Escolar Documentos
Profissional Documentos
Cultura Documentos
Plan ¶ Complicaciones 15
Síndrome doloroso regional crónico (SDRC) de tipo 1 15
¶ Introducción 1 Rigidez 15
¶ Tratamientos 1 ¶ Tratamientos secundarios 15
Tratamiento ortopédico 3 Artrólisis 15
Tratamiento quirúrgico 4 Artroplastias 16
¶ Valoración diagnóstica kinesiterápica 5 ¶ Conclusión 16
Dolor 5
Trastornos tróficos 5
Movilidad articular pasiva 5 ■ Introducción
Movilidad articular activa analítica 7
Movilidad activa global 7 Comúnmente se admite que la precocidad en
Fuerza 7 emprender la rehabilitación de la mano es esencial para
Escalas funcionales 7 lograr una recuperación óptima de la función y limitar
las secuelas a largo plazo. El conocimiento de los
¶ Técnicas de rehabilitación 8
protocolos de inmovilización, de las etapas de la cicatri-
Tratamiento de los dolores 8
zación y de la aplicación correcta de las técnicas y sus
Tratamiento de los trastornos tróficos 9
indicaciones constituyen los fundamentos de un trata-
Recuperación de la movilidad cutánea 9 miento eficaz. La colaboración estrecha entre el cirujano
Recuperación de la movilidad articular 10 ortopedista y el kinesiterapeuta también es un elemento
Recuperación de la movilidad tendinosa 10 determinante.
Fuerza muscular 11 Las alteraciones vasomotoras y propioceptivas dificul-
Ortesis 11 tan la evolución del tratamiento; las secuelas principales
Paciente 12 son la rigidez articular y las adherencias. Cualquiera que
¶ Características de algunas lesiones específicas 12 sea la complejidad de la lesión inicial, para el trata-
Avulsión pulpar 12 miento kinesiterápico siempre deben tenerse en cuenta
Lesiones del dedo anular por un anillo 12 los deseos y las expectativas del paciente, así como su
Esguinces y luxaciones metacarpofalángicas 13 contexto socioprofesional, deportivo y psicológico.
Fracturas diafisarias de los metacarpianos El objetivo de este artículo es aportar las herramientas
de los dedos largos 13 necesarias para:
Fracturas de las metacarpofalángicas 13 • instaurar un procedimiento de valoración y diagnós-
Fracturas diafisarias de F1 13 tico;
Fracturas de la IFP 13 • conocer los principios terapéuticos generales que
Esguinces y luxaciones IFP 13 condicionan una evolución favorable;
Fracturas diafisarias de F2 y de la IFD 14 • aplicar las técnicas de rehabilitación de uso corriente;
Esguinces de la MF del pulgar 14 • distinguir las características de algunas lesiones
Fractura de Bennett 14 específicas.
Fractura de Rolando 14
Fracturas diafisarias del primer metacarpiano
y de la F1 del pulgar 14
■ Tratamientos
Reimplantaciones 14 Los dedos de la mano, una estructura móvil por
Lesiones en la infancia 15 excelencia [1] con distintos planos de deslizamiento
1 2 3
4 5 6
Figura 1. Músculos motores y estructuras tendinosas. 1. Inte-
róseos; 2. aparato extensor; 3. «correa» de los interóseos;
4. lumbrical; 5. flexor superficial; 6. flexor profundo.
Figura 5. Sindactilización.
Figura 3. Posición intrínseca minus. mano, con las MF en extensión y las IFP en flexión,
facilita el desarrollo de una rigidez extremadamente
difícil de tratar [3]. Sin embargo, pueden ser necesarias
(Fig. 1), no soportan bien la falta de movimientos. Los algunas inmovilizaciones «no funcionales», sobre todo
tratamientos deben contemplar la posibilidad de res- para relajar una reparación tendinosa asociada a una
tringir la inmovilización y de instaurar una rehabilita- fractura o para evitar un riesgo de desplazamiento
ción precoz [2]. La inmovilización no está desprovista de (fractura del cuello del metacarpiano, MF posicionadas
riesgos, por lo que debe ajustarse a algunas reglas: a 30°).
• la duración de la inmovilización debe ser mínima; Cualquiera que sea el tratamiento, un elemento
• el tiempo de inmovilización no debe confundirse con fundamental es respetar la convergencia de la cadena
la fase de consolidación, es decir, el segmento afec- digital hacia el tubérculo del escafoides en el momento
tado puede ser movilizado una vez que se produce la de la flexión. Un callo vicioso (angulado, con rotación
granulación (por ejemplo, 3 semanas para la fractura axial) expone al riesgo de dificultar la prensión al
diafisaria de una falange); flexionar los dedos [4].
