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EL SANTÍSSIMO SANTORAL
CATÓLICVS, VIDAS Y
EXEMPLOS QUE AVRIRÁN
LAS MENTES Y LAS
ALMAS DE LOS QUE VIBEN
EN LA OSBCURIDAD
Año 1520
El Verdadero Santuario Católico 3
Pero la que a mí más me gustara fue la biografía que hace de San Valentín, el
santo de los enamorados.
Allí explica o relata que al terminar una última carta a su amada, la hija ciega del
carcelero o el verdugo que le decapitó con filosa hacha, puso la frase “De tu
Valentín”, lo que con el correr de los años se transformó en “Día de San Valentín”
que festeja la iglesia católica el 14 de febrero de cada año hasta éstos actuales
tiempos con besos y regalitos a las personas que uno quiere y aprecia.
Por otro lado, amado lector, te cuento que ya terminé “El Viaje Extraordinario” y
“El Gran Circo Infantil”, que son muy entretenidos pero extensos, y no hay otro
modo de hacértelos llegar que en libros que ya se están imprimiendo.
Arturo Beresi
El Recopilador
El Verdadero Santuario Católico 5
“No me mueve otro motivo al escribir éste santísimo santuario católico, hecho de
burlas y deshecho de veras, que el ofender, insultar y desenmascarar a través del
ridículo y la ironía las tonterías y fábulas que enseña la Santa Iglesia Católica a la
que pertenezco o pertenecía, que a más años, me traen más desengaños, supuesta
heredera de los apóstoles, única y verdadera, cuyos papas y prelados parecieran
trabajar para el mismísimo demonio, o serlo, pues constantemente crean e
inventan devociones y vidas de santos tan fantasiosas e ilusas, que me cuesta creer
que alguien las crea. Esto, las fantasías y las fábulas, llevará al catolicismo a su
propia destrucción en no mucho tiempo más, pues no se debe reemplazar al Señor
Jesús por María ni por santo alguno al que se le brinde veneración o idolatría, y
traerá un cisma tan grave en Roma que papas y elevados dignatarios, de confusos
y desorientados, abandonarán su magisterio y se volverán a las iglesias en las que
el Señor Jesús sea el único y suficiente Salvador y sólo a Él se venere y adore.
Por esta traición del catolicismo de abandonar a Jesús y reemplazarlo por su
madre o por infinitos santos, las sectas cristianas, protestantes y evangélicas se
multiplicarán cada día más, esparciendo la Palabra simple y llana de la Biblia, sin
fábulas ni cuentitos píos que ensalzan a simples hombres, y predicando al Señor
Jesús, resguardándolo de engañosas apariciones del demonio, con tal énfasis, que
llegará el tiempo en que Dios solo estará presente en los templos de las infinitas
sectas cristianas, palpable y milagroso por sentirse a gusto, lejos de las fastuosas
iglesias del catolicismo donde nunca lo tuvieron en cuenta, olvidado entre una
maraña de falsas teorías.
Llegará el día que en un reducido y humilde templo cristiano habrá miles de
fieles a Jesús, y en las fastuosas iglesias católicas sólo bancos vacíos.
Llegará el día en que nadie querrá ser sacerdote católico y los seminarios
desiertos se transformarán en hoteles de alojamiento que medrarán más rápido
ganancias a las iglesias locales.
Llegará el día que los que sufran la injusta ley del celibato, violarán a niños
constantemente, y cometerán asquerosos abusos en niñas, y serán escondidos por el
papa en lejanas tierras donde no les alcance el brazo de la ley. Las sectas cristianas
sin duda ofrecen algo más valioso que las hostias y que los católicos abandonaron:
el ser salvos por la fe puesta en Cristo Nuestro Señor, antes que recurrir a las
bendiciones del papa o al confesionario de un sacerdote tan pecador como el reo.
6 El Verdadero Santuario Católico
Dentro de estas fantasías y quimeras que enseñan como bíblicas, hechas para
desmerecer el poder salvífico de la fe puesta en Jesús, hay santos salvadores para
todos los gustos católicos, marianos y papales: hay quienes vuelan como pájaros,
otros que flotan sobre cúpulas de iglesias, otros que muertos despiden perfumes de
flores por un milenio, quienes decapitados y muertos sus cuerpos, vivieron por tres
días sus cabezas cercenadas; santas que no fornicaron jamás por noventa años
continuos, verdadero milagro, y que viajando a pie por valles y campiñas
durmiendo en graneros, moteles y lupanares, murieron por la fe romana tan
vírgenes como sus madres las parieran; otros, la mayoría, santos que sangran de
manos y pies a imitación del Señor por opacar su grandeza; santas arábigas que
por abrazar al papa y al catolicismo, abandonaron al Alá musulmán, y por ello
fueron decapitadas por su propio progenitor, castigo bien merecido por cierto;
otros que con una simple cruz, o con sus mantos o sandalias detuvieron erupciones
de volcanes o grandes inundaciones; quienes domesticaron leones o lobos
hambrientos con solo hablarles de la autoridad del papa sobre la tierra y darles
una estúpida hostia que no es ni pan ni sangre, o darles vírgenes que reinan en el
cielo; santos para la música, para el dolor de muelas, santos que abrieron en dos la
tierra para que cayeran los enemigos infieles, sanadores de orzuelos o diarreas,
patronos de los horneritos, de los toreros, de los ciegos y hasta santos protectores de
los ladrones. Hay santas que después de ser decapitadas, se fueron caminando
tranquilamente llevando su propia cabeza entre las manos cincuenta kilómetros.
Hay santos que de tan buenos chuparon el asqueroso pus de los leprosos, por
aliviarlos de tan terribles dolores. Hay santos que de tan flacos parecen esqueletos
transparentes y uno de ellos es San La Muerte, y su versión femenina es la Santa
Muerte, el primero muy venerado en el Chaco argentino y la segunda en México,
donde a una calavera se la viste de blanco o de negro, adornado con infinitas
cruces, pelucas, guantes y guadañas, y va por delante de una larga procesión
católica.
¡Tan repulsivo es para Dios y para el buen cristiano la veneración a esqueletos y
huesos putrefactos!
Créase o no, a eso lleva la veneración de los malditos santos, agregada a la
ignorancia supina del vulgo que no lee ni le interesa lo ordenado en la Biblia, y
andan a ciegas entre ellos sin distinguir quién es bueno o malo, quien santo o
quien demonio, porque unos y otros otorgan verdaderos milagros.
Por ir detrás de éstas estupideces, el vulgo abandona la correcta adoración a Dios
y la fe que debe poner en Jesús.
Y verdaderamente creen más en éstas tonterías que en los Evangelios, y
curiosamente no les parece que Jonás viviera tres días en el vientre de una
ballena, y tienen por más cierto y verdadero que una estatua de madera de la
virgen María lagrimee gotas de sangre sobre sus mejillas, o sangren sus manos, vil
engaño al que recurren los sacerdotes para llenar sus templos de tontos fieles y de
los dineros que les quitan.
El Verdadero Santuario Católico 7
Van rodeados por la multitud, la música de los txistus, tamboriles y gaitas, los
gigantes y cabezudos, y los zaldik (hombres a caballo).
La fiesta continúa en las calles, plazas y bares, en espera del primer encierro y
corrida taurina, que se celebran los siete días en que dura el evento.
Todos ellos, hombres y toros, aguardan que suene el estallido del “chupinazo”, un
gran cohete que provoca el júbilo y la alegría entre los asistentes.
A las ocho de la mañana del día 7 se escucha el primer cohete que anuncia el
comienzo de la fiesta y la salida de los bravos toros del corral.
Cientos de nerviosos pamplonicas comienzan a correr por las calles cercadas de
Pamplona, un recorrido que tiene casi nueve cuadras hasta la plaza de toros.
Los mozos, ataviados con camisas y pantalones blancos y pañuelos rojos en la
cintura y el cuello, corren y conducen por delante a los toros, a primera hora de la
mañana, desde el Corral del Gas a la plaza, donde se lidiarán por la tarde.
Es una carrera infernal y frenética que suele durar entre cuatro y ocho minutos y
en la que, a veces, se producen momentos escalofriantes debido a las caídas de los
mozos, con el consiguiente riesgo de cornadas y pisadas de los toros.
Con suerte, cada año muere solamente un pamplonica, o dos.
Hasta la actualidad, la suelta de los toros produjo más de treinta muertes, siendo la
primera registrada en 1924, (no hay datos anteriores) cuando un joven fue
atravesado en el estómago por las astas de un toro que sacóle las tripas al aire, y
que el escritor Ernest Hemingway relata el hecho en su libro “Fiesta”:
A pesar de ello, Amiens y Pamplona siguen rindiendo culto a este santo y miles de
personas en el mundo han oído hablar de él gracias a las fiestas de san Fermín.
San Fermín es también el santo patrono de los horneros, sin que se sepa ni
remotamente el porqué, aunque algunos quieren insinuar que fue por la forma en
que quedó su culo al ser ensartado por la verga del toro, muy similar a la puertita
ovalada y retorcida que fabrica éste pajarito para su casita de barro.
El famoso escritor estadounidense Hernest Hemingway, premio nobel en 1946,
conocido borracho y camorrero, autor de “El viejo y el mar”, gustaba de asistir a las
celebraciones de san Fermín, lo que le inspiró a escribir “Sangre y Arena”, cuyo
argumento se llevó al cine interpretado por el actor Tyrone Power, ocupando
aquéllos famosos escenarios naturales de los ruedos españoles.
El 14 de julio, después de la corrida, los mozos se dirigen al Ayuntamiento para
anudar en su reja el pañuelo rojo que han lucido en el cuello durante todos los días
de la fiesta.
Cansados y tristes cantan:
“Pobre de mí, pobre de mí, se han acabao las fiestas de san Fermí…”
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14 El Verdadero Santuario Católico
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18 El Verdadero Santuario Católico
Yo mismo, Martín Lutero, que saqué del convento y del catolicismo a la monja
clarisa que sería después mi esposa, convirtiéndola en verdadera cristiana,
cogiendo tupido, solo pudimos engendrar seis hijos.1
Su hermana gemela Giovanna murió recién nacida.
Ese dato, junto al que sus hermanos le llamaban Eufrosina, son muy importantes,
importantísimos, para la redacción de su biografía, pero nadie sabría ni
remotamente el porqué, porque nunca más se la vuelve a mencionar con ese
nombre ni a Giovanna.
Al año siguiente, durante la epidemia de peste negra que asoló Europa, su madre
tuvo el último parto que no prosperó.
Otro dato vital. ¡Un parto fallido vale más que un millón de documentos!
¿Quién se tomaría el trabajo de asentar en su biografía un parto que no
prosperara de su madre? ¿Para qué?
Catalina no tuvo una educación formal; desde temprana edad mostró su gusto por
la soledad y la oración, y siendo niña todavía, a la edad de siete años, se consagró a
la mortificación e hizo voto de castidad.
A los doce años sus inadvertidos padres comenzaron a hacer planes de matrimonio
para Catalina, pero ella reaccionó rapándose la cabeza y vendiendo todo su
cabello al peluquero, cuyos dineros repartió entre los pobres para después
encerrarse en su cuarto con un velo sobre su cabeza.
Con el objetivo de persuadirla, sus padres la obligaron a realizar fatigosas tareas
domésticas, y sin embargo, Catalina se encerró más en sí misma, aún más
convencida de que antes de lavar platos debía seguir al Señor.
Sólo un evento inusual, una paloma que se posó en la cabeza de Catalina mientras
oraba, convenció a Jacobo de la sincera vocación de su hija.
Sin duda fue un milagro portentoso, tomado del mismo Jesús, cuando fuera
bautizado en el Jordán por el bautista Juan.
A los dieciocho años tomó el hábito de la Orden Tercera de los dominicos.
Se sometía al cilicio y a prolongados períodos de ayuno, sólo alimentada por la
Eucaristía.
Parece que fue santa Catalina de Siena la que difundió y comenzó a la
mortificación del silicio en la versión actual, cuyo uso no produce grandes
molestias y es llevadero, como confirma la experiencia de siglos por todo tipo de
personas.
Se llama así porque la materia provenía especialmente de Cilicia: un vestido de
piel de cabra o de camello que, al contacto con la piel producía pinchazones, y era
un instrumento de penitencia. Un ejemplo entre muchos es el del Canciller de
Inglaterra, santo Tomás Moro, que usó el cilicio de joven hasta su muerte, con lo
cual quizá ganó el cielo sin la fe puesta en Jesús...
1 Primera mención que hace el sacerdote Martín Lutero que da indicios de ser el verdadero
autor de este libro.
20 El Verdadero Santuario Católico
En esta primera fase de su vida, estas prácticas eran llevadas a cabo en solitario,
sin que nadie lo supiera, y de hecho nadie sabe si fuera cierto hasta ahora.
Lo que se afirma sin pruebas, bien puede ser negado sin ellas.
Aunque analfabeta, como gran parte de las mujeres y muchos hombres de su
tiempo, dictó un maravilloso libro titulado Diálogo de la Divina Providencia,
donde recoge las experiencias místicas por ella vividas y donde se enseñan los
caminos para hallar la salvación. En la iglesia católica hay mil caminos de
salvación, menos el de la fe puesta solamente en el Señor Jesús.
Sus trescientas setenta y cinco cartas son consideradas una obra clásica, de gran
profundidad teológica. No se sabe a quién las dictara.
Expresa los pensamientos con vigorosas y originales imágenes.
Se la considera una de las mujeres más ilustres de la edad media, maestra también
en el uso de la lengua italiana.
Es probable que aprendiera a leer a temprana edad, aunque no pudo escribir
hasta que llegó a ser adulta, o quizá escribiera sin saber leer de niña o de adulta,
porque en estas historias de santas o santos, nada es confiable pero si factible.
A los 16 años ingresó en la Tercera Orden de Santo Domingo en su ciudad natal, o
sea la Orden de Predicadores, donde se destacó por su disposición a la
contemplación y por su entrega a los pobres.
Siendo algo fea, se contemplaba todo el santo día frente a un espejo y pobre con el
que se encontraba, pobre al que se entregaba de alma y cuerpo.
Muy pronto comenzó a dictar cartas sobre temas espirituales que le
proporcionaron todavía más admiración ya que no sabía escribir, siendo una
prueba evidente que eran inspiradas por Dios, por semejarla a los profetas
bíblicos, o quizá era tan haragana que no gustaba ni siquiera levantar una
lapicera, lo que también podría ser.
No en balde se puso en su biografía que sabía leer, pero no escribir, o al revés.
Lo que sí se sabe, o no, es que ella dictaba sus escritos a un amanuense.
O quizá quiso asemejar a Juan Milton, el celebrado autor inglés de “El Paraíso
Perdido” que siendo ciego de nacimiento, dictó su obra a una secretaria de punta a
rabo en varios años de trabajo conjunto.
En 1366, Santa Catalina experimentó lo que se denominaba un “matrimonio
místico” con Jesús.
Cuando ella estaba orando en su habitación, se le apareció una visión de Cristo,
acompañado por su madre y un cortejo celestial.
Tomando la mano de santa Catalina, Nuestra Señora la llevó hasta Cristo, quien le
colocó un anillo y la desposó consigo, manifestando que en ese momento ella
estaba sustentada por una fe que podría superar todas las tentaciones.
Para Catalina, el anillo estaba siempre visible, aunque era invisible para los
demás.
¡Oh, si las mentiras fueran visibles como los anillos, de cuántos males nos
libraríamos!
El Verdadero Santuario Católico 21
Esta hermosa y dulce visión da una idea cabal del embrollo que tenía en su
cabeza, y que aun los sicólogos más refutados del mundo no pueden desentrañar
en concordancia, pues unos dicen que estaba totalmente loca y otros medio
pirada.
En 1374 Raymond de Capua, futuro rector general de la orden domínica, se
calentó por ella y se convirtió en su director espiritual y amante, y quedó desde
entonces asociado de forma estrecha a todas sus actividades.
O sea, cogían todos los días estrechamente, con mucha actividad.
El iluso matrimonio con Jesús duró muy poco por culpa del maldito adulterio real
y palpable.
En 1376 viajó a Aviñón para intervenir ante el papa Gregorio XI en nombre de
Florencia, ciudad entonces en guerra con el pontificado.
Por aquélla época los pueblos católicos no sabían bien si el papa era superior a
Dios o Dios mismo, igual que ahora, ya que tenía las facultades de ser infalible y
lavador de los pecados de los hombres a cambio de dineros, y algunos aceptaban
la teoría de la infalibilidad papal que ni por asomo existe en la Biblia, y otros lo
rechazaban violentamente aun yendo a parar a la hoguera de la Santísima
Inquisición de su propia iglesia.
Hoy sí ya se sabe que el papa es superior a Dios, y más lame el pueblo su culo antes
que las sandalias del Pescador de almas.
Antes que existieran los protestantes la iglesia católica se dividió violentamente
en papistas y antipapistas, como también más tarde vendrían los trinitarios y los
anti-trinitarios, y luego los que creyeron en la fábula de la ascensión de la virgen
a los cielos y los que se reían de tamaña tontería.
