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Señor de Sipán: el Tutankamon

americano
Walter Alva
presentará en
Rusia al
‘Tutankamón
americano’

El arqueólogo peruano conversará en el ciclo “Los mejores


museos del mundo” sobre el Señor de Sipán.

El arqueólogo peruano Walter Alva hablará hoy en Moscú (Rusia)


sobre el Tutankamón americano, como es conocido popularmente
el Señor de Sipán, cuya tumba fue descubierta por él mismo en
1987.

“La gente queda impactada cuando les hablo de las Tumbas


Reales de Sipán. Lo comparan con las momias halladas en Egipto
y lo llaman el Tutankamón de América”, comentó Alva a la
Agencia Efe.

Alva, que impartirá la conferencia en el Museo Pushkin de la


capital rusa, hablará sobre el histórico hallazgo y sobre el
museo que se fundó en torno al yacimiento.
“El museo se ha convertido en un icono cultural y turístico en
el norte de Perú. Es uno de los más visitados de Perú y,
probablemente, de toda América Latina”, resaltó.

un imperio, como los incas, que se propagaron por toda


Latinoamérica”, señaló.

Alva considera que su esplendor fue posible gracias a la


tecnología, en particular la irrigación de zonas
tradicionalmente áridas.

“Fueron los vencedores del desierto. Crearon verdaderos oasis.


En el siglo VI debió de haber cambios climáticos muy fuertes y
al decaer el sistema productivo, el sistema social y político
quebró. Los españoles solo encontraron ruinas”, apuntó.

Elegido “hombre del año” por la revista National Geographic,


Alva encontró intacta la tumba de un gobernante que murió hace
unos 1.800 años.

“La tumba contenía los restos del jerarca en un ataúd de


madera envuelto con sus atuendos y ornamentos que lo
identificaban como el hombre que gobernaba la zona. Además,
estaba acompañado de otras ocho personas”, explica.

El siguiente paso fue crear un museo para conservar el


hallazgo, difundir su importancia y reconstruir la historia de
ese pueblo precolombino a través de su arte, su tecnología,
estructura social o creencias.

Alva destaca que el museo ha organizado exposiciones y


presentaciones en países como Estados Unidos, Alemania, España
y Japón.
Señor de Sipán: El rostro del
jerarca
La tumba del Señor de Sipán fue
el más importante hallazgo de
la arqueología americana. En
los próximos días
conoceremos el verdadero rostro
del monarca moche, gracias al
trabajo de científicos
brasileños.

Especialistas de Brasil presentarán, el miércoles 21 de


setiembre en Lima, el rostro reconstruido del Señor de Sipán,
utilizando la técnica de antropología forense en 3D, informó
el director del Museo Tumbas Reales de Sipán y descubridor del
sitio funerario del famoso jerarca moche, Walter Alva.

El Señor de Sipán fue descubierto en 1987 y su hallazgo marcó


un importante hito en la arqueología del continente
americano porque, por primera vez, se halló intacto y sin
huellas de saqueo un entierro real de una civilización peruana
anterior a los incas.

Alva confirmó la presentación de la reconstrucción del


rostro, a cargo de los investigadores que han tenido la
responsabilidad de desarrollar un proceso metodológico muy
exigente para aproximarnos a esta recreación.

Con Brasil

“Se ha trabajado por cerca de tres meses y esto es un proceso


largo a cargo de especialistas, en cooperación entre expertos
brasileños y la Universidad Garcilaso de la Vega”, explicó
Alva. Informó que se trata de los mismos cientíicos que
elaboraron los rostros de figuras católicas como Santa Rosa
de Lima, San Juan Masías y San Martín de Porres.
Alva destacó que esto representa un valioso aporte, pues se
contará con el ‘identikit’ de un personaje histórico.
“Esta es una nueva manera de acercarnos a una realidad
histórica y contar con el rostro de uno de los primeros
dignatarios del antiguo Perú”, manifestó el investigador.

