Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
5. Deja de Fumar
Fumar deteriora la secreción y la acción de las hormonas
tiroideas, así que si vas a fumar - Usa un cigarro
electrónico que no dañe tu tiroides.
2. Extracto de guggul
3. Coleus Foreskohlii
Si tienes hipotiroidismo…
Este es un listado de
algunos alimentos
Goitrogénicos comunes…
brotes de bambú
millo (o mijo)
Duraznos
Maní
pera
piñones
rábanos
espinaca
fresas
batatas
col china
brócoli
col de bruselas
repollo
coliflor
kress de jardín
col rizada
colirrábano
mostaza
Hojas de mostaza
rábanos
nabo sueco
soya o soja
leche de soya
aceite de soya
lecitina de soya
tofu
nabos
Millo o mijo
Duraznos
Maní
Rábanos
Fatiga
Debilidad
Estreñimiento
Irritabilidad
Pérdida de memoria
Prueba de auto-evaluación
del hipotiroidismo
Para saber si existe riesgo de que puedas tener
hipotiroidismo… Sólo realiza la prueba de abajo y
después de haber acabado la prueba… Puedes ver los
resultados al final de la prueba.
Tu total es:
69
Aceite de oliva, remolacha roja, cebolla, lentejas, garbanzos, frijoles, soja, brócoli, col,
coliflor, acelga, espinaca, nabo, lechuga, berenjena, pepino, calabacín, tomate, zanahoria,
remolacha, puerro, pimiento y mungo.
Frutos secos: nueces, pistachos y almendras.
Frutas: fresas, frambuesas, moras, albaricoques, limón, arándanos, kiwi, naranja,
pomelo,
Especias: cúrcuma, ajo, rúcula, mostaza, perejil, apio, bardana, laurel, cardamomo,
cilantro, jengibre, clavo, orégano y romero.
Setas: maitake y shiitake.
Otros: cacao, té y vino tinto.
La dieta Mediterránea es muy aconsejable.
No tome gluten. Lo encontrará en muchos productos industriales hechos con trigo,
cebada, centeno y espelta. Tome solo aquellos alimentos hechos con maíz. Minimice la carne.
Hay serias dudas con la sal iodada, mejor no la tome.
Resumen
Existen más de 26.000 publicaciones científicas que hacen referencia a la tiroiditis auto inmune
o Hashimoto, hasta el año 2015. La mayoría de ellas están relacionadas con metodologías,
biología molecular y medicamentos, pero apenas existen unos pocos cientos sobre la nutrición
y más concretamente sobre la nutrición epigenética – la capacidad que tienen algunos
alimentos para modificar la metilación del ADN y la expresión de genes, esta modificación
puede producir salud o enfermedad, tanto en usted como en sus descendientes -
Algunas toxinas bacterianas, virus, y alimentos parcialmente digeridos, todos ellos asociados al
exceso de crecimiento bacteriano en el intestino y a la permeabilidad intestinal, pueden
penetrar en la sangre a través de la barrera intestinal y actuar como antígenos y, de esta forma,
estimular la producción de auto-anticuerpos contra el tiroides produciendo la tiroiditis
autoinmune. A este proceso, hay que sumarle el efecto negativo de peroxinitrito que se produce
en ausencia de alimentos antoxidantes, los contaminantes ambientales, y la epigenética
transgeneracional todavía poco conocida.
En el intestino existen más de 30.000 especies de bacterias y más de 300 gramos de ellas por
persona. Algunas toxinas bacterianas, los virus y los alimentos parcialmente digeridos, son
antígenos que pueden atravesar la barrera intestinal. Esta situación la produce la nutrición
inadecuada. La mala nutrición puede incrementar el crecimiento bacteriano en el intestino y la
permeabilidad intestinal. Cuando esto ocurre, las bacterias, virus, toxinas y los alimentos
parcialmente digeridos, todos ellos antigénicos, pueden atravesar la barrera intestinal y
penetrar en el torrente sanguíneo. Con estas condiciones, los linfocitos reconocen como
extraños a esos antígenos circulantes en sangre y producen anticuerpos contra ellos. Debido a
que existen homologías entre los antígenos circulantes con las membranas de las células del
tiroides, algunos anticuerpos se unen a ellas dañando el tiroides. Al defender al cuerpo de una
agresión, los linfocitos pueden producir un auto-daño (autoinmune) en otros órganos del
cuerpo, entre ellos el tiroides.