• en general, no es necesario inmovilizar todas las La angulación (de causa ósea y/o ligamentosa) en el
articulaciones digitales para estabilizar una lesión; plano frontal es inaceptable porque puede causar un
sólo debe inmovilizarse la articulación afectada para solapamiento de los dedos, tanto en extensión como en
reducir el riesgo de adherencias tendinosas y de flexión (Fig. 4).
rigidez articular. Sin embargo, si es necesaria una La rotación axial es el desplazamiento más inadver-
inmovilización completa de la mano, ésta debe tido. La inmovilización en extensión dificulta la mani-
hacerse en posición «intrínseca plus» (Fig. 2): festación de este tipo de desplazamiento, que se revela
C muñeca en extensión de alrededor de 30° y pulgar en flexión. Hay que prestar mucha atención al posicio-
en antepulsión para evitar la retracción de la namiento del plano de la uña del dedo lesionado con
primera comisura; relación a los planos de las uñas de los dedos
C metacarpofalángicas (MF) con 80° de flexión para adyacentes.
evitar la retracción de los ligamentos laterales, que Estos dos desplazamientos serán controlados por la
se distienden en extensión; sindactilización (Fig. 5) al dedo vecino en cuanto sea
C interfalángicas rectas para evitar el riesgo de retrac- posible movilizar el dedo. Poco voluminosa y de fácil
ción del fibrocartílago glenoideo. realización, necesita dos tiras de esparadrapo adhesivo y
Esta posición «intrínseca plus» es inversa a la «intrín- extensible (o material termomoldeable) y un trozo de
seca minus» (Fig. 3) con MF en extensión e interfalán- compresa entre los dos segmentos distales para evitar la
gicas proximales (IFP) flexionadas, que a menudo se maceración. La sindactilia debe dejar libre los pliegues
observa tras un traumatismo, sobre todo si hay un de flexión. Para solidarizar el 5.° dedo con el 4.°, las
edema considerable. Esta disposición espontánea de la tiras deben colocarse de forma sesgada.
Figura 6. Tratamiento ortopédico de fractura diafisaria estable Figura 8. Inmovilización por fractura diafisaria de un meta-
y poco desplazada de la F1. carpiano.
Tratamiento ortopédico
Se dirige preferentemente a las lesiones estables y con
poco desplazamiento. La inmovilización es reemplazada
por una sindactilia que permite mover el dedo de forma
activa por efecto de arrastre del dedo adyacente.
Figura 10. Férula interfalángica proximal «stop».
En las lesiones óseas
El tiempo de consolidación de las fracturas diafisarias objetivo antálgico, y una sindactilia. La consolidación se
de las falanges es prolongado (4-8 semanas). alcanza en unas 5 semanas. Las fracturas poco desplaza-
Las fracturas diafisarias de la primera falange (F1) o das del cuello metacarpiano se inmovilizan mediante
las fracturas de la MF se inmovilizan con una ortesis en una férula dorsal o palmar, con la muñeca en extensión
manopla, con la muñeca libre o inmovilizada [5] (Fig. 6) (30°) y la MF en flexión (50°), durante 3 semanas como
según el nivel y la estabilidad de la fractura. Las MF se máximo.
disponen a 70° de flexión y las IFP quedan libres, con
movilización en sindactilia para controlar la rotación de En las lesiones ligamentosas
los dedos. Los esguinces benignos (anterior o lateral) de las IFP
Las fracturas diafisarias de F2 y F3 y las fracturas cicatrizan de manera espontánea; suele ser suficiente
articulares de las IFP se tratan con una férula segmenta- una sindactilia durante 2 semanas, en ocasiones aso-
ria palmar o dorsal, IFP o interfalángica distal (IFD) ciada a automovilización y rehabilitación precoz [6].
(Fig. 7). Las fracturas conminutas cerradas de las falan- Las luxaciones dorsales (Fig. 9) producen una lesión
ges, a menudo consecutivas a un aplastamiento y con de la placa palmar, que a veces se acompaña de arran-
un desplazamiento mínimo, justifican un tratamiento camiento de un pequeño fragmento óseo. Estas lesiones
ortopédico. imponen limitar la extensión durante 3 semanas con
Para las fracturas poco o nada desplazadas de la una férula IFP stop (Fig. 10) a 10° de flexión (con el fin
diáfisis o de la base de los metacarpianos, la inmovili- de facilitar la cicatrización del fibrocartílago glenoideo).
zación se consigue con una férula metacarpiana Esta ortesis permite la flexión del dedo, el cual se
(2-3 semanas) (Fig. 8), que únicamente se indica con sindactiliza al dedo vecino durante unos quince días.
Trastornos tróficos
La presencia de edema o de equimosis es un factor
que favorece la rigidez, las adherencias y los dolores por
hiperpresión tisular. El tratamiento precoz permite
reanudar la movilización al reducir las resistencias
internas y los dolores.
El edema se evalúa midiendo con una cinta métrica
el perímetro de la zona afectada (Fig. 18) y, si fuese
necesario, se compara con el lado opuesto.
