca. En: IV
seminario nacional de geotecnia. San José, Costa Rica.
187
APÉNDICE 1
A-1
A-2
A-3
A-4
APÉNDICE 2
A-5
A-6
PHS-TA01
Profundidad d
Gs Gb e %Abs
(m) (kg/m3)
78,2 80,8 2,53 2,48 1,02 2,19 2478
80,8 84,85 2,54 2,48 1,03 2,33 2477
2,68 2,62 1,10 2,25 2448
2,68 2,62 1,10 2,25 2448
84,85 90 2,54 2,49 1,04 1,99 2447
2,54 2,49 1,04 1,99 2447
90 95 2,57 2,52 1,02 2,11 2522
95 100,7
100,7 107 2,67 2,64 1,01 1,17 2629
107 113 2,68 2,65 1,01 1,21 2650
113 115,8
115,8 122 2,60 2,56 1,01 1,32 2567
122 126,2
126,2 131,8 2,54 2,50 1,03 1,63 2476
131,8 136
136 142,3 2,57 2,53 1,02 1,85 2527
142,3 146
146 150 2,59 2,55 1,02 1,53 2546
Promedio 2,59 2,55 1,03 1,83 2512
A-7
PHS-TA02
Profundidad d
Gs Gb e %Abs
(m) (kg/m3)
51 53,1 2,42 2,42 3,83 2478,00
53,1 54,55
54,55 56 2,63 2,63 1,74 2679,00
56 58,55 2,61 2,61 1,80 2654,00
58,55 60,55 2,53 2,53 2,55 2560,00
60,55 61 2,66 2,66 1,59 2542,00
61 62,8 2,59 2,59 1,53 2622,00
Promedio 2,57 2,57 2,17 2589,17
A-8
APÉNDICE 3
A-9
A-10
PHS-TA01
Profundidad σc E50 Vp
2 2
(m) (kg/cm ) (kg/cm ) (m/s)
78,2 80,8 238 70475 3340
80,8 84,85 142 17771 4781
114 46118 3894,23077
165 26757 4762
84,85 90 93 27837 3931
265 45692 4846,15385
90 95 1330 130911 4367
95 100,7 4511
100,7 107 535 81965 4235
107 113 244 6031
113 115,8
115,8 122 292 14051 4369
122 126,2
126,2 131,8 275 63441 4232
131,8 136 3814
136 142,3 344 36196
142,3 146
146 150 968 67419 4454
Promedio 385 48820 4272
PHS-TA02
Profundidad σc E50 Vp
2 2
(m) (kg/cm ) (kg/cm ) (m/s)
51 53,1 69,00 2715
53,1 54,55
54,55 56 414,00 4714
56 58,55 511,00 4630
58,55 60,55 131,00 3451
60,55 61 465,00 5109
61 62,8 398,00
Promedio 331,33 4123,80
A-11
PHS-TA01
σc Clase Frecuencia
Media 385,1 300 9
Error típico 101,3 600 2
Mediana 265,4 900 0
Moda #N/A 1200 1
Desviación estándar 365,2 y mayor... 1
Varianza de la
muestra 133352,6
Curtosis 3,3
Coeficiente de
Histograma
asimetría 1,95 10
Rango 1236,7 8
Mínimo 93,1 Frecuencia 6
Máximo 1329,8 4
2
Suma 5006,2
0
Cuenta 13 300 600 900 1200 y mayor...
Clase
PHS-TA02
σc Clase Frecuencia
Media 331,3 200 2
Error típico 75,4 400 1
Mediana 406 y mayor... 3
Moda #N/A
Desviación estándar 184,6
Varianza de la
muestra 34075,5 Histograma
Curtosis -1,56 4
Coeficiente de
Frecuencia
3
asimetría -0,8
2
Rango 442
Mínimo 69 1
Máximo 511 0
Suma 1988 200 400 y mayor...
