CONVENIO DE RÓTTERDAM SOBRE EL CONSENTIMIENTO FUNDAMENTADO
PREVIO APLICABLE A CIERTOS PLAGUICDAS Y PRODUCTOS QUÍMICOS
PELIGROSOS OBJETO DE COMERCIO INTERNACIONAL
El Convenio de Rótterdam tiene como objetivo principal fomentar el
denominado “Consentimiento Fundamentado Previo (CFP)” que significa que los Países Parte de este Convenio se comprometen a realizar un procedimiento de notificación previo al intercambio comercial de plaguicidas y productos químicos peligrosos, con cualquier otro país que igualmente sea firmante del Convenio.
El contar con este consentimiento fundamentado previo establece una
primera línea de defensa y prevención, al permitir a los países importadores los medios y la información que necesitan para reconocer peligros potenciales y excluir productos químicos que no puedan manejar en forma segura, permite a los Estados contar con un comercio internacional en materia de sustancias peligrosas, informado y responsable y ayuda a los países en desarrollo a tomar medidas nacionales científicas y normativas sobre el uso, manejo y comercio de ciertos productos químicos peligrosos, a fin de proteger la salud humana y el medio ambiente frente a posibles daños,
A partir de este conocimiento previo, si un país consiente la importación de
productos químicos, el Convenio promueve la utilización sin riesgos del mismo mediante normas de etiquetado, asistencia técnica y intercambio de información, de tecnología y de cooperación.
Este intercambio en el marco del Convenio de Rótterdam sobre el
“consentimiento fundamentado previo” se aplica a los productos químicos prohibidos o restringidos, y a las preparaciones de plaguicidas extremadamente peligrosas enlistados en el Anexo III del Convenio, mismas que fueron analizadas por los países miembro y que de acuerdo a la peligrosidad de las mismas así como a las decisiones nacionales de la mayoría de los países de prohibir su uso, producción y comercialización, se decidió que formarían parte del Anexo III. Actualmente hay más de 30 productos químicos a los que se aplica el procedimiento PIC.
Debido a la importancia que tiene la salud humana y el medio ambiente en
los temas que se discuten al interior del Convenio de Rótterdam, la participación de la COFEPRIS se centra en
Emisión de comentarios técnicos a los documentos del Convenio y
participación en las negociaciones internacionales; Coordinar con las áreas involucradas de la COFEPRIS las obligaciones adquiridas, como son las notificaciones de importación de sustancias contenidas en el anexo III y en cumplimiento del artículo 12 del Convenio, Evaluación de obligaciones derivadas del Convenio; y La Comisión trabaja conjuntamente con la Dirección General de Relaciones Internacionales, con la intención de articular la posición política de la Secretaría de Salud Cubre anualmente la cuota al presupuesto operacional del Convenio. Esta próxima a celebrarse la 4ta Conferencia de las Partes, (septiembre- octubre, 2008) la Conferencia de las Partes es rectora de los grupos de trabajo y de los temas que regirán las discusiones. Para este año se prevén los siguientes temas relevantes: - Sinergias entre Convenios Internacionales en materia de sustancias químicas (Rótterdam, Estocolmo y Basilea - La inclusión al Anexo III de la sustancias peligrosas - Planes Nacionales de Implementación del Convenio
Finalmente es importante tener en cuenta que el Convenio de Rótterdam
brinda la posibilidad de contar con un comercio mas responsable de sustancias peligrosas y al mismo tiempo proteger a la población de riesgos ocasionados por un mal comercio de las mismas. El contar con representación en este foro nos permite conocer normatividades de otros países y al mismo tiempo hacer del conocimiento internacional las leyes que rigen a México para el comercio de sustancias peligrosas, así mismo es un excelente mecanismo de prevención, protección y asistencia contra cualquier intento inadecuado de comercio en México.
PALABRAS CLAVE: Convenio de Rótterdam, CFP, PIC, Anexo III del Convenio, Consentimiento Fundamentado Previo