La reconstrucción se realizó con un procedimiento escáner de


todos los componentes óseos del personaje. Pero, además, los
científicos brasileños trabajan la impresión 3D del busto del
Señor de Sipán, que será donado a este museo. “Es la
fisonomía completa, reconstruida para que podamos admirar el
verdadero rostro de este importante personaje mochica”. Con la
presentación del rostro del Señor de Sipán serían tres los
rostros reconstruidos de gobernantes de culturas asentadas en
Lambayeque, junto a la sacerdotisa de Chornancap y el Señor de
Sicán. “Nos faltaba mejorar el rostro del Señor de Sipán, que
fue una primera aproximación, para tener un trabajo más
exhaustivo”, concluyó.

Museo Tumbas Reales

La presentación del rostro del Señor de Sipán se hará en


alianza con la Universidad Inca Garcilaso de la Vega, en el
centro de convenciones de Telefónica, en Lima. En la
actualidad, todos los ornamentos hallados en su tumba se
exponen en el Museo Tumbas Museo Tumbas Reales Reales de
Sipán. El museo está ubicado a diez minutos de Chiclayo. La
atención al público es de martes a domingo de 9:00 a 17:00
horas. La entrada para adultos cuesta 10 soles; para cesantes
y universitarios, 4.00 soles; y para escolares, 1.50 soles.
Presentarán el rostro
reconstruido del Señor de
Sipán
Especialistas del Brasil
presentarán este miércoles 21
de setiembre en Lima el rostro
reconstruido y aproximado del
Señor de Sipán, utilizando la
técnica de antropología
forense en 3D, informó Walter
Alva, director del Museo
Tumbas Reales de Sipán y
descubridor del famoso jerarca moche.

El Señor de Sipán fue descubierto en 1987 y su hallazgo marcó


un importante hito en la arqueología del continente americano
porque, por primera vez, se halló intacto y sin huellas de
saqueos, un entierro real de una civilización peruana anterior
a los Incas.

Alva confirmó la presentación formal de la reconstrucción del


rostro, que estará a cargo de los investigadores que han
tenido la responsabilidad de desarrollar un proceso
metodológico muy exigente para aproximarnos cada vez más a
esta recreación del rostro.

“Se ha trabajado por cerca de tres meses y esto es un proceso


largo a cargo de especialistas en una cooperación entre Brasil
y la Universidad Garcilaso de la Vega”, aseveró.

Advirtió que se trata de los mismos científicos que elaboraron


los rostros de figuras católicas como Santa Rosa de Lima, San
Juan Masías y San Martín de Porres.

Alva destacó que esto representa un valioso aporte, pues se


contará con el “identikit” de un personaje histórico. “Esto
significa, que una manera de acercarnos a una realidad
histórica y poder contar con el rostro de uno de los primeros
dignatarios del Antiguo Perú”, manifestó.

Mencionó que la reconstrucción del rostro se realizó con un


procedimiento escáner de todos los componentes óseos del
personaje.

Al mismo tiempo, se informó que los científicos brasileños


trabajan la impresión 3D del busto del Señor de Sipán, que
será donado a este Museo. “Es el rostro del cráneo
reconstruido para que puedan admirar el verdadero rostro de
este importante personaje mochica”.

El investigador manifestó que con la presentación del rostro


del Señor de Sipán sumarían tres los rostros reconstruidos de
gobernantes de culturas asentadas en Lambayeque como el caso
de la Sacerdotisa de Chornancap y el Señor de Sicán. “Nos
faltaba mejorar el rostro del Señor de Sipán que fue una
primera aproximación, para tener un trabajo más exhaustivo”,
concluyó.

La presentación del rostro del Señor de Sipán se hará en


alianza con la Universidad Inca Garcilaso de la Vega. El acto
se realizará en el centro de Convenciones de Telefónica en
Lima.

(Andina)
Señor de Sipán sería del
siglo IV o V, según el
arqueólogo Walter Alva
El Señor de Sipán, antiguo gobernante de la cultura Mochica,
no habría pertenecido al siglo II, sino que su dinastía se
inició en los siglos IV o V, precisó el arqueólogo Walter
Alva, quien descubrió su tumba.