Para inhibir la producción de auto-anticuerpos contra el
tiroides solamente es necesario modificar los hábitos
alimenticios.
La mejora de la calidad de vida en los pacientes con tiroiditis autoinmune engloba dos formas
de actuación:
Complementos alimenticios
Tomar probióticos y prebióticos. Cuidar la ingestión de selenio, regaliz (no la tome si es
hipertenso), vitamina C, vitamina E, y el aminoácido glutamina.
Diminuir el cortisol
Ingerir lisina, arginina, fosfatidilserina, G. biloba y melatonina.
Disminuir la homocisteína
Ingerir el aminoácido tirosina, betaína de la remolacha roja, las vitaminas B6, B12, y fólico o
folato.
Inhibir el peroxinitrito
Ingerir remolacha roja, aceite de Laurus nobilis, cebolla, gingeroles del jengibre, vitamina E
natural en forma de gamma tocoferol, vainillina, cúrcuma, la vitamina nicotinamida, regaliz,
cacao, té, aceite de oliva que contiene hidroxitirosol, vino tinto, selenio, ácido lipoico y
melatonina.
En realidad, solamente es necesario sustituir el estilo de vida rutinario por otro mejor.
Los alimentos, las bacterias, los virus, los productos químicos, el exceso de crecimiento
bacteriano en el intestino, la permeabilidad intestinal y los contaminantes, son los principales
responsables de la enfermedad autoinmune del tiroides (Hashimoto).
Recordatorio
La tiroiditis auto-inmune es una enfermedad auto-inmune producida por los anticuerpos de
los linfocitos para defender al cuerpo de los agentes extraños -también denominados
antígenos, como son las toxinas bacterianas, los virus y los alimentos parcialmente digeridos-
que también atacan a tejidos concretos propios. Puesto que algunos de esos agentes
comparten homologías –mismas estructuras moleculares- que el tiroides, algunos de esos
anticuerpos se dirigen (atacan) contra el tiroides produciendo la enfermedad auto-inmune del
tiroides.
Este mecanismo está estrechamente correlacionado con el sobrecrecimiento bacteriano en el
intestino y la permeabilidad intestinal. A mayores, la contaminación ambiental, la producción de
peroxinitrito por carencia de antioxidantes, e incluso la epigenética transgeneracional aún no
investigada, completa el mapa de la tiroiditis-autoinmune.
Conceptos básicos
El antígeno es una molécula que induce a las células linfocitos a producir anticuerpo. Los
anticuerpos se unen al antígeno como una llave a una cerradura. Los antígenos homólogos
son moléculas similares entre sí que tienen el mismo origen evolutivo. Las células del tiroides
tienen antígenos homólogos con determinadas bacterias, virus y alimentos. Ellos son los
responsables de que los anticuerpos ataquen a las células del tiroides.
Linfocitos: células del cuerpo que producen anticuerpos y son los responsables de la defensa
inmunológica.
Los anticuerpos también se denominan inmunoglobulinas.
Los anticuerpos son proteínas producidas por los linfocitos para defender al cuerpo de agentes
extraños (antígenos) como bacterias, virus, parásitos y algunos alimentos como por ejemplo la
gliadina del gluten del trigo.
La enfermedad auto-inmune del tiroides también se denomina tiroiditis auto-inmune o
Hashimoto.
Los síntomas principales del Hashimoto son: cansancio, frío, aumento de peso y disminución
del deseo sexual.
