Você está na página 1de 2

LA PRESCRIPCIÓN EN MATERIA TRIBUTARIA

Según el artículo 2.492º del Código Civil: La prescripción es un modo de


adquirir las cosas ajenas, o de extinguir las acciones y derechos ajenos, por
haberse poseído las cosas o no haberse ejercido dichas acciones y derechos
durante cierto lapso de tiempo, y concurriendo los demás requisitos legales.
Una acción o derecho se dice prescribir cuando se extingue por la prescripción.

En el ámbito tributario la prescripción se traduce, principalmente, en una de las


formas de extinción de derechos y obligaciones tributarias. Tal como dispone
el artículo 69.3 de la Ley 58/2003, de 17 de diciembre, General Tributaria (en
adelante, LGT), la prescripción ganada comporta la extinción de la deuda
tributaria.

En Derecho tributario la prescripción se aplica de oficio incluso en los casos en


los que se haya pagado la deuda tributaria, sin perjuicio de que el particular
pueda invocarla cuando lo estime pertinente.

El plazo común de prescripción se ha establecido en cuatro años (art. 66 LGT).

En cuanto a la extensión de la prescripción, la prescripción ganada aprovecha


por igual a todos los obligados al pago de la misma, incluidos los responsables,
salvo si la obligación es mancomunada y solo se reclama a uno de los
obligados tributarios la parte que le corresponde. En este caso las deudas se
reputan distintas para cada deudor de modo que la prescripción, sus causas de
interrupción y sus efectos operan de forma autónoma respecto de cada deudor.

El artículo 44º del Código Tributario establece la oportunidad a partir de la cual


se inicia el cómputo del término prescriptorio. En este sentido, en el caso de
tributos de periodicidad anual (por ejemplo, en el caso de Impuesto a la renta,
ITAN o Impuesto predial), el término prescriptorio se computa desde el uno (1)
de enero del año siguiente a la fecha en que vence el plazo para la
presentación de la declaración anual respectiva.
Asimismo, en el caso de tributos que deban ser determinados por el deudor
tributario no comprendidos en el inciso anterior, el término prescriptorio se inicia
desde el uno (1) de enero siguiente a la fecha en que la obligación sea exigible.

Éste es el caso, por ejemplo, del Impuesto General a las Ventas. También, en
el caso de infracciones, la prescripción se inicia desde el uno (1) de enero
siguiente a la fecha en que se cometió la infracción o, cuando no sea posible
establecerla, a la fecha en que la Administración Tributaria detectó la
infracción. Por último, respecto de los pagos indebidos o en exceso efectuados
por el deudor tributario, el término de prescripción se inicia desde el uno (1) de
enero siguiente a la fecha en que nace el crédito por tributos cuya devolución
se tiene derecho a solicitar.

En conclusión el artículo 43º del Código Tributario señala que la acción de la


Administración Tributaria para determinar la obligación tributaria, así como la
acción para exigir su pago y aplicar sanciones prescribe a los cuatro (4) años, y
a los seis (6) años para quienes no hayan presentado la declaración respectiva.

Esta norma precisa que dichas acciones prescriben a los diez (10) años
cuando el Agente de retención o percepción no ha pagado el tributo retenido o
percibido. Esto se aplica en el caso de retenciones de cuarta categoría,
retenciones de quinta categoría, retenciones de tercera categoría, retención del
Impuesto a la renta de no domiciliados y Sistema Nacional de Pensiones.

Así también el artículo 43 nos señala que se puede efectuar la compensación


así como solicitar la devolución prescrita en los 4 años.

Você também pode gostar