Agregó que las fechas han cambiado porque se están efectuando


nuevos análisis de radiocarbono 14. En ese sentido, dijo que
con esta nueva información se concluye que Sipán fue de una
dinastía real.

“En los próximos días se va a publicar un artículo de carácter


científico por las nuevas fechas corregidas. Se está corriendo
el tiempo por las características de las muestras investigadas
a los restos mochicas”, apuntó.

Alva remarcó que los cambios en el fechado no solo está


pasando en Lambayeque sino también en la zona de Jequetepeque
(La Libertad), donde se pensaba que las tumbas eran moche
temprano.

“Se pensaba que era de inicios de la era cristiana y está


reubicándose en los siglos IV y V. Hay cambios que
probablemente se deben al afinamiento de las técnicas de
fechado”, precisó.
EL SEÑOR DE SIPÁN, El
hallazgo que cambió la
historia
Equipo. Walter Alva encabezó el grupo de especialistas y
trabajadores que trabajaron durante varios meses para rescatar
la cámara funeraria.

Cinco lustros han pasado desde el descubrimiento de este


personaje de la cultura Mochica y es un buen momento
para hacer una relexión sobre la importancia que ha ejercido
este acontecimiento en Perú, en su población, en su cultura.

VEINTICINCO años es una vida o apenas un recodo en la historia


de un país, pero existen acontecimientos que marcan un antes y
un después de una época, que dan inicio a un serie de sucesos
que inluyen en los aspectos cultural, económico y social de
una nación. Eso fue lo que ocurrió aquella mañana de julio de
1987 cuando un grupo de arqueólogos y trabajadores encabezados
por Walter Alva hallaron la cámara funeraria intacta de un
señor moche. Se encontraban ante uno de los descubrimientos
más fascinantes e importantes de la arqueología mundial.

“Cumplir 25 años del descubrimiento del Señor de


Sipán significa haber recorrido un largo camino que empezó en
dramáticas circunstancias porque el monumento estaba siendo
saqueado por los profanadores de tumbas y porque el hecho
ocurrió en una época de crisis política, social y económica.
De eso se aprovechaban los traficantes de piezas arqueológicas
para promover el saqueo de nuestra riqueza cultural. Se
profanaron tumbas y se desató una iebre en el pueblo de Sipán
y nos vimos obligados a intervenir”, recuerda Alva, actual
director del Museo Tumbas Reales de Sipán.

Sostiene que su descubrimiento tuvo el mismo impacto que


ocurrió cuando se halló la tumba de Tutankamón en Egipto, a
comienzos del siglo XX. “Se generó una diná-mica que se
maniiesta en el mayor interés de estudiar la cultura mochica.
Marca una mayor atención de parte de la clase política hacia
esta tarea que apoyó más proyectos de investigación y también
en la comunidad que se interesa por su patrimonio”, apunta.

Luis Chero, director del Museo de Sitio Huaca Rajada-Sipán,


fue otro de los protagonistas de aquella historia. Recuerda
los momentos difíciles que vivieron cuando llegaron a la zona
arqueológica. “La plataforma funeraria había sido tomada por
los huaqueros y cuando ingresamos en el lugar recibimos muchas
amenazas de muerte y se temía que el doctor Alva sufriera
algún tipo de atentado. Contra todo eso se trabajó, y 25 años
después el resultado es que ahora tenemos 16 contextos
funerarios recuperados y restaurados”.

Los huaqueros estaban en Sipán desde diciembre de 1986 y


habían lotizado el lugar y excavaban todo el día. Incluso
llegaron a profanar la tumba. A mediados de febrero la Policía
intervino e hizo un operativo en las casas de los huaqueros e
incautó una serie de piezas, entre ellas dos caras felínicas,
caras antropomorfas y otros objetos de oro. En la madrugada
llamaron a Walter Alva y le pidieron que vaya de inmediato; el
arqueólogo jamás se imaginó lo que le esperaba. Fue grande su
impresión al ver las piezas de oro. “Esa misma mañana fuimos a
Huaca Rajada. Llegamos al sitio y vimos varias piezas
fragmentadas que habían sacado los huaqueros. Estaba
destruido. Comenzamos a ir interdiario y llegaron las
amenazas; nadie quería trabajar con nosotros. Gracias al apoyo
de la Policía pudimos trabajar permanentemente desde marzo y
en julio se produjo el descubrimiento”, precisa Chero.

