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V i d a y c o s t u m b r e s de l o s
indígenas araucanos
en la segunda mitad
del siglo XIX
IMPRENTA U N I V E R S I T A R I A . E S T A D O 63
S A N T I A G O D E C H I L E - 1 3 3 «
¡ costumbres i: los indígenas araucanos
ei la segunda mitad del siglo U
por el
V i d a y c o s t u m b r e s de l o s i n d í g e n a s
a r a u c a n o s e n la s e g u n d a m i t a d
del siglo XIX
Í N D I C E :
y
- 4 -
PRÓLOGO
PREFACIO
(1) .. ¿
Téfachi kiñe fotém Se- Uno de los hijos, Segundo
gundo Coña wéne kasarafi Coña, se casó primero con
iglesia meu lsaíel Wenchu- Isabel Huenchuleu por la
leu; fei meu wéla wedwed- iglesia; después, loco como
kechi adentufi kuifike che estaba, siguió la costumbre
yem ñi moro-dé TJU, rjélémíi mora de los antepasados y
küla kake domo kure fem- se buscó otras tres mujeres
>;elu. Feichi Segundo meten más como esposas. Sólo este
motjelewei, kakelu laitin. Segundo vive todavía; los
otros dos han muerto.
7. Kiñe ñawe María Coña 7. Una de las hijas se lla-
pi)?ei, kakelu Carmelita. Fei maba María Coña, la otra
moíjelei Wapi meu; Domingo Carmelita. Esta vive en Hua-
Paulan piíjefui ñi féta yem, pi; estaba casada con Do-
ürfilu hai werjen wéla. Ká mingo Paillán, que murió
ahogado hace poco (2). Dos
hijas más están vivas; pero
(1) El relato que sigue, esta referido desde el punto de vista de 1927,
no de la niñez.
(2) En 1925,
— 20 —
(1) Se comprenderá que los diez niños forman dos partidos de lucha-
dores (kelluteen, iH'auen) y que cada una de las parejas (konwen. kaiñe-
wen) se compone de un luchador de una y otra banda.
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(1) Uti pez sin escamas; ial vez el mismo que lajosha.
(2) Un peí de unas 8 pulgadas, cabezón.
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*** ***
teu. Fei wéla koniñ kiñe pi- había llevado. Luego nos hi-
chi ruka meu, epu kawellu zo entrar en una casita chi-
witrakerkei téfá, coche pi- ca, tirada de dos caballos;
?;erkei. Fei meu ká amuiñ, coche se llama eso. Se puso
rumeifi rajji waria; af meu en camino con nosotros; pa-
puiñ téfachi convento meu samos por medio de la ciu-
pu Capuchino. Iñ konpuel dad; al fin llegamos al con-
tékul Tjeiyu kiñe ruka meu, vento de los Capuchinos. Allí
Antonio Wentruleu iñchiu. nos introdujeron a Antonio
Huentruleu y a mí en una
pieza.
***
2) 1. Küla antii meu mé- 1, Tres días después de
lepulu, fei werkül?¡eiyu kine nuestra llegada se nos man-
mete füchá ruka meu, San dó a un edificio muy grande,
Vicente de Paul pirjerkei que era el colegio de San Vi-
feichi colegio ruka. Puwél- cente de Paul. Nos conduje-
j¡elu iñchiu tékul r/epuiyu pon- ron al interior de aquella ca-
wi ruka ka anümkénojje- sa y nos hicieron sentarnos.
puiyu. Yu felel wiluñmapaei- Apenas aceptamos la invita-
yu meu al'ün pichike weche; ción, cuando nos rodeó como
téfá yeim kimkerkelu chill- una nube de jóvenes; eran
katun, kadme afmatueiyu los que allá recibían su ins-
meu tayu mapuche ijen meu. trucción, y nosotros dos' des-
pertábamos en ellos tan viva
admiración por ser indígenas
araucanos.
Fei meu wéla traf ilelrjeiyu Luego después cenamos
feichi kom pichike weche junto con todos esos jóvenes,
erm, deuma kam pun'maiyu, puesto que ya anochecía.
Rupan ilu erjn koni ñi chill- Acabada la cena ellos empe-
katun, fei meu iñchiu ká zaron a estudiar y nosotros
inafemiawiyu. Deu chillka- fuimos a hacer lo mismo. Si-
tulu koni ñi rezan etjn té- guió la recitación del rosario.
fachi rosario; femel wéla ké- Cuando había terminado,
trÜ7/kiawél>ieir;n ñi umaq- fueron formados y llevados
tuñmutual etjn. Fei meu iñ- así a sus dormitorios. Nos-
chiu ef rjeiyu kake uniaqtue- otros dos fuimos repartidos a
ruka meu. salas distintas.
2. Wümmalu iñchiñ fei dé- 2. Al rayar el día tocó una
ijulrjekei kiñe campana, ka campana y sin demora se le-
müchai meten witrai feichi vantaron todos los niños. Ca-
pu péñeñ. Kiñeke umaqtue- da dormitorio estaba bajo
ruka nierkei kiñe wírjka ñi las órdenes de un hombre al
rjénepeeteu erjn, subdirector cual llamaban Subdirector
pií^rkei. Fei meu witralu Este los puso en filas y los
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* **
* **
1) ÁRBOLES (37)
(*) Las plantas numeradas con 19-20, 26, 28, 3 0 4 0 , 45-46, 52-60 per-
tenecen a las coripéla'as- (N- del A-)
(1) Solanum tuberosum.—(x) Según el Diccionario Etimológico del
Dr. R. Lenz, pág. 560, se conocían en Chiloé unas 120 variedades.—(xx)
Tienen muchas estrangulaciones que les dan semejanza a mmarki.—
(xxx) El autor las ccmi6 una vez en Runguipulli; el sabor no es de-
masiado malo, pero aspecto y olor son horripilantes-
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tener deseo de), y p'éllp'éll (lit. manoseado) son remedios supersticiosos con
que las mapuchitas se aseguran del amor de la persona querida. Los mis-
mos efectos atribuyen al musgo wéñokinttie (lit. mirar por atrás), al ar-
busto leliuken (lit. verse mutuamente), a l a s hepáticas (Parnassio pa-
lustris y Marchantía polymorpha) paütauíe (lit. estar de espalda), al con-
vólvulo ñüumel'awen' (lit. medio para estrecharse) e indirectamente al
helécho wédawe (lit. medio para separar), que separa la persona querida
del rival.
(1) Lophosoria glauca o Alsophila pruinata.—(2) Lomaría chilensis.
—(3) Blechnum hastatum.—(4) Gleichenia pedalis y literalis.—(5)
Polystichum adiantiforme.—(6) P. aculeatum.—(7) Nephrodium rugu-
Iosum.—(8) Adiantum chilense.—(9) Folypodium trilobuni.—(x) Lit.
espantajo del lagarto, por la forma del rizoma de la planta.—(10 Equise-
tum bogotense y giganteum; la denominación kelül'awen' es tomada de la
espiga fructífera de la planta.
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8
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3—INSECTOS. (42)
(30 y 31) Fescaditos chicos; no sé sus nombres; tal vez Galaxias. (32)
Pez sin escamas, un pie de largo, con la cabeza muy grande. (33) Pez
de unas 8 pulgadas, cabezón. (34) Nemacichthys inermis. (35) Cilus
monttii. (36) Elegimus maclarinus. (37) «El roncador» forma chica
de (38) Paralichthys kingii. (39) Mugil liza. (40) Ophichthys ocella-
tus. (41) Concholepas peruviana. (42) Mesodestr.a macha. (43) Venus
dombeyi o thaca. (44 y 45) Serán también del género Venus. (46)
Tellina specialis. (47) Mytilus chilensis y magellanicus. (48-50) Otros chon-
tes délos géneros Mytilus y Unió. (51 y 52) No encontré su clasificación.
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CAPÍTULO V I . — V I D A SOCIAL.
(1) En araucano iil'men significa noble y rico, lo que eran los caciques.
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* **
*** * **
(1) Ceñidor de cuero con numerosos adornos de plata a que está unida
en el lado interior una especie de cartera. Los indígenas lo traen de la Ar¬
entina.
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CAPÍTULO V I I . — E L MAÍZ.
* * 1: * **
*** ***
(*) A pesar de que el árbol sólo fué importado por los conquistadores.
— 148 —
(1) Para el mismo fin usaban los indígenas chilenos también las bayas
del molle (Litraea molle).
2) 1. Deuma nüafulu e»>n 2) 1. Cuando ya tenían la
manshana, pülkuael, wéne intención de cosechar man-
deumakefui kiñe lasta ei?n; zanas para la fabricación de
luedalen kai'eta velafui kui- chicha, arreglaban previa-
fi. mente la rastra; carretas con
ruedas no se conocían en
aquel tiempo.
Katrüíjekei kiñe cha?j ma- Se cortaba un madero
mèli; küme kaftjekei. K á ahorquillado, que se labraba
deumal>¡ekei meli wechod bien; ambos ganchos se pro-
kiñepele chai;; wechun ma- veían con cuatro agujeros ca-
mèll meu deumaljjekei ka- da uno; en la p u n t a del ma-
trüntéku, ñi witraíjeam lasta dero (que servía de lanza)
lashu meu. hacían una muesca, en que
aplicaban el lazo con que
tirar la rastra.
Kom deulu tékuyel Tjeì me- Al terminar eso, se colocan
li pichike kè'mpun mamèll, cuatro palos cortos atrave-
elelyerjei wente wechod chaij sados sobre los ganchos, de
epunpèle; fei meu trarùnté- manera que pasan por enci-
kuye^ei feichi meli kakùlru- ma de los agujeros. Los ama-
pachi mamèll, foki meu tra- rran allí con voqui, el cual
rùntékiijjei. Feichi foki shi- pasa por los agujeros y aprie-
numrul cernei pu wechod, fei t a los cuatro palitos sólida-
meu fuyùmnakèmyeijei fei- mente contra los ganchos de
chi meli maméli epunpèle la rastra.
char/ lasta meu.
2 . Deu kùme trarùkénoel, 2. Luego entran cierto nú-
fei koni ni damiijen farilla mero de varillas que cubren
meu wente-Iasta, ni kawitu- la superficie de la rastra y
leal. Femel wente meu kà forman una especie de cama;
elelrjei kihe fùchà wilal, ne- encima se aplica un tejido, (*)
wen piijei. llamado red.
Fei meu tèkulel??ei lashu Listo todo, ajustan un la-
hi katrùntèku meu wechun zo a la muesca que se encuen-
lasta mèlelu. Fei trai'ur^ei tra en la punta de la rastra,
manshun, menimi ^ei lasta enyugan los bueyes y les
trarìin manshun meu. Kihe cuelgan la rastra al yugo. Un
wentru tesai; kom kakelu: hombre dirige los bueyes; to-
pu wentru, domo, keyìi pi- dos los demás: hombres, mu-
chike che, aniikonyei pu las- jeres y chiquillos, toman
ta. asiento en la rastra.
3. Feichi trarun manshun 3. La pareja de bueyes
wi»)èdkiawèli lasta aponche- arrastra el vehículo con su
(*) Todos los versos se repiten cuatro, cinco o más veces. Compárense
las descripciones de trillas en Lenz, Estudios Araucanos, págs. 115 y 421
y los cantos de trilla anotados por F. Sígisfredo en F. Félix; Lecturas Arau-
canas, págs. 398 y sig.
