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Artículo 16 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos

Resumen:

La familia es la primera y más antiguas de todas las sociedades a la que se ve enfrentado


uno como individuo, y la que más influencia tiene en el desarrollo de las personas en el
desenvolvimiento que tendrán en la sociedad. El matrimonio y la formación de una
familia es un Derecho que se fundamenta en el artículo 16 de la Declaración Universal de
los Derechos Humanos, que esclarece que todo individuo sin discriminación alguna tiene
derecho a elegir con quién quiere casarse, a fundar una familia o a no hacerlo si fuera el
caso. Aunque aún hoy en día exista discriminación a ciertos grupos ya sea por su
condición de género, preferencias sexuales o creencias religiosas.

Palabras clave:

Matrimonio, Familia, Sociedad, Diversidad, Libertad, Igualdad.

Abstract:

The family is the first and oldest of all the societies to which one is confronted as an
individual, and the one that has the most influence on the development of people in the
development they will have in society. Marriage and the formation of a family is a right
that is based on Article 16 of the Universal Declaration of Human Rights, which clarifies
that every individual without any discrimination has the right to choose who they want to
marry, to found a family or not do it if that were the case. Although even today there is
discrimination against certain groups either because of their gender, sexual preferences
or religious beliefs.

Keywords:

Marriage, Family, Society, Diversity, Freedom, Equality.

Introducción:

El Concepto de familia es un término dinámico que evoluciona con la sociedad y que a


su vez la hace evolucionar. Debido a los progresos y cambios económicos se revolucionan
los roles dentro del modelo familiar y, en parte también, por la influencia de la lucha
feminista, las figuras al mando de la familia se fueron diversificando y extendiendo.
Existiendo cada vez más tipos de familias que no se limitaban únicamente a la presencia
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de un supuesto padre trabajador y una madre ama de casa. Se reconocieron más tipos de
familias como la conformada por una sola madre o un solo padre, o dos madres, o dos
padres, abuelos, tíos, etc. Y todas, sin distinción de ningún tipo tienen el Derecho de ser
protegida por el Estado para tener un desarrollo libre y seguro.

La familia es, según Rousseau, “la más antigua de todas las sociedades, y la única natural”.
(Rousseau, 1772; 6)

Los hombres y las mujeres tienen derecho, sin restricción alguna, a casarse y
fundar una familia:

La Declaración afirma este derecho señalando que no se dispondrá de ningún tipo de


discriminación, sin embargo, se reconoce que hay circunstancias como lo son la edad,
que aseguran con mucha razón, que hay ciertas costumbres y prácticas que resultan
incompatibles con algunos principios de la Declaración.

Antiguamente la moral sexual requería explícitamente de la precencia de un


hombre y una mujer para conformar el matrimonio, y consideraban las
relaciones homosexuales como violaciones a la naturaleza, pues la visión del
matrimonio y las relaciones se basaban en fines meramente procreativos,
además de ver al hombre como aquél que debía mandar y a la mujer como
aquella que debía obedecer, una construcción de identidades contrapuestas
recíprocamente de hombres y de mujeres. Encontrandose entonces a las
mujeres y los homosexuales como blanco incuestionable de discriminación
desde los parámetros de la familia heteropatriarcal.

Sólo mediante libre y pleno consentimiento de los futuros esposos podrá contraerse
el matrimonio:

La Convención sobre el consentimiento para el matrimonio, la Edad Mínima para


Contraer Matrimonio y el Registro de Matrimonios señala que “no podrá contraerse
legalmente matrimonio sin el pleno y libre consentimiento de ambos sustrayentes,
expresado por éstos en persona, después de la debida publicidad, ante la autoridad
competente para formalizar el matrimonio y testigos, de acuerdo con la ley”. (Artículo 1,
párrafo 1)
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También se señala que los Estados deberán encargarse de formular las


medidas legislativas para establecer la edad mínima para contraer
matrimonio, dándose a entender que al no cumplir con la edad mínima
requerida por la ley no se podrá contraer matrimonio legalmente. En el caso
del Estado de México, la edad mínima requerida son 18 años. En este caso, el
diputado del Pan, José Manuel delgadillo Moreno argumenta que:

“El matrimonio precoz afecta todos los aspectos de la vida de las niñas y niños.

