Você está na página 1de 16

““Anna Freud”

Por: Ángela Artigas, Melissa López, Carmen Meza, Massiel Ramírez y Catherine Torres.
8 de noviembre de 2018
Cátedra:: Fundamentos psicológicos psicoanalíticos
Docente: Jhair Cepeda Salfate
1. Contextualización histórica

Durante la Primera Guerra mundial comenzó a frecuentar las reuniones de la Asociación


Psicoanalítica de Viena y cuando dio fin la contienda bélica trabajó bajo la dirección de
SiegfredBernfeld en un orfelinato de niños judíos, el Instituto Baumgarten, que fue fundado en
Viena en 1919 en el antiguo Hospital Militar.

En 1923, pensaba instalarse en Berlín para continuar su formación y ejercer como analista,
pero dio la cara el cáncer de paladar de su padre y se quedó para cuidarlo, misión que no
abandonaría hasta su muerte. Por entonces, comienza su práctica psicoanalítica con pacientes
adultos, pero muy pronto se ocupó del campo infantil, ya que por no ser médico sólo le estaba
permitido trabajar con niños.

En 1937, junto a Burlingham, y con el fin de ayudar psicoanalíticamente a los niños pobres
y desamparados, Anna abrió en Viena la guardería Jackson, donde se ocupaba de los hijos
menores de tres años de las obreras judías. Esta iniciativa se vio pronto frustrada, pues el 12 de
marzo de 1938 los nazis clausuraron el centro y la Gestapo detuvo a Anna durante unas horas,
episodio que convenció a Sigmund Freud de la necesidad de marcharse a Londres, cosa que
hizo junto con parte de su familia el 4 de junio de 1938.

La etapa británica: las "Grandes Controversias"

Tras la muerte de Sigmund Freud en Londres, el 23 de septiembre de 1939, Anna se


dispuso a continuar su trabajo psicoanalítico, aunque la Segunda Guerra mundial vino a
complicar las cosas. Por entonces, los kleinianos eran dueños de la Asociación Psicoanalítica
Británica y vivieron mal la presencia de Anna, pues pensaban que podía alterar la autonomía
alcanzada respecto a los psicoanalistas centroeuropeos. Estos enfrentamientos abocarían en las
llamadas Grandes Controversias que se extendieron desde 1941 a 1945, que llevaron a
confrontaciones muy intensas entre los annafreudianos y los kleinianos.

Por otro lado, en 1941, Anna y su grupo crean una guardería y residencia en el n1 13 de la
calle Wedderburn, zona de Hampstead, destinadas a los niños del East End que habían vividos
terribles experiencias de bombardeos en la guerra y que se encontraban en una indigencia
absoluta.

La residencia se cerró en febrero de 1942, por falta de medios económicos, dedicándose el


edificio sólo a guardería, que también hubo de clausurarse al finalizar la guerra. Por ello, Anna
y Dorothy crearon y desarrollaron a partir de 1947, con fondos aportados desde los Estados
Unidos, la Clínica Hampstead (que hoy se llama Centro Anna Freud), con el fin de formar a un
amplio personal en el campo psicoanalítico y atender terapéuticamente a los niños y a sus
familias.

1
Durante la década de los cincuenta, Anna elaboró una serie de trabajos interesantes en
relación con aspectos psíquicos de las enfermedades físicas, intervenciones quirúrgicas,
ingresos hospitalarios, etc. de los niños: así, en Enfermedad somática y vida psíquica, Anna
aportó nuevas ideas sobre la aparición de estados neuróticos en los chicos que aquejaban
distintas enfermedades orgánicas o se habían sometido a intervenciones quirúrgicas, pues de
hecho una y otra cosa suele suponer una separación de la madre y la inclusión de diversas
restricciones en la vida normal; en La visita al niño hospitalizado, Anna se ocupó de la
necesidad de evitar la ruptura de los contactos niño-madre en las hospitalizaciones, subrayando
en todos estos trabajos la necesidad que tenía el personal médico de ocuparse no sólo de las
consecuencias de las enfermedades o las intervenciones quirúrgicas sobre la corporalidad, sino
también de sus efectos en el psiquismo infantil.

La década de los sesenta fue de gran productividad intelectual, destacando la aportación, en


abril de 1964, a un simpósium celebrado en Nueva York, donde planteó interesantes
consideraciones metapsicológicas, madurativas y diagnósticas en el trauma infantil.