¿Y Jesús? Por ahí anda, acarreando su cruz…
En la actualidad, muchos católicos continúan ignorando al papa, reemplazándola
por María señora del cielo y de la tierra, sin tener la fuerza y la voluntad para
desechar de cuajo tamañas estupideces y elegir y aceptar al Único y Suficiente
Salvador Jesús el Hijo de Dios.
Catalina, muy preocupada por aquél cisma de Occidente que estalló en 1378,
viajó a Roma en noviembre de ése año para promover el apoyo hacia el papa
Urbano VI y buscar la unidad católica.
Si hoy viviera, aún la estaría buscando entre los viejos sacerdotes y los jóvenes
carismáticos que independientes del yugo del papa están llevando a la iglesia
católica al borde del precipicio, por las fantasiosas modernidades que introducen
por cuenta propia en los cultos de la misa y en sus dogmas.
La aceptación del matrimonio igualitario, por ejemplo, el fin del celibato de los
curas, dar la hostia a los matrimonios separados, permitir el aborto, etc.
La ruptura entre Florencia y Roma se produjo por diferencias doctrinales y, sobre
todo, porque los obispos de iglesias ortodoxas se negaron a aceptar al obispo de
Roma, es decir al papa, como suprema autoridad de todos los cristianos.
22 El Verdadero Santuario Católico
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24 El Verdadero Santuario Católico
Papa Formoso
(Santo y mártir)
A Esteban VII lo había precedido Bonifacio VI, un hijo de obispo que reinó doce
días y murió de gota.
Este papa Esteban, hijo de un sacerdote (en aquélla época los clérigos podían
casarse), tenía un odio ancestral contra el finado papa Formoso por haber
cambiado el obispado de Porto por el de Roma.
En represalia, lo primero que hizo fue anular todas las disposiciones efectuadas
durante su pontificado y ordenó que su cuerpo fuera exhumado aunque ya
llevaba nueve meses muerto, para ser juzgado en el famoso “sínodo del cadáver”
en el que lo revistió de sus ornamentos pontificios, lo sentó en la silla de Pedro, lo
juzgó por tres días y lo condenó por "ambición desmedida de papado".
Le arrancaron las vestiduras papales, aunque se le dejo el cilicio que llevaba
puesto (un instrumento de auto martirio, como un látigo con pinchos), lo vistieron
con harapos, le cortaron tres dedos de la mano derecha para que se curara del
vicio de bendecir, lo arrastraron por las calles entre risotadas y burlas, lo volvieron
a enterrar (ahora en una cueva), lo volvieron a desenterrar, lo desnudaron, y así,
desnudo, mutilado, vejado y putrefacto lo tiraron al Tíber para alegría de todos los
hambrientos pececillos, aunque ya poco de carne quedaba del Santo Padre.
El papa Esteban, además, acabó el concilio enfurecido, porque mientras gritaba e
insultaba al fétido cadáver, este no hacía nada para defenderse, sino que
sabiamente se quedaba callado escuchando, que si llegara hablar huirían del
susto todos los que lo juzgaban.
No puede haber justicia para el vencido, si el que lo juzga es su vencedor.
Su cuerpo fue enterrado en la fosa común de extranjeros, pero, no contento con
ello, Esteban ordenó sacarlo de ahí y arrojar sus restos al rio Tíber.
Se hundieron los restos de Formoso en las aguas del Tíber para que desapareciesen
de la faz de la tierra, pero los huesos se enredaron en las redes de un pescador, que
los extrajo de las aguas y los escondió.
El pueblo romano al conocer los hechos prendió a Esteban VI en el palacio
Laterano, y en el mismo día fue depuesto y asesinado por estrangulamiento, el 14
de agosto de 897.
Y lo sucedió el papa Romano, hermano del papa Marino I y ambos hijos de cura.
No hay entre los hombres ni entre los animales, ni aún en los santos, la abstinencia
sexual de la que hace gala el catolicismo, y ya en aquéllos tiempos a los clérigos
les gustaba fornicar en los ratos libres, igual que ahora, y eran muy dados a las
relaciones carnales más palpables y positivas que las idílicas que supuestamente
guardan con María.
Este desmedido amor fantasioso visible que llevan en el corazón hacia la “madre
de Dios”, sin provecho para ganar el cielo, sin agregar ni quitar nada para ser
salvos, los lleva en la actualidad a ser pajeros u homosexuales, y en la mayoría de
los casos violadores o abusadores.
A Romano, que reinó tres meses y murió en forma sospechosa, lo sucedió Teodoro
II, que murió igual, a los veinte días de su pontificado.
26 El Verdadero Santuario Católico
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El Verdadero Santuario Católico 27
Santa Inés:
(Virgen hasta donde se sabe)
Como el joven tenía el ticket 393, serie B, y ya había gastado todo su sueldo en
beber vinos y cañas en la barra, no quiso conformarse con venir mañana que le
proponía la regente, quien le aseguraba que se respetaría su número y al día
siguiente entraría en primer lugar. El joven, ardiendo de furia y medio borracho,
penetró por la fuerza al cuarto de Inés y la abrazó impúdicamente y acarició sus
partes íntimas sin el permiso de la santa, y ¡oh, milagro!, justo cuando le acariciaba
las tetas para calentarla, en el mismo instante perdió la visión quedando más ciego
que un murciélago.
-¿Quién apagó la luz?- gritaba el joven atropellando los muebles del miserable
cuartucho, yendo a meter el pie en una palangana con agua sucia que santa Inés
ocupaba para lavarse la concha después de cada polvo, por no encargar hijos
santos, ya que aún no se habían inventado los actuales preservativos.
Dice la tradición que el joven ciego al ser de pie grande, quedó éste trancado y
atascado dentro de la palangana sin que hubiera plomero ni deshollinador que
pudiera quitárselo. Tres días después, internados en el hospital la palangana y él,
recuperó nuevamente la vista gracias a las oraciones de santa Inés que en el
quincho, arrodillada en el suelo y en éxtasis espiritual, mientras mamaba las
vergas de otros clientes, elevaba oraciones piadosamente a Dios pidiéndole
fervientemente por la salud del que había dejado ciego y empalanganado.
Pregunto yo: ¿para qué se internó el joven en un hospital si estaba solamente ciego
y no herido? ¿No le hubiera sido mejor comprar un bastón blanco o un perro
lazarillo que lo guiara? ¡Milagro! Ella lo dejó ciego y ella lo sanó y además como
por milagro la palangana atascada se desprendió de sus pies.
Las santas y santos católicos a veces son tan díscolos como los demonios, ya que
hoy pueden darte un ramo de rosas y mañana una ceguera total o una patada en
el culo. Son tan traviesos que pueden darte hoy una de cal y mañana otra de
cemento sin decirte ¡agua va! Más tarde, Inés fue condenada a muerte, y, cuando
iba a ser decapitada, el verdugo intentó que abjurase, a lo que ella respondió:
Fue entonces puesta en una hoguera que no la quemó pues las llamas se apagaban
antes de tocar su cuerpo, que ya relaté antes, y luego decapitada en año 304 DC.,
y enterrada luego en la Vía Nomentana, en una catacumba a la que se le puso su
nombre, aunque podría ser en la vía Appia, en la vía Láctea, o bajo las vías de un
tren, y raro sería además que le pusieran a la tumba el nombre de otra santa.
Hoy en día hay infinitas tumbas de santa Inés dispersas por el mundo, todas
verdaderas y originales, que recaudan cuantiosas donaciones y objetos de oro y
plata por los milagros concedidos.
30 El Verdadero Santuario Católico
Milagro sería más bien que estas fortunas fueran a parar a los pobres antes que al
riquísimo Vaticano. Todo es posible viniendo de la Sagrada Tradición Católica.
Dicen que el verdugo lloraba cuando tuvo que decapitarla con su filosa hacha al
ver la pureza y la fidelidad de la santa para con su esposo el Señor.
En las actas, escrito está:
Pocos días después de su muerte, su mejor amiga y hermana de leche, una chica de
su edad llamada Emerenciana, rezando junto a la tumba de Inés, fue sacada a
patadas por los soldados de guardia. Furiosa, Emerenciana los mandó a la puta
que los parió e increpó a los soldados romanos por matar a su amiga, y fue muerta a
pedradas, pasando a ser una nueva santa católica con la calidad de mártir.
Hacia el año 350 se construyó una iglesia sobre la tumba de Inés.
En el arte, se la suele representar con un cordero blanco mamando de su teta
símbolo de inocencia y de las mamadas de infinitas guascas por las que tuvo que
pasar estando en el lupanar. El 21 de enero, el día tradicional de su fiesta, se
bendicen dos corderos en su iglesia de Roma, y con la lana se tejen unas bandas
blancas, que el papa coloca sobre los hombros a los arzobispos como un símbolo de
su potestad. Con las finas tripas del animal, rosáceas y transparentes, se hacen
infinitos condones que el santo vicario hasta hoy reparte en un sobrecito entre los
más cojudos sacerdotes de la grey, cansado ya de pagar juicios perdidos por culpa
de las violaciones que éstos cometen a jovencitas dejándolas embarazadas en sus
respectivas diócesis. La iglesia católica, gracias a María y a santa Inés, se
moderniza día a día para evitar los juicios de sus degenerados sacerdotes.
Santo, santo es el Demonio, que puso en manos de los ingeniosos curas estas fábulas
estúpidas que disuelven y ennegrecen los divinos Evangelios de la Palabra, para
que todos se pierdan, y ninguno se salve.
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El Verdadero Santuario Católico 31
Santa Cecilia
(Mártir cristiana, patrona de los músicos)
Valeriano tuvo una fugaz visión de un ángel totalmente desnudo, con la verga
arrastrando por el suelo, que le sonreía pícaramente, del que tuvo sospechas le
tomaba el pelo. Sintió grande celo, e infinitas sospechas de ser guampudo desde
antes, pero creyó en ella, después de lo cual Cecilia lo envió junto a la tercera
piedra miliaria de la vía Apia, donde debía encontrarse con el papa Urbano I.
Yo quiero saber, a fuerza de ser meticuloso, quién escuchó y escribió el anterior
diálogo entre Cecilia y Valeriano, donde ella le dice que un ángel guardaba su
virginidad. ¿Tenían un apuntador o un escriba al lado? ¿Existían los grabadores?
En fin, ella quedó a solas con el pijudo ángel, que dijo: “por fin solos, mi amada
Cecilia”.
Valeriano obedeció de mala gana y fue al encuentro de Urbano, el papa lo
bautizó y Valeriano regresó como cristiano ante Cecilia.
Entonces el ángel pijudo los coronó como esposos con rosas y azucenas.
Cuando Tiburcio, el hermano de Valeriano, se acercó a ellos, también fue
convertido al cristianismo y a partir de entonces vivió con ellos en la misma casa,
en completa pureza.
Algunos quieren insinuar malignamente que Cecilia tenía tres esposos o amantes
en la misma cama, a saber: Valeriano, Tiburcio y el ángel pijudo, pero eran simples
habladurías. ¡Cómo murmuraba la gente de aquélla época! Hoy ya no es así.
Es peor. Pero, no todo fue felicidad para Cecilia.
Vendrían días de angustias y desgracias en su futuro.
En una gira por Europa, llegando a una gran ciudad pagana llamada Roma para
cantar ante el papa, por negarse a inclinar el cuerpo ante los dioses de la música
san Rodrigo y santa Gilda, cantantes fallecidos en accidentes de tránsito, fueron
martirizados ambos esposos con las más crueles torturas.
A su amado esposo, con cruel saña, le cortaron su descomunal picho con un
cuchillo Tramontina desafilado y herrumbrado, que todavía se conserva intacto
en los Museos del Vaticano. Digo el cuchillo, porque el picho sus verdugos dieron
a una jauría hambrienta compuesta de veintiséis perros que salieron hartos y
satisfechos con un pedazo de diez centímetros de tripa cada uno.
Valeriano, en su celda, muy deprimido rogó a su santo personal el Gauchito Gil
por la pérdida de su guasca, que le consoló desde el cielo diciéndole que para
coger aún le quedaba la lengua. Al día siguiente, le cortaron la lengua.
Volvió a pedir consuelo, y el santo milagroso volvió a consolarlo diciéndole que
para coger, ocupara los dedos. Al día siguiente, le cortaron las dos manos.
Sin atreverse a volver a pedir consuelos al Gauchito Gil, a quien lo tuvo de ahí en
adelante por el más falluto santo milagroso que batía a sus torturadores qué partes
de su cuerpo debían cercenarle, pasó a ser devoto de otro gaucho milagroso, el
Gaucho Lega, pero apenas por pocas horas, ya que viendo que mejor vida es morir
que vivir muerto, a causa de un fuerte resfrío que se complicó con una brutal
pulmonía sin que pudiera sonarse las narices con un pañuelo al carecer de ambas
manos, se dejó morir deprimido y decepcionado.
El Verdadero Santuario Católico 33
¡Epa! ¿Cómo su cabeza falta del cuerpo y sin brazos daba dineros a los pobres?
Dictar su testamento puede ser, pero nunca dar dinero a los pobres, a menos que
escupiera las monedas por la boca.
Sin embargo, cuando ya se estaba curando y recuperando el color rosado de sus
mejillas, murió de inanición, pues por más comida que le dieran por la boca,
siempre tenía un feroz hambre que no se saciaba, ya que el resto de su cuerpo
estaba enterrado lejos de donde estaba su cabeza, y darle de comer era como
echar todo a un saco roto, o como acarrear agua en una cesta de mimbre, como
quien dice. Ningún alimento le aprovechaba.
Su cuerpo murió decapitado y su cabeza murió de hambre, o sea que bien puede
decirse que la santa tuvo dos horribles muertes.
En el año 821 sus restos fueron enterrados en una cripta de la iglesia de Santa
Cecilia en Roma, que si la enterraran en otra cripta de otra santa, sería un
despropósito y una boludez inadmisible.
Pero, ¿cómo supieron que era el cuerpo de ella después de seiscientos años?
¿Le hicieron el ADN? ¿Reconstruyeron su perfil sicológico?
Muy simple, papanatas: porque entre miles de esqueletos enteros, el de Cecilia no
tenía cabeza, las que sí había a montones y de las cuales tomaron una al azar.
Años más tarde, ya que la tradición y la leyenda dicen que su canto hablaba de
Dios en su corazón, se hizo conocida como la patrona de la música.
Los poetas ingleses Geoffrey Chaucer, John Dryden y Alexander Pope la han
celebrado en su literatura, y ha sido tema de numerosas obras pictóricas, desde
Schedel, Francesco Francia, Ambrosio Benson hasta Artemisa Gentleschi, grandes
pintores del medioevo. El conjunto “Penas y Olvido” del paraje Pancho Cué de
Santo Tomé, Ctes., que dirigió Doldre Lemos cuando era joven, antes que le diera
el derrame que lo dejó medio ladeado, compuso un chamamé en honor a la santa,
con la colaboración de Carlos Talavera, que si Dios quiere y el Diablo lo permite,
llevarán a sus autores a pudrirse eternamente en el infierno.
Su fiesta se conmemora el 22 de noviembre, Día de la Música.
El papa Urbano I la enterró en la catacumba del papa Calixto I (155-222), donde
se sepultaban a los obispos y los confesores. No se sabe por qué.
En realidad no se sabe nada de santa Cecilia, pero la fábula creada en torno a ella
es sin duda amorosa y tierna.
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El Verdadero Santuario Católico 35
Santa Casilda
(Santa y virgen española de origen musulmán)
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38 El Verdadero Santuario Católico
¿Se imaginan Uds. a la virgen hablando en idioma indígena, ella que era
auténtica judía y solo conocía el arameo que hablaba Jesús?
¿Se la imaginan hablando en quichua, toba o guaraní?
¿No le fuera más fácil, siendo una diosa milagrosa, hacer que el indio entendiera
el arameo o el castellano para hacer su pedido?
Va pues el indio con la misión encomendada corriendo y desesperado como fraile
franciscano invitado a comer un asado, hasta el pueblo que quedaba a unos diez
kilómetros de distancia, pero el obispo lo echó a patadas de su iglesia sin creer en
nada de lo que manifestaba, diciéndole que trajese alguna prueba de la aparición,
ya sea una foto o un papel firmado por la virgen detallando su pedido.
Vuelve el indio pelotudo a donde encontrara a la virgen y se repite el mismo
diálogo y pedido, y por segunda vez retorna con su mandado ante el obispo pajero
que no creyó mucho en su palabra, y vuelve a ser echado a patadas por el prelado,
que quería dormir la siesta.
A la tercera ocasión, ya que no hay dos sin tres como quien dice, vio el rotoso indio
que la colina estaba florecida de rosas, aunque hasta ayer era un páramo
inhóspito y lleno de yuyos, y siendo mediados de diciembre, es decir invierno por
aquéllas zonas donde se mueren hasta las gramíneas de frío, recogió por orden de
nuestra señora unas cuantas de ellas, y las envolvió en su capa de maguey, que son
ésos mantos colorinches que los mexicanos se atan con un gran nudo sobre uno de
los hombros.