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(*) El capotillo: las glumas, paleas y lodículas; junto con 'os ejes 'de
espigas y espiguillas y partículas de la paia
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(*) Los guiones alcanzan ora desde el suelo hasta la parhilera en una
tira, ora desde el palo horizontal hasta la cumbre, o, en una tercera forma
de casas, desde el palo horizontal hasta la solera del sobrado y de allí
en otra tira hasta Ja parhilera.
(**) En la fotografía muescas laterales.
(***) Es esta la choza araucana del tipo antiguo; tiene forma cónica.
me füyümtekuyekefirju foki man con voqui estrechamen-
meu. Re fem7>echi femnie- te contra los guiones. Siguen
kei»ju kom wallpa ruka; de- con este trabajo alrededor de
wi wëla fente kënoiriu. toda la casa hasta que queda
enrejada completamente.
Fei meu füchá ikei rjn, ilo- Terminado el esqueleto sus
tukei?jn, kofketukei rjn, mu- constructores se sirven una
daitukeiijn kom feichi elma- copiosa comida con carne,
mëlluma. p a n y mudai.
c
h i anfcü ká afumkënoye »¡ei pezar los trabajos p r e p a r a t o -
feichi ilo ka kofkeijei. K á rios del rucan. Ese mismo
pepikawirjn pu domo ñi kë- día se cuece la c a r n e y se
chaiafiel ñi t a k u n er¡n, kom hace pan. Además se alistan
küme elkënoi ñi kümeke të- las mujeres, lavan su r o p a y
kutu e?jn. Feichi pu wentru dejan al punto sus p r e n d a s
koni ñi llaqrukan e i j n , p t m - festivas de vestir. L o s hom-
mai ñi meken er¡n. Fei meu bres emprenden e n t r e t a n t o
fentekënoi rçn ka ikei r¡n. Deu- los trabajos preparatorios de
ma wëdatualu e?jn: «Vvüle la techadura; la n o c h e los
mai afentuan rukan», pi fei- sorprende en plena actividad.
chi ñidol-rukan. Luego desisten y c o m e n . An-
tes de retirarse les d i c e el
dueño: «Mañana, p u e s , se
llevará a cabo el solemne ru-
can».
3. Fei meu wümman meu 3. La otra m a ñ a n a s e reú-
kom trautuirjn ina we ruka, nen todos en el sitio de la
koni ñi troijemrukan e^n. casa nueva y toma principio
la techadura.
Prayei wente ruka kiñe Unos cuatro h o m b r e s pro-
meli wentru, yeniefi ñi íoki vistos con voqui y u n a agu-
e^n komillweíen (*). Deu ja {*) grande suben al techo.
mélepulu traqelelt;eÍ7¡n kiñe Llegados allí, otros les pasan
fücha farilla, küme ñor ijelu. una varilla larga y b i e n de-
Ká ütrefpramelTjeiíjn abün recha. Además les t i r a n ha-
kQ7|ka-küna, Fei Houniei kiñe cia arriba buen n ú m e r o de
wentru ka cerimeli tefachi atados de paja. U n h o m b r e
minche farilla meu; trawel- los coge y los mete b i e n es-
kélei ñi kiñe wechun vionis trechados unos con o t r o s de-
eiju. Kimelñi abütuwn feichi bajo de su varilla, u n i d a de
jjérin küna,—kiñe nüfku tu- antemano en u n a d e sus
pei ñi T/ériíjen—, fei shiñum- puntas con un guión. C u a n -
rulijemei tefachi komillwe pu do calcula que la fila d e los
küna meu (**). atados yuxtapuestos h a y a lle-
gado al largo conveniente—
una brazada más o menos—
traspasa la paja con l a agu-
ja (**).
I
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i
- 181 —
(12) La parte desollada se levanta, así que tiran el pellejo por adelante
y abajo; sale dado vuelta.
(13) Del cuello y de las pat.iS delanteras.
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<1) He estudiado este asunto (XI. 3, 2-9) con hombres de árbol genea-
lógico más ramificado que el que tenía Pascual Cofia.
— 196 —
tividad wen, una relación mutua biterminal y equiterminal; sin este sufijo
cada uno de los dos términos homónimos de dicha relación.
2) La relación es aplicable a los grados correspordientes de la línea, tan-
to ascendiente como descendiente, sean rectas o laterales. V. gr.: tt'm'jfajwtn
es la relación biterminal y equiterminal que une a mi mujer en la línea as-
cendiente cor su suegra y en línea descendiente con su nuera; a las dos per-
sonas las Dama igualmente nanétj y, viceversa, es llamada así por ellas.
- 198 —
*
(1) Descansa en ta espaldi y se sujeta por medio del trenzado en la
frente.
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* *
(1) Las recetas para los colores finos y la variación de sus matices
están hoy día en conocimiento de pocas indígenas, las que guardan su se-
creto con toda precaución
— 221 —
* *
2) 1. Fei tefachi antü 1. En este día se reúnen
kä trautui feichi rjapituuma otra vez los coadjutores del
ilotualu. "Yer?eniepe ofisha robo para la comilona. El
ial ni pu kon'a", pi we kure- recién casado manda: «Bús-
?7elu. Yeijemei, malaltekuije- quense las ovejas a fin de
pai. Fei meu fei pi kai: " N ü l - que haya carne para mis mo-
muchi tiechi fücha karniru". cetones.* Se rodea el ganado
Fei nÜTjei ünemtuael. Tra- que se encierra en el corral.
fo rjepe chadi", pikei kai, a- Otra vez ordena el mismo:
pollr/epe, apolltuain mai". «Cojedme ese carnero gran-
de.» Lo benefician para que
provea de carne la fiesta.
«Moled sal; se hará apoll (1);
vamos a comer bofe rellena-
do.»
2. Petu kachi ofisha fei- 2 Mientras se mata el
chi -rjapiñ anumkenoijei ina carnero, la recién casada es-
kütral. Kiñe domo nütram- tá sentada a la orilla del fue-
kanieyeu, pilleltunierjei; fei go. Una mujer conversa con
pÍTiei: "Metewe lladkülaiai- ella. Para apaciguarla le ha-
mi; fill iñ domo ríen femrjechi bla en los términos siguien-
(1) Apall: El bofe, que llenan de la sangre del animal al degollarlo: la
sangre mezclada con sal se introduce a causa de ta inspiración por el con-
ducto de ta tráquea y los bronquios.
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tumbrarla la restituyen a su
casa.
Feichi r/apiñ pepi chumwe- Para la robada no hay es-
la¡, mélei ñi inaiael meten capatoria, tiene que seguir
ni féta. Kañpéle amufu- no más a su marido. Si se
le llour;elaiafui. «Chumr/elu fuera a otro lugar, no se la
akuimi fau? Eimi fetar/eimi aceptaría. El hombre adon-
ka mafüñmarjeimi, fei meu de hubiera llegado le diría:
llouíal-laiami; iñche fau 11o- «¿Cómo vienes tú por acá?
weliyu werinrjeafun ka malo- Estás casada y se ha pagado
rjeafun, femafeneu mi feta", por ti; por eso es imposible
pi feichi wentru cheu ñi pu- recibirte. Si yo te permitiera
mufum. estar aquí, me haría culpa-
ble ; tu marido armaría un
malón contra mí».
6. üñamT)ellefulc riime 6. Aunque hubiera teni-
petu ñi í¡apitujjenon, melei do un amante antes de ser
ñi ekua! ñi üñam, ñi fcta raptada, no hay remedio;
meten mélei ñi inaiañel. tiene que abandonar sus amo-
res y seguir a su marido.
Kiñeke domo rume mai- Una u otra mujer no quie-
kelai ñi nieateu feichi wentru re en absoluto vivir con el
ñi jjapituiaweleteu. Kiñe hombre que la ha robado.
ina reyeeyeu ñi chau ñi wé- Como su padre insiste en
lateu feichi wesha wentru entregarla a este hombre
meu», doi kümepei ñi l'arie- malvado, dice dentro de sí:
muwal, piuwi. Fei meu ki- «Sería mejor que me matase
ñeke mu péltrükenoukei llad- yo misma». Así se ahorcan
külu, welu kiñeke mu meten. unas veces por pena; pero
muy a lo lejos ocurre eso.
(16)
CAPÍTULO XIV.—CASAMIENTO FORMAL ENTRE INDÍGENAS
MÁS CIVILIZADOS
3) *** 3) * **
1. Tëfachi rjen'-pëfien elufi 1. La madre del joven nu-
dcr/u fii fêta; «felerkei dër/u» bil avisa a su marido; «en este
pi fi. «Feula chumkënoain, kâ estado se encuentra el asunto»,
7jillatupeafiin?» le dice. «¿Cómo seguiremos
ahora; tendremos que pedir
otra vez a la niña?»
«Më felelaiaï» pi r/en'-fo- «No, así no va a ser», dice
— 250 —
(IT)
5). 5) ***
(1) Sin este pago el padre de la novia no habla con et padre del
novio.
— 263 —
12. Fei meu nütramkai ?jerr- 12. Después el padre del jo-
fotém, fei pifi ijem-fiawe: «Fa- ven se dirige al padre de la
chi atitü mai konpan tami niña y, (entrando en el asunto
welvjifi meu, yerpan tani Ki- mismo), habla así: «Hoy he
lian, «féreneaneu téfachi ku- atravesado tu umbral acom-
reijen dérju meu» pikefifi. Fei pañado de mi cuñado, que me
meu mai deuma melepaiyu ayudaba en este asunto de ca-
tefä, feula fei piken; «Deuma samiento- Estamos, pues, aquí
mai rupalei kine llaq küyen y yo digo lo siguiente: «Ya
gemichi, werküfimakefeyu ka pasó alrededor de medio mes
fii ijillan, raijifielweyefuin. Fei que te había mandado mi cu-
meu mai konpakefui fii werken ñado, que me servía de me-
ni >jiHan e i j u eimi mi piuke diador. Entonces se presentó
meu. Nawe mai niei ni we- mí mensajero junto con mi
n'üi, eluaneu, pifalpakefun cuñado a tu presencia. Mi
werken meu. Inche mai amigo tiene una hija; me la da-
ilien fottèm, tremi mai fö/d, pui rá, te mandé decir por medio
iii kure-nen meu, pikefun. Fei del mensajero. Yo tengo un
meu mai wesha wènoparkei ni hijo adulto, casadero, decía mí
werken, kom mai eluputueneu mensaje. El mensajero volvió
dé7(u. Fei meu mai fei pin: con respuesta desfavorable;
Chumperkeafun, deu pirkeno- me enteró bien cómo había
lu feichi üllchai pin mai nie- ocurrido eso. Yo me dije en-
wn. Welu mai küdautunie- tonces: ¿Qué podría hacer, si
karkei döTju ni fotém. Fei meu esta niña no quiere? y me con-
mai kintulerkeeyeu fii fiuke formé. Pero mi hijo se empeñó
kifie domo ra?jinelwe »jealu. en llevar adelante el asunto.
Fei meu féreneijerkei. De>;un- Su madre le buscó una mujer
majjerkeimi mai mi nawe 11 um - que sirviera de mediadora. Con
kechi; rulijeparkei mi nawe ella tuvo éxito. Ella trató se-
nütram meu, maierkei. Kom cretamente con tu hija y la
adkènuwiim cheu ni yerjepaia- hizo cambiar de resolución;
el. Fei meu kimlu ni fotém consintió en el casamiento. Los
yemerkefi, akuleleneu pun' ni dos se pusieron de acuerdo en
ruka meu. todos los detalles respecto a
la huida de ella. Avisado mi
hijo, fué a buscarla; de noche
la trajo a mi casa.