Clase
Cuenta 6
A-12
Muestra completa
σc Clase Frecuencia
Media 368,1 300 11
Error típico 72,2 600 6
Mediana 275,4 900 0
Moda #N/A 1200 1
Desviación estándar 314,68 y mayor... 1
Varianza de la
muestra 99026,4 Histograma
Curtosis 4,4
Coeficiente de 15
Frecuencia
asimetría 2,01 10
Rango 1260,8
Mínimo 69 5
Máximo 1329,8 0
Suma 6994,2 300 600 900 1200 y mayor...
Cuenta 19 Clase
PHS-TA01
E Clase Frecuencia
Media 48820,3 30000 5
Error típico 9464,3 60000 3
Mediana 45692,2 90000 4
Moda #N/A 120000 0
Desviación estándar 34124,2 150000 1
Varianza de la
muestra 1164459482 y mayor... 0
Curtosis 1,5 Histograma
Coeficiente de
6
asimetría 1,08
Frecuencia
Rango 124880,1 4
Mínimo 6031,2
2
Máximo 130911,3 Series1
Suma 634663,6 0
Cuenta 13 30000 60000 90000 120000 150000
Clase
A-13
PHS-TA01
Vp Clase Frecuencia
3000 0
Media 4272,1 3500 1
Error típico 120,8 4000 3
Mediana 4367,2 4500 5
Moda #N/A y mayor... 4
Desviación estándar 435,7
Varianza de la
muestra 189802,1 Histograma
Curtosis 0,17 6
Coeficiente de Frecuencia
asimetría -0,64 4
Rango 1506,04 2
Mínimo 3340,1
0
Máximo 4846,15
3000 3500 4000 4500 y mayor...
Suma 55537,29
Clase
Cuenta 13
PHS-TA02
Vp Clase Frecuencia
3000 1
Media 4123,8 3500 1
Error típico 447,91 4000 0
Mediana 4630 4500 0
Moda #N/A 5000 2
Desviación estándar 1001,57 y mayor... 1
Varianza de la
muestra 1003142,7
Curtosis -1,4
Histograma
Coeficiente de 3
Frecuencia
asimetría -0,75 2
Rango 2394 1
0
Mínimo 2715 Frecuencia
Máximo 5109
Suma 20619
Cuenta 5 Clase
A-14
Muestra completa
Vp Clase Frecuencia
3000 1
Media 4230,9 3500 2
Error típico 144,3 4000 3
Mediana 4368,3 4500 5
Moda #N/A 5000 6
Desviación estándar 612,1 y mayor... 1
Varianza de la
muestra 374683,2
Curtosis 0,76
Coeficiente de
asimetría -0,97
Rango 2394
Mínimo 2715
Máximo 5109
Suma 76156,29
Cuenta 18
Histograma
8
Frecuencia
6
4
2
0 Frecuencia
3000 3500 4000 4500 5000 y
mayor...
Clase
A-15
A-16
APÉNDICE 4
A-17
A-18
DESCRIBIÓ:Geol. David Jara
Díaz
PERFORACIÓN PHS-TA-1 Ing. Jonathan Cortés
M.
Perforó: Johnny Jiménez
PROFUNDIDAD DE
TRAMO RECUPERACIÓN Máquina: LY 38 (219946)
RQD
INICIO FONDO %
% DESCRIPCIÓN GEOLÓGICA
(m) (m) RMRBásico
Suelo residual coluvial color café claro, con pátinas de
0,00 3,50 7,14 0,00 MnOx.
12,00 12,50 70,00 0,00 Coluvio compuesto por areniscas finas color gris.
12,50 14,50 7,50 0,00 Coluvio compuesto por areniscas finas color gris.
14,50 16,00 8,00 0,00 Coluvio compuesto por areniscas finas color gris.
16,00 17,00 21,00 0,00 34 Coluvio compuesto por areniscas finas color gris.
17,00 18,70 33,53 0,00 Coluvio compuesto por areniscas finas color gris.
20,00 21,70 22,35 0,00 Coluvio compuesto por areniscas finas color gris.