La señora le dijo:
-Lleva estas rosas al obispo y dile de parte mía que no sea tan pajero, si no
quiere ser olvidado para siempre sin figurar como santo o beato detrás de los
almanaques.-
Fue el indio a toda puta por tercera vez hasta la iglesia del pueblo para concretar
el mandado, y llegando a la iglesia golpeó insistentemente la aldaba de la puerta
hasta que saliera el obispo, y cuando abrió la tilma o manto a los pies de éste para
mostrarle las rosas, ¡milagro! apareció en la prenda la imagen estampada de la
virgen con cara de india, cual si fuera una firma que atestiguaba la legitimidad
del pedido de una basílica en su honor en la colina.
¡Oh, milagro! ¡Recontra mil milagro!
La tradición católica, más creíble que la Biblia, dice sin dudar que cuando Juan
Diego quiso mostrar al obispo las hermosas flores envueltas en su capa durante
aquél helado invierno, se apareció pintada milagrosamente en su roñosa prenda
la imagen inmaculada de la virgen de nuestra señora de Guadalupe, llamada así
más tarde por los españoles.
En realidad, ella se le apareció al indio san Juan Diego cuatro veces, entre el 9 y el
12 de diciembre de 1531, en diferentes lugares sobre el cerro Tepeyac, los días que
hiciera el mandado y el de su regreso triunfal para avisarle que el obispo
Zumárraga accedía a su pedido.
40 El Verdadero Santuario Católico
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42 El Verdadero Santuario Católico
Santa Bárbara
(Mártir Explosiva)
Ella se rebeló contra su padre, diciendo que elegía al papa y a María como sus
únicos y verdaderos padres.
Ante tamaña rebelión, su padre se enfadó un poco, queriendo matarla en honor a
sus dioses paganos.
Por eso, Bárbara huyó y se refugió en una cueva que milagrosamente se abrió en
una peña, exclusivamente para su guarida.
Mientras Santa Bárbara huía perseguida, supuestamente corrió a través de un
campo de trigo recién sembrado, que creció al instante detrás de sus pasos para
cubrir, como por arte de magia, las huellas que iba dejando. ¡Já, já, já!
El trigo creció unos dos metros ocultándola de sus perseguidores.
Actualmente este milagro se recrea simbólicamente sembrando semillas de trigo
(o garbanzos, granos de cebada, habas, lentejas, etc.) en un vaso de vidrio con
algodón en la festividad de Santa Bárbara.
Las semillas germinan y sus brotes se usan para adornar el pesebre, y
generalmente se los coloca debajo del árbol de Navidad donde crecen hasta cerca
de 15 centímetros, a tiempo para las fiestas de fin de año.
Esto, el milagro del germinador, lo hacía yo cuando iba al primer año de la
secundaria, en las clases de botánica, pero en los alumnos no era milagro, sino que
el milagro era eximirse en la materia con tamaña tontería.
Atrapada pese al crecimiento del trigo, no del germinador sino del crecimiento de
las plantas que dejaba tras su paso, fue capturada y llevada encadenada ante el
gobernador.
Su martirio fue el mismo que el de San Vicente: fue atada a un potro, flagelada,
desgarrada con rastrillos de hierro, colocada en un lecho de trozos de vidrios y
cerámica cortantes y quemada con hierros candentes.
Nada de éstas tonterías infantiles pudieron hacerla retractar de ser ferviente
mariana y acérrima católica.
-¡Viva el papa, la virgen María y la puta madre que los parió!- gritaba a sus
verdugos.
Finalmente, el mismo rey Dióscoro la envió al tribunal, donde el juez dictó la pena
capital por decapitación.
Su mismo padre fue quien la decapitó en la cima de una montaña, tras lo cual un
rayo le cayó en la cabeza, dándole muerte a él también.
¡Qué tal las cosas que hacen creer los curas a los tontos fieles católicos!
Antes de perder la suya, el padre, sin una pizca de piedad, decapitó a su hija, y una
vez cumplida la terrible sentencia, cayó fulminado por un rayo, saliéndole fuegos
y olorosos pedos, relámpagos y truenos por el ojete, aún y a pesar de que era un día
de radiante sol y alegría para el pueblo.
Este es el motivo por el que se asocia a santa Bárbara con los rayos y se la adora y
reza durante las tormentas.
44 El Verdadero Santuario Católico
Yo mismo, sacerdote Martín Lutero,2 cuando tenía al papa por Dios y a María por
diosa, antes de abandonar el catolicismo, arrojé desde las altas torres de mi iglesia,
cientos de infelices protestantes que se hacían papillas en el suelo.
Dios me perdone.
El Señor me ordenó salir de tan despótica iglesia, y ahora lucho y me esfuerzo para
proclamarlo como único y suficiente Salvador de todo aquél que deposite su fe
solamente en Él.
La imagen de santa Bárbara también aparece a veces asociada a tonterías
imposibles de creer:
Con una granada en sus manos, que representa el poder de los explosivos
que en Hiroshima dejara 160 mil muertos en segundos, y de los cuales
ella es su santa protectora. De los explosivos digo, no de los muertos.
Con una rama de olivo entre sus manos, que representa su martirio. En la
antigüedad era una rama de ortiga para expresar su dolor, pero hoy se la
reemplazó por el olivo.
2 Segunda mención que hace el sacerdote Martín Lutero que confirma ser el autor de este
libro.
46 El Verdadero Santuario Católico
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El Verdadero Santuario Católico 47
San Roque
(Patrono de los perros)
San Roque es muy popular en todo el mundo con sus intercesiones a favor de los
enfermos y de los pobres.
O sea, de los pobres enfermos, aunque éste fuese rico.
Su familia era inmensamente rica, que si no lo fuera sería imposible continuar con
su historia, pues dice que cuando murieron sus padres repartió todas sus riquezas
entre los indigentes y se fue como un boludo a visitar Roma y todo santuario o
basílica que encontrara en su camino.
¿Siempre los santos reparten su fortuna heredada entre los pobres para ir a visitar
Roma? ¿Con qué plata se fue si ya no le quedaba ninguna?
Te diré sucintamente porqué todos los santos tienen la manía de repartir sus bienes
entre los pobres y luego peregrinar a Roma: por la sencilla razón que los sacerdotes
que inventaron sus historias pretenden hacerte creer que el camino para entrar a
los cielos es donar todos tus dineros a los más necesitados y lo que sobra llevar al
Vaticano.
¿Y quiénes son los que más necesitan tus dineros?
¡La pobre iglesia católica!
Hecho esto, la venta y el regalo de sus bienes, san Roque emprende su largo viaje
en medio de una epidemia que asolaba a Europa, la maldita tifus.
Los caminos por los que pasaba estaban sembrados de muertos, lo que demoró diez
años su viaje, pues Roque los iba enterrando a su vera a medida que tropezaba con
ellos.
Y a los enfermos de cada pueblo los curaba con solo hacerles la señal de la cruz en
su frente, aunque hay historiadores que afirman que lo que hacía era la señal del
as de espada, que no estaría mal tampoco, no se sabe bien.
Aun así muchos morían, digamos la mayoría, porque el decir que los sanaba era
una sanata, una utopía, y como nadie se atrevía a tocarlos por miedo al contagio,
Roque lo que en realidad hacía era enterrarlos con sus propias manos.
Se cuenta sin embargo que en la ciudad italiana de Cesanea, antes de llegar a
Roma, nuestro santo curó a un cardenal, y que este lo presentó luego al Papa.
Quizá le diera una carta de recomendación.
Así llegó a Roma y de entrada no más curó a un millar de personas, quienes
cuando lo veían pasar por la calle decían: “allí va el santo”.
Regresando a su terruño natal, tantas curaciones y tanto contacto con los
infectados, propició que en la ciudad de Piacenza, un día, su suerte cambiara
diametralmente: se contagió de la terrible enfermedad y su cuerpo se llenó de
manchas negras y úlceras apestosas, y por no molestar a nadie, y quizá por un poco
de vergüenza, se retiró a un bosque solitario, lejos del mundanal ruido.
He aquí que al día siguiente de instalarse en una choza que él mismo fabricara, a
un costado apareció un hermoso aljibe de cristalinas aguas con las cuales se
refrescaba y lavaba sus ropas, sus heridas y sus bolas.
Al otro día, del otro costado, apareció un hermoso excusado con puerta de lona,
inodoro y bidet, pileta con canilla, sin que tampoco faltara papel higiénico.
El Verdadero Santuario Católico 49
¡Cómo! ¿Solo por la cruz tallada en su pecho se dieron cuenta que era el hijo del
gobernador? ¿Los gobernadores marcaban a sus hijos con una cruz en el pecho
como si fuesen vacas?
¡A fe que nadie querría ser hijo del gobernador en aquélla época!
Las imágenes que circulan de él lo pintan con su sombrero de peregrino,
señalando con un dedo las llagas de su pierna, su bastón de caminante y un perro
raquítico que a pesar de estar hambriento, ofrece un pan flauta al santo.
Es opinión generalizada que su alma está descansando en el cielo por el gran amor
y caridad que demostró en todos los días de su perra vida.
Perros como ése no se encuentran fácilmente en estos tiempos.
¡Apuesto que creíste ser el santo quien descansaba en el cielo!
No, el perro es el que descansa en paz, papanatas.
San Roque es un invento clerical.
Las estatuas de san Roque dentro de las iglesias siempre lo representan con un
perrito tendido a sus pies, pues es además de santo, patrono de los perros a quien
todos obedecen.
El día después de la onomástica de san Roque, se continúa hasta hoy llevando
cirios a los templos que tienen una imagen suya, pero con la diferencia de que no
son para el santo, sino para el perrito que está a sus pies, ya que una leyenda dice
que en el día de san Roque el perro del santo visitaba la ciudad sanando a otros
canes que tenían rabia, quienes se acercaban velozmente para ladrar o conversar
con él.
¿Se pueden hacer creer éstas falsedades a los ilusos católicos?
Sí se puede.
Se cuenta que quien maltrata a un perro, se atrae toda la antipatía de san Roque
para siempre.
Jamás se debe maltratar a un perro, y antes bien, si un perrito de morondanga, esos
que las mujeres ricas llevan en sus brazos, se escapa y te ataca y ladra, debes decir:
-San Roque, san Roque, que éste perrito no me toque.-
Y santo remedio, el perrito no te muerde, y se vuelve a los brazos de su ama.
Eso sí, la fórmula no funciona ni te da tiempo a decirla cuando un poderoso mastín
Pitbull o Rodwailer se te echa encima con los colmillos al aire y a dentelladas te
arranca un brazo o se te prende de un guevo.
En esos casos, lo mejor que puedes hacer es treparte como puedas a un árbol
cercano y llamar a los gritos al dueño del perro para que se lo lleve.
De cada diez ataques de perros a personas, cinco son la mitad.
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El Verdadero Santuario Católico 51
La virgen de Coromoto
(Leyenda de fantasía)
Pero he aquí que la virgen lo persiguió como un perro de presa, o sea como una
perra de presa, y volvió a enfrentarse con el cacique Arturo Soreteduro, el que no
quería ser sumiso ni lameculos de los curas, que le volvió a arrojar ahora una
puntiaguda lanza, que a mitad de camino se torció y emblandeció como si fuese un
sorete empujado por un chicle laxante.
La lanza salió dura, pero en el trayecto se emblandeció como si fuese una diarrea.
Flácida la lanza cayó a los pies de la virgen, quien se materializó en una estampita
hecha de fibra de árbol, la que trescientos años después se encontró intacta a pesar
de ser de 2x2 cm, como si fuese hecha ayer mismo, la que se idolatra y rinde culto
en el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Coromoto, o Culoroto.
Pero la historia no termina ahí.
Falta un milagro que trascienda la leyenda y quede en el corazón de todos los
marianos, para escarmiento y advertencia de los que rechazan a María.
El cacique Arturo, en medio de la selva, fue mordido por una serpiente venenosa y
a punto de morir lo llevan en camilla a la villa de Guanare o Guanaco, a la iglesia
de Nuestra Señora del Culoroto, donde a gritos pide que lo bauticen ya mismo, lo
que fue hecho, y de inmediato se curara y convirtiera en apóstol, inculcando a
otros indios salvajes que siguieran su mismo camino de perdición tras María y el
papa.
Después de esto, el indio Arturo Soreteduro, siendo ya acérrimo católico, cambió
su nombre a imitación de los profetas porque le daba vergüenza tener uno tan feo
y oloroso, ya que sus amigos le hacían bromas y lo cargaban constantemente, por
otro más cristiano y angelical.
Pasó a llamarse en adelante Ángel Soreteduro en vez de Arturo Soreteduro y
murió en buena vejez.
En 1950 el Papa Pío XII declaró a Nuestra Señora de Coromoto o Culoroto
Patrona de Venezuela; el papa Juan Pablo II la coronó en su visita al Santuario
mariano en Guanare y el Papa Benedicto XVI elevó en 2006 al Santuario
Nacional de Nuestra Señora de Coromoto o Culoroto a la categoría de Basílica
Menor, todas cosas importantísimas e imprescindibles para la salvación de las
almas.
Su fiesta idolátrica se festejan tres días diferentes en el año, por falta de uno: el 2
de febrero, el 8 y el 11 de septiembre. Amén…
A religiones estúpidas, leyendas estúpidas
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54 El Verdadero Santuario Católico
Maggie Hernández:
¿Sabes quién te impulsó a escribir todo lo anterior? Usted tiene grandes dones, como la habilidad
de escribir. Pero el odio es su enemigo. ¡Y qué ingratitud! ¡Ha sido precisamente la misma Iglesia
Católica la que ha servido de inspiración para muchos de sus escritos! Tal vez usted le simpatiza
hasta a los santos y mártires. Aunque sus escritos no le hagan famoso y lleguen al cine, siga
escribiendo. Le viene bien a su alma. ¡Que no sea el maligno, sino el Espíritu Santo que le ilumine!
Es bienvenido a la Iglesia. ¿Recuerda estas palabras? “Nuestro corazón está inquieto hasta que
descansa en ti”
Jovi Angel
¿Porque tanto odio Arturo? ¿Será que en el medioevo éramos cristianos y cuando aparecieron los
protestantes dejamos de serlo? Y si te liberas del odio, le pediré a María que interceda por vos
como lo hizo en las bodas de Caná.
Padre Richard T. Rojas
Amigo Arturo Beresi: soy venezolano y me gustaría hacerle unas preguntas al respecto... y quisiera
y me gustaría, si es que es CRISTIANO me las respondiera con la amabilidad que le estoy
preguntando o mejor aún que me responda porque muchos no me responden… aunque algunas
preguntas aprovecho y las respondo de una vez.
1) ¿Sobre quién edifico la iglesia y a quien les dejo las llaves del cielo Jesús: SAN PEDRO no?
Entonces si los "evangélicos" no católicos no creen en santos no entran al cielo, es triste para ustedes
Le pediré a la virgen María bajo la ABVOCACION DE COROMOTO que interceda por ustedes.
2) ¿Cuántas iglesias evangélicas hay en todo el mundo? Bueh, yo prefiero calidad y no cantidad…
lastimosamente para ti y muy gustosamente para mi YO pertenezco a la UNICA iglesia católica
apostólica y romana... 3) Ustedes no salen de EXODO 20, 2 - 5 yo te invito a leer EXODO (o sea
ahí mismito) 25, 18 donde manda hacer la alianza a Moisés con seres alados, o sea contradiciendo
EXODO 20, 4 lee también 1ra DE REYES 6,23 donde el MISMO DIOS que prohibió hacer
imagen de cosas del cielo y debajo de la tierra manda hacer SERES ALADOS (para mi ángeles).
Mandó hacer el templo a Salomón... rodeados de los mismos...
Ahora, con respecto con lo de la virgen MI QUERIDA Y AMADA VIRGEN MARIA LA CUAL
AMO PROFUNDAMENTE... solo te diré cosas muy sencillas que espero entiendas, sé que eres
inteligente…A) si la sangre de cristo tiene poder como dicen ustedes... adivina de donde proviene la
sangre de Jesucristo?? O sea, que la sangre de MARIA también tiene poder... B) si dicen que
adoramos imágenes porque nos hincamos prendemos velas y las tocamos. Entonces tu eres PEOR
porque por lo menos adoramos a la virgen María madre de DIOS HECHO CARNE pero tu adoras
a tu mujer y tus hijos cuando los besas y los abrazas, porque LOS ESTAS TOCANDOO, eres ídolo
de la oscuridad porque tu PRENDES VELA CUANDO SE VA LA LUZ cosa que es constante… y
C) si tu amas a tu mama... porque te dio la vida… cómo no vas a amar a la madre de JESUS que
gracias a ella que lo dios a luz (un parto ) a NUESTRO SALVADOR que gracias a EL podemos
llegar al reino de los cielos…? Además solo imagina que tú te molestas cuando le faltan el respeto a
tu mama... ¿cómo se sentirá JESUS que ustedes les faltan el respeto o no le dan el respeto que se
merece? ¡Uy yo estaría muy molesto!... se lo dejo a criterio tuyo… ¿pero es contradictorio no? y
¡puedo seguir hablando de muchas cosas! Pero lo más importante… ya que estas en contra de la
virgen María la cual es una mujer… te invito a leer GENESIS 3,15 me encanta esa parte pero si
deseas lee desde el inicio del capítulo. Una última cosita de tarea… AVERIGUA o INVESTIGA
QUIEN hizo o junto los libros de la biblia... (te respondo por si no lo sabias para ahorrarte trabajo,
VERIFICA de todas maneras) FUE UN PAPA... la máxima autoridad que tenemos los católicos
aquí en la tierra, el sucesor de Pedro (por cierto el mismo de las llaves del cielo) quien a su vez es el
sucesor de Jesús en mandato y obra hasta su venida. CONCLUSION: SIGUEN SIENDO
CATOLICOS EN CONTRA DE SU VOLUNTAD. Je, je, je hermano arrepiéntete y vuelve a la
El Verdadero Santuario Católico 55
verdadera iglesia... aquí te esperamos. Que DIOS santísimo derrame sobre ti y los que te rodean
bendiciones infinitas y la virgen querida y amada por todos los venezolanos coloque sobre usted su
manto protector y amoroso como lo haría su señora madre si usted estuviera en peligro.