13. Deu kimlu üiche fii ku- 13. Luego que yo tuve cono-
re»jen ni fotem, kimpe mai ki- cimiento de que mi hijo se ha-
meldtttu pin mai amulu wer- bía casado, dije: Hay que dar
ken eimi mi lorjko meu. Rupan aviso. Envié a un mensajero a
kimlu eimi ni melepun mi fia- tu presencia. El te notificó
we inche ni ruka meu, weno- que tu hija había llegado a mi
pai werken, fei eluputueneu casa y volvió; me informé de
kom deTju. Pegka pechi ni tu contestación. Pronto quie-
nawe kulliii erj«, pi tefachi rjen" ro ver a mi hija junto con el
— 2Ó5 —
6). * * * 6). * **
* ** * **
1. Kuifi tëfachi mapuche 1. Los mapuches antiguos
mëtewe üdekefui pu wirjka. aborrecían mucho a los extran-
«Chemyelafiiñ feichi pu wirj- jeros. Decían; «No tenemos
kañma che; ká mollfüñ tefá nosotros nada que ver con esa
yerjn», pikefubjn. Kmeke mu gente extraña; ellos son de
trüremkefuirjn malon-dërju të- otra raza». Algunas veces caci-
fachi llëkiilechi pu lonrjko pu ques colindantes con los huin-
wiijka meu. Fei meu traulu erjn cas armaron malones contra
kewatukefuirjn, inautukefuirjn. ellos; pelearon y sucumbieron.
Fei meu doi iidewirjkakefuirjn. Con eso creció más su odio
contra los extranjeros.
Femijechi ñi mëtewe üde- A causa de esta gran aver-
wirjkaken erjn trurërkei itro- sión contra los huincas se com-
kom mapu meu erjn ñi aukañ- plot aron en todas partes los
perjeal kom wirjka. Wëne wer- indígenas para levantarse con-
külparkei dërju pu pewenche tra ellos. El primer impulso
loijko Nekulmañ t;ulu-mapu lo dieron los caciques pehuen-
lojjko meu, Forowe melelu: ñi ches (argentinos) en un men-
trüram aukan téfachi ipilu- saje al cacique chileno Necul-
mapu meu chumijechi ñi trü- mán de Boroa, con el contení-
rémn pu pewenche lo^ko Ar- do de que prepararan la gue-
gentina meu. Ká werkülerkei rra en Chile, así como ellos,
péron-füu etjn, ñi tunten meu los caciques pehuenches, se
ñi nieal téfachi malon fill- alistaban en la Argentina. Ade-
pele. más enviaron un cordón con
nudos que indicaba cuándo
estallaría el malón general.
2. Akulu feichi werken pe- 2. Al llegar aquel mensaje-
wenche tuulu, fei welpai déiju: ro, oriundo de los indígenas
«WerkÜTjen», pipai, «werkiie- argentinos, avisó: «Me han
neu Chaiweke loijko, ka Na- mandado los caciques Chai-
mun'kura lorjko, ka Foyell hueque, Namuncura, Foyel
lorjko, ka Ajfkatrür lojjko «pe- y Ancatrir; me encargaron:
lelaen ñi pu -r¡u\u loijko», «Vas a ver a los nobles de Chi-
pieneu ñi pu Io?jko. Fei meu le». Ese es el motivo de mi lle-
küpan. «Melei mai pu wiijka, gada. Por orden de mi cacique
kom mai aukañpeafiiñ», pi os digo, a los caciques chile-
mai ñi lo?¡ko, pimeafimi feichi nos, lo siguiente: «Hay, pues,
7)ulu Ioíjko, phjen. «Iñchiñ mal los humeas; nosotros nos su-
iñ pewencheijen apémafiiñ té- blevaremos en contra de ellos;
fachi pu wiíjka», pikeiñ; «fe- los indígenas argentinos aca-
ye?jn ká femnieai ñi wbjka baremos con los extranjeros;
yeTjn, ká feniTjechi nielñpe ma- que ellos hagan otro tanto con
lon etjn; fei meu kiñewn nieaiñ los suyos, que los atacan tam-
aukan-dejju.—«Téfachi péron bién; de mancomún vamos a
yeaími», pi?;en kai, «kiime fe- guerrear contra ellos». Ade-
yentupe yerjn, üdefalmai wiij- más me encargaron: «Lleva
ka, pikeiñ», pbjen mai ta téfá», estos nudos, y que se adhieran
pípafi Nekulmañ lorjko feichi ellos decididamente, porque es
werken. abominable el huinca». Esa
orden me dieron», dijo el men-
sajero a Neculmán.
3. Fei meu feyentui Nekul- 3. Neculmán dio crédito al
man lloupael deiju. Müchai aviso recibido. Despachó sin
eli werken: «Trawain wüle, demora a un mensajero y le
akui fii dfejju pu pewenche lorj- encargó: «Propagas esta orden:
ko» pin miawelaimi; «wüle «Mañana habrá junta, llegó
meten trawaifi», pi fii trem, un mensajero de los caciques
pimeafimi fii pu lojjko fii ye- argentinos; mañana, pues, nos
nefiel.» juntaremos», dirás a mis caci-
ques subordinados».
Amui feichi werken, wel- El mensajero se fué y publi-
pui deiju, fillpele fei piiawi. có su encargo en todas direc-
ciones.
— 272 —
Fei meu wüii'man meu kom Al otro día, después que to-
traulu erjn nentui ñi dérju Ne- dos se habían reunido, Necul-
kulmañ pepaelu meu pewen- mán, a quien se había dirigido
che werken. «Wiya r/a wer- el mensajero argentino, infor-
kiiñmawiñ, «küpape, wüle tra- mó a sus caciques: «Ayer os
waiñ» pin rja amuleluwiñ wer- he enviado un mensajero, «ve-
ken meu», pifi ñi pu lorjko. nid, mañana hay junta», rezó
la orden que os hice comuni-
car».
4. «Femi mai», pi kiñe lorj- 4. Uno de los caciques con-
ko, «fei meu mai küpaiñ, «ki- testó: «Así es, por eso, pues,
mafiiñ chem derju ñi nielen», hemos venido; quisimos saber
pikeiñ mai», pi feichi lorjko. de qué se trata».
Fei meu fei pi ñidol-loijko El cacique principal Necul-
Nekulmañ: «Femrjei ñi akun mán continuó: «Es el caso que
kiñe werken, tuulu pewenche ha llegado un mensaje envia-
pu lorjko meu; llaq küme de- do por los caciques argentinos.
rju, llaq weshalei, fei mai Trae un asunto medio agrada-
kimaimn. Femrjei ñi pikerken ble, medio penoso, ya lo sa-
feichi pu lorjko; «Aukañpea- bréis. Eso dicen los caciques:
fiiñ kom tefachi pu wirjka, «Vamos a sublevarnos con-
yafülupe ñi pu tjulu lorjko, ká tra los extranjeros; anímense
feichi dcrju niepe yerjn. Kewa- nuestros caciques chilenos y
fiiñ mai tefachi pu wirjka, kom hagan otro tanto. Nosotros
waria m é l e l u kontuafiiñ, combatiremos esos huincas,
apernaran; ká fempe yerjn, invadiremos todas sus ciuda-
pirkeeiñ mai». Fei meu mai des y las borraremos; desea-
metrémuwiñ, «ñi chem piael mos que ellos hagan lo mismo».
eijn» piukeiñ; «ñi feyentual Yo os he llamado porque el
erjn kam ñi kümelai pial e7n», enviado quiere conocer vues-
pikei mai téfá. Kalli ñor dérju tra opinión; saber si aprobáis
yetuam tefachi werken», pifi el asunto o lo rechazáis, Pro-
ñ¡ pu lorjko. nunciaos para que pueda lle-
varse contestación clara este
mensajero».
5. Fei meu fei pi kifie lorjko: 5. Uno de los caciques con-
«Kümei mai». Fei meu «fe- testó: «Está bien». A esto
ie ai meten», komtripa fei pirjn. todos gritaron de una voz:
«Ha de ser como tú dices».
Fei meu fei pi Nekulman: Neculmán se dirigió al men-
«Tefei ni pie! ni pu lorjko, deu- sajero argentino diciéndole:
ma allküpaimi tefä», pitufi «He aquí la contestación de
feichi pewenche werken. mis caciques, ya la oíste».
«Femi mai, deu ailküpan Este contestó: «Así es; ya
mai feichi derju, welputuan he oído su palabra y la comu-
mai tarn" pu lorjko meu», pi nicaré a mis caciques cuando
werken. llegue allí».
- 273 —
tía)
— 274
(1) Viven todos desde Imperial hasta la costa a ambos lados del río
Cautín.
(2) Era el primero de Noviembre de 18S1,
cual Trintrai, mapuche téfá. ademas Blas Morales, Domin-
Feí puwerkeirjn Kolüwitika go Lagos, Domingo Alonso y
loirko meu. el indígena Pascual Trintray.
Se dirigían al cacique Coli-
huinca.
9. Kimérkeel ni puwn erjn, 9. Al saber de su llegada el
íei meu werkükei Marimañ, cacique Marimán, que lleva-
nielu ñi trawn. «Amupe pu ba a cabo su junta, mandó
kon'a, yetjemepe pu wirjka», unos mozos para que se los
pirkel. Fei meu pun* meu rjéf- trajeran. De noche, mientras
tuijefuir;n ümaqkelefulu Kol- dormían donde Colihuinca,
lüwirika meu. Kom yeijemeirjn, fueron acechados. Todos fue-
puwélrjeirjn rarji pu trawn ma- ron tomados presos y condu-
puche meu. Fei meu metewe cidos en medio de los mapu-
ayüuwi Marimañ: «Feulanüiñ ches reunidos. Marimán y los
pu toro, fachi antíi rjillatuaiñ» suyos se alegraban diciendo:
piíjn. «Ya hemos capturado los to-
ros (víctimas), hoy celebrare-
mos el nguillatún».
Fei meu trarürjeiTin feichi pu Según se cuenta fueron ata-
wijjka, moíjen nentupiuke- dos estos chilenos y vivos se
TjeiTjn, pirjeiíjn. Nentuñmael e?jn les sacaron los corazones. Con
ijillatuir/n, p¡7¡eÍ7Tíi, Tjélfüi ñi estos corazones hicieron sus
rerji erjn feichi pu wentru ñi rogativas los mapuches y un-
mollfüñ meu, pirjeirin. Fem- taron sus lanzas con la sangre
tiechi kapuiíjn tefachi pu wirjka de esos hombres. De tal ma-
katriimalonafulu. nera encontraron su muerte
los chilenos que intentaron
impedir el malón.
— 280 —
A. IDA.
B. E N BUENOS AIRES.
C. VUELTA.
A. IÑ AMUAL. A . LA IDA.
*** :(: * *
2). 2). * * *
(1) El awün (awn) o la «trilla» constituye la distinción más alta con que
los indígenas honran a personas o cosas. Consiste en rondas a caballo suelto
alrededor de las personas o del objeto que quieren honrar. Tiene lugar en
el nguillatun, entierro y ¡as recepciones solemnes.
(2) El guía que había mandado Ancatrir.