A-19
Arenisca fina color gris claro, calcárea, con microvetillas de
10,0 calcita, patinas de FeOx en fracturas. Roca intensamente
26,00 27,00 94,00 fracturada; ultimos 15 cm del tramo presenta cizalla y
0
trituramiento de la roca.
26,4 Arenisca fina color gris oscuro, son vetillas, roca sana,
29,00 30,70 62,94 moderadamente fracturada (angulos de 30°-45°).
7
16,9 36 Arenisca fina color gris oscuro, son vetillas, roca sana,
30,70 32,00 28,46 moderadamente fracturada.
2
22,3 Arenisca fina a media color gris oscuro, sana, dura, poco
32,00 33,70 22,35 fracturada(?).
5
Arenisca fina a media color gris oscuro, sana, dura, muy
33,70 35,00 25,38 0,00 37 fracturada.
35,2
38,00 39,70 100,00 Arenisca fina a media, calcárea, con microvetillas de calcita.
9
33,0 Arenisca calcárea de grano medio color gris, cn microvetillas
39,70 41,00 76,92 52 de calcita; pátinas de óxidos de hierro y manganeso. Roca
8 muy fracturada.
52,9 Arenisca calcárea, de grano fino, color gris oscuro, muy
41,00 42,70 100,00 fracturada (fracturas de bajo ángulo), con un tramo de zona
4 de falla de 60 cm aprox. con cizalla y rellens limosos.
A-20
ángulo, oxidación en las fracturas y costras de calcita.
52,10 52,70 66,67 0,00 Arenisca gruesa calcárea color gris, densamente fracturada.
A-21
62,3 Areniscas de grano medio con facies gruesas, color gris,
71,00 74,00 100,00 calcáreas, con microvetillas de calcita. Roca
3 moderadamente fracturada (50-70°).
89,0 Arenisca de grano medio color gris oscuro, calcárea, poco
74,00 77,00 100,00 fracturada, con superficies rugosas.
0
66,0 Arenisca fina color gris, calcárea. Con microvetillas de
77,00 80,00 100,00 59 calcita cristalina; planos rugosos.
0
70,0 Arenisca fina calcárea con facies de arena gruesa con
80,00 83,00 100,00 64 espesores de 30 cm; con vetillas de calcita cristalina de 2-3
0 mm. Roca poco fracturada, planos rugosos.
60,0 Arenisca fina calcárea, poco fracturada, con facies de arena
83,00 86,00 90,00 gruesa de 10 cm. Planos rugosos.
0
53,3 Areniscas de grano medio, calcáreas, color gris oscuro,
86,00 89,00 91,33 57 moderada a poco fracturadas (75°, 30°, 45°), planos
3 semirugosos.
45,0 Arenisca media gris, ligeramente calcárea, con microvetillas
89,00 90,00 88,00 de calcita. Roca moderadamente fracturada (50-70°),
0 planos rugosos.
78,0 Arenisca de grano fino a medio, calcárea, de color gris,
90,00 92,00 100,00 fracturas abiertas con rellenos mm de calcita. Superficies
0 moderadamente rugosas a onduladas; fracturas de 35°-75°.
Intercalaciones centimétricas de areniscas de grano medio a
71 grueso, calcáreas, moderadamente fracturadas,
45,0 exceptuando dos tramos con fracturamiento intenso de alto
92,00 95,00 92,00 ángulo (de 92,00 - 92,26 m y de 93,93 - 95,00 m). Fracturas
0
abiertas y cerradas con calcita como relleno y pátinas,
algunas superficies ligeramente estriadas y rugosas.
Areniscas de grano medio color gris, calcáreas,
56,0
95,00 97,50 100,00 moderadamente fracturadas. Microvetillas de calcita,
0 pátinas de óxidos de hierro y manganeso.
intercalaciones de areniscas de grano medio y grueso,
58,8 ligeramente calcáreas, de color gris claro. Roca
97,50 99,20 98,82 59 moderadamente fracturada con pátinas de calcita y óxidos
2 de hierro y manganeso. El ángulo de las fracturas va de 45°-
60°-80°.