Figura 17. Esguince grave con inestabilidad. Movilidad articular pasiva
La evaluación cuantitativa implica la medición con
■ Valoración diagnóstica un goniómetro (Fig. 19) o un inclinómetro (Fig. 20). Se
han descrito varias puntuaciones, pero las más usadas
kinesiterápica en la mano son:
• la de Merle D’Aubigné, puntuación angular en exten-
Las distintas valoraciones permiten tener una idea sión y en flexión, que en caso de déficit está prece-
precisa del estado de la mano, adaptar las técnicas a la dida por el signo negativo;
1 2
Figura 27. Ligamento retinacular. 1. Oblicuo; 2. transverso.
4
■ Técnicas de rehabilitación
3 Para la rehabilitación de la mano, las técnicas son
5
simples e idénticas a las de las demás regiones. Aunque
2 todas pueden utilizarse, la dificultad reside en sus
6 modalidades de aplicación.
1
7
Tratamiento de los dolores
8 0 El tratamiento kinesiterápico del dolor debe integrarse
9
a un doble contexto: el tratamiento global del paciente
frente al dolor (farmacológico, psicológico) y el de la
10 fisiopatología del dolor.
Dolores inflamatorios
Son producto de la reacción inflamatoria postraumá-
tica o postoperatoria.
El reposo relativo del segmento es el tratamiento
principal. Consiste en la aplicación de una ortesis a
medida de material termomoldeable o neopreno, que
debe respetar los principios del tratamiento y de la
fisiopatología.
El masaje, de objetivo analgésico, se efectúa con
Figura 31. Valoración de la oposición (según Kapandji).
maniobras envolventes, lentas y suaves, basadas en
presiones transversales alternadas, bombeos articulares y
deslizamientos centrípetos. Pueden añadirse algunos
productos: gel, bálsamo, crema con aceites esenciales.
La aplicación de parches antiinflamatorios o de
productos como la arcilla verde, antiflogístico, tintura
madre de árnica o aceites esenciales se recomienda
como tratamiento nocturno.
Fisioterapia: en traumatología osteoligamentosa de la
mano, la crioterapia está indicada por sus efectos:
• analgésicos, por medio del gate control system y la
reducción de la velocidad de conducción de las fibras
que transmiten la sensibilidad al dolor;
• vasomotores (vasoconstricción arterial y capilar
profunda). La temperatura cutánea debe ser inferior a
15 °C y el tiempo de aplicación, de 10-20 minutos.
La crioterapia gaseosa permite un descenso en frío
muy rápido [19] que produce un choque térmico con
vasodilatación reactiva profunda. Se produciría cierto
efecto inmediato sobre los fenómenos dolorosos y las
reacciones inflamatorias, aunque influye menos sobre la
hemostasia o la reducción del edema.
Sin embargo, algunos pacientes no toleran el frío y
reaccionan mejor al calor (bolsas de agua caliente,
Figura 32. Dinamómetro de tipo Jamar. parafango, baños de agua caliente) (deben evitarse los
primeros días tras una cirugía o traumatismo).
La electroterapia se efectúa con:
• corrientes de tipo Tens con una frecuencia de
50-100 Hz y una amplitud de impulsión inferior o
igual a 100 µseg de baja intensidad [20];
• microcorrientes biológicas por normalización de los
intercambios iónicos [21];
• corrientes de tipo endorfínico con una frecuencia de
2-6 Hz y una amplitud de impulsión de 0,2-2 mseg de
intensidad elevada [22, 23].
Dolores mecánicos
Son la consecuencia de estímulos nociceptivos produ-
cidos por tensiones capsuloligamentosas y tendinosas,
Figura 33. Pinza pulgar/índice lateral con el key-pinch. adherencias de los diversos planos de deslizamiento y
contracturas musculares. Producen una lesión articular
que a su vez mantiene u origina alteraciones propiocep-
El QUICK DASH es una forma más resumida. tivas de los elementos periarticulares y musculotendino-
La evaluación de 400 puntos [17] se compone de sos. Esto explica la necesidad de efectuar una alineación
cuatro pruebas, cada una de 100 puntos referidos a una articular (cf infra).
serie de acciones que permiten evaluar la fuerza, el El masaje consiste en presiones puntiformes axiales o
desplazamiento de objetos y las actividades bimanua- en vibraciones sobre los ligamentos (ligamentos laterales
les [18]. Aunque es largo (se tarda entre 30-45 minutos de las IFP, placa palmar de las MF) y en presiones
en realizarlo), sirve para evaluar la evolución funcional deslizadas o transversales sobre los interóseos en la
del tratamiento. palma de la mano.
Figura 36. Placa de silicona. Figura 38. Ortesis de neopreno para estabilización y
protección.
