Você está na página 1de 2

El acto auténtico debe ser redactado con las solemnidades

requeridas, destinadas a aumentar las garantías que debe presentar


como son: estar escrito en idioma español, en un sólo contexto en el
anverso y reverso de la hoja de papel, sin abreviaturas, espacios en
blanco, lagunas ni intervalos y firmados por las partes y el oficial
público que lo realizó, de conformidad al artículo 21 de la Ley 301
sobre Notariado.

El acto auténtico tiene una mayor fuerza probatoria que el acto


bajo firma privada por las siguientes razones:

a) Los actos auténticos hacen fe de su escritura, sin que sea


necesaria una verificación y solo pueden ser contestados por un
procedimiento sumamente complicado como lo es la inscripción en
falsedad.

b) Hacen fe de su fecha aún antes de efectuado el registro


correspondiente.

c) Hacen fe de su contenido bajo reserva de la inscripción en


falsedad, para todo lo que el notario declare haber contactado
personalmente.
d) Revestido de una fórmula ejecutoria, el acto auténtico permite al
acreedor, a falta de ejecución voluntaria, recurrir, sin sentencia
previa a la ejecución forzosa por un tribunal competente para
proceder a un embargo.

Você também pode gostar