Areniscas de grano grueso a medio, moderadamente
40,0 fracturadas, ligeramente calcáreas, con vetillas de calcita
99,20 100,70 100,00 milimétricas. Planos ligeramente rugosos a lisos, con
0
pátinas de calcita y óxidos de hierro.
Arenisca de grano medio, calcárea, color gris,
82,0 moderadamente fracturada, con microvetillas de calcita.
100,70 102,70 97,50 Angulos de 70°. Superficies rugosas a lisas con ángulos de
0
5°-15°.
13,3 Arenisca calcárea de grano medio, color gris, muy
102,70 103,90 97,50 61 fracturada, con rellenos y pátinas milimétricas de calcita en
3 fracturas, con ángulos entre 30°-60°.
Areniscas medias con lentes centimétricos de arenas
82,5 gruesas color gris, calcáreas, fracturas con pátinas de
103,90 107,00 100,00 calcita, ángulos entre 25° y 30°. Los niveles de artenas
8
gruesas son ligeramente calcáreos.
Arenisca calcárea de grano medio, color gris oscuro, muy
51,8 fracturada, los planos entre las fracturas abiertas son
107,00 108,10 100,00 rugosos, estriados, con pátinas de calcita, las fracturas
2 cerradas son de alto ángulo con rellenos mm de calcita
57 (88°).
Intercalaciones de areniscas de grano medio calcáreas con
71,0 areniscas de grano grueso ligeramente calcáreas, poco
108,10 110,00 87,37 fracturadas. Fracturas cerradas y abiertas con rellenos de
5
calcita y óxidos de hierro.
A-22
intercalaciones de areniscas medias y gruesas, calcáreas,
81,0 color gris, moderadamente fracturadas. Microvetillas y
110,00 112,00 100,00 pátinas de calcita, así como de óxidos de hierro.
0
Ocacionalmente pátinas de arcilla-limo color gris.
70,0 intercalaciones de areniscas medias y gruesas color gris,
112,00 113,00 90,00 calcáreas, moderadamente fracturadas. Microvetillas y
0 pátinas de calcita en fracturas abiertas y cerradas.
Arenisca de grano medio color gris, calcárea, con un nivel
66,9 de 30 cm de arenisca gruesa ligeramente calcárea color gris
113,00 115,75 96,73 48 claro. Microvetillas de calcita de alto ángulo, fracturas
1 abiertas con superficies lisas a rugosas con ángulos de 30°-
40°-75°. Entre 115,49 - 115,75 m existe una zona de falla.
Arenisca fina a media, calcárea, color gris, con lentes de
73,3 areniscas gruesas calcáreas. Roca moderada a poco
115,75 118,00 100,00 fracturada, con microvetillas de calcita, planos entre
3
fracturas rugosos a lisos, con ángulos de 15°-30°-50°-89°.
Arenisca fina color gris oscuro, calcárea, moderadamente
41,0
118,00 119,00 75,00 fracturada, planos rugosos, pátinas de calcita. Los últimos
0 10 cm se observa zona de falla.
63 Arenisca de grano fino color gris claro, calcárea, muy
60,0 fracturada (fracturas de bajo ángulo) con rellenos
119,00 120,70 100,00 milimétricos de calcita; superficies rugosas. Zona de
0
intenso fracturamiento entre 119,80 - 120,70 m.
Arenisca fina calcárea color gris oscuro, con bandeamientos
65,3 centimétricos de una brecha de grano fino no calcárea cuyo
120,70 122,00 96,15 ángulo es de 20°. Roca moderadamente fracturada, pátinas
8
de calcita en fracturas y planos rugosos.
Intercalaciones de estratos de areniscas finas a medias con
60,0 lutitas color gris, sanas. Las juntas en su mayoría son
122,00 125,00 100,00 cerradas y corresponden a vetillas de calcita de 1 - 5 mm de
0
54 espesor.
15,3 Arenisca gruesa silícea, color gris claro, con microvetillas de
125,00 126,30 73,08 calcita de 2 mm, además se observa calcopirita y clorita.