Para recuperar el funcionamiento parcial o total del tiroides, es necesario recurrir a la nutrición
epigenética, a los complementos alimenticios, y a los probióticos.
En los individuos sanos la motilidad gastro intestinal normal impide el crecimiento excesivo de
bacterias en el intestino delgado (8), por eso una pequeña alteración en la motilidad intestinal
constituye uno de los factores de riesgo para el desarrollo del sobrecrecimiento bacteriano en el
intestino (9-10).
Una de las características del hipotiroidismo su capacidad para reducir la actividad motora
esofágica y gástrica (12,13) y entonces, se puede producir un proceso de retroalimentación. El
tiroides funciona deficientemente debido a una nutrición inadecuada que altera la motilidad
intestinal produciendo sobrecrecimiento bacteriano que a su vez, actúa negativamente sobre el
tiroides. Un círculo vicioso.
El Hashimoto también está asociado con el trastorno de la motilidad intestinal que se presenta
como disfagia o ardor de estómago (17), probablemente debido a la producción de auto-
anticuerpos responsables del proceso auto-inmune contra el tiroides (18) cuyo mecanismo está
relacionado con la homología de antígenos.
Es importante escuchar el funcionamiento del sistema digestivo. Cuando una comida produce
una mala digestión o el vientre se hincha, es señal de que el intestino no digiere bien
determinados alimentos o sus mezclas.
Las bacterias pueden inducir a los linfocitos para que produzcan anticuerpos antitiroideos
dañando el tiroides y produciendo la tiroiditis autoinmune (Hashimoto).
Las homologías entre las bacterias y el tiroides producen otro problema ya que pueden
conducir a resultados falsos positivos y a un diagnóstico incorrecto de la función tiroidea. Estas
homologías se observan en las bacterias Bifidobacterium bifidum, Bifidobacterium adolescentis,
Bifidobacterium longum y Lactobacillus plantarum (38).
Tomados en conjunto las homologías entre algunos marcadores del tiroides (Tg, TPO, TSH-R)
y las bacterias refuerzan la opinión de que tanto las infecciones bacterianas como las virales
desencadenan la enfermedad auto-inmune del tiroides (84).
El óxido nítrico regula la elasticidad de las arterias, pero puede transformarse a peroxinitrito si
no reacciona rápidamente con un antioxidante. En caso contrario forma peroxinitrito que es
tóxico en pocos minutos. En realidad, el óxido nítrico está presente en prácticamente todos los
principales procesos patológicos que afectan a los seres humanos y aunque es imprescindible
para vivir no es el responsable directo de la patogenidad sino su capacidad de reacción con
moléculas oxidantes para producir peroxinitrito.
El óxido nítrico se elimina rápidamente por las enzimas superóxido dismutasa (SOD) y por la
rápida difusión a través de los tejidos en las células rojas de la sangre (46,47), donde se
convierte rápidamente a nitrato. Produce daño oxitativo y disfunción mitocondrial (48),
reacciona con proteínas a través de los aminoácidos cisteína, metionina, triptófano, histidina y
tirosina (49,51,52) nitrando las proteínas y alterando sus funciones (68). Produce peroxidación
lipídica en las membranas (56), oxida el LDL (54,50), daña el ADN (55,56), daña las
mitocondrias (48), produce necrosis (57) y puede afectar negativamente a la respuesta inmune
(58). Está presente en la artritis crónica (59), en enfermedades cerebrovasculares (60),
Parkinson (61), Alzheimer (62), esclerosis lateral amiotrófica (63), diabetes (64), muerte celular
(65), afecta a los espermatozoides (66) y es uno de los responsables de la diabetes (67).
El incremento de óxido nítrico y la expresión de las enzimas óxido nítrico sintasa, juega un
papel importante en la tiroiditis autoinmune (69-71). De hecho, el control de la formación de
peroxinitrito podría ser una poderosa herramienta terapéutica de futuro (73,74).