2. Descripción biográfica
Anna Freud nació en Viena el 3 de Diciembre de 1895, fue la sexta y última hija del
matrimonio de Sigmund Freud y Marthe Bernays. Annerl como fue llamada por sus familiares,
comenzó sus estudios a los seis años, accediendo pronto al Lyceum donde posteriormente se
formó como Institutriz de Escuela Primaria, llegando a dominar su lengua materna, el inglés, el
francés y algo de italiano. En el periodo de la Primera Guerra Mundial Anna comenzó a asistir
a las reuniones de la Asociación Psicoanalítica de Viena y cuando terminó la contienda bélica
trabajó bajo la dirección de Siegfred Bernfeld en un orfanato de niños judíos, Instituto
Baumgarten que se funda en 1919 en el antiguo Hospital Militar, posteriormente se sumaría
Wilhlem Hoffer donde se reunían periódicamente junto al Director de la Institución, August
Aichhorn para reeducar a jóvenes delincuentes.
En Octubre de 1918, Anna comienza a psicoanalizarse con su padre, análisis
controvertido, que se extendió hasta 1920. Dio comienzo a este tratamiento luego de haber
abandonado su profesión de Institutriz para recuperarse de una tuberculosis pulmonar.
En 1922 Anna da una conferencia para ser admitida como miembro en la Asociación
Psicoanalítica de Viena con el tema "Las fantasías de la flagelación y las ensoñaciones ",con un
contenido autobiográfico oculto.
En 1923 Anna deseaba instalarse en Berlín y continuar su formación de Analista y
posteriormente ejercerla, pero a su padre le diagnosticaron cáncer de paladar, quedándose
junto a él para cuidarlo hasta su muerte. Más tarde comienza su práctica psicoanalítica con
pacientes adultos, para posteriormente dedicarse al campo infantil, ya que por el hecho de no
ser médico no se le permitía trabajar con adultos.

2
En 1925 realizaría un tratamiento a Bob, hijo de Dorothy Burlingham que sería su gran
amiga. En el mismo año al crearse el Instituto Psicoanalítico de Viena , ella fue nombrada
secretaria, poniendo en marcha un seminario dedicado al psicoanálisis infantil.
En 1929 Anna Freud, Dorothy Burlingham y Eva Rosenfeld totalmente optimistas del
valor del psicoanálisis infantil respecto a la educación del niño, crean una escuela infantil en la
casa de Eva donde trabajó además Erik Erikson que fue analizado por Anna. Más tarde realiza
varias conferencias para capacitar al personal de las guarderías de los barrios obreros de Viena,
razón por la cual en el año 1938 Anna Freud publica el libro "Introducción al Psicoanálisis
para Educadores", donde estable pautas adecuadas para evitar futuros trastornos neuróticos en
los niños, más tarde cambiaría de pensamiento, tomando conciencia que no solo había
necesidad de actuar educativamente sino además de forma terapéutica, donde se llevarían a
cabo reales prevenciones.
Durante 1935 Anna se preocupa por el desarrollo de los hijos de Dorothy, ya que eran
adolescentes. Las observaciones la llevó a reflexionar y fue la base de su libro más conocido,
siendo editado el año siguiente postulado "El Yo y los mecanismos de defensa", donde se
realza la importancia de las funciones adaptativas de algunas defensas del Yo, sentando sus
bases en la psicología del ego.
En 1937 junto a Burlingham y con el fin de ayudar psicoanalíticamente a los niños
pobres y desamparados abre en Viena la Guardería Jackson, donde se atendían a niños
menores de tres años, hijos de obreras judías y en 1938 abruptamente, los Nazis cerraron la
guardería y detienen a Anna durante unas horas, hecho que hizo que Sigmund Freud se
marchara junto a su familia a Londres el 4 de Junio del mismo año.
Toda la experiencia que Anna recopiló en su trabajo con niños sirvió para la
elaboración de su obra fundamental "Psicoanálisis del Niño", donde señala diferencias teórico-
técnicas con el modelo que proponía Melanie Klein, a partir del Congreso Psicoanalítico
Salzburgo. Dichos enfrentamientos eran densos donde se basaba en los fenómenos
transferenciales y el análisis precoz.
Tras la muerte de Sigmund Freud el 23 de Septiembre de 1939, Anna se dispuso a
retomar su trabajo psicoanalítico, aunque la Segunda Guerra Mundial complicaría las cosas, ya
que la Asociación Psicoanalítica Británica vieron mal la presencia de Anna, pues pensaban que
podría alterar la autonomía alcanzada, respecto al psicoanálisis centroeuropeo, hecho que dio
lugar a controversias entre grupos de Anna freudianos y Kleinianos. Por otro lado, Anna y su
grupo de amigas forman una guardería y residencia en la calle Wedderburn, destinadas a niños
de East End que habían vivido horribles experiencias de bombardeos de guerra y se
encontraban en una indigencia absoluta.
En 1951, en el XVII Congreso Internacional del Psicoanálisis en Amsterdam, Anna
presenta un novedoso aporte relacionado con la "homosexualidad masculina", fruto del análisis
de cuatro casos anteriores.

3
En 1952 queda totalmente firme el funcionamiento de la Clínica Hempstead, donde
ella se ocuparía completamente de los niños psíquicamente trastornados y sus madres, gracias
al apoyo económico del filántropo norteamericano Marshall Field.
En la década de los setenta fue de gran productividad intelectual, destacando el aporte
hecho en Abril de 1964, donde plantea interesantes aportaciones metapsicológicas y
diagnósticos de trauma infantil, donde un año después redactaría un libro sobre "Niños en el
Hospital"
Después de años de aportes al psicoanálisis, a comienzos de 1978 Anna sufre un
deterioro físico y mental, dejando la dirección de la Clínica Hempstead a Clifford Yorke, tras la
muerte de Dorothy su situación se agrava aún más y en la madrugada de 1982 fallece, dejando
su legado en sus ocho volúmenes "The Writings of Anna Freud" (1966-1980), donde estaban
todos sus aportes y compromiso con el psicoanálisis infantil.

