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El revenido es un tratamiento térmico que se aplica a los aceros endurecidos para reducir su

fragilidad, incrementar su ductibilidad y tenacidad y aliviar los esfuerzos en la estructura de la


martensita. El tratamiento de revenido consiste en calentar el acero después de normalizado o
templado, entre la temperatura ambiente y la de transformación Ac1 (aprox. 730 ºC ) , seguido
de un enfriamiento controlado en aceite o agua.

El objetivo del revenido es disminuir la elevada fragilidad producida por el temple anterior, así
como proporcionar a los aceros una cierta tenacidad, a la vez que se eliminan o disminuyen las
tensiones producidas por el temple. Generalmente se puede decir que, con la temperatura
ascendente de revenido, aumentan la elasticidad y alargamiento y disminuyen la resistencia y la
dureza (a excepción de los aceros rápidos).

El efecto del revenido depende de la aleación del acero, del temple, del espesor de la pieza y del
tratamiento aplicado. El efecto del revenido es más fuerte para piezas de acero poco aleado, de
dimensiones delgadas y de mayor contenido en carbono.

El revenido se aplica exclusivamente a los metales templados y es, por lo tanto, un tratamiento
complementario del temple.
Entre más alta sea la temperatura de revenido, menor será entonces la dureza y de tal forma
será más tenaz el acero.

Tipos de aleaciones a la cual se le puede someter el tratamiento térmico del revenido.

La Martensita es el constituyente típico de los aceros templados. Se trata de una solución


intersticial sobresaturada de carbono en Fe α. Se obtiene enfriando rápidamente en la zona
austenítica. Cristaliza en la red tetragonal centrada en el cuerpo. Es el constituyente más duro
del acero después de la cementita.
La Martensita se obtiene de la siguiente forma:

Durante el temple, que es un proceso de calentamiento de una pieza de acero a una


temperatura dentro o arriba de su zona critica, procediendo luego a un enfriamiento rápido las
placas de martensita que se van formando rodean y aíslan pequeños depósitos de austenita que
se deforman para acomodar la martensita de menor densidad esta austenita queda atrapada en
la estructura como austenita retenida, la cual puede resultar un problema grave el cual se
soluciona con un primer o segundo revenido.

Esta al enfriarse rápidamente la superficie del acero se transforma en martensita. Cuando la


austenita del centro se transforma, este se comprime y la superficie queda en tensión; si los
esfuerzos residuales sobrepasan el límite elástico se forma grietas de templado en la superficie.
Para evitar esto se realiza un templado posterior que permite que se transforme en martensita
casi al mismo tiempo este se conoce como templado arriba de M, como se muestra a
continuación

Esta imagen representa la formación de grietas de templado que han sido causadas por los
esfuerzos residuales que ha dejado el templado, seguido del siguiente diagrama, que muestra el
tratamiento por templado arriba de M, que se ha diseñado para reducir estos esfuerzos
residuales y las mencionadas grietas de templado.
La posibilidad de templar un acero viene determinada por dos factores:

- Su templabilidad:

Capacidad de un acero para el temple, es decir, es la facilidad de formar martensita en un acero


luego de templarlo a partir de la condición austenitica. La templabilidad no debe de confundirse
con la dureza, la templabilidad de un acero es principalmente una función de su composición y
tamaño de grano. La transformación completa de austenita en martensita sólo se consigue con
velocidades de enfriamiento muy elevadas.

- La velocidad de enfriamiento.

El temple del acero nunca constituye un tratamiento final debido a que la estructura
martensítica obtenida, pese a ser muy dura, es al mismo a tiempo muy frágil. Por este motivo,
una vez templado el acero, se le somete a tratamiento térmico de revenido con objeto de
obtener una estructura más dúctil y tenaz. Los efectos de este tratamiento dependen de la
temperatura y del tiempo de duración del proceso. El tratamiento completo de temple más
revenido recibe el nombre de Bonificado.
El bonificado es un tratamiento adecuado para aceros aleados o aquellos con un alto contenido
en carbono.

Para el acero de carbono simple, el acero es austenitizado primero y luego se templa a una
velocidad rápida para producir martensita y evitar así la transformación de la austenita en
ferrita y cementita.

Después, el acero se vuelve a calentar a una temperatura por debajo de la temperatura


eutectoide para reblandecer la martensita al transformarla en una estructura de partículas de
carburo de hierro en una matriz de ferrita.

La martensita es una estructura metaestable y se descompone al recalentarla. En las


martensitas de listón de aceros al carbono simples con bajo contenido de carbono hay una alta
densidad de dislocación las cuales proveen sitios de más baja energía para átomos de carbono.
Por tanto, cuando los aceros martensítico bajos en carbono se revienen por primera vez en el
rango de 20 a 200°, los átomos de carbono se segregan para ir a esos sitios de más baja energía.

Los aceros que tienen más de 0.2 % de carbono, la principal forma de redistribución del carbono
a temperaturas de revenido por debajo de 200°C es la agrupación por precipitación.
A más de 200°C aproximadamente, la dureza disminuye poco a poco a medida que la
temperatura se eleva hasta 700°C. Esta disminución gradual de la dureza de la martensita con el
aumento de la temperatura se debe sobre todo a la difusión de los átomos de carbono que
salen a sus sitios en la red intersticial, sometidos a esfuerzos, para formar precipitados de
carburo de hierro en una segunda fase.

En este proceso, deberá tomarse cierta consideración tanto en el tiempo como en la


temperatura.
Aunque la mayor parte de la acción de suavización ocurre a los pocos minutos después de
alcanzar la temperatura hay una reducción adicional en la dureza si la temperatura se mantiene
por un tiempo prolongado.

La práctica común es calentar el acero a la temperatura deseada y mantenerlo así solamente lo


suficiente para calentarlo uniformemente.

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