Las mujeres entre las edades de 30 y 50 años que tienen baja concentración de progesterona y
predomina el estrógeno les puede producir hipotiroidismo autoinmune o enfermedad de
Hashimoto.
El estrógeno y la hormona tiroidea tienen efectos opuestos: el estrógeno hace que las
kilocalorías se conviertan en grasa y la hormona tiroidea convierte las kilocalorías de la grasa
en energía. Cuando la progesterona es baja y el estrógeno es dominante (incluso cuando los
niveles sanguíneos de TSH son normales) y si están presentes los síntomas del hipotiroidismo,
los niveles elevados de estrógeno podrían ser la causa (254,255) de ese hipotiroidismo. Los
niveles elevados de estrógeno afectan al tiroides (253,254).
Los factores que contribuyen a la dominación del estrógeno frente a la progesterona además
de la nutrición incluyen: la exposición a los productos químicos que imitan al estrógeno que se
encuentran en herbicidas, pesticidas, productos petroquímicos (por ejemplo, el BPA, bisfenol A)
y los PCB (bifenilos policlorados de) que se utilizan en algunos cosméticos, el pegamento, el
plástico y la obesidad (259).
La enfermedad celíaca se asocia con la enfermedad del tiroides. Este resultado se ha obtenido
de un gran ensayo clínico con 68.068 individuos de los cuales 14.021 eran celíacos (85).
Existe una mayor frecuencia de hipotiroidismo y anticuerpos antitiroides (Hashimoto) en los
pacientes con enfermedad celíaca por eso, no ingerir productos con gluten puede normalizar el
hipotiroidismo subclínico (86). El 11% de los pacientes celíacos tienen anticuerpos antitiroides
que tienden a desaparecer con una dieta sin gluten (87). La enfermedad celíaca y la tiroiditis
autoinmune se producen con más frecuencia en niños y adolescentes con diabetes tipo 1
(88,89). En definitiva, la tiroiditis autoimmune está fuertemente relacionada con la enfermedad
celíaca (97).
El efecto negativo del gluten sobre la salud es tan importante que incluso se detectan
anticuerpos contra el gluten en los pacientes con esclerosis múltiple (90,96), y la esclerosis
múltiple y el Hashimoto son enfermedades autoinmunes.
Anécdota sobre la soja: ¿recuerda haber escuchado “si tiene cáncer de mama, ¡No tome
soja!”? Esta afirmación, es cierta y no es cierta. Existe mucha controversia a favor y en contra
(103-108). Probablemente dependa de la cantidad de ingesta de uno de los fitoestrógenos, la
genisteína de la soja. Esto no quiere decir que otros fitoestrógenos no sean saludables.
Cuando se analizan poblaciones de mujeres en las diferentes partes del mundo, nos
encontramos con la siguiente sorpresa: las mujeres japonesas tienen altos niveles de
fitoestrógenos y bajos niveles de cáncer de mama (109,110), pero cuando adoptan un estilo de
vida occidental, el riesgo de cáncer aumenta (111,112).
La segunda sorpresa se produce con las mujeres mexicanas. Tienen tasas muy bajas de
cáncer de mama (7,1 por 100.000 frente al estándar occidental de 32,7). Las mujeres
mexicanas obtienen sus fitoestrógenos como el kaempferol, quercetina y enterolactona, de la
cebolla, la lechuga, la espinaca y las manzanas.
Existe una asociación entre los alimentos infantiles formulados con soja y la enfermedad
autoinmune del tiroides (Hashimoto) (250,251). En adultos, es conveniente no ingerir soja con
levotiroxina, ya que decrece la absorción de levotiroxina y se necesitan mayores dosis para
producir el efecto terapéutico (252).
Usted decide.
Existen alimentos con la capacidad de inhibir o erradicar el Helicobacter pylori por diferentes
mecanismos, solo es necesario ingerirlos con continuidad y en la concentración adecuada. Los
más relevantes son:
El ajo: la alicina del ajo parece ser agente potencialmente eficaz para la
erradicación de la bacteria Helicobacter pylori (119).