Bendito sea y espero se vuelva un SANTO VARON...
Padre Héctor Pernía:
Hoy la Iglesia celebra la fiesta del Santísimo Nombre de María. Ha sido Lucas en su evangelio
quien nos ha dicho el nombre de la doncella que va a ser la Madre de Dios: "Y su nombre era
María". El nombre de María, traducido del hebreo "Miriam", significa, Doncella, Señora, Princesa.
Estrella del Mar, feliz Puerta del cielo, como canta el himno Ave Maris Stella. El nombre de María
está relacionado con el mar pues las tres letras de mar guardan semejanza fonética con María.
También tiene relación con "mirra", que proviene de un idioma semita. La mirra es una hierba de
África que produce incienso y perfume. En el Cantar de los Cantares, el esposo visita a la esposa,
que le espera con las manos humedecidas por la mirra. "Yo vengo a mi jardín, hermana y novia mía,
a recoger el bálsamo y la mirra". "He mezclado la mirra con mis aromas. Me levanté para abrir a mi
amado: mis manos gotean perfume de mirra, y mis dedos mirra que fluye por la manilla de la
cerradura". Los Magos regalan mirra a María como ofrenda de adoración. "Y entrando a la casa,
encontraron al niño con María, su madre, y postrándose, lo adoraron y abriendo sus cofres, le
ofrecieron oro, incienso y mirra". La mirra, como María, es el símbolo de la unión de los hombres con
Dios, que se hace en el seno de María. María es pues, el centro de unión de Dios con los hombres. Los
lingüistas y los biblistas desentrañan las raíces de un nombre tan hermoso como María, que ya
llevaba la hermana de Moisés, y era muy común en Israel. Y que para los filólogos significa
hermosa, señora, princesa, excelsa, calificativos todos bellos y sugerentes. EL NOMBRE Y LA
MISION En la Historia de la Salvación es Dios quien impone o cambia el nombre a los personajes a
quienes destina a una misión importante. A Simón, Jesús le dice: "Tú te llamas Simón. En adelante
te llamarás Kefá, Pedro, piedra, roca, porque sobre esta roca edificaré mi Iglesia". María venía al
mundo con la misión más alta, ser Madre de Dios, y, sin embargo, no le cambia el nombre. Se
llamará, simplemente, MARIA, el nombre que tenía, y cumple todos esos significados, pues como
Reina y Señora la llamarán todas las generaciones. María, joven, mujer, virgen, ciudadana de su
pueblo, esposa y madre, esclava del Señor. Dulce mujer que recibe a su niño en las condiciones más
pobres, pero que con su calor lo envuelve en pañales y lo acuna. María valiente que no teme huir a
Egipto para salvar a su hijo. Compañera del camino, firme en interceder ante su hijo cuando ve el
apuro de los novios en Caná, mujer fuerte con el corazón traspasado por la espada del dolor de la
Cruz de su Hijo y recibiendo en sus brazos su Cuerpo muerto. Sostén de la Iglesia en sus primeros
pasos con su maternidad abierta a toda la humanidad. María, humana. María, decidida y generosa.
María, fiel y amiga. María fuerte y confiada. María, Inmaculada, Madre, Estrella de la
Evangelización.
Wilfred Lahoud
Arturo Beresi espero que te ilumines con estos versos "Y apareció en el cielo un gran signo: una
Mujer revestida del sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas en su cabeza. (Ap.
12:1). El Dragón, enfurecido contra la Mujer, se fue a luchar contra el resto de su descendencia,
contra los que obedecen los mandamientos de Dios y poseen el testimonio de Jesús. (Ap12:17).
Chonita Martínez
Este no respeta ni a su madre o tal vez a éste lo hicieron en un laboratorio. ¿Y el milagro de las
bodas de Cana por quien fue pedido y la cabeza del dragón por quien va a ser pisada? Esto está en
la Biblia, o estoy equivocada, el primer mandamiento de la ley de Dios es amarás a Dios con todo
tu corazón con toda tu alma y con todas tus fuerzas y a tu prójimo como a ti mismo y este engendro
no lo hace
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56 El Verdadero Santuario Católico
Hay santos patronos para el dolor de muelas, para la vista, de los perros, de los toreros, para las
diarreas, de los enamorados, de las prostitutas y de sus hijos de puta, san la Muerte, san Poronga,
difuntas y gauchitos, hechos todos a medida para disolver el poder salvífico que viene solamente a
través de Jesús. Todo el odio que siento hacia vuestra idolatría traída de los pelos por fuera de las
Escrituras, fortalece el amor y la pasión que siento únicamente por mi amado Jesús. A los seres
alados que mandó hacer Dios, a las columnas de entrada del templo de Salomón, al candelabro de
siete velas, al urín y el tumín, a la víbora colgada de un palo… ¿Mandó el señor a idolatrar y rendir
culto? ¿Quién os mandó a encender velas por los muertos? ¿No os sirvió de nada la adoración del
becerro de oro de Araón? ¿No mató el Señor más de tres mil judíos por idolatrar a una estatua, así
fuese de oro? ¿No fulminó el Señor de un rayo al pelotudo ése que tocó el arca de la Alianza?
¿No dice Pablo “Hijitos, guardaos de los ídolos? ¡Raza de víboras, enseñáis al pueblo exactamente
lo contrario de lo que manda Dios! ¿Creen Uds. que Dios dejaría a su iglesia en manos de un
hombre como Pedro, al que llamó de demonio y horas después le negara cobardemente?
Lean por favor, a san Agustín, que fue borracho y mujeriego, gran jugador de cartas y adepto a las
corridas de toros, “Las Retracciones de San Agustín”, donde dice que Jesús no dijo: “Tú eres o serás
la Piedra, sino TU ERES PEDRO” La Piedra siempre fue y será Jesús, hijos de puta, nunca María, ni
Pedro ni la puta madre que lo parió. Hablo así, un poquitín maleducado, porque ya es tiempo de
destruir estas fábulas que vienen de soñadores concilios hechos para ensalzar al hombre y no a
Dios. Me alegro infinitamente que tengan a un hombre de máxima autoridad aquí en la tierra; yo
tengo solamente a las Escrituras como única fuente de autoridad, que por más que sea
enmarañada, contradictoria, y engorrosa, siempre apunta a amar al Salvador y despreciar a las
doctrinas de los hombres. No me pidáis amabilidad porque los tiempos se acortan y es muy
necesario sacar al pueblo de las garras de María y del demonio que apoya su culo en mullidos
sillones de pana en el vaticano, y volverlos al Salvador.
Sepan además, para que vean el daño que hacen Uds. los marianos con sus estatuas, que pegado a
mi casa se instaló una santería, donde hay ídolos de vírgenes blancas, negras y rosadas, aparte de la
del negro Barromeo y la roja del Gauchito Gil, junto con escapularios, elefantitos para atraer
dineros, sahumerios para la buena suerte, pirámides de vidrio, y otras pelotudeces, y cada vez que
yo tenía dineros, dejando de comer o vestirme, compraba una estatua de María, y poniéndola en la
vereda frente al comercio, le daba un tremendo martillazo en la cabeza haciéndola añicos, y les
decía a los dueños: “Gracias a mí, hay un idólatra menos en el mundo”.
Pero, fue peor el remedio que la enfermedad: la gente pasaba y recogía un pedacito o dos y los
llevaban a sus casas para adorarlos, de manera que en vez de destruir un mariano, hice cientos. Los
dueños del comercio, después de dos o tres destruidas, se negaron a venderme más ídolos, porque
sufrían los martillazos a la virgen como si fuesen en sus propias cabezas. La Sra. del dueño se
desmayaba y había que llevarla al hospital para que le soplen en el culo.
Ah, y a vos te digo cura Richard Rojas, (rojo quedará tu culo cuando ardas en los infiernos por
idólatra) que te libro de la estupidez de pedirle nada a la virgen para mi alma, que yo la odio
profundamente por bellaca y usurpadora de mi Señor, y la puta madre que la parió. Dile además al
imbécil que inventó la ADVOCACIÓN DE COROMOTO, (advocación se escribe con C, no con S,
burro) que el Señor es más fuerte que mil advocaciones a madres santas, y todo lo que pidamos a
través de su Nombre será concedido por el Padre. Para no ser menos que vos, yo pediré al Señor que
los maldiga y los destruya de la faz de la tierra para que nos dejen paso a los cristianos adorar,
venerar, idolatrar y rendir culto a nuestro UNICO SALVADOR JESUCRISTO.
Y con esto damos fin a la conversa, que no quiero tener nada que ver con ustedes marianos y
papistas, que yo soy y seré siempre cristiano, y no los mando a la puta madre que los parió porque
soy una persona muy educada y respetuosa de los pensamientos ajenos. Besos.
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58 El Verdadero Santuario Católico
Si bien Sergio era un mariano acérrimo, también gustaba de coger a sus feligresas
y catequistas, vírgenes más reales y al alcance de la mano que una celestial María,
por lo que no queriendo quedar eunuco si lo atrapaban, logró huir sin que pudiera
ser apresado en las mismas puertas del Vaticano.
Se llamaba Sergio de Caere y desde muy joven esperaba la oportunidad de
convertirse en “papa de Roma” y respaldado por el pequeño ejército de un señor
feudal y tras algunas matanzas logró asumir el poder papal con el nombre de
Sergio III el 29 de enero del 904 al 14 de abril al 911.
Fue el papa No. 119 de la Iglesia Católica.
Reemplazó al papa Cristóbal quien se había nombrado a sí mismo Vicario de Dios,
y por tal osadía fue puesto en prisión a pan y agua, y los romanos invitaron a
Sergio a ocupar su lugar.
Sergio declaró inmediatamente que las ordenaciones de Formoso eran nulas.
Estas informaciones que son aportadas sólo por sus enemigos, no tiene sentido
comparado con lo que dicen de él respetables contemporáneos.
Protegió al arzobispo Juan de Rávena contra el conde de Istria y confirmó el
establecimiento de un número de nuevas sedes en Inglaterra.
Como se opuso a los errores de los griegos, borraron su nombre de los dípticos.
Mostró su buen sentido al declarar válido el cuarto matrimonio del emperador
griego, León IV.
Sergio restauró completamente la basílica Luterana donde deseaba que sus
huesos descansaran, pero fue enterrado en san Pedro.
Las afirmaciones de su obrar durante su reinado, son unas contrarias y otras
disímiles, sin que nada concuerde, a tal punto que unos lo tienen por santo y otros
por monstruo.
Así por ejemplo, fue descrito por César Baronius, cardenal historiador católico-
romano, como “monstruo”, y por Gregorio y otros escritores eclesiásticos, como un
“criminal aterrorizante, lascivo, maligno y feroz”.
La elección de Sergio III, Conde de Túsculo, supone el inicio de un período de la
historia del papado conocido como "pornocracia", debido a la influencia que en las
decisiones papales jugaron las amantes de los pontífices, dicen los historiadores.
El odio y la maldad de este hombre hecho papa y reconocido como tal, ha sido
patente hasta nuestros días y merece una especial mención.
Durante un lustro Sergio buscó la ayuda de otros nobles hasta que, en el 904,
consiguió entrar triunfante a Roma con la ayuda de los duques de Spoleto, de
Alberico I y del senador Teofilacto (que era amante de su propia hija y con la cual
tuvo un hijo, el futuro papa Juan XI, y futuro papa él también).
La ciudad de Roma se hallaba dividida por la lucha entre el papa León V y el
antipapa Cristóbal, que le había depuesto y encarcelado, para después ir él
también a la cárcel.
Sergio III reemplazó a ambos y los hizo estrangular acusados de ambición
desmedida de papado.
60 El Verdadero Santuario Católico
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3 En el año 3000 AC., en Babilonia existía una mujer a la cual se la conoce como Semiramis.
La Biblia se refiere a ella como Astoret y Astarté, quien llegó a ser reina del imperio.
Semiramis adopto un niño a quien llamó Nimrod, pero después se convirtió en su esposa.
Los babilónicos llegaron a considerar a Semiramis como una diosa. Todos los que querían
tener acercamiento a Semiramis, y gozar de sus atributos sexuales o ganar privilegios,
tenían que traer un niño recién nacido, que era desbarrancado o tirado en la hoguera, en
un culto diabólico en honor a su esposo Nimrod. Muerto Nimrod, para continuar en el
poder, se embarazó de un sacerdote he hizo creer al pueblo que el niño nacido era hijo del
Sol, al que llamó Tamuz. Ella dejó correr la voz de que el bebé no tenía un padre humano,
sino que le había sido dado el ser mediante un mágico haz de luz del gran dios Sol. Hay en
la historia de Semiramis gran similitud con la virgen María y Jesús, y es ella la que
instituye el 25 de diciembre como día del nacimiento del Sol, o nuestras Navidades. Y es
ella la que impone a la T del nombre de su hijo Tamuz la actual cruz católica, que por su
orden, todos debían colgar del cuello con una cadena.
62 El Verdadero Santuario Católico
Benedicto IX
(Papa-caliente)
Cuatro de los primeros papas eran hijos de curas, y el número 40, San Inocencio,
era hijo del 39, San Anastasio; y San Silverio, el 58, era hijo de San Hormisdas, el
52.
Nadie que tenga hijos puede ser papa, porque tiene la lengua sucia.
El papa que tenga hijos es un criminal, pues bendice a los fieles con sus atrevidos
dedos que antes reconfortaron vaginas.
Para un papa, tener hijos es tan fácil como tocar el piano: basta pulsar la nota justa
en el momento justo y con la intensidad justa.
Así, aviesamente tomado de la Biblia, la iglesia católica romana busca apartarnos
de Jesús para que vayamos tras un santo padre infalible sentado en un sillón de
oro, sobre almohadones de pana granate bajo el culo.
Huid de éstas tonterías católicas y seguid solamente al Padre de los cielos y a su
hijo Jesús, aquel que anduvo caminando sobre la mar.
Para Dios, lo que importa es tu fe puesta sobre su Hijo, y no tu esclavitud sumisa y
estúpida en papas y santos.
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El Verdadero Santuario Católico 65
Teresa tenía 20 años. La santa era por ese entonces una mujer hermosa, escultural,
despampanante, pechugona y dotada de una espiritualidad fuera de lo común.
Al parecer, regresó a su casa nuevamente muerta de hambre y andrajosa.
Del mucho leer las vidas de santos, había pasado a los libros de caballerías y en
ellos aprendió a galantear con sus primos y el vecindario.
-Comencé a pintarme las uñas y a buscar la elegancia y el buen parecer y a ser
coqueta de rostro y labios- recuerda la propia santa.
Su padre, preocupado por el puterío que se avecinaba, y por los jóvenes rijosos y
calientes que rondaban día y noche su casa, decidió entonces internarla en el
convento de las Agustinas de Gracia de Ávila, donde se educaban doncellas
nobles. Estudió en el convento de las Agustinas y en 1535 ingresó en el convento
de la Sagrada Encarnación.
En 1555, después de muchos años de sufrir una grave enfermedad y someterse a
ejercicios religiosos cada vez más rigurosos, experimentó un profundo despertar en
el que vio a Jesús, a María sobre una nube, al temible infierno, a los ángeles y a los
demonios.
Esto da una idea cabal del matute o despelote que tenía dentro de la cabeza.
En ocasiones sentía agudos dolores vaginales que, según sus palabras, estaban
provocados por la punta de una corta espada, o a veces por una larga lanza
ardiente de un ángel alado y desnudo que entraba en su celda todas las noches y
se la clavaba en el corazón, decía ella.
Disgustada a causa de la indisciplina de las carmelitas, decidió emprender la
reforma de la orden y se convirtió, con el apoyo del Papa, en una dura oponente
para sus inmediatos superiores religiosos. En 1562 consiguió fundar en Ávila el
convento de San José, la primera comunidad de monjas carmelitas descalzas, en el
que reforzó el cumplimiento estricto de las primitivas y severas reglas de la orden.
Estas normas de las carmelitas eran crueles y sanguinarias pues tenían como
objetivo ganar el cielo a través del dolor infringido por propia voluntad, a
imitación de los sufrimientos de Cristo por el pecado de todos los hombres, pero en
ellas al pedo, y así, andaban descalzas entre piedras y espinas, sedientas sin tomar
agua varios días seguidos, durmiendo sobre camas de piedras o clavos, soportando
el frío desnudas, e infinitas tonterías más que hoy darían risa pero que
antiguamente eran una puerta abierta para el perdón de los pecados, porque el
castigo por voluntad se tomaba como una buena obra que desechaba el sacrificio
del Señor y la fe puesta solo en El, muy de acuerdo con las fantasías católicas.