— 296 —
3). *** * **
feichi kofiñ kura. Fei matu tonces se sacan del fuego las
matu impolt¡ei ilolen, ka küme piedras caldeadas, las cuales
trarükenor/ei trélke. Fei meu se envuelven con toda prisa
charcharümekei feichi impol junto con la carne en el cuero.
kura ilolen. Chisporrotea la carne envuel-
ta con las piedras calientes.
5. Femkénoel impol kadilté- 5. Esta bolsa de carne se
kukenorjei kütral meu, küme coloca a orillas del fuego para
afüalu. Afülu kiñepéle ká wai- que cueza bien. Cocido en un
chéfrulr/epai kañpéle. Femvje- lado, se le da vuelta, haciéndo-
chi chiwédkiawélrjei ina kü- la girar rato tras rato a ori-
tral. Kom afülu ñi r/énerjen, llas del fuego, hasta que se no-
fei enturiei, nülariei. Feichi ta que está totalmente cocida.
kura wichu ütréfentu?;etui, fei- Entonces sacan la bolsa, la
chi ilo irjei. Korü ká al'ün abren, echan las piedras a un
7¡ei, fei tutei i^en meu. Chash- lado y se regalan con la carne.
kin plrjei choike ilo femrjechi También hay bastante jugo,
afülu. que sorben con gusto. La car-
ne de avestruz preparada así
se llama chasquín.
6. Rupan ilu feichi chashkin 6. Después de acabar con el
ká chillawiñ, amuiñ n'ampcl- chasquín, ensillamos y conti-
katual. Puiñ kiñe lelfün meu, nuamos nuestro viaje. Llega-
kimwelafiñ chem üi ñi pir/e- rnos a una estepa cuyo nom-
fel. Ká antü puiñ Launa-toro bre he olvidado. Al otro día
piriechi lelfün meu. Fei meu alcanzamos la pampa Launa-
afi iñ rokiñ. toro. Allí se agotaron nuestras
provisiones.
Nierkei kiñe lofo auka iñ Nuestro compañero argen-
pewenche kompañyeel. Fei tu- tino llevaba consigo una ye-
ñ ka witrantékupafi. Fei meu gua chucara. La laceaba y la
tui ñi kékai,—niei trélke-ka- traía de tiro. Luego tomó sus
well meu méñulkélechi kura. boleadoras—-, están provistas
Fei wüfüyelfi feichi kiñepéle de piedras aforradas con cue-
lo?¡ko-kékai, femfilu fei puwé- ro de caballo—, blandió uno
lelfi tol" auka meu: tranapui de sus ramales; ya en vuelo lo
auka. aplicó a la frente de la yegua
que cayó al suelo,
Müchai meten tékuleljjei ku- Sin demora se le hundió el
chillo ñi réku meu; tripai ñi cuchillo en el pecho, corría la
mollfüñ, l'ai feichi auka. L'alu sangre y el animal murió. Lue-
trélkenturjei. Rupan femel pü- go le quitamos el cuero, lo
démrjei ñi ilo ka kaijkatuyeTiei descuartizamos y asamos su
kütral meu. Fei meu iiñ ka fei carne en el fuego. Comimos y
meu moí/eleiñ. ^enofule feichi mediante su carne nos mantu-
auka rokiñuyel iloal, entria- vimos. A no haber esta yegua
fuiñ, pelaiafuiñ ial. para beneficiarla en el camino,
- 301 —
4).
(20)
— 306 —
* * *
2). * ** 2), • •*
C. IÑ KÜFATUAL C. LA VUELTA
* ** 1^ * **
3). ***
* ** * **
1. «MachÍ7jeke¡ pu machi, 1. Los machis dicen: «Los
eleneu wenumapu dios, kishu machis son creados como tales;
i7énewn machi-íjelan», pi pu el dios del cielo me ha ordena-
machi. do, no soy machi de propio
intento».
Chumé! antü iñche ñi lam- Cierto día se hizo machi una
ben machii. Fei meu kiñe ella hermana mía. A la entrada de
pun' karumei. Kintulíjei machi una noche cayó de repente co-
ñi üluaeteu; fei meu machitu- mo una muerta, Se le buscaba
una machi para que la curara
y ésta la sometió al tratamien-
to tradicional ( = la machitu-
có).
Kiñe ina lefanüpramei nen- De repente se incorporó, le
tuñmafi ñi kultruij feichi ka quitó el tambor a j a machi lla-
machi ka mëtrorçfi téfachi rali. mada y lo golpeó. Al mismo
Ká tui ñi ülkantun, fei pi ñi tiempo empezó a cantar en los
ül: «Iñche mai machian (1)». términos siguientes: «Seré
Téfachi antü meu pepafiñ té- pues machi». (1). Hoy vine
fachi pichi domo, ayüfiñ ñi a visitar a esa mujercita, quise
machilaíiel; machilafiñ kuifi hacerla machi; ya antes, cuan-
ñi ella pichi che tjelu ñi ayü- do era muy chica todavía, la
niekefiel. Fei meu feula pepa- he elegido para la profesión
fiñ tañi machilaíiel wëla; ñi porque me gustaba; hoy ven-
eluafiel fili hawen", fili r¡i- go a crearla machi y dotarla
Ilatun», pi ñi ülkantun ñi lam- con el conocimiento de los re-
ben. • medios y las oraciones».
Fei meu doi füchá ülkantui: Luego levantó más la voz
«Wekufü femeleu meu reke» y cantó: «No digáis respecto
pimulaiaiñ, iñche mai küme de mí: «es el demonio que in-
7jënechen, fei mai machilae- fluye sobre ella»; no, el buen
neu, tañi küme che íjeam; ta- creador de la gente lo es, que
ñi üluafiyüm mélele kutran- va a hacerme machi para que
lu. <Fei (2) meu elkefiñ ñi sea persona afamada y cure
titelu machbjeal ; fei meu feula los enfermos ( 2 ) . «La he elegi-
ratji küme dciju meu méleai do para que sea machi verda-
téfachi pichi domo. Iñche ñi dera; mediante legítima insta-
duam küme che Tjeai, kutran- lación quedará ahora (nom-
piukeyechefe 7¡eai, fei meu brada machi) esta niña. Por
fili mapu meu nieai tañi ma- autorización mía será persona
(1) Una niñita del campo que no tenía todavía diez años de edad.
(2) No saben explicar quién mandó decir eso y a quién.
— 333 —
2) * * * 2). * * *
(1) La palabra es obscura; será mari epu llanfca, las doce perlas (cántaros
bonitos); además la chicha de esos cántaros adornados, e! material para
los sacrificios de libación y los tragos rituales. Véase Cap. X I X y X X .
(2) Cada machí pretende estar acompañada, aconsejada e instruida en
cada función por un espíritu especial (maíhi'péllü), el cual reside en uno
de los emblemas enumerados (toro, colihue, bandera, etc.).
— 336 —
(1) En otras partes además le raspan la lengua y los dedos, soplan so-
bre ella y hacen otras manipulaciones más.
(2) L'n estado de suma excitación nerviosa.
— 337 —
(22)
— 338 —
3). * * *
1. Ká domo kutrani. Fei 1. Otra mujer se enfermó.
meu kintuir/ei machi ñi ma- Le buscaron una machi para
chitmjeal. Fei metrémeljjei ñi que le aplicara ios servicios
pfillü; «chem kutrankan niei?» profesionales. Esta invocaba
phjei. Fei meu trüntrünüumei en favor de la enferma su es-
téfachi kutranche. Feichi ma- píritu e inquirió de él de qué
chi inaleyeu fill ülkantun. enfermedad se trataba. En ese
momento empezó la enferma a
tiritar. La machi seguía asis-
tiéndole con sus cantos.
Fei meu kiñe ina lefanüru- De repente se sentó la mu-
mei feichi kutran domo, leí jer enferma, agarró el cultrun
niei mai ñi yall», piai. «Chem- mamá. «¡Tantos rezos que sa-
chi ñi adeteu? Wenumapu be mi hija!» dirá mi padre
chau ñi adeteu machhjei ñi «¿Quién la ha perfeccionado?
ñawe», piai. «Re falta kontë- Por instrucción del dios celes-
kulan ñi plata tañi machi-ña- tial es machi mi hija; no he
we meu ; weweltuaqeneu kulliñ gastado, pues, de balde por
plata, machitukutranle. Fen- mi hija machi; ella me ganará
tren kutrankawn machhjealu pago de animales, cuando ha-
ñi ñawe», piai ñi chau, «feula ga curaciones de enfermos.
küme machhjei, feula lie chi, Tantas privaciones me impuse
mañum. «Gracias mai», pian para que mi hija pudiera ha-
ñi pu lof ñi kellueteu 7jeikure- cerse machi; ahora lo es; per-
wen-kawiñ meu. fecta, acabada machi es ella;
estoy contento». Luego dará
sus gracias a su reducción, que
le ha asistido en la celebración
del ngueicurehuen.
8. «Fentenchi che trapëm- 8. «Tan numerosa concu-
niefiñ fachi antü nielu yeñ- rrencia he reunido hoy, el día
prarmjen. Wenumapu dios! de mi inauguración. ¡Dios del
eimi lelinieqen, el u?j ill atún en, cielo, tú fijaste tus ojos en
kishu ñi qènewn machifuli, mi, tú me enseñaste las ora-
feula kimlaiafun tëfachi >/illa- ciones, no soy machi de mi
tun. Feula fentenchi Tjillatun propio gusto y voluntad. Si lo
kimfiñ, füchake weupin nien fuera por mi propia cuenta,
ñi piuke meu, tañi küme raki- no sabría esas oraciones. Aho-
duam meu. ra sé muchas; largos sermones
tengo en mi corazón y en mi
fiel memoria.
«Triirnien tefachi mareu- «Tengo listos los jarritas de
pull, petefentulaqeyu tami tji- la bebida ritual, te rociaré en
llatuam, chau dios. Eimi mi señal de súplica, o padre dios.
elel fill ketran melei, fei meu A tu acción creadora debemos
deuma?jekei tefachi mudai, todos los productos del cam-
feula petu petefeleyu. Ká tami po; de esos se ha hecho esta
mollfün kulliñ elutuaqeyu. Ei- chicha que te estoy rociando.
mi mi elkeyel melei fill kulliñ; Lo mismo te devolveré la san-
iñchiñ kishu iñ Tjenewn nielaiñ gre de tus animales. Todas son
chem kulliñ no rume; dios ñi criaturas tuyas, nosotros por
elel itrofill weshakelu melei. propio poder no poseemos ni
Feula tefá tami molifüñ kulliñ uno de ellos; todo lo que existe
meu wsriltulaqeyu tañi küme es creado por dios; ahora con
rewe, fei tami akukeam elude- esta sangre de tu animal ungi-
ijupaiafiyüm fill tjillatun; peu- ré (en honor tuyo) mi lindo
ma meu kolomtuafimi fill rehue a fin de que te acerques
weshake dé"?ju; meleal kutran a él y enseñes ahí como se
küme chayaqtuafimi kom ñi debe rezar, que hagas conocer
— 346 —
* ** * .* *
1)-
1. Kiñe mapuche ruka meu 1. En una casa indígena hay
melei kutran che. Fei meu un enfermo. Luego se le busca
kintubjei machi. a la machi.