3. Propuesta teórica

3.1. Desarrollo de los principales conceptos teóricos.


El yo y los mecanismos de defensa
Dentro de los grandes aportes al psicoanálisis de Anna Freud fue desarrollo realizado al Yo
y los mecanismos de defensa.
Anna determinó que el yo debía ser el principal elemento de estudio para llegar al
inconsciente y para establecer las funciones de las otras dos instancias, el ello y el superyó. El
ello es solo posible observarlo cuando, a través de los impulsos inconsciente, trata de
satisfacerse y entra en pugna con el yo, pero cuando el ello está en relativa calma no es posible
acceder a él, situación diferente sucede con el superyó, donde sus contenidos son
principalmente consientes y estando en armonía con el Yo sé “mimetizan” y no es posible
determinar sus límites, los cuales se aclaran solo cuando el superyó enfrenta al Yo de una
manera hostil o critica y suscita estados perceptible en el Yo. Como menciona Anna Freud en
su libro El yo y los mecanismos de defensa “de esto resulta que el yo constituye el terreno
apropiado, sobre el cual debemos dirigir constantemente nuestra observación. Es por
expresarnos así, las vía por donde buscamos capturar una imagen de las otras dos instancias”
(Freud, A. 1965).
El análisis del yo adquirió gran importancia para los analistas, en especial para Anna, ya que
constituía la mayor dificultad al momento de realizar el análisis del ello cuando se intentaba
traer lo inconsciente al consciente. Por otro lado el descubrir que el yo no es solo el sistema
consciente de percepción si no que también grandes porciones son también inconscientes y
necesitan del análisis para llegar a ser consciente, Anna concluye que “… el análisis del yo ha
adquirido considerable importancia entre nosotros. Todo lo originario del yo que se inmiscuya

4
en el análisis, constituye un material tan bueno como cualquier derivado del ello” (Freud, A.
1965).
Así es como también profundizó en los mecanismos de defensa del Yo como forma de
estudiar el inconsciente y a través de la clasificación de estos para una práctica clínica más
eficaz.
Anna postula que existen 9 mecanismos utilizados para defenderse de los impulsos
instintivos, pero que finalmente existe un decimo mecanismo, la sublimación, atribuido a un
estado normal más que de la neurosis
1. Represión: Es la eliminación abrupta e involuntaria de la conciencia de cualquier impulso,
idea o recuerdo amenazante. La represión o negación, la más peligrosa y arcaica de las
defensas, es el requisito para cualquiera de los otros mecanismos de defensa.
2. Regresión: Tal vez no es en realidad una defensa, sino una forma primitiva de la conducta
frente al estrés; un regreso a modos anteriores de respuesta cuando se enfrenta la angustia.
3. Formación reactiva: Transformación de impulsos inaceptables en sus formas opuestas y
más aceptables; por lo común, tiene una forma del tipo: “La dama protesta demasiado”.
Odio en amor, amor en odio.
4. Aislamiento: Característico de la neurosis obsesiva-compulsiva, los impulsos inaceptables
se retienen en la conciencia, pero son despojados de emoción y separados de las ideas
relacionadas para lograr una cuarentena emocional-intelectual.
5. Anulación: Característica de la personalidad obsesiva-compulsiva, la cual realiza gestos o
rituales mágicos para cancelar pensamientos o actos inaceptables, una vez que éstos han
sido completados.
6. Proyección: Atribuir a otra persona u objeto los propios impulsos, deseos o pensamientos
inaceptables. Luego, esos impulsos se vuelven “ajenos al yo” como si no fueran parte suya.
7. Introyección: Incorporar en la conducta y las creencias propias las características de algún
objeto externo o persona admirada.
8. Vuelta contra sí mismo: Los impulsos se reorientan al interior, contra uno mismo, en
lugar de hacerlo al exterior, hacia el blanco apropiado. Por lo regular, resultan en
sentimientos masoquistas de inadecuación, culpa y depresión.
9. Transformación de lo contrario: Es similar a la formación reactiva, transforma un
impulso de un modo activo a uno pasivo. También es semejante a volverse contra el yo.
10. Sublimación o desplazamiento del objeto instintivo: Transformación de un impulso a
una forma socialmente productiva y aceptable.

Anna determinó 3 motivos distintos para las defensas. En primer lugar tenemos el caso de
un adulto neurótico donde existe el miedo a que el superyó se sienta insatisfecho con el trabajo
del yo en la medida que este trate de satisfacer los deseos del ello. En segundo lugar tenemos a
un niño neurótico donde el superyó aun no se ha desarrollado, en este caso el miedo estaría
reflejado en el peligro al mundo externo. Finalmente tenemos al miedo del yo al peligro de los
impulsos instintivos del ello como amenaza a su independencia.

