En una reunión de accionistas de Sureste’s New Foods S.A. sus propietarios
comentan como SNF es el resultado de la unión de diferentes empresas y de distintas formas de entender la administración de empresas. Según Violeta Vélez, aunque estamos en el siglo XXI todavía se mantienen en algunas organizaciones prácticas administrativas que se remontan a principios de siglo XX, lo que no quiere decir que no sean efectivas. Entre todos se han puesto recordar como se trabajaba en algunas de las empresas antes de la fusión.
María aún se acuerda de cómo en su laboratorio lo importante era el equipo de
trabajo y no el empleado aislado. De hecho, las tareas se encomendaban a un grupo concreto, compuesto por 3 o 4 trabajadores, que debían analizar la composición y calidad de los productos alimenticios que fabricaban los clientes. Cada trabajador del grupo sabía qué debían hacer sus compañeros, de hecho rotaban en sus actividades para que ninguno estuviese todo el día haciendo lo mismo. A cada grupo se le pedía un número mínimo de análisis al mes pero los propios integrantes de los grupos eran consultados a la hora de fijar el cupo. Cada grupo era responsable de los análisis realizados puesto que en el informe que se entregaba a los clientes se indicaba el código del equipo que lo había efectuado.
Por su parte, Juan y Felipe recuerdan que aunque en su empresa de conservas
vegetales el número de trabajadores no era muy grande ellos establecieron una rígida jerarquía. En su opinión, lo mejor para que la empresa funcionase de forma eficiente era que todos tuviesen muy claro cuáles eran sus obligaciones y sus derechos. Para ello habían desarrollado un amplio conjunto de normas y reglas (reunidas en un manual que entregaban a cada nuevo empleado). Para cualquier actividad existía un protocolo de actuación y nada se dejaba a la improvisación. Cada trabajador sabía perfectamente qué tenía que hacer y cuándo debía hacerlo. De esta forma, se habían ganado la confianza de sus clientes ya que nunca se retrasaban en ningún pedido. Violeta y Amalio, al hacer memoria, recuerdan cómo en su fábrica de envases de vidrio el objetivo era fabricar un gran volumen de envases a bajo costo para tratar de competir con las otras compañías del sector. Para ello, trataron de alcanzar una gran eficiencia, mecanizando las instalaciones y descomponiendo las tareas de fabricación en sus elementos mínimos. Se trataba de que los empleados efectuasen de forma reiterativa la misma tarea, centrándose sólo en una parte concreta del proceso de elaboración del envase. Esta parte incompleta pasaba a manos de otro trabajador quien contribuía con otra operación y así sucesivamente hasta terminar los envases. La empresa contaba con ingenieros industriales que analizaban cada puesto de trabajo y que a través de estudios cuidadosos de tiempos y movimientos pretendían mejorar los pasos que cada trabajador realizaba. Toda la información sobre la producción de la fábrica era controlada por un ordenador que, basándose en los criterios establecidos por la alta dirección, establecía los niveles de inventarios necesarios, formulaba pedidos, etc.
¡Vaya!, ¡cuántas formas de distintas de administrar una empresa y todas pueden
dar buenos resultados! Piensa Cecilio, que nunca antes había estado implicado en la dirección de una empresa.
A la vista de estas experiencias:
1. Identifique qué enfoque administrativo se sigue en cada una de las empresas
explicadas. 2. ¿Qué aspectos positivos se pueden alcanzar en cada empresa con el enfoque aplicado? 3. ¿Qué consecuencias negativas pueden producirse en cada empresa con el enfoque aplicado? 4. ¿Qué enfoque administrativo sería adecuado para gestionar la nueva empresa SNF en el actual clima económico?