8
De 126,30 - 126,55: Arenisca gruesa ligeramente calcárea;
79,4 de 126,55 - 126,95 m: lutitas color gris calcáreas; de 126,95
126,30 128,00 94,12 - 127,15 m: lente de arenisca gruesa ligeramente calcárea;
1
de 127,15 - 128,00 m: lutita calcárea color gris.
66 Arenisca media a gruesa color gris, ligeramente calcárea,
91,6 poco fracturada, con planos semirugosos (20°-30°-40°),
128,00 131,00 100,00 posee bandeamientos milimétricos de flujo moderado;
7
pátinas de calcita en fracturas.
Arenisca fina color gris oscuro, poco calcárea, con
86,6 microvetillas de calcita, presenta un lente de arena gruesa
131,00 133,40 100,00 de 10 cm. Bandeamiento mm de flujo. Fracturas de alto a
7
bajo ángulo (70°-80°-45°-30°).
82,7 61 Arenisca fina (ídem anterior), poco fracturada, con vetillas
133,40 134,85 100,00 de calcita.
6
39,1 Arenisca media poco calcárea color gris oscuro, muy
134,85 136,00 100,00 fracturada (fracturas de alto ángulo (70°-80°). Costras de
3 calcita.
75,0 Arenisca de grano medio a grueso color gris claro,
136,00 137,20 100,00 ligeramente calcárea, poco fracturada (70°-80°-40°), con
0 vetillas milimétricas de calcita; planos rugosos-ondulados.
Arenisca de grano fino-medio calcárea, color gris oscuro,
71,4 poco a moderadamente fracturada (30°-45°-70°), con
137,20 140,00 96,43 61 microvetillas de calcita. Roca sana, dura, con planos
3 semirugosos. Presenta lentes de arenisca gruesa
centimétricos a milimétricos.
Arenisca media calcárea con lentes de arena gruesa
70,4 irregulares milimétricos a centimétricos, con
140,00 142,30 100,00 bandeamientos de flujo. Roca moderadamente fracturada,
3
calcita en fracturas y superficies rugosas.
A-23
Arenisca gruesa color gris claro, ligeramente calcárea, muy
142,30 143,80 58,00 8,67 fracturada.
A-24
DESCRIBI Geol. David Jara
Ó: Díaz
PERFORACIÓN PHS-TA-02 Ing. Jonathan
Cortés M.
5037 ELEVACIÓN 26
1042837
NORTE: ESTE: 07 (msnm) 1 Perforó: Javier Araya
PROFUNDIDAD DE Máquina
TRAMO RECUPERACI RQD : -
INICIO FONDO ÓN % %
DESCRIPCIÓN GEOLÓGICA
(m) (m) RMRBásico
Areniscas finas y lutitas muy
meteorizadas color café claro, con
0,00 2,00 90,00 0,00 abundantes pátinas de óxidos de hierro
y manganeso. Tramo muy fracturado
con algunos niveles arcillosos de 10 cm.
A-25
Arenisca fina meteorizada con óxidos
13,00 14,10 86,36 0,00
de Mn en fracturas.
A-26
Arenisca media calcárea color gris,
alterada, con óxidos de Mn en
24,40 25,00 95,00 16,67
fraacturas. Roca mala, muy fracturada
en todas direcciones.
Arenisca ídem. Tramo de roca muy
fracturada (30-60°), con pátinas de
25,00 26,10 100,00 0,00
óxidos de Mn, juntas cerradas y
abiertas.
Arenisca color gris a pardo, muy mala
calidad mecánica, intensamente
fracturada (fracturas de alto ángulo
26,10 27,00 100,00 0,00
entre 40-60°), con rellenos limosos y
pátinas de óxidos de Fe y Mn en las
superficies de las juntas.
Zona de Falla: areniscas desmlenuzadas
y meteorizadas; matriz arenosa gruesa,
mala calidad geomecánica. Es una
27,00 28,00 85,00 0,00
posible zona de plano de deslizamiento.
Material arenoso-limoso no
consolidado.