5
Psicoanálisis del desarrollo del niño y adolescente
La segunda gran contribución realizada por Anna Freud al psicoanálisis fue el desarrollo del
psicoanálisis de niños y adolescentes.
Anna Freud formada y analizada por su padre Sigmund Freud inicia el largo recorrido del
Psicoanálisis siempre con una base pedagógica de acuerdo a sus estudios como maestra. En
1922 se convierte oficialmente en Psicoanalista infantil y a lo largo de los años se interesaría
por el rol de los padres y de los educadores respecto a la formación del niño y su contribución
con actitudes inadecuadas al desarrollo de la neurosis, buscando una formación psicoanalítica
que comprendiera cuales eran los medios más adecuados y menos coercitivos para ellos de
acuerdo a cada edad.
Esta autora se centró en la niñez ya que pensaba que era la base del desarrollo cognitivo,
emocional y conductual. Estipulaba que corregir al niño antes de la maduración no habría
problemas en etapas posteriores
Anna realizaba prolijas observaciones de los niños en las Escuelas y Hospitales
interpretando dos tipos de datos: los de observaciones directas y los que provenían de las
reconstrucciones operadas en los adultos. En lo primero había que ahondar detalladamente en
lo observado y en las pulsiones ocultas, vale decir, las manifestaciones inconscientes.
Esta Psicoanalista relaciona la conciencia de la enfermedad con el asumir que una persona
está enferma, término que se aplica especialmente a pacientes adultos que hace alusión al grado
de insight o conciencia que la persona tiene de estar enfermo. En el caso de un menor es el
analista que posee un rol fundamental, teniendo como objetivo el lograr que el niño asuma
cierto grado de conciencia respecto su enfermedad, considerando que él nunca tomara la
decisión de analizarse sino de las personas adultas que lo rodean.
Otro punto importante y que estipula Anna es que en los niños no se puede dar el proceso
de asociación libre como en los adultos , debido a que en ellos no está desarrollado el lenguaje
por completo, por ende se tiene mayor dificultad para detectar las resistencias.
Debido a los puntos anteriores, Anna Freud propone un periodo de amaestramiento, esto
se realizará antes de comenzar con el análisis, donde el niño estará consciente de su
enfermedad.
Respecto a la transferencia Anna estipula que los niños no pueden desarrollar una neurosis
de transferencia porque sus primitivos objetos de amor que son los padres están vivos y
ejercen una influencia en su realidad y no solo en la fantasía como un adulto neurótico. Por
ende la autora propone una técnica sutil y natural que se basa en ser un adulto cuidadoso sin
ser un compañero de juego o un padre sustituto.
Técnicas empleadas en el proceso analítico
Anna hace una diferencia en las técnicas empleadas con niños y con adultos:

6
“En los adultos se trabaja con recuerdos conscientes para reconstruir su historia sin recurrir
a los familiares, la interpretación de los sueños, la interpretación en la asociación libre y la
interpretación de sus relaciones transferenciales”. (Freud, A. 1927/1980)
Con respecto al niño la autora destaca que “a pesar de estar en desventaja y tener que
recurrir a familiares para conocer la historia del niño y de que no puedan asociar libremente
debido a que aun no tienen una representación final, poseen ventajas tales como: los niños
son hábiles en la interpretación de los sueños, la transparencia o confusión se adecua a la
fuerza de resistencia. El conocimiento de sus vivencias diurnas y de las personas que lo rodean
son bastantes claros al momento de narrar sus fantasía, el dibujo será una gran fuente de
información”, (Freud, A. 1927/1980)
Basándose en la técnica del juego, fue un gran aporte en la observación del niño y de esa
manera se trasladaría el ambiente del menor a la consulta, por ende el analista podrá reconocer
las diversas reacciones del niño, la intensidad de su agresión, sentimientos compasivos y la
actitud hacia diferentes objetos y personas representados en los juguetes, todo esto para
reforzar el Yo y conseguir un análisis pedagógico.
El último producto del trabajo del análisis infantil que podemos rescatar de Anna es la
creación de las líneas temporales del desarrollo, donde plasma la observación que realizo al yo
y como este se enfrentaba a las problemáticas de la vida cotidiana según la interacción que se
producían entre el ello y el yo, en la siguiente tabla podremos observar en detalle lo descrito
por Anna.

I. De la dependencia a la confianza
II. De la lactancia a la alimentación racional
emocional en sí mismo
1. Dependencia biológica de la madre; no hay 1. Ser amamantado con programa o según la
reconocimiento de la separación entre el yo y el demanda.
otro. 2. El destete del pecho o el biberón es iniciado
2. Relación de satisfacción de necesidades en que por el bebé o por deseos de la madre; nuevos
la madre es vista como un satisfactor alimentos.
parcialmente externalizado. 3. Transición de ser alimentado a alimentarse por
3. Fase de constancia del objeto en que se sí mismo; todavía se identifica “comida” con
conserva la imagen de la madre incluso cuando “madre”.
no está presente. 4. Alimentación por sí mismo, desacuerdos con
4. Etapa preedípica de aferramiento marcada por la madre acerca de la cantidad; las comidas como
fantasías de dominio del objeto amoroso. campos de batalla para otras dificultades en las
5. Fase fálica-edípica caracterizada por la actitud relaciones entre madre e hijo.
posesiva del padre del sexo opuesto y la rivalidad 5. Las teorías infantiles de la sexualidad dan
con el padre del mismo sexo. forma a la actitud hacia la comida: fantasías de
6. Fase de latencia en la que disminuye la fecundación por la boca, temor al embarazo
urgencia de la pulsión, menosprecio de los (miedo a engordar).
modelos de los padres, transferencia de la 6. Se desvanece la sexualización de la
Libido a los pares, grupos, figuras de autoridad. alimentación y se recupera o se incrementa el
7. Fase preadolescente de regreso a las actitudes placer de comer; más autodeterminación de los
de la relación de satisfacción de necesidades con hábitos alimenticios.