El Verdadero Santuario Católico 67
Ellas cambiaban la fe en el Hijo de Dios para ser salvos por plantas callosas,
espaldas sangrantes por latigazos, hambrunas y bocas sedientas, vigilias, pobrezas,
votos de silencio, votos de castidad, oraciones e infinitas tonterías más como si el
sacrificio único y suficiente de Jesús fuese un cuento o una fantasía más, o
insuficiente. Sus reformas fueron aprobadas por el director de la orden y en 1567
se le permitió fundar otros conventos similares para religiosos.
Con la ayuda de san Juan de la Cruz, santa Teresa organizó una nueva rama del
Carmelo, pero solo para hombres. Contó también con el apoyo del padre Antonio
de Heredia, que era su asesor espiritual.
Todas las santas, sin excepción, cuando jóvenes y hermosas siempre se ponen bajo
el miembro de un obispo o del papa, que hacen de asesores espirituales y con
quienes convive íntimamente, y cuando viejas y chotas van a encerrarse en un
convento con dolorosas enfermedades y padecimientos porque ya nadie se
interesa por sus vetustos cuerpos.
Los curas no son boludos, y tienen buenos gustos, y novicias y monjas nuevas cada
año. Aunque siempre acosada por poderosos y hostiles funcionarios eclesiásticos,
logró fundar 16 casas religiosas para mujeres y 14 para hombres.
Esto es de sospechar, que sean 30 las casas religiosas fundadas, porque bien
podrían ser 29 o 31, pero en las fábulas se estila mentir siempre en números
redondos.
Dos años antes de morir, en 1580 la Congregación de las Carmelitas Descalzas
recibió el reconocimiento del Papa como orden monástica independiente.
Murió el 4 de octubre de 1582 en Alba de Tormes y fue enterrada en el convento
de la Anunciación de este municipio salmantino.
Hasta exhalar el último suspiro Teresa gozó la dicha de conversar con personas
divinas, o ángeles que la consolaban o revelaban ciertos secretos del cielo; la de ser
transportada al infierno o al purgatorio y regresar para contarlo, y aun la de
presentir y vaticinar lo venidero, cosa repudiada por Dios, como es el arte de la
adivinación. Como anécdota y dato curioso cabe decir que en la celda del
monasterio que ocupó Santa Teresa hay una imagen suya sentada escribiendo en
una pequeña mesa y que sólo se expone una vez cada 100 años en ese lugar.
¿Por qué cien y no noventa y nueve, o doce, o cinco?
El que la ve una vez, no puede verla dos.
Actualmente, en el monasterio viven carmelitas de clausura.
Además de una mística de extraordinaria profundidad espiritual, santa Teresa fue
una organizadora muy capaz, dotada de sentido común, tacto, inteligencia, coraje
y humor.
Purificó la vida religiosa española de principios del siglo XVI y contribuyó a
fortalecer las reformas de la Iglesia católica desde dentro, en un periodo en que el
protestantismo se extendía por toda Europa.
De entonces son sus primeras visiones y sus temores de estar siendo engañada “por
el demonio”.
68 El Verdadero Santuario Católico
En su dormitorio del Palacio del Pardo hizo construir un altarcito para venerar la
reliquia.
¡Santo Dios, la idolatría católica en vez hacer santa a Teresa, la hizo añicos y
pedazos a fuerza de venerar sus restos! ¡Qué costumbre asquerosa!
La historia de Santa Teresa es bastante coherente y creíble, pues sin duda fundó
congregaciones y escribió libros que están a la vista, pero lo que oculta la iglesia
católica es que era una mística delirante a la cual le patinaba la cabeza, cayendo
constantemente en profundos ensueños y visiones en los cuales veía dragones,
ángeles que portaban cortas y agudas espadas o largas lanzas rojas, demonios e
infiernos que le llevaban a delirar semanas enteras.
Este padre Antonio de Heredia nombrado anteriormente, con la ayuda de san
Juan de la Cruz, viendo que santa Teresa tenía lindo cuerpo y lindo culo, que
divagaba y vivía en una nube de pedos con sus fantasías místicas, se propusieron
curarla a través del amor sexual, y combinaron disfrazarse de ángeles para entrar
a su aposento y penetrarla.
-Está tan rayada que ni cuenta se dará que somos nosotros cuando entremos a
su celda. -se dijeron los dos pícaros sacerdotes.
Juntaron pues un montón de plumas blancas de gallinas que se criaban en el
convento, con las cuales se disfrazarían de ángeles para fingir una aparición
celestial ante la monja soñadora.
Como las plumas blancas eran escasas por no tener el gallinero muchas aves de
ése color, las mismas solo alcanzaron para hacer un único disfraz de ángel que se
ocuparía alternadamente uno después del otro.
Se pegaron pues con cola una por una las plumas en los brazos, quedando como dos
enormes alas del Espíritu Santo y como blancas palomas, y de los dos pícaros curas
solo uno entraba cada noche, para que la hermosa y joven monja no junara el
engaño si el otro entrara sin disfraz, el que esperaba afuera hasta la siguiente
noche su turno de ocupar las plumas y coger, para continuar la tarea dejada por el
anterior.
Era un trabajo de locos el despegar las plumas del uno para pegárselas al otro.
Como los ángeles que veía santa Teresa aparecían desnudos sin tener un miembro
a la vista, ya que son híbridos y carecen de ellos al no haber casamientos en el
cielo, y que solo portaban una corta espada o a veces una larga lanza
resplandeciente en la mano derecha, los atorrantes sacerdotes entraban al cuarto
de Teresa de la misma forma, desnudos con los brazos cubiertos de plumas, y a falta
de armas portaban solamente sus ardientes vergas en la mano derecha.
Según la tradición, el primero en entrar fue el padre Juan de Heredia, y la noche
siguiente lo hizo su compinche Antonio, y así por largos años, sin jamás cambiar los
lugares y los turnos, porque eran hombres justos y piadosos, y ninguno quería ser
más que el otro, ni menos tampoco.
70 El Verdadero Santuario Católico
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El Verdadero Santuario Católico 71
Santa Flora
(Virgen y mártir hispana)
La fuente más fiable sobre las vidas y martirios de Flora y María es San Eulogio,
que las conoció personalmente y fue testigo de sus martirios.
La festividad de las santas se celebra el 24 de noviembre, y se cumple en ambas lo
que suele decirse comúnmente cuando dos trabajos se simplifican con victoria en
uno solo: que el amado padre musulmán mató a dos pájaros de un tiro.
Lo que no concuerda con lo lógico es lo siguiente, ¿cómo se sabe que la madre de
Flora era mariana católica?
¿Ese musulmán marido era tan pelotudo que perdonó a la vieja chota de su esposa
y decapitó a su joven y hermosa hija?
¡Yo lo haría al revés!
¿Tan idiota era el hermano que quería ser pastor dando la vida por los fieles y sin
embargo denunciar a su propia hermana quitándosela por ser católica?
¿Quién se metió al fondo del río para recuperar las dos cabezas?
¿No había en su ciudad yesos y hueseros para enderezar las piernas quebradas de
la santa, castigo bien merecido por cierto, para lo cual Flora fuese a Jaén?
¿Cómo santa Flora se trasladó a Jaén si tenía las piernas quebradas?
Ay, hermanos marianos, tened por seguro que si tus sacerdotes te enseñan éstas
patrañas y fantasías y no los Santos Evangelios, tarde o temprano el Señor
destruirá esta iglesia de demonios porque sus cimientos están asentados sobre las
arenas de las fábulas, y antes que caiga el edificio, debes huir de allí para ser libre
conociendo solamente la verdad que emana de la Palabra de Dios.
Debes esperar un poco más para que el Señor te saque de la telaraña en que estás
atrapado, pero si puedes y confías en Jesús... huye lejos de tan detestable iglesia
antes que venga el Salvador a destruirla y te encuentres dentro de ella con tus
imágenes y estampitas, pues arderás junto con sus estúpidas fábulas.
Quedas debidamente notificado.
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El Verdadero Santuario Católico 75
Santa Quiteria
(Virgen y mártir hispana)
La vieja Sila, para que no muera esta fábula junto con las nueve infantes, siendo
cristiana, evitó la muerte de las niñas que repartió entre familias cristianas que
aun cogiendo a cada rato no podían concebir, quienes las criaron y las bautizaron
individualmente.
Así se salvaron de morir ahogadas Quiteria y sus ocho hermanas, gracias a la
partera Sila.
Sí se saben los nombres de las ocho hermanas de Quiteria: Ginevera, Librada (que
también fue santa), Victoria, Gema (también mártir), Germana, Basilia, Marsia, y
Eumelia la más chica y más puta de todas, que desgraciadamente no fue santa.
Ni ahí.
A Quiteria, en cambio, que no salía más allá de la puerta de su casa, su padre
quería ensartarle un riquísimo pretendiente, industrial de la carne que hacía
matambres y embutidos a pedido y por encargue, a lo cual ella se negó
rotundamente. Hay indicios que el enojo del padre fue tremendo, furioso y salvaje,
porque se le escapó de las manos la jugosa dote con que el rico pretendiente
quería comprarla, ya que era un jugador empedernido de cartas y estaba
endeudado hasta las pelotas, y necesitaba de esos dineros para saldarlas.
Es muy probable que su padre fuera además un necio, pues teniendo a su hija
Eumelia vaga y puta que volvía borracha y recogida por las madrugadas, siendo
ambas parecidas como dos gotas de agua, si la cambiara en lugar de Quiteria para
contraer matrimonio y cobrar la dote, pasaría desapercibida por el pretendiente.
Pero no, hizo decapitar a Quiteria por negarse a casar con el postulante.
Antes, el padre la encerró en un cuarto bajo llave, donde la virgen María se
aparece a Quiteria en una visión y la libera para que huya.
Escapa a través del campo, y en su huida se encuentra con un pastorcito hijo de
puta que la esconde en el hueco de un árbol, prometiendo a la santa que si alguien
preguntara por ella, jamás la delataría.
Su padre ordena al general romano llamado Germano que la persiga, y éste
encontrándose con el hijo de puta del pastorcito, le pregunta si por allí pasó
Quiteria, que le daría unas monedas de plata si le dijera.
El pastorcito, al mismo tiempo que negaba con la cabeza, le señaló con el dedo
donde estaba escondida la fugitiva.
¡Hijo de puta y la puta madre que te parió, pastorcito de mierda!
Todos los pastores son unos hijos de putas, que más ambicionan la lana antes que
las almas de sus ovejas.
La sacan de su escondite y Germano la decapita con su filosa espada puesta al
servicio del orden y de las buenas costumbres y que jamás derramara sangre
inocente. Tras ser degollada, Quiteria se puso en pie y tomó su cabeza con ambas
manos y caminó hasta el pueblo de Aufragia, distante a unos treinta kilómetros de
allí, llegando muy cansada y exhausta con los pies doloridos y ensangrentados,
donde paró y fue sepultada por cristianos.
El Verdadero Santuario Católico 77
Me gustaría saber cómo la cabeza estando desprendida del cuerpo ordenaba a los
pies ir por el camino a Aufragia sin volcarse a la derecha o a la izquierda.
Al parecer, la cabeza desprendida, iba dictando al cuerpo las indicaciones para
guiarlo por el buen camino, diciendo: “tírate un poco a la derecha”, “cien metros
más al frente hay una curva cerrada” o “frena un poco que el camino tiene una
loma de burro adelante”, como si de un auto se tratara.
El cronista dice: “llegando a Aufragia, paró de caminar y fue enterrada por
cristianos”.
¿Y qué otra cosa podrían hacer? ¿Invitarla a bailar? ¿Regalarle una corbata?
¿Ahorcarla? ¡Ja! ¡Ja! ¡Ja!
Este remate es excelente para dar fin a la fábula de Quiteria.
Imaginad que su historia siguiera, y la santa recorriera el mundo haciendo
milagros con la degollada cabeza en las manos, sería una historia sin fin que
duraría hasta nuestros días.
Los restos de la santa jamás fueron encontrados, por suerte, ya que la historia se
ubica muy lejana en el tiempo, en el año 391.
Ay, hermano católico, ¡cómo me asustan estas crueldades que ocupan los
fantasiosos curas para obligarte a que seas mariano y santulario en vez de cristiano
simple y creyente!
¡Huye de éstas fantasías que te pierden en idolatrías que odia el Señor!
Ahora bien, ¿dónde está la virtud de ésta santa para ser venerada e intercesora
entre Dios y los hombres?
¿No fueron suficientes los martirios de Jesús?
¿Qué milagro viene de Dios, resucitar a los tres días o caminar treinta kilómetros
con la cabeza en las manos? ¿Por cuál cruz pasó esta sufrida mujer sino es la de
tener un padre jugador y loco que mandara a decapitarla por rebelde al
casamiento? ¿Esta es la Mesías que esperaron los católicos para ser limpios de
pecados? ¿Solo por no querer coger con el pretendiente impuesto se llega a la
santidad?
Si es así esperad a que me muera que seré vuestro santo e intercesor, ya que, aun
queriendo, estoy sin coger desde la muerte del papa Pío XII, allá por 1958, y no
porque no quiera, sino que siendo viejo, pobre y feo, ni las putas quieren hacerlo
conmigo en la actualidad, en el 2014.
¡Sesenta y seis años de virginidad y pureza, que es mi edad, bien merecen mi
beatificación!
Pero, sigamos con la fábula.
El primer milagro de la santa fue la curación del pastorcito que la delatara, ya que
los perros que cuidaban las ovejas lamieron la sangre de la santa, rabiaron y lo
mordieron.
Produjo esto heridas cortantes y sangrantes, que al lavárselas con el agua de una
fuente salida por milagro para calmar la sed de Quiteria en su huida, antes de ser
decapitada, le sanaron.
78 El Verdadero Santuario Católico
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El Verdadero Santuario Católico 79
Mientras estuvo prisionero, sufrió una grave enfermedad cuyo nombre se ignora, la
que le hizo reflexionar espiritualmente, y decidió cambiar su forma de vida.
Del encarcelamiento y lo de la enfermedad no hay pruebas que lo demuestren,
pero están puesto exprofeso para darle forma a su vida de santo, tejiendo
lentamente la telaraña con que se envuelven estas tradiciones para hacerlas
creíbles y verdaderas.
Todos los santos que son encarcelados, sin excepción, salen de sus celdas con una
terrible enfermedad sobre sus espaldas, como si fuese un castigo de Dios para
obligarlos a cambiar de vida.
En 1205, al regresar a su ciudad natal, realizó obras de caridad entre los leprosos y
comenzó a trabajar en la restauración de iglesias en ruinas, en respuesta, según se
dice, a una visión en la que el crucifijo de la iglesia de San Damián en Asís le
pedía que reparara su casa.
La cruz del pequeño templo de San Damián, medio abandonado y destruido, a
través de Cristo, le habló en el silencio de su muda y amorosa contemplación:
-Mira, Francisco, repara mi iglesia. Ya ves que está hecha pelota. -
Sí señor, el crucifijo colocado en lo alto de la iglesia le habló y ordenó con voz
pausada que reparara el edificio que se derrumbaba de viejo y abandonado, ya
sin puertas, techos ni ventanas.
El joven Francisco no vaciló: corrió a su casa paterna, tomó unos cuantos rollos de
paño del almacén y fue a venderlos a Feligno, una ciudad contigua; luego entregó
el dinero así obtenido al sacerdote de San Damián para la restauración del
templo.
En ésa época no eran pocas las críticas que se infería a la iglesia, ya que algunos de
sus ministros se preocupaban más por el crecimiento patrimonial personal y sus
relaciones políticas de conveniencia, dejando los templos de pueblos en el más
absoluto abandono.
El templo de san Damián era un edificio en ruinas, rajadas sus paredes,
descascarado y a punto de derrumbarse, que Francisco reparó con la venta de los
paños dejándola más lujosa que el Vaticano.
El cambio de vida de Francisco, mística y soñadora, y sus gastos en obras de
caridad enfurecieron a su padre, que era medio amarrete y cuidaba su dinero
ganado con el sudor de su culo como para gastarlo en pelotudeces, y lo desheredó
legalmente.
Francisco renunció a sus lujosas ropas a cambio de una humilde túnica y dedicó los
tres años siguientes al cuidado de los leprosos y de los proscritos en los bosques del
monte Subasio.
Para sus oraciones, Francisco también restauró la ruinosa capilla de Santa María
de los Ángeles.
No podía quedar María fuera de la fábula.
El Verdadero Santuario Católico 81
En el año 1208, durante una misa, escuchó una llamada diciéndole que saliera al
mundo y, siguiendo el texto de Mateo 10, 5-14, “no poseyera nada pero hiciera el
bien en todas partes”.
Cuando regresó a Asís ese mismo año, Francisco empezó a predicar, y se convirtió
en el fundador del movimiento de renovación de la espiritualidad cristiana del
siglo XIII.
Reunió a los 12 discípulos que se convertirían en los hermanos originales de su
orden, más tarde llamada la Primera Orden, y que le eligieron su superior.