Figura 37. Ejemplo de movilización específica para recuperar Figura 39. Modelado del arco de los metacarpianos.
la extensión de una interfalángica proximal; la toma moviliza-
dora sobre la F2 ejerce una tracción axial e induce un desliza-
miento posterior. El empuje sobre la cara anterior de la F2 debe desarrollo de esta rigidez y la dificultad para remediarla
aplicarse cerca del centro articular. se explican por la debilidad relativa de los elementos
dorsales, sus adherencias, el bloqueo del fibrocartílago
glenoideo y la complejidad del juego articular (laterali-
dad, traslación, rotación).
Recuperación de la movilidad articular En caso de gran rigidez, la obtención del sector
Cualesquiera que sean el tipo de lesión y el trata- funcional de las diversas articulaciones es el objetivo
miento, las restricciones de la movilidad son producto fundamental: a saber, 20-60° para las articulaciones
de: metacarpofalángicas de los dedos largos y 30-70° para
• la perturbación del «juego articular»; las IFP [32].
• los trastornos bioquímicos (circulatorio, linfático,
neurológico) y tróficos, dos elementos que están Recuperación de la movilidad
estrechamente vinculados entre sí [31].
La recuperación de la movilidad puede resumirse en
tendinosa
dos grandes rasgos: recobrar el equilibrio y estabilizar. Cada sector recuperado de forma pasiva debe traba-
La recuperación del equilibrio o alineación (Fig. 37) jarse en paralelo de modo activo.
consiste en recobrar los movimientos «menores» del Una de las singularidades de la movilidad activa de la
juego pasivo de una articulación. La pérdida de estos mano reside en la amplitud del deslizamiento de las
movimientos (traslaciones anteroposteriores y laterales, estructuras tendinosas de los flexores y de los extenso-
bostezos laterales, rotación, decoaptación axial) genera res. El mantenimiento o el restablecimiento de los
bloqueos o tensiones con falta de armonía. Esta alinea- deslizamientos deben ser prioritarios.
ción se consigue con: El deslizamiento correcto sólo se consigue con el
• maniobras de deslizamiento de baja amplitud en los trabajo activo, pero hay que tener en cuenta la fisiología
distintos planos: desbloqueo; y actuar en cada segmento articular, como se ha visto
• un trabajo de modelado tisular por estiramiento de antes, sobre todos los componentes intrínsecos y extrín-
las diversas estructuras periarticulares retraídas. secos de los aparatos flexores y extensores. Además, la
La estabilización de la alineación articular se obtiene aplicación de una sindactilia facilita la recuperación de
con dos técnicas: los últimos grados de extensión mediante un trabajo
• el fortalecimiento muscular con trabajo activo o activo asistido, a menudo difícil de recuperar a raíz de
ejercicios de activación en los diversos recorridos que la debilidad del aparato extensor con relación al sistema
se dirigen a cada una de las estructuras estabilizadoras flexor.
articulares intrínsecas-extrínsecas o por electroestimu- La electroestimulación simultánea con la contracción
lación; activa, además de su papel en la recuperación pasiva,
• las contenciones flexibles o rígidas (tiras adhesivas) y ayuda a favorecer el deslizamiento y a volver a usar un
las ortesis digitales flexibles de neopreno (Fig. 38) sector recuperado de forma pasiva.
que, además, ofrecen una protección añadida. Las indicaciones más corrientes del trabajo electroac-
En lo que se refiere a los traumatismos de los meta- tivo son:
carpianos y de las MF, la remodelación del metacarpo • la búsqueda de la flexión activa, que tiene como
con maniobras de deslizamiento anteroposterior, de objeto los dedos deficitarios (Fig. 40). La eficacia se
separación o de decoaptación permite restituir el juego apoya en la precisión de la colocación de los electro-
carpometacarpiano (Fig. 39). dos en el antebrazo;
Respecto a los traumatismos de F1 y F2 y de la IFP, la • la recuperación de la extensión activa IFP, respetando
secuela principal es la rigidez en flexión de la IFP. El la preponderancia fisiológica de cada sistema, es decir,
por una parte la electroestimulación de los interóseos sesiones. El kinesiterapeuta, aun cuando no ha confec-
con posicionamiento en extensión MF (Fig. 41) y, por cionado él mismo la ortesis, debe ser capaz de verificar
otra parte, de los extensores largos con posiciona- la eficacia de la misma: posicionamiento, punto de
miento en flexión MF (Fig. 42); aplicación, dirección de la fuerza de tracción, comodi-
• la recuperación de la flexión activa analítica de las dad. La fuerza de tracción y las modalidades de uso
MF, con la electroestimulación de los interóseos. dependen del dolor, del aspecto cutáneo y de las indi-
caciones del cirujano. El principio es el de una tracción
Fuerza muscular suave durante un período suficientemente largo [29].
