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Conferencia del 3 de noviembre Independencia de

Cuenca.

Desde 1795 hubo el deseo popular de conseguir la libertad para Cuenca. Con el
fin de obtenerla se hicieron dos intentos, pero ambos fracasaron, hasta que el 3
de noviembre de 1820, hubo un levantamiento, influenciado por los sucesos
ocurridos con la gesta del 9 de octubre de 1820 (independencia de Guayaquil).
Los jóvenes cuencanos y en general el pueblo, tomaron la decisión de
independizarse.
Al conocer la gloriosa jornada guayaquileña del 9 de octubre de 1820; cuencanos
encabezados por Tomás Ordóñez, José Sevilla y el clérigo Juan María Ormaza,
el 3 de noviembre enfrentaron a las autoridades españolas y proclamaron su
libertad.

Los amotinados se replegaron a la Plaza de San Sebastián; el jefe militar leal a


España, García Trelles se atrincheró y aseguró la plaza principal de la ciudad;
los patriotas y el pueblo, mal armados flanquearon por el norte y se situaron en
el punto de El Vecino, esperando recibir refuerzos de otros pueblos.

El cura Javier Loyola, dirigiendo a los patriotas de su parroquia, ayudó en esta


tarea, logrando aislar la ciudad. García Trelles, presionado por los ciudadanos,
rindió las armas. Lamentablemente, la libertad para Cuenca duró muy poco, pues
el 20 de diciembre de 1820, el Crnel. González, luego de vencer a los patriotas
guayaquileños en la primera Batalla de Huachi, venció también a los cuencanos
en Verdeloma.
El levantamiento se dio a pretexto de un bando, en el que el escribano debía dar
lectura de un texto legal acompañado de la guarnición militar. Este sería el
momento propicio para que los jóvenes asalten y desarmen a esa guarnición, y
con las armas en la mano, proclamen la independencia.

Las autoridades sospechaban que algo iba a ocurrir, y no pusieron a toda la


guarnición en la calle. Mantuvieron a la mayor parte el personal militar con sus
armas en el cuartel. De todas maneras los jóvenes cumplieron lo planificado.

Pero los militares reaccionaron y los jóvenes tuvieron que replegarse hasta la
plaza de San Sebastián. Intentaron tomarse la plaza principal -no lo pudieron por
la presencia militar- bajaron al barrio del vecino, ahí en la tarde y en la noche
hubo mucha tensión: los militares estaban acosandoles.
Al día siguiente el 4 de noviembre las fuerzas estaban indecisas, hasta que llegó
desde Chuquipata el cura Francisco Javier Loyola, con un refuerzo popular
armado de picas, palos, lanzas, piedras, esto hace que los militares se rindan.

Es ahí cuando se produjo el repliegue de los dos españoles y se funda la


República de Cuenca por parte de los patriotas, que duraría solamente hasta el
20 de diciembre de 1820, fecha en la que se diera la gran batalla entre patriotas
y fuerzas españolas, a las órdenes de Aymerich y comandadas por el coronel
español Francisco González en la localidad de Verdeloma, cerca de Biblián. El
ejército de los patriotas comandado por Vázquez de Noboa es derrotado. Cuenca
vuelve a caer en el poder de los españoles.
Al enterarse Sucre de lo que sucedía, se dirige a la ciudad para rescatarla del
poder español, y el 20 de febrero de 1822 se halla cerca a la entrada de la ciudad
de Cuenca. Los españoles, temerosos abandonan la ciudad después de
saquearla, y es así que al día siguiente, el 21 de Febrero de 1822, el General
entra victorioso a la ciudad seguido de 22.000 personas que formaron su ejercito,
logrando por segunda y definitiva ocasión la Independencia de Cuenca.

Luego de esta gesta heroica el ejército de Sucre parte de Cuenca hacia Quito,
rumbo al Pichincha, en donde el 24 de mayo alcanza la libertad para la Patria
con la Batalla de Pichincha.

Realizado por Nicolás Toledo.


3ro B.G.U “A”

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