Feichi machi akulu anüñmai Esa viene, se sienta al lado
tefachi kutranlu. Wéne ijilta- del enfermo y entra en la
tui kiñe sigaro meu; petrem- oración, primero por medio de
tui, pimunentui fitruñ wenu- un cigarrillo; fuma, .sopla el
pele, fei pí: humo hacia arriba y dice:
«Chau dios, eimi elmuiñ(l); «Padre dios, tú nos (1) has
«machinepe», pien (1), fei meu instituido; «seas machi ( 1 ) » ,
machiíjen. «Mélele kutran ma- has ordenado respecto de mí,
chituafimi», pien, fei meu ma- por eso soy machi. Me man
chituken. Eimi mi yallkeel che daste: «Si hubiere enfermos,
mclei, «morjelafimi kutran», les harás curaciones», por eso
pien, fei meu mOTjelken. «Ku- machituco. La gente existe,
tranlu ñi lorjko, kutranlu ñi porque tú la engendraste»;
piuke, chem rume kutranlu \Á uno se enferma, lo sanarás,
elukefimi hawem», pien, fei me mandaste, por eso lo hago.
meu fawen'tuken. «Sean enfermos de la cabeza
o del estómago o dondequiera,
les aplicas remedios,» me di
ces y te obedezco.
2. «Feula tefachi kutran mo- 2. «Yo quiero que este en
tjepe, küme ?¡illatuñmaiafi- fermo sane; en toda forma va
yu (1), l'akilepe mai, chau mos a curarlo; que no muera,
dios. Amuntrafuya üluñmai- o padre dios. Pasada la noche
afiyu, pu kon'a (2). Feula petu lo machitucaremos, o coope
qülañpefiyu. Nieimi tami ne- radores (2). Por lo pronto re
wen mai, pu machi, tami ne- cemos por él. Vosotras machis
weñmaiafiyüm tefachi ku- poseéis bastante poder para
tran, wemünentulafimi weku- amparar enérgicamente a este
fü adkallefeleyeu. Welu т о enfermo: lanzad de él al de
нере, eimi mi duam, pu kon'a, monio que tanto lo ha vejado.
meleimi wenumapu, naqkin- Que sane por vuestra inter
tulepaimi». vención, o coadjutores, que es
táis en el cielo y tenéis puesta
vuestra mirada hacia abajo».
(23}
— 354 —
2). * * * 2 ***
fimi kutranlu», píen, fei meu tesa , me has mandado; por eso
küdauken. Trafuya meu nie- los curo. En la noche pasada
iyu füchá küdauüin-deiju r we- he realizado con mi espíritu
rálerkei ñi feien tefachi mapu. una investigación grande (1):
Welu yofiiafiyu tefachi weda- todo este lugar está infesta-
ke wekufü adkachefe, fei meu do ( 2 ) . Pero nosotras inco-
kümelewetuai tefachi kuñifal. modaremos a esos espíritus
malos, vejadores de la gente;
entonces se mejorará este des-
dichado enfermo.
«Fentenchi kutrankawi te- «Tanto que ha sufrido este
fachi kutran, adkaelu meu we- enfermo por perjudicarlo el de-
kufü; welu iñchiñ iñ fela т о monio; pero que sane por in-
нере. Trüremelafiiñ itrofill »je- tervención nuestra. Armare-
nen, fili newen melei, tralka mos toda clase de ardides con-
melei, retji melei, weño melei. tra el diablo; muchas armas
¡Ya!, piaimn, chillawaimn ka- hay aquí: escopetas, pértigas
well, maloaimn cheu ñi melen de colihue, palos de chueca;
weshake wekufü. gritad ¡ya! ensillad los caba-
llos, maloquead a los demonios
en su escondite ( 3 ) .
5. «Weukeeliñ meu?—Weu- 5. «¿Y si nos vence?—No;
penoel iñchiñ iñ machir/en, somos invencibles nosotras,
fili adkaiafiin. Itrofill kawen' las machis; daremos al traste
trüremelafiiñ tefachi kutran, con él. Prepararemos para el
féchoafiiñ kawen' meu, fei meu enfermo los más variados re-
kümelkaiafiiñ. Küme metre- medios, lo sahumaremos con
meltuafiiñ ni pSllü; cheu ñi ellos; así le procuraremos me-
miawn, küpatuai; renü meu joría. Llamaremos su alma (4)
melellefule tañi am, ditulme- y volverá, dondequiera que
tuafiiñ : newen meu, ref illkun- ande; aunque se hallara en la
kechi küdautuaftiñ, raijema- misma cueva de los brujos, la
fiiñ tichi weshake wekufü, e n c o n t r a r e m o s : irresistibles,
adkachefe mèlelu. Réf ma- airadamente vamos a traba-
loafimn kom newen meu. jar, acabaremos con los maldi-
tos demonios, los martirizado-
res de los hombres. Atacadlos
por todos los medios.
6. «Eimn kam nielaimn 6. «Y vosotras (5) ¿no tenéis
tamii newen kewapeyüm?— tal vez armas para pelear?—
Malofe machi ijeirnn ; kom in- Sois machis agresoras como
(1) Buscando el escondite del huecufe malhechor.
2) Por tener una legión de espíritus malos.
3) Todas tas órdenes de la machi se realizan inmediatamente por ios
asistentes.
(4) Alejada por los demonios,
(5) Alocución dirigida a las cooperadoras invisibles.
chin feleiñ, taiñ femkénoeteu todas de nuestra profesión.
tain chau, füchaijei; taiñ ñuke, Así nos ha formado nuestro
kushe??ei, méici wenumapu padre, el anciano; nuestra ma-
meu. dre, la anciana, que está en el
cielo (1).
«Fei mai elueneu fill küme- «Es él quien me dio instruc-
ke deiju, ni l'awen'tuafiel ku- ciones acertadas para e! tra-
tranchi che; «eimn mojjela- tamiento de los enfermos. «Vo-
fimn laiachi che», pieneu sotras sanaréis hasta a los mo-
chau dios, anülei wenumapu ribundos», me dijo el padre
meu tañi tutelu plata mesa dios, que está sentado en su
meu; taiñ elkeeteu, elchefe hermosa mesa de plata en el
rjei. cielo, nuestro progenitor, el
creador de los hombres.
«Fei ñi felá machitukefiñ «Por encargo de él machitu-
taiachi che, moijelchefe rjen co a los agonizantes; soy auxi-
chumr¡echi che rume kutranlu. liadora para todos los enfer-
Nor-deiju meu küdauken. Ki- mos sin aceptación de perso-
shu ñi venewn machiíjeli fem- nas. Mis curaciones son serias
mekelaiafun tañi machitún; y legítimas. Si fuera machi de
koil'atufe íjefuli kastigaiafe- propio intento, me sería im-
neu tañi yallkeeteu, fei meu posible ejecutar los machitu-
íiénentukelan. Koiía-déf¡u meu nes en la forma que acostum-
weukelafiñ plata; moíjeal meu bro. Si fuera intrusa en el ar-
niikefiñ kullitu, kaL te, me castigaría mi progeni-
kelan, kullii)ekel£ tor. Por engaño no quiero ga-
afun tañi machia ar dinero; por la salud res-
ablecida recibo pago; si mue¬
e el enfermo, no acepto que
e paguen; caería en despre-
cio mi prestigio de machi ( 2 ) .
7. «Kiñeke machi 7. «Hay machis que lo son
jjei; iñche femrjelan. Fei meu por fraude; pero yo no per-
fill wekufíí yeweqeneu; fei meu tenezco a ellas. Por eso todos
«küme machirke mai», pitean, los demonios me tienen temor;
déijuyeijelaian tañi machinen. por lo mismo se dirá siempre
que soy buena machi y nin-
guna se mofará de mi carác-
ter profesional,
«L/afule ñi kutran, «wesha «Si muriera mi enfermo, se
machi» pitjeafun. Fei piijekili, me llamaría machi mala. ¡Pro-
chau dios, naqkintuniepaqen. tégeme desde el cielo, prado
«Kümelkape ñi machifceelchi dios, para que no se diga ese
(1) Las indígenas dan al Ser Supremo diversos nombres, pero son y
eran siempre estrictos monoteístas,
(2) Pero en realidad devuelven muy pocas veces el pago recibido. Si
muere el paciente, dicen que habían mejorado al enfermo, pero que des-
pués otro huecufe originó el desenlace fatal.
— 362 —
3). 3. * * *
(1) Y los que trabajan entre ellos saben que esto es una triste realidad.
(24)
— 370 —
1). * **
2). ** * 2). ** *
3). * **
(í) Las diferentes clases de baile indígena se explican al fin del capítu-
lo 5) 7.
— 383 —
11. Petu ñi awün erjn fei nü- l t . Así siguen ellos con el
kefkélewetui ta che. Koni ñi avün. La otra gente se calla
rjillatun epu wentru, tuniei ñi porque dos hombres, provistos
pichike rewe erju. Kiñe wen- de ramos de maqui, comienzan
tru ñidoli wénelechi meta- ahora sus rogativas. Cada cual
we meu kiñepéle; karjelu ká da principio en el primer vaso
ñidoli, kañpcle mélechi wif de una de las dos hileras de
metawe meu. Wifontékuirju cántaros. Empapan en la chi-
ñi rou-rewe pu metawe pülku; cha de los cántaros sus ramos,
fei meu witranentutufi, fochi- los sacan y los levantan; chu-
düfi ñi rou, tofkünprami, mai- pan en ellos y escupen lo chu-
chinprami ñi kuq wenu adpé- pado hacia el cielo; extienden
Ie, wiftrérprami ( = pétefpra: sus manos hacia adelante y
mi) ñi pichi kél'on-rewe fo- arriba, hacen aspersiones con
c h o n k é l e l u p ü l k u meu- el ramo de maqui mojado en
«Ooom!» pi, «fau méleimi rjé- la chicha y empiezan a rezar
nemapun». Karjelu ká femi; diciendo: «¡Ooom! aquí estás,
üiaq fei pirju. «Fachi antü mai Dominador de la tierra». Am-
nentukeiñ rjillatun eimi mi bos proceden y hablan en for-
féla, férenemutuaiñ taiñ fill ma idéntica. «Hoy pues cele-
morjewe: melei ta ketran, ka bramos el nguillatún en obse-
kachilla, ka alfid, ka poñü; quio tuyo; favorécenos con
«petu mai rjillatuñmaneu ñi todos los alimentos; hay todas
pu kordero», piaimi. rjénai- clases de productos como tri-
go, arvejas y papas: nos las
conservarás y dirás de nos-
otros: «Todavía me hacen ro-
gativas mis corderos». Ten
— 385 —
tuñmutuaiñ, eimi kam yallye- piedad con nosotros, porque
mutulaiñn (1)». ta nos has engendrado» (1).
12. Feien amulehju wif me- 12. De esta manera pasan
tawe meu, tripapuirm af me- los rezadores por las hileras
tawe;fei meu «pui», pirju; «ya! de cántaro a cántaro, hasta
ooom! pimn», piriu feichi rji- que llegan al último. Entonces
llatukelu. Fei meu füchá pe- dicen: «Hemos llegado», e in-
rutuirjn, kom dérjui ñi ayeka- vitan a gritar ¡ya! y ¡ooom!
weerjn. Pichiñma wéla tÜTjnag- Luego se ejecuta el baile gran-
kélewetuinn. de al son de todos sus instru-
mentos. Dura poco rato y
vuelve la calma.