En 1212 recibió en la comunidad franciscana a una joven monja de Asís de buena
cuna, de lindos pechos y llamativas nalgas, llamada Clara, y ambos se enamoraron
perdidamente; se hicieron carne y uña, es decir hacían el amor con tanta fogosidad
que se arrancaban las carnes con las uñas.
A través de ella se fundó la orden de las Damas Pobres (las clarisas, más tarde
Segunda Orden franciscana), pues tenía la misma locura de su amante: cosechar
legionarios que predicasen los evangelios de María.
Probablemente ese mismo año Francisco emprendió camino hacia Tierra Santa, a
Palestina, pero una tempestad le obligó a volver.
¡Cómo! ¿Una sola tempestad lo hizo regresar?
¿Cuánto tiempo dura una tempestad?
Seguramente, mientras volvía a Asís, la tormenta ya desapareciera.
En medio de grandes dificultades para cumplir su labor misionera de predicar al
Santo Padre, o sea al papa, viajó y llegó a España para evangelizar a los
musulmanes.
En todos estos viajes le acompañaba la monja santa Clara, pues eran culo y calzón.
En 1219 se encontraba en Egipto, donde ejerció su labor misionera pero no
consiguió convertir al sultán Al Fatad Faneyín, que no sé yo qué andaría haciendo
por esas tierras de faraones, lejos de Arabia.
Francisco viajó después a Tierra Santa permaneciendo allí hasta el año 1220.
De éstos viajes no hay pruebas, solo se saben por dice que, por las sagradas
tradiciones, y por los relatos apócrifos de sacerdotes biógrafos.
Quería ser martirizado y se alegró mucho al saber que cinco monjes franciscanos
habían muerto decapitados en Marruecos mientras cumplían sus obligaciones, lo
cual demuestra patente su gran compasión y bondad hacia el prójimo.
A su regreso, encontró oposición entre los frailes y renunció como superior.
Dedicó los años siguientes a planear lo que sería la Tercera Orden franciscana, la
orden terciaria.
Oiga… ¿hay que planear para inventar estas boludeces?
En septiembre de 1224, tras cuarenta días de ayuno, mientras rezaba en el monte
Averno sintió un dolor mezclado con placer; y en su cuerpo aparecieron las marcas
de la crucifixión de Cristo, los estigmas.
Yo jamás supe de dolores mezclados con placeres, salvo cuando te rompen el culo.
82 El Verdadero Santuario Católico
Los relatos sobre la aparición de estas marcas difieren, pero parece probable que
fueran protuberancias nudosas de carne, parecidas a la cabeza de un clavo de
techo, o a la cabeza de la verga de un burro, no se sabe con exactitud.
Francisco fue llevado de regreso a Asís, donde pasó los años que le quedaban
marcado por el sufrimiento físico y por una ceguera casi total, acompañado, muy
bien acompañado, por santa Clara. Sus padecimientos y su amor por santa Clara
no hicieron disminuir su amor a Dios y a la Creación, como queda de manifiesto en
su “Cantico delle Creature” (Cántico de las criaturas), que se cree fue escrito en
Asís en 1225, en el que el sol y el resto de la naturaleza son alabados como
hermanos y hermanas.
También es famosa su predicación a los peces de un lago, en el que miles de ellos
asomaban el pico fuera del agua sin que se asfixiaran, para escuchar mejor la
oratoria del santo, o quizá esperando que les diera algo de comer.
En los árboles, miles de pajaritos de variados trinos y colores, incluso un cóndor
que andaba extraviado buscando la cordillera de los Andes, lo escuchaban
extasiados, con el pico cerrado.
Un lobo sanguinario entraba por las noches a un pueblito de mala muerte y
mataba gallinas, perros, chanchos y hasta personas para comer, lo que hacía que
los turistas norteamericanos desaparecieran de sus comercios produciendo
grandes pérdidas en dólares, viendo lo cual el intendente, encerrado en su casa,
pidió a San Francisco por wassap que hablara al lobo y le propusiera el siguiente
trato: que el pueblo le daría las sobras de todas las mesas a cambio de que en
adelante no matara a nadie.
Así lo hizo Francisco y subyugado por su predicación, allí mismo el lobo se
convirtió al catolicismo, se confesó y tomó la hostia de las propias manos del santo.
Por ésta acción, fue canonizado en 1228. El lobo, no Francisco.
Probablemente el 14 de septiembre oró para recibir dos gracias antes de morir:
sentir la Pasión de Jesús, y una enfermedad larga con una muerte dolorosa.
Después de intensas oraciones, entonces en un trance profundo -según relato de
San Buenaventura- el mismo Nazareno se le presentó, crucificado, rodeado por
seis alas angélicas, y le imprimió las señales de la crucifixión en las manos, los pies
y el costado; posteriormente, sus hermanos vieron los estigmas de Francisco, que él
conservó por el resto de su vida.
Sin embargo, Francisco -al igual que otros santos estigmatizados- hizo todo lo
posible para ocultarlos a la vista de los demás por considerarse indigno, no del
dolor que sentía, sino de ser portador de las señales de la Pasión de Cristo.
Por eso, anduvo desde entonces con las manos metidas entre las mangas del hábito,
y con los pies cubiertos por medias y zapatos.
Se veían en aquellos dichosos miembros unos clavos de su misma carne, fabricados
maravillosamente por el poder divino y tan connatural a ella, que, si se les
presionaba por la cabeza, al momento sobresalían las agudas puntas por la parte
contraria, como si fueran nervios duros y de una sola pieza.
El Verdadero Santuario Católico 83
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84 El Verdadero Santuario Católico
Santa Engracia
(Santa en desgracia)
Los protestantes desparramaban la fe única en Cristo y cada día tenían más fieles
que se rajaban de la iglesia católica por el aburrimiento que les causaban el culto
a las vanas estatuas de dioses y santos paganos.
A esto había que agregarle el testimonio que daban los mártires antes de morir y
que muchos vieron, el buen ejemplo, la transmisión boca a boca de los creyentes y
la fidelidad a Dios que profesaban.
Valiente y guiada sin duda alguna por el Espíritu Santo, santa Engracia se
presentó -junto con su séquito- ante Daciano y le reprochó su cruel conducta y
actitud, la de acusar sin ton ni son de protestante a quien pasara por la ciudad.
El gobernador, desoyendo los reproches de la santa, intentó, con halagos y
promesas, que admitiese su condición de protestante, lo que ella negaba
firmemente gritando a los cuatro vientos ser acérrima católica y fiel al papa y a
María, de mentiritas.
Engracia volvió a protestar contra las injusticias que sufrían ella y su séquito y fue
condenada a ser arrastrada alrededor de la ciudad atada a la cola de un caballo,
aunque algunos historiadores afirman que lo fuera de los dos guevos de un burro,
que esto tampoco se sabe bien.
Pero no murió.
Después los verdugos desgarraron su carne con garfios, le sacaron el hígado y le
arrancaron un pecho, le cortaron tres dedos, le aplastaron un ojo, hasta que la
tortura provocó en Daciano, gobernador en Hispania del emperador Diocleciano,
gran compasión y lástima y ordenara que la dejaran tranquila desangrarse hasta
que muriera.
Pero tampoco murió.
Ella se reía de todas estas infantiles torturas mientras decía con voz tronante:
“Quod non me necat, fortior me facit4
Ordeno entonces el gobernador que se le atravesase la cabeza con un clavo de
cinco pulgadas, y sí, ahí murió irremediablemente el 16 de abril del año 303.
Esto de Daciano y Diocleciano son personajes reales, o quizá no, que los sacerdotes
toman al azar, por hacer el relato verídico y ubicarlo en la historia y hacer creer al
imbécil católico la fábula, pero muy posiblemente ellos no tuvieron el menor
conocimiento ni trato con la santa, y fueran hombres buenos y piadosos, y en sus
putas vidas la vieron ni en estampitas.
O sea, para hacer santas, la iglesia católica hace demonios a los hombres santos de
su rededor.
Los dieciocho pelotudos que le acompañaban, también fueron decapitados sin
piedad en las afueras de la ciudad, y se los conoce como los Mártires de Zaragoza.
Analicemos detenidamente la condena de Engracia: fue arrastrada por caballos o
por burros por toda la ciudad y no murió, lo cual hace conjeturar que la ciudad
tendría menos de media cuadra, o que los animales eran de madera.
4 "Lo que no me mata, me hace más fuerte"
86 El Verdadero Santuario Católico
Aún viva, sus verdugos le arrancaron las carnes con filosos garfios, y quedando
hecho un esqueleto, le arrancaron un ojo y tres dedos, además de sacarle el hígado
para que muriera, aunque lo lógico sería que le sacaran el corazón para lograrlo.
Y para rematar, le cortaron una teta con un cuchillo, cosa innecesaria porque ya
antes le habían arrancado las carnes con los garfios.
¿O las tetas no son buenas carnes?
Viendo que aun así no moría, el gobernador ordenó que la dejaran desangrarse sin
que nadie le diese ni siquiera un apósito, una gaza ni una gota de tintura yodo, ni
hilo ni aguja para remendar sus heridas.
La mina se va en sangre pancha y contenta por varias horas, sin espichar
definitivamente, mientras el pueblo se cansa de esperar su prolongado deceso.
El gobernador entonces, por quitar la impaciencia del pueblo y la suya propia,
ordena que le atraviesen la frente con un clavo, y ahí sí muere instantáneamente.
Hermanos sacerdotes, hubiéramos empezado por ahí para matarla, y no
tendríamos que soportar tantas imbecilidades encimadas ni hacer sufrir tan
despiadadamente a tan empecinada mujer en la fábula.
Las actas del martirio -¡qué pena sean del siglo VII, tan tardías, y por ello con poco
valor histórico!- describen los hechos martiriales con el esquema propio a que nos
tienen acostumbrados los historiadores, en el que es difícil atreverse a separar qué
cosa responde a la realidad y qué es producto imaginativo con que se dejaron
llevar como consecuencia de la enorme piedad de los cristianos.
¡Mirad en qué terminó su malogrado casamiento solo por pasar por Zaragoza,
siendo que fácilmente para ir a la ciudad de Narbona podría desviarse por
caminos laterales sin tocar ni entrar por tan despiadado pueblo!
Digo yo, ¿no hubiera sido más lógico y natural que el novio que vivía en la ciudad
gala de Narbona, se hubiese trasladado a Braga para casarse con su novia?
Si uno anda enamorado atraviesa mares y montes con facilidad, porque el amor es
la proa que no atajan ni vientos ni mareas.
¿Tan haragán era el novio, o tan ocupado, que dejó que su novia atravesase media
Europa para que en vez de caer rendida a sus pies cayera muerta a los pies de
Daciano? ¿Cómo se conocieron los novios tan alejados uno del otro? ¿Por
Facebook, por Email?
Y si era noble y rico, ¿no se le ocurrió mandarle un carruaje con soldados y
sirvientes para trasladarla sin peligro?
¿Y qué era esta inmortal mujer: una santa o la Mujer Maravilla que no había
tortura que la matara? ¿Pueden en ésta época ser tenidas por ciertas éstas fábulas
imbéciles y a toda vista fantasiosas sin que haya el más mínimo documento
histórico que las acrediten, si no se cuentan las redactadas por los sacerdotes
desocupados, soñadores y místicos que se rascan las pelotas dentro del Vaticano
inventando éstos descabellados martirios?
¡Cuán grande es la imaginación del hombre y cuán infinita es su inocencia para
tener por cierta cualquier descocada fantasía católica!
El Verdadero Santuario Católico 87
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88 El Verdadero Santuario Católico
San Valentín
(Santo de los Enamorados)
En definitiva, se puede decir igual que escribió una carta, una esquela o un libro,
porque no hay la más mínima prueba de que cualquiera de estas cosas fuera
cierta.
La realidad es que unos días antes de la celebración de San Valentín, se celebraba
la fiesta pagana y romana de las Lupercales en que se veneraba a Luperco, dios
ítalo de los pastores que representaba la fertilidad de los campos y de los rebaños,
y por extensión, la fecundidad de las pastoras que cogían con los pastores entre los
yuyos del monte mientras las ovejas balaban de hambre y sed.
Durante esta fiesta las mujeres esperaban ser golpeadas con látigos hechos de piel
de cabras y perros, mojados en la misma sangre de estos animales, ya que creían
que este ritual les otorgaba fertilidad. ¡Con razón hay muchos perros y cabras!
Siglos más tarde, en el año 496, el Papa Gelasius I prohibió la celebración de
Lupercalia e instauró el 14 de febrero como día de la fiesta de San Valentín.
Viendo la gran cantidad de idólatras que tenía el dios Luperco, tantos como hoy
tiene el santo Gauchito Gil, los curas que no son bobos, lo fueron reemplazando por
Valentín, santo tan imaginario como el otro, y promovieron y difundieron las
referidas patrañas que inventaron en una historia pía y amorosa, obligando al
crédulo pueblo católico a la costumbre de enviar tarjetas de felicitación u ofrecer
algún regalo a la pareja elegida en prueba de amor.
La festividad de san Valentín era celebrada por la Iglesia católica cada 14 de
febrero porque es el tiempo en que los pajaritos comienzan a coger a cada ratito,
principalmente los gorriones que en segundos saltan de una hembra a otra y cuyas
cópulas no duran siquiera un segundo, visto lo cual, la iglesia católica, con el papa
Gelasio I, santificó a Valentín como un santo que se veneraría para el culto a la
fertilidad.
Pero en 1969, la propia institución dejó de celebrar y nombrar al santo, por
considerar que no había pruebas para demostrar su existencia, y se lo borró del
mapa litúrgico.
En 2014, el papa Francisco decidió participar en la celebración de San Valentín,
en un intento por devolverle el sentido religioso a esta festividad surgida en
principio para contrarrestar a las paganas lupercales.
Un cráneo atribuido a san Valentín Mártir se conserva dentro de una urna de
cristal, a la vista de los fieles, en la Basílica de Santa María in Cosmedin en Roma.
¡Santo Dios, ésta es una religión de cráneos putrefactos!
Los católicos le tienen mucha devoción y es invocado para curar la epilepsia y la
picazón del culo sin bañarse.
A partir del siglo XV se le representa con un niño tendido a sus pies.
En América, hacia 1842, Esther Ángel Howland comenzó a vender las primeras
tarjetas postales masivas de san Valentín, conocidas como “valentines” con
símbolos con la forma de corazón o del ángel Cupido.
También desde ése día es común la tradición de regalar rosas a aquellas personas
a las que uno tiene un afecto especial.
El Verdadero Santuario Católico 91
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92 El Verdadero Santuario Católico
Sobrevivía por la zona un indio pelotudo llamado José que tenía dos docenas de
hijos a los que alimentaba con lo que sacaban del río, o sea de la pesca, y en una
ocasión en que el río bajara su caudal, sus hambrientos niños se fueron a jugar
hasta el recodo del profundo cauce del río, frente a la llamada Isla Verde.
Cuál sería el asombro de los niños al ver sobre una piedra, parada, con su misma
indumentaria tallada y el mismo noble y piadoso porte de súplica a Dios o al
Diablo, la imagen arrebatada de la iglesia de la reducción, rodeada de una luz
brillante y de una música celestial interpretada con instrumentos de cuerdas.
Sí, señores, parecía que la Sinfónica de Londres la arrullaba con violines,
violonchelos y contrabajos.
Para mentir, hay que mentir en grande.
El padre doctrinero fray Luis Gámez fue informado enseguida y organizó el
traslado de la imagen para retornarla nuevamente al Yaguarí.
Los curas se pusieron alegres y contentos cuando recuperaron su ídolo tan
preciado, e hicieron un gran asado con chupandina incluida.
Libaron vino como locos, hasta quedar dormidos, y he aquí que los indios entraron
nuevamente al campamento, y en vez de degollarlos a todos, resolvieron darle un
castigo peor que derramar sangre: volvieron a robar el ídolo de pesada y dura
madera.
Quítale al idólatra su ídolo y lo dejaras desnudo de amor.
Con la virgen a cuestas, huyeron sin que los sacerdotes despertaran de la
borrachera que tenían, y sin darse cuenta del peligro que pasaron estando
dormidos.
Los indios en medio de risas y burlas a la imagen la volvieron a tirar al río para que
fuera alimento de los peces y de la pudrición.
Pero he aquí que tres días después la volvieron a encontrar en el mismo sitio
anterior, parada sobre una piedra, con lo que el padre doctrinario comprendió que
la virgen quería quedarse allí para que se la venerara.
Los sacerdotes locos de contentos la volvieron a abrazar y adorar dándoles besitos
y caricias al apreciado ídolo.
Era para ellos el regreso del hijo pródigo, el José hallado en la abundancia de
Egipto, el Sansón que los vengara de los filisteos, y volvieron a festejar con otro
gran asado y nuevas borracheras.
Cuando se les pasó el efecto alcohólico comprendieron que la virgen quería
quedarse en ése lugar, quizá para ser nuevamente raptada y bañada por los
indígenas, vaya uno a saber.
En consecuencia, el padre Gámez resolvió trasladar la población a las
inmediaciones del lugar del hallazgo.
