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Aguardando en Silencio

Aguardando en el silencio de la soledad, camino sin rumbo fijo, mucha gente veo al andar,
cada quien pensando en su desear, mucha gente y tanta soledad, una gran ambigüedad,
desgraciadamente en estos tiempos nada es de sorprender, sigo caminando y llego a una
calle sola, metido en mis distracciones y pensamientos, sin darme cuenta con ella fui a
tropezar:
-Disculpa no fue mi intención.
-No te preocupes, dijo ella.
Sin pensarlo me agache a ayudar a recoger sus libros, al igual que ella, sin quererlo al tratar
de tomar uno, tome su mano, fue entonces hasta ese momento en que volteé a mirar su
rostro, (era la criatura mas linda que había visto en mi vida, era realmente bella, tal vez
algunos 18 o 19 años, su tez era blanca, ojos color miel muy expresivos, unos labios
delgados y finos, su nariz chica y respingada, pelo muy negro y lacio, casi sin maquillaje,
solo un poco de sombra en sus ojos), al tocarla ella también me miro, y con un gesto simple
y bello me sonrió. De nuevo disculpa dije y de inmediato la solté, sin embargo en sus ojos
note tristeza, tenia los ojos irritados como si hubiese llorado toda la tarde, después de haber
recogido cada unos de sus libros le di el ultimo, y me dio las gracias con una dulce sonrisa
en su labios, no pude ni hablar mudo me quede viendo como se marchaba de ese lugar.

Retorne a la realidad, y mi mente no tardo en funcionar de repente mi cuerpo acelero el


paso hacia donde ella se dirigía, mi corazón latía a mas no poder, y con un tímido ¡Oye!
Ella giro la cabeza y dijo: ¡Si!, sin saber que decir de mi boca solo salio un simple:
¿Disculpa como te llamas? Ella hizo una mueca como de desconcierto y solo pudo decir:
Alena. Siguió caminando y yo a su lado sin decir nada, así continué un par de cuadras,
hasta que ella se giro hacia a mi y me dijo fuertemente: ¿Qué es lo que quieres porque
sigues a mi lado, ya te di las gracias por haberme ayudado, ya te dije mi nombre, que mas
quieres?, no pude decir nada lo único que quería era estar a su lado, en sus ojos vi lagrimas
y note que la invadía una gran tristeza, trate de conjugar palabras, pero antes de decir algo
volvió a hablar: ¡Déjame en paz y vete, no te conviene tratar de conocerme! Además no me
interesa saber nada de ti. Al escuchar esto me sentí mas desolado de lo que ya estaba, y me
quede helado decidí dejarla ir, después de ver como ella había desaparecido, continué
caminando, recordé que era hora de regresar a mi casa y así fue.

Hola, ya llegue

Nadie dijo nada, como siempre llegue a mi casa, en esa donde vivimos mis hermanos y mis
padres bajo el mismo techo pero cada quien vive su propia vida, así pues llegue y me
adentre en mi habitación, puse un poco de música, y leí un poco de lo visto en la escuela,
luego recordé a aquella linda chica, pensé en que tal vez nunca mas la volvería a ver,
mientras pensaba en ella la dibuje en una de mis libretas, después de eso sin darme cuenta
ya era noche, solo fui a cenar, solo como siempre, y después me dormí.

A la mañana siguiente como cada día me levante, mantuve mi aseo personal, desayune algo
rápido que como siempre mi madre preparaba para antes de irme a la escuela, así fue pues
que salí, iniciando un nuevo día como cualquier otro, sin sentido para mi, buscando una
razón para poder existir, cosa extraña en un tipo de 18 años con toda una vida por delante,
pareciera que ya era todo un anciano con varios años encima, total así me dirigí a mi a
escuela situada en el otro extremo de la ciudad, llegue y todo paso normal como siempre,
uno que otro maestro que siempre me regaña por estar distraído viendo por la ventana, o
por quedarme dormido en clase, bien, termino el día de hoy en la escuela ya son las 3 de la
tarde, listo para salir e irme a caminar y deambular por la ciudad imaginando y pensando en
tantas cosas pero a la vez en nada, creí que todo seria como siempre, pero no fue así…