El matrimonio a una edad temprana deniega a las niñas y niños disfrutar su infancia,
interrumpe su educación, limita sus oportunidades, aumenta el riesgo de violencia y
abuso, pone en peligro su salud, priva sus perspectivas de largo plazo y constituye
un obstáculo para su desarrollo.”
Como suele suceder, lamentablemente, aún en el mundo siguen existiendo casos de
matrimonio forzado y Matrimonio Infantil que se reflejan en cifras alarmantes donde
la mayoría de niñas (en este caso, siendo nuevamente la mujer la principal víctima)
tenían menos de 15 años, a las que se les vio privadas de su infancia, de su derecho
a la educación y a menudo, comenzando a procrear demasiado pronto.

La familia es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la


protección de la sociedad y del Estado:

La Familia ha sido reconocida como institución desde el año de 1948, año en que fue
adoptada la Declaración Universal de las Naciones Humanos (DUDH), y a la institución
familiar también se le describe en base a las funciones que desempeña, como puede ser
una unidad económica, por lo tanto, la Declaración reconoce que “toda persona tiene
derecho a un nivel de vida adecuado que le asegure, así como a su familia, la salud y el
bienestar, y en especial la alimentación, el vestido y la vivienda, la asistencia médica y
los servicios sociales neccesarios”.1

Además, se reconoce el Derecho que tendrán los padres de decidir cuántos


hijos desean tener ya que, la reproducción y la crianza de éstos es otra de las
funciones importantes que posee la familia. En casos del menor incluso,
existen instrumentos especiales que lo defienden en su condición de menor

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En la DUDH, artículo 25, párrafo 1.
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para garantizarle la protección de su correcto desarrollo, protección que debe


darle la familia, la sociedad y el Estado, pues, el bienestar del niño depende
del bienestar de la familia, y si este no cuenta con una debido a ciertas
circunstancias, serán la sociedad y las autoridades quienes se aseguren de
velar por él y cuidar su derecho al bienestar y sano desarrollo.

Se espera que la familia eduque al niño con perspectivas amplias pues no


tienen como única función darle bienestar y educación, el propóstio es
formarlo con cualidades morales, que apunten a la paz, la libertad, la dignidad
y la igualdad.
“Se ha considerado a la familia como objeto de protección y como institución
que debe estar excenta de todo tipo de intervención externa y de
discriminación”. (DPI, 1992; 13)
Así, la adopción se convierte en un derecho del menor de poseer una familia.
La Corte Mexicana también ha establecido que solicitar una adopción es
igualmente un derecho de cualquier individuo sin discriminación de su
preferencia sexual, condición social, nacionalidad, etc. Aunque aún en
muchos países este proceso, comunmente complicado, se vea aún más difícil
para personas homosexual a causa de los estigmas y los prejuicios que son
constitucionalmente contrarios a los intereses del menor asegurando que las
familias homoparentales no satisfacen el esquema de condiciones necesarias
para el cuidado y desarrollo del niño o niña.

Existen diversos tipos de familia:

En los últimos años ha habido un aumento de los países que están reconociendo el derecho
al matrimonio entre personas del mismo sexo, igualando los derechos de cualquier tipo
de familias.

El matrimonio civil entre parejas del mismo sexo es una cuestión de derechos
humanos. La organización cree firmemente que denegar a personas
individuales el derecho a casarse, basándose en el género de sus parejas viola
el derecho a la no discriminación, el derecho a la igualdad ante la ley, y el
derecho a casarse y formar una familia.
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Desde diferentes organismos de Naciones Unidas se ha incidido en la


prohibición de discriminación por motivos de orientación sexual e identidad
de género. En diciembre de 2012, se presentaba en Naciones Unidas el primer
informe sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género,
donde se destacaba que “reconocer la igualdad de derechos de todas las
personas no tiene por qué ser controvertido, ni implica la creación de nuevos
derechos. Se trata de insistir en que todas las personas tienen derecho a
disfrutar los ya existentes”

Aunque Naciones Unidas o el Comité de Derechos Humanos no obliga a las


Estados a regular el matrimonio entre personas del mismo sexo, sí recuerdan
que el no reconocimiento de parejas homosexuales y de sus familias puede
implicar discriminación en asuntos tan básicos como derechos de pensión, de
herencia, de tributación e incluso de disfrute de vivienda.