El arqueólogo indica que existen dos etapas en el trabajo de


investigación en la zona. La primera empezó en 1987 y concluyó
en 2002 con la construcción del Museo Tumbas Reales de Sipán.
En este período se descubrieron, además del Señor de Sipán,
las tumbas del Viejo Señor, del Guerrero, del Sacerdote, del
Jefe Guerrero y de nobles.
La segunda etapa empezó en 2007 y continúa hasta la fecha, con
apoyo del Fondo Ítalo-Peruano y, luego, con la creación de la
Unidad Ejecutora 111-Naylamp, entidades que financian los
trabajos. En este

período se descubrieron los contextos funerarios del Sacerdote


Guerrero, tumba 14; el Joven Guerrero, tumba 15, y Guerrero
del Pututo, tumba 16.

INICIO DE UNA ETAPA


Walter Alva airma que se puede hablar de un antes y un después
de Sipán, porque a partir de su descubrimiento cambió el
concepto de arqueología en Perú, se le prestó más atención.
“Antes solo se tenían estudios que realizaban investigadores
extranjeros; eso ahora ha cambiado y se desarrollan proyectos
que tengan un impacto social”, reiere. Destaca también el
surgimiento de una identidad, en especial en Lambayeque. “La
población ha asumido con mucha fuerza que Sipán es un
testimonio de la grandeza de su pasado. Ahora se siente
orgullosa de saberse descendiente de una cultura que tuvo un
alto nivel de desarrollo”, agrega.

Chero resalta, por su parte, el creciente interés por estudiar


la cultura Mochica y el desarrollo de proyectos de
investigación en las huacas de La Luna, El Brujo, San José de
Moro y otros. “Todos estos estudios en conjunto hacen que esta
cultura sea mejor conocida”.

Los trabajos en el área de Sipán y en Lambayeque han permitido


demostrar una evolución en los enterramientos. Existe un mismo
sistema, pero a medida que pasa el tiempo los personajes
principales tienen más objetos de oro y de plata, se les da un
rango de señores. Igual sucede con las tumbas de los
sacerdotes, de los guerreros y de los personajes de la
nobleza.

Alva rescata el aporte de los mochicas en el desarrollo de la


ingeniería hidráulica. Precisa que fueron los que cambiaron el
paisaje de la Costa peruana. “Fueron ellos los que
desarrollaron la ingeniería hidráulica porque irrigaron el
desierto e incorporaron extensos terrenos como áreas de
cultivo. A partir de allí surgió la metalurgía”.

IMPACTO
“Se ha generado un sentimiento de identidad. Para Lambayeque,
es el ícono cultural, de su identidad y significa también la
revaloración de la autoestima de nuestra población. Ahora
ningún lambayecano deja de sentirse orgullo de ser
descendiente de la raza de los señores de Sipan”, recalca
Alva.

Sostiene que el hallazgo del Señor de Sipán generó una diná-


mica en la investigación arqueológica que impulsó y condujo a
la construcción de un museo propio como es el Tumbas Reales,
que recibe anualmente entre 140,000 y 160,000 visitantes.
“Desde su inauguración hasta la fecha ha recibido cerca de un
millón 700,000 turistas. En diez años es uno de los museos más
visitados de Perú y creo que es una demostración de que ha
sido un proyecto exitoso”.

En el aspecto académico, destaca que la arqueología peruana ha


entrado en una etapa de madurez y ahora tiene una presencia
importante en el mundo académico cientíico; inluye el hecho de
que esta ciencia pasó de ser teórica a una social, que trabaja
en beneicio de la población y que el resultado de sus
investigaciones impacta positivamente en la identidad de los
peruanos.

En el aspecto económico, Alva airma que se ha generado una


creciente actividad turística que no existió antes. Este
movimiento implica, además, la construcción de nuevos hoteles,
hostales y restaurantes, una mayor preocupación por mejorar la
infraestructura y servicios. También ha inluido en la
revaloración de la comida, de las costumbres.