En la mano, la fuerza pura no es un elemento pre- Hay diversos tipos de ortesis de corrección que pue-
ponderante y no se debe buscar hasta que no se resta- den usarse en la mano:
blezcan las movilidades pasiva y activa, así como los • estáticas progresivas mediante un posicionamiento
deslizamientos tendinosos. Una mano «fuerte» con determinado y adaptado con regularidad (Fig. 43). Las
movilidad reducida no será funcional, pero una mano indicaciones de estas ortesis se reservan para los casos
móvil puede fortalecerse de forma espontánea al reanu- de intolerancias del sistema dinámico de tracción
darse las actividades y la rehabilitación. Sin embargo, en (dolor o intolerancia cutánea). La ortesis se vuelve a
el deportista de alto nivel o en ciertas actividades, una modelar cada cierto tiempo en función de las ganan-
limitación de movilidad podría no ser un impedimento cias articulares (o de la reducción de los trastornos
para el uso de la mano. tróficos);
• dinámicas, para ejercer una fuerza progresiva hacia un
sector (Fig. 44). Según nuestra experiencia, las ortesis
Ortesis dinámicas producen mejores resultados. Tanto si se
Las ortesis están ampliamente indicadas para las indican para recuperar una flexión o para una exten-
lesiones de la mano. Hay que distinguir las ortesis de sión, deben adaptarse perfectamente al tipo de limi-
reposo o de inmovilización, que se usan fuera de las tación de la movilidad:
sesiones, y las ortesis cuyo objetivo es recuperar una C ortesis dinámicas analíticas cuando la causa de la
movilidad en flexión y/o en extensión, las cuales limitación es articular o periarticular a nivel de la
prolongan la recuperación articular después de las lesión (Figs. 45 y 46);
Figura 46. Ortesis dinámica de flexión analítica interfalángica Figura 49. Avulsión del pulpejo digital.
proximal. El contrapeso anterior impide la flexión de F1. El anillo
prolongado por el elástico coloca la F2 en flexión.
Esguinces y luxaciones
metacarpofalángicas
La práctica de deportes con pelota (balonmano,
baloncesto, balonvolea) o con patines suele ser respon-
sable de estas lesiones [35].
Los esguinces benignos se tratan mediante sindactilia,
movilización activa inmediata y fisioterapia.
Sólo se someten a intervención quirúrgica las luxa- Figura 51. Ejemplo de fijador externo dinámico.
ciones irreducibles o inestables tras reducción.
Las luxaciones dorsales fácilmente reducibles se
movilizan de forma precoz con sindactilia y ortesis; la
Fracturas diafisarias de F1
extensión se limita a -20° durante 3 semanas. En caso de tratamiento ortopédico por inmovilización
Las luxaciones dorsales reducidas por método quirúr- de tipo Thomine, la rehabilitación reside en el mante-
gico se inmovilizan en posición «intrínseca plus» con nimiento del deslizamiento del sistema extensor y en la
muñeca libre durante 4 semanas. movilización activa de las IF, respetando el eje de
En un primer momento, el problema de la rehabilita- flexión/extensión bajo control de la sindactilia. El
ción es la prevención de la rigidez de las MF en exten- objetivo no varía en caso de tratamiento quirúrgico,
sión [30] y, más adelante, el de la recuperación de la salvo indicación contraria del cirujano o en caso de
movilidad de la placa palmar por modelado y presión, conflicto con el material de osteosíntesis. La dificultad
además de la flexión-extensión. Si se han reparado uno de la kinesiterapia reside en la recuperación de la
o ambos planos ligamentosos laterales, la rehabilitación extensión de la IFP.
también implica recuperar la estabilidad mediante el
trabajo sobre los interóseos.
Fracturas de la IFP
Muy a menudo, estas fracturas desplazadas incluyen
un componente de inestabilidad articular, la mayoría de
Fracturas diafisarias las veces dorsal, que termina produciendo rigidez y, a
de los metacarpianos de los dedos largo plazo, lesiones artrósicas.
largos La línea directriz supone armonizar el juego articular
y recuperar la extensión. En cuanto a la movilidad, lo
La rehabilitación específica puede resumirse en: esencial es recuperar el juego pasivo de lateralidad y
• remodelación de la concavidad anterior del arco de rotación, en lo posible con equilibrio, evitando las
los metacarpianos y de las articulaciones carpometa- maniobras muy intensas o prolongadas de presión
carpianas y metacarpofalángicas; articular y asociando con preferencia las maniobras de
• liberación de las adherencias (frecuentes) de uno o compresión. El mantenimiento de las movilidades de las
varios tendones extensores, que se manifiestan por un articulaciones supra y subyacentes contribuye para tal
déficit de extensión activa y de flexión global de uno fin mediante el deslizamiento de las estructuras liga-
o más dedos; mentosas y tendinosas. Con el propósito de lograr la
• y, por último, fortalecimiento del sistema muscular mejor función posible, el kinesiterapeuta debe tratar de
intrínseco. compensar el déficit de movilidad de la IFP con la MF y
la IFD.