El arándano: inhibe el crecimiento en 6 de 27 cepas de Helicobacter pylori, y suprime la
secreción de la interleuquina inflamatoria IL-8 de todas ellas reduciendo la inflamación del
intestino (120), incluso potencia la tasa de erradicación del Helicobacter pylori en los
tratamientos con antibióticos (121).
La especia cúrcuma: puede consideradarse un candidato quimiopreventivo contra
la carcinogénesis gástrica debida a Helicobacter pylori (122).
El brócoli: reduce la colonización de Helicobacter pylori (123).
El aceite de oliva: puede ser un agente quimiopreventivo para la úlcera péptica o
cáncer gástrico producida por Helicobacter pylori (124).
El extracto de raíz de regaliz (Glycyrrhiza glabra): es eficaz en el tratamiento de
Helicobacter pylori (125).
La adición de vitaminas C y E: a la triple terapia estándar del tratamiento con
antibióticos aumenta la tasa de erradicación de Helicobacter pylori (126,127).
La suplementación con lactoferrina: incrementa la tasa de erradicación de
Helicobacter pylori (128).
El ácido lipoico: inhibe el Helicobacter pylori (129).
La vitamina B12 erradica Helicobacter pylori en los ancianos con deficiencia de
cobalamina y además disminuye los niveles sanguíneos de homocisteína (130).
La N-acetilcisteína tiene capacidad anti quorum sensing e inhibe el biofilm
producido por el Helicobacter pylori que le protege del sistema inmune (131).
Para erradicar el Helicobacter pylori ingerir 800 mg/día de la especia cúrcuma, 150 mg/día de
regaliz, de 1 – 2 gramos/día de vitamina C, 400 mg/día de vitamina E natural, 300 mg/día de
ácido lipoico, 600 mg/día de N-acetilcisteína. Y una cucharada de aceite de oliva diaria, un
diente de ajo, de 6 a 12 arándanos o más, todos ellos diarios. El brócoli de una a dos veces a la
semana.
El DHEA tiene efecto saludable en las personas con hipotiroidismo y Hashimoto. Puede
considerar tomar 7-keto-DHEA que es termogénico y no deriva a estrógeno ni testosterona
(136).
La granada, probablemente debería de ser la fruta del paraíso por sus enormes propiedades
saludables. La granada se puede tomar desde octubre a febrero, depende del país. Cuando no
hay granada disponible, se puede sustituir por el aceite de granada o el extracto de la piel de la
granada, que modula los estrógenos (137,138) y regula el metabolismo del tiroides (139).
La ingestión diaria saludable de vitamina D para el tiroides es de 5.000 – 10.000 UI. El nivel
óptimo en sangre es de 50 ng/mL.
Considerar no tomar sal iodada. La dosis recomendable de iodo para el tiroides es de 0.15
mg/día.
El selenio es imprescindible. Mejor en tres formas
bioquímicas
El selenio es el otro mineral que afecta a la función tiroidea. El tiroides contiene más de selenio
en peso que cualquier otro órgano (155). El selenio se correlacionada con el estradiol y la
progesterona que contribuyen a la estimulación del tiroides y a la regulación de la tiroxina libre
en los pacientes con tiroiditis de Hashimoto (156) además, disminuyen los anticuerpos que
afectan al tiroides (157,158).
El selenio funciona para el tiroides mejor ingiriéndolo en tres formas químicas: metil selenio
cisteína, seleniometionina y selenito sódico. La dosis recomendable de la mezcla de los tres
es de 0.2 mg/día.
El cortisol se puede disminuir ingiriendo fosfatidilserina (173,174), DHEA (175), G. biloba (176),
lisina mezclada con arginina (177), la melatonina (178,179) y la dehidroepiandrosterona (el 7-
keto-DHEA (180,181).
