Los instintos, ensayo.

La ciencia ha demostrado que el proceso evolutivo de las especies e originó gracias al desarrollo de acciones
encaminadas a garantizar la supervivencia de estas; la supervivencia está representada en primer término, y
sobre todo, en garantizar la reproducción de la especie. Alrededor de la supervivencia y reproducción de las
especies, estas desarrollaron capacidades generalmente mediadas por estímulos hormonales, químicos,
medio ambientales y culturales que forjaron la capacidad para no solamente sobrevivir, si no también
progresar. Así por ejemplo, en las especies microbiológicas (algas, hongos, bacterias, etc), se encuentran un
fenómeno de biocenosis en el que mediante señales químicas se “alerta” sobre la presencia de un factor
adverso, esto podríamos llamarlo “socio-biología”, este comportamiento es común a todas las especies, y
especialmente, a la más desarrollada, la cual es el hombre. En el hombre estos comportamientos los
denominamos “instintos”, si bien algunos de ellos son innatos, es decir, no es necesario enseñarlos y
generalmente son comunes en todas las comunidades humanas.

Por ejemplo, el instinto sexual, de reproducción y placer (en el cual la “belleza física” juega un papel diferente
de acuerdo a la cultura de la comunidad humana).

La ansiedad ha jugado una gran papel como aspecto evolutivo, gracias a ella el hombre ha relacionado el
peligro y el miedo, permitiéndole protegerse de las posibles amenazas que interfieran en su supervivencia.

El entorno cultural también “genera instintos”, es decir, desde las sociedades primitivas, hasta nuestros días,
las religiones, por ejemplo, explicaron los fenómenos naturales, (tales como la enfermedad, la muerte, etc),
proporcionándole al hombre una ventaja evolutiva-competitiva; los sentimientos de tristeza le permitieron
superar crisis emocionales, mediante la conformación de vínculos afectivos.

Entre otros instintos está el de “la violencia”, entendida esta como el medio que utiliza la especie humana
para lograr lo que se desee o necesite, conservar o expandir sus posiciones.

Actualmente existe un debate ético, existencial y social acerca del reconocimiento de la violencia como un
instinto innato en el hombre, esta hipótesis ha servido para explicar: guerras, matanzas, genocidios, etc, todo
porque “el hombre es violento por naturaleza”, a este respecto nos hemos hecho los siguientes interrogante:

¿Por qué aunque hemos avanzados, nuestras instintos siguen siendo violentos?, ¿por qué nuestros instintos
no evolucionan con nosotros?, ¿llegaremos realmente a utilizar el instinto de forma justificada?, , ¿nuestra
violencia es anti evolutiva?, ¿la violencia es contraria al instinto de supervivencia?, ¿en la sociedad actual ( la
cual esta sobrepoblada) es realmente necesario instinto sexual?, ¿el instinto de la adquisividad está
arruinando la valoración humana?, ¿el instinto de los estados alterados de conciencia (adicción psicoactivos)
está afectando la capacidad crítica de la sociedad?,

En nuestra reflexión, como puede evidenciarse, nos quedan más preguntas que respuestas, que podrían
resumirse en la siguiente gran pregunta, ¿somos esclavos o amos de nuestro instintos?