Fei meu ká kontui feichi Luego hacen los rezadores
epu wentru nillatualu; ká ñb la segunda corrida de sus ro-
doltui cheu ñi yechilirmm erju gativas ; vuelven a empezar
feichi wenen metawe. meu, ká con los primeros cántaros de
fei piletuiini; ká ñi wifontéku- las hileras lo mismo que en la
meketun ñi pichi rewe yerju primera tanda; también sus
pu metawe; ká re feien meu invocaciones son las mismas;
tripatuiíju. de igual modo empapan sus
ramos y recorren las hileras de
cántaros con las mismas cere-
monias hasta el último.
Tripapuulu erju ká <pui» Al salir de las hileras piden
pituiiju; «ya! ooom!» pimn», que se repita el grito «ya,
pituir;u. Fei meu ká fecha pé- ooom»; señal para que toda
rutui kom pu che, ribikükia- la concurrencia entre entu-
\vir¡n, külmedkiawbiu, aye- siasmada al baile. Lo ejecu-
ieiijn, ayükelebin ; pu domo \vi- tan dando brincos, meciendo
léfkétei ñi plata meu erm. Fei las cabezas, riéndose y mos-
wéla ká niikéfkélewetubin. trando su alegría de todos mo-
dos. Las mujeres lucen y ha-
cen sonar sus prendas de plata.
Al fin se calman todos.
13. Meli naq rupai ñi rjilla- 13. Cuatro veces repiten los
tun feichi epu wentru, re fem- dos hombres sus rogativas en
keir/u; aílu wéla ká péruir/n, igual forma; como acto final
fei fentekénoirm. sigue el baile.
Fei meu «tunke» pinei fei- Terminadas las danzas se
chi mareupull metawe pülku. da la orden : «Bebed la chicha
Tui pu metrem ka rjen'ke pu del mareupull». Invitados y
kawiñ, pütuir-n, welukon 11a- organizadores les echan la ma-
(1) Se ve una vez más en el contenido de la oración la íntima relación
entre el nguillatún y la agricultura. Se celebra regularmente en Noviem-
bre, mientras los productos están desarrollándose, y no es otra cosa que
acto religioso popular para pedir a Dios la conservación y prosperidad de
la agricultura.
qirjn. Af wéla feichi pichike no y beben brindándose unos
metawe pülku anükénoyene- a otros. Vacian los can ta ritos
tui cheu ñi mélemufum, kom de chicha y los reponen des-
femkénoyerjetui. «Ya! ká pi- pués todos al lugar donde es-
chi péruiñ», pirjn. Fei füchá taban antes. Sigue otro rato
pérutuirjn, «pui» pile wéla de baile grande hasta que el
rjen'pin, fei afi ñi pérun erjn. nguenpín ordena su termina-
ción.
«Feula anüpe ñi pu mé- En seguida los organizado-
trém», pi rjenke pu kawiñ; res invitan a sus metrem a que
yeyemei ñi pontro erjn keyü tomen asiento y les buscan
trélke; kom femirjn ñi anüam para ese fin mantas y pellejos.
ñi pu métrém eVn; füchatuwi Como cada uno contribuye
ñi aniin, furiñmai ñi pu domo con asientos, la fila de los (in-
erjn. vitados) sentados queda muy
larga; detrás de los hombres
se sientan las mujeres.
14. Fei meu ká fei pi rjen'- 14. Ahora manda el nguen-
pin pú vjen'ke kawiñ; «Praka- pín a los organizadores; «Mon-
welluumn, pu kon"a, kom pu tad los caballos, mocetones y
weche». jóvenes».
Femkeirjn ka amuirjn. Lorjko Obedecen y se van. El caci-
pu rjen'ke kawiñ ñidolrjei, fél- que de los organizadores anda
pui wechun meu cheu anülei a la cabeza; se acerca al pri-
pu métrém; chalili ñi pu mé- mer hombre de la fila de los
trém, inanieeyeu ñi pu kon'a. invitados para saludarlo; en
<Eimi ñañ, eimi chokém, ma¬ pos de él siguen sus moceto-
lle, koncho (1), kachü (1), nes. Como saludo usa expre-
trafkiñ (1), rjillañ, chédküi, siones como: «Tú forastero,
chale (2), pepe (3), fotrai», pi tú sobrino, tío, concho (1),
ñi chaliuwn erjn.—«Eh, ñañ, cachü (1), trafquín (1), cuña-
chokém, kake ká», pi ñi llou- do, suegro, pariente (2), pe-,
dérjun pu métrém. Ká pu do- pe (3), amigo etc. La contes-
mo rhatimefi «Mari mari ña- tación reza: «Eh forastero, so-
ñai, mari mari pal'u, papai», brino etc. También a las mu-
pikei; ká femrjechi ¡loudérjui jeres las saludan diciendo:
ñi chaliuwn pu métrém domo. «Buenos días, hermana, tía,
mamacita», y las mujeres de
los metrem contestan en la
forma correspondiente.
15. Rupan chaliulti erjn, 15. Después del saludo recí-
rjen'ke kawiñ kom' ñi rewe meu proco, los organizadores se di-
cheu makodkélei ñi weshakelu rigen hacia el rehue, en donde
ei?n, afün ilo Ica pülku keyü están amontonadas sus provi-
kofke. «Küpape ilo kofkelen \ siones, como carne cocida,
pifi ni pu domo jterrke kawiñ. chicha y pan. «Venga carne
con pan», mandan a sus muje-
res.
Fei meu matukawi pu do- Ellas se apuran, abren sus
mo, nülayei kutama ilo enti, sacos, redes o canastos que
kaijelu ñeweñ ilo, külko ilo ; contienen la carne y llenan
apolrjei ni chaiwe, ìjeumel ye- canastitos; a veces la llevan
mei ñi ilo fücliake rali meu ka en platos grandes y hasta la
petu kimpolrjeyei pichike ekull reparten en atados hechos de
meu. Fei traqelyefi ñi pu féta unos trapos. Esos enseres los
wente kawell meu méleyelu. entregan a sus maridos mon-
*Téfei», pi. tados a caballo. «Toma», les
dicen.
«Pülku kai», pi wentru «También chicha», pide el
«apope epu metawe, llaqme- marido; «llénense dos cánta-
àfiyu iñ pu métrém». ros, a fin de que podamos brin-
dar a nuestros invitados».
16. Fei meu amuitju kure- 16. Los cónyuges se van;
wen, wentru wénelei wente adelante va el hombre a ca-
kawellu, yeniei ñi chaiwe ma- ballo con el canasto lleno de
Uun ilo, keyü kofke; domo carne cocida y el pan; la mu-
inalei n'amuntu, yeniei ñi jer le sigue de a pie, lleva los
epu metawe pülku kachüf/e- dos cántaros de chicha; van
lemael pu metrém. para distribuir los alimentos a
los invitados.
Puulu erjn puñma meu cheu Llegados al sitio donde está
anidei métrém, fei tranana- sentado el invitado, el hombre
kémelfi feichi füchá katrün te echa abajo una gruesa presa
ilo, «tutrurp pi, naqi wente de carne, que retumba al caer
pulii. «Fei téfei elufir/e kiñe al suelo. A su mujer le ordena:
metawe pülku rp, pifi ñi kure. «Dale a ése un cántaro de chi-
Wéli ti domo. cha». Ella lo hace.
Kanelu afkadikélechi mé- Al metrem que está senta-
trém ká elufi feichi kachiirje- do al lado del primero le da
lém füchá katrün ilo, ká fem- otro gran tajo de la carne de
nakémelfi pulii meu. Domo distribución; se lo echa como
pewütulei; deuma eluel ilo ká al primero. La mujer ya está
wéli ñi metawe kachiiijelém en espera; en cuanto ha reci-,
pülku. bido la carne le da la chicha
de distribución,
17. Re femijechi amulei fei- 17. De esta manera pasa el
chi wentru winéllkélechi hombre a lo largo de la fila
anün pu métrém meu. Welli- de los invitados sentados.
lu ñi metawe pülku feichi pü- Cuando uno de los metrem ha
tuuma métrém, fei meu feichi vaciado su cántaro, la mujer
388 • -
4). (NOTA). * **
5). ** * 5) * **
1) * **
2) * * * 2) ***
3) * ** 3) ** *
1. Kuifi tefachi ka ahüñ- 1. Antes los difuntos queda-
makei, fente pelleafiel kam daban mucho tiempo sin en-
awe eljjekelai; melekai epu terrar. Para verlos hasta el fin
küyen, küla küyen, kiñeke mu no se los sepultaba pronto; los
doi aküñmakei. Fei meu füna- conservaban dos, tres meses,
kei, n'ümükei; kiñeke mu pepi a veces más todavía. Entraban
konr-ewekelai ruka, fente ñi en descomposición y despedían
-
n ümün meu; welu ñi fem- un olor que hizo imposible a
riechi adT/erkefel füchake ma- veces la en trada a la casa; pero
puche yem. ¿qué hacer? así era costumbre
entre los antiguos araucanos.
Téfachi l'a re feleprakefui, El cadáver quedaba sin
ijekelafui ñi chume!r/en. Fei ké, atenciones especiales, no se
kiñeke mu l'at/émjjetui kiñe ocupaban mucho de él. Eso sí
ofisha, fei kar/kalr/ekefui pichi- que mataban una oveja de vez
ke iro; afülu felen kamkawe en cuando, asaban su carne y
meu elelkenomekeT/etukefui colocaban por medio del asa-
wente wampo. Ká dewi kofke, dor algunos pedazos por enci-
ka mürke, ka mudai, fei elel- ma de la canoa. Además ha-
rjekefui; welu nielafui ayekañ- cían pan, harina tostada y mu-
marjen. day y lo pusieron al muerto;
pero velorios no celebraban en
su honor.
2. Petu rii femr/en feichi l'a, 2. Mientras que el cadáver
fei elkei werken feichi r-em- quedaba en tal estado desig-
ruka. Fei pi: «Deuma feula naba el dueño de la casa a un
l'ayeluwin tefd, melei ni ki- mensajero y dijo: «Ya que se
melTjeal r/en'ke pu moijeyeel; nos ha muerto éste, estamos
ka melei tefachi r>en"ke pu jji- en el deber de avisar a sus pa-
llafi, fei melei kimael e?m. rientes y emparentados. Yo
Inche deuma elfin werken, tengo listo ya a un mensajero,
(26)
— 402 -
-
welu al ü-r/ei?jn; «eimi ká kiñe pero son tantos los parientes.
elaimi», pi?jei kiñe wentru kä- . Manda tú también a uno», pi-
me karukatut/elu. de a un buen vecino.
«Femi kä, elan ma kai», Aquel contesta: «Cómo no;
pikei. haré ir a uno».
3. Fei meu elurjei dér¡u fei- 3. Luego se da a los mensa-
chi pu werken: «Pepuafimi jeros este recado: «Vete a ver
feichi wentru,—pij¡ekei 7¡en'- a fulano—se da el nombre de
mojjeyeel ka r/en'-rjillañ.— aquel pariente o cuñado—y le
«Femi ñi werkürjen», pipuafi- dices que vas mandado, que
mi, «pelelen mai ñi wemüi», tu patrón te ha encargado ver
pikeeneu mai tañí werküeteu, a su amigo para decirle: «Ya
pipuafimi. «Deuma mai rupa- hace algún tiempo que nos he-
lei kiñe mufü antii, melefui yu mos visto; ojalá no hayas te-
peukelen, welu mai chem dérju nido ninguna desgracia hasta
mi nienofel tefachi antii mens, este día».
pikei ñi werküeteu, pipuafimi.
