Se puede utilizar aceite mineral para humectar el oído y
evitar que la cera se seque. No se limpie los oídos con
demasiada frecuencia ni con demasiada fuerza. El cerumen también ayuda a proteger los oídos. Nunca trate de limpiar el oído. introduciendo algún objeto, como un hisopo, en el conducto auditivo externo Cuando los oídos no presentan ningún tipo de problemas de salud se limpian por solos de manera natural, aunque hay oportunidades en las que se puede presentar un aumento de cera que puede bloquear o taponar el oído causando molestias, como sonidos extraños, lo cual no permite escuchar con claridad. El oído es un conjunto de órganos cuyas funciones principales son el equilibrio y audición en los seres humanos. Dentro del estudio de la medicina se le denomina también órgano vestibulococlear. El sentido del oído nos permite percibir los sonidos, su volumen, tono, timbre y la dirección de la que provienen. El órgano receptor es la oreja. Las vibraciones se transmiten a través del oído medio por una cadena de huesecillos: el martillo, el yunque y el estribo. Al mismo tiempo, originan ondas en el líquido del oído interno. Esos estímulos llegan al cerebro a través los nervios auditivos superiores.
SENTIDO DEL OIDO
Los oídos, que se encuentran parcialmente alojados en el hueso temporal del cráneo, son los órganos de la audición y el equilibrio. Nos permiten percibir los sonidos y el movimiento gracias a la estimulación de receptores especializados llamados células ciliadas, que reaccionan o responden ante las ondas sonoras transmitidas por el aire y el movimiento de la cabeza. Las fibras nerviosas que provienen de la vía auditiva y las estructuras del equilibrio forman el nervio vestibulococlear, que lleva los impulsos nerviosos al cerebro para su interpretación. Anatómicamente, el oído está dividido en tres partes: el oído externo, recubierto de cilios y glándulas secretoras de cera; el oído medio, por el que pasan mecánicamente las vibraciones; y el interno, cuyas estructuras traducen las vibraciones a mensajes nerviosos.
Oído externo: está formado por el pabellón
de la oreja o aurícula y el conducto auditivo externo. Oído medio: es una cavidad llena de aire en el hueso temporal, que está entre el tímpano y el oído interno. Ligados al tímpano y también entre sí, hay tres huesos diminutos: martillo, yunque y estribo, que transfieren las vibraciones del tímpano al oído interno.
Oído interno: llamado también laberinto,
está compuesto por un complejo sistema de canales membranosos con un revestimiento óseo. Las enfermedades más frecuentes que se pueden presentar en el sentido del oído son: Otitis. Meniere Neuritis Vestibular Persbiacusia Sordera. HIGIENE DEL OIDO Son muy importantes los cuidados y la limpieza del oído. Aquí te mostramos algunas recomendaciones: Baja el volumen de los aparatos eléctricos sonoros. No te expongas a ruidos fuertes o hagas uso de audífonos a todo volumen. Ten especial cuidado con tus oídos cuando se presenten catarros, gripes o infecciones. Sécate los oídos después de cada baño. No introduzcas objetos en el oído, ni siquiera los bastoncillos de algodón. Visita a tu médico especialista cuando notes alguna molestia en tu/s oído/s y evita la automedicación.