En caso de tratamiento con un fijador externo
Fracturas de las metacarpofalángicas (Fig. 51), la rehabilitación empieza el 2.° día y el
objetivo es mantener el sector de movilidad permitido
El problema es la recuperación de la movilidad adap-
por el montaje (Fig. 52).
tativa de la articulación y de su estabilidad ante las
fuerzas que actúan sobre ella y los posibles efectos sobre
el juego articular de las interfalángicas. La basculación Esguinces y luxaciones IFP [36]
de la cabeza del metacarpiano suele tolerarse bien si no En las lesiones ligamentosas de las IFP es fundamental
se presentan problemas de rotación. La rehabilitación se tratar los trastornos tróficos mediante un vendaje con
dirige a compensar este defecto estructural, con una tiras adhesivas.
insistencia especial en los movimientos articulares de Las luxaciones más frecuentes son las dorsales (dorsa-
lateralidad y rotación para asegurar la convergencia de lización de F2 sobre F1), que asocian una ruptura casi
los dedos durante la flexión de las metacarpofalángicas. completa de la placa palmar y los ligamentos laterales.
En extensión, la relajación de los ligamentos laterales La movilización de la IFP debe hacerse de inmediato,
aumenta las posibilidades de lateralidad y permite coger bajo protección de una férula «IFP stop». La inmoviliza-
objetos voluminosos. La flexión mejora la congruencia ción se modifica hasta obtener 0° hacia la 3.a semana y
y el bloqueo por tensión ligamentosa con disminución reducir el riesgo de rigidez en flexión.
de los movimientos de lateralidad, así como la conver- Las luxaciones palmares son mucho más infrecuentes.
gencia de las falanges para coger objetos pequeños. Pueden asociarse a una lesión de la bandeleta media y
Rigidez
Figura 56. Reimplantaciones digitales: 3.° y 4.° dedos.
La rigidez [40] es la complicación principal de los
traumatismos de los dedos. Es el resultado de un pro-
ceso de fibrosis y retracción de las estructuras periarti-
El período entre el primer día y los 8-10 días siguien- culares por alteración del tejido conjuntivo [41]. Los
tes está marcado por el control de la vitalidad del factores que agravan esta complicación son [42]:
segmento reimplantado y el mantenimiento de la • la inmovilización;
troficidad. Una vez asegurada la vitalidad del segmento, • los edemas y hematomas;
se practican maniobras de drenaje y se enseña al • la inflamación derivada de las condiciones postrau-
paciente a realizarlas él mismo. Entre este momento y máticas.
las 6-8 semanas, los sectores de movilidad se solicitan de Hay que estar alerta a la prevención desde el princi-
forma progresiva en modo pasivo y activo, según los pio del tratamiento, con una conducta global que
segmentos que hayan sido autorizados por el cirujano y permita la más pronta movilización posible [43], con una
privilegiando el aparato flexor. Aquí encuentra su mejor inmovilización (si es necesaria) en posición intrínseca,
indicación la puesta en tensión de las estructuras por seguida de inmediato por el control de los trastornos
efecto de tenodesis. La dosificación de la tracción tróficos, del dolor que limita los movimientos y de las
impuesta a cada sistema tendinoso es difícil de evaluar reacciones inflamatorias.
y depende de la experiencia del terapeuta.
Es importante señalar que esta cirugía necesita un
acortamiento óseo, que a su vez genera un problema ■ Tratamientos secundarios
estético.
Artrólisis
Lesiones en la infancia
La aplicación debe ser inmediata, idealmente con dos
A veces la inmovilización puede hacerse con yesos a tres sesiones diarias a raíz de los grandes riesgos de
circulares (niño menor de 10 años) con el propósito de recidiva (Fig. 58). Los elementos fundamentales son:
limitar el riesgo de ablación de la inmovilización y • la compresión (tira adhesiva);
cualquier movilidad. Los problemas de rigidez son • la crioterapia;
globalmente menores en el niño y la recuperación es • las movilizaciones inmediatas, progresivas, pasivas y
más rápida. activas, completadas con artromotor (Fig. 59);
• la ortesis dinámica global o analítica en función de la
naturaleza de la rigidez;
■ Complicaciones • y, por último, la electroestimulación de tipo amiotró-
fica de la musculatura afectada.
El conocimiento de las diversas complicaciones y sus Si está asociada una tenólisis y en función del estado
signos de alarma permite adaptar las técnicas de rehabi- mecánico y vascular del tendón, la rehabilitación debe
litación y, en caso de necesidad, derivar el paciente al tratar de conservar las amplitudes que se obtuvieron con
cirujano. la intervención.
■ Bibliografía
[1] Tubiana R. Traité de chirurgie de la Main. Paris: Masson;
1980.