Chero coincide con esto; sin embargo, sostiene que las


comunidades adyacentes a Huaca Rajada Sipán necesitan de mayor
inversión en infraestructura para rehabilitar sus pistas,
veredas, construir un parque, mejorar el servicio de agua, la
fachada de las viviendas, del colegio; ampliar la posta
médica. “Podría dárseles el aspecto de un pueblo moche”,
sugiere.

Lo que se halló en Sipán

Los arqueólogos Walter Alva, Susana Meneses y Luis Chero


integraron el equipo que descubrió la cámara funeraria de este
importante personaje moche. Primero encontraron un cuarto
sellado con objetos y ofrendas. En otro recinto de cinco
metros por lado apareció el esqueleto de un hombre joven. Era
un guardián al que le cortaron las extremidades inferiores
para representar al guardián de una tumba. Medio metro más
abajo aparecieron restos de vigas de algarrobo desintegradas.
Más adelante descubrieron un ataúd intacto y sellado.

Cuando llegaron a este lugar hallaron un rostro de oro en


miniatura. Era una orejera, luego encontraron una masa de
objetos inidenti?cables de cobre oxidado. Todo el proceso de
excavación demandó 8 meses. Finalmente, quedaron al
descubierto estandartes, orejeras, ornamentos, emblemas,
atuendos, tocados y otros objetos.

El Señor de Sipán, que era un esqueleto casi desintegrado,


tenía el rostro protegido por un cubrementón o yelmo de oro,
una simbólica nariz, una representación de la dentadura y una
suerte de máscara funeraria en la que se simbolizaban los
órganos de los sentidos; además, el cráneo reposaba en una
patena de oro.

Se hallaron también fragmentos textiles que revelaron la


existencia de una túnica decorada con placas metálicas, un
cetro de oro y plata que terminaba en un ?lo ceremonial para
sacrificios, un collar de frutos de maní, oro y plata, un
collar de 10 cabezas humanas y collares de cuentas de turquesa
y oro; una corona, sonajeros de oro y protectores coxales.

Fuente: El Peruano

Señor de Sipán,
descubrimiento que marco un
antes y un despues en
Lambayeque, Perú
El descubrimiento del
Señor de Sipán,
acontecido el 21 de julio
de 1987, marcó un antes y
un después en la historia
del departamento norteño
de Lambayeque en Perú,
sostuvo hoy Walter Alva,
director el equipo de
arqueólogos que dio
cuenta de dicho hallazgo.

“Era un tarde entre fría y cálida; Luis Chero y los


arqueólogos que estaban trabajando conmigo así como los
obreros habíamos pasado varios sucesos difíciles y estábamos
excavando lo que parecía una tumba importante de la cultura
mochica”, explicó.
Señaló que, en esas circunstancias, fue informado de que había
algo interesante y se acercó a la tumba y comenzó a levantar
un grumo de tierra que cubría parte de lo que parecía ser una
máscara.

“Siempre hago memoria de este instante (…) brotaba de esa


tierra una mirada y era exactamente una premonición, era el
rostro en miniatura de oro de la orejera que representaba al
mismo Señor de Sipán”, refirió.

“Fue un momento eterno


que jamás olvidaremos
quiénes estuvimos allí.
Este pequeño equipo de
arqueólogos, tratando de
rescatar del olvido a
uno de los hallazgos más
importantes de la
arqueología”, subrayó.

Dijo que no solo ha sido una experiencia científica sino


también humana “que ha dejado sus profundas huellas en quiénes
hemos estado involucrados en esta investigación.

Mencionó que a la fecha se han realizado 22 exposiciones de la


tumba del Señor de Sipán con piezas originales y 18
exposiciones con réplicas en 18 países del mundo.

Indicó que desde su inauguración, en 2002, el museo Tumbas


Reales recibió un millón 574,221 personas, entre los que
figuran personalidades del mundo científico, jefes de Estado,
autoridades eclesiásticas y delegaciones culturales de
diferentes países.