Decidí tomar un nuevo rumbo hoy, para conocer una nueva ruta, algo común en mí ya que
es en lo que me entretengo en caminar y conocer nuevos lugares de la ciudad, me
entretengo en cosas simples que a cualquiera le aburrirían. Durante mi trayecto cual fue mi
sorpresa que al pasar por una escuela particular que no quedaba muy lejos de la mía estaba
ella allí, ¡Si! Si es ella, es Alena, me quede parado observando aquella escena:
- ¡Déjame en paz, ya no quiero saber nada de ti! Decía Alena
- ¡Nunca te voy a dejar me entiendes! Eres mía y de nadie mas.
- ¡Claro que no idiota, déjame!, ya quiero irme
- ¡Primero dame un beso de despedida y ya te dejo ir!
- ¿Qué no entiendes? Déjame no tengo porque soportar tus tonterías, ni tus
infidelidades.
Después de eso, él trato de besarla por la fuerza haciendo que sus libros cayeran al suelo,
no pude contenerme y fui a ayudarla:

- ¡Suéltala imbecil!
- ¿Y tú quien eres? ¿A poco tú me vas a detener?

Estaba lleno de furia y sin pensarlo trate de golpearlo pero el me esquivo y luego me dio un
puñetazo en la cara con el cual me tiro al suelo, debido a que yo no era muy concurrente a
las peleas, Alena salio corriendo con sus libros y llorando, mientras yo trataba de
reponerme del golpe el tipo volteo hacia a mi y me dio una patada en el estomago diciendo:
¡Ya viste idiota ya se fue mi novia por tu culpa! Y luego se fue también. Como pude me
levante y al igual que ellos me fui de ese lugar.

Al llegar a casa mi madre me regaño junto con mi padre, renegando ahora porque creían
que andaba de pandillero involucrándome en riñas, claro ellos siempre suponiendo cosas
que creen debido a que nunca se han acercado a mi, pero pues ya me acostumbre…
Sin embargo dentro de mi hoy había felicidad, ya que volví a ver a Alena, y algo mas la
defendí, bueno aunque no con muy buenos resultado, quede con un cachete inflamado.

Ha pasado una semana desde aquella vez en que defendí a Alena y todos los días me
despierto con la motivación de verla una vez mas, desde entonces tomo el mismo camino
pero no la e visto, eso en cierta forma me ha empezado a desconsolar, pero dentro de mi
aun queda esperanza de encontrármela una vez mas. Y así fue, una vez mas la vuelvo a ver,
va saliendo tan linda como siempre, sus libros entre sus brazos caminando aprisa, no se ha
percatado de mi presencia y así decidí seguirla, caminó alrededor de unas 12 cuadras
entonces vi como entraba en una gran casa, de tipo colonial, ella volteo la cabeza y me
miro, yo rápido trate de ocultarme, pero me vio o al menos eso creo. Después que entro a su
casa, camine para ir rumbo a la mía, mientras iba pensando en que hoy descubrí que sale a
las 3 y cuarto de la tarde, y mas que nada supe donde vive, eso me ha puesto muy feliz.
Mañana será un gran día, podré verla y seguirla sin que ella se de cuenta.

Hoy después de clases e cambiado de planes, rápidamente e ido a una florería que queda
cerca de la escuela y compre una rosa roja, pienso en que la belleza de la rosa se opaca con
la de Alena, me adelanto a la casa de ella antes de que llegue, saco una pluma y una hoja de
mi cuaderno y le escribo una pequeña nota que dice:

“Eres la mujer mas linda que existe, te quiero mucho Alena, desde que te conozco no puedo
dejar de pensar en ti, espero algún día animarme a volverte a hablar. Esta rosa es para ti.”
Tu Admirador.

Después de colocar la nota y la rosa junto a la puerta, corro a esconderme en un árbol


grande que esta a unas cuantas casas de la de ella, para observar cuando la vea. No tardo
mas de 5 minutos en llegar y pensé: Que suerte por poco y me hubiera cachado. Ella se
quedo con cara de desconcierto, levanto la rosa y abrió la nota, la leyó y de su linda cara
una sonrisa salio, ella volteo a todos lados buscando quien se la había dejado pero no
encontró a nadie, mi corazón no dejaba de latir y me sentía muy feliz, había logrado que
sonriera…

Han pasado ya dos meses desde la primera rosa y día a día e dejado una junto con una nota,
excepto los fines de semana, debido a que Alena sale con sus padres todo el día, eso lo se
porque intente dejar una un domingo; desde que la conozco mi vida a dado un giro total, en
la escuela mejore mis calificaciones, ya tengo un par de amigos, me empezado a interesar
por jugar básquetbol y hay quienes dicen que puedo tener futuro en la universidad, los mas
importante es que ya mañana por fin me graduare, estoy muy contento y feliz ya que e
decidido revelar mi identidad a Alena y pedirle que me acompañe en uno de los días mas
importantes de mi vida, y decirle que gracias a ella me esforzado cada día mejor, que por
ella me he convertido en lo que soy, y también para decirle que me disculpe por no haber
dejado su rosa ayer y anteayer, que feliz me siento, por fin podré decírselo frente a frente ya
tengo el valor y la confianza para confesarle mi gran amor por ella.