[2] Gavillot C, Isel M, Petry D. Rééducation précoce des
traumatismes de la main. In: Merle M, Dautel G, editors. La
main traumatique : l’urgence. Paris: Masson; 1992. p. 311-22.
[3] Chapin-Bouscarat B. Raideur articulaire post-traumatique :
diagnostic kinésithérapique et traitement. Kinésithér Scient
2000;405 (V–VII).
[4] Le Nen D, Hu W, Dubrana F, Prud’homme M, Genestet M,
Figura 59. Movilización con artromotor. Lefevre C. Fractures, entorses et luxations de la main et des
doigts. EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Appareil
locomoteur, 14-047-C-10, 2003 : 24p.
[5] Thomine JM. Fractures récentes des phalanges et des
métacarpiens et leur traitement. In: Tubiana R, editor. Traité
de chirurgie de la main. Paris: Masson; 1984. p. 609-40.
[6] Leclercq C. Entorses et luxations des ligaments latéraux des
doigts longs. In: Rodineau J, Saillant G, editors. Pathologie
traumatique du membre supérieur chez le sportif,
convergences et divergences. Paris: Masson; 1997. p. 326-31.
[7] Leclercq C. Entorses et luxations des doigts. In: Leclercq C,
editor. La main traumatique du sportif. Paris: Masson; 2001.
p. 80-93.
[8] Dubert T. Fractures récentes des articulations IPP. Chir Main
2005;24:1-6.
[9] Comtet JJ. Place du traitement non chirurgical des fractures
de la main. In: Cahier d’enseignement de la société française
de chirurgie de la main. Paris: Expansion Scientifique
Figura 60. Implante de Swanson.
Française; 1994. p. 51-65.
[10] Oberlin C. Manuel de chirurgie du membre supérieur. Paris:
Elsevier; 2000.
Artroplastias [11] Thomas D, Moutet F. Rééducation des entorses de la
métacarpo-phalangienne du pouce par traitement fonctionnel
Espaciador de tipo Swanson (Fig. 60) ou après traitement orthopédique et chirurgical. Kinésithér
Scient 2005;459:66-74.
La rehabilitación se apoya en el acompañamiento de [12] Stener B. Displacement of the ruptured ulnar collateral
la encapsulación del implante. ligament of the metacarpophalangeal joint of the thumb. A
Este fenómeno se dinamiza con la movilización clinical and anatomical study. J Bone Joint Surg Br 1962;44:
regular pasiva y activa. La rehabilitación comienza en la 869-79.
primera semana, en el sector de extensión (0°-30°). La [13] Kapandji IA. Cotation clinique de l’opposition du pouce. Ann
flexión ulterior se consigue conservando el sector de Chir Main 1986;5:67-73.
extensión activa. [14] Masmejean E, Chantelot C. Le traitement chirurgical de la
rhizarthrose du pouce : place de la prothèse
Otras artroplastias trapézométacarpienne. [mémoires de l’Académie Nationale
de Chirurgie], 2004. p. 18-23.
La conducta de la rehabilitación depende del tipo de
[15] Kleinert HE, Verdan C. Report of the Committee on Tendon
prótesis y de la vía de acceso. En consecuencia, se Injuries (International Federation of Societies for Surgery of
efectúa según las indicaciones del cirujano. the Hand). J Hand Surg [Am] 1983;8(5Pt2):794-8.
En todos los casos deben evitarse las presiones consi- [16] Dubert T, Voche P, Dumontier C, Dinh A. Le questionnaire de
derables, en especial los movimientos de fuerza y las DASH : adaptation française d’un outil d’évaluation
torsiones. international. Chir Main 2001;20:294-302.
Pueden esperarse buenos resultados sobre el dolor, [17] Gable C, Xenard J, Makiela E, Chau N. Évaluation
pero no tanto sobre la movilidad: promedio de -20° a fonctionnelle de la main : bilan 400 points et tests chiffrés.
+60° según distintas series [44]. Ann Readapt Med Phys 1997;40:95-101.
[18] Xenard J, Gavillot C. Rééducation de la main traumatique. In:
Held JP, Dizien O, editors. Traité de médecine physique et de
■ Conclusión réadaptation. Paris: Flammarion; 1998. p. 416-21.
[19] Quesnot A, Chanussot JC, Corbel I. La cryothérapie en
En las lesiones traumáticas de las cadenas digitales no rééducation: revue de la littérature. Kinésithér Scient 2001;
existe correlación entre la magnitud de las lesiones y la 416:21-9.