«Rupan fei pipufilmi, fei «Después de estas palabras
meu ká fei piafimi: «Femi ñi añadirás lo siguiente: «Soy,
werkürjen, felefui r/a ñi kutra- pues, enviado para hacerte sa-
neluukelen na, deuma ká kü- ber por orden del que me ha
yen rjetui. Fei meu na amukei mandado: Tenía a un enfer-
rja ñi wesha inautun, fenten mo; más de un mes seguía así;
mu mai rjémamuukan rja téfá, pero en estos últimos días fué
fei mai kimpe ñi wen'üi, pikei de mal en peor; ahora, pues,
mai ñi werküeteu», pipuafimi. se me murió». Cuando hayas
Rupan fei pifilmi, mélepei mi cumplido con el encargo, él te
piaeteu.» dará la contestación».
Amui feichi werken, puulu El mensajero se pone en ca-
elupufi tefachi der/u ñi werkü- mino y llegado da el recado
rjemum. que se le encargó.
4. Fei kimlu feichi rjem-rji- 4. Cuando el cuñado acaba
llañ ñi elujjepunchi derju fei de enterarse del aviso recibido,
pi ñi lloudérjun: «Feyérke mai, contesta: «¡Ah, lástima! murió,
T¡enakei r/a ñi r/illañ; fei meu pues, mi cuñado. Al fin ¿qué
kam chumrjeafui, fill che meu podemos hacer? Casos de due-
mai mélei ijénamuwn, tun te lo suceden en todo el mundo;
kam lladküyer/ele kayeluulu, por más que se apesadumbre
nielai mai ñi chumjjeal; kiñe- el deudo, ya no puede reme-
karkei meten mai pülli taiñ, diarlo; queda únicamente el
inakintupiyüm. Femrjellelai- enviarle a la tumba abierta la
ai kam pule ñí medin antü mirada de despedida. Lo mis-
ñi elelrjen. «Deuma kimnie- mo sucederá con éste: llegado
fiñ taiñ Tjénamuwn», pikei, el día prefijado habrán que
piputuafimi mi trem», pi fei- sepultarlo. A tu vuelta di a tu
chi rjem-nillañ. patrón que ya estoy en cono-
cimiento de la pérdida que he-
mos sufrido».
— 403 —
>
— 408 —
(1) Los ashnel son, pues, una especie de guardia de honor para el finado.
— 409
5) *** 5) ***
1. A l ü antükaiu fei akui 1. Al avanzar el día acude
fentenchi che, ká mapu tuulu. una infinidad de gente prove-
Feyer¡n r/éluupakeir/n pichi niente de comarcas más leja-
akülu melechi ka meu. Aku- nas; a alguna distancia del
kepai külake mari, r/eumel ke- cadáver se paran. Llegan en
chuke mari; femrjen r/eluuke- grupos de a treinta, a veces a
pei epu pataka ka doi. cincuenta, y (esperándose unos
grupos a otros), se suman has-
ta doscientos y más.
Fente r/el-lu tekupakei wer- Cuando están reunidos en
ken er/n. «Pelelmeen feichi tal número, despachan a un
rjen'-l'a», pirjei ti werken, mensajero al que encargan:
«deu rjeiuupain mai tefä», «Vete donde el dueño del fi-
piafimi, «awüaift mai», pi fii nado, dile en nombre de tu
trem, piafimi». patrón,.que ya estamos juntos
y que deseamos «trillar» al di-
funto».
Feichi werken weli ni der/u El mensajero cumple con el
ni elur/en. encargo que ha recibido.
Deu kimlu rjen'-ka: «Kiimei Cuando el dueño del muer-
mai», pi, «küpape meten», to se ha enterado, contesta:
pi. «Está bien; que se acerquen».
2. Fei meu fei pi ni pu ash- 2. Al mismo tiempo dice el
rjell feichi, rjen'-l'a: «Äwümn, dueño del muerto a los guar-
konpaialu fücha awün tefa. dias de honor: «Empezad a
Petu awülu feichi pu ashrjell trillar, iniciad la trilla grande
kä eluwi feichi füchä trokifi que habrá lugar». Mientras
che, konpai ni awüat er/n. que éstos cumplen ta orden, se
alista aquella multitud de
— 411 —
Primera versión
CUENTO A. CUENTO A
*** lj * * *
chi epu reina; kiñe rarji antü esperanzas. Las dos reinas die-
péñeñi wentru peñen, ká reina ron a luz en un mismo día;
naqn antü péñeñi domo pe- una a medio día un hijo hom-
ñen. bre, la otra a la tarde una hi-
ja mujer.
Fei meu feichi kurewen rey, Entonces el rey casado, cu-
wéne péñeñi ñi kure fei pi ñi ya esposa tuvo hijo primero,
domo: «Deuma mai péñeñimi, dijo a su señora: «Ya que tie-
chumaiyu feula? Eyeu mélei nes hijo, ¿qué haremos? Allá
feichi kurewen rey, fei ñi we- hay un rey casado, que es
n ü i iñche; fei eluafiyu tayu amigo mío. A él le daremos
yall yu üielelaeteu, fei meu nuestro hijo a fin de que le dé
compadrewen r/eaiyu», pi nombre; así seremos compa-
feichi kurewen rey. dres los dos.
Fei-meu werküi kiñe koma. En seguida despachó un
«Amuaimi mai», pifi; «wiya mensajero al cual encargó:
mai péñeñi ñi kure ñi rey», «Anda y avisa allí: ayer tuvo
pipuafimi, «rarii antü péñeñi», hijo la señora de mi rey, a me-
pipuafimi, «fei meu ayüfiñ ñi dio día sanó de él; por eso
eluafiel ñi yall ñi kakutuafiel, quiero darle mi hijo para que
tayu compadrewen rjeam», pi- le ponga su nombre y seamos
puafimi». compadres».
Fei meu amui feichi werken. El mensajero se fué con es-
ta noticia.
2. Fei meu karjelu rey ká pé- 2. La señora del otro rey
ñeñérkei ñi kure. Péñeñlu naqn también tuvo criatura, como
antü ká fei pifi ñi kure fei- ya se ha dicho. Después que
chi rey: «Deu péñeñimi, feula había dado a luz en la tarde
eluafiñ ñi wemnüi rey téfachi dijo ese rey a su señora: «Ya
pichi domo che, üielaqeneu que tienes hija, voy a dar esta
tayu compadrewen rjeal». pequeña niña a mi amigo real
para que le ponga nombre y
seamos compadres los dos».
Fei meu fei pifi ñi kiñe ko- Entonces mandó a uno de
n"a: «Wiya mai péñeñi ñi sus mozos con el encargo:
kure, feula eluafiñ, üielelaneu Digas allá: ayer dio a luz mi
ñi yall, tayu compadrerjeam», esposa; ahora quiero dar la ni-
pipuafimi», pifi ñi kon'a. ña a él para que la bautice y
seamos compadres.»
Fei meu küpai ñi kon'a. El mozo se puso en camino
por acá.
3. Arjka répü trawi feichi 3 . A medio camino se en-
epu werken. «Mar-i mari», pi- contraron los dos mensajeros y
wirju. «Cheu amuaimi?» pi se saludaron con buenos días.
kiñelu. Uno preguntó: «¿A dónde vas?
«Feichi rey meu amualu iñ- «Me voy donde el rey de allá»,
che, pi karjelu, «wiya péñeñi contesto el otro, «ayer dio a
(27)
41S P. E. DE MOESBACH
katun er¡u; fei meu ditule mari cuanto alcancen a los quince
kechu tripantu, fei nentutua- años, los retiramos y se casa-
fiyu colegio meu; fei niewainu» rán.»
Fei meu üielnei feichi epu Luego bautizaron a las dos
pichike che, küme tremkei huahuas; se criaron bien y a la
wéla; nieyelu kechu tripantu edad de cinco años pusieron a
tekurjei colegio meu eiju. Fei los chiquillos al colegio, don-
meu füchá kimi chillkatun. de se dedicaron con gran apli-
Ditulu mari kechu tripantu cación y buen resultado al es-
entunetui colegio meu; fei tudio. Llegados a los quince
niewiyu. Nieulu eiju fei meu años, volvieron del colegio y
yetui ñi kure ñi chau meu fei- se casaron. Después del casa-
chi wentru. miento el joven marido se lle-
vó a su esposa a la casa de su
padre.
3^ * ** 3) ** *
1. Fei meu feichi ijen-pe- 1. La reina madre de la jo-
ñen reina lladküi. «Mena w e - ven se entristeció mucho.
sha!» pi, «kíñe nien na ñi pe- «¡Qué mala suerte!» dijo; «te-
ñen, feula fëtarjei, kîshukë- nía una sola hija; ahora se ha
nueneu; doí nielan kake pe- casado y me ha dejado sola;
ñen rume», pi. Fei meu llad- ningún niño más me queda».
külu l'ai. Murió a causa de su pena,
Fei meu l'alu, fei küpatui Entonces regresó la casada,
tichi kurewen. Kishulewelu ñi volvió al lado de su padre so-
chau fei pepatueyeu ñi ñawe, litario junto con su esposo.
triir küpai ti kurewen.
Fei meu ká reina ká llad- Pero ahora se agravió la
kiíi, küpalu ñi wentru-péneñ. otra reina, cuyo hijo se había
Fei meu lladkülu ká l'ai. alejado. Por su tristeza, murió
también.
2. Fei meu feichi wentru ká 2. Entonces el hombre vol-
küpatui. «Feula l'ai ñi ñuke vió otra vez. Dijo: «Ahora se
ká fei iñche», pi, «peputuan me ha muerto mi madre a mí
ni chau», pi. Ká amutui feichi también; voy a ir a ver a mi
kurewen. padre». Se cambió junto con
su esposa.
Kishulewei wëla ti rfey, Con eso quedó solo el rey,
rjen'-ñawe. Ká lladküi. «Feula padre de la joven casada. En
kishulen», pi, «chuman?» pi; su pesar dijo: «Estoy solo
lladküi. Fei meu ká l'ai. ahora: ¿qué voy a hacer?» Se
entristeció y luego murió.
Fei meu feichi kurewen do- Entonces dijo la hija casa-
mo fei pi: «Feula ká l'ai ñi da: «Mi papá ha fallecido tam-
chau e m ; amutuan», pi, «pe- bién ahora; me voy; me resti-
VIDA Y COSTUMBRES DE [,0S ARAUCANOS 421
5) ** * 5) ** *
f, j ** * ** *
1. Feichi wentru nen-kure 1. El esposo no se despertó,
nepe!ai;kiñe antü ka kiñe pun" durmió un día y una noche
umaqtui. Ká antü wéla trepei entera. Al día siguiente hacia
rani antü. Fei nepelu «Méná medio día despertó al fin. «¡Ay
wesha dérju, amui ñi kure», pi. de mí!» dijo, «se me ha ido
Fei witrapramei, «yeñmarjen mi mujer». Se levantó di-
ñi kure mai», pi, «amuan ina ciéndose: «Me han llevado a
lafken», pi, «mélei ñi peael mi esposa; seguiré en la playa;
meten ñi kure», pi. Fei meu tengo que encontrar no más a
amui. mi mujer». Luego se fué.
Kiñe pichi waria meu puwi, Llegó a una pequeña ciudad;
konpui kiñe lancha meu, lan- se acercó a una lancha y se
chero nepui; kiñe küyen kü- ajustó de lanchero; durante
daupui. un mes trabajó ahí.