Como siempre he salido de la escuela directo a la florería, Doña Ana ya me conoce, y en


cuento llego me ha dado la rosa mas linda que tenía, entusiasmado he salido de allí y me he
sentado en la banqueta a escribir la nota de hoy que dice así:

“Querida Alena:
Hola bonita, ¿Cómo esta la mujer mas linda del mundo?, espero que muy bien y feliz al
igual que lo estoy yo, sabes, mañana es mi graduación y quiero que estés a mi lado en ese
día tan especial ya que gracias a ti he logrado avanzar en estos últimos meses y
transformarme en lo que ahora soy, el amor que siento por ti me regreso a la vida y quiero
que estés conmigo para siempre, Alena TE AMO.”
Tu admirador: Remiel (porque ese es mi
nombre).

Termine de escribir y me levanto dispuesto a dejar su rosa como de costumbre, mientras


voy caminando hacia su casa, al pasar por su escuela me detengo y el panorama que
encuentro es muy extraño y desolador, no se oyen ruidos, y las puertas están cerradas, me
empieza a invadir una extraña angustia, algo me dice que algo no anda bien, empiezo a
correr a casa de Alena y al llegar me encuentro con una señora que al parecer me esta
esperando y me dice:

-Hola Remiel, te estaba esperando tengo algo para ti; en eso saca un sobre y me lo entrega
pero me comenta unas cosas: Aparte de darte este sobre que me ha encargado mi niña que
te lo entregue personalmente, quiero darte las gracias por haber hecho tan feliz en estos
últimos días a mi niña ya que se encontraba tan agobiada con tantos problemas que tenia
con su padre, pero cuando apareciste en su vida, cambio el brillo en sus ojos, la hiciste vivir
de nuevo y le hiciste sentir lo que jamás había sentido, muchas gracias Remiel. Dicho esto
la señora entro en la casa y cerro la puerta.

Me quede en shock sorprendido, ¿Por qué sabia mi nombre la señora?, ¿Por qué habla
como si Alena ya no estuviera? ¿Por qué no había nadie en la escuela?, un sin fin de
preguntas merodeaban en mi mente, cuando de repente volví a la realidad, me dispuse a ver
el contenido del sobre, me senté a la sombra del árbol que había sido testigo de todas las
veces que me escondía tras él para que mi amada no me descubriera, al abrir el sobre traía
una fotografía de ella y una carta, la cual dice así:

Hola mi amor:
Espero que te encuentres de lo mejor Remiel, y mas te vale que me hallas llevado mi rosa,
porque si no, no te lo perdonaría eh, en estos momentos has de estar confundido, de el
porque mi nana te estaba esperando a la puerta de mi casa con el sobre que contenía mi
foto, esta carta y también de cómo es que se tu nombre.
Las razones son las siguientes desde aquel día en el que chocamos, me encanto esa manera
de ayudarme, ver esa dulzura en tus ojos me cautivo, ese día me sentía muy deprimida ya
que con los reproches y regaños de mi padre y luego el haberme enterado de que mi ex
novio me fue infiel, eso me abatió completamente, me sentía muy sola pero apareciste tu,
haciéndome sentir especial ya que la actitud que tomaste al preguntarme mi nombre y
acompañarme sin decir nada, me dio a sentir que eras alguien diferente, pero yo te dije que
te fueras sabiendo que no quería que fuera así; desde entonces no deje de pensar en ti; luego
al día siguiente cuando apareciste y me salvaste del imbecil de mi ex novio, supe que era
algo dado por el destino el hecho de que nos volviéramos a encontrar, cuando mi ex te
golpeo yo estaba recogiendo mis libros de el suelo pero vi que cayó una de tus libretas y en
una de sus hojas vi que me habías dibujado, no lo podía creer, me sentí tan mal de haberte
tratado como lo hice el día anterior ya que me di cuenta que eras alguien muy lindo y
especial, por eso salí corriendo de inmediato con lagrimas en mis ojos, ya ni supe que te
paso, después de eso creí que jamás volvería a saber de ti, sin embargo después de una
semana apareciste de nuevo, dejándome el mejor regalo que jamás me han hecho, una rosa
y una nota, me llene de alegría y la bese, pensando en besarte a ti, no dude mas y sabia que
me había enamorado de ti, pero aun no sabia si en realidad eras tu el que me dejaba mi rosa
cada día, debido a que no mencionabas tu nombre, pero cual fue mi sorpresa un día que
llegue un poco mas temprano de lo normal, te estuve observando desde lejos como dejabas
la flor a la entrada de mi casa, y que siempre te escondías en el árbol grande que esta a 3
casas de la mía, fue uno de los días mas felices de mi vida comprobar que si eras tu a quien
amaba, desde entonces investigue quien eras, como te llamabas, y en donde estudiabas,
pero no te dije que lo sabia porque esperaba el momento en que decidieras decírmelo tu mi
amor, pero si estas leyendo esto es porque eso jamás ocurrió y tal vez no ocurrirá ya que me
siento muy triste debido a que mi padre decidió llevarme al extranjero a estudiar en otra
universidad fuera del país, yo me negué a toda costa pero no pude lograr que entendiera que
quería quedarme aquí, para estar a tu lado, me duele mucho el corazón saber que vas a
estar lejos de mi, que no podré besar tus rosas pensando en ti, estoy llorando
incontrolablemente al escribir estas líneas, Remiel te amo, siempre te amare, y no perderé
la esperanza de volver un día y regresar a tu lado, aunque posiblemente tu estés con alguien
mas, jamás te olvidare, eres y serás el gran amor de mi vida, ayer fue mi graduación y
quería que estuvieras conmigo pero no llegaste ni anteayer ni ayer a dejar mi rosa por eso
no pude avisarte, todo se complico entre los dos mi vida, y mañana creo que tu te gradúas y
no podré estar allí junto a ti para felicitarte y abrazarte, por tus logros, mi amor no dejo
llorar y pienso en porque no te dije que te amaba, porque no lo hice cuando podía, deje
pasar mucho tiempo y todo se desvanece, porque será el amor tan cruel y doloroso, los dos
nos amamos pero el destino nos ha jugado mal y no podremos estar juntos, pero nunca te
olvidare y espero que tu no me olvides a mi, ya no puedo mas, no dejo de llorar, te deseo
mucha suerte y que seas muy feliz en tu mi vida siempre estaré a tu lado.
Te amo como a nadie en la vida: Alena

Al terminar de leer esto me encuentro desconsolado y llorando, no me importa que la gente


me vea llorar, mi pecho me duele y no se como combatir este dolor, mi amada ya no estará
cerca de mi, me siento como un estupido por no confesarle mi amor, tomo su fotografía y la
beso, luego me levanto y la guardo como mi gran tesoro, empiezo a caminar desolado y
triste pensando en Alena, volteo al cielo y sonrió aun con lagrimas en los ojos, y digo:
Alena mi amor yo tampoco te olvidare jamás… luego regrese a mi casa confundido y
ataviado….

Despues mi graduación pero ya no tiene sentido nada, me veo en el espejo y traigo los ojos
hinchados de tanto llorar, me pongo a pensar en que ya jamás la tendré cerca y no podré
abrazarla ni besarla ni decirle de frente cuanto la amo, y resbala una lagrima por mi mejilla,
luego me meto a bañar, me he puesto un traje negro y una corbata azul, la única que tengo,
después de arreglarme y preparar todo, me voy a la escuela al auditorio de la misma, pero
para mi no existe nada, solo es un vació y una soledad terrible, mientras es la ceremonia,
solo pienso en Alena, después de escuchar mi nombre me levanto como un autómata a
recoger mi diploma, y así es como termina una etapa mas de mi vida.

Han pasado ya 5 años desde que me gradué, ahora ya soy un gran diseñador grafico, y
tengo un estudio, pero jamás he olvidado a mi querida Alena y día a día sigo dejando una
rosa a la puerta de su casa, hoy llegue con Doña Ana como de costumbre, pase por la rosa,
y camino hacia la casa de Alena, la cual ha sido cuidada por la nana de ella desde que se
marcharon, es quien se encarga de recoger las flores, así pues llegue y deje la flor como
siempre, pero esta vez cual fue mi sorpresa que alguien me esperaba en el árbol, escuche mi
nombre y al voltear no lo podía creer, era ella, mi querida Alena había regresado, los dos
corrimos el uno hacia el otro, con lagrimas de felicidad en los ojos, nos abrazamos, y
fundimos nuestro gran amor en un beso…
FIN
Por: Jesús M. Leyva Pescador.

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