En relación con las parejas homosexuales, a pesar de que actualemente siguen


sufriendo rechazo y discriminación por parte de grupos sociales, cada vez
están teniendo más reconocimiento de sus derechos y protección por parte del
Estado, como últimamente sucedió en los Estados Unidos, cada vez más
países están aprobando leyes que les facilita a las personas del mismo sexo
contraer matrimonio y formar una familia.
Pues, la Misma Corte IDH declara que no se encuentra determinando un
concepto único y cerrado de familia ni defiende únicamente al modelo
tradicional, e incluso reitera que defienden otras formaciones familiares que
no se basen únicamente en el matrimonio reconociendo otros lazos de
parentesco, en donde de hecho se comparta vida en común por fuera de éste,
pues la familia es un concepto que varía de acuerdo al lugar y al tiempo en
que se desarrolle.

“Las familias integradas por personas del mismo sexo existen, se reconozca
o no su derecho al matrimonio, y la discriminación en este sentido resulta
cada vez más difícil de justificar en esta nueva modernidad que pretende
incorporar a su concepción universal sujetos tradicionalmente excluidos”.
(Sanchez Martínez, 2013; pp. 96)
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En este punto, una reinvindicación por los homosexuales en su derecho al


matrimonio a sido compleja, debido a la discriminación histórica que violaron
cuestiones como la libertad sexual. En el caso de las lesbianas, el matrimonio
pasó a ser una institución patriarcal en el que la mujer se encontraba bajo el
dominio del hombre, lo cual, desde esa perspectiva, hacía carecer el interés
reinvindicativo hasta que, finalmente se aceptasen otros tipos de unión sexual
más flexibes, aquellos que no contemplaban solamente los fines
reproductivos.

Y ya que, el matrimonio homosexual solo puede existir en la unión de dos


personas jurídicamente iguales, sin que un género se anteponga a otro,
tenemos que el matrimonio entre parejas del mismo sexo puede facilitar la
lucha por la igualdad entre hombres y mujeres.

Conclusiones:

El matrimonio forzado, por razones económicas o culturales, es aún realizado en muchos


países. Particularmente el matrimonio forzado de menores de 18 años es una violación a
los derechos humanos. El reconocimiento de nuevos derechos está permitiendo la
formación de más tipos de familias y cada día es más fuerte la lucha por defenderlas y
protegerlas.
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Bibliografía:

Asamblea General (1962), “Convención sobre el concentimiento para el matrimonio, la


edad mínima para contraer matrimonio, y el registro de los matrimonios”, en Raúl
Plascensia Villanueva y Ángel Pedraza López, Compendio de Instrumentos
Internacionales de Derechos Humanos, México, Comisión Nacional de Derechos
Humanos, pp. 231-234.

DPI (Departamento de Información Pública de las Naciones Unidas) (1992), “Los


Derechos Humanos y la Familia”, Gaceta de la Comisión Estatal de Defensa de los
Derechos Humanos, Puebla, CEDH, Vol. 1, Núm. 5, pp 11-14.

Sanchez Martínez, Olga (2010), Igualdad Sexual y Diversidad Familiar: ¿La Familia en
Crisis?, España, Solana e Hijos A.G., S.A.U.

SEGOB (Secretaría de Gobernación) (2013), Matrimonio y Familias, México, Conapred.

Rousseau, J. J (2012), El Contrato Social, México, Leyenda S. A.

Valdez, Ilich (2016), “En la CDMX fijan en 18 años como edad mínima para casarse”,
Milenio, consultado el 10 de Julio del 2018, URL: http://www.milenio.com/estados/fijan-
18-anos-edad-minima-casarse-cdmx

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