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Temuco, a veinticinco de septiembre de dos mil ocho.

VISTOS:
Se ha elevado esta causa en apelación interpuesta a fs. 65 por don Marco Antonio Quintas
Garrido en contra de la sentencia dictada el 13 de diciembre de 2006 por el Juez Tributario
don Octavio Sepúlveda Becker de fs. 61 a 64 de autos; a fin que sea revocada, basado en:
1.-La liquidación fue practicada fuera del término legal establecido en el articulo 200 del
Código Tributario. 2.-Si bien la sentencia fue suscrita por el Director Regional, todo el
proceso fue llevado por una persona que actuó como juez tributario en virtud de delegación
de facultades. Siendo actualmente inaplicable por inconstitucional el articulo 116 del Código
citado, por lo que procede anular el fallo. 3.- Asimismo, no es aplicable la norma del artículo
64 de texto indicado, pues no se trata de la enajenación de inmuebles, sino que de acciones
y derechos que recaen sobre un inmueble.
CON LO RELACIONADO Y CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que, esta Ilma. Corte ya ha expuesto en otras causas, con las variaciones del
caso que se exponen los argumentos que se dirán. Que la competencia del Director
Regional del Servicio de Impuestos Internos para conocer de estas reclamaciones deriva de
los artículos 6 letra B N° 6 y 115 del Código Tributario, de acuerdo a los cuales corresponde
a este funcionario conocer en primera o en única instancia, según proceda, de las
reclamaciones deducidas por los contribuyentes y de las denuncias por infracción a las
disposiciones tributarias, salvo que se haya establecido expresamente una regla diversa.
SEGUNDO: Que la intervención de doña Viviana Herrera Morales como Juez Tributario,
se han fundado en la delegación de funciones realizada por el Director Regional del Servicio
de Impuestos Internos para obrar "por orden del Director Regional", en conformidad a lo
dispuesto en el artículo 116 del Código Tributario. Lo que es claramente ratificado a fs. 59 de
autos, donde el Director regional, reconoce la situación y asume él la tramitación para dictar
sentencia.
TERCERO: Que, al resolver una reclamación de un contribuyente la autoridad del Servicio
de Impuestos Internos ejerce una función jurisdiccional, ya que concurren las exigencias
señaladas por Couture en sus "Fundamentos de Derecho Procesal Civil", cuales son: la
forma (procedimiento, parte y juez) el contenido (controversia con relevancia jurídica y
petición procesal concreta) y la función (asegurar la paz social por medio de decisiones
justas y eventualmente coercibles).
CUARTO: Que así las cosas, se debe indicar que toda la tramitación de la causa esto es,
desde 9 de noviembre de 2005 a hasta 31 de julio de 2006 (fs. 27 a fs. 58) fue tramitada por
la juez delegada Viviana Herrera Morales. Asimismo el Director Regional(s) que dictó la
sentencia fue Octavio Sepúlveda Becker. Juez que aparece suscribiendo como jefe del
departamento de fiscalización la liquidación N° 430, de fs. 22 y la petición en la misma
calidad, de tasación comercial a fs. 34. Luego, como se aprecia, el proceso ha sido
tramitada, en sus actos además esenciales, (investigación, prueba) por una persona diversa
a la designada por la Ley para este objeto. Además no puede el mismo Tribunal, ser juez y
parte. Es decir, como es caso de Octavio Sepúlveda Becker – ya explicado-. El proceso para
que se le denomine como tal, tiene que ser, desde el principio con todas las garantías o sino
deriva en otro ser jurídico, pero no un debido proceso. En esta línea, es sabido que sólo el
legislador a través de una Ley Orgánica Constitucional puede crear tribunales, por lo que la
delegación de funciones hecha por el Director Regional del Servicio de Impuestos Internos a
la juez tributario doña Viviana Herrera Morales, y el hecho que el Sentenciador Octavio
Sepúlveda Becker aparezca como jefe del departamento de Fiscalización produciendo
prueba, claramente infringe el principio del debido proceso.
QUINTO: Que los argumentos expuestos precedentemente se encuentra reafirmados con el
mérito de la sentencia dictada por el Tribunal Constitucional de fecha veintiséis de marzo de
dos mil siete, publicada en el Diario Oficial con fecha veintinueve de marzo del presente por
la que se resuelve que el artículo 116 del Código Tributario es inconstitucional
considerándose derogado por efecto de la aplicación del articulo 94 inciso 3° de la
Constitución Política de la Republica. Ratificado además por pronunciamiento del mismo
Tribunal a fs. 93 de autos.
SEXTO: Que la causa tramitada de la forma explicada, esto es, por una persona que no
tiene la calidad de juez y por un juez que crea su propia prueba, adolece de nulidad de
derecho público al contravenir lo dispuesto en los artículos 6, 7 inciso 2° y 76 de la
Constitución Política de la República. Si bien el artículo 140 del Código Tributario establece
que no procede la anulación de oficio de la sentencia de primera instancia,
correspondiéndole a la Corte de Apelaciones corregir los vicios de la misma, en el caso
sublite se ha afectado la existencia misma de la relación procesal, la eficacia y validez
de todo el procedimiento, al haber sido tramitada por y ante un juez diverso al señalado por
la ley, y por un juez que crea su propia prueba, por lo que el vicio es de tal magnitud, que
no admite corrección, pues el estándar del debido proceso no puede ser afectado o mitigado.
Por estas consideraciones y preceptos legales citados, SE INVALIDA DE
OFICIO la sentencia de fecha trece de diciembre de dos mil seis escrita de fojas 61 a 64 y
todo lo obrado en los autos, retrotrayéndose la causa al estado que el juez tributario que
corresponda y, legalmente investido, provea lo pertinente para dar curso a la reclamación de
fojas 1 y siguientes y continúe con la tramitación del proceso hasta la dictación de la
sentencia definitiva.
Atendido lo resuelto, no se emite pronunciamiento sobre el recurso de apelación interpuesto
a fojas 65 y concedido a fojas 66 de autos.
Regístrese y devuélvase.
Redactor Sr. Ministro don Álvaro Mesa Latorre
Rol N° 276-2007

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