7
el objeto amoroso.
8. Fase adolescente, marcada por la batalla por
ganar la independencia y romper los lazos con
los objetos amorosos de la niñez
(Los padres) y por la necesidad de establecer la
primacía genital.
III. De orinarse y ensuciarse al control de la IV. De la irresponsabilidad a la
vejiga y el intestino. responsabilidad en el manejo del cuerpo.
1. La completa libertad para orinarse y ensuciarse 1. La agresión cambia del yo al mundo externo.
es controlada por la madre, no por el yo. El enfoque en objetos externos limita las lesiones
2. Fase anal en que el niño se opone a que otros que el niño se causa cuando se muerde, se
controlen la eliminación; las heces son tratadas rasguña y se rasca; el niño reconoce las causas del
como “dones” preciosos para la madre; batalla dolor autoinducido.
de voluntades por el entrenamiento en el control 2. Avances del yo en la comprensión de los
de esfínteres. principios de causalidad; postergación de los
3. Identificación con las reglas de los padres, deseos peligrosos, reconocimiento de peligros
autocontrol de los esfínteres; preocupaciones por externos como el fuego, las alturas y el agua.
la limpieza que se basan en el aprendizaje de la 3. Aprobación voluntaria de las reglas de higiene
repugnancia y la vergüenza. Intereses en el orden y necesidad médica; evitación de comidas poco
y la pulcritud basados en la regularidad anal. saludables, aseo corporal, acatamiento de las
4. Preocupaciones por la limpieza que se busca órdenes del médico sólo cuando el temor o la
por sí misma, independientemente de las culpa lo imponen. Creencia de que la madre
presiones de los padres; yo autónomo y control puede restablecer la salud puesta en peligro.
de los impulsos anales por el superyó.
V. Del cuerpo al juguete y del juego al
VI. Del egocentrismo al compañerismo
trabajo
1. El juego del bebé es la sensualidad de su 1. Actitud egoísta, narcisista en que los otros
cuerpo o el de su madre en los dedos, la piel y la niños no importan o son vistos como una
boca, sin que exista una distinción clara entre molestia y rivales por el amor de los padres.
ambos. 2. Los otros niños se identifican como objetos o
2. Las propiedades sensuales de su cuerpo o del juguetes sin vida que pueden ser maltratados sin
cuerpo de la madre se transfieren a algún objeto esperar que respondan.
suave; por ejemplo, un osito de peluche, una 3. Los otros niños son vistos como ayudantes en
frazada. tareas; la duración de la asociación es
3. El aferramiento a un objeto “suave” específico determinada por los requisitos de la tarea.
se convierte en un agrado general por las cosas 4. Los otros niños son vistos como iguales y
adorables; pero todas son objetos inanimados y compañeros por derecho propio; es posible
no responden al manejo ambivalente del admirarlos, temerlos, competir con ellos,
pequeño. amarlos, odiarlos o identificarse con ellos. Se
4. Los objetos adorables ahora se usan sólo a la desea el verdadero compañerismo.
hora de dormir; los otros juguetes son para
divertirse durante el día.
5. Se obtiene placer al terminar las actividades de
juego y en el logro.
6. El juego se transforma en trabajo a través de
pasatiempos, ensoñaciones, recreaciones,
deportes de competencia. Los niños pueden
inhibir sus impulsos.
(Figura 1, Sollod, R., Wilson, J. and Monte, C. 2009. Basado en A. Freud, 1965b, pp. 138-147.)

8
3.2. Rescate de diferencias o similitudes de la teoría freudiana.
Anna Freud fue la heredera indiscutible de la teoría psicoanalítica de su padre y fue
denominada la sucesora y protectora del psicoanálisis clásico, sin embargo Anna, más que
continuar la misma línea de Sigmund, desarrollo y expandió la teoría hacia otros aspectos,
como el psicoanálisis del yo, la infancia y los mecanismos de defensa.
Semejanzas
Ambos fueron psicoanalistas y estudiaron las instancias del aparto psíquico.
Ambos fueron teóricos y autores de teorías importantes que aun están vigentes.
Anna tomó como base para el desarrollo de sus teorías, la teoría psicoanalítica propuesta por
su padre.
Diferencias
Freud se centraba en el análisis de adultos que padecían alguna enfermedad (histeria, neurosis,
etc.) y a partir de ello creó sus teorías reconstruyendo los recuerdos de la infancia de sus
pacientes. En cambio Anna, desarrollo su teoría observando a los niños, quienes eran sus
pacientes.
Freud se centraba en el estudio de las pulsiones y veía al yo como un producto contingente y
vestigio del ello y en que el yo era quien conducía al ello. En cambio Anna estaba interesada en
la interacción que tenían las 3 instancias (ello, yo y superyó) y en los mecanismos de defensas
del yo.
Freud dirigió su atención al ello y a la parte inconsciente de la vida psíquica, en cuanto a Anna
siempre se intereso mas en Yo como lugar para observas la las otras dos instancias y al
inconsciente.
Freud utilizaba su teoría para la aplicación en psicopatologías, en cambio Anna amplio el
ámbito del psicoanálisis aplicándolo “a nuevos campos de la conducta, a los niños y
adolescentes, a la pediatría, al derecho familiar y a las técnicas modificadas para la educación y
cuidado infantil” (A. Freud, 1972, 1978a).
Freud trabajaba con adultos usando hipnosis, técnicas de asociación libre, interpretación de
los sueños y transferencia. A diferencia de Anna que trabajaba principalmente analizando niños
donde no era posible utilizar la asociación libre y la transferencia se producía con los padres.
Freud planteo las etapas del desarrollo infantil de la siguiente forma: oral, anal, fálica, latencia y
genital. En cambio Anna la tomó como base y profundizo más en ella para crear “Las seis
líneas temporales del desarrollo”, que son: De la dependencia a la confianza emocional en sí
mismo, de la lactancia a la alimentación racional, de orinarse y ensuciarse al control de la vejiga
y el intestino, de la irresponsabilidad a la responsabilidad en el manejo del cuerpo, del cuerpo al
juguete y del juego al trabajo y del egocentrismo al compañerismo.