Las dosis recomendadas para disminuir el cortisol son: 100 mg/día de fosfatidilserina, 600 –
1800 mg/día de lisina, 700 mg/día de arginina, 120 mg/día de Ginkgo biloba y 0.3 – 10 mg/día
de melatonina.
Los pacientes con Hashimoto tienen deficiencia en vitamina B12 (144). La erradicación de
Helicobacter pylori en pacientes con deficiencia de cobalamina disminuye los niveles
sanguíneos de homocisteína (130).
Las dosis recomendadas para disminuir la homocisteína son: 500 – 1000 mg/día de L- tirosina,
vitamina B6 (piridoxina) 250 mg/día, 1 a 40 mg/día de vitamina B12 en forma de
metilcobalamina (es conveniente hacerse un análisis de sangre después de uno a tres meses),
1 mg/día de fólico en forma de metilfolato, 1-2 g/día de betaína (trimetilglicina).
Las hormonas sexuales son una de las principales responsables de la salud y el deseo sexual
su indicador.
La falta de deseo sexual es un indicador de que algo debe corregirse. Las hormonas sexuales
se consideran las hormonas madre por que actúan sobre un amplio grupo de órganos del
cuerpo. Las principales son: progesterona, DHEA, testosterona, progesterona y pregnenolona.
Los niveles de hormonas sexuales como la testosterona y dehidroepiandrosterona disminuyen
con la edad en ambos sexos y los niveles máximos de DHEA se alcanzan cuando las mujeres
están en sus 30 años. Posteriormente comienzan a disminuir un 2% por año produciendo
aumento de la grasa corporal y disminución de la musculatura (197), incrementa el cáncer, la
diabetes, el lupus y la enfermedad psiquiátrica (198,199), incrementa el cortisol (200), reduce la
memoria (201), incrementa el estrés, la depresión, y dificulta el funcionamiento de muchas
otras funciones vitales (202).
- Los hombres deben tomar con el DHEA la vitamina D (5.000 UI/día), vitamina E natural (600
UI/día), selenio (200 microgramos/día), licopeno (30 mg/día) y Boro (3 mg/día).
- Las mujeres deben tomar con el DHEA la melatonina (1 a 3 mg/día por la noche), vitamina E
natural (600 UI/día, y vitamina D3 (5.000 UI/día).
La ingestión de DHEA
(dihidroepiandrosterona) disminuye los anticuerpos anti tiroperoxidasa aunque no lo hace con
los anticuerpos anti tiroglobulina, al menos produce un beneficio parcial en los pacientes con
Hashimoto (207). La ingestión diaria de DHEA (10 mg/día) mejora la función sexual y la
frecuencia de las relaciones sexuales en las mujeres posmenopáusicas (208). También mejora
el estado de ánimo, la función neurológica, la función inmune, la energía, los sentimientos de
bienestar y el mantenimiento de la masa muscular y ósea (212,213). La combinación de DHEA
y pregnenolona mejora la memoria (214), la sensibilidad a la insulina y los niveles de
triglicéridos (215), reduce el colesterol (216) y mejora la producción de interleucina-2 en
linfocitos humanos (217).
La 7-Keto-DHEA aumenta las hormonas tiroideas y se asocia con el aumento de la actividad
metabólica en reposo (209). A diferencia del DHEA, el 7-Keto-DHEA no se convierte en
estrógeno por lo que es seguro para su uso por personas con enfermedades dependientes de
hormonas, como el cáncer de próstata y de mama (210).
El uso de testosterona transdérmica en mujeres con bajo nivel de hormona, mejora la función
sexual y el bienestar psicológico (211).
Medicamentos
Algunos fármacos antitiroideos como el metimazol (MMI), 6-n-propil-2-tiouracilo (PTU), y 6-
metil-2-tiouracilo (MTU), reducen significativamente la nitración de la tirosina. El más eficaz es
el MMI (249).