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Universidad Nacional de Río Cuarto

Facultad de Ciencias Humanas


Departamento de Ciencias de la Educación

Profesorado en Educación Física

Desarrollo Motor Humano (6643)

Trabajo practico N°5

Profesores: Ambroggio Nicolás Manuel;


Fara Silvio Fabricio;
Krohn Rodrigo Emiliano;
Peruchini Vanesa Alejandra.

Integrantes: Labiano Gastón (39.612.753);


Massini Juan Ignacio (41.441.216);
Mercado Santiago (40.772.506).

-2018-
Propiocepcion: actúa como mecanismo de defensa ante movimientos que puedan lesionar
una articulación. Si no es correcta (es lenta o desproporcionada) o no actúa con la rapidez
suficiente para prevenir un movimiento exagerado, puede derivar en una lesión grave. Por
ejemplo, cuando pisamos el borde de una piedra o un desnivel del terreno. Se podría decir
que es la comunicación que se transfiere a través del sistema nervioso central dando
instrucciones al musculo de como contraerse, al ligamento de cómo hacer un buen sostén
entre huesos y a toda la capsula para resistir cualquier tracción, torsión, vibración o golpe. De
este modo nuestro movimiento es más coherente y eficaz.

Actividad:

Patineta: Nos situamos con ambos pies sobre una patineta. Nuestro compañero colocará sus
pies pegados a las ruedas, para impedir el movimiento de la patineta. Nosotros realizaremos
flexiones con ambas piernas, manteniendo el equilibrio y procurando no perder nunca la
verticalidad del tronco.

Interocepción: Significa “percepción interna” de nuestro cuerpo. Es la capacidad que cada


ser humano tiene de estar en conexión con las distintas sensaciones internas del mismo.

Para ello, este sentido cuenta con células especializadas en reconocer la presión, la
temperatura, la oxigenación, el estrechamiento, la acidez y las propiedades químicas.

Estos sensores se activan cuando reciben un estímulo importante, como por ejemplo la
inflamación de un órgano, llegando a la conciencia de diversas formas o afectando a nuestra
conducta de manera inconsciente.

Actividad:

En el corazón, por ejemplo, donde normalmente no tendría sentido estar consciente de cada
latido, los interoceptores correspondientes duermen la mayor parte del tiempo. Pero cuando
los despierta un estímulo extraño (que puede ser mecánico, químico o eléctrico), los latidos
llegan a nuestra consciencia. Llamamos a eso “taquicardia”. La mayoría de las veces no hay
diferencias reales con el latir normal del corazón, pero dado que nunca sentimos los latidos, la
nueva sensación nos parece verdaderamente alarmante. Siendo un órgano tan importante, es
comprensible que las alarmas sean algo exageradas. Por supuesto que otras veces la alarma
es real y nos sirve para tomar las medidas adecuadas.

Exterocepción: Forma puramente consciente de percibir el mundo a través de los sentidos


tradicionales (gusto, olfato, vista, tacto, auditiva) como el dolor y la temperatura. Orientada al
mundo externo.
Sensación originada en la superficie corporal o en el entorno, y percibida a través de la visión,
el oído, el gusto, el tacto y el olfato.

Aunque la mayor parte de los exteroreceptores estén en la piel, tanto en la dermis como en la
epidermis, los tenemos distribuidos por todo el cuerpo, ocupando también el lugar de los que
tradicionalmente hemos llamado los sentidos.

Así pues el sistema exteroceptivo actúa en los ojos, como receptor de la luz, en los oídos,
como receptor acústico del exterior, en el olfato, percibiendo los estímulos olfativos de todo lo
que nos rodea o en el gusto, como receptor del sabor y temperatura de las sustancias.

Actividad:

La percepción del dolor, cuando la causa de este se encuentra en algo ajeno al propio cuerpo.
El dolor es uno de los mecanismos que tiene nuestro cuerpo de alertarnos cuando se produce
una acción o cualquier otra actividad que pueda ponernos en riesgo. Ante cualquier presión,
una quemadura o torcedura, el sistema exteroceptivo se activa y manda señal al cerebro para
que produzca el cese del dolor.

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