[20] Melzack R, Wall PD. Le défi de la douleur. Paris: Maloine; [32] Chantelot C, Wavreille G. Raideur complexe des doigts
1982. (MCP, IPP et IPD). In: Fontaine C, Liverneaux P,
[21] Van Papendorp D, Matitz C, Diffenaar N. An investigation Masmejean E, editors. Cours européen de chirurgie du
into effect of APS therapy on the plasma levels of beta membre supérieur et de la main. Montpellier: Sauramps
endorphin, substance P and leu encephalin in patients with Médical. 2008. p. 169-72.
chronic pain. Med J Nov 2001 (on line). [33] Nelson Clarck E. Preliminary investigation of neoprene tube
[22] Crepon F. Éectrophysiothérapie et rééducation fonctionnelle. finger extension splint. J Hand Ther 1997;10:213-21.
Paris: Frison-Roche; 2002. [34] Punsola-Izard V, Rouzaud JC, Thomas D, Garcia-Elias L. Le
[23] Crepon F. Intérêt de l’électrostimulation polyvalente en collage en tension dans les orthèses dynamiques en matériau
rééducation fonctionnelle. Kinésithér Scient 2003;437:59-60. néoprène. Chir Main 2001;20:231-5.
[24] Thaury M, Caucquil C, Ster F, Delprat J. In: Rééducation [35] Le Viet D. Pathologie de la main en pratique sportive.
sensitive, réadaptation de la main. Monographies du GEM J Traumatol Sport 1990;7:59-60.
n°26. Paris: Expansion Scientifique Française; 1999. [36] Terrade P. Rééducation de la main du sportif. In: Leclercq C,
p. 267-70. editor. La main traumatique du sportif. Paris: Masson; 2001.
[25] Watson HK, Dhillon H. Stiff joints. Oper Hand Surg 1993;2: p. 141-52.
549-62. [37] Rouzaud S, Guimberteau JC, Panconi B, Boileau R, Sentucq-
[26] Buch Jager N. La main enraidie : physiopathologie, anatomie, Rigal J, Bakhach J, et al. Prise en charge orthopédique des
bilan clinique des raideurs. In: Sassoon D, Romain M, editors. entorses et luxations des interphalangiennes proximales.
Réadaptation de la main : monographies de la société Kinésithér Scient 2005;459:75-80.
française de chirurgie de la main. Paris: Expansion [38] De Cheveigne C. Rappels anatomiques. Kinésithér Scient
Scientifique Française; 1999. p. 171-82. 1992;316:72-7.
[27] Thomas D, Moutet F. Rééducation des lésions articulaires et [39] Foucher G. Mobilisation précoce des traumatismes
des fractures au niveau de la main. In: Sassoon D, Romain M, complexes de la main. In: Sassoon D, Romain M, editors.
editors. Réadaptation de la main : monographies de la société Réadaptation de la main; monographies de la société
française de chirurgie de la main. Paris: Expansion française de chirurgie de la main. Paris: Expansion
Scientifique Française; 1999. p. 117-29. Scientifique Française; 1999. p. 151-6.
[28] Vaiilant M, Mette F, Viel E, Neiger H. Mesure de la [40] Chapin-Bouscarat B. Raideurs des inter-phalangiennes et
température cutanée pendant l’application d’une source de rééducation : analyse et traitement. Kinésithér Scient 2006;
froid avec enveloppe sèche. Cinésiologie 1984;23:457-64. 463:19-24.
[29] Brand PW. Mechanical factors in joint stiffness and tissue [41] Trudelle P. Plasticité des moyens d’union péri-articulaires :
growth. J Hand Ther 1995;8:91-6. incidences en kinésithérapie. Kinésithér Scient 2000;405 (II–
[30] Ovieve JM, Chapin-Bouscarat B. Raideurs post traumatiques IV).
des métacarpo-phalangiennes : rééducation. In: Fontaine C, [42] Alnot JY, Masmejeane H. Causes of post-traumatic
Liverneaux P, Masmejean E, editors. Cours européen de metacarpophalangeal joint stiffness. In: Copeland SA,
chirurgie du membre supérieur et de la main. Montpellier: Gschwend N, Landi A, Saffar P, editors. Joint stiffness of the
Sauramps Médical. 2008. p. 147-51. upper limb. London: Martin Dunitz; 1997. p. 231-5.
[31] Sohier R, Sohier J. Justification fondamentale de la [43] Thomas D. Prise en charge kinésithérapique des raideurs
ré-harmonisation biomécanique des lésions dites digitales. Kinésithér Scient 2000;405 (XX–XXIII).
ostéopathiques. Le concept de SOHIER. La Louvière [44] Congrès de la SFCM. Table ronde sur les prothèses inter-
(Belgique): édition Kiné-Sciences; 1972. phalangiennes proximales. La Main 1997;2:97-119.
Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo original: Terrade P., Ovieve J.-M., Chapin-Bouscarat B. Rééducation
des lésions ostéoligamentaires des chaînes digitales. EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Kinésithérapie-Médecine physique-Réadaptation,
26-220-D-10, 2010.
Disponible en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Vídeos / Aspectos Información Informaciones Autoevaluación Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias clínico