Arenisca fina a media color gris claro,
calcárea, roca muy fracturada, un poco
blanda, con material arenoso y limoso
no consolidado como relleno de
28,00 29,10 100,00 0,00 fracturas; presencia de pátinas de
óxidos de Mn, zonas con láminas de
roca cizallada. Al final hay una fractura
con 5 cm de espesor con relleno de
arena, limo y láminas de roca cizallada.
Arenisca fina calcárea color gris claro,
con lentes de 5-8 cm de arenisca
gruesa. La roca mejora su condición
29,10 31,40 100,00 67,39 física, se encuentra poco a
moderadamente fracturada (ángulos de
40-55°), con rellenos limo arcillosos de
1-5 mm y láminas de roca cizallada.
Arenisca grano medio color gris
azulado, sana, calcárea,
moderadamente fracturada (30°, 40°,
31,40 33,35 97,44 34,87
50°). Superficies abiertas, semirugosas,
sin rellenos; geomecánicamente roca
de regular condición.
Arenisca de grano medio. Tramo
moderadamente fracturado con juntas
33,35 35,35 100,00 59,00
cerradas y algunas abiertas con rellenos
lilmosos. Calidad geomecánica regular.
Arenisca de grano medio. Los primeros
20 cm la roca se encuentra totalmente
35,35 36,00 69,23 0,00 triturada (fragmentos angulares de 1-2
cm) lo que podria indicar una zona de
falla, con rellenos areno-limosos.
A-27
Arenisca fina a media con lentes
gruesos (de 5-10 cm), matriz calcárea,
con microvetillas de calcita: Tramo
36,00 37,25 100,00 53,60
moderadamente fracturado, planos
rugosos, aberturas sin rellenos y
algunos planos con cizalla ligera.
Arenisca fina calcárea color gris, sana,
moderadamente fracturada (30°, 40°,
45°, 50°). Planos semi rugosos
37,25 39,40 100,00 46,51
cerrados, microvetillas de calcita.
Algunos planos cizallados con 40° de
inclinación.
Arenisca igual al tramo anterior. Roca
sana, poco fracturada (fracturas de alto
39,40 41,00 100,00 66,25 ángulo 45-65°), con pátinas de calcita y
vetillas. Buena condición física,
superficies rugosas.
A-28
Arenisca fina calcárea color gris claro,
muy fracturada, con planos rugosos y
rellenos limo-arenosos, cizallados.
51,00 53,10 100,00 42,86 Presencia de pátinas de calcita en las
juntas. Se encuentra una falla de 8 cm
de espesor al final del tramo, poco
consolidada.
A-29
RQD Clase Frecuencia
25,00 4
Media 59,0 50,00 6
Error típico 3,8 75,00 16
Mediana 63,4 90,00 9
Moda 70 100,00 1
Desviación estándar 22,5 y mayor... 0
Varianza de la muestra 507,6
Curtosis 0,01 Histograma
Coeficiente de asimetría -0,88 20
Rango 83
Frecuencia
15
Mínimo 8,67 10
Máximo 91,67
5
Suma 2124,78
0
Cuenta 36 25,00 50,00 75,00 90,00 100,00
Clase
Rango 26 6
Mínimo 45 4
Máximo 71 2
Suma 831 0
Cuenta 14 50 60 70 80
Clase
A-30
APÉNDICE 5
A-31
A-32
Geometría
Fuerzas
A-33
H1: Presión hidrostática.
Cargas estáticas
(kN)
W1 13091,76 Brazo de momento
W2 32447,52 W1 12,4
W3 1404 W2 -7,5
W4 2450,4 W3 8,8
W5 96 W4 25,5
W6 1633,05599 W5 37,6
W7 5947,9992 W6 19,4
W8 3718,20092 W7 26,4
W9 1232,28 W8 19,4
Total 60788,93 kN W9 -7,5
H1 -17,3
H1 13263,12 H2 17,3
H2 32448
Momento total: 580929.311 kN m
Excentricidad e= 9.55m
qmax 2057,63kPa
qmin 20,62kPa
A-34