2. Fei tripatui, ká amui kiñe 2. Después dejó esa ocupa-
füchá waria meu. Puulu fei ción y se fué a un puerto gran-
meu, kiñe füchá nafiu tripapai de. Llegó precisamente cuan-
hafken' meu, rünkü tripapai do echó anclas un gran buque
kiñe soldao. Fei meu feichi del cual salía a saltos un sol-
wentru fei pifi tichi soldao: dado. Dirigiéndose a ese sol-
«Iñche kintuken küdau», pi, dado le dijo: «Yo ando en bus-
«mélepeafui küdau feichi na- ca de trabajo; ¿habrá por ca-
fiu meu?» sualidad trabajo en aquel bu-
que»?
Fei meu fei pieyeu tichi sol- El soldado le preguntó:
dao:« Kimimi kam chillkatun ?» «¿Sabes tú leer y escribir?»
Fei pifi: «Eimi mi ñidol Le contestó: «Para que tu
kimle küme, iñche deumalafiñ comandante tenga prueba ca-
chillka wele-kuq meu». bal, le haré una carta con la
mano izquierda.»
Fei amui, elufi deiju ñi ñi- El soldado se fué y dio
dol: «Fau miawi kiñe kon"a, aviso a su comandante: «Aquí
kintualu küdau». anda un mozo que está bus-
cando empleo».
3. Fei meu tripapai feichi 3. El capitán salió a tierra y
capitán. Fei «chem kintukei- le preguntó: «¿Qué es lo que
mi?» pifi. buscas?»
«Iñche kintuken küdau, Recibió la contestación:
nielmi küdau, eluaqen», pirjei «Busco trabajo; si acaso tie-
tichi ñidol. nes, dámelo».
«Kimimi küme chillkatun?» «¿Sabes escribir correcta-
mente?»
«Eimi küme ki melmi, iñche «Para que te convenzas bien
wele-kuq meu deumalaqeyu te escribiré una bonita carta
con mi mano izquierda.
426 P. E. D E MOESBACH
Fei meu deumai lune chillka Luego hizo una carta con
wele-kuq meu. Feichi capitán su izquierda. El capitán el
miawël-lu feichi wentru ñi mismo que llevaba en su com-
kure, elufi ñi kure tëfachi pa- pañía a la mujer de aquel
pel. «^ëneinTje tëfâ», pieyeu. hombre, entregó el papel a su
Fei fjënei ti domo; dërmlai; mujer y le dijo: «Revisa eso».
kimniefi ñi chillka ni fêta yem. Ella lo revisó; no contestó na-
da; había reconocido la letra
de su esposo anterior.
IJ^ * * * * **
1. Fei meu koni nafiu meu 1. Entonces entró el hombre
tichi wentru; epu mari antu al buque; veinte días viajaba
miawi l'afken' meu. Ditulu epu en el mar. Al cabo de estos
mari an tii tripairm kîne waria veinte días, arribaron en un
meu. Feichi fiidol tripai, ke- puerto y el comandante bajó
chanentui ni pu soldao; feichi a tierra con una tropa de ma-
wentru mëlei nafiu meu. rineros; nuestro hombre quedó
en el buque.
Pichin wëla kâ tripai ti do- Poco rato después salió
rao. Fei meu peeyeu ni fêta también la mujer y así la vio
yem. «Ahâ, feula fau mëlei- el marido antiguo. Le dijo a
mi», pifi fii kure yem. ella: «Ah! aquí estás ahora».
Feichi domo lef kontui iiî La mujer corrió apresurada-
nafiu meu, nurëftëkukënuwi, mente al interior del buque y
llùkafi ni fêta yem. se encerró allí; tenía miedo de
su marido burlado.
Fei meu feichi wentru kâ Después el hombre se fué
tripai waria meu kine soldao también a la ciudad acompa-
emu, piïtualu, —inan nidol ñado de un soldado, para
konpufui. echarse un trago, había avan-
zado al puesto de segundo ofi-
cial.
2. Fei meu akutui tichi ca- 2. Entre tanto volvió el
pitân ni nafiu meu. Ni kure capitán a su buque. Su com-
fei pieyeu: «Feula inche ni pañera lo recibió con voz de
fëtarke rja ti mëlei nafiu meu; alarma: «Ahora está en el bu-
tayi pefin.» que nadie menos que mi legí-
timo esposo; hace poco lo he
visto».
Fei meu lladkiii tichi ñidol, El comandante se turbó;
«mena wesha!» pi; «chumafiñ «¡maldito! dijo, ¿qué voy a
tëfachi wentru?» pi; kiñe ina hacer con ese hombre? De re-
weneufalafiñ mi oro tikerás pente voy a acriminarlo del
meu». hurto de tus tijeras de oro».
Fei meu tëkukënulmefi fei- Luego fué y metió las tijeras
VIDA Y COSTUMBRES D E [.OS ARAUCANOS 427
*** 9^ ** *
1. Fei raeu amuîrtn ; aneka 1. Entonces se pusieron en
meu yefirjn tichi l a , ká yer- camino; metieron el cadáver
puinn kiñe kakón ñi eli¡eam. en un saco de fanega; llevaron
también un cajón (ataúd) pa-
ra sepultarlo en él.
Fei meu pui?m eltuwe meu. Llegados al cementerio los
«Yemerje piilku», pinei feichi dos soldados ayudantes fueron
epu soldao kellupeeî. Fei amui enviados a buscar un trago. Se
kine kulpero meu yemealu dirigieron a un cantinero (pul-
pùlku, pero) para proveerse de licor.
Amulu er/u feichi soldao nie- Cuando se habían ido los
lu tëfachï ûfiëm nentufi aneka dos, el soldado que tenía el
meu feichi l'a. Chumjjechi ni bicho tiró el cadáver del saco
chumlemufum fii trawa kâ fem- y colocó sus partes así como el
Tjechi eltufî. Fei meu kiime cuerpo estaba antes. Para ese
paillakënofi, kom tëkulelfi fii fin lo puso cuidadosamente de
1
lipaij, ka ni n'amun , ka m" espaldas y ajustó las manos,
loijko. los pies y la cabeza.
Fei meu fei pi: «Eimi pichi Luego dijo: «Tú, pajarito,
ùiiëm, chemchi mi eleteu mia- quienquiera que te haya orde-
wel fau meu, tëfachi kunifal nado andar por este mundo,
chumnechi ni moiielepeyum kâ haz revivir a este desgraciado
femijechi moijetupe», pi feichf así como ha vivido antes».
soldao. Fei meu rulelpafi kine Dicho eso signó el cadáver con
cruz ni toi meu, ka ni wën' una cruz en la frente, otra
meu, ka ni piuke meu. sobre la boca y la tercera so-
bre el corazón.
Afkiiduami feichi l'a, mo- El muerto suspiró profunda-
Tjetui. mente y volvió a la vida.
«Feula moi/etun», pi, «ha- «Ya volví a vivir», dijo,
Tjëmfeneu na ni nidol, feula «aunque me ha matado el co-
wecheijetun», pifi feichi sol- mandante; ahora tengo más
dao. juventud y vigor».
2. Fei meu akutui feichi epu 2. En ese momento volvie-
soldao yemekelu piilku. Feichi ron los dos soldados, enviados
wentru lauma witralei feichi a buscar chicha. El hombre
soldao e»ju; feichi epu kimlai resucitado estaba parado con
ni monetufel. Fei pieyeu erju el soldado. Los dos no sabían
feichi soldao: «Tëfachi kùme que el muerto había vuelto a
wentru pepaeneu, fei kellu- la vida. El soldado les dijo:
paeneu». Fei feyentui feichi «Este buen hombre me encon-
epu soldao. tró casualmente y me ayudó».
Ellos lo creyeron.
Feichi wentru l'auma deuma El hombre vuelto de los
niinietui kom ni plata ka fii muertos ya había tomado po-
430 P. E. DE MOESBACH
10) * ** 10) ** *
I) * * * 1) ** *
Segunda versión
1) *** * **
4) ** * 4) ***
1. Fei meu ká panküll mia- 1. Pero por desgracia andu-
wi n'ometu; pewi feichi epu vo rondando por el otro lado
panküll, dénuwi. «Tefa • meu un segundo león; los dos se
küpaleneu kiñe nerü, pi kiñe vieron y se pusieron a conver-
R
440 P. E. DE MOESHACa
1. Fei meu mélei kiñe trawn, . 1. Había por allá una junta
werá che kudekei. Fei meu con mucha gente que organi-
koripui nérü feichi rani che; zaba carreras. La zorra se in-
fei pipui: «Chumkeimn fau?» trodujo entre la gente y pre-
guntó: «¿Qué estáis haciendo
aquí?»
442 F, E . D E MOE5BACH
(l) En 1893.
{2} A) sur de Malahue.
VIDA Y COSTUMBRES DE LOS ARAUCANOS 449
(29)
450 P. E. D B MOESJÌACH
Af-déiju. EPÍLOGO.
•biblioteca I
* SECCIÓN CC
INDICE
Págs.
CAPÍTULO I
RECUERDOS D E LA INFANCIA
CAPÍTULO II
CAPÍTULO III
CAPÍTULO IV
CAPÍTULO V
B.-—Botánica.
1. Arboles.—2. Arbustos y enredaderas.—3. Fanerógamas monoco-
tiledóneas.—4. Fanerógamas conpétalas.—5. Fanerógamas ga-
mopétalas.—6. Criptógamas.
C.—Zoología.
1. Los mamíferos,—2. Las aves.—3. Los insectos.— 4. Los demás
seres animales 74
CAPÍTULO VI
VIDA SOCIAL
CAPÍTULO VII
EL MAÍZ
CAPÍTULO VIII
LAS MANZANAS
CAPÍTULO IX
Págs.
CAPÍTULO X
LA RUCA ARAUCANA
1. El armazón de la casa.—2. Techadura de la casa.—3. La co-
milona que da el dueño de la casa nueva.— 4. Interior de la
casa indígena habitada 1<>9
CAPÍTULO XI
VIDA DOMESTICA
1. Vida del narrador en aquel tiempo,— 2, La mujer indígena.—3.
Saludos y retos.— 4. Vestuario y adornos 183
CAPÍTULO XII
CAPÍTULO XIII
CASAMIENTO TRADICIONAL ANTIGUO
1. Rapto de la mujer.—2. Comilona al día siguiente.—3. Modo de
acostumbrar a la recién casada 231
CAPÍTULO XIV
CAPÍTULO XV
CAPÍTULO XVI
Pigs.
CAPÍTULO XVII
LA MACHI. VOCACIÓN E INAUGURACIÓN
1. La pretendida vocación de la machi.— 2, La ordenación.—3.
Otro ejemplo de vocación.—4. Investidura de la segunda as-
pirante.— 5. Oficia de la machi 330
CAPÍTULO XVIII
EL MACHITÚN. CURACIONES HECHAS POR LAS MACHIS
1. Tratamiento preparatorio de la tarde.—2. La curación definiti-
va del segundo día.— 3. El arte negro entre los indígenas.. 330
CAPÍTULO XIX
CAPÍTULO XXI
CUENTOS ARAUCANOS
A.—El bicho vivificador 416
B.—La zorra astuta 434
CAPÍTULO XXII
LA SEGUNDA MITAD DE LA VIDA DEL NARRADOR
(1884-1927)
1. Pascual en Calfulemu.— 2. Desgracias y reveses.—• 3. Conce-
sión «El Budi».—4. Últimos años de Pascual-—5. Conclusión 444
ÍNDICE 460