9
3.3. Influencias de otros autores o herencia en relación con otras teorías.
La única y más importante influencia de Anna Freud siempre fue su padre, por lo que
influencias de otros psicoanalistas no tuvo, al contrario se opuso a varios de ellos refutando sus
teorías, por lo que consideramos apropiado hablar sobre su principal contraparte, Melanie
Klein, mencionando sus principales diferencias entre sus teorías.
Controversia entre Anna Freud y Melanie Klein
Anna consideraba que el proceso analítico de los niños no podía ser igual al de los adultos,
debido a la incapacidad de los menores a asociar libremente y la no conciencia de su
enfermedad. El psicoanalista debe ocupar el lugar del ideal del yo y decidir que tiene que ser
rechazado, domado, satisfecho o sublimado.
Melanie Klein defiende la idea de que el proceso analítico debe ser igual al de los adultos,
levantando las represiones a través del inconsciente, con la actividad fantaseadora del niño. La
cura analítica consiste en reeducar la capacidad de fantasear. El yo débil del niño favorece al
análisis.
Klein argumentaba que los niños no asociaban libremente mediante el lenguaje, pero no se
debía a que no tuviesen capacidad para poner sus pensamientos en palabras sino una
resistencia a la angustia de las asociaciones verbales, por ende ella propuso el juego como
expresión simbólica, que es equivalente a asociación libre, considerando apta su interpretación.
Anna Freud muy por el contrario defendía que la asociación libre no se podía concretar
debido a que el niño no tiene representación final de que está en análisis, por ende la
aceptación del tratamiento debía depender del analista. La autora piensa que el juego es una
gran herramienta para obtener información del niño, pero no es en ninguna manera al lenguaje
para asociar libremente.
Anna piensa que es relevante el periodo de amaestramiento del niño ya que éste no tiene
conciencia de la enfermedad.
Melanie defiende que no es necesario el periodo de amaestramiento, ya que el tratamiento
no se basa en el yo consciente sino que se respalda en el inconsciente.
En relación al complejo de Edipo Melanie hace referencia a los objetos del mismo y la edad
que se instaura. Los objetos del Edipo son fantasmáticos y que se instaura en el destete por
ende a los tres años ya se ha atravesado. Señala que esa etapa debe abordarse mediante un
análisis.
Anna por su parte defiende que Edipo está situado en el plano de la realidad, se instaura a
los cinco años y no debe abordarse ya que alteraría la estructura psíquica del niño.

10
Anna Freud estipula que el Superyó del niño no es bastante independiente para que controle
sus tendencias pulsionales, por ende el analista debe tomar el lugar del ideal del yo, indicándole
al menor el destino de sus pulsiones, diciéndole lo que está mal y lo que está bien.
Melanie sostiene que el Superyó padece pocas modificaciones durante el desarrollo. De esta
manera es independiente a influencias externas en su formación. Destaca además que si un
analista asume el rol del superyó bloquea el camino de los impulsos que llevan a la conciencia,
volviéndose un representante de los poderes represores.

3.4. Constructos teóricos que han aportado al desarrollo de la psicología actual.


Anna Freud realizo grandes aportes a la psicología y al desarrollo del psicoanálisis dejando
un legado de teorías y conceptos que hasta el día de hoy se utilizar en la práctica clínica, ente
los conceptos más utilizados en la actualidad en psicología son:
La Fantasía
Según Anna Freud los niños también emplean este mecanismo comúnmente solapándolo al
de desplazamiento. Más concretamente se refería a que los niños suelen tener muchas fantasías
sobre animales que en realidad representan fantasías relacionadas con su propia familia. La
autora ponía como ejemplo el caso de un niño de siete años que tenía la fantasía de ser el amo
de un león manso, que asustaba a todos los demás pero era dócil y cariñoso con él. Más tarde,
durante su análisis, se dio cuenta de que el león era en realidad su padre, al que el niño quería
pero también temía.
La fantasía es bastante frecuente durante la adolescencia. Suele manifestarse a través de
ensoñaciones diurnas y suele perseguir compensar las insatisfacciones y la sensación de
inseguridad en las relaciones sociales o amorosas, en el rendimiento académico, etc. En general
las relaciones interpersonales suelen ser las protagonistas de estas ensoñaciones, sobre todo las
referentes al sexo opuesto. Además los adolescentes utilizan la fantasía para ensayar conductas
y acontecimientos futuros, lo que les permite adaptarse mejor a las circunstancias
posteriormente.
Idealización
La idealización es también muy frecuente, sea de determinados adultos, compañeros. la
idealización consiste en considerar a una persona, grupo o institución como perfecta, sin tener
en cuenta los aspectos que no concuerdan con esta imagen. Las cualidades positivas se
sobreestiman y las negativas se ignoran, aunque en realidad se trata de idealizaciones poco
consistentes y que cambian con facilidad. Este mecanismo ejerce dos funciones importantes
para el adolescente: conduce a un aumento de la motivación para alcanzar determinados
objetivos y ayuda a des-idealizar y separarse de los padres.
Formación reactiva