Alva expresó que la conmemoración de los 25 años del


descubrimiento es importante porque permite mirar en la
perspectiva del tiempo lo que ha significado este hecho: las
gestiones para la construcción del museo y el impacto en la
arqueología, la identidad y el desarrollo de Lambayeque.

“Yo creo que lo más importante es que Sipán ha pasado a


convertirse en el gran ícono de nuestra región y el Perú”,
declaró.

“Sipán generó un gran impacto académico, impulsó la


investigación arqueológica en el norte y un impacto en la
colectividad regional con el sustento de la identidad y por
supuesto un impacto económico al convertir a Lambayeque en uno
de los destinos turísticos más importantes del país”,
enfatizó.

Oro del Peru


Para los moches, la
araña ‘Argiope
argentata’ era símbolo
de fertilidad y de
anuncio de lluvias. Por
ello aparece en las
joyas del viejo Señor de
Sipán. (Foto: Pinterest)
Equipo. Walter Alva
encabezó el grupo
de especialistas y
trabajadores que
trabajaron durante
varios meses para
rescatar la cámara
funeraria.

Inauguran muestra de piezas


restauradas de tesoros del
Señor de Ucupe y son
exhibidos al público en museo
Tumbas Reales del Señor de
Sipán
La colección de piezas restauradas del fastuoso ajuar del
Señor de Ucupe, personaje de la élite mochica, son exhibidos
al público en el museo Tumbas Reales del departamento norteño
de Lambayeque, se informó hoy.
La muestra, inaugurada la noche del sábado 21 de julio, se
lleva a cabo con ocasión de los 25 años del descubrimiento del
Señor de Sipán.
El recinto cultural alberga 60 piezas elaboradas en cobre y
cobre dorado que fueron restauradas en su propio laboratorio.
Destaca, entre ellas, una máscara del alto dignatario moche,
junto con collares, pectorales y tocados.

Resalta, además, un collar de cobre dorado con una serie de


divinidades así como una nariguera de igual metal y máscaras
funerarias de incalculable valor.

“Esta exhibición funcionará como una importante renovación


museográfica del recinto cultural, presentando un
descubrimiento que también contribuye al conocimiento de la
cultura mochica”, sostuvo el director del museo, Walter Alva.

Recordó que la tumba de Señor de Ucupe fue descubierta en


julio de 2008, y se trata de un personaje (sacerdote guerrero)
que concentró la mayor cantidad de diademas y coronas halladas
hasta el momento en el país.

En esta tumba había 11 coronas-diademas, diez coronas, tres


narigueras, seis bastones de guerrero, dos escudos, tres
máscaras, así como varios collares.

Indicó que el Señor de Úcupe tendría al morir entre 25 a 38


años, y fue enterrado junto a una mujer de 15 a 25 años, que
tenía un feto de cinco meses.
Guerrero del Pututo de Sipán
vistió como un caballero
medieval y tendría parentesco
con el Señor de Sipán
El Guerrero del Pututo o Señor Guerrero, personaje principal
de la tumba Nº 16, vistió como un caballero medieval, pues
lució un traje en base a placas rectangulares de cobre y cobre
plateado, así como una máscara de metal, manifestó hoy el
director del museo de sitio Huaca Rajada-Sipán, Luis Chero
Zurita.
El investigador -junto al descubridor del Señor de Sipán,
Walter Alva, y el director de la Unidad Ejecutora Nº 005:
Naylamp-Lambayeque, Carlos Elera- presentó hoy oficialmente la
muestra de los ornamentos de mando del personaje de la élite
mochica que habitó entre los años 300 a 400 después de Cristo
y que tendría un parentesco con el Viejo Señor de Sipán.
Precisó que realizan trabajos en 3D para graficar la forma
cómo lució este personaje. “Debió lucir una máscara calada, el
vestido de placas con la iconografía de los guerreros
enfrentándose en la parte delantera y posterior, la que remata
en conos que debió ser una porra y la corona en “v” (…). Fue
un personaje muy impactante”, dijo.