Por otra parte, Yaguarí debía forzosamente trasladarse, ya que su situación se
prestaba a los atropellos, mientras que el lugar del hallazgo, por lo alto y abrupto,
era más favorable para la defensa contra las irrupciones de los salvajes.
94 El Verdadero Santuario Católico
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El Verdadero Santuario Católico 95
Cuando se te pierde algo y lo buscas desesperado, así sean las llaves de tu casa o el
papel higiénico del baño, debes implorar a santa Rita de la siguiente manera:
-Santa Rita, santa Rita, lo que se da no se quita- (pedir luego treinta y
tres veces, la edad de Cristo, lo que se haya perdido o el deseo, que por su
santa intercesión será cumplido)
“Oh Dios, que en tu infinita ternura has sido bondadoso para escuchar la
plegaria de tu sierva Santa Rita, y otorgas a su súplica lo que es
imposible a la vista, conocimiento y esfuerzos, en recompensa de su
apasionado amor y firme confianza en Tu promesa, ten piedad en nuestra
adversidad y socórrenos en nuestras calamidades, para que el no
creyente pueda saber que Tu eres la recompensa del humilde, la defensa
de los sin esperanza, la fuerza de aquellos que confían en Ti, a través de
Jesucristo, nuestro Señor. Ruega por nosotros, sagrada Santa Rita, para
que seamos dignos de las promesas de Cristo”
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El Verdadero Santuario Católico 101
El Gaucho Lega
(Santo Autonomista)
Algún día que ande al pedo como quien dice, entre Ud. al
cementerio de Saladas en la provincia de Corrientes por
un rato, no eternamente quiero decir, y quedará
admirado y sorprendido al ver una fastuosa tumba
colorada bien en su entrada.
En verdad la tumba es un mamarracho, y voto a Satanás
que jamás le aconsejaría yo visitarla, pero como tengo
que describir la vida y muerte del santo Lega, allí
enterrado, le aconsejo conocerla, para que vea con
propios ojos ser verdad lo que digo.
Toda pintada de rojo, con grandes banderas del mismo color, e infinitas velas
consumidas por doquier que semejan escupidas de borrachos, o flemas de tos
convulsa, jarrones rotos con restos de flores, cintitas coloradas, herraduras con siete
agujeros, cagadas de gatos y perros, repulsivas cruces de madera y metal, vómitos
y orines nauseabundos, mantas, escapularios y mantillas religiosas, etc., que
forman su inventario.
Si dije fastuosa tumba fue porque no se me vino otro término para describir la
pudrición y asquerosidad en la que se levanta, y la idolatría que genera en el
pueblo correntino el santo que ocupa semejante y asqueroso mausoleo,
descansando entre ésas inmundicias profanas.
Es la tumba del gaucho Olegario Álvarez, conocido con el nombre de "Gaucho
Lega", que nació en Saladas en 1871 y murió acribillado por la policía el 23 de
mayo de 1906.
Este santo profano inspiró una profunda oleada de heroísmo en esa tierra de
héroes, y no sólo de los héroes que deambulaban por la zona, pues también en
Saladas había nacido el sargento Cabral, que en el combate de San Lorenzo salvó
de la muerte al general San Martín, otro correntino de ley.
Siendo joven, en un comité autonomista, mató a un hombre en pelea, y poco
después, en un duelo criollo, dio muerte a otro gaucho, a quien llamaban Poncho
Café, que era pariente de las autoridades locales, por lo que no se lo perdonaron,
siendo condenado a cadena perpetua.
Pasó doce años en la Penitenciaria de la capital de Corrientes condenado por
asesinato hasta que logra fugarse en 1904, gracias a que los pelotudos policías que
estaban de guardia salieron a la vereda a mirar los corsos en una noche de
carnaval que se realizaba en una amplia calle de tierra que después se llamaría 3
de abril, y que actualmente termina en el puente que hermana a Corrientes y
Resistencia.
102 El Verdadero Santuario Católico
Era un amuleto de las antiguas tribus guaraníes, confeccionado por el "abá payé"
(padre hechicero).
Este fetiche, amuleto o "curundú" consistía en una pequeña cruz hecha con un
pedazo de una campana "cué" (vieja) de una iglesia católica, especie de talismán
milagroso que preservaba de la muerte a quien la portara.
Hubo tal aceptación de ésta tontería que gauchos incultos hubieron que para
mayor efectividad del hechizo, robaron de las iglesias las enormes campanas de
sus torres y se las colgaban del cuello arrastrándolas pesadamente para no morir
nunca. Sin embargo, morían por el enorme esfuerzo de arrastrarlas.
Una siesta en que el gaucho Lega dormía plácidamente bajo un umbroso
sicomoro, fue rodeado por una pequeña partida de doscientos policías, cincuenta
cabos, treinta sargentos y el comisario, los cuales, ante la negativa del reo de
rendirse buenamente y en paz, lo acribillaron con ciento noventa y nueve certeros
balazos de la tropa, y un bodoque duro de arcilla que le arrojó con una onda un
agente medio chambón al que se le trabara el fusil.
Fue acribillado y luego colgado de un árbol.
Los soldados, por burlarse, tenían que pasar y cortarle una parte de su cuerpo, y así
uno le sacaba las tetillas, otro un dedo y cual una bola.
Sin embargo, el santo milagroso no moría, como todos los santos.
De acuerdo con la leyenda, esto pasó el 13 de mayo de 1906, pero como Lega "no
podía morir a pesar de tener ciento noventa y nueve chumbos en el pecho y el
bodoque de barro inserto en la frente", debió pedir a sus captores que le
desprendieran la cruz sujeta al cuello, lo que se hizo.
Murió en santa paz y con una santísima tranquilidad de conciencia, y hoy está en
el cielo, a la derecha del Padre, intercediendo por todos aquéllos buenos católicos
correntinos que son sus fieles devotos.
Su cadáver fue sepultado con muchas pompas y honras en el cementerio de
Saladas, cuya tumba está totalmente pintada de color rojo, con abundantes placas
de agradecimiento por los milagros otorgados, y banderas rojas sostenidas por
largas tacuaras.
Como contrapartida a su desdichada muerte, su fama se agigantó hasta los cielos,
y renació como mártir asesinado injustamente y como gaucho legendario y
milagroso.
La imaginación pueblerina, que nunca duerme, y la estupidez e ignorancia
siempre despierta del correntino, acrecentó en pocos años su fama de milagroso.
En cuanto al amor, Lega tampoco se quedó corto con la leyenda y el romanticismo.
Un atardecer, amparado por las sombras y el canto de los primeros pájaros
nocturnos, dejó su caballo detrás de la casa de un tal Lafuente, oficial primero de
policía, y como un yaguareté que ha tomado todas las mañas de su perseguidor
para no ser cazado, esperó que el oficial vaciara su botella de ginebra sentado en
un sillón, y sólo cuando notó que la autoridad se había dormido, Olegario
sigilosamente fue al rescate de su novia, Ángela Alegre.
104 El Verdadero Santuario Católico
La muchacha permanecía recluida en la casa del oficial desde que Lega escapara
de la cárcel, para ocuparla de señuelo y aprovechar de paso para echarle unos
buenos polvos con la cautiva.
La sola sonrisa y el beso de Ángela justificaron la imprudencia de acercarse de
nuevo a Saladas, donde era buscado y fácilmente reconocible.
Dicen que Ángela se quedó junto a él hasta el mismito momento, el 2 mayo de
1906, en que la partida policial terminó con la vida de Olegario Álvarez, y
también con la de Adolfito Silva, en el paraje denominado Juruti, en Rincón de
Luna. Aparicio Altamirano pudo escapar y fue muerto en 1932.
Leguita, como se lo llamaba cariñosamente, con apenas 35 años fue acribillado a
balazos por la Policía, que dio cuenta de su muerte con gran alarde.
Cuando la Policía bajó el cadáver atado al caballo, el cuerpo emitió unos
quejidos, tal vez por el aire que aún tenía en los pulmones y expulsara por la boca,
aunque algunos historiadores quieren afirmar que su último suspiro fue en
realidad un soberano pedo del caballo que lo transportaba, al verse libre de
semejante peso. Se dijo entonces que aún estaba vivo.
En el patio de la comisaría, sólo después del largo traslado de su cuerpo a lomo de
caballo, le quitaron el “curundú” del cuello, un amuleto con forma de cruz,
confeccionado con el metal de una campana de iglesia católica.
El amuleto no servía si se lo hacía con una campana de escuela, o de una estación
de trenes o de una iglesia evangelista, sino de que indefectiblemente debía ser de
una iglesia católica, que es la que se dedica a inventar éstas historias.
Según cuenta la leyenda guaraní, gracias al payé y pese a haber sufrido heridas
de gravedad en muchas ocasiones, Lega no moriría hasta que se lo quitaran.
Él mismo, dicen, aún muerto, pidió a sus captores que se lo sacaran para poder
descansar en paz, con voz profunda de ultratumba.
Poco a poco, con el correr de los días, las andanzas de Olegario se volvieron parte
de la mitología guaraní.
La creencia popular dice que su ánima vaga por los ranchos ayudando a los
necesitados y a todos aquellos que se acuerdan de él, le rezan y le encienden una
vela colorada.
Su tumba tiene frente al cementerio un pequeño oratorio, para elevar oraciones al
cielo y depositar dineros para el milagroso gaucho Lega.
La gente la visita depositando en el suelo velas, flores, paños colorados, y toallas
coloradas para que el alma del santo seque sus lágrimas y su acribillado cuerpo
después de bañarse en la ducha del paraíso, al fondo y a la derecha detrás del
trono de Dios.
También dejan dineros, relojes y anillos que los curas santamente hacen ingresar a
sus arcas para su bien vivir, y el del papa, y cautivados por su condición de santo
milagroso, llegan muchísimos fieles enfermos, tuertos o cojos, con sus ofrendas de
oraciones, misas y novenas, confundiendo ritos paganos y satánicos con
manifestaciones de cultos católicos.
El Verdadero Santuario Católico 105
Las cintas pueden ser compradas siempre que se las reponga con otras nuevas y
vírgenes: tienen poder para curar enfermedades y aliviar dolores.
En sus extremos llevan bordadas las iniciales "O.A."
El rancho es constantemente visitado por aquellos que le atribuyen poderes
sobrenaturales a la falange del santo.
Dicen que, aparte de curar enfermedades y dolores, otorga suerte en los juegos de
azar y poder en las peleas. ¡Qué hermosa historia!
Rápido, rápido, hay que beatificar a este asesino, que liquidó sin piedad a una rica
familia de estancieros sin perdonar a mujeres ni a niños porque se negaron a darle
un avío de carne, pan y vino que pidiera para continuar huyendo de la policía.
Esto sucedió en “El Pasito” (General Paz), donde ni los niños escaparon a su
demencial sed de sangre, ni al macabro escarmiento dado al estanciero llamado
Alvarez y a su familia, dejando sus cabezas colgadas de los hilos del alambrado,
con lo cual se pone de relieve la peligrosidad del bandido y sus compinches.
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106 El Verdadero Santuario Católico
Santa Lucía
(Santa de la buena vista)
Los idólatras del lugar peregrinaban todos los años a la ciudad de Catania, para
venerar los restos de Santa Águeda, que había muerto en el 251, durante le
persecución de Dedo.
Vaya uno a saber quién carajo era éste Dedo, o si era gordo o un meñique.
Águeda era venerada por los cristianos, pero sobre todo era muy conocida por los
numerosos milagros que había operado en sus devotos.
Donde haya un milagro, sea blanco o negro, venga del aire o del sol, del vino o de
la cerveza, ahí estará el católico postrado adorando a cualquier cosa que se le
presente, sea animal, piedra, zapatos o gente.
El 5 de febrero de 301, fiesta de la santa, Lucía y su madre peregrinaron hasta
Catania para rogar por la curación de Eutiquia que sufría de hemorragias desde
hacía cuarenta años. No tenía bombacha que se mantuviera inmaculada y limpia.
Esto de las hemorragias de las mujeres es una enfermedad repetitiva en los relatos
de santas y vírgenes, sacado de uno de los milagros de Jesús, y hay tantas
sanaciones y curaciones de este tenor en éstas fábulas, que a veces, cuando estoy
mirando las góndolas de los supermercados, pienso que las toallitas higiénicas y
tampones femeninos se inventaron al divino cohete, o sea al pedo, que con solo
pedir su cura a santa Ägueda, santo remedio.
Las santas nunca tienen éstas hemorragias, sino que siempre las padecen sus
madres o sus abuelas, que sería de mal gusto achacarlas con éstos asquerosos
derrames.
En el templo, Lucía se durmió de aburrida y en sueños se le apareció Águeda
diciéndole:
-Lucía, ¿por qué me pides lo que tú misma puedes conceder? Tu fe ha
alcanzado gracia y tu madre está curada.-
Si no durmiera en el templo, jamás se le aparecería la santa en sueños, y si estaba
durmiendo, ¿cómo pidió la curación de su madre?
Al despertarse, Lucía le contó a su madre el sueño y Eutiquia descubrió que
estaba completamente curada.
¡Cómo! ¿Enseguida descubrió que estaba sana?
Entonces no tendría una minúscula pérdida de sangre, sino una canilla de verter
sangre.
Tendría una hemorragia tempestuosa, imparable, que al curarse se detuviera
instantáneamente para darse cuenta del milagro.
El suceso sirvió para que madre e hija iniciaran una relación más estrecha, y esto
da a entender que la relación entre ambas era más bien muy distendida,
distanciada.
Lucía le confió que había decidido consagrarle su vida al Señor y Eutiquia le
anticipó que había resuelto dejar en sus manos su cuantiosa fortuna.
A su regreso, Lucía comenzó a vender sus bienes y a repartirlo entre los pobres,
para mal de sus males.
108 El Verdadero Santuario Católico
Dejó, sin embargo, su computadora a pedal, con la que abrió una página en
Facebook y todos los días miraba los infantiles dichos y concejos del papa
Francisco Berboglio, y las pelotudas oraciones a María de Patico Cordobés que
prometía que recibirías una fortuna en monedas de oro si ponías “amén”.
El hecho, repartir sus dineros, fue interpretado por las autoridades como un claro
indicio de que Lucía se había hecho papista imitando su desprendimiento a favor
de los pobres.
El joven con el que su madre la comprometiera, dolido de la decisión de la santa
de huir del matrimonio y consagrarse a Dios, al no ser correspondido, se dejó llevar
por su resentimiento y la denunció ante el prefecto. ¡Hijo de puta!
Lucía es la patrona de la vista, y deriva quizá de la cercanía etimológica del
nombre griego “Lucía” con el término latino lux (luz).
Existe la leyenda de que fue la belleza de los ojos de Lucía la que no permitía
descansar a su pretendiente, por lo que ella se los arrancó con un cuchillo y se los
envió por encomienda certificada. ¡Toma para vos! ¡Esto sí que es imaginación!
En sus estampitas se la ve sosteniendo un plato en las manos donde descansan fofos
e inquietos sus ojos arrancados, con miradas estrambóticas y sin rumbo, antes de
hacer la encomienda. ¿Qué haría el novio teniendo solamente los dos ojos de la
amada, si detrás de ellos solo estaba el vacío? ¿Jugaría a las bolitas?
¡A la puta, lo que hay que hacer para conformar a un rijoso pretendiente!
Lleno de remordimiento e impresionado por el valor de Lucía, el pretendiente se
convirtió al cristianismo, como no podía ser de otra manera, y desde ese día fue
bien mirado por Lucía, aunque ya estaba sin ojos.
Se puede mirar también con los ojos del alma.
Una leyenda medieval decía que, cuando Lucía estaba en el tribunal, aun sin ojos,
seguía viendo, y ha de ser cierto, porque de otra manera no podría preparar la
encomienda con que los enviara a su pretendiente.
Este joven, de quien no podrás saber jamás cómo se llamaba, si era alto o flaco, ni
en qué trabajaba, es un personaje ficticio elegido y muy repetitivo para
enamorarse de toda santa y ser luego vilmente rechazado, y como consecuencia
del despecho denunciarla ante las autoridades, que así se escribe la historia de los
santos.
Pascasio era quien gobernaba Siracusa. Pascasio, Pascasio, me suena.
Está en casi todas las fábulas de santas cumpliendo el papel de torturarlas y
decapitarlas.
Cuando Lucía fue arrestada bajo la acusación de ser una cristiana, Pascasio le
ordenó que hiciera sacrificios a los dioses. Entonces Lucía dijo:
-Sacrificio puro delante de Dios es visitar a las viudas, los huérfanos y
los peregrinos que sufren en la angustia y en la necesidad, y ya es el tercer
año que me ofrecen sacrificios a Dios en Jesucristo entregando todos mis
bienes.-
El Verdadero Santuario Católico 109
¡Qué sabias palabras para dejar bien sentado su objetivo de agradar solamente a
Dios! Lo último no entiendo.
¿De qué tercer año, sacrificios y bienes habla?