11
Consiste en hacer exactamente lo opuesto a lo que dicta el deseo percibido como
amenazante, y muchas veces se encuentra en la base de rituales obsesivos. Un ejemplo sería
que una persona con deseos de ensuciarse se obsesionara con la limpieza. También puede
llevar a conductas muy valoradas socialmente, como cuando una persona con deseos de
quemar cosas se alista como bombero voluntario.
Introyección
La Introyección, muchas veces llamada identificación, comprende la adquisición o
atribución de características de otra persona como si fueran de uno, probablemente sea porque
resuelve algunas dificultades emocionales en mi propio self.
Por ejemplo, si se le deja solo a un niño con mucha frecuencia, él intenta convertirse en
“papá” de manera de disminuir sus temores. En ocasiones les vemos jugando a con sus
muñecos diciéndoles que no deben tener miedo. También podemos observar cómo los chicos
mayores y adolescentes adoran a sus ídolos musicales, pretendiendo ser como ellos para lograr
establecer una identidad.
Aislamiento
Es el mecanismo contrario a la represión. En él no se aleja de la consciencia lo que se
considera amenazante o doloroso sino que lo que se mantiene inconsciente es el sentimiento
que genera. Un ejemplo sería alguien que al morir un ser querido es incapaz de sentir dolor.
Anulación o reparación
Consiste en la realización de un acto determinado con el fin de anular o reparar el
significado de uno anterior.
Proyección
La proyección como mecanismo de defensa, común en todos los individuos, es causa de
errores de juicio que se corrigen mediante una sana autocrítica, aunque como patología mental
está presente en los delirios alucinatorios y en las paranoias.

4. Reflexiones finales

4.1. Postura crítica de la propuesta teórica: alcances y limitaciones.


Para tomar una posición crítica a las teorías de Anna Freud no resultó tan complejo como
se espera, cuando nos referimos a temas que están, directamente relacionadas al psicoanálisis,
que por lo general sus planteamientos, están cargados de una epistemología filosófica, que nos
invita a la reflexión del yo y del mundo psíquico; por tanto resulta bastante circunstancial,
subjetivo y complejo a la vez comprender de manera integral, esto debido a que, el legado de

12
su padre Sigmund Freud nos sirvió de plataforma o escalafón para comprender mejor las
teorías de ésta autora y la de dinámica del contexto donde se crean.
Para identificar las posibles limitaciones de sus teorías, tenemos que analizar
meticulosamente su vida personal y sus obras más celebres, donde nos es posible encontrar
esos elementos, que consideramos fuera de orden y que posiblemente carecen de veracidad o
no se manifiestan de la misma forma en el plano psicoanalítico que conocemos o que son
válidos en la actualidad. Anna hizo un gran trabajo al identificar los mecanismos de defensa,
este es uno de los conceptos más triviales utilizados en el mundo de la psicoterapia, por el
hecho de categorizar aquellas situaciones evidentes en los pacientes que pueden ser
características claras de algún tipo de resistencia. Hasta este punto podríamos comentar que su
obra es compleja pero los conceptos pueden ser bastante universales y adelantados para su
época.
Las falencias que pudimos identificar se encuentran en la teoría de las líneas de desarrollo
que esta autora plantea. Esto no significa que para nosotras esta teoría no sea válida, sino que
más bien en algunos puntos, puede caer en la sobre exageración de algunas situaciones o que
estos hechos carecen de cierta naturalidad por lo menos para lo que estamos acostumbrados a
ver en los niños en la actualidad. Para reforzar nuestra postura es necesario revisar los posibles
factores desde dos aspectos fundamentales, el primero de ellos está relacionado directamente
con la vida personal de la autora y puede que esté un poco arraigado a nuestra sugestión y el
segundo es la propia dinámica de investigación de la autora y algunos de los planteamientos
que hizo en su obra titulada Psicoanálisis del desarrollo del niño y del adolescente.
En el primer aspecto retomamos un poco la vida de la autora, más específicamente el
entorno familiar de Anna, es hija nada más que del padre del psicoanálisis Sigmund Freud, este
la psicoanalizaba, obviamente para nuestras fechas no es algo que este éticamente correcto;
además de eso al estar expuesta en este medio obviamente se creó en ella una predisposición
hacia los temas relacionados con el psicoanálisis y afectaron para bien o mal sus propios
planteamientos. Las teorías de Anna Freud pueden ser vistas como una continuación al trabajo
de su padre Sigmund Freud, claramente los planteamientos de él fueron una especie de génesis
para que Anna pudiese crear sus propias teorías; por tanto para su época y aun es nuestros
días puedes ser bastante controversiales, para la gente que desconoce el vínculo que existe
entre nuestra parte psíquica, emocional y fisiológica, por lo general se tiende a remitir la
sexualidad como una característica única en adolescentes y/o adultos y no como un elemento
transdimensional que nos acompaña durante todo el desarrollo de nuestras vida y que además
tiene gran incidencia en nuestra personalidad y conducta.
La autora platea que existen unas líneas de desarrollo, una que va desde la dependencia
hasta la autoestima emocional y relaciones objetables, la segunda desde la lactancia hasta la
alimentación racional, la tercera de la irresponsabilidad hacia la responsabilidad, la cuarta del
egocentrismo al compañerismo y la quita desde los juguetes y desde el juego al trabajo, las
limitaciones de esta teoría se da tanto en la línea de tiempo como la aparición de algunas o no