Ornamento de
cobre hallado
en la tumba
del Guerrero
del Pututo.
La exhibición montada en el museo de sitio Huaca Rajada-Sipán
también consta de osamentas en una cripta que fue
confeccionada especialmente, tres coronas en forma de “V”,
cetro de mando, pectoral, una máscara con nariguera con
colgajos circulares y triangulares.

Asimismo, cuatro porras y la vestimenta, orejeras circulares,


una pinza con agarradera, entre otras piezas fabricadas en
cobre y cobre plateado.

Los visitantes podrán observar piezas de cerámica como


cuencos, cántaros y la representación escultórica de un maní
asa estribo con ligero reborde en el gollete. También dos
estólicas (lanzas) de madera y una de ellas reforzada con
anillos de cobre.

“Es el único personaje de las 16 tumbas excavadas a la fecha


en la plataforma funeraria de Sipán que tiene un strombus,
cerámica de cuerpo globular con cara gollete, que servía como
pututo”, destacó.

Chero indicó que las orejeras con colgados circulares tienen


mucho parecido con las que portaba el Viejo Señor de Sipán.
“Por ello pensamos que habría una relación entre ambos
personajes y de ser así sería su descendiente directo”, indicó
el investigador.

Mencionó que esto se comprobará a través de estudios de ADN al


personaje de la tumba 16, descubierto en la plataforma
funeraria y se ubica sobre el contexto funerario del Viejo
Señor y debajo del sacerdote guerrero y la tumba saqueada.

Orejeras del
Guerrero del
Pututo o
Señor
Guerrero.
“El personaje se asocia a las tumbas de los jefes guerreros:
guerrero guardián y guerrero músico, pero anterior a todos
ellos en sepultarse”, precisó.

Por su parte, Walter Alva destacó el descubrimiento de “una


parte del traje ritual donde aparecen dos guerreros
enfrentados, elementos que significan que este personaje fue
un importante jefe militar en la época mochica”.

Además, se halló una ofrenda de un pututo. “En las escenas que


nos traslada a la época mochica se ven desfiles suntuosos
donde participan señores, sacerdotes y jefes militares,
algunos de los cuales llevan y tocan la trompeta. Esta es
probablemente su función dentro de las cortes de los reyes de
Sipán”, explicó.

Resaltó la importancia de este descubrimiento, pues es una


pieza más dentro la estructura social y política en Sipán.

En la tumba
Nº 16,
correspondien
te al Señor
Guerrero, se
halló un
pututo como
ofrenda.

A su turno, Carlos Elera dijo que esta exposición se suma al


conocimiento de toda la secuencia de entierros, clave para
entender las estructuras del poder sociopolítico en Lambayeque
prehispánico, durante el desarrollo cultural moche.

“En particular, este contexto funerario del Señor Guerrero


aporta nuevos datos sobre las prácticas mortuorias y la
concepción que se tenía del mundo en aquella época”,
sentenció.
Importante pieza arqueológica
de la Tumba del Señor de
Sipan es recuperada en EE.UU.
y devuelta a Perú.
Pieza Moche
recuperada

Perú recuperó una pieza arqueológica perteneciente a la


cultura Moche, que fue sustraída ilegalmente durante la década
de los noventa como consecuencia del saqueo del entorno
arqueológico de la tumba del Señor de Sipán, ubicada en
Lambayeque.

La pieza, de características únicas, elaborada en oro macizo,


representa a un mono y refleja el alto nivel de sofisticación
metalúrgica alcanzado por la cultura Moche entre los años 200
y 800 de nuestra era.

La llamada “Cabeza de Mono Dorada” era un ornamento


característico de los collares usados por las más altas
autoridades del antiguo Perú.

“Esta pieza ha sido admirada por miles de visitantes mientras


estuvo en exhibición en el Palacio de los Gobernadores, en
Nuevo México, pero creo que la historia que la sustenta va a
ser más legible cuando se ponga en el contexto de la cultura y
el entorno que le dio origen”, dijo Frances Levine, directora
del Museo de Historia de Nuevo México, durante la ceremonia de
repatriación llevada a cabo en la sede de la embajada del Perú
en Washington DC.