Irritado Pascasio por lo que dijo Lucía, ordenó a sus soldados a que la llevaran a un
prostíbulo para que la violaran y luego se dirigió a Lucía diciéndole:
-Te llevaré a un lugar de perdición y así se alejará de tí el Espíritu Santo. Irás a
parar a un lupanar donde, aparte de estudiar matemática y filosofía durante el
día, aprenderás el sabio arte de la prostitución por las noches.-
Esto de mandar a las santas rebeldes a los lupanares era un castigo muy común de
la época, aunque para muchas más bien era una bendición y un placer venido de
Dios.
Los soldados la tomaron de los brazos para llevársela, pero por más que se
esforzaban, no podían con ella, ni siquiera moverla un centímetro, como si
estuviese clavada en la tierra; probaron también arrastrarla con cuerdas y
cadenas atadas a sus manos y pies, pero por más que se esforzaban, no podían
moverla. Las cuerdas y cadenas reventaban estrepitosamente.
Inexplicablemente la muchacha permanecía rígida como una gran piedra.
Pascasio hizo llamar a diez forzudos soldados para que llevaran a rastras a Lucía,
pero tampoco pudieron pues sus pies estaban como clavados en el suelo.
Luego hizo traer veinte bueyes, y tampoco logró moverla un centímetro; trajo
entonces cuarenta elefantes y tampoco pudieron despegarla del suelo.
Es más, uno de los elefantes se descaderó y a otro se le herniaron las dos bolas que
cayeron al suelo, del tamaño dos pelotas de fútbol, las que iba arrastrando
dolorosamente por el suelo.
Ay, Dios Santísimo, ¿no tienes mejor imaginación para darnos milagros menos
estúpidos y más inteligentes?
¡La gente te abandona por estas tonterías!
Al enterarse de lo sucedido, Pascasio acusó a Lucía de brujería y por esa razón fue
llevada a la hoguera, pero el fuego no le hizo ningún daño.
¡Epa! ¿Cómo la llevaron a la hoguera si era inamovible?
No, no y no, pelotudo, trajeron junto a ella las leñas y los troncos para quemarla…
Ah, ahora sí entiendo.
Al ver que no se cocinaba ni ardía, ordenó que le sacaran los ojos, pero no pudieron
pues sus cuencas ya estaban vacías de antes, y a pesar de ésa minúscula dificultad,
seguía viendo, con los ojos del alma.
Como se dijo antes, ella ya tenía las cuencas vacías y desiertas por enviarlos a su
pretendiente que estaba enamorado de ellos, y que se sepa, ella no tenía cuatro
ojos como para poder sacarle los dos últimos después que ella se sacara los dos
primeros para despacharlos por correo.
Pascasio, enfurecido, la condenó a ser decapitada.
Pascasio dispuso que primero la atormentaran a lo cual le dijo Lucía:
110 El Verdadero Santuario Católico
-Dios ha dicho: cuando los conduzcan ante los reyes y antes los tribunales de los
príncipes no se preocupen qué dirán o cómo se habrán de defender, porque
entonces no hablarán ustedes; será el Espíritu Santo el que hablará por boca de
ustedes.-
Esto fue consignado seguramente para que la fábula se apoye un poquitín en la
Biblia, cuando Jesús aconseja a sus discípulos dejar que fluya al Espíritu Santo
cuando estén ante el estrado de los jueces y rabinos.
Pero a Lucía ahí no más le aplastaron la lengua y le rompieron la boca con un
martillo, para acallar al Espíritu Santo.
Como Lucía quedara callada y muda para retractarse de sus creencias religiosas,
y por su boca ya no hablaba el Espíritu Santo, ni ella misma por carecer ya de
lengua y dientes, Pascasio se enfureció diciendo:
-¡Serás decapitada, hija de puta!
Este Pascasio gobernador sí que merece ser santo, por su gran tesón y
empecinamiento en sus convicciones y en la efectividad y perfección de su trabajo
de eliminar santas.
El 13 de diciembre de 304 Lucía sintió que su martirio estaba llegando a su fin.
Ella se arrodilló preparada para el golpe mortal del verdugo.
Pero primero pidió hablar con la multitud que se había reunido a su alrededor, a
la cual dijo:
-La persecución de los cristianos está terminando y la paz para la Iglesia es
inminente, así como la caída del emperador Diocleciano.-
Les recordó que en Siracusa ella siempre sería honrada, así como también la
veneración a Águeda de Catania sería imparable.
Cuando hubo terminado de hablar, por señas por supuesto, le cortaron la cabeza
para que no lo siguiera haciendo.
Fue sepultada en el mismo lugar donde, en el año 313, fue construido un Santuario
dedicado a ella.
El relato griego, que data del siglo V, y el relato latino del siglo VI al VII, son
idénticos en lo fundamental, aunque difieren en algunos detalles finales: según el
martiryon griego Lucía fue decapitada, en tanto que según la passion latina, fue
martirizada por uno o varios golpes de espada.
Elija Ud. el que le parezca más apropiado.
Según la tradición, su historia se divulgó por toda Sicilia como la santa que
consagró su virginidad y su martirio a Dios, siendo agradables y propicios para su
salvación, su pureza y santidad.
Y les profetizó que su memoria iba ser venerada en Siracusa y en Catania.
Fue muerta el 13 de diciembre de 304.
Hoy el nombre de Lucía y Águeda se mencionan unidos en la liturgia cristiana.
El cuerpo de Santa Lucía fue depositado en las catacumbas que reciben su
nombre y es considerada la santa de los siracusanos.
Su culto se extendió a otros lugares de Europa y llegó también a América y África.
El Verdadero Santuario Católico 111
Su nombre se incluyó en la misa a partir del año 604, aunque esto es mentira, ya
que aún no existían las misas como tales, ya que es un invento relativamente
actual.
Desde antiguo se la considera patrona de los pobres y los ciegos, de los niños
enfermos y de las ciudades.
Es patrona de los campesinos, electricistas, modistas, chóferes, fotógrafos,
afiladores, cortadores, cristaleros, sastres y escritores.
Se la considera la protectora de la vista por los prodigios que se le atribuyen.
La fórmula aprobada por el Vaticano dice que si a alguien le entra una basurita
en el ojo, que molesta y le hace lagrimear, debe decir:
-¡Santa Lucía, santa Lucía quítame del ojo esta porquería!-
Santa Lucía salvó muchas veces a Siracusa en momentos dramáticos como el
hambre, terremotos, guerras y ha intervenido también en otras ciudades como
Brescia que, gracias a su intercesión, fue liberada de una gran miseria.
En 1955, por expreso deseo del Patriarca Cardenal Roncalli (futuro Juan XXIII), el
rostro de la santa fue cubierto con una máscara de plata.
Para qué, nadie lo sabe. Quizá para que descansara la vista.
Hoy en día, en la mañana del 13 de diciembre, las niñas se visten de "Lucia"
(llevando un vestido blanco largo y una corona de siete velas en la cabeza) y los
niños cubiertos con "stjärngossar" ("chicos con estrellas", debido al sombrero
puntiagudo decorado con estrellas).
Las familias hornean pastelitos (llamados "lussekatter", ("gatos de Lucía",
decorados a veces con forma de ojos) y se los comen después de cantar canciones
tradicionales.
Se presentan los pastelitos también a los maestros de escuela, jueces y políticos de
la región para desearles suerte y que sean justos en sus labores.
Una chica en particular es elegida como "Reina Lucía” de la localidad.
Y finalizando, se puede aseverar con justicia que las dos profecías que hizo Lucía
antes de morir, no se cumplieron correctamente.
Diocleciano murió siendo ya viejo en paz en su cama ejerciendo hasta el último
día el poder de su reinado.
No tiene santa Lucía mucha veneración sino en las ópticas, ni la iglesia católica
nunca tuvo paz como ella vaticinara, ni la tendrá, pues la maraña de tonterías en
que envuelve a sus fieles, las intrigas internas de poder, la avaricia de dineros, sus
tontas y estúpidas ceremonias sin sentido, su celibato y sus idolatrías a santas y
santos, más le traen guerra antes que la paz bendita que logran solamente los que
siguen al Señor Jesús.
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112 El Verdadero Santuario Católico
Apasionado por la caza y por los juegos de dados, Juan XII estaba completamente
corrompido.
Su residencia pontificia de Letrán se llenó de mujeres, eunucos y esclavos y se
convirtió en escenario de excesos y de orgías en el que el pontífice se movía como
pez en el agua.
Por demás, era un hombre perfectamente inculto que hasta ignoraba el latín.
En su habitual jerga grosera juraba por Venus o por Júpiter y brindaba por los
amores del diablo.
Un día tuvo el capricho de ordenar un diácono en una caballeriza y, en otra
ocasión, consagró obispo a un muchacho de diez años.
En una ocasión, cuando jugaba a los dados, le pidió ayuda al diablo para ganar y
brindó por él ante el altar mayor de la basílica de san Pedro, por haberlo ayudado
en el juego. Pero ahí no termina la cosa.
Las acusaciones consintieron, entre muchas otras, que el papa no solo había
ordenado a un diácono en un establo, sino también había dejado sin ojos
quemándolos a su director espiritual Benedicto, y para rematar a un cardenal de
nombre Juan lo había castrado y sodomizado ocasionándole la muerte, delante de
muchos obispos.
Todos, incluyendo clérigos así como laicos, lo acusaron de homicidio y como un
pagano a Júpiter, Venus y otros demonios.
Fue hallado culpable y antes de que el emperador Otón, que ya estaba en camino
de Alemania a Roma para ejecutar justicia sobre Juan, el papa fue muerto de un
martillazo en la cabeza por un marido celoso que lo encontró en la cama
fornicando con su esposa.
El martillo quedó clavado dentro de su cráneo, e incluso se puso de pie para tratar
de quitarlo, pero dio unos pasos desordenados y cayó muerto al piso con un
profundo dolor de cabeza.
Lo curioso del caso, es que a este papa, el Vaticano lo tiene en su lista oficial de
papas y es reconocido como "su santidad" y también como "vicario de Cristo".
¡Vaya ejemplo para imitar!
Aún y a pesar de todo lo relatado de su desordenada vida, aparece en la lista de
los papas con los títulos de “Su Santidad, Santo Padre, Vicario de Cristo”, etc.
E incluso, a fin de cubrir la vergonzosa muerte de este personaje, la siempre
deformada y falsa historia católica romana registra su fallecimiento como "una
muerte misteriosa".
La iglesia hace oídos sordos a su despreciable y repulsiva historia y ordena a sus
fieles y devotos llamar “su santidad” a tan nefasto y degenerado personaje.
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116 El Verdadero Santuario Católico
Para apaciguar los deseos del pueblo, el monarca aceptó entregar a la princesa,
pero a su vez envió al gobernador Diocleciano un gmail que decía:
-Mándamelo urgente al capitán Jorge con su blanco caballo, su filosa espada y
su invencible lanza, que tengo un trabajo para él.-´
Lamentablemente, Jorge llegó un día después de que el dragón se llevara al fondo
del lago a la princesa y a las diez ovejas de lanas blancas, para saciar su terrible
apetito carnal y sexual.
Pero era el dragón tan boludo y estúpido que devoraba enteras y vivas a las
vírgenes y cogía sin piedad a las blancas ovejas agarrándolas de sus luengas lanas
blancas de detrás del cogote.
La princesa fue a parar en la panza del dragón y las ovejas balaban de dolor al ser
penetradas bajo el agua por aquél monstruo insaciable.
Jorge encontró al rey llorando desconsoladamente, y lleno de furia por haber
llegado tarde, se dirigió a las orillas del lago a esperar la salida del fiero endriago
asesino y violador. En ése momento salía del agua el dragón enfurecido, con
hambre y nueva calentura sexual. Rápidamente san Jorge sacó su espada y con
mucho coraje enfrentó al monstruo con su larga lanza.
El caballero se dirigió hacia el dragón y se trenzaron en una brava lucha: el
dragón se retorcía tratando de enredarse en las patas del caballo para hacerlo
caer y dejar indefenso al caballero.
Mientras san Jorge luchaba se encomendó a Dios ofreciéndole aquella bestia del
mal a cambio de la victoria.
En su peto de sólido acero lucía una cruz blanca brillante y refulgente y mientras
sostenía su lucha y enfrentamiento con el animal, san Jorge seguía abogándose al
Todopoderoso. Al no conseguir hacer caer al caballo, el dragón se levantó, se
irguió y fijó su mirada en los ojos del caballero.
Era de esta manera que hipnotizaba a sus víctimas, para luego darles muerte.
Pero san Jorge pudo más que él, y tomando más fuerza propinó con la lanza un
furibundo golpe en la cabeza del dragón, que se partió en dos.
La lanza, digo.
Entonces, fuego viene de la boca del dragón y lanzazos van de la mano de Jorge
por espacio de dos o tres horas, y al fin el monstruo cae desmayado a sus pies,
cerrando las llamaradas flamígeras que salían por su boca y nariz.
Se le terminó el gas de una garrafa que posiblemente escondía en su estómago,
que infalible siempre se termina cuando la comida está a medio cocinar.
San Jorge ató su cinto al cuello del monstruo y lo arrastró tirándolo con su caballo
hasta la entrada del pueblo.
Los villanos (la gente del pueblo) que siguieron el combate desde detrás de las
murallas, salieron a ver al inconsciente dragón.
Cargaron en carro a la bestia mitológica todavía viva, adormecida a causa del
impacto que le diera el caballero cristiano con su lanza, sobre su cabeza.
118 El Verdadero Santuario Católico
Una vez en el centro de la ciudad, ante toda la población y del rey, san Jorge les
dijo:
-El monstruo está dormido, no despertará, pero Dios quiere que le honréis
recibiendo el sacramento del bautismo. Dejad vuestras creencias y entregaos al
Dios de los cristianos y a cambio yo mataré al dragón con mi espada.-
Enseguida que el dragón parecía que iba despertando, la gente se horrorizó y se
dejaron bautizar por el santo.
Tres mil quinientas diez y siete personas, fueron bautizadas aquél día.
En cuando el dragón despertó, San Jorge montó en su caballo y con su espada
atravesó la panza del dragón, cayendo éste desparramado por el suelo.
Su sangre se esparció por todos lados, y de rodillas, san Jorge entregó a Dios su
victoria. Al abrirle un fiero tajo en la panza del dragón, ¡oh sorpresa!, salió vivita y
coleando la princesita más amada del rey, sana y salva, quien se abrazó
estrechamente con su padre en medio de una total felicidad, llantos y risas de
alegría.
También salieron las setenta u ochenta vírgenes anteriores que fueron comidas por
el dragón, las cuales vivieron apretadas y estrechas por largo tiempo en su panza.
De la sangre que brotó del cuerpo sin vida del monstruo nació una rosa roja que el
caballero san Jorge ofreció a la princesa.
En el mismo momento, salieron del lago balando de dolor y con los culos rotos, las
últimas doscientas sesenta ovejas de blancas lanas que fueron ultrajadas.
Cuenta la leyenda que después de restituirle a su hija amada, exigió al mismísimo
rey cuatro cosas: levantar una iglesia para honrar al Dios cristiano; ayudar a sus
sacerdotes; asistir a misa todos los domingos y feriados, y proteger a los pobres y
necesitados.
El rey donó al caballero riquezas inimaginables, pero Jorge prefirió que se
repartieran entre los habitantes del reino.
Además, tiempo después, en una iglesia construida en su nombre, se cuenta que
brotaba un agua milagrosa capaz de curar a los enfermos.
Ay, Dios, qué poca imaginación tienes, que en las historias de todos los santos
siempre haces brotar aguas milagrosas y curativas, ya sea en un pozo, en una gruta
o en una roca de la que emanan aguas cristalinas sanadoras.
¿No podrían cambiar el agua por soda y vino, agua mineral o gaseosas?
El rey le ofreció en matrimonio a la princesa como agradecimiento, y dicen que
con ella se casó.
Pero esto es una burda mentira, ya que regresó junto al emperador Diocleciano,
portando una carta cerrada del rey del pueblo del dragón, donde denunciaba a
san Jorge de ser un acérrimo cristiano.
¡Oh, traidor, hijo de puta!
¡Denunció a quien matara al monstruo que devoró a su hija!
¡Más valiera matarlo a él que al dragón!
El Verdadero Santuario Católico 119
Por eso, los católicos acostumbran que cada 23 de abril, día de san Jorge, los
hombres regalen rosas a las mujeres, como si de un caballero y una princesa se
trataran. Ellas les regalan un libro, recordando el fallecimiento de dos grandes de
la literatura europea en un mismo día, Cervantes y Shakespeare, y en América, la
del historiador el Inca Garcilaso. No sé qué poeta dijo, llorando la muerte de los
tres, que mucho esfuerzo hizo el sol para iluminar el mundo ante las tinieblas que
dejaron la partida de estos tres luminosos cerebros que abandonaron su pluma en
tan desgraciado día para la literatura universal.
Uno de los primeros Papas de la Iglesia lo canonizó en el año 494 y fue el papa
Gelasio I, el que señaló como fiesta de San Jorge el día que murió degollado, el 23
de abril, e inscrito en el santoral católico.
Y colorín colorado, el cuentito ha terminado, y también el libro “Los verdaderos
santos católicos” del celebérrimo Martín Lutero, sacerdote traidor huido de las
filas de la verdadera y cierta religión católica, para seguir estúpidamente a Jesús,
abandonando a la gloriosa y sin par virgen María y al infalible papa.