13
en los niños, también la exageración en la que se presenta. Consideramos que la manifestación
de las características va depender de múltiples factores y por tanto va a tener distintos
enfoques; un ejemplo de esto lo podemos encontrar en esta frase donde dan explicación del
desarrollo del amor objetal en los niños “Desde el quinto o sexto mes en adelante el infante
comienza también a prestar atención a la madre en momentos en que no se halla bajo la
influencia de apetencias somáticas.” “Durante el segundo año la relación con la madre aumenta
en fuerza e intimidad". (Freud, A. 1985). Como vemos al igual que su padre Anna tiende a
estandarizar y por lo general estas líneas de tiempo tan cortas muchas veces no son
consecuentes con la realidad, puesto que eso va a depender de las características del entorno,
biológicas y psíquicas de cada sujeto.
Aparte del tiempo, existen afirmaciones fuertes como plantear que todos los infantes son
egoístas en las primeras etapas del desarrollo, un ejemplo de ello se evidencia en el vínculo con
su madre y posteriormente con otros niños, esto nos lleva a preguntarnos ¿Será que esto es
posible? Puesto como la misma teoría de Anna basada en la teoría de su padre sugieren que en
un principio los niños solo quieren satisfacer sus necesidades principalmente nutricias que
posteriormente se vuelven placenteras, es decir ¿será consiente el niño de ese acto de
“egoísmo”? nótense un ejemplo de ello en las siguientes afirmaciones: “El niño pequeño, bajo
la influencia de sus deseos instintivos, es un ser incivilizado y primitivo. Es sucio y agresivo,
egoísta y desconsiderado, impúdico y entrometido, insaciable y destructivo.”(Freud, A. 1985).
Además, Anna agrega que “El infante establece su primer vínculo con la madre o con el
substituto materno que lo amamanta. Este primer “amor” del infante es egoísta y material.”
(Freud, A. 1985).
En base a las afirmaciones anteriores y muchas otras, consideramos que la tendencia de la
autora en ocasiones es la de poner al niño como un “villano” y al igual que su padre verlo
como algo perverso, por lo cual con anterioridad mencionamos que existe una exageración de
los hechos, pues no es todos los casos, ni en todo los niños se van a evidenciar características
tan fuertes como esta, de la misma forma, esto se debe claramente a la influencia de su padre y
el contexto en que ella se basó para crear sus teorías.

4.2. Consideraciones en relación con la práctica psicológica actual.


La principal contribución de Anna Freud y que aún perdura en la psicología actual fue el
psicoanálisis en los niños y descubrir que estos a menudo requieren diferentes tratamientos
psicológicos que los adultos. Destacó el papel que los primeros trastornos en el apego entre
padres e hijos podrían desempeñar en el desarrollo posterior y sus problemas psicológicos, en
lo cual hoy se pone gran énfasis en una crianza responsable y respetuosa. Su trabajo estudiando
a niños que habían sufrido abandono o negligencia extrema, sentó las bases para la
investigación posterior y para que hoy se los considere dentro del ámbito de la psicología y el
psicoanálisis.

14
Anna Freud ha sido un gran aporte a la psicología social ya que centró sus ideas en el
desarrollo humano y en contemplarlo como una serie de etapas prefijadas genéticamente, las
que requieren del medio social para su desarrollo y madurez. Además de los problemas de
dominio de un subsistema familiar sobre otro como fallas importantes en la comunicación
positiva y no ambigua, como resultado de la interacción de dominio.

5. Bibliografía
Freud, A. (1985). Psicoanálisis del desarrollo del niño y del adolescente. 2nd ed. Barcelona: Paidós.
Freud, A. (1980). Psicoanálisis del niño. Buenos Aires: Paidós.
Freud, A. (1965). El yo y los mecanismos de defensa. 4th ed. Buenos Aires: Paidós.
Sollod, R., Wilson, J. and Monte, C. (2009). Teorías de la personalidad. 8th ed. México: McGraw-
Hill, pp.127-147.
Vallejo Orellana, Reyes. (2002). Anna Freud, una vida dedicada al conocimiento y a la ayuda psicológica
del niño. Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría, (81), 65-78. Recuperado en 06
de noviembre de 2018, de http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0211-
57352002000100006&lng=es&tlng=es.

15

Você também pode gostar