En setiembre de 1998, el FBI abrió una investigación sobre el


probable ingreso ilícito de la pieza a los EE.UU., la cual se
mantuvo en exhibición en el Museo “Palacio de Los
Gobernadores” en Santa Fe, Nuevo México, como parte de la
colección privada del ciudadano estadounidense John Bourne,
desde mayo de 1998 hasta julio de 2008.

El FBI mantuvo la pieza bajo incautación provisional en el


mismo Museo durante este período.

Antecedentes

El Gobierno peruano solicitó al Museo la repatriación de la


pieza el 21 de noviembre de 1998, luego que el Dr. Walter
Alva, Director del Museo de Tumbas Reales de Sipán, realizara
un peritaje in situ de la pieza para verificar su origen. Y en
2011, el embajador del Perú dirigió una carta al Fiscal
General de los EE.UU, Eric Holder, solicitando la asistencia
del Departamento de Justicia para la repatriación de la Cabeza
de Mono Moche al Perú, en el marco del Memorándum de
Entendimiento de 1997 entre el Gobierno de los EE.UU y el
Gobierno del Perú sobre la Imposición de Restricciones para
las Importaciones de Material Arqueológico de las Culturas
Prehispánicas y Cierto Material Etnológico del Período
Colonial del Perú.

Pieza histórica

“El Perú celebra la repatriación de esta pieza, que es parte


de su memoria histórica, y desde hoy la ofrece al mundo entero
para propiciar la admiración universal de un período de su
historia donde floreció el arte metalúrgico de los antiguos
peruanos de la cultura Moche”, dijo el embajador del Perú en
Estados Unidos, Harold Forsyth.

Gracias a la intervención solicitada al Departamento de


Justicia por parte de la Cancillería peruana, en el presente
año se logró acordar un Memorándum de Entendimiento entre el
Gobierno del Perú y el Museo “Palacio de los Gobernadores” de
Nuevo México para el retorno voluntario de la Cabeza de Mono
Moche.

Fuente : RPP

Restauran segundo par de


brazaletes del Señor de Sipán
Un equipo de restauradores lambayecanos, encabezados por
Segundo Gonzales Rumiche y asesorados por el investigador
Walter Alva, consiguió una verdadera hazaña. Logró concretar
una tarea con la que no pudieron, ni siquiera, reconocidos
expertos en Alemania: recuperar en su integridad el segundo
par de brazaletes de oro hallado en la imponente tumba del
Señor de Sipán en 1987.

La pieza, que fue presentada ayer en Lambayeque, estuvo


guardada por partes durante más de veinte años.

La historia es la siguiente: luego de analizar fotografías


tomadas hace 24 años en la tumba del gobernante mochica, los
especialistas del laboratorio de restauración del Museo Tumbas
Reales de Sipán se dieron cuenta de que entre la arena
consolidada con insumos químicos había dos pares de barras
delgadas de oro de 18 kilates, así como miles de cuentas del
mismo metal. También diminutas turquesas, conchas Spondylus y
piedras preciosas en miniatura de color lila, conocidas como
godatas.

Entonces no se tenía claro qué pieza formaban todos estos


elementos, por lo que Rumiche se dio la tarea de estudiar la
iconografía mochica, especialmente las escenas en las que
aparecen personajes del más alto rango usando brazaletes con
diseños de triángulos escalonados de diversos colores.

Armándose de mucha paciencia, el restaurador chiclayano se dio


cuenta de que tenía que armar un rompecabezas con unas 10.000
cuentas (de 1,5 mm y 2,5 mm) de metales y piedras.

A decir de Walter Alva, luego de tres meses se logró


recientemente el armado final del par de brazaletes que en
vida usó el Señor de Sipán. Estos han sido considerados más
complejos, de mayor valor, calidad artística y extraordinaria
belleza, que los que actualmente exhibe el gobernante mochica
en el Museo Tumbas Reales de Sipán.

Alva también informó que las joyas serán incorporadas a las


exposiciones de ese recinto.

En julio de 1987 se dio a conocer la tumba del Señor de Sipán,


hasta hoy uno de los hallazgos arqueológicos más importantes
en la historia